Land Care In Desertification Affected Areas From Science Towards Application Agricultura Intensiva de Regadío también los aspectos socioeconómicos. La expansión de la producción intensiva de la agricultura de regadío Introducción puede ser tanto una fuente de riqueza como un problema generalizado respecto al uso sostenible del suelo y la desertificación. Las consecuencias ambientales potencialmente negativas de este tipo de uso del suelo sobre otras funciones económicas y ecológicas incluyen la degradación del suelo, el agotamiento de los acuíferos, la intrusión de agua marina en áreas litorales y la salinización, y la contaminación del suelo. En la Europa Mediterránea la mayor demanda de la agricultura son los recursos hídricos, utilizando entre el 70 y el 80 % del total de agua disponible. La disponibilidad de agua en Agricultura Intensiva de Regadío Jorge García Gómez Francisco López Bermúdez calidad y cantidad suficientes se ha convertido en la El actual paisaje rural Mediterráneo es el resultado de miles de años de interacción entre los cambios de clima y las prácticas agrícolas. Dicha evolución tuvo lugar bajo una compleja combinación de factores climáticos, edáficos, hidrológicos, geomorfológicos, sociales, culturales y tecnológicos que quedaron reflejados en el paisaje por el desarrollo de dos tipos principales de agricultura: la agricultura de secano y la de regadío. La agricultura de regadío es una actividad que comparte un espacio limitado con muchas otras actividades económicas, jugando un papel muy importante en la sociedad rural. Cualquier estrategia de gestión de la relación entre agricultura y desertificación ha de tener en cuenta no sólo la parte ambiental del problema sino Colección de folletos: C Número: 3 cuestión y el problema más importante para agricultores y gestores públicos, llegando incluso a ser asunto de confrontación social y política. Ha habido una reciente tendencia a la expansión de la agricultura de regadío desde las áreas tradicionales de riego hacia antiguas áreas de agricultura de secano. A escala global existe un movimiento hacia los países meridionales, en busca de un aumento de la producción con costes más bajos. ¿Por qué se han producido cambios en la agricultura de regadío? La superficie de regadío aumentó un 12 % en la Europa de los 12 (EU‐12), de 12.3 a 13.8 millones de hectáreas entre 1990 y 2000. En Francia, Grecia y España, la superficie de regadío aumentó un 29 % durante el mismo Rentabilidad y competencia por los recursos A una escala global, las actividades agrícolas también se periodo. desplazan hacia el sur, a otros países, buscando zonas Históricamente la agricultura de regadío ha ocupado los La agricultura de regadío es una actividad económica que donde la competencia por los recursos es menor y los mejores y más fértiles suelos, aquéllos en valles y comparte un espacio limitado con muchas otras costes más bajos. Este proceso afecta a la desertificación planicies aluviales de ribera, junto con las llanuras actividades económicas con las que compite (urbanismo, ya que la decisión final de cultivar no se toma de acuerdo costeras donde los inviernos tienden a ser más suaves. ocio…) y con numerosas y variadas presiones a la idoneidad del suelo sino desde una perspectiva Estas áreas presentan las mejores condiciones posibles (condiciones climáticas, movimientos de poblaciones, exclusivamente económica. En estos casos, es más para la agricultura de regadío y se hallaban próximas al expansión urbana, escasez hídrica…). La población en importante incluso tomar medidas de conservación del principal recurso necesario: el agua. Actualmente, la zonas costeras ha crecido un 3.44 % (en promedio, casi suelo. presión ejercida por otras actividades económicas y 0.5 millones de personas por año), lo que supone una sociales aumentando la demanda en estas áreas, así tasa de crecimiento un 25 % más rápida que la población El problema de los recursos hídricos como los desarrollos tecnológicos, ha hecho que los total de estos países. En agricultura, las provisiones de regadíos se encuentren ahora en el interior, en áreas agua necesitan fuertes inversiones e importantes El agua es un recurso crítico en regiones Mediterráneas tradicionalmente de secano. Las explotaciones agrícolas infraestructuras que necesitan de cierto grado de semiáridas. El uso agrícola del agua es el más de áreas de interior no tienen las mismas condiciones y desarrollo tecnológico para ser eficientes, junto con las demandado en el mundo entero. En los países características para el regadío que las tradicionales, pero adaptaciones del terreno y de la superficie del suelo. El Mediterráneos, la agricultura utiliza el 75‐80 % de los olos costes de producción son más baratos. De cualquier uso del suelo es muy intenso y la rentabilidad (por recursos hídricos. Existe una fuerte distribución regional modo, el suelo no suele ser el ideal para la agricultura de unidad de área) es muy elevada comparada con la de la demanda de agua de riego. Las 41 regiones regadío. agricultura de secano e incluso con otros usos europeas que presentan el mayor consumo de agua con alternativos del terreno. A escala local, las actividades 3 fines agrícolas (más de 500 millones m /año) se agrícolas desaparecen o se desplazan hacia zonas de encuentran todas en el Sur de Europa. A medida que se interior (donde todas estas presiones son menores), van desarrollando y aumentando en importancia otros dependiendo principalmente de la disponibilidad de sectores económicos (turismo, ocio, industria) aumenta suelo, agua y de las restricciones legales/políticas a la la competencia por este recurso, especialmente en expansión urbana/recreativa. Entre 1990 y 2000 se han aquellos países que tienen garantizada su seguridad 2 perdido casi 2000 km de zonas agrícolas a lo largo de la alimentaria. costa, con distintas tasas en diferentes países europeos. Esto ha ocurrido, por ejemplo, en Almería y en el Tecnología de riego Levante mediterráneo de España y en las regiones meridionales de Italia, Grecia y Chipre. La innovación es especialmente importante en agricultura. El objetivo es proporcionar más productos competitivos (nuevos, diferentes o de mejor calidad, o que la investigación está centrada en el aumento de la incluyen una variedad de cambios físicos, químicos y productos fuera de temporada) y superar las dificultadas producción vegetal sin considerar la sostenibilidad del biológicos en las propiedades del suelo y en los procesos asociadas, principalmente, a la escasez de recursos: suelo. edáficos que llevan a una reducción de la calidad del agua, suelo, energía… La tecnología hace a los suelo como recurso. Los procesos de degradación más agricultores más competitivos y las innovaciones se Consecuencias negativas de la agricultura de importantes asociados a la agricultura de regadío son la transmiten rápidamente entre ellos. El riego por goteo, regadío sobre la desertificación salinización, la sobreexplotación de aguas subterráneas, nivelado del terreno por láser, invernaderos, nuevos materiales plásticos, fertilizantes, maquinaria, investigación genética… Actualmente, es más sencillo adaptar la agricultura a áreas y condiciones donde no era posible con anterioridad. A los agricultores se les ofrecen nuevas oportunidades de uso del terreno. Además, existe un aumento de la disponibilidad de productos a lo largo de todo el año ya que la explotación de nuevas tierras supone también un mayor rango de condiciones climáticas. Finalmente, la utilización de nuevas tecnologías también contribuye a que los productos estén disponibles para mercados lejanos. La tecnología considerada de manera aislada no puede ser catalogada como positiva o negativa. Es el uso que se hace de ella el que tiene efectos diferentes. La tecnología ha cambiado completamente el enfoque de la labor agrícola, adaptando las actividades agrícolas a las condiciones del terreno y del suelo así como adaptando a éstos de acuerdo con las necesidades de producción. Normalmente, cuanto más intenso es el uso del suelo (y el regadío es uno de los más intensos en términos de utilización de recursos y de transformación del terreno) mayor es la probabilidad de que aparezcan efectos negativos en los suelos. El principal problema podría ser la contaminación del suelo por pesticidas y fertilizantes, El regadío ha transformado por completo el paisaje. Desde un punto de vista cuantitativo, la superficie cultivada en muchas partes del Mediterráneo ha aumentado para satisfacer el aumento de población, y el desarrollo de nuevas tecnologías han hecho posible que nuevas zonas sean aptas para el cultivo. Esta expansión se ha realizado a expensas de la eliminación de la vegetación natural y por el cambio de la agricultura de secano a la de regadío. Algunas de estas nuevas áreas no son adecuadas para una explotación intensiva, por lo que los problemas de degradación del territorio son El cambio en el uso del suelo sigue siendo una importante fuerza motriz de cambio climático, acelerándose últimamente por la expansión de los regadíos. Los patrones de cambio están empujados por políticas agrícolas, industriales y turísticas y por otras fuerzas motores socio‐económicas. Los agrosistemas tradicionales han sido amenazados por dos pautas diferentes: la intensificación de la agricultura y el abandono de la tierra. Se ha producido una importante pérdida de hábitats (p. ej. pastos, granjas mixtas, áreas naturales generalizados. Desde un punto de vista cualitativo, la agricultura intensiva ha impuesto un fuerte proceso selectivo de los ecotipos vegetales (subespecies, variedades, etc.) en busca de aquéllos más productivos. Esto ha supuesto una pérdida de biodiversidad y afecta al conjunto del ecosistema, favoreciendo los procesos de degradación. El elevado consumo de agua, la mecanización y la necesidad de utilizar más cantidad de productos agroquímicos la erosión del suelo, y los cambios de paisaje. pueden tener consecuencias muy negativas sobre la estructura del suelo y aumentar los riesgo de desertificación. Los procesos de degradación y semi‐naturales y humedales) extremadamente relevantes para la biodiversidad. La sostenibilidad del territorio significa que los cambios deben estar adaptados a las capacidades de carga y al potencial de los sistemas naturales. La combinación del desarrollo local, con parámetros de sostenibilidad, quiere decir mantener un profundo respeto por los valores culturales y naturales de las zonas y sus poblaciones. La cuestión clave es “¿qué clase de modelo de territorio, económico y social queremos?”. El cambio climático será un factor que incrementará los riesgos empresariales y los efectos negativos de la agricultura sobre la desertificación. Recomendaciones de gestión de los regadíos Medidas específicas: suelo, o el desarrollo de regadíos en áreas próximas para prevenir la desertificación puede evitar los problemas asociados con el abandono La reducción de la frecuencia de laboreo hasta un del territorio por parte de los agricultores. Así, los mínimo, junto con la aplicación sobre la superficie del agricultores pueden continuar con los cultivos de secano suelo de los restos de biomasa tras la cosecha, puede en áreas sensibles y percibir ingresos suficientes. Podría ayudar a aumentar los niveles de materia orgánica de los haber sitio para una nueva legislación agrícola que regule suelos y prevenir la erosión por viento y agua. Es las prácticas agrarias en estas áreas tendentes a importante mantener la superficie del suelo cubierto degradación y desertificación, y que apoye la tanto tiempo como sea posible. sostenibilidad. La desalación de agua puede ser una vía de solucionar La agricultura orgánica podría también ser una opción este actualidad, para combatir la desertificación. Este tipo de agricultura inevitablemente muy cara, y los costes se añaden a los incluye, en sus principios, al suelo como factor clave costes de producción de los cultivos. para un buen uso agrícola, por lo que la gestión debe La utilización de productos menos agresivos en la gestión centrarse en proteger y mejorar la estructura del suelo, integrada de plagas y/o la implementación de su actividad biológica y fertilidad, integrando todos los procedimientos de la agricultura orgánica puede ayudar factores (biológicos, económicos, sociales y culturales) a mantener en condiciones óptimas los suelos en un enfoque holístico y sostenible de gestión de los recursos naturales. Utilización del regadío como herramienta en la lucha Es necesario aclarar si este tipo de agricultura tiene consecuencias positivas o negativas sobre la desertificación, y si puede utilizarse como herramienta de lucha contra el proceso de degradación, pero no existe una respuesta sencilla. El principal factor a considerar es la idoneidad del suelo para el regadío. Debería ser el factor clave para decidir si una superficie de terreno se cultiva o no, pero la decisión no es tan fácil. Ya que relacionamos los problemas de desertificación con el bienestar humano, se deben incluir los aspectos socio‐económicos Podemos sugerir dos escenarios posibles: 1. Es posible gestionar el territorio de manera sostenible donde la seguridad alimentaria el bienestar socio‐económico no esté en peligro. En este caso, la idoneidad del suelo, junto con la disponibilidad hídrica, deberían ser los factores clave para decidir o no el cultivo. 2. A veces no es posible elegir no cultivar una zona pues la población rural se vería negativamente afectada. En este caso, deben intensificarse tanto la gestión como las prácticas de restauración. El regadío es una actividad muy intensiva por lo que de manera simultánea deben producirse actuaciones de restauración. problema, pero es, en la contra la desertificación Normalmente, las áreas con elevado riesgo de desertificación comparten condiciones geo‐climáticas y recursos naturales que las hacen poco apropiadas para la agricultura de regadío. Por este motivo, el regadío no es una opción habitual en estas zonas, pero a veces se permite para que la comunidad agrícola residente pueda mantenerse bajo condiciones adversas. Permitir o promover algo de regadío en campos donde los suelos son menos susceptibles a la degradación, utilizar prácticas específicas e intensivas de conservación de