el compañero de piso de mierda MANUAL DE SUPERVIVENCIA PARA COMPARTIR CASA Textos de Giuseppe Angelo Fiori Ilustraciones de Dario Campagna traducción de miguel ros gonzález Índice Introducción7 Las tres leyes del Compañero de Mierda 11 El Compañero de Mierda Porrero El Compañero de Mierda Yoncarra El Compañero de Mierda Borrachuzo 12 22 24 Cosas que se traen a casa los CDM Borrachuzos 33 La Compañera de Mierda Tiquismiquis El novio deja a la CDM Tiquismiquis 38 46 Notitas50 primera edición: marzo de 2016 título original: Il coinquilino di merda © Mondadori Electa S.p.A., Milano, 2015 All rights reserved © de la traducción, Miguel Ros González, 2016 © Errata naturae editores, 2016 C/ Maestro Arbós 3, 3º, 310 28045 Madrid info@erratanaturae.com www.erratanaturae.com isbn: 978-84-16544-10-3 depósito legal: m-2488-2016 código bic: wh diseño de portada: David Sánchez maquetación: María O’Shea impresión: Edelvives impreso en españa – printed in spain Los editores autorizan la reproducción de este libro, de manera total o parcial, siempre y cuando se destine a un uso personal y no comercial. La Compañera de Mierda Guarrilla La Compañera de Mierda Guarrilla Ennoviada El Novio de Mierda 54 62 65 Daños68 El Compañero de Mierda Niño de Mamá El Compañero de Mierda Niño de Mamá Católico Ferviente El Compañero de Mierda Niño de Mamá Friki 78 84 88 Historias de comida podrida 96 El Compañero de Mierda Desequilibrado El Compañero de Mierda Desequilibrado Nudista Las metamorfosis del Compañero de Mierda Desequilibrado Una metamorfosis particular: el Compañero de Mierda Desequilibrado Veleta 102 111 113 Higiene casera 116 115 El Compañero de Mierda Viejoven El Compañero de Mierda Viejoven Cuadrado 124 131 Historias de papel higiénico 134 El Compañero de Mierda Erasmus Las recetas del Compañero de Mierda Erasmus 138 151 Plantas caseras 156 El Pipiolo de Mierda El Pipiolo de mierda y los electrodomésticos 160 167 Apéndice 1. Bromas del Compañero de Mierda 172 Apéndice 2. Animales del Compañero de Mierda 177 Apéndice 3. Vecinos de Mierda 182 Agradecimientos186 Introducción El proyecto del Compañero de Mierda nace para sensibilizar a la sociedad sobre el drama de la convivencia entre desconocidos. Desde octubre de 2012, mes de su nacimiento, la página de Facebook del Coinquilino di Merda se propone recopilar, seleccionar y difundir las historias enviadas por los usuarios que comparten casa. A día de hoy, la página del CDM cuenta con más de medio millón de fans y ha recibido unos cuarenta mil testimonios. Una colección enorme de apuntes, historias y fotografías que documentan en detalle todos los dramas que surgen a raíz de este bárbaro estilo de vida. El presente volumen es el resultado de esta investigación. Créditos187 La clasificación Analizando las historias recibidas y su frecuencia, se han identificado ocho tipos de compañeros o categorías, tal como se presentan en este libro: cada una de ellas comenzará con un análisis del compañero, al que seguirán numerosas historias y documentos fotográficos. Entre un capítulo y otro, una galería de fotos ilustrará los típicos acontecimientos que tienen lugar en las casas donde vive un Compañero de Mierda. En aras de la claridad expositiva, se ha otorgado un género a cada compañero analizado. Esto no debe engañar al lector: vaya por delante que por cada Compañero de Mierda Porrero existe una Compañera de Mierda Porrera, de la misma forma que para cada Compañera de Mierda Guarrilla existe un Compañero de Mierda Guarrillo. Asimismo, el Compañero de Mierda no puede ceñirse a ningún área geográfica o estrato social. 6 7 Conviene apuntar, además, que las categorías no son estáticas ni están divididas en compartimentos estancos. Puede que un Compañero de Mierda esté a caballo entre dos categorías, o que sufra una metamorfosis y cambie repentinamente de una a otra. Por ejemplo, no es de extrañar que un Compañero de Mierda Católico Ferviente, si se ve sometido a una dosis adecuada de alcohol, drogas y tentaciones sexuales, se transforme en un Compañero de Mierda Porrero, Yoncarra o Borrachuzo. Del mismo modo, si el novio con el que ha pasado los últimos quince años de su vida deja a la Compañera de Mierda Tiquismiquis, ésta puede transformarse en una Compañera de Mierda Guarrilla. Estamos seguros de que nuestra clasificación, siendo la primera de este tipo, contiene un gran número de imprecisiones y defectos. No obstante, creemos que es un buen punto de partida, pero sobre todo un instrumento útil para comprender rápidamente el tipo de Compañero de Mierda al que nos enfrentamos. 8 Abreviaturas CDM: Compañero de Mierda ACDM: Aspirante a Compañero de Mierda NDM: Novio/a de Mierda (para referirse a la pareja del CDM) CaDM: Casero de Mierda PaDM: Padres de Mierda PDM: Pipiolo de Mierda VDM: Vecinos de Mierda 9 Las tres leyes del Compañero de Mierda Todas las historias que aparecen en este libro son verídicas. Si alguien las considera absurdas es que nunca ha tenido un compañero de piso. Existen tres leyes fundamentales que regulan toda relación de convivencia. 1. Hay un Compañero de Mierda en cada casa compartida. 2. El Compañero de Mierda lleva a hacer cosas de Compañero de Mierda. 3. Si no tienes un Compañero de Mierda en casa, eres tú. Las tres leyes en detalle y sus implicaciones Ante todo, no puede existir una casa sin CDM. En toda convivencia tiene que haber uno sin más remedio. Además, una vez localizado el CDM, éste no puede ser eliminado ni destruido. Antes al contrario, en virtud de la segunda ley, cada una de sus acciones lleva a un aumento de los niveles de CDMerdosidad en la casa. La tercera ley refuerza el primer principio y desacredita la experiencia meramente subjetiva. De hecho, es habitual que muchos tipos de CDM (pensamos, por ejemplo, en el CDM Tiquismiquis o en el Erasmus) no se den cuenta de que lo son y afirmen, satisfechos: «Nosotros tenemos suerte, ¡en nuestra casa no hay ningún Compañero de Mierda!». Todos los intentos de educar a un CDM de los que se tiene constancia hasta la fecha, ya sea a través del uso de notitas, reuniones entre compañeros, tablas para los turnos de limpieza o reglas de la casa, han demostrado ser un fracaso. El único método que ha dado algún fruto digno de mención es el castigo corporal, infligido por medio de la violencia física o los laxantes. Sin embargo, ninguno de estos métodos ha provocado resultados duraderos. Ningún CDM puede dejar de ser un CDM. 11 El Compañero de Mierda Porrero Estudios: Filosofía, Sociología, Ciencias Políticas. El CDM Porrero, estudiante discreto, consigue conservar la beca los dos primeros años haciendo únicamente exámenes tipo test, para los que se prepara durante las cuarenta y ocho horas precedentes, ayudando a su metabolismo con café bebido a morro de la cafetera, semillas de ginseng y tabaco de liar de la marca Pueblo. Modelo de referencia: Homer Simpson (en el capítulo en que fuma marihuana medicinal con Otto). Look: Independientemente del estatus socioeconómico de su familia, el CDM Porrero suele vestir: • Sudadera con capucha de la marca Santa Cruz, dotada de vistosas manchas de aceite que exhibe como muestras palpables de su libertad. • Vaqueros largos con rasgones en los muslos y los bajos desgastados. • Zapatillas de skate de ante de la marca Vans, con la suela casi completamente despegada. ¡Qué peste a limpio! (El Compañero de Mierda Porrero, nada más volver a casa). La verdad es que estas noches son muy agradables, tendríamos que organizarlas más a menudo. (El Compañero de Mierda Porrero, tras una cena entre semana, después de que los demás inquilinos ofrezcan su propia comida, cocinen y frieguen). 12 Nótense, además: • La señal perpetua de la almohada en la cara. • El trapo multiusos que usa para limpiarse la nariz, las gafas y la pipa de cerámica. Cómo reconocerlo: el día de la cita para ver la habitación, el CDM Porrero te llama cuatro veces: • La primera para avisarte de que llega tarde. • La segunda para avisarte de que se ha quedado libre y será puntual. • La tercera para decirte que el autobús está en un atasco. • La cuarta parta decirte que está a punto de llegar y será puntual. • Acabará apareciendo con unos 40 minutos de retraso. 13