Historia de la Tierra Comienzos El nacimiento de la Tierra, hace unos 4600 millones de años, se produjo a la vez que la formación de todo el sistema solar. Suponemos, aunque no es fácil saber como ocurrió, que masas de unos pocos kilómetros de diámetro llamadas planetoides, fueron chocando entre sí hasta formar, al cabo de unos cientos de millones de años un planeta del tamaño del actual. Su superficie estaba fundida y rodeada por una atmósfera formada por las grandes masas de vapor de agua y otros gases liberados por las rocas al colisionar. Al cabo de unas decenas de millones de años el planeta se había enfriado lo suficiente como para que gran parte del vapor se hubiera licuado formando los océanos. Los gases predominantes en la atmósfera de esa época eran el vapor de agua, el dióxido de carbono y el nitrógeno junto a hidrógeno, y monóxido de carbono que originaban un ambiente ligeramente reductor. La vida Hace al menos 3600 millones de años, en un océano primitivo que suponemos cargado con distintos tipos de moléculas orgánicas, aparecerían los primeros seres vivos, similares a las actuales bacterias. Aparecieron después organismos capaces de hacer fotosíntesis que comenzaron a producir oxígeno que iba a la atmósfera. Para hace unos 1000 millones de años la atmósfera ya era similar a la actual. Oxígeno y nitrógeno eran sus principales componentes y de reductora había pasado a oxidante. Hace unos 700 millones de años se aceleró el ritmo de aparición de nuevos tipos de vida. Todos los grandes grupos de organismos que ahora conocemos: moluscos, artrópodos, equinodermos, vertebrados, plantas diversas, etc., fueron apareciendo en unos pocos cientos de millones de años. Durante el Paleozoico los seres vivos dejan de estar limitados a la vida acuática y conquistan el medio terrestre y aéreo. Los ciclos geológicos Cuando se compara la Tierra con otros planetas vecinos como Marte o Venus se observan grandes diferencias, aunque el proceso de formación ha sido similar. Mientras en la Luna o en esos planetas se siguen observando claramente miles de cráteres originados por las gigantescas colisiones que los formaron, el aspecto de la Tierra es totalmente distinto. Hay dos grandes procesos que han modelado la superficie de nuestro planeta y que han tenido una decisiva importancia en la evolución y distribución de la vida: la existencia, por una parte, de una atmósfera y una hidrosfera ha provocado un continuo proceso de erosión, transporte y sedimentación de las rocas, en lo que se suele llamar el ciclo geomorfológico; por otra parte, durante miles de millones de años se ha ido sucediendo un lento pero continuo desplazamiento de las placas que forman la parte externa del planeta, originando la denominada tectónica de placas. Los continentes se unen entre sí o se fragmentan, los océanos se abren, se levantan montañas, se modifica el clima, influyendo todo esto, de forma muy importante en la evolución y desarrollo de los seres vivos. Historia de la Vida La idea de la evolución de las especies da un sentido a los grupos establecidos en las clasificaciones: las especies se han ido diversificando mientras iban derivando unas de otras. Algunas se transforman y dan origen a varias especies nuevas; otras siguen inalterables durante mucho tiempo y luego, de repente, desaparecen. Las grandes líneas de le Evolución La evolución se desarrolla desde millones de años. Hay que abandonar la escala humana y colocarse en la extraterrestre. Desde la formación y enfriamiento, hace 4.500 millones de años, la corteza se ha deformado, mientras que la vida seguía su evolución. Las placas continentales se desplazaron, y formaron nuevos océanos y levantaron montañas. Hace 3.800 millones de años las rocas sedimentarias más antiguas fueron encontradas en Groenlandia, se cree que se han detectado en ellas huellas de materia orgánica. La vida, pues, estaría prácticamente desde la formación de la Tierra. La primera forma de vida fue unicelular. Todos los organismos están formados por células, unidad fundamental del mundo vivo, la herencia se basa en la molécula de ADN. La célula. La más simple, es la que forma la estructura orgánica de las bacterias (procariotas) en las que el ADN se baña directamente en la sustancia celular (citoplasma). Hace 3.500 millones de años al mundo era muy diferente del que conocemos. No había oxígeno libre en la atmósfera. Las radiaciones ultravioletas del Sol daban directamente a la superficie de la Tierra. Los primeros seres vivos se refugiaron a cierta profundidad del inmenso océano. Allí en las profundidades unas bacterias microscópica inventaron la fotosíntesis.(O quizás primero la quimiosíntesis que derivó en Fotosíntesis al poder utilizarse la energía radiante del Sol). Todo ello produjo un cambio drástico en la atmósfera primitiva que pasó de ser reductora a oxidante. Los seres vivos de aquellos tiempos tuvieron que acomodarse a la nueva atmósfera o sucumbir. Durante más de mil millones de años, esta actividad transformó la faz de la Tierra. Al cabo de 1.500 millones de años, apareció un nuevo tipo de célula: la “eucariota”. La célula eucariota posee un núcleo que contiene el ADN empaquetado en los cromosomas y separado del citoplasma por una doble membrana ( también hay ADN en mitocondrias, cloroplastos, etc.) Probablemente se formó por una íntima asociación (simbiosis) de varias procariotas diferentes. Esta célula desarrolla los mecanismos más complejos de la reproducción sexual, como la Meiosis que dan una aceleración formidable a la evolución. Las eucariotas estarán en el origen de los organismos pluricelulares que aparecieron millones de años más tarde. Los primeros pluricelulares Se encontraron huellas de organismos pluricelulares de unos 700 millones de años, en Australia. Son organismos blandos, como las esponjas, las medusas o los gusanos planos. Estos organismos están formados porcélulas con distintas funciones, como la nutrición, la defensa, la locomoción o la reproducción.(Pero estos organismos, aunque sean los primeros fosilizados, son muy complejos y presuponen una evolución, desde formas mucho más simples, muy dilatada en el tiempo). Animales con esqueleto externo Estos animales aparecieron hace ya 600 millones de años. Marcaron el comienzo de los tiempos fosilíferos, llamado el Cámbrico. Se encuentran ya todo tipo de conchas o caparazones, como por ejemplo los trilobites ya desaparecidos, los erizos de mar y los crustáceos; animales artrópodos cubiertos por un exoesqueleto y principalmente acuáticos. Los primeros cordados Aparecieron los primeros predadores, como los cefalópodos, por ejemplo el nautilus y otros (Invertebrados). Se encuentran animales de simetría bilateral, los cordados, que tenían un tronco flexible en el interior de su cuerpo. Estos fueron en el origen de los vertebrados, en los que la “cuerda” fue sustituida por vértebras. Los primeros vertebrados fueron una especie de peces que tenían la cabeza recubierta por un caparazón óseo y cuya boca no tenía maxilar.(Peces sin mandíbula) Se encontraron una multitud de formas de las que hoy solo quedan algunas especies, como la lamprea. Hace 420 millones de años, la aparición de los peces con maxilar marcó el fin de su reinado. La salida de las aguas Algunos de esos animales se parecían a los tiburones actuales; otros se encontraron en las aguas dulces. Otros poseían una vejiga natatoria la cual les permitía nadar rápidamente en vertical a diferentes profundidades, entre esos peces algunos se aventuraron hacia tierra firme empujados por la sequía de los mares o bien atraídos por el alimento fácil que eran los insectos que allí abundaban. Los artrópodos y otros invertebrados ya habían ganado la tierra firme. Plantas primitivas y primeros animales terrestres Los musgos y líquenes ya colonizaban la tierra firme desde hace mucho tiempo. Fueron el origen de todo el mundo vegetal: helechos, coníferas y más tarde, plantas con flor. Diferentes invertebrados se fueron saliendo del agua como los escorpiones o ciempiés, después una multitud de arañas o insectos, como las libélulas. El origen de los anfibios fue el Ichthyostega (el fósil conocido del que se supone fué el ancestro de los anfibios) hace ya unos 350 millones de años. Fueron los dueños de la Tierra durante 40 millones de años, existieron bajo una multitud de formas bien distintas a las de las ranas, que no aparecieron hasta 100 millones de años después. Pero los anfibios seguían vinculados al mundo acuático ya que necesitaban mantener su piel húmeda, y les era necesario para su reproducción, pues la puesta de sus huevos deben hacerla en media acuoso. Musgos del Devónico "Eryops" Anfibio del Pérmico Aparición de los reptiles Los reptiles fueron los primeros vertebrados que se alejaron de las orillas. Algunos de esos reptiles avanzarían para originar unos animales cuyas patas ya no estaban a los lados como la de los cocodrilos o tortugas sino debajo de su cuerpo que dieron lugar a los Dinosaurios. Los reptiles derivan directamente de los Anfibios; es cuando se sufre un cambio evolutivo; se "inventa" evolutivamente hablando, el "huevo reptiliano", protegido por unas cubiertas que ya no le hacen depender del agua para su desarrollo. Es la conquista definitiva del medio terrestre. Los dinosaurios Su novedad morfológica les permitió reinar prácticamente en toda la tierra, mares y aires durante más de cien millones de años. Podían haber muchas clases de dinosaurios: Podían ser herbívoros o carnívoros, muy pequeños o muy grandes. Algunos eran reptiles volantes y podían tener envergaduras de decenas de metros. Todo ello desaparecieron hace unos 65 millones de años, al mismo tiempo que otras especies vegetales y animales. Se han lanzado varias hipótesis para explicar su extinción: crisis solar, caída de meteoros… La desaparición de los dinosaurios se extiende a lo largo de varios millones de años; pudo haberse originado por el efecto de un amplio cambio climático. Los mamíferos y Aves Son unos animales que mantienen sus cuerpos a temperatura constante y alimentan a sus crías con leche. Quizás aparecieron hace mucho tiempo, puede que en la misma época de los dinosaurios. Estos animales ocuparon todos los hábitats disponibles en la Tierra; también se aventuraron en el mar (delfines, ballenas y focas) pero pocos habían en el aire (murciélagos). Las Aves descendientes directos de determinados dinosaurios, también aprovecharon las desaparición de sus antepasados, algunas volvieron a la tierra, como los avestruces y otros se adaptaron al medio marino, un buen ejemplo de ellos serían los pingüinos o los pájaros bobos. La viviparidad de los mamíferos se fue integrando progresivamente. Los primeros mamíferos eran “no terios”: todavía ponían huevos (como el ornitorrinco). Los mamíferos “euterios” aquellos que traen al mundo a sus crías prácticamente criadas. Casi a la vez aparecieron los marsupiales cuya gestación ha de ir seguida de un período de crecimiento durante el cual la cría permanece pegada a su madre dentro de una bolsa. Las primeras formas de educación El vínculo entre la madre y sus hijos durante la lactancia ha creado las condiciones para ciertas formas de educación. Estas interacciones con los padres son muy necesarias para sus hijos; ya que si no, no sobrevivirían. Los mamíferos primates darían origen al hombre. El origen del Hombre El hombre moderno cuya denominación científica es la de "Homo Sapiens Sapiens" pertenece a los primates, junto con los monos y está emparentado también con otras especies (lemúridos y társidos). La rama que llevaría a la aparición del hombre se fue estableciendo a lo largo de los 60 millones de años. Parentesco entre el hombre y el mono Está claro que los chimpancés y los gorilas son nuestros primos más cercanos en el reino animal.(Tenemos hasta un 97 a 98% del código genético igual). La semejanza morfológica entre el gorila y el chimpancé nos llevaría a situarlos juntos en un grupo distinto al nuestro. Compartirían una rama común que se abría separado de la rama que originó al hombre mucho antes que a estas dos especies. Sin embargo los análisis bioquímicos y genéticos revelaron que sus proteínas eran similares en un 99%. Esto significa que estamos más vinculados al chimpancé que a los gorilas. Diferencias anatómicas Hay que admitir la existencia de grandes diferencias anatómicas entre el hombre y los monos, básicamente están vinculadas a unos modos de locomoción distintos. Los monos se desplaza a cuatro patas (o suspendidos de las ramas), mientras que el hombre se desplaza totalmente erguido por lo que esto permitirá un aumento del volumen de cerebro y a poder disponer de sus extremidades superiores para manipular en vez de andar. Es el andar erguido, poder disponer de las manos y tener un cerebro mayor lo que ha dado al hombre su inteligencia, desde un punto anatómico-funcional-evolutivo. Esto lleva a que la inteligencia del hombre sea mucho mayor que la de los monos. La evolución del hombre Los numerosos ejemplos encontrados pueden clasificarse en diferentes especies, estos se encontraron en el África oriental. "Australopithecus afarensis". Es el resto más antiguo que se ha encontrado. De pequeña estatura, mandíbula prominente y su capacidad craneana era de 50 centímetros cúbicos. La primera especie de género Homo, su cráneo tenía una capacidad de 800 centímetros cúbicos. En su medio ambiente se encontraron numerosas piedras talladas. "Homo erectus". Su talla era media su capacidad craneana era de 1000 centímetros cúbicos. Dominó el fuego, desarrollo la industria de piedras talladas con dos caras (bifaz). "Homo sapiens neanderthalensis" (hombre de Neanderthal). Que se extendió por Europa, sus arcos supraciliares eran prominentes, el cráneo bajo y la frente huidiza; habitaba en grutas y enterraban a sus muertos. Enseguida fue sustituido por el "Homo Sapiens-Sapiens". Que también como el anteriormente mencionado fue encontrado en Europa, es el hombre moderno o de Cromañón, su capacidad craneana era aproximadamente de unos 2000 centímetros cúbicos; dominó el lenguaje. El inicio de la modernidad La invención de la agricultura inauguró el Neolítico y después la historia humana que conocemos. Se multiplicaron las formas de pensar y se desarrollaron; apareció la escritura; a partir de estos nuestras historias: las guerras, los saberes mitológicos o científicos... desde entonces la tecnología avanzó muchísimo. En algunos miles de años, y según una aceleración innegable, el hombre ha provocado un cambio radical en los sistemas ecológicos. A partir de ahora somos responsables tanto de nuestro propio futuro como del planeta.