La muerte obligatoria Emilio Díaz Valcárcel En: Cuentos: An Anthology of Short Stories from Puerto Rico New York: Schocken Books, 1978 Compartir cuentos y enriquecer la vida Un proyecto en las bibliotecas patrocinado por el National Endowment for the Humanities TEXTO DEL CUENTO PREPARACIÓN DEL CUENTO Introducción Primeras impresiones del coordinador sobre el cuento Aplicación del método: las cuatro categorías Poética Contrastes Sombras Temas Notas del coordinador LA SESIÓN: EL ENCUENTRO CON LOS PARTICIPANTES Presentación del cuento al grupo Lectura en voz alta Algunas observaciones sobre el autor, país, etc. Vocabulario Alternativas para la discusión Ejemplos de preguntas sobre el texto Notas del coordinador después de la sesión SUGERENCIAS PARA FUTURAS LECTURAS Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel 5 10 15 20 25 La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel 5 10 15 20 25 30 35 La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel 5 10 15 20 25 30 35 La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel 5 10 15 20 25 30 La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel 5 10 15 20 25 30 La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel PREPARACIÓN DEL CUENTO Introducción Ya su título, “La muerte obligatoria”, provoca sospechas en los participantes de que este cuento algo extraño se trae entre manos. El autor puertorriqueño Emilio Díaz Valcárcel da pie en un relato con algunos regionalismos, pero muy accesible a todas las culturas y edades – especialmente por su humor – a discusiones sobre varias tradiciones funerarias e historias de velorios. La historia de un hijo desagradecido que quiere enterrar a su madre antes de tiempo, y hasta manda a hacer la caja para enterrarla (¡aquí el humor se hace a veces negro!) trae interesantes diálogos. Al mismo tiempo, el ambiente de pueblo pequeño dominado por el machismo, las murmuraciones, el juego y las cantinas, nos deja un poco abrumados frente a las mujeres, el niño y la abuela moribunda. El estilo de Díaz Valcárcel recurre, como hemos apuntado, a los puertorriqueñismos y a los detalles de una vida pueblerina de tiempos pre-modernos, a la vez que describe sentimientos que hacen correr la imaginación de los participantes. Es importante subrayar los contrastes, invitar a los participantes a comentar la poética relativa al niño, su tío y la abuela. El cuento ocurre en Puerto Rico, pero su impacto emocional es mucho más amplio Se planteará la idea de si el autor ha tratado la muerte de forma satírica o cómica, si el cuento es serio o triste. Y habrá muchas historias de muertos y muchas opiniones. De todas las historias de velorios que contaron los participantes que leyeron “La muerte obligatoria” en mis sesiones, ninguna fue tan extraña como la de una participante que contó que ella fue al velorio de su abuela pero la abuela no murió porque ella no quería morirse todavía y tuvieron que guardar la caja en el altillo para el próximo que fuera a morir. La participante era de Honduras y ¡Emilio Díaz Valcárcel nunca había estado por allí!.... ¡Así se entrelazan la gente y los cuentos!... La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel Primeras impresiones del coordinador sobre el cuento Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel - 1- Aplicación del método: las cuatro categorías Las notas que siguen son sólo sugerencias de cómo estudiar el texto. Después de leerlo, es importante que cada coordinador trabaje el texto por sí mismo utilizando las diversas categorías que integran nuestro método: poética, contrastes, sombras, temas. Luego debe formular preguntas que le sirvan de marco para la discusión utilizando nuestras sugerencias. Poética A. La economía de la escritura 1. La primera oración del cuento es: “Esta mañana recibimos a tío Segundo” (página 158, línea 1), y la dice un niño. Nos toca descifrar qué y cuánto significa tío Segundo para este niño. El autor nos lleva a través de la palabra y los ojos del pequeño desde el aeropuerto inmediatamente al barrio. Entramos sin dificultad en un mundo en donde nos parece conocer a todos los presentes. Los personajes no nos hablan directamente. y sin embargo casi vemos a cada persona haciendo su papel. Sentimos que los conocemos, que se han expresado. Es como si hubiéramos entrado con el niño en su casa, en el velorio, o como si de pronto estuviéramos viéndolo todo en una obra teatral o en la pantalla de un cine de barrio. ¿Y cómo hace esto el escritor? a) El uso del lenguaje El niño ha interiorizado el lenguaje del pueblo. Nos cuenta el cuento como se habla en ese barrio. Nosotros vemos como ve el niño y sentimos como siente el niño y el niño es como el pueblo porque usa las expresiones del pueblo. “...que de tener yo bigote hubiérmos sido como mandados a hacer.” (página 158, líneas 19-20) “...tía Altagracia decía que yo era Segundo puro y pinto...” (página 158, líneas 25-26) “...mamá decía ...que más bien yo parecía una mosquita muerta (página 160, líneas 5-7) b) La repetición El uso de la repetición (bigote, macho, mosquita muerta) tiene el efecto de molestar el niño. Tantas veces le dicen que si tuviera bigote, que si no tuviera bigote, que si parece una mosquita muerta, que si debe ser un macho hecho y Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel - 2- derecho que el niño ya nos parece molesto aunque no lo dice. Por lo menos parece desesperado por parecerse a su tío y decepcionado de no poder serlo. “...que yo había salido a mi padre escupío y que no se podría esperar nada de mi amontonamiento.” (página 166, líneas 6- 8) La repetición contribuye al ritmo de las frases “ ...y le dijeron no seas loca ese hombre no sale de las cantinas no seas loca mira a ver lo que haces”. (página 160, líneas 14-16) “Tía Altagracia dijo que se fijaran bien, que se fijaran, que de tener yo bigote sería el doble en miniatura de mi tío”. (página 160, líneas 32-33) “...tenían las manos en la cabeza gritando bárbaro tú no eres más que un bárbaro hereje...” (página 162, líneas 17-18) “...qué bonita se ve la vieja todavía sonriendo como en vida, que bonita eh”. (página 164, líneas 32-33) B. El humor: palabras y situaciones inesperadas 1. En el título “La muerte obligatoria”, la palabra obligatoria nos hace pensar que algo extraño o inesperado va a ocurrir pues la muerte ocurre pero no se puede obligar. 2. El cuento comienza normalmente en el aeropuerto esperando al tío Segundo pero poco a poco las cosas que van ocurriendo van cambiando. El estilo del autor mezcla a través de todo el cuento la broma y lo serio en la forma como maneja el lenguaje. Como hemos visto en otros cuentos, la poética, los contrastes y las sombras muchas veces están entrelazados y aquí el autor lo hace con humor. “Tío Segundo tenía el cuello hinchado, se puso a hablar cosas que yo no entendía y le cogió las medidas a abuela. La midió con las cuartas de arriba abajo y a lo ancho. Abuela sonreía y se veía que quería hablarle”. (página 162, líneas 18-21) Mientras Segundo quiere mandar a hacer una caja la Abuela sonríe. [Ver CONTRASTES] “Prendieron unas velas y metieron a abuela en la caja donde quedaba como bailando, de flaca que estaba”. (página 162, líneas 26-28) “Abuela seguía riéndose allí, dentro de la caja, y movía los labios como queriendo decir algo”. (página 162, líneas 30-31) 3. El mundo se vuelve al revés y el velorio se convierte en un circo infernal, cómico y absurdo a la vez que nos deja bastante agobiados frente a la insistencia de Segundo: “... le decía a abuela que .... aquello no era ningún chiste sino un velorio donde ella, aunque no lo pareciera, era lo más importante”. (página 164, líneas 17-19) Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel - 3- C. La sonrisa de la abuela En este cuento vemos la sonrisa de la abuela siempre surgir frente a las ofensas de Segundo. Cuando él quiere hacerle una caja ella sonríe, y cuando él la mete en la caja también sonríe y quiere hablarle. Aún cuando Segundo le dice que cerrara “la maldita boca” y que no se riera, ella estaba sonreída, pero al final del cuento el niño termina su relato diciendo: “Cuando me acerqué a la caja y miré a abuela, ya no estaba riendo. Pero noté un brillito que le salía de los ojos y mojaba sus labios apretados”. (página 166, líneas 32-35) [ver CONTRASTES y SOMBRAS] D. El tono del cuento El tono del cuento nos lo va dando el niño que es el que siempre se dirige a nosotros desde el comienzo de la narración. Aunque las demás personas se expresen nosotros estamos siempre pensando cuál será el punto de vista del niño. ¿Qué impresión le habrá hecho el cuello hinchado del tío Segundo, o la abuela bailando en su caja? ¿Cómo se habrá sentido cuándo le decían mosquita muerta? ¿Cómo será tener esa estatura de niño y mirar todo ese mundo tan extraño que ocurría frente a sus ojos? El autor ha logrado que nos compenetremos con el niño como si nosotros fuéramos él mismo. Y al final quedan dos ausencias muy distintas, la del tío y la de la abuela en el recuerdo. Mientras, nosotros hemos recorrido el mundo al revés: comenzamos en el aeropuerto con el anuncio de una muerte y terminamos en un circo infernal. Contrastes 1. Contraste entre una madre al final de su vida y un hijo desagradecido que quiere acelerar su muerte La madre/abuela siempre sonríe a su hijo mientras éste la ofende de acción y palabra “Tío Segundo...se puso a hablar cosas que yo no entendía y cogió las medidas a a abuela...Abuela sonreía”...(página 162, líneas 18-21) [Ver POÉTICA] “Mi tío...dijo que él no daría más de tres cincuenta [por la caja de la abuela]. Abuela seguía riéndose”... (página 162, líneas 28-30) Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel - 4- “Tío Segundo le decía a abuela que cerrara la maldita boca, que no se riera”... (página 164, líneas 16-17) 2. Contraste entre Tío Segundo y el niño “Yo me sentía como encogido. Mi tío era un hombre alto y fuerte y yo, lo dijo mamá, según ando ahora, no seré más que una mosquita muerta para toda la vida. (página 164, línea 34) [Ver POÉTICA] El Tío Segundo hace cosas terribles [Ver TEMAS, Sección 6) y sin embargo el niño siempre parece verlo con admiración: “Yo quisiera ser fuerte, como mi tío, y pegarle al que se metiera en el medio.” (página 166, líneas 29- 31) 3. Contraste entre el barrio y San Juan Hay una diferencia entre la vida del barrio que la tía Altagracia había dejado para irse a San Juan. Ella consideraba que la gente del barrio era “impropia” y quería proteger al niño de las caracterizaciones negativas que se hacen allí de él. El barrio representa el ambiente de pueblo pequeño dominado por el machismo, las murmuraciones, el juego, las cantinas. La ciudad está representada por el aeropuerto que es la salida a un mundo de nuevas oportunidades. “En el camino tío Segundo habló de sus negocios al Norte. Mi madre y mi tía estuvieron de acuerdo en ir alguna vez por allá, que aquí el sol pone viejo a uno, que el trabajo el calor las pocas oportunidades de mejorar la vida... (página 160, líneas 34-37) 4. Contraste entre la Tía Altagracia y las demás mujeres Altagracia ha abandonado el barrio para irse a San Juan. Las demás mujeres han permanecido en el barrio. Altagracia tiene opiniones propias. Las demás mujeres son dependientes de las opiniones de los hombres. Altagracia no piensa que el niño sea una “mosquita muerta”. Las demás mujeres sí. 5. Contrastes visuales Al final, la imagen de la abuela sola en su caja con el “brillito que le salía de los ojos y mojaba sus labios apretados” (página 166, línea 33) se contrapone con el velorio irreverente y ruidoso en la cocina mientras el hijo desaparece velozmente con su maleta. Tradicionalmente, en todas las comunidades, el velorio ha sido para compartir la pena, para que los dolientes se sientan acompañados y reconfortados. En este cuento, Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel - 5- Segundo, que se supone es el doliente, desapareció. La desaparación del hijo contrasta con el nieto que se acercó, miró a la abuela y notó su transformación. Sombras 1. ¿Cómo había sido la vida de Segundo en el pueblo antes de irse para el Norte? Parece que es un tipo de quien uno no se puede fiar pero no sabemos los detalles. “Mamá decía que no había cambiado nada, que seguía siendo el mismo de siempre, llegando tarde a los sitios, a los trabajos, enredado a lo mejor con la policía”. (página 158, líneas 1113) 2. No sabemos nada de su vida en el Norte, pero se sugiere que lo que ha conseguido lo ha conseguido ilícitamente. “Que a lo mejor había formado un lío allá en el Norte y lo habían arrestado, que no había pagado la tienda y estaba en corte”. (página 158, líneas 13-15) “...vestido de blanco y muy planchado y muy gordo...” (página 160, línea 25) Parece que le iba bien en el Norte. Pero, ¿a qué se dedicaba? “ ...tío Segundo habló de sus negocios en el Norte”. (página 160, línea 34) Pero no sabemos qué negocios son. 3. Tía Altagracia es una persona bastante misteriosa. Es la única mujer que se ha independizado, pero no sabemos nada de su vida en San Juan. 4. La abuela ¿por qué sonríe todo el tiempo? ¿Por qué no habla? 5. ¿Qué relación ha habido entre el niño y la abuela? 6. ¿Qué pasa al final? ¿Está llorando la abuela o se está divirtiendo a pesar de todo? ¿Qué van a hacer con ella? ¿Está viva o está muerta? Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel - 6- Temas 1. El velorio En todas las comunidades el velorio es una congregación de familiares y amigos del muerto o de la muerta para orar por él o ella y darse apoyo mutuo en la pena. Los ritos de los velorios dependen de las diferentes culturas y costumbres. En el cuento ocurre algo increíble y es que Segundo convoca el velorio estando la abuela viva. Este echar por tierra todas las obligaciones y respeto a la madre y a la muerte está contado de forma humorística y burlona. Ejemplos: Segundo viene a ver a la abuela porque le dicen que “estaba en las últimas” (página 160, línea 20) Segundo encuentra “que la vieja estaba bien” (página 162, línea 7) y declara que él había venido a un entierro y no a otra cosa. “Mi madre y mi tía abrieron la boca a gritar y dijeron que era verdad que él no había cambiado nada”. (página 162, líneas 10-12) Segundo dice que el entierro tenía que suceder en los tres días que él iba a estar en el barrio y encarga una caja para la abuela. “Prendieron unas velas y metieron a abuela en la caja donde quedaba como bailando, de flaca que estaba”. (página 162, líneas 26-28) 2. La masculinidad –¿Qué es ser un “macho hecho y derecho”(página 160, línea 18)? Palabras y frases que denotan rasgos que guían a hombres como Segundo: (Estas características, a su vez son toleradas por las madres, aceptadas por sus mujeres, y la ausencia de estos hombres es echada de menos). “carácter endemoniado” (página 160, línea 3) “le había rajado la espalda al que le gritó” (página 160, líneas 3-4) “había capado al perro” (página 160, línea 4) “genio volado” (página 160, línea 6) “jugaba dominó” (página 160, línea 11) Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel - 7- “no sale de las cantinas” (página 160, línea 14) Las caracterísiticas de un “macho hecho y derecho” le permitieron a Segundo comportarse como un hijo desagradecido. Su propia madre no le reprocha nada. Mientras Segundo disponía el velorio de su madre, su hermana no era consultada. Al niño se le ha hecho saber que él no cumple con las características de un “macho hecho y derecho” y que será un fracaso en la vida. Lo único que tal vez puede ayudar al niño a verse como realmente es, es escuchar a su Tía Altagracia y recordar a su abuela. 3. Las apariencias y el dinero A Segundo sólo le interesan las apariencias y el dinero. En ningún momento dice que va a hacer nada por amor a la abuela: “que qué diría la gente si él no podía volver del Norte la próxima vez para el entierro”. (página 162, líneas 13-14) “tenía que suceder en los tres días que él iba a pasar en el barrio o si no tendrían que devolverle el dinero gastado en el pasaje”. (página 162, líneas 14-16) “le encargó una caja de la mejor madera...que su familia no era barata”. (página 162, líneas 23-24) ...dijo que aquella caja era muy ancha, que ...la había hecho así para cobrarle más caro y que él no daría más de tres cincuenta”. (página 162, líneas 28-30) “Salió diciendo que no le importaba haber gastado en pasaje ni en la caja ni en las lloronas, que miraran a ver si en todo el barrio había un hijo más sacrificado”. (página 166, líneas 27-30) 4. El papel de las mujeres Los hombres pueden tener todas las mujeres que quieran, como Segundo, y reclamarlas a su regreso aún cuando se han ido de viaje. “...había capado al perro que le desgarró el pantalón de visitar a sus mujeres”. (página 160, líneas 4-5) “...después tío se fue donde sus cuatro mujeres del barrio...” (página 162, líneas 24-25) Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel - 8- Algunas mujeres tienen muchos hijos: “Llegó Chalí con sus ocho hijos...” (página 164, línea 7) Las mujeres no tienen voz en las materias de importancia. En lo que se refirió al velorio ni siquiera la tía Altagracia que se había independizado tuvo nada que decir. Todas las decisiones las tomó Segundo. La abuela siempre estuvo en silencio. 5. La vida del barrio El barrio es un lugar pobre donde la gente está pasando malos tiempos. Los hombres beben y juegan, las mujeres tienen hijos y murmuran. Los jóvenes pelean y se enamoran. Todo esto se hace patente en el velorio. 6. La educación de los hijos La madre no ayuda al niño a desarrollar una actitud positiva sobre sí mismo. Le dice al niño que “según ando ahora, no seré más que una mosquita muerta para toda la vida”. (página 166, líneas 1-2) Al niño le han dicho que debe parecerse a su tío. Dice: “Yo quisiera ser fuerte, como mi tío, y pegarle al que se metiera en medio”. (página 166, líneas 2-3) El niño observa a su tío: [Tío Segundo] “A mi me jaló las patillas y se me quedó mirando un rato, después me cargó y me dijo que yo era un macho hecho y derecho y que si tenía novia”. (página 160, líneas 26-29) --El tío le demuestra enseguida al niño cuáles son las reglas de “ser un hombre”. “Me despertó tío Segundo jalándome por una oreja y preguntándome si veía a Dios y diciéndome espabílate que de los amotetados no se ha escrito nada”. (página 160, línea 38 - página 162, líneas 1-2) -- Para Segundo lo importante es ser astuto, salirse con la suya, así aconseja al niño que sacuda el sueño y no se cohiba. “Porque después de todo él vino a un entierro, y no a otra cosa....Pero mi tío decía que la vieja estaba bien... y que qué diría la gente si él no podía volver del Norte la próxima vez para el entierro. Y lo dijo bien claro: tenía que suceder en los tres días que él iba a pasar en el barrio o si no tendrían que devolverle el dinero gastado en el pasaje.”(página 162, líneas 9-16) --Le importan las apariencias y el dinero. Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel - 9- “Tío Segundo tenía el cuello hinchado...” (página 162, línea 18) –Se enfurece mucho. (Para un niño pequeño esto es como un símbolo de cómo iba a explotar la violencia, pues el cuello no se hincha con facilidad). “Tío hizo una mueca... y le encargó una caja de la mejor madera... que su familia no era barata”. (página 162, líneas 21-24) – Es burlón y mentiroso “...tío se fue donde sus cuatro mujeres...le dio seis reales a cada una y cargó con ellas para casa”. (página 162, líneas 24-26) –Es mujeriego y compra a las mujeres para aparentar que hay pena en el velorio “Tío Segundo estaba furioso”. (página 162, líneas 33-34) “Tío movió entonces una mano hacia arriba y hacia abajo y las mujeres empezaron a llorar y dar gritos”. (página 162, líneas 35-37) – Da órdenes “Tío Segundo le decía a abuela que cerrara la maldita boca, que no se riera, que aquello no era ningún chiste”... (página 164, líneas 16-17) – Maltrata a su madre con una palabra ofensiva, insinuando además que debía morirse. “Tío Segundo les tiró una patada” [a los perros]... (página 164, línea 24) – Es cruel con los animales “... me despertó la paliza que tío Segundo le dió a Cañón. Mi tío salió gritando que qué desorden era ése que se largaran si no querían coger cada uno su parte”. (página 166, líneas 22-24) – Resuelve los problemas con gritos y violencia ...que miraran a ver si en todo el barrio había un hijo tan sacrificado (página 166, líneas 29-31) No hacía las cosas por generosidad sino para que dijeran que era buen hijo La conclusión del niño es: “Pero siempre mi tío se salió con la suya”. (página 164, línea 30) Para triunfar hay que tener las características de su tío. “Yo quisiera ser fuerte, como mi tío, y pegarle al que se metiera en el medio.” (página 166, líneas 2- 3) En cambio “yo, lo dijo mamá, ...seré una mosquita muerta para toda la vida.” (página 166, líneas 1-2) [Ver CONTRASTES] “Y [tío Segundo] terminó diciéndome que yo había salido a mi padre escupío y que no se podía esperar nada de mi amontonamiento.” (página 166, líneas 6-8) Su tía Altagracia tiene una actitud postiva hacia la educación del niño y no quiere que el niño aprenda características negativas del machismo de su hermano. “Pero una cosa, Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel - 10 - saltaba mi tía, que no saliera yo a él en lo del carácter endemoniado, que una vez le había rajado la espalda al que le gritó gacho y había capado al perro que le desgarró el pantalón de visitar a sus mujeres”. (página 160, líneas 2-5) Pero si el niño ha de ser como Segundo ¿qué lección ha aprendido? ¿Qué es ser un hombre? ¿Sirve ser fuerte para cumplir con el velorio y los ritos de la muerte de la abuela? Cuando el niño mira a su abuela al final del cuento dice “ya no estaba riendo. Pero noté un brillito que le salía de los ojos y mojaba sus labios apretados”. Tal vez la abuela muestra al niño que Segundo no era un buen modelo a seguir. 7. La emigración El cuento comienza en el aeropuerto donde dice que entraba y salía gente por montones. El niño se plantea cómo sería dejar detrás el barrio y vivir hablando otras palabras. Su tío Segundo ha emigrado y parece haberle ido bien en el Norte. En la isla la situación es mala y la madre y la tía también piensan “en ir alguna vez por allá, que aquí el sol pone viejo a uno, que el trabajo el calor las pocas oportunidades de mejorar la vida...” (página 160, líneas 3537) 8. El cuento termina cuando Segundo se regresa al Norte. Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel - 11 - Notas del coordinador Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel - 12 - LA SESIÓN : EL ENCUENTRO CON LOS PARTICIPANTES Presentación del cuento al grupo Lectura en voz alta Algunas observaciones sobre el autor, el país, etc. Emilio Díaz Valcárcel es un novelista y cuentista puertorriqueño. Nació en 1929. Sirvió obligatoriamente en el ejército de los Estados Unidos entre 1951 y 1953, en la Guerra de Corea y esta experiencia sirvió como tema para la primera parte de su obra. Trabajó como libretista y editor para el Departamento de Instrucción Pública y ha sido profesor de la Universidad de Puerto Rico. Residió en Nueva York y en Madrid. Sus cuentos a menudo reflexionan sobre tipos marginales de la sociedad. En ellos utiliza la comicidad tomando y recreando elementos culturales y lingüísticos puertorriqueños. Vale la pena llevar un mapa del Caribe y mostrar la posición de Puerto Rico. Es apropiado hacer mención de la historia política de Puerto Rico y de su situación colonial, primero como colonia española y a partir de 1898 de los Estados Unidos y explicar que a partir de los años 50 cuando se convirtió en Estado Libre Asociado hubo una emigración masiva a los Estados Unidos. Hoy una parte significativa de la comunidad puertorriqueña vive en ciudades como Nueva York, Chicago y Orlando. Vocabulario Página 158 línea 17 las chancletas chinelas o zapatillas sin talón o con el talón doblado Página 160 Línea 4 gacho se dice de la persona o animal que carece de una oreja Línea 4 había capado (capar) había exterminado los órganos genitales Línea 9 un vellón antigua moneda española de cobre, en Puerto Rico se le llamó vellón a la moneda norteamericana de cinco centavos Línea 2 espabílate (espabilarse) sacudir el sueño Línea 2 amotetados (amotetarse) estar desanimado, ser tímido, cohibirse, intimidarse Página 162 Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel - 13 - Página 162 Página 164 Página 166 Línea 3 jincha muy pálida Línea 18 hereje que sostiene una doctrina contraria a los dogmas de la Iglesia Línea 5 guares gemelos, mellizos Línea 26 se ñangotó (ñangotarse) se puso en cuclillas, modo de sentarse doblando el cuerpo de modo que las nalgas se acerquen a la parte posterior de la planta del pie Línea 7 escupío criollismo que quiere decir muy parecido Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel - 14 - Alternativas para la discusión La discusión se puede abordar de diferente maneras, pero siempre recordando que nuestro método va del texto a la gente y de la gente al texto utilizando las categorías: poética, contrastes, sombras y temas. Estas categorías no hay que utilizarlas en ningún orden especial, ni agotarlas antes de proceder con otra. Por otra parte, el coordinador debe pensar también en unas preguntas dirigidas a los participantes para ayudarlos a expresar cómo sienten el cuento en relación a su vida. La propia discusión va abriendo el camino para las preguntas. Muchas veces a pesar de habernos situado desde una estrategia, vemos cómo la discusión se desvía naturalmente de forma no planificada, pero igualmente válida. Cada sesión toma vida propia y es precisamente en esta flexibilidad que reside la vitalidad del programa. Preguntas Nota: Ppoética Ccontraste Ssombra Ttema Vvida _____________________________________________________________________________ 1. El cuento comienza en el aeropuerto. ¿Por qué dice el niño que “la gente nos miraba y decía cosas” (página 158, líneas 3-4; página.160, líneas 22-23)? TC 1V. ¿Cómo fue la primera vez que fueron a recibir a alguien al aeropuerto hace años? V 2. Al niño le habían dicho que era la misma cara de su tío Segundo. ¿Por qué creen ustedes que quiere parecerse a él? T ¿Les ha pasado que a veces los han comparado con otra persona? ¿Cómo se han sentido? V ¿Cómo creen ustedes que era la vida de Segundo en el Norte? Sus hermanas no hablaban muy bien de él. ¿Cómo sería la relación con su madre? ST 2V. 3. 3V. 4. ¿Conocen ustedes a algunos hombres parecidos a Segundo? ¿Hay hijos tan malagradecidos? V ¿Qué opinan de la estrategia que inventa para acelerar el entierro? ¿ Qué les parece esta oración?: “Prendieron unas velas y metieron a abuela en la caja donde quedaba como bailando, de flaca que estaba.” (página 162, líneas 2628) PS 5. La madre/abuela siempre sonríe a su hijo mientras éste la ofende de acción y palabra. Ella quiere hablarle, pero siempre permanece en silencio. ¿Qué piensan ustedes? PSCT 5V. ¿Creen ustedes que las madres siempre deben perdonar a sus hijos? 6. Aparte del relato de Segundo, ¿les parece que este cuento habla del problema del machismo? ¿Qué pasará, por ejemplo, cuando se le dice esta frase a un niño de Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel V - 15 - 7. 8. 8V. poca edad: “...me dijo que yo era un macho hecho y derecho y que si yo tenía novia”( página 160, líneas 28-29)? T ¿Alguno de ustedes estuvo presente alguna vez en un velorio un poco raro? ¿Cuáles son las obligaciones y los ritos fúnebres? ¿Cómo eran los velorios en sus comunidades? ¿Cómo son ahora? V ¿Qué piensan de la tía Altagracia? ¿Hizo bien en irse del barrio? Para ella la gente del barrio es “impropia” (página 160, línea 18) ¿Qué querrá decir ella con eso? T ¿Conocen a alguien que se fue de su pueblo porque lo consideraba provinciano o atrasado? V 9. ¿Qué piensan de este pasaje?: “Yo me sentía como encogido. Mi tío era un hombre alto y fuerte y yo, lo dijo mamá, según ando ahora, no seré más que una mosquita muerta para toda la vida. Yo quisiera ser fuerte, como mi tío, y pegarle al que se metiera en el medio”. (página 164, línea 34; página 166, líneas 1-3) PCT 9V. ¿Cómo creen ustedes que se debe enseñar la auto estima a los niños?¿Les parece la violencia una solución para afrontar los problemas? 10. ¿Qué es ser hombre para Segundo? ¿Cuáles son las reglas de la masculinidad que lo guían a él en su comportamiento? T 11. Hay varios contrastes en el cuento: entre el hijo y la madre, el tío y el niño, la tía y las otras mujeres, el barrio y San Juan, los alborotos que ocurrían en el velorio mientras la abuela se encontraba sola en su caja. El niño es testigo de todo esto. ¿Podemos percatarnos en qué forma percibe el niño estos contrastes? CP 12. El niño nos cuenta esta historia con humor, aunque a veces es casi humor negro. ¿Qué efecto tiene un chiste cuando queremos contar cosas que también son serias? P ¿Les ha pasado que alguna vez quisieron decir algo importante y lo dijeron en broma? V 12V. 13. ¿Les parece importante el final cuando el niño dice: “Cuando me acerqué a la caja y miré a abuela, ya no estaba riendo. Pero noté un brillito que le salía de los ojos y mojaba sus labios apretados” (página 166, líneas 32-34)? ¿Qué significó para el niño? PSTC 14. ¿Por qué Segundo hace todo esto y nadie dice nada y dejan que Segundo entierre a la abuela? SCT 14V. ¿Han estado ustedes alguna vez presentes en un lugar en que se ha cometido una injusticia y todos se han quedado callados? Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel - 16 - V Notas del coordinador después de la sesión Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel - 17 - SUGERENCIAS PARA FUTURAS LECTURAS 1. Díaz Valcárcel, Emilio. El asedio y otros cuentos. México: Arrecife. 1958. 2. __________________. Proceso en diciembre. Madrid: Taurus, 1963. 3. __________________. Harlem todos los días. México: Nueva Imagen, 1978. 4. Marqués, René. Cuentos puertorriqueños de hoy. Río Piedras, Puerto Rico: Editorial Cultural, 1968. Cuaderno – La muerte obligatoria – Emilio Díaz Valcárcel - 18 -