Siglo nuevo te la acción médico-quirúgica de la circuncisión, a la que simbólicamente se llega a equiparar con una castración. Algunos varones tienen en su mente oscuros prejuicios que les hacen temer la pérdida total de la hombría viendo a la circuncisión como una amenaza. Ellos no deben practicársela pues estos trastornos psicológicos escondidos saldrán a la superficie cuando se realice el procedimiento. El médico que haga la circuncisión debe valorar emocionalmente a su paciente y aclarar totalmente sus dudas antes de proceder, pues en caso contrario podría enfrentarse a un hombre dolido y alterado. La circuncisión tiene un valor agregado moral, ya que tal vez nuestros padres heredaron el pensamiento judeocristiano y aprobaron la circuncisión por fe o por una cuestión sanitaria, deseando mejorar nuestra higiene en el pene para evitar enfermedades sexuales. Su intención de inicio es buena y loable, sin embargo, las evidencias actuales nos indican que circuncidados o no, todos estamos expuestos a contraer enfermedades tan peligrosas como el SIDA y llegar a morir. La verdadera 18 • Sn La circuncisión puede permitir un aseo más fácil y sencillo de su pene; y no interfiere con su potencia sexual, ésta se conservará tal y como estaba antes del procedimiento. De igual manera, tenga por seguro que todas las sensaciones placenteras de la vida sexual se mantendrán después de la circuncisión. § Correo-e: sexologosilvestrefaya @hotmail.com Apuntes finales: Si su médico le aconseja la circuncisión, y usted tiene dudas sobre la necesidad de este procedimiento, pida una segunda opinión. Quien le dé su opinión, Tenga por seguro que todas las sensaciones placenteras de la vida sexual se mantendrán después de la circuncisión higiene debe reunir buenos hábitos de limpieza física y mental, así como medidas preventivas para combatir a las enfermedades sexuales. Conociendo los prejuicios sobre la práctica de la circuncisión podemos elegir de una manera racional cuando sea necesario hacerla. No estamos obligados a saberlo todo y por ello es importante, para quien está en el dilema de realizarse la circuncisión, hablar claramente con su médico o incluso pedir una segunda opinión. no debe realizar el procedimiento, sino sólo opinar y esperar a que usted tome la decisión final. En todo caso, se trata de tomar la mejor decisión, no de descalificar al médico tratante. La circuncisión dejará ín- tegras sus sensaciones más placenteras. Es una realidad que quien está circuncidado siente placer sexual al igual que quien no lo está.