EL PODER JUDICIAL EL PODER JUDICIAL La separación de la justicia de los órganos que ostentan la función de dirección política en el Estado es presupuesto del Estado de Derecho. Tal separación, que se previó ya en la Constitución gaditana y llega a nuestra vigente Carta Magna, resulta de los procedimientos de selección de jueces y magistrados, de su estatuto personal, de los sistemas de evaluación, etc. LA JUSTICIA EN LA CONSTITUCIÓN ESPAÑOLA DE 1978 El Poder Judicial en España es único; la competencia en materia de administración de Justicia es, sin embargo, compartida entre el Estado y las Comunidades Autónomas. El sistema de acceso a la carrera judicial se articula a través de un sistema de oposiciones, si bien se prevén otros supuestos de acceso. La inamovilidad de jueces y magistrados es un principio esencial al Estado democrático; su dependencia única debe ser a la ley (artículo 116 CE). Como contrapartida de tal independencia, el artículo 117.3 CE exige que sean, además, responsables. El artículo 9.3 CE, por último, prevé la responsabilidad patrimonial por el funcionamiento anormal de la Justicia. EL CONSEJO GENERAL DEL PODER JUDICIAL Es un órgano de gobierno de la Judicatura con rango constitucional. Existe una larga polémica sobre el sistema de designación de los miembros del Consejo General del Poder Judicial que parece superada con la Ley Orgánica 2/2001, fruto del Pacto de Estado para la Reforma de la Justicia de mayo de 2001. Entre sus competencias cabe destacar el nombramiento del Presidente del Tribunal Supremo, que es a su vez el Presidente del referido Consejo, la propuesta de nombramiento de dos miembros del Tribunal Constitucional o la inspección de los Juzgados y Tribunales. LA FUNCIÓN JURISDICCIONAL Consiste en la realización efectiva del Estado de Derecho, mediante la tutela efectiva de los derechos e intereses legítimos; es la afirmación del ordenamiento jurídico en el caso concreto. El artículo 125 CE prevé tres formas de participación del ciudadano en la justicia: la acción popular, los tribunales consuetudinarios y el jurado; cabe destacar esta última previsión, que ha sido desarrollada por la Ley Orgánica 5/1995, de 22 de mayo. LA PLANTA JURISDICCIONAL EN ESPAÑA La función jurisdiccional exige una pluralidad de órganos, que extienden su jurisdicción por todo el territorio nacional. La Ley Orgánica del Poder Judicial atribuye el ejercicio de la función jurisdiccional al Tribunal Supremo, la Audiencia Nacional, los Tribunales Superiores de Justicia, las Audiencias Provinciales, los Juzgados de Primera Instancia e Instrucción y los Juzgados de Paz. EL MINISTERIO FISCAL Su función esencial es ejercer las acciones penales que dimanan de los delitos. Francia y Gran Bretaña oponen, hoy, los dos modelos antitéticos de organización del Ministerio Fiscal. El Ministerio Fiscal se integra con autonomía en el Poder Judicial y ejerce su misión por medio de órganos propios (Fiscal General del Estado, Consejo Fiscal y Junta de Fiscales del Tribunal Supremo). A la tarea de ejercitar las acciones penales y civiles dimanantes de delitos y faltas cabe añadir la de defender los derechos fundamentales de los menores y los desvalidos.