Siglo nuevo Ciertos sectores geográficos, como les. Los esfuerzos se orientan a atennuestro país, se han convertido en esder las consecuencias y no las causas, cenarios de la violencia que ejercen los que en gran medida son una misma: grupos de delincuencia organizada en la ya mencionada pérdida de valores. su disputa por el control de las áreas para el narcotráfico. Los ciudadanos Las manos que moverán al mundo temen por su seguridad y se agudiza Se habla de que el 2012 implicará camsu sentido de supervivencia, lo cual se bios sustanciales en la manera de hamanifiesta en actos de desconfianza y cer política. Ya en los recientes años hostilidad hacia quienes les rodean. hemos visto que algunas naciones Otros males, como la prostitución transforman su estructura pública en infantil, se han agravado. A inicios de respuesta a las demandas de su socie2011 la agencia Notimex hizo público dad. Como ejemplo podemos mencioque según el DIF y la UNICEF tan sónar el aumento en el número de mujelo en México la cifra de niños involures presidentas a lo ancho del planeta, crados en tan aberrante situación aso el simple posicionamiento del sexo cendía a 45 mil. El problema es munfemenino en cargos que habían estado dial y se acentúa en sitios como Taireservados a los varones. landia, llamada “la capital de la prosÉstas y otras innovaciones son ititución infantil”. gualmente necesarias en México, soEstudios recientes apuntan a la bre todo si lo que se busca es recudesatención social desde los perar la confianza y credibidiferentes ámbitos como la lidad de la ciudadanía. Peraíz de toda esta descomro nuestra sociedad aún Damnificados del tsunami en posición. Parte del oritiene mucho por recoDichato, Chile, gen radica en el enfoque rrer antes de que una se enfrentan a erróneo desde el cual se mujer logre encabezar policías en protesta ven los conflictos sociael gobierno, pues cultupor la falta Foto: Ariel Marinkovic de ayuda. 2010. 36 • Sn ralmente todavía nos cuesta trabajo romper con la imagen en la que un hombre es quien ‘necesita’ llevar las riendas del país. También enfrentamos la necesidad de abrir el ejercicio de la política a los ciudadanos sin partido, lo cual de alguna forma sería importante para que la población vuelva a confiar en las personas que ocupan el poder. La ‘partidocracia’ ha dejado un desencanto. Hay quienes podrían ser muy valiosos en la administración pública pero al no contar con una estructura y un equipo que les otorgue determinado partido político, se ven impedidos de participar con otra visión y compromiso. Parte del mismo ejercicio político que encaramos son los distractores que ‘oportunamente’ se han formulado en instantes clave de la Historia y que de cierta manera consiguen incidir en momentos coyunturales. Esas cortinas de humo (como el chupacabras o los balseros) han confirmado que los mexicanos tendemos a darle más importancia a lo trivial, por la vi-