220-23630 Asunto: Disolución voluntaria. Proceso Liquidatorio. Me refiero a su comunicación remitida a esta Entidad por conducto de la Superintendencia de Industria y Comercio (radicación 423.623-0), con el fin de que nos pronunciemos sobre unas inquietudes que formula usted relacionadas con una sociedad de responsabilidad limitada y de la cual forma parte. Sobre el particular, es pertinente realizar las siguientes consideraciones: 1.- La Junta de Socios, como máximo órgano de la sociedad, reunida conforme las normas legales y estatutarias, puede tomar las decisiones que considere pertinentes teniendo en cuenta las mayorías establecidas para tal efecto, entre las cuales está la de disolver anticipadamente la compañía de acuerdo con lo dispuesto en el numeral 6 del artículo 218 del Código de Comercio. 2.- Adoptada la decisión mencionada, esta se sujetará a lo establecido por la Legislación Mercantil para las reformas estatutarias y la misma tendrá efectos entre los asociados desde que se adopte, salvo que la Junta de Socios en reunión posterior reverse la decisión inicial, caso en el cual la disolución anticipada quedara sin vigencia alguna. 3.- Una vez la determinación que nos ocupa, contenida en el acta de junta de socios, es elevada a escritura pública e inscrita en el registro mercantil de la Cámara de Comercio correspondiente, producen plenos efectos no solo frente a los asociados sino frente a terceros y en consecuencia, la sociedad queda disuelta y en estado de liquidación (artículo 158 del Código de Comercio). 4.- Ahora bien, disuelta la sociedad conforme lo establecido en los estatutos y las normas legales, debe iniciarse de manera inmediata el proceso liquidatorio siguiendo los pasos contemplado en los artículos 222 y siguientes del estatuto mercantil (artículo 17 de los estatutos sociales). 5. - En lo que guarda relación con la representación legal, debe tenerse en cuenta que la persona que ha sido designada como tal, esta facultada para vincular a la sociedad con los terceros en general y podrá "celebrar y ejecutar todos los actos y contratos comprendidos dentro del objeto social o que se relacionen directamente con la existencia y el funcionamiento de la sociedad" (artículos 196 y numeral 5 del 358 ibídem). A su vez, la persona que ha sido designada como suplente del representante legal, tiene como único fin el de reemplazar al principal en sus ausencias temporales o definitivas. Sobre la suplencia, la Superintendencia ha expresado que "a menos que estatutariamente o por un reconocimiento de la junta de socios emitido con base en las disposiciones contractuales, se hayan otorgado al suplente como tales facultades especiales para representar a la sociedad, el mismo deberá abstenerse de celebrar cualquier acto en el que se pretenda involucrar a la compañía, ya que él carece de capacidad para ello… ".(Doctrinas y Conceptos Jurídicos 1995- Superintendencia de Sociedades, pagina 376). 6.- En este orden de ideas y siendo consecuentes con lo expuesto, se tiene en el caso de la sociedad objeto de su consulta, que la junta de socios adoptó la decisión de disolver anticipadamente la compañía, la cual, según informa usted, no ha sido solemnizada y por lo tanto, si bien tiene efectos entre los socios, no está disuelta frente a terceros. De ahí que si la decisión adoptada inicialmente no se revoca se deberá elevarse a escritura pública e inscribirse el citado instrumento en el registro mercantil, e inmediatamente iniciarse el proceso liquidatorio, ajustado a las normas legales citadas. Dentro de los primeros pasos a realizar por la persona que sea designada como liquidadora, es la elaboración del inventario del patrimonio social, independientemente del monto del mismo, en el cual se incluirá además de una relación de los activos sociales, todas las obligaciones de la compañía, especificando de manera clara la prelación u orden legal de pago (artículo 234 del Código de Comercio). Valga anotar que mientras el máximo órgano social no modifique la decisión que nos ocupa, los administradores de la sociedad, deben realizar las operaciones tendientes a formalizarla, pues en caso contrario incurren en las responsabilidades consagradas en el artículo 200 del Código de Comercio modificado por el artículo 24 de la Ley 222 de 1995. Con relación a la competencia desleal, la Superintendencia de Industria y Comercio, según lo informado, ya se pronunció al respecto.