65-2000 SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: San Salvador, a las nueve horas y treinta minutos del día treinta y uno de agosto de dos mil. IDENTIFICACIÓN DEL PROCESO: Vistos en casación de la sentencia definitiva pronunciada por la Cámara de la Segunda Sección de Oriente, a las ocho horas y treinta minutos del día diecinueve de marzo de mil novecientos noventa y siete, decidiendo la apelación que se interpuso contra la sentencia pronunciada por el Juzgado de lo Civil de Usulután, a las doce horas del día seis de enero de mil novecientos noventa y siete, en el Juicio Civil Sumario de Partición Judicial, promovido por el Licenciado Carlos Adalberto Amaya Rosa, en su carácter de apoderado de la señora María Alicia Gálvez Hernández, contra los señores, Mario Ernesto, Berta Marina, Julio Abel, todos de apellido Gálvez Hernández, a fin de que en sentencia definitiva se ordene la partición de los bienes que a su defunción dejó la señora Rogelia Hernández vda. de Gálvez, conocida por Rogelia Gálvez, y por Rogelia Henández. Han intervenido en Primera y Segunda Instancia el Licenciado Carlos Adalberto Amaya Rosa, en el carácter antes indicado, el Doctor Luis Alonso Padilla Aguilar, en su calidad de apoderado de los señores Mario Ernesto Gálvez Hernández y Julio Abel Gálvez Hernández y el Licenciado Armando Ventura Villatoro, como apoderado de la señora Berta Marina Galvez Hernández de Ventura; y en casación únicamente el Licenciado Amaya Rosa en el carácter indicado, como recurrente, y el Doctor Padilla Aguilar como parte recurrida, en la calidad ya mencionada. ANTECEDENTES DEL HECHO Por demanda de folios uno al seis de la pieza principal, el Licenciado Carlos Adalberto Amaya Rosa, en su calidad de apoderado de la señora María Alicia Gálvez Hernández, expone: Que siendo su mandante juntamente con los señores Mario Ernesto Gálvez Hernández, Berta Marina Gálvez Hernández y Julio Abel Gálvez Hernández, herederos de la señora Rogelia Henández viuda de Gálvez, quien fue dueña y poseedora de varios inmuebles, los que a su defunción, fueron traspasados a sus herederos en forma intestada, y con el fin de hacer cesar la proindivisión en que se encuentran, se solicita hacer la partición respectiva, conforme lo estipulado por la causante, en Testamento Ológrafo, otorgado el día doce de noviembre de mil novecientos setenta y siete, ante el Notario Héctor Murcia, en la ciudad de San Francisco, Estado de California, Estados Unidos de Norte América. Por sentencia del Tribunal de Primera Instancia, de fecha seis de enero de mil novecientos noventa y siete, se resuelve lo siguiente: """"IV.- Las diligencias de aceptación de herencia en los bienes dejados por la señora Rogelia Gálvez o Rogelia Hernández han sido seguidas en forma intestada por los señores Mario Ernesto Gálvez, María Alicia Gálvez, conocida por Alicia María Evila Gálvez Hernández y por Alicia Gálvez, Berta Marina Gálvez y Julio Abel Galvez y en consecuencia en base a ella debe de llevarse acabo la partición; no puede tomar en cuenta para llevar acabo la diligencia antes mencionada, el testamento que se ha presentado, por lo que se declara sin lugar la petición que se hizo en cuanto a realizar la partición en base al testamento presentado.- Y habiéndose llenado los requisitos y formalidades legales es procedente sentenciar de conformidad, procediendo a la partición de los bienes para poner fin a la proindivisión en que se encuentran los copropietarios.-----POR TANTO, Según lo expuesto y Arts. 417, 421, 422, 427, 429, 439, 922 y 926 Pr., a nombre de la República de El Salvador, FALLO. Declárase sin lugar la partición en base al testamento presentado.- Practíquese la partición solicitada en base a la aceptación de herencia de los bienes dejados por la señora ROGELIA GALVEZ o ROGELIA HERNANDEZ, seguida en forma intestada por los señores MARIO ERNESTO GALVEZ, MARIA ALICIA GALVEZ, conocida por ALICIA MARIA EVILA GALVEZ HERNANDEZ y por ALICIA GALVEZ, BERTA MARINA GALVEZ Y JULIO ABEL GALVEZ. HÁGASE SABER.No conforme con dicho fallo, la parte demandante apeló para ante la Cámara de la Segunda Sección de Oriente, la que por sentencia de fecha diecinueve de marzo de mil novecientos noventa y siete resolvió: """"POR TANTO. En base a las razones expuestas y a los artículos 1089, 1090, del Código de Procedimientos Civiles, La Cámara de la Segunda Sección de Oriente, a nombre de la República de El Salvador FALLA. Confírmase en todas sus partes la sentencia venida en apelación"""" FUNDAMENTOS DEL RECURSO: Por escrito de fecha treinta de abril de mil novecientos noventa y siete el Licenciado Carlos Adalberto Amaya Rosa interpone Recurso de Casación en los términos siguientes: """"FUNDAMENTOS DEL RECURSO---- Fundamento el recurso que hoy interpongo en la causa genérica de INFRACCIÓN DE LEY prevista en el literal "A" del Art. 2 de la Ley de Casación, y en los motivos específicos de : a)VIOLACION DE LEY EN EL FALLO, contemplado en el No. 1o. del Art. 3 de la misma ley y b) por OTORGAR EL FALLO MAS DE LO PEDIDO, previsto en el No. 4 del citado Art. 3 de la Ley en mención.---PRECEPTOS INFRINGIDOS: Artículos 22 de la Constitución Política, 981, 996 y 1197 del Código Civil, y 421 del Código de Procedimientos Civiles.----El Art. 22 de la Constitución Política dispone que "se reconoce la libre testamentifacción". Cualquier abogado o estudiante de Derecho que haya cursado la disciplina Derecho Sucesorio, sabe que tal principio es una consecuencia de otro de mayor extensión, este es el de la libre disposición de los bienes, contenidos en el mismo Artículo y que constituye la base del sistema de propiedad privada que a su vez es la piedra angular del régimen de la libertad económica que reconoce nuestra Constitución Política. En virtud del principio de la libertad de disposición de los bienes, el hombre puede disponer de los mismos, ya sea por acto entre vivos o por causa de muerte; en el primer caso, por lo general se hace a través de la figura del contrato o de cualquier otro acto jurídico bilateral, el cual una vez celebrado es obligatorio para las partes, como decía el Art. 1416 antes de la reforma respectiva, "es una ley entre las partes"; ello es así, porque en todo nuestro sistema civil, impera el principio de la autonomía de la voluntad, en virtud del cual se le reconoce la potestad de crear efectos de derecho, fenómeno que se cristaliza en la revolución francesa, que inspira el Código de Napoleón y que recogen y aplican los Códigos Civiles latinoamericanos que siguen las doctrinas y principios del mismo. En el segundo caso, se dispone de los bienes en virtud del testamento, caso en el cual habrá de respetarse la voluntad del testador, es decir que habrá de respetarse la forma en que ha dispuesto de sus bienes, y solo a falta del mismo, será lícito aplicar las reglas de la sucesión intestada, para determinar a quién habrá de corresponder los mismos, pues como es sabido, estas reglas son supletorias de la voluntad expresa del causante, y como tales son subsidiarias. En el caso de autos, la herencia se aceptó en forma intestada, seguramente por desconocerse la existencia del testamento otorgado en el extranjero, pero al aparecer éste, yo pedí que la partición se hiciera en base al mismo; sin embargo, la sentencia de primera Instancia, declaró sin lugar mi pretensión y ordenó que tal partición se hiciera en base a las reglas de la sucesión intestada, desconociendo y desobedeciendo el citado Art. 22 de la Constitución Política, lo cual es exactamente una INFRACCIÓN DE LEY Y UNA VIOLACION a la misma, situación que se repite en el fallo de esa Cámara, pues en mi alegato de expresión de agravios insistí en mi pretensión y pedí que se revocara la resolución del Juez a-quo, y que se resolviera ordenar la partición en base al testamento; sin embargo, el fallo de Segunda Instancia, declara sin lugar mi petición y ordena que la partición se haga en base a las reglas de la sucesión intestada; de esa forma, este último fallo, incurre en la infracción y violación de la ley, específicamente, del citado Art. 22 de la Constitución Política. Si se hubiese accedido a mi petición el fallo hubiese sido conforme al principio constitucional contenido en el artículo citado. En el Art. 981 del Código Civil, desarrollando el principio constitucional de la libre testamentifacción dispone que: "Las leyes reglan la sucesión en los bienes de que el difunto no ha dispuesto, o si dispuso no lo hizo conforme a derecho, o no han tenido efecto sus disposiciones. "Este artículo establece en que casos tiene lugar la sucesión intestada; ello ocurre cuando: a) el causante no dispuso de sus bienes, por testamento, b) dispuso, pero no lo hizo conforme a derecho, caso en el cual el testamento es ineficaz, normalmente cuando en su celebración ha incidido un vicio que lo hace nulo; y c) cuando habiendo dispuesto de los bienes, no han tenido efecto sus disposiciones como cuando el asignatario repudia, es indigno, incapaz o premuere, al causante. En caso contrario, si habiendo dispuesto de los bienes por testamento conforme a derecho, y no existen circunstancia de indignidad, incapacidad repudiación o premuerte, la sucesión tendrá que regirse por las disposiciones del testador. Esta es precisamente la situación que se ha dado en el caso de autos, y no obstante ello el fallo que impugno, o sea el de Segunda Instancia., confirma la sentencia de Primera Instancia, o sea que declara sin lugar lo pedido por mi, en el sentido de que la partición se haga conforme al testamento, y ordena que se haga conforme a las reglas de la sucesión intestada, violando con ello la ley, específicamente el Art. 981 Civil.----Por su parte el Art. 996 Civil, define el testamento diciendo que "se llama testamento la declaración que, con las formalidades que la ley establece, hace una persona DE SU ULTIMA VOLUNTAD, ESPECIALMENTE EN LO QUE TOCA A LA TRANSMISION DE SUS BIENES, PARA QUE TENGA PLENO EFECTO DESPUES DE SUS DIAS""" Tal disposición legal insiste en reconocer la majestad de la voluntad jurídica del hombre en cuanto a disponer de sus bienes, de manera que si hay testamento, no puede simplemente ignorar la voluntad del testador y ordenar el reparto de sus bienes vía sucesión intestada, sino que por el contrario aquella voluntad debe ser respetada y tenida como base para dicho efecto. Así las cosas, es indudable que el fallo que impugno es violatorio del artículo al que me refiero en este apartado, por lo que es procedente la admisión del recurso de casación que hoy interpongo, así como casar la sentencia de Segunda Instancia.----Finalmente, el Art. 1197 Civil dispone que """"Si el difunto ha hecho partición por acto entre vivos O POR TESTAMENTO, se pasará por ella en cuanto no fuere contraria a derecho ajeno. """"El anterior texto legal es lapidario en orden de demostrar la razón que asiste a mi pretensión y a la ilegalidad del fallo que impugno, pues claramente ordena que debe respetarse la partición hecha por el testador; incluso, bien podría hasta omitirse toda diligencia encaminada a partir o dividir el haber herencial, bastaría que los herederos presentaran al Registro, su declaratoria de heredero y tantos testimonios del testamento como asignatarios hubiere, para inscribirse los inmuebles que a cada uno de ellos hubiere cabido en la partición testamentaria. Y siendo así las cosas, no es elemental que el fallo impugnado es violatorio del artículo transcrito en este apartado?, la situación jurídica planteada es tan evidente que se vuelve innecesario cualquier esfuerzo para darse cuenta de que no existe ninguna otra alternativa mas que aceptar que habiendo violación de ley en el aludido fallo, es procedente la admisión del recurso que hoy invoco.---- EL FALLO OTORGA MAS DE LO PEDIDO Y POR LO MISMO ES INCONGRUENTE. el otro motivo en que fundamento este recurso consiste en que el fallo otorga mas de lo pedido. En efecto, el Art. 1026 Prc. establece que las sentencias definitivas del Tribunal se circunscribirán precisamente a los puntos apelados, y el Dr. Francisco Arrieta Gallegos en su trabajo ""De la impugnación de las Resoluciones Judiciales"" afirma que tales puntos serán determinados por el apelante en su escrito de expresión de agravios; ahora bien, en mi expresión de agravios me concreté a pedir que se revocara la sentencia de Primera Instancia y que resolviera ordenar la partición en base al testamento, determinando así los puntos apelados y circunscribiendo la facultad del Tribunal de alzada para resolver; sin embargo la resolución de éste declara sin lugar lo pedido y ADEMÁS, ordena que la tantas veces dicha partición se lleve a cabo prescindiendo del testamento. Esto último nadie lo ha pedido a nadie, y en consecuencia se ha otorgado más alla de lo pedido, volviendo al mismo tiempo incongruente el fallo que impugno y violando lo ordenado en el Art. 421 Pr.C. según el cual las sentencias recaerán SOBRE LAS COSAS LITIGADAS Y EN LA MANERA QUE HAN SIDO DISPUTADAS; de ahí que es incuestionable la procedencia de la admisión del recurso que invoco, acorde a lo dispuesto en el número 4 del Art. 3 de la Ley de Casación.--- Por todo lo antes dicho PIDO: a) se me admita este escrito, b) concluido el plazo previsto en el Art. 8 de la citada ley de Casación, se remita dentro de tercero día con noticia de partes, este escrito con las copias que presento y los autos respectivos, a la Honorable Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia, para los efectos del Art. 12 y siguientes de la citada ley.---PROCEDENCIA DEL RECURSO: Visto y analizado el escrito de interposición del recurso de casación, la Sala, por resolución de las diez horas y ocho minutos del día veinticinco de julio de mil novecientos noventa y siete, admitió el recurso por los motivos específicos de Violación de Ley y por Fallo Incongruente con las pretensiones deducidas por los litigantes, otorgando más de lo pedido; así mismo se corrió traslado a las partes para que presentaran sus alegatos dentro del término de Ley; quienes haciendo uso de su derecho expusieron las razones que tuvieron a bien aducir la recurrente para sostener los fundamentos del recurso y la otra parte en apoyo a la legalidad del fallo recurrido. CONSIDERACIONES DE ESTA SALA. El presente recurso se plantea alegando como motivos específicos "Violación de Ley" y "Fallo Incongruente con las pretensiones deducidas por los litigantes" Pretende la demandante en el presente juicio, obtener la Partición Judicial de los bienes que a su muerte dejara la señora Rogelia Hernández vda. de Gálvez, bienes que fueron transmitidos a sus herederos en base a la aceptación de herencia intestada. Se solicita ahora, la partición judicial de dichos bienes en base al testamento; testamento que fue presentado posteriormente a la declaratoria de herederos intestados, y que ampara la actual solicitud. En relación a la "Violación de Ley" se citan como preceptos infringidos los Arts. 22 Cn. 981, 996 y 1197 C.C. y 421 Pr. C. El primero de ellos, Art. 22 Cn. Declara: "Toda persona tiene derecho a disponer libremente de sus bienes conforme a la ley. La propiedad es transmisible en la forma en que determinen las leyes. Habrá libre testamentifacción."; en base al mismo, el impetrante alega que habiendo dispuesto el testador de sus bienes en virtud de un testamento, debió el juzgador respetar la voluntad expresada en el mismo, pues sólo a falta de éste, era procedente aplicar las reglas de la sucesión intestada, por lo que, existiendo un testamento, procede conceder la partición solicitada en base al mismo y no de forma intestada como lo declaró tanto el Juez como la Cámara. El segundo de los artículos citados, el Art. 981 expresa: "Las leyes reglan la sucesión en los bienes de que el difunto no ha dispuesto, o si dispuso, no lo hizo conforme a derecho, o no han tenido efecto sus disposiciones", al respecto sostiene el interponente que dicho artículo expone los casos en que procede la sucesión intestada, no encajando el caso de autos en ninguno de los literales contemplados en el mismo, por lo que, si existe un testamento conforme a derecho, y no existen circunstancias de indignidad, incapacidad o premuerte, la sucesión tendría que regirse por las disposiciones del testador. Por lo que no habiendo tomado en cuenta la Cámara para fallar el testamento, existió violación del art. 981 C.C. El Art. 996 C.C. define el testamento como: "la declaración que con las formalidades que la ley establece hace una persona de su última voluntad, especialmente en lo que toca a la transmisión de sus bienes para que tengan efectos después de sus días", alega el recurrente que esta disposición legal, insiste en reconocer la majestad de la voluntad jurídica del hombre en cuanto a disponer de sus bienes, de manera, que si hay testamento, no puede simplemente ignorar la voluntad del testador y ordenar el reparto de sus bienes vía sucesión intestada, sino por el contrario aquella voluntad debe ser respetada y tenida como base para dicho efecto. En cuanto al Art. 1197 C.C. el impetrante alega lo siguiente: dispone el mencionado artículo: "Si el difunto ha hecho partición por acto entre vivos o por testamento, se pasará por ella en cuanto no fuere contraría a derecho ajeno", por lo que si esa disposición claramente ordena que debe respetarse la partición hecha por el testador, no puede simplemente ignorarse la existencia del mismo, el hacerlo implica la violación alegada. De las infracciones antes alegada, se colige lo siguiente: todas tienen como base la existencia de un testamento, y el hecho de que la Cámara al emitir su fallo, no tomó en cuenta las disposiciones contenidas en el mismo. De lo antes expuesto por el recurrente, la Sala hace las siguientes consideraciones: Toda aceptación de herencia, para que surta efectos legales requiere que, quien pretenda derechos en la sucesión, demuestre tenerlos, a través de la declaratoria de herederos correspondiente, ya sea con base en el testamento o en la ley, en consecuencia, si la declaratoria de heredero es intestada, da derechos a la sucesión intestada; y si es testamentaria a una sucesión de su mismo nombre. De ahí que, si el recurrente en el presente juicio alega derechos en base al testamento, es necesario que exista una declaratoria de heredero, que lo reconozca como un heredero testamentario, y que lo habilite, en consecuencia a reclamar su derecho. En el caso de autos, la calidad de heredera que sustenta la ahora recurrente, ha sido reconocida en base a una sucesión intestada, a la vez, los inmuebles objeto de la presente partición, se encuentran inscritos a favor de los señores Mario Ernesto Gálves Hernández, María Alicia Gálvez Hernández (impetrante), Berta Marina Gálvez Hernández y Julio Abel Gálvez Hernández, en base a su calidad de herederos intestados, por lo que resulta incongruente que la legitimación procesal, en base a la cual inicia el juicio de partición la ahora recurrente, provenga de su calidad de heredera intestada, y solicite la partición en base a un testamento que no ha sido objeto de un pronunciamiento judicial, pues la Cámara en ningún momento ha entrado a valorar dicho testamento, ni tampoco ha hecho pronunciamiento alguno en cuanto a las declaraciones testamentarias de la causante. Por lo tanto, no existe violación del artículo 22 Cn., en cuanto reconoce el "Principio a la Libre testamentifacción", ya que como se ha planteado anteriormente, para hacer valer los derechos provenientes de un testamento, es necesario demostrar la calidad de heredero testamentario, requisito que no se ha cumplido en el presente caso. Por otra parte, no existe violación del Art. 981 C.C., que expresa los casos en que procede la sucesión intestada, ya que dicha disposición, expone como uno de ellos, aquel en que no han tenido efecto las disposiciones del causante, caso dentro del cual se enmarca el que ahora analizamos, ya que no habiendo sido declarados herederos testamentarios los ahora recurrentes, las disposiciones contenidas en el testamento no pueden surtir efectos jurídicos, sino hasta que su legitimación procesal provenga del mismo, y permita por lo tanto hacer valer los derechos contenidos en el testamento, mientras estos requisitos no se hayan cumplido, tiene lugar la sucesión intestada y no la testamentaria como alega el recurrente, en consecuencia el Artículo citado como violado, lejos de haberse inaplicado, sirve de fundamento para seguir la partición en base a la sucesión intestada, siendo por lo tanto dicha disposición, contraria a los intereses que sustenta el recurrente. Tampoco se ha violado el artículo 996 C.C. que define el testamento como: "la declaración que, con las formalidades que la ley establece, hace una persona de su última voluntad, especialmente en lo que toca a la transmisión de sus bienes, para que tenga pleno efecto después de sus días", ni el artículo 1197C.C. el cual expresa: "Si el difunto ha hecho partición por acto entre vivos o por testamento, se pasará por ella en cuanto no fuere contraria a derecho ajeno", pues en ningún momento se ha cuestionado la voluntad del testador expresada en el mismo, ni se ha entrado a valorar dicho testamento, por lo que, si no se han reconocido las disposiciones contenidas en él, no es por que se hayan ignorado, como lo expresa el recurrente, el punto es, como se ha dicho repetidamente, que no existe el requisito legal previo, para que el testamento produzca efectos jurídicos, por lo que este continua teniendo valor como tal y podría llegar a producir los efectos jurídicos que se contienen en el mismo, al cumplirse con el mencionado requisito. Por las razones antes expuestas, no se ha fallado en contra de lo que el artículo 996 C.C. define como testamento, ni tampoco se ha violado el 1197 C.C. ya que no se ha entrado a valorar el testamento. De lo antes expuesto se colige, que no procede casar la sentencia por el motivo específico de "Violación de Ley" en los artículos 22 Cn. 981, 996 y 1197 C.C. En cuanto a la violación del artículo 421 Pr.C., la trataremos en el desarrollo del motivo que analizamos a continuación, por cuanto dicho precepto constituye la base legal del "Fallo incongruente con las pretensiones deducidas por los litigantes", por lo que, para seguir un orden de conceptos, resulta mas conveniente desarrollarlo en el transcurso de este motivo. En relación al segundo de los motivos alegados "Fallo incongruente con las pretensiones deducidas por los litigantes" por otorgar el fallo más de lo pedido; cita como precepto infringido el Art. 1026 Pr.C. el cual prescribe: "Las sentencias definitivas del tribunal se circunscribiran precisamente a los puntos apelados y a aquellos que debieron haber sido decididos y no lo fueron en primera instancia, sin embargo de haber sido propuestos y ventilados por las partes.". Al respecto expone el recurrente que, la Cámara incurre en dicha infracción, al resolver sin lugar lo solicitado y ADEMAS, ordenar que la partición se llevara a cabo prescindiendo del testamento, cuando lo determinado en la expresión de agravios, fue que se revocara la sentencia de Primera Instancia y se resolviera ordenar la partición en base al testamento, En base al anterior alegato, se aclara, que no existe en el presente caso fallo ultra petita, pues en el escrito de aclaración de la demanda el recurrente expresa: "En resumen mi petición se contrae únicamente a poner fin, por medio de la partición, a la proindivisión en que mi mandante se encuentra con respecto a los demás copropietarios y por tal razón en cumplimiento al Art. 923 Pr. C., con instrucciones de mi mandante, la estoy solicitando por la vía judicial, pues por el momento no es posible hacerlo extrajudicialmente."; en conclusión, lo que solicita en dicha aclaración, es poner fin a la proindivición, y ello es lo que cuenta para efectos procesales, así mismo, a fs. 44 consta del escrito de contestación de la demanda, presentado por los otros coherederos, que no se oponen a la partición solicitada. Por lo que, tratándose el caso que nos ocupa de un Juicio de Partición Judicial en el que existe una declaratoria de herederos en forma intestada, que constituye un presupuesto legal, que faculta al juez a declarar la partición judicial de los bienes en base a la misma, y estando de acuerdo los coherederos en dicha partición, no puede existir desde ningún punto de vista fallo ultra petita al hacer tal declaración, independientemente de que el derecho que fundamente la pretensión sea el testamento, y que la solicitud haya sido denegada. En el presente caso se pidió la partición en base al testamento otorgado por la señora Rogelia Hernández vda. de Gálvez, pero al declararse sin lugar la misma, por las razones legales fundamentadas en los fallos de Primera y Segunda Instancia, la consecuencia jurídica era declarar la partición tomando en cuenta la declaratoria de herederos intestada, por lo que, a juicio de esta Sala, resulta ilógico que el recurrente pretenda, que al no tomarse en cuenta el testamento para ordenar la partición, no se resolviera sobre ese punto; el no hacerlo sí hubiera significado un fallo incongruente aunque citra petita, por lo que la infracción alegada de "Fallo incongruente", por otorgar mas de lo pedido no se concreta, y en consecuencia, tampoco procede casar la sentencia por este motivo. Ahora bien retomando este mismo alegato, expone el recurrente que se violó el art. 421 Pr.C. en cuanto dispone: "las sentencia recaerán sobre las cosas litigadas y en la manera en que han sido disputadas, sabida que sea la verdad por las pruebas del mismo proceso", por lo que se aclara que, tampoco existe tal violación, en cuanto, como se ha dicho anteriormente, siendo el presente caso un Juicio de Partición Judicial, la Cámara al ordenar la partición de los bienes con base en la sucesión intestada, estaba fallando sobre las cosas litigadas, por lo que no existe la violación alegada. En tal virtud, ninguno de los motivos alegados por el recurrente permiten casar el fallo impugnado, no procediendo casar la sentencia recurrida y así debe declararse. POR TANTO: de acuerdo a las razones expuestas y con fundamento en los Art. 428 y 432 Pr. C y 23 Ley de Casación, a nombre de la República, la Sala FALLA: a) Declárase que no ha lugar a casar la sentencia de que se ha hecho mérito. b) Condénase a la señora María Alicia Gálvez Hernández, en los daños y perjuicios a que hubiere lugar, y al Licenciado Carlos Adalberto Amaya Rosa, en las costas del recurso, como abogado que firmó el escrito de interposición del recurso. Vuelvan los autos al Tribunal de origen con certificación de esta resolución. Enmendado-Proindivisión-Vale. A.DE BUITRAGO---M. E. VELASCO---V. DE AVILES--PRONUNCIADA POR LOS SEÑORES MAGISTRADOS QUE LA SUSCRIBEN. --BARBA---RUBRICADAS