PRINCIPIOS BÁSICOS DEL PODER JUDICIAL I. PRINCIPIO DE INDEPENDENCIA JUDICIAL (Art. 117.1 CE y arts. 1, 12, 13 y 14 LOPJ). Los jueces y magistrados han de aplicar las leyes con imparcialidad y sin mediatización ni intervención de ningún otro poder o autoridad ajena. Dictarán sus resoluciones conforme a su recto criterio y a la interpretación personal que efectúen de las leyes que resulten de aplicación al caso en concreto. -SDO de esta independencia: 1) Sumisión exclusiva al imperio de la ley, para garantizar la actuación del derecho objetivo por los órganos jurisdiccionales. *En todo caso, supone sumisión sólo a aquellas leyes que sean conformes a la Constitución. Así se desprende de los siguientes preceptos: -Art. 117.1 CE: “La justicia emana del pueblo y se administra en nombre del Rey por Jueces y Magistrados integrantes del poder judicial, independientes, inamovibles, responsables y sometidos únicamente al imperio de la ley”. -Art. 1 LOPJ: reitera el art. 117.1 CE, aunque incluye expresamente el sometimiento de los jueces y magistrados a la Constitución (no sólo a la ley). En este sentido (de sumisión exclusiva a la ley), este principio de independencia es una concreción del principio general de vinculación de todos los poderes públicos a la Constitución y al resto del ordenamiento jurídico, que consagra el art. 9.1 CE. 2) No sumisión a normas contrarias a la ley: -Art. 6 LOPJ: “Los Jueces y Tribunales no aplicarán los reglamentos o cualquier otra disposición contrarios a la Constitución, a la ley o al principio de jerarquía normativa”. -Art. 106.1 CE: “Los Tribunales controlan la potestad reglamentaria (…)”. 3) No sumisión a tribunales superiores, pues cada juez o tribunal tiene su competencia y dentro de ella ejerce su potestad sólo vinculado a la ley. De aquí que el art. 12 LOPJ disponga que “en el ejercicio de la potestad jurisdiccional, los Jueces y Magistrados son independientes respecto a todos los órganos judiciales y de gobierno del Poder Judicial. No podrán los Jueces y Tribunales corregir la aplicación o interpretación del ordenamiento jurídico hecha por sus inferiores en el orden jerárquico judicial sino cuando administren justicia en virtud de los recursos que las leyes establezcan”. 4) No sumisión a entidad alguna. Así, la LOPJ prevé que: - “Todos están obligados a respetar la independencia de los Jueces y Magistrados” (art 13). - “Los Jueces y Magistrados que se consideren inquietados o perturbados en su independencia lo pondrán en conocimiento del Consejo General del Poder Judicial, dando cuenta de los hechos al Juez o Tribunal competente para seguir el procedimiento adecuado, sin perjuicio de practicar por sí mismos las diligencias estrictamente indispensables para asegurar la acción de la justicia y restaurar el orden jurídico. El Ministerio Fiscal, por sí o a petición de aquéllos, promoverá las acciones pertinentes en defensa de la independencia judicial” (art. 14). - Para alcanzar esta independencia, el art. 127 CE prevé las incompatibilidades que afectan a jueces y magistrados: “Los Jueces y Magistrados así como los Fiscales, mientras se hallen en activo, no podrán desempeñar otros cargos públicos, ni pertenecer a partidos políticos o sindicatos. La ley establecerá el sistema y modalidades de asociación profesional de los Jueces, 1 Magistrados y Fiscales. La ley establecerá el régimen de incompatibilidades de los miembros del poder judicial, que deberá asegurar la total independencia de los mismos”. -GARANTÍAS de la independencia: 1) garantía formal: calidad de la norma que regula estatuto de los jueces y magistrados, pues existe una reserva de ley orgánica al respecto (art. 122.1 CE). 2) PRINCIPIO DE AUTOGOBIERNO (Art. 122.2 CE: “El Consejo General del Poder Judicial es el órgano de gobierno del mismo”). Este autogobierno es ejercido por el CGPJ. Sin embargo, se trata de un autogobierno relativo por tres razones: a) No todos los miembros del Consejo forman parte de la carrera judicial, aunque éstos sean mayoría. b) Sus competencias no comprenden la administración de los recursos materiales del servicio jurisdiccional. c) Los miembros del Consejo no se eligen por los jueces y magistrados. -REVERSO de la independencia: la responsabilidad personal de los jueces y magistrados en los ámbitos civil, penal y disciplinario (vid principio de responsabilidad). II. PRINCIPIO DE INAMOVILIDAD (Art. 117.1 y 2 CE). Implica una garantía para alcanzar la independencia. -Así, el art. 117.2 CE prevé expresamente que “los Jueces y Magistrados no podrán ser separados, suspendidos, trasladados ni jubilados, sino por alguna de las causas y con las garantías previstas en la ley”. III. PRINCIPIO DE EXCLUSIVIDAD. -Art. 117.3 CE (y art. 2.1 LOPJ): “El ejercicio de la potestad jurisdiccional en todo tipo de procesos, juzgando y haciendo ejecutar lo juzgado, corresponde exclusivamente a los Juzgados y Tribunales determinados por las leyes, según las normas de competencia y procedimiento que las mismas establezcan”. Esta exclusividad se resuelve en dos monopolios y un aspecto negativo: 1) Monopolio estatal: consecuencia de atribuir a la jurisdicción la naturaleza de potestad dimanante de la soberanía popular es que el Estado tiene el monopolio de la misma, tanto en el ámbito internacional (sin perjuicio de que los tribunales internacionales también puedan ejercer competencias derivadas de la Unión Europea -art. 96 CE-), como en el ámbito interno (las CCAA carecen de jurisdicción). 2) Monopolio judicial: pues sólo a los juzgados y tribunales determinados por la LOPJ corresponde el ejercicio de la potestad jurisdiccional. 3) Sentido negativo del principio: implica que la función jurisdiccional ha de ser la única función de los jueces y tribunales. Así, prevé el art. 117.4 CE (y art. 2.2 LOPJ) que “Los Juzgados y Tribunales no ejercerán más funciones que las señaladas en el apartado anterior -el ejercicio de la potestad jurisdiccional- y las que expresamente les sean atribuidas por ley en garantía de cualquier derecho”. 2 IV. PRINCIPIO DE UNIDAD JURISDICCIONAL. -Art. 117.5 CE: “El principio de unidad jurisdiccional es la base de la organización y funcionamiento de los Tribunales. La ley regulará el ejercicio de la jurisdicción militar en el ámbito estrictamente castrense y en los supuestos de estado de sitio, de acuerdo con los principios de la Constitución”. -Art. 3.1 LOPJ: “La jurisdicción es única y se ejerce por los Juzgados y Tribunales previstos en esta Ley, sin perjuicio de las potestades jurisdiccionales reconocidas por la Constitución a otros órganos”. -Art. 117.6 CE: “Se prohíben los Tribunales de excepción”. -SDO: al ser la jurisdicción una potestad dimanante de la soberanía popular, ha de ser necesariamente única. Y técnicamente su ejercicio podría corresponder sólo a un órgano, pero como en la práctica ello es imposible, aparecen órganos judiciales varios, entre los que se distribuye el ámbito en el que se ejerce esa función, surgiendo así la Organización Judicial. La jurisdicción no sólo es única, sino que es también indivisible; por tanto, todos los órganos jurisdiccionales la poseen en su totalidad. Lo que sí es susceptible de división es la competencia es decir, el ámbito sobre el que se ejerce la jurisdicción-; de aquí que pueda establecerse que un órgano ejerza la potestad jurisdiccional sólo sobre determinadas materias (civiles, penales,…) y que se pueda limitar el ámbito territorial en el que actúe, o limitar su actividad a parte del proceso (la primera instancia, por ejemplo). Conforme a todo lo expuesto, sólo pueden existir: 1) Tribunales ordinarios: los regulados en la LOPJ, cuyos jueces y magistrados reúnan condiciones técnicas y de carrera, y que formarán un cuerpo único. 2) Tribunales especiales, admitidos por la Constitución: éste es el caso de los Tribunales militares, el Tribunal Constitucional, el Tribunal de Cuentas y el Tribunal de las Aguas de Valencia. V. PRINCIPIO DE RESPONSABILIDAD (Art. 117.1 CE). -El art. 117.1 CE determina la responsabilidad de los jueces y magistrados integrantes del poder judicial. - Además, el art. 9 CE consagra, con carácter general, el principio de responsabilidad de todos los poderes públicos. - Es preciso distinguir varios aspectos dentro de este principio de responsabilidad: 1) La responsabilidad política derivada del funcionamiento de la Administración de Justicia, que ha de imputarse, con carácter general, al Gobierno y, más específicamente, al Ministerio de Justicia. 2) La responsabilidad patrimonial del Estado por error judicial o funcionamiento anormal de la Administración de Justicia, de forma que los daños así causados darán derecho a una indemnización a cargo del Estado (art. 121 CE: “Los daños causados por error judicial, así como los que sean consecuencia del funcionamiento anormal de la Administración de Justicia, darán derecho a una indemnización a cargo del Estado, conforme a la ley”). 3) La responsabilidad personal de jueces y magistrados, que constituye la contrapartida a la independencia judicial siendo, por tanto, independencia y responsabilidad judicial dos categorías o atributos del inseparables e interdependientes. 3 –› Esta responsabilidad personal podrá ser penal, civil o disciplinaria. VI. VII. VIII. IX. X. PRINCIPIO DE PUBLICIDAD (Art. 120.1 y 3 CE). -“Las actuaciones judiciales serán públicas, con las excepciones que prevean las leyes de procedimiento (LEC, LECRIM,…)”. -“Las sentencias serán siempre motivadas y se pronunciarán en audiencia pública”. PRINCIPIO DE ORALIDAD (Art. 120.2 CE). -“El procedimiento será predominantemente oral, sobre todo en materia criminal”. * Los principios de publicidad y oralidad permiten al público constatar de hecho la legalidad del proceso. PRINCIPIO DE OBLIGATORIEDAD DE LAS DECISIONES JUDICIALES Y DEBER DE COLABORACIÓN CON LA JUSTICIA (Art. 118 CE). -“Es obligado cumplir las sentencias y demás resoluciones firmes de los Jueces y Tribunales, así como prestar la colaboración requerida por éstos en el curso del proceso y en la ejecución de lo resuelto”. PRINCIPIO DE GRATUIDAD DE LA JUSTICIA (Art. 119 CE). -“La justicia será gratuita cuando así lo disponga la ley y, en todo caso, respecto de quienes acrediten insuficiencia de recursos para litigar”. PRINCIPIO DE PARTICIPACIÓN DE LOS CIUDADANOS EN LA ADMINISTRACIÓN DE JUSTICIA (Art. 125 CE). En general, el principio de participación se manifiesta a través de tres vías: 1.- El libre acceso a los tribunales, para realizar peticiones a los órganos del Estado específicos. 2.- El ejercicio de la acción popular. 3.- y la participación en la Administración de Justicia mediante la institución del Jurado. -“Los ciudadanos podrán ejercer la acción popular y participar en la Administración de Justicia mediante la institución del Jurado, en la forma y con respecto a aquellos procesos penales que la ley determine, así como en los Tribunales consuetudinarios y tradicionales (Tribunal de las aguas de Valencia, Consejo de hombres buenos de Murcia,…)”. 4