Rosendo López González Docente Universidad Distrital Francisco José de Caldas rlopezg@udistrital.edu.co Con el único interés de contribuir a esclarecer y crear una cultura sobre el significado de la inclusión, por parte del Ministerio de Educación Nacional, de los programas académicos estructurados por ciclos propedéuticos en el sistema de la educación superior universitaria, presento este documento en la modalidad de preguntas y respuestas. Agréguese a la preocupación anterior, la gran acogida de la educación por ciclos propedéuticos en la Facultad Tecnológica adscrita a la Universidad Distrital Francisco José de Caldas (UDFJ de C) ¿A qué Instituciones de Educación Superior, en un principio, estaba dirigida la educación por ciclos propedéuticos? En primer lugar, la Ley 749 de 2002 se manifiesta a favor de los programas por ciclos propedéuticos, en las Instituciones Técnicas Profesionales y Tecnológicas. El mandato es taxativo: “Estas instituciones podrán ofrecer y desarrollar programas de formación hasta el nivel profesional, solo por ciclos propedéuticos” Limitándose su accionar en las áreas de las Ingenierías, Tecnología de la información y Administración. Una cosa hay que dejar bien clara: La Ley 749 de 2002, no involucra a las Universidades. ¿Cuándo se extendió la idea de los programas por ciclos propedéuticos a otras áreas de saber, y a las Universidades? En el 2008, con la Ley 1188 y con el pretexto de regular el registro calificado de programas de educación superior, a esta Ley en su artículo 5 se le añade lo siguiente: “Todas las Instituciones de Educación Superior, en todos los campos del saber y áreas del conocimiento podrán ofrecer programas académicos por ciclos propedéuticos “ ¿Cuál es la diferencia, con otras instituciones, cuando el Ministerio de Educación involucra a las universidades en la modalidad de la educación por ciclos propedéuticos con la Ley 1188 de 2008? Es muy grande: a las Instituciones de educación Técnica y Tecnológica el Ministerio utiliza las palabras: desarrollar programas de formación profesional sólo por Ciclos Propedéutico; cuándo se refiere a la Universidad afirma: “podrán ofrecer programas académicos por ciclos propedéuticos”. Significa esto que las universidades que se metieron en este asunto lo hicieron voluntariamente. Por ejemplo la Universidad del Atlántico decidió autónomamente crear una carrera sobre turismo por ciclos propedéutico. Los tres niveles son: Técnico en Operación Turística, después Tecnólogo en Gestión Turística y por último: el ciclo en Administrador de Empresas Turísticas. (En este ejemplo se recogen las dos Leyes: 749 y 1188, además el Decreto reglamentario de la última Ley). El caso de la UDFJ de C es muy sui generis, pues desde que se metió en la formación por ciclos propedéutico, siempre ha estado por fuera de la Ley. No encaja en la Ley 749 de 2002, siendo ésta la Ley madre, porque no ha desarrollado el Ciclo Técnico. Además, la UDFJ de C no es una Institución Técnica, ni Tecnológica. Y la Ley 1188 de 2008, que es reglamentada por el Decreto 1295, mantiene la misma estructura de Técnico, Tecnólogo, Ciclo Profesional. ¿Cuándo la Facultad Tecnológica se involucró con los programas por ciclos propedéuticos? Desde julio 2006, con un cúmulo de resoluciones emanadas del honorable Consejo Superior, ellas son: de la 021 hasta la 025, donde se señala en todas en el artículo segundo que el programa” se podrá ofrecer bajo la modalidad de los ciclos propedéuticos”. Es decir, aún no existía la Ley 1188 de 2008. Sin embargo, es con el Acuerdo 03 de 2010, también del Consejo Superior, es cuando se institucionaliza. El Acuerdo de marras, afirma: “artículo 1. El modelo educativo de la Facultad Tecnológica desarrolla sus Programas Académicos en dos ciclos: uno, el Tecnológico, el cual conduce al título de Tecnólogo y es propedéutico respeto a la ingeniería afín al programa; otro, el de Ingeniería, al cual como requisito de admisión, ingresan Tecnólogos titulados”. Es importante agregar que la decisión fue autónoma de la UDFJ de C. Decir que estábamos en la obligación es falso y trata de justificar el desastre. Pues la Facultad de Medio Ambiente con sus programas de Tecnologías terminales sique funcionando normal. Cuál es el desastre. ¿Por qué esa palabra tan drástica? Porque hasta el momento no se pueden abrir tres programas académicos en la Facultad Tecnológica, por la pérdida de sus Registros Calificados. Estos programas son: Tecnología e Ingeniería Eléctrica y Tecnología en Construcciones Civiles. Disminuyéndose ostensiblemente la cobertura de los estudiantes matriculados. Además, las salidas son peores que el problema porque con el Diplomado sobre ciclos propedéuticos, donde se cobra una cantidad exorbitante de dinero, lo que crea es más dificultades porque se hace un revuelto entre la educación formal y no formal. ¿Cómo era el modelo de la Facultad Tecnológica, antes de meterse en la trama de los programas por ciclos propedéuticos? Muy sencillo. La Facultad Tecnológica, creada en junio del 1994. Tenía un modelo muy natural y funcional, también por ciclos. Una Tecnología terminal y una Ingeniería terminal. Del paso de la primera a la segunda se hacia un nuevo proceso de admisión con las homologaciones respectivas. Ese modelo funcionó bien pero fue abandonado voluntariamente, y sin evaluarlo hasta que llegó la modalidad por ciclos propedéuticos. Es más con las Tecnologías terminales se alcanzó la tan discutida y mentada alta calidad. Miren esta paradoja: El programa más afectado por el cambio de modelo fue Tecnología e Ingeniería en Electricidad por ciclos propedéuticos, hoy ninguno de los dos programas tiene registro calificado, es decir no se pueden aceptar estudiantes. ¿Dónde está la incoherencia? El mismo programa terminal aún tiene vigente la resolución de la acreditación de calidad por ciclos terminales. ¿Cuál sería una posible salida a esta crisis? Gianni Rodari, uno de los grandes pedagogos nos enseñó que los problemas, y sobre todo los educativos, no tienen una sola solución. Claro está que todas las soluciones pasan por escuchar a todos los involucrados. Primera solución: seguir en lo que estamos, y continuar disminuyendo la cobertura de los estudiantes que ingresan a la Facultad Tecnológica. Segunda solución: evaluar el modelo primigenio por ciclos terminales, y solicitar de oficio registros calificados a los programas que tienen vigente Acreditación de Alta Calidad. Tercera solución: concebir una etapa de transición donde convivan los dos caminos: el de ciclos propedéutico y ciclos terminales, con el fin de priorizar el último y extinguir poco a poco el primero. Bogotá, febrero 2015