Análisis del prólogo y del tratado 1º de La genealogía de la moral PRÓLOGO. SECCIONES 1 A 3: ANUNCIO DEL CONTENIDO DE LA OBRA Sección 1: “nosotros mismos somos desconocidos para nosotros mismos” Desconocemos ciertas verdades sobre nosotros mismos. Estas verdades no las hemos buscado nunca. Sección 2: anuncio del tema central de la obra Tema central de la obra: desvelar el origen (la genealogía) de nuestros conceptos morales (lo bueno y lo malo) Vinculación de La genealogía de la moral con obras previas del autor (Humano, demasiado humano) Sección 3: avance de algunas tesis El origen del mal no está fuera (o detrás) del mundo sino en él. El hombre ha inventado los conceptos de bueno y malo. Importancia de la investigación histórica y filológica para desvelar el origen de estos conceptos. ¿Qué valor tienen los conceptos morales? ¿Manifiestan la voluntad de vivir, la confianza en el futuro o todo lo contrario? PRÓLOGO. SECCIONES 4 Y 5: PRECURSORES E INFLUENCIAS SOBRE NIETZSCHE Sección 4: La influencia de Paul Reé La obra El origen de los sentimientos morales de Paul Reé, aún defendiendo un origen de la moral opuesto al del propio Nietzsche, ejerce influencia sobre éste. Sección 5: La influencia de Schopenhauer Maestro de Nietzsche, Schopenhauer defiende valores morales contrarios a la vida. La conclusión de Schopenhauer es su pesimismo radical, influenciado de budismo: negación de la vida, nihilismo. PRÓLOGO. SECCIONES 6 A 8: RECAPITULACIÓN Sección 6: necesidad de una crítica de los valores morales La crítica debe basarse en el conocimiento de las condiciones históricas en las que surgen los valores morales (p.ej. la compasión) Sospecha: ¿y si los valores morales como lo bueno fuesen un retroceso, un lastre para la vida? Sección 7: originalidad del planteamiento La historia de la moral que propone Nietzsche no tiene precedentes. Sección 8: advertencia al lector Dificultad del estilo aforístico (p.ej. Así habló Zaratustra) TRATADO 1º. SECCIONES 1 A 3: CRÍTICA A LA TEORÍA HUMEANA DE LOS SENTIMIENTOS MORALES Sección 1: Exposición de la teoría de origen humeano de los sentimientos morales Elementos de la explicación: el hábito, la casual asociación de ideas, el reflejo automático de buscar el placer y huir del dolor y finalmente el olvido de esas asociaciones iniciales. Ver la explicación de Hume del origen de la moral y la explicación de Mill de por qué la virtud es un fin en sí mismo. Críticas recibidas por esta explicación: desde la religión, desde el rechazo al materialismo. Sección 2: Crítica a esta teoría por parte de Nietzsche Necesidad de una explicación histórica. La filosofía adolece de falta de consideración histórica. El olvido de la asociación entre placer y virtud es una explicación falsa. La explicación utilitarista (utilidad, asociación y hábito) pone el origen de la moral en un lugar equivocado: es bueno aquello que los poderosos llaman bueno. Los poderosos (los señores) dominan el lenguaje y llaman buenos a los valores aristocráticos (el valor, la nobleza, la valentía). Igualmente, llaman malo a lo vulgar, lo plebeyo. Sección 3: La alternativa de Herbert Spencer: bueno = útil para la supervivencia La explicación de Spencer del origen de la moral es plausible desde el punto de vista psicológico, pero es históricamente falsa. SECCIONES 4 Y 5: ANÁLISIS ETIMOLÓGICO DE LOS TÉRMINOS MORALES Sección 4: Etimología de las palabras „bueno‟ y „malo‟ Vinculación de „bueno‟ con lo noble, lo aristocrático, con el estamento de los poderosos. Y viceversa, vinculación de „malo‟ con los plebeyos, los sometidos. ¿Por qué esta vinculación no ha sido revelada antes? Por el prejuicio democrático que impregna todas las ciencias y que deja a un lado las explicaciones que resaltan las desigualdades entre los hombres. Sección 5: Dominio del lenguaje por parte de los poderosos Los poderosos usan su poder para llamarse a sí mismos “poderosos” y “señores”. Pero también se apropian de rasgos morales como “los veraces”, la valentía y la nobleza de carácter. El lenguaje señala también las oposiciones raciales: cada raza se valora por encima del resto y se cree elegida por los dioses. SECCIONES 6 A 9: INFLUENCIA DE LA RELIGIÓN SOBRE LOS VALORES MORALES Sección 6: Surgimiento de la casta sacerdotal y de sus valores distintivos La casta dominante es también la que inicialmente domina la religión. Por ello los valores religiosos “puro” e “impuro” tienen relación inicial con los valores de los poderosos. Sin embargo, los valores religiosos pronto se separan de los valores aristocráticos y llegan a oponerse a ellos: ayuno, continencia, moderación: renuncia a los impulsos de la vida. El budismo es la expresión religiosa más clara de la renuncia a la vida que promueven los valores religiosos. Sección 7: El judaísmo Los valores sacerdotales llegan a oponerse a los valores aristocráticos. Esto se muestra claramente en la religión judía: su valores son inversos a los aristocráticos. La transvaloración moral hecha por los judíos es una venganza espiritual sobre sus dominadores políticos: es la rebelión de los esclavos sobre sus amos. Sección 8: El cristianismo La inversión de los valores iniciada por el judaísmo se culmina con el cristianismo: del odio al amor cristiano, última meta de la venganza sobre los valores aristocráticos. Sección 9: Triunfo de la moral religiosa sobre la aristocrática Los valores de la religión son los valores de la mayoría, del pueblo en oposición a los poderosos. Incluso entre los librepensadores que rechazan a la Iglesia han triunfado los valores religiosos y “democráticos”. SECCIONES 10 A 12: LA MORAL DE AMO Y LA DEL ESCLAVO Sección 10: El resentimiento, motor de la moral de los esclavos Origen de la moral noble: el impulso de vida, la voluntad de poder. Es una moral optimista, afirmativa, autosuficiente, que busca la felicidad en este mundo confiando en las propias fuerzas. Origen de la moral esclava: el resentimiento contra los poderosos. Es una moral pesimista, negativa y reactiva que busca la felicidad en otro mundo porque el hombre es impotente para lograrla en éste. Sección 11: Malo y malvado En la moral noble, lo bueno es lo que primero se define y lo malo es su opuesto. En la moral del resentimiento, lo primero que se define es lo malvado pues es una moral reactiva, lo malvado es lo que antes era bueno en la moral aristocrática. Necesidad de una vuelta a los valores antiguos, los cantados por Homero: análisis de la tragedia griega. Sección 12: El nihilismo religioso Resultado final de la moral religiosa: negación de la vida, destrucción del impulso de vida, de la voluntad de vivir. SECCIÓN 13: EL ENGAÑO DEL LENGUAJE Sección 13: Definición de lo bueno en la moral religiosa: la fortaleza “interior” frente a la fortaleza exteriorizada de la moral noble. Mediante el lenguaje, creamos un “sujeto” por detrás de la acción. Distinguimos entre ser y actuar. Se puede ser fuerte y no actuar como los fuertes. Los filósofos griegos crearon un mundo ideal de esencias y conceptos. El alma ha sido la invención de mayor éxito. SECCIONES 14 Y 15: LA MORAL CRISTIANA Sección 14: Revisión de los valores del cristianismo Se han tornado en “buenos” valores como la mansedumbre, la debilidad, la humildad, la sumisión, la obediencia, el perdón, etc. La justicia es interpretada como la victoria de Dios sobre los hombres. En el juicio final se muestra el resentimiento y el deseo de venganza que está en el origen de toda la moral cristiana. Sección 15: Resentimiento y venganza El resentimiento y el deseo de venganza se demuestran en cómo es concebido el paraíso cristiano: textos de Tomás de Aquino y Tertuliano. SECCIÓN 16: UNA NUEVA VISIÓN DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD Sección 16: La lucha entre los valores morales aristocráticos y los religiosos se ha desarrollado a lo largo de la Historia. Judea ha vencido a Roma y durante la Edad Media el Cristianismo se impuso como la moral dominante en Europa. El Renacimiento supuso un breve paréntesis pero la Reforma anuló el intento por retomar los valores no cristianos de la antigüedad clásica. Los últimos restos de la nobleza de los siglos XVII y XVIII sucumbieron en la revolución francesa, animada por el resentimiento popular contra los poderosos. En el siglo XIX, los valores “democráticos” y “plebeyos” son defendidos por socialistas, liberales y utilitaristas. Aunque han rechazado el cristianismo (la muerte de Dios), los valores cristianos siguen vigentes en estas nuevas ideologías. Sección 17: Conclusiones