Esta etapa reduce el espesor de la lámina hasta un mínimo de 0.3 mm hasta conseguir los requerimientos finales del cliente. El templado final aporta las propiedades requeridas para uso del cliente. El laminado en frío produce el aspecto plano de las láminas de acero y un acabado adecuado para aplicaciones visibles, como electrodomésticos Bobinas blancas 2B o BA El espesor de las bobinas blancas – sobre 3 mm- se reduce de nuevo con el proceso de laminado en frío. El espesor puede alcanzar un 0.3 mínimo, laminando varias veces en un laminador en frío reversible, para conseguir el espesor solicitado por el cliente y la calidad superficial apropiada para uso final. Tras el laminado en frío, la operación de templado recupera las propiedades metálicas de nuestro acero inoxidable. El decapado final elimina el óxido del templado y aporta un aspecto mate (2D). Otra opción es realizar el templado bajo una atmósfera protectora, para retener la apariencia del laminado en frío para aplicaciones que necesitan acabados de templado brillantes (BA). El proceso de templado recupera la ductilidad y maleabilidad requerida por los clientes. En este caso no se forma óxido y el decapado no es necesario. La lámina es muy brillante. La operación skinpass garantiza el aspecto plazo y la superficie de la bobina. Pueden ser necesarios uno, dos o tres pases. Seleccionando diferentes rodillos skinpass, se puede conseguir un acabado adecuado para aplicaciones visibles, como electrodomésticos (2B or BA). Enero 2014, Aperam - Stainless Europe. Hemos aportado el máximo cuidado para que las informaciones contenidas en esta publicación sean lo más exactas posibles, pero Aperam-Stainless Europe, no pueden garantizar el carácter exhaustivo ni la ausencia de errores. Proceso de fabricación Etapa 4 – Laminado en frío y templado final