Oraciones interrogativas Suelen denominarse totales las oraciones interrogativas en las que la pregunta se refiere a la acción del verbo; parciales, cuando se pregunta acerca de cualquier elemento de la frase, sea sujeto o complementos. El modo del verbo será el indicativo o el subjuntivo potencial o irreal. Para expresar las interrogativas directas totales pueden utilizarse algunas partículas que, al mismo tiempo que marcan el carácter interrogativo de la frase, ya que en la Antigüedad no había un empleo sistemático de la puntuación, presuponen algún tipo de respuesta. -ne ? : enclítica que se adjunta al verbo o a la palabra que se quiera destacar en la pregunta. No comporta sentido previo de la respuesta. nonne ? : la negación más la enclítica precedente. Presupone respuesta afirmativa. num ? : Presupone respuesta negativa. an ? : Interrogación retórica o irónica. en ? : Presupone respuesta negativa; matiz apremiante. ecquis ? numquis ? : Formadas con el pronombre indefinido: ¿es que alguien...? utrum, -ne... an..., annon, necne ? : Interrogativas dobles que presentan una disyuntiva: ¿... o no? Las interrogativas parciales van expresadas por adjetivos, pronombres o adverbios interrogativos de todo tipo: quis quién, quid qué, uter cuál de los dos, qualis cuál, quantus cuánto, quotus en cuál orden, cuius de quién, quisnam quién, pues, ubi dónde, quo adónde, unde de dónde, qua por dónde, quare por qué motivo, cur por qué, ut cómo, quomodo de qué manera, qui (abl. sg.) cómo, quando cuándo, quamdiu por cuánto tiempo, etc... Se llaman interrogativas indirectas cuando la frase en cuestión se hace depender de un verbo declarativo (cf. Sintaxis del infinitivo) o forma nominal que encierra idea de pregunta, conocimiento, ignorancia o duda. La subordinada interrogativa es un tipo de proposición subordinada sustantiva. El verbo de estas subordinadas interrogativas es siempre el subjuntivo. La razón de esta generalización está en la naturaleza potencial o irreal de la acción por la que se pregunta (cf. Modalidad de la frase y modos verbales). También las interrogativas indirectas pueden ser totales o parciales. Las interrogativas indirectas parciales van introducidas por los mismos adjetivos, pronombres o adverbios que las interrogativas independientes. Los tiempos de subjuntivo en las subordinadas, según expresen simultaneidad, anterioridad o posterioridad, se ajustan al tiempo del verbo de que depende de acuerdo con el siguiente esquema de correspondencia de tiempos (consecutio tempŏrum): en la principal presente y futuro, en la subordinada presente, imperfecto o presente perifrástico; imperfecto, perfecto y pluscuamperfecto, en la subordinada perfecto, pluscuamperfecto o imperfecto perifrástico: quaerit (quaeret) quid dicas, quid dixeris, quid dicturus sis pregunta (-rá) qué dices, qué has dicho, qué vas a decir. quaerebat (quaesivit, quaesiverat) quid diceres, quid dixisses, quid dicturus esses preguntaba (-tó, había pr.) qué decías, qué habías dicho, qué ibas a decir. Las interrogativas indirectas totales van introducidas por partículas y pueden ser simples, si sólo introducen una proposición subordinada, y compuestas, dobles o disyuntivas, cuando van enlazadas una o más alternativas, entre las que pueden incluirse también las del tipo de las parciales introducidas por cualquiera de los pronombres o adverbios interrogativos (cf. infra ejemplo 1). 1 Las partículas empleadas en las interrogativas indirectas simples [trad.: (preguntó) si...] son las mismas de las oraciones principales, -ne, num, an, nonne, pero sin los matices ya expuestos; también la conjunción si sobre todo cuando depende de verbos declarativos con significado de “esperar, aguardar, admirar” (cf. Conjunciones polivalentes), aunque también hay algunos ejemplos en latín clásico con verbos interrogativos, tal vez por variación estilística: et primum quaesivit ab eo, liceretne sibi ac suis vivere; cum praetor victurum respondisset, quaesivit iterum, si cum Romanis militare liceret Liv. 40.49.6 y primero preguntó a éste si se le permitiría vivir a él y a los suyos; tras responderle el pretor que seguiría con vida, preguntó de nuevo si le dejarían militar entre los romanos. Es propio del latín vulgar el uso de si..., seu¸ an, necne..., en las interrogativas indirectas. Las partículas de las interrogativas indirectas compuestas pueden presentar en la primera subordinada las conjunciones utrum, -ne, an, o ninguna, [trad.: (preguntó) si...], y en la segunda y sucesivas: an, -ne ... o.., annon, necne: ... o no, sin que se pueda determinar en ningún caso una combinación fija de estas partículas. La forma normal de una disyuntiva sería la representada por la partícula utrum, procedente del indefinido (cf.) con el infijo de dualidad -ter-, y la alternativa an, pero se pueden encontrar desde secuencias redundantes, utrumne..., an... (1), hasta la omisión de la partícula que introduce la primera interrogativa (2), o la repetición de la misma partícula, -ne..., -ne (3). (1) agitamus utrumne divitiis homines an sint virtute beati, quidve ad amicitias, usus rectumne, trahat nos et quae sit natura boni summumque quid eius. Hor. serm. 2.6.74 discutimos si por las riquezas o por la virtud son felices los hombres, qué nos lleva a la amistad, el provecho o la honradez, y cuál es la naturaleza del bien y cuál es su plenitud. (2) dubitat, superari an vincere malit Ov. met. 10.610 y duda si prefiere ser vencida o ganar. (3) neque interesse ipsosne interficiant impedimentisne exuant, quibus amissis bellum geri non possit Caes. Gall. 7.14.8 que no importaba si (que) los mataban (-ran) o los despojaban (-ran) del utillaje con cuya pérdida no se podía hacer la guerra. Puede dificultar la comprensión de las interrogativas indirectas la omisión de alguno de sus elementos, pero incluso en las frases más concisas se los pueden reconocer, es decir, el vb. subordinado en subj., alguna de las conjunciones, pronombres o adverbios interrogativos, en dependencia de una expresión de conocimiento, ignorancia o duda: Saepe manus operi temptantes admovet, an sit corpus, an illud ebur, nec adhuc ebur esse fatetur Ov. met. 10.255 a menudo acerca sus manos a su obra para tantear si es un cuerpo o es marfil, y aún no admite que es marfil. En este ejemplo la expresión interrogativa regente está representada por el part. temptantes, de que dependen la indirecta compuesta an sit..., an. En los dos que siguen, también del tipo de indirecta total doble pero con una sola partícula interrogativa, sus verbos regentes son declarativos: nec dicere posses, laude pedum formaene bono praestantior esset Ov. met. 10.563 y no se podría decir si era más sobresaliente en la gloria de sus pies o en el bien de la hermosura. Amicum an nomen habeas aperit calamitas Publ. Syr. la desgracia revela si se tiene un amigo de verdad o sólo de nombre. En éste otro se prescinde del vb. subordinado, pero es inequívoca la presencia del adjetivo interrogativo: Hippomenen adii docuique, quis usus in illis. Ov. met. 10.651 abordé a Hipómenes y le enseñé qué utilidad (había) en ellas. Aquí la interrogativa indirecta depende de un complemento CC: alter in ambiguo est, an sit comprensus Ov. met. 1.537 el otro está en la duda de si será atrapado. 2