Año del Bicentenario de la Declaración de la Independencia Nacional Poder Judicial de la Nación CAMARA CIVIL - SALA B 9551/2015 Incidente Nº 1 - DEMANDADO: CARDINI, FABRIZIO s/INCIDENTE CIVIL Buenos Aires, de agosto de 2016.- SDB Y VISTOS: CONSIDERANDO: I. Vienen las presentes actuaciones al Tribunal a raíz del recurso de apelación interpuesto a fs. 49/vta., por el letrado apoderado del demandado. Impugnó la resolución obrante a fs. 37/38vta., que dispuso la prohibición de innovar sobre la calidad de fiduciante adherente y beneficiario del incidentista en el fideicomiso “Quality Virasoro” respecto de las unidades identificadas en el decisum. El memorial corre agregado a fs. 51/54vta. En la citada pieza de autos el recurrente objeta que el a quo haya tenido por acreditada la verosimilitud del derecho sin explicar los motivos de esa afirmación, limitándose a enumerar una serie de constancias obrantes en este proceso y otros conexos. Califica esa actitud como genérica, imprecisa y cargada de vaguedad. El impugnante en la presentación que se reseña, las confronta con el contenido de otras actuaciones obrantes en esos procesos y con las actividades que, según lo expresa, ha desarrollado en cumplimiento de sus obligaciones como fiduciario. Prosigue sosteniendo que la medida cautelar le ocasiona agravio porque bloquea la adjudicación de unidades funcionales que ya no le pertenecen al incidentista, al no poder ser comercializadas. Por último se agravia porque se ha concedido una medida cautelar con una caución meramente juratoria sin que se configure motivo suficiente para ello. El memorial arriba reseñado fue contestado a fs. 56/58vta. Fecha de firma: 24/08/2016 Firmado por: ROBERTO PARRILLI, JUEZ DE CAMARA Firmado por: DR. CLAUDIO RAMOS FEIJOÓ, JUEZ DE CÁMARA Firmado por: DR. MAURICIO LUIS MIZRAHI , JUEZ DE CÁMARA #28417767#160198323#20160823163707363 Habiéndose resumido las constancias relativas al recurso nos abocaremos al estudio del tema propuesto. II. De manera preliminar diremos que en el análisis de los agravios se seguirá el rumbo de la Corte Federal y de la buena doctrina interpretativa. Así el tribunal de apelación no se encuentra obligado a seguir en todas sus manifestaciones al impugnante. Tampoco está constreñido a refutar sus argumentos uno por uno, en tanto posee amplia libertad para ordenar el estudio de los hechos y de los distintos planteos efectuados. Sólo se dará relevancia a aquellos que sean conducentes y posean entidad suficiente para decidir el caso (ver CSJN, "Fallos": 258:304; 262:222; 265:301; 272:225; Fassi Yañez, "Código Procesal Civil y Comercial de la Nación, Comentado, Anotado y Concordado", T° I, pág. 825; Fenocchieto Arazi. "Código Procesal Civil y Comercial de la Nación. Comentado y Anotado", T 1, pág. 620). Partiendo de esta pauta directiva, señalaremos lo siguiente. Es un criterio generalmente aceptado por la doctrina y la jurisprudencia que la admisibilidad de las medidas cautelares está condicionada a la reunión de los requisitos de verosimilitud del derecho y peligro en la demora (Arazi, “Medidas Cautelares”, pág. 4, nro. 5, Ed. Astrea, Bs. As., 2007; Falcón, Tratado de Derecho Procesal Civil y Comercial”, T IV, pág. 107, nro. 12, Ed. Rubinzal – Culzoni, Santa Fe, 2013). Con la salvedad que, para el supuesto de la prohibición de innovar, esos presupuestos están previstos legalmente (art. 230, incs. 1 y 2 C.P.C.C.). Respecto del primero, es decir, la verosimilitud del derecho (fumus boni iuris), debe ser entendida como la posibilidad de que él exista y no como una incontestable realidad que sólo se logrará al agotarse el trámite judicial correspondiente. Se trata en definitiva de una notoria apariencia de credibilidad, que nace a partir de pautas Fecha de firma: 24/08/2016 Firmado por: ROBERTO PARRILLI, JUEZ DE CAMARA Firmado por: DR. CLAUDIO RAMOS FEIJOÓ, JUEZ DE CÁMARA Firmado por: DR. MAURICIO LUIS MIZRAHI , JUEZ DE CÁMARA #28417767#160198323#20160823163707363 Año del Bicentenario de la Declaración de la Independencia Nacional Poder Judicial de la Nación CAMARA CIVIL - SALA B objetivas, pero siempre dentro de un marco de provisionalidad (CNCiv., esta Sala, Rep. E.D. 13-565, nro. 2). Es decir que es preciso, al menos, la comprobación de esa circunstancia, de forma tal que de conformidad con un cálculo de probabilidades, sea factible prever que en el proceso principal pueda declararse la certeza de ese derecho. No se trata, entonces de exigir una prueba plena y concluyente. Pero es necesario -- mínimamente -incorporar el material necesario para conformar esa convicción provisoria. Este requisito genérico exigido para la traba de una medida cautelar, no impone al Tribunal la obligación de efectuar un examen jurídico riguroso, el que si será necesario para resolver el pleito, sino que el derecho invocado tenga o no "apariencia" de verdadero (CNCiv. Sala H, 17/9/90, LL 1991-D-572; CNCom. Sala E, 7/11/88, LL 1991-D-572). A ello corresponde añadir, siempre dentro de los límites que impone el propia materia, la consideración a priori de las razones del demandante y la índole de la pretensión (CN Civ., Sala M, 12-32002, “Pellegrino Matías c/ Universidad del Salvador”, J.A. 2002-II482´). Todo ello, claro está, sin que proyecte influencia, ni se vea condicionado el contenido de la sentencia definitiva que es el momento procesal en donde se aplicará con mayor rigor el análisis de los elementos que se vayan incorporando al proceso y la consecuente decisión acerca de la cuestión de fondo que plantean las partes. III. Con relación al segundo presupuesto arriba apuntado, debe existir un temor grave y fundado: que el derecho por el cual se inicia un proceso judicial, se pierda o se dañe durante el desarrollo de aquel. Esa circunstancia se ve potenciada en el caso específico de la prohibición de innovar. Mediante su dictado se persigue que no Fecha de firma: 24/08/2016 Firmado por: ROBERTO PARRILLI, JUEZ DE CAMARA Firmado por: DR. CLAUDIO RAMOS FEIJOÓ, JUEZ DE CÁMARA Firmado por: DR. MAURICIO LUIS MIZRAHI , JUEZ DE CÁMARA #28417767#160198323#20160823163707363 se modifique una situación de hecho o de derecho existente, impidiendo que pueda perjudicarse a una de las partes en la relación jurídica, hasta tanto se resuelva definitivamente la cuestión. Se evita de tal forma que el pronunciamiento judicial definitivo se convierta en inocuo, de cumplimiento imposible o se vea demorada su ejecución (Arazi, op. cit., pág. 356, nro. 155, CN Civ., SalaJ, LL 1998-A-157). IV. Examinadas las constancias de autos, a la luz de los criterios más arriba expuestos, corresponde adelantar que la resolución será confirmada en lo que concierne a la procedencia de la medida. En efecto, tanto quien ha promovido el incidente, como el recurrente no han cuestionado la existencia del fideicomiso, ni la original calidad de fiduciante adherente y beneficiario que ha invocado el incidentista. Sin perjuicio de lo expresado, esas circunstancias surgen de la prueba documental que en instrumentos públicos lucen agregadas fs. 1/3vta. (art. 296, Código Civil y Comercial de la Nación). Sin perjuicio de ello, resulta evidente que se encuentra cuestionada tanto la actual vigencia del carácter de fiduciario que invoca el apelante, como así también la personería de quien invoca su representación. A su vez resulta de autos que está controvertida la exclusión del incidentista con relación al referido fideicomiso (ver cartas documento de fs. 9/12). Todos esos aspectos litigiosos, basados en hechos sobre los que no hay acuerdo, deberán ser motivo de prueba y decisión en el momento procesal oportuno. A partir del material y las circunstancias antes descriptas, como de las demás constancias de las actuaciones agregadas, resulta un sostén suficiente como para tener por acreditado el cumplimiento de los presupuestos mencionados al comienzo de la presente. Todo Fecha de firma: 24/08/2016 Firmado por: ROBERTO PARRILLI, JUEZ DE CAMARA Firmado por: DR. CLAUDIO RAMOS FEIJOÓ, JUEZ DE CÁMARA Firmado por: DR. MAURICIO LUIS MIZRAHI , JUEZ DE CÁMARA #28417767#160198323#20160823163707363 Año del Bicentenario de la Declaración de la Independencia Nacional Poder Judicial de la Nación CAMARA CIVIL - SALA B ello expuesto dentro del marco de la medida cautelar y sin perjuicio de lo que corresponda resolver oportunamente. Sin duda a partir de la complejidad de las relaciones jurídicas que se ponen de manifiesto, los alcances, extensión y vigencia de los derechos alegados, serán objeto de la sentencia definitiva que se dictará en el proceso respectivo. V. El apelante, como fundamento de su agravio, pretende que se analicen con mayor detalle las constancias de las actuaciones conexas, que se tienen a la vista. Al respecto se dirá que dicho requerimiento no resulta acorde con la finalidad propia de esta etapa procesal. Corresponde destacar que el incidentista no ha sido parte en los aludidos procesos judiciales y por ende no ha tenido una activa participación en ellos. Además la tesitura propuesta implica, en el actual estado del proceso, avanzar sobre aspectos que exceden de manera notoria el tratamiento de la medida cautelar. Es que se vinculan decididamente con el fondo de la cuestión. Por ello deberán ser objeto de debate, comprobación y decisión en el momento procesal oportuno y en las actuaciones pertinentes. A partir de todo lo expuesto precedentemente, podemos adelantar que la medida cautelar sea confirmada. VI. Analizaremos a continuación la queja formulada con respecto a la fijación de una caución juratoria. La contracautela tiene por objeto garantizar a quien sufre la medida cautelar, el resarcimiento de los eventuales daños y perjuicios que se le puedan irrogar por una indebida petición (Falcón, op. cit. pág. 126, nro 18). La entidad de las cuestiones planteadas, cuya descripción se efectuó más arriba y las eventuales consecuencias económicas que se pueden proyectar con relación al funcionamiento del fideicomiso, permiten vislumbrar como ciertamente insuficiente el Fecha de firma: 24/08/2016 Firmado por: ROBERTO PARRILLI, JUEZ DE CAMARA Firmado por: DR. CLAUDIO RAMOS FEIJOÓ, JUEZ DE CÁMARA Firmado por: DR. MAURICIO LUIS MIZRAHI , JUEZ DE CÁMARA #28417767#160198323#20160823163707363 mero juramento de responder por los eventuales daños que se puedan provocar. La mentada categoría debe quedar reservada para los supuestos excepcionales que se establecen en las normas procesales respectivas (arts. 199 y 212, C.P.C.C.). El carácter antes aludido implica que su utilización debe efectuarse con un severo criterio restrictivo. En consecuencia, fuera de los casos contemplados expresamente y más arriba indicados, sólo se debe aplicar la caución juratoria en donde se configura la verosimilitud en un grado máximo, siempre dentro del límite de la provisionalidad. Esa circunstancia no se concreta en estas actuaciones, ni su contenido se enmarca dentro de alguna de las circunstancias establecidas en la normativa antes citada, con carácter taxativo. VII. Es así que para preservar una situación de equilibrio, que se presenta como necesario e imperioso dentro del marco de las medidas cautelares -- atento su propia naturaleza – sin que se vea afectada la igualdad entre las partes, considerando la entidad de las relaciones jurídicas en debate, como así también el objeto, volumen económico y finalidad del fideicomiso, se considerará apropiado fijar una caución real que permita arribar a una posición más ecuánime entre los litigantes. A partir de lo precedentemente expuesto, se establece de manera prudente y razonable en concepto de contracautela, la suma de pesos Trescientos Cincuenta Mil ($ 350.000.-), monto que se considera acorde con la naturaleza de la cuestión debatida. La referida caución deberá acreditarse en autos dentro de los diez días de notificada la presente, bajo apercibimiento de disponer el levantamiento de la medida cautelar. VIII. Las costas de Alzada se impondrán en el orden causado atento el vencimiento parcial y mutuo (art. 71, C.P.C.C.). Fecha de firma: 24/08/2016 Firmado por: ROBERTO PARRILLI, JUEZ DE CAMARA Firmado por: DR. CLAUDIO RAMOS FEIJOÓ, JUEZ DE CÁMARA Firmado por: DR. MAURICIO LUIS MIZRAHI , JUEZ DE CÁMARA #28417767#160198323#20160823163707363 Año del Bicentenario de la Declaración de la Independencia Nacional Poder Judicial de la Nación CAMARA CIVIL - SALA B Por los fundamentos expresados el Tribunal RESUELVE: Revocar la resolución apelada en cuanto dispuso fijar una caución juratoria, confirmándola en lo demás que fuera materia de agravio. En consecuencia, se establece la contracautela en la suma de pesos Trescientos Cincuenta Mil ($ 350.000). Esa caución real deberá acreditarse en autos dentro de los diez días de notificada la presente, bajo apercibimiento de proceder al levantamiento de la medida cautelar. Las costas de Alzada se imponen en el orden causado. Regístrese y publíquese (Ac. 24/13, CSJN). Oportunamente devuélvanse al Juzgado de origen, encomendándose la notificación de la presente junto con la recepción de las actuaciones (art. 135, inc. 7, C.P.C.C.). 5 6 4 Fecha de firma: 24/08/2016 Firmado por: ROBERTO PARRILLI, JUEZ DE CAMARA Firmado por: DR. CLAUDIO RAMOS FEIJOÓ, JUEZ DE CÁMARA Firmado por: DR. MAURICIO LUIS MIZRAHI , JUEZ DE CÁMARA #28417767#160198323#20160823163707363