“De antemano debo reconocer que a mi escritorio y mis manos llegan muchos gadgets de última generación. Pequeños computadores, celulares, máquinas de foto, mp3, mp4, USB…sólo por nombrar algunos. De diversos tamaños y colores todos sorprenden por sus capacidades y potencialidades. Pero éste, el 3M Mpro110, me pareció particularmente llamativo. Lo más notable su tamaño, que lo hacer lucir cool pero a la vez enigmático. En un primer encuentro no sabes si es un celular, una cámara o un Ipod más gordito. Cuando tienes claro que es un proyector, te dan ganas de probarlo para ver si efectivamente funciona. El segundo paso viene cuando lo quieres “echar a andar”. Simple, sencillo, dos instantes y ya tienes la proyección contra una pared. Ejecutarlo es fácil y si lo montas sobre un trípode todo anda de maravillas. Lo utilicé para presentar una pauta y el grupo quedó sorprendido, por su portabilidad y diseño. Lo único que le pediría al próximo modelo es algo más de nitidez. Me imagino invitando a mis amigos, apagando las luces y dando un recorrido por aquellos lugares que hemos visitados juntos…cuando las fotos se proyecten en la pared con este pequeño, pero útil elemento”. Soledad Onetto