EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) EL MODELO NEOCLÁSICO Y LA MICROECONOMIA Autores: Juan A. Vigo Deandreis y Leonardo Alberto PRESENTACION Lo que suele presentarse como Microeconomía, es en realidad el enfoque de la escuela neoclásica o marginalista. Entre los autores que participan de este espacio se destacan como los referentes más importantes a William Jevons (1835-1882), Carl Menger (1840-1921) y, principalmente, Alfred Marshall (1842-1924). Esta corriente del pensamiento se plantea reafirmar los postulados centrales de la economía clásica (Smith, Ricardo, Say), reformulando ciertos enfoques que habían hecho posible la crítica marxista del funcionamiento del capitalismo. Relativiza, entonces, la idea de que el valor de las mercancías se genera en la esfera de la producción; entregándose a la tarea de estudiar la determinación del “precio” de las mercancías como una resultante de la interacción de la Oferta y la Demanda, quienes a su vez se encuentran influidas por el primero. El siguiente párrafo de Marshall, puede resultar esclarecedor: “ Cuando Ricardo habla del valor considera que la utilidad es absolutamente esencial al valor, aunque no es su medida.(...) Y en otro lugar insiste acerca del modo en que las fluctuaciones de precios del mercado están determinadas por la cantidad disponible para la venta , por un lado y las necesidades y deseos de la humanidad por otro. Asimismo en una profunda, aunque muy incompleta, discusión de la diferencias entre valor y riqueza parece estar tanteando el camino hacia la distinción entre la utilidad marginal y la total. (…) Pocos autores de los tiempos modernos se han acercado tanto como Jevons a la brillante originalidad de Ricardo. Pero este autor parece haber juzgado a Ricardo y a Mill con excesiva severidad, y les ha atribuido doctrinas más estrechas y menos científicas que las que realmente profesaron. Y su deseo de subrayar un aspecto del valor al cual ellos habían dado una importancia insuficiente fue responsable de la manifestación que el valor depende completamente de la utilidad.(...) Jevons plantea que el trabajo determina a menudo el valor, pero sólo de un modo indirecto, al hacer variar el grado de utilidad de las mercancías por medio de un aumento o limitación de la oferta. De esta forma establece la siguiente cadena de causalidad: El costo de producción determina la oferta....la oferta determina el grado final de utilidad......el grado final de utilidad determina el valor. (…) En respuesta a Jevons debe formularse una cadena de causalidades menos errónea que la suya diciendo: La utilidad determina la cantidad que ha de ser ofrecida....la cantidad que ha de ser ofrecida determina el costo de producción....el costo de producción determina el valor porque termina el precio de oferta que se requiere para que los productores sigan produciendo”1 Traemos a colación esta cita pues, en ella, Marshall sostiene que Ricardo consideraba que la “utilidad” de la mercancía cumplía un rol esencial en la determinación del valor. Inclusive, en otro pasaje de su libro, Marshall agrega que el 1 Alfred Marshall – “Principios de Economía” (1891) – APÉNDICE I pag. 671 a 677. 1 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) error de Ricardo fue no haber hecho suficiente hincapié en el concepto de valor de uso, porque según Marshall, Ricardo consideraba que algo tan ostensible no merecía ser remarcado. Asimismo, y para equilibrar la cuestión, critica a Jevons por haber cometido, de alguna manera, un error simétrico al de Ricardo. Según Marshall, en su afán de criticar la teoría ricardiana del valor, Jevons habría sobrevalorado el rol de la “utilidad” haciendo desaparecer, virtualmente, la influencia del costo de producción sobre el precio. En definitiva, Marshall recorrerá un camino donde “utilidad” y “costo de producción”, incidirán sobre la demanda y la oferta, respectivamente. Oferta y demanda que, interactuando, determinará el “precio” de mercado. La denominación de Microeconomía, se debe a que, a través de este abordaje, se pretende extrapolar conclusiones para el conjunto del sistema mercantil capitalista, a partir de analizar, pormenorizadamente, el comportamiento de los “microcomponentes” del mercado. Los principales actores de un mercado son la oferta y la demanda. El modelo neoclásico se propone explicar el comportamiento de la oferta a partir de analizar la conducta de la pequeña unidad de producción (la empresa) como, asimismo, intentará dar cuenta del proceder de la demanda, estudiando el desenvolvimiento de la pequeña unidad de consumo (el consumidor). En este trabajo, intentaremos introducir al lector en el terreno microeconómico que plantea el modelo neoclásico, con el siguiente esquema: En la primera parte, desarrollaremos los principales conceptos básicos con los que se manejan en Microeconomía, relacionándolos con la obra del citado Alfred Marshall. En la segunda parte, se desplegará el modelo neoclásico en el marco de la “competencia perfecta” que es el ideal liberal acerca de las condiciones que deben imperar en un mercado; para que ninguno de los actores (fundamentalmente productores) esté capacitado para imponerle condiciones al conjunto de los participantes. Sin embargo, como dijimos, la competencia perfecta no es más que un ideal y, por ende, no suele verificarse en el mundo real. Es por ello que, en la tercera parte, abordaremos la temática de los mercados de “competencia imperfecta”. Estos mercados, que son los que predominan en el mundo real, se definen por oposición al mercado de competencia perfecta. Es decir que, a cada uno de ellos, se los definirá por carecer, de una o varias, de las características que posee el mercado competitivo Carencias que permitirán que algunos de los participantes en el mercado adquieran “poder de mercado”, cosa que no ocurre en “competencia perfecta”. 2 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Primera Parte LA FILOSOFIA UTILITARISTA Y EL PENSAMIENTO NEOCLÁSICO Cada vez que se reúne el consejo académico del University College of London, allí está él; detrás de un grueso cristal, encerrado en su vitrina, disfruta de presidirlo desde hace ya ciento ochenta años. Efectivamente, Jeremy Bentham, antes de morir, dispuso que vistiesen su esqueleto con su mejor traje y, portando una cabeza hecha en cera, se encuentra sentado en el mismísimo salón del consejo académico de la institución que él ayudó a fundar. ¿Qué ocurrió con la verdadera cabeza, aquella que acompañó a su esqueleto entre 1748 y 1832?, la misma fue momificada y guardada celosamente. A qué se debe nuestro interés en la cabeza de ese hombre; simple, de esa cabeza surgió la filosofía que da sustento al modelo neoclásico. Jeremy Bentham, en la mejor tradición de los estoicos, los epicúreos y el propio Espinosa, considera que las dos motivaciones básicas, que dirigen o determinan la conducta humana, son el placer y el dolor. El ser humano, como cualquier organismo vivo, tiende a buscar el placer y a evitar el dolor. Sólo dichas tendencias constituyen algo real y, por ello, pueden convertirse en un principio inconmovible de la moralidad: lo bueno y el deber moral han de definirse en relación a lo que produce mayor placer individual o del mayor número de personas. Decir que un comportamiento es bueno, significa que produce más placer que dolor. En su obra principal, “Introducción a los principios de moral y legislación” (1789), Bentham dejó plasmado lo que se conocería como el “utilitarismo”. Todo lo que produce placer al individuo se traduce en “utilidad” para este, en tanto que aquello que le produce dolor o insatisfacción será una pérdida de utilidad (lo que los neoclásicos definirán como “desutilidad”). Se asume consecuentemente que todo ser humano tiende a la maximización de su placer (utilidad) y minimización del dolor (costo), los medios elegidos para ello son irrelevantes prima facie. La cláusula prima facie indica no que cualquier medio sea bueno, sino que (siendo las consecuencias las mismas –en términos de satisfacción–) la elección de uno u otro sería moralmente indiferente. Hechas estas asunciones, es fácil ver que los asuntos morales podrían dirimirse fácilmente recurriendo a un simple cálculo utilitarista de las opciones o alternativas de acción puestas en juego. Finalmente, la atención hacia otras personas (denominada en los sistemas morales tradicionales bajo los términos de altruismo, bondad, amor, etc.) tiene cabida en el sistema de Bentham, pero en la medida en que satisfagan los postulados anteriormente mencionados, es decir, en cuanto contribuyan a la satisfacción del interés propio. 3 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Otro aspecto interesante del pensamiento de Bentham, es que sostiene la posibilidad de efectuar una “cálculo felicítico”; es decir que la “utilidad” sería medible. En ese sentido, Bentham sostiene que los distintos placeres que experimenta un individuo son cualitativamente idénticos y, en consecuencia, su única diferenciación es cuantitativa (según intensidad, duración, fecundidad - capacidad de generar, otros placeres-, pureza –medida en que no contienen dolor–, Extensión - cantidad de personas a las que afecta, etc.). En la segunda parte de este trabajo, veremos que esta afirmación de Bentham, generó una discusión al interior de la escuela neoclásica, en el sentido de definir si la utilidad era o no conmensurable. Los principales discípulos de Jeremy Bentham, fueron James Mill (1773 – 1836) y su hijo John Stuart (1806 – 1873) quien tuvo una influencia predominante sobre el pensamiento de Alfred Marshall. John Stuart Mill, en su obra “El Utilitarismo” (1863), va a plantear, al menos, dos diferencias con los postulados de Bentham; por un lado va a cuestionar la visión excesivamente egoísta de los postulados de su maestro y, por otra parte, sostendrá que los placeres no son cualitativamente indiferenciados. La primera crítica a su maestro, quedará plasmada en su formulación acerca del “principio de la felicidad”, allí sostendrá que uno debe actuar siempre con el fin de producir la mayor felicidad para el mayor número de personas, dentro de lo razonable. Esta postura está en sintonía con el pensamiento de Hutcheson (1694 – 1743) quien fuera un refernte de Adam Smith. Sin embargo, como Mill no define que es “lo razonable”, abre las puertas para que sus seguidores utilicen un criterio excesivamente restrictivo. En cuanto a la segunda diferencia con Bentham; Mill sostiene que los placeres intelectuales y morales son superiores a las formas más físicas de placer. Mill distingue entre felicidad y satisfacción, afirmando que la primera tiene mayor valor que la segunda, una creencia ingeniosamente encapsulada en la afirmación de que «...es mejor ser un ser humano insatisfecho que un cerdo satisfecho; mejor ser Sócrates insatisfecho que un necio satisfecho. Y si el necio o el cerdo, tienen una opinión diferente, es porque sólo conocen su propio lado de la cuestión.». CONCEPTOS BASICOS DEL ANALISIS MICROECONOMICO El funcionamiento de una economía capitalista descansa en un conjunto de mercados; entendiéndose por mercado, toda institución social que propicia el intercambio de bienes y servicios entre los componentes de esa sociedad. En cualquier caso, lo esencial en todo mercado es que los compradores y los vendedores de un bien o un servicio entran en contacto para comercializarlo a un precio que expresa la relación de cambio en dinero. 4 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Se plantea que las cantidades demandadas al igual que las cantidades ofrecidas de un bien dependen del precio del mismo. De modo tal que tanto las cantidades demandadas como las ofrecidas, constituyen las variables dependientes o explicadas; al tiempo que el precio del bien es la variable independiente o explicativa del comportamiento de las primeras.. A partir de esta relación funcional, surgen, por un lado, la LEY DE DEMANDA que plantea la existencia de una relación inversa entre precio y cantidades demandadas; y por otra parte, la LEY DE OFERTA que expresa la relación directa que se observa entre la cantidad ofrecida de un bien y su precio. En la segunda parte de este trabajo se desarrollará la argumentación que soporta estas leyes, no obstante lo cual, intentaremos delinear una primera aproximación a estas ideas, a partir de un párrafo del propio Alfred Marshall: “El caso más sencillo de equilibrio entre el deseo y el esfuerzo se halla cuando una persona satisface una de sus necesidades mediante su propio trabajo directo. Cuando un muchacho toma moras para comérselas, la acción de tomarlas es probablemente en sí mismo un placer para él mientras la realiza y, por algún tiempo mayor, el gusto de comérselas es más que suficiente para compensar el trabajo de tomarlas. Pero después que haya comido un gran número, el deseo de comer más disminuye mientras la tarea de tomarlas empieza a aburrirle, lo que puede ser más un sentimiento de monotonía que de cansancio. El equilibrio es alcanzado cuando al fin el deseo de jugar y las pocas ganas de tomar más moras compensa el deseo de comerlas. La satisfacción que puede conseguir tomándolas ha llegado a su máximo, pues hasta ese momento cada nueva fruta que se tomó ha agregado más placer que el que le ha quitado y después de ese instante cada fruta que tome le quitaría más placer que el que le daría”2 A partir de esta parábola que plantea Marshall, podemos extraer algunos elementos interesantes que, a la postre, van a ser determinantes de la visión que tienen los neoclásicos acerca del comportamiento de la oferta y la demanda. El primer elemento que encontramos, se refiere al hecho de que a medida que este muchacho va comiendo moras y su satisfacción de dicha necesidad se va cubriendo; el placer que le causa comer una mora más va disminuyendo. La segunda cuestión en la que deberíamos reparar, es que, a medida que avanza la recolección de moras, cada mora que recoge le cuesta un esfuerzo mayor que la anterior. Por último, Marshall nos dice que el muchacho continuará recolectando y comiendo moras, en tanto el mayor placer que le causa comer esa mora sea superior al esfuerzo que le ocasiona; Para luego agregar que el fin del juego llega cuando el placer que le quita recolectar la mora es equivalente al placer que le brinda comerla. 2 Marshall, Alfred “Principios de Economía” (1891) – Libro V – Pág. 275 5 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) En la cotidianeidad de nuestra vida, sabido es que, no somos capaces de proveernos todo aquello que necesitamos y, por ende, recurrimos a comprar aquello que no podemos producir; valiéndonos para ello del dinero ganado en la venta de las mercancías que nos dedicamos a producir. De modo tal que, para darle mayor verosimilitud económica al ejemplo de Marshall, deberíamos hablar de dos muchachos. Uno que recolecte las moras (el recolector) y otro que desee consumirlas (el consumidor). En este caso, el recolector de moras estará dispuesto a proveer de moras al consumidor no por simpatía ni por solidaridad (conceptos desterrados del universo clásico – neoclásico) sino para obtener un beneficio que estará representado por el precio que obtendrá por las moras. Sólo aceptará proveer las moras si el precio obtenido más que compensa el sacrificio que le impone la tarea de la recolección. En palabras del propio Marshall diríamos que: “…la oferta depende, principalmente, de la superación de la renuncia a sufrir incomodidades. Estas últimas son, generalmente, dos: el trabajo y el sacrificio que supone diferir el consumo (...) La incomodidad del trabajo puede surgir de la fatiga corporal o mental, o del hecho de efectuarse en un ambiente insano (...). Pero, sea cual fuere la forma de la incomodidad, su intensidad casi siempre aumenta con la intensidad y la duración del trabajo. Naturalmente, muchos trabajos se efectúan por el placer que proporcionan en sí mismos (...). Pero el móvil principal del trabajo, en el sentido que damos al término, es el deseo de obtener alguna ventaja material, la cual, en el estado actual del mundo, aparece generalmente, en la forma de ganancia de una cierta cantidad de dinero."3 Ahora bien, como ya nos explicó Marshall; a partir de determinado momento, el sacrificio que implica recolectar cada mora es siempre superior al que supuso obtener la mora anterior. He aquí la idea de que el Costo Marginal, o sea cuánto crece el costo total por adicionar una unidad más al producto total, es creciente. Por lo tanto, sólo cuando el precio es más elevado, se justifica recolectar y ofrecer una mora más. Tenemos pues, el principio de la Ley de la Oferta, a mayor precio mayor oferta. Tenemos que estudiar ahora lo que ocurre con el consumidor de moras. Este, para obtener las moras, no puede esperar obtenerlas de la solidaridad o a la simpatía del recolectar, sino que, como ya se lo explicara Smith, tendrá que apelar al egoísmo de este, a su apetencia de beneficio y, por ende, deberá pagar un precio por las moras. El precio que se le exige por cada mora, deberá guardar relación con el placer que le provoca consumir cada mora. Al respecto, nos explica Marshall, “La utilidad se considera como correlativa del deseo o necesidad. Se ha dicho que los deseos no pueden medirse directamente, sino de modo indirecto por los fenómenos exteriores a que dan lugar, y 3 Marshall, Alfred – Principios de Economía - Libro IV-Capítulo 1—Páginas 120, 121 y 122 6 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) que en los casos de que se ocupa principalmente la Economía, la medida se encuentra en el precio que una persona está dispuesto a pagar por el cumplimiento o satisfacción del deseo. (…) Existe una gran variedad de necesidades pero hay un límite para cada necesidad aislada. Esta tendencia familiar y fundamental de la naturaleza humana puede expresarse por la ley de necesidades saciables o de la utilidad decreciente en la siguiente forma: la utilidad total de una cosa para una persona crece con cada aumento de las existencias que de dicha cosa posee la persona aludida pero no con la misma rapidez. Si el stock aumenta en proporción uniforme, el beneficio derivado aumenta en proporción decreciente. En otros términos, el beneficio adicional que una persona deduce de un aumento dado en su provisión de una cosa, disminuye con cada aumento de las existencias que ya posee. Aquella parte de la cosa que se ve inducido a comprar puede denominarse su compra marginal de dicha cosa y la utilidad de su compra marginal puede denominarse la utilidad marginal” 4 En este párrafo, Marshall aborda una cuestión interesante que presenta el pensamiento neoclásico. Los liberales conciben al ser humano (HOMO ECONOMICUS), como alguien que tiene un deseo ilimitado de consumo, pues en ese consumo, se realiza. Sin embargo, Marshall, establece una diferencia entre ese deseo por consumir en general y el deseo de consumir un bien en particular. En ese último caso, plantea que la necesidad de determinado bien es saciable y, por ende, cuanto más se consume de un bien determinado, menos satisfacción produce adicionar una unidad más, de ese bien, al consumo total. Esta es la ley neoclásica de la “utilidad marginal decreciente” que desarrollaremos en la segunda parte. Sin embargo, ya podemos avizorar que cualquier consumidor, estará dispuesto a pagar menos por cada unidad adicional de consumo. Es decir; el precio que está dispuesto a pagar el consumidor, es aquel que es menor, a lo sumo igual, al placer adicional que le brinda esa unidad adicional de consumo. De modo tal que, si cada unidad adicional le proporciona menor “utilidad” que la anterior; el consumidor sólo demandará esa unidad cuando el precio de esta sea menor. He aquí pues, el embrión de la LEY DE LA DEMANDA que establece esa relación inversa entre precio y cantidades demandadas. ¿Cómo logra el consumidor establecer la comparación entre algo concreto como es el precio y algo no mensurable como la utilidad? Tal vez sea este el misterio más profundo del relato neoclásico; sin embargo, en la segunda parte trataremos de develarlo. 4 Alfred Marshall – “Principios de Economía” (1891) – Libro III – Cap III – pag 81 y 82 7 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) LA CUESTION DEL EQUILIBRIO Recordemos que, en el ejemplo de Marshall, que el final del juego llegaba cuando se igualaba el esfuerzo que causaba obtener la mora adicional con el placer que provocaba consumirla. He ahí una primera aproximación a la idea del equilibrio. Retomando nuestro ejemplo donde escindimos al muchacho amante de la moras, en dos personajes: un recolector y un consumidor; Podríamos pensar que deberá existir un, y sólo uno, precio que iguale la cantidad de moras que está dispuesto a ofrecer el recolector, con la cantidad de moras que, a ese precio, está dispuesto a demandar el consumidor. Ese precio es el “precio de equilibrio” y esa cantidad será la “cantidad de equilibrio”. En el modelo neoclásico, este único punto de equilibrio posible, es un “equilibrio estable”. Nos dice el propio Marshall: “Cuando la demanda y la oferta están en equilibrio, la cantidad de mercancía que se produce en una unidad de tiempo puede denominarse cantidad de equilibrio y el precio al cual se vende, precio de equilibrio. Tal equilibrio es estable, es decir, que el precio si se aparta de él, tenderá a volver al mismo como un péndulo oscila alrededor de su punto interior y es una característica de los equilibrios estables el que en ellos el precio de demanda es mayor que el precio de oferta para cantidades exactamente menores que la de equilibrio y viceversa. (…) Podemos concluir que, por regla general, cuanto más corto sea el período que consideramos mayor deberá ser la atención que dediquemos a la influencia de la demanda sobre el valor; y cuanto más largo sea el período más importante será la influencia del costo de producción sobre el valor.”5 La idea de “equilibrio estable”, proveniente de la mecánica, indica que cuando el fenómeno estudiado, por alguna fuerza exógena, sale del equilibrio, tiene mecanismos intrínsecos que lo devuelven a él. En síntesis, es la famosa “autorregulación” (mano invisible) de los mercados que ya estaba presente en el pensamiento clásico. Un Precio que se ubicase por encima del precio de equilibrio; estimularía la realización de un mayor esfuerzo por parte del recolector y, en cambio, desincentivaría el deseo de comer moras por parte del consumidor. Es decir, al subir el precio, habría una mayor oferta de moras y, al mismo tiempo, una menor demanda de las mismas; produciéndose un exceso de oferta de moras. El recolector, entonces, deberá ir bajando sus pretensiones y permitir la caída del precio de la moras. En ese proceso, el recolector irá reduciendo la oferta, al mismo tiempo que el consumidor se verá tentado de aumentar la demanda, hasta retornar al equilibrio. Un movimiento inverso del precio, es decir si este se ubicase por debajo del precio de equilibrio, promoverá un efecto contrario. Es decir, se generaría un exceso de demanda que haría subir el precio hasta retornar al equilibrio. 5 Alfred Marshall – “Principios de Economía” (1891) – Libro V - Pág 283, 284, 286 y 290 8 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Otra interpretación que se hace del punto de equilibrio aparece asociada a los conceptos de EXCEDENTE DEL CONSUMIDOR y EXCEDENTE DEL PRODUCTOR. El “excedente del consumidor”(EXC c) es la diferencia entre el precio que estaría dispuesto a pagar el consumidor, antes que privarse de la cosa, y el que realmente paga por ella; es la medida económica del excedente de satisfacción que obtiene el consumidor. Este excedente se explica por la idea de la utilidad marginal decreciente; el consumidor estará pagando el precio que estaba dispuesto a pagar por la última unidad consumida, siendo que las anteriores le brindaron una mayor utilidad marginal. Algo similar puede decirse del “excedente del productor” (EXC p en el gráfico 1). El precio de oferta de la mercancía es el que desea obtener para producir la última unidad; unidad cuyo costo marginal es superior al de las anteriores. De modo tal que, respecto de las unidades producidas antes de la última, se obtiene un excedente de beneficio. Es decir que el concepto de excedente del productor, descansa sobre la teoría del costo marginal creciente. En el punto de equilibrio (E), donde se igualan precio de oferta y precio de demanda, tanto el productor como el consumidor obtendrán la máxima satisfacción. P Pa OFERTA EXC c E E Pe ---------------------------------- EXC p Pb 0 DEMANDA Qb Qe Qa Q Gráfico 1: Equilibrio, excedente del consumidor y excedente del productor Nociones sobre Elasticidad Ha quedado establecido que existe una relación directa entre precio y cantidades ofrecidas (Ley de la Oferta), en tanto se verifica una relación inversa entre precio y cantidades demandadas (Ley de la Demanda). Sin embargo, resulta interesante estudiar el grado de sensibilidad que pueden tener tanto la oferta como la demanda, ante variaciones en el precio del bien. Al respecto, refiriéndose a la demanda, Marshall nos dice: “La única ley universal relacionada con el deseo de una mercancía por parte de una persona es aquella que establece que ésta disminuye, en igualdad de circunstancias, con cada aumento de su provisión de dicha mercancía, pero esta disminución puede ser lenta o rápida. Si es lenta, el precio que la persona dará por la mercancía no bajará mucho a consecuencia de un aumento considerable de la provisión del mismo, y una pequeña baja del precio originará un aumento comparativamente grande en sus compras; pero si es rápida, una pequeña baja de precio sólo causará un aumento muy pequeño de sus compras. En el primer caso su 9 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) disposición a comprar la cosa se expande bajo la acción de un pequeño aliciente: la elasticidad de sus necesidades, podemos decir, es grande. En el segundo el aliciente adicional que le proporciona una baja en el precio apenas es causa para que su deseo de comprar aumente: la elasticidad de su demanda es pequeña (..) Podemos decir de un modo general que la elasticidad (o correspondencia) de la demanda en un mercado es grande o pequeña según que la cantidad demandada aumente mucho o poco frente a una baja de precios dada, o disminuya poco o mucho frente a un alza de precios dada”6 El concepto de “elasticidad”, es utilizado en economía para determinar el grado de sensibilidad que tiene la variable dependiente o explicada, respecto de variaciones experimentadas por la variable independiente o explicativa que influye sobre aquella. La forma más precisa de determinar ese grado de sensibilidad, es mediante el cociente de variaciones porcentuales. El cuál nos indicará cuanto varía porcentualmente la variable dependiente o explicada, cuando se produce una variación porcentual del 1% en la variable independiente o explicativa: Si este cociente resulta ser mayor que 1.-, se dice que la elasticidad es “elástica”, o sea que la variable dependiente es altamente sensible a las variaciones en la variable explicativa. Si el cociente fuese inferior a 1.-, se dirá que la elasticidad es “inelástica”, o sea que la variable dependiente es poco sensible a las variaciones en la variable explicativa. Por último si la elasticidad es igual a 1.- se habla de una “elasticidad unitaria” que implica que el grado de respuesta de la variable dependiente es equiproporcional a la variación experimentada por la variable independiente. A nuestros fines, resultará de interés conocer la “Elasticidad precio de la demanda” y la “Elasticidad precio de la oferta”: 6 Alfred Marshall – “Principios de Economía” (1891) – Libro III - Capítulo 4 – Páginas 90 y 91 10 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Habrá advertido el lector que la elasticidad precio de la demanda se encuentra precedida por el signo menos; esto ocurre en virtud de que, como es sabido, la relación entre cantidades demandadas y precio siempre es inversa y, por lo tanto, al anteponer el signo menos, logramos trabajar con magnitudes positivas. En el caso de la Elasticidad precio de la oferta, la ecuación es similar, aunque sin que exista la necesidad de utilizar el signo menos pues la relación funcional entre cantidades ofrecidas y precio es directa. En relación al análisis gráfico vinculado al concepto de ELASTICIDAD, PRECIO DE LA DEMANDA el gráfico 2 desarrolla el caso de la DEMANDA INELÁSTICA. Así, puede observarse que, el aumento del precio de un bien supera la caída de la cantidad demandada o bien la disminución en el precio del bien supera al aumento de la cantidad demandada. Este caso responde a los bienes que satisfacen necesidades primarias y para los empresarios que los producen un aumento del precio de los mismos significará un aumento del ingreso por ventas. En el gráfico 3 se desarrolla el concepto de DEMANDA ELÁSTICA. En este caso el aumento del precio de un bien es menor a la caída de la cantidad demandada o la disminución en el precio del bien es menor al aumento de la cantidad demandada. Este caso responde a los bienes que satisfacen necesidades secundarias y para los empresarios que los producen la disminución del precio de los mismos significará un aumento del ingreso por ventas. 11 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) GRAFICO 2: Demanda inelástica P GRAFICO 3: Demanda elástica P ▼Q ▼Q ▼P ▼P ▲P ▲P ▲Q ▲Q D +Q D Q Q En la segunda parte, retomaremos estos conceptos, vinculándolos con la maximización del beneficio en un mercado de competencia perfecta. +Q 12 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Segunda Parte: COMPETENCIA PERFECTA Como ya se ha dicho, lo que los manuales de Economía acostumbran denominar “microeconomía” es, en realidad, la visión de la escuela neoclásica (marginalista) respecto del funcionamiento del sistema capitalista. Se pretende explicar el comportamiento del mercado a partir de estudiar la conducta de las pequeñas unidades económicas. Se explicará pues el comportamiento de la demanda a partir de la teoría del consumidor y se dará cuenta del proceder de la oferta estudiando el comportamiento de la empresa. De la interacción de la oferta y la demanda se deriva la idea del “equilibrio estable” que impera en cada mercado particular y, a partir de allí, resulta un juego de niños afirmar que si todos, y cada uno de, los mercados tienden al equilibrio, el sistema capitalista todo goza de ese equilibrio. Para explicar esto se construye lo que se denomina un modelo; entendiéndose por tal, una descripción deliberadamente simplificada de la realidad, para tratar de explicar el funcionamiento de determinado fenómeno. Cualquier fenómeno es la resultante de múltiples estímulos que operan sobre él, en distintas direcciones y con diferentes intensidades. Lo que intenta quien construye un modelo es elegir aquellos estímulos que más influyen sobre el fenómeno que se desea explicar. Los elementos presentes en un modelo son básicamente tres: 1) Los supuestos, es decir aquellas cuestiones que no serán discutidas dentro del modelo y que se darán por ciertas. Son, a los fines del modelo, “verdades” que no podrán ser negadas por nada de lo que allí se afirme. 2) Las variables dependientes o explicadas que, como su nombre lo indica, es el fenómeno cuyo comportamiento pasado el modelo intenta explicar y cuyo comportamiento futuro el modelo intenta predecir. 3) Las variables independientes o explicativas que, a juicio de quien construye el modelo, son los estímulos que más influyen sobre el fenómeno. En tanto se logre explicar el fenómeno con pocas variables independientes más eficiente será el modelo. Los supuestos del modelo neoclásico son los siguientes: a) Mercado de competencia perfecta: Lo que encierra las características de atomización, producto homogéneo, perfecta información, libre movilidad de participantes y neutralidad del estado. a.1) Por atomización, se entiende un mercado donde tanto los productores como los consumidores sean muchos y pequeños, actuando tanto unos 13 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) como otros en forma independiente. Es decir que todos los productores compiten entre sí para colocar su mercancía y lo mismo hacen los consumidores para obtenerla. a.2) Cuando se habla de producto homogéneo, se desea establecer que todos los vendedores ofrecen una mercancía que es cualitativamente igual; es decir que no existe ningún tipo de diferenciación ni real ni creada por la vía de la publicidad. De este modo a los compradores les resulta indistinto comprarle a cualquier vendedor y terminarán comprando al precio más ventajoso. Hay autores que completan esta característica exigiendo que, a los vendedores, también les resulte indiferente venderle a cualquier comprador; cosa que no ocurre, por ejemplo, en los mercados oligopólicos con empresas integradas verticalmente. a.3) La perfecta información implica que todos los participantes en el mercado conocen los siguientes datos: - La calidad del producto homogéneo que se esté transando en el mercado. - El precio de mercado, es decir el precio al que se concretó la última operación de compraventa. - El precio de oferta, o sea aquel al cual se está intentando vender la mercancía. - El precio de demanda que, recíprocamente, es el precio a qué se está intentando comprar la mercancía en cuestión. De toda esta información la más importante es el precio de mercado cuya evolución resume toda otra información. a.4) La libre movilidad de los participantes implica que no deben existir trabas tecnológicas ni legales ni económicas para el ingreso y la salida del mercado por parte de los productores. a.5) Se entiende por neutralidad del estado que las decisiones del estado tanto en el ámbito del gasto cuanto, fundamentalmente, en lo que atañe a las decisiones de carácter tributario no deben inducir la conducta de los participantes. Las decisiones del estado deben recaer equitativamente sobre todas las actividades y sobre todos los participantes en una misma actividad. b) El Homo Economicus; se supone que todos los participantes en el mercado con racionalidad económica, basados en el principio hedonista de conseguir la máxima satisfacción con el mínimo esfuerzo. Por otra parte ese ser humano (Homo economicus) tiene un deseo ilimitado de consumo que es lo que lleva afirmar que los recursos son escasos; y c) El objetivo del consumidor es la maximización de la utilidad total y el objetivo del productor es la maximización del beneficio. 14 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Además están las variables dependientes o explicadas del modelo son: a) las cantidades demandadas y b) las cantidades ofrecidas. Por último las variables independientes o explicativas serán las siguientes: a) Las cantidades demandadas dependerán: del precio del bien (P), del precio de los bienes sustitutos (Ps), del precio de los bienes complementarios (Pc), el ingreso de los consumidores (Y) y de los Gustos o moda (G). Qd = f (P; Ps; Pc; Y; G) (-) (+) (-) (?) (+) b) Las cantidades ofrecidas dependerán: del precio del bien (P), del precio de los bienes sustitutos desde el punto de vista del productor (Psp), del Costo de Factores (CF) y del desarrollo tecnológico (T). Qo = f (P; Psp; CF; T) (+) (-) (-) (+) Como se puede ver, la única variable independiente que está presente tanto en Qd como en Qo es el precio de la mercancía (P). Por lo tanto esa será la variable elegida para construir las curvas de Oferta y Demanda; aplicando la condición de ceteris paribus7 a todas las variables excepto al precio, se determinan las curvas de oferta y demanda que resumen las conductas de oferentes y demandantes a lo largo de los diferentes precios posibles que puede alcanzar la mercancía. Nos quedan las siguientes ecuaciones: Qo = f (P) Qd = f (P) …………(+) …………(-) Existirá uno y solo un precio que iguale oferta con demanda siendo ese punto el equilibrio estable del mercado. Cualquier variación en el precio de mercado producirá movimientos a lo largo de las curvas que describirán excesos de oferta o de 7 Se suponen fijas o parametrizadas todas las demás variables que influyen sobre el fenómeno y se observa el efecto aislado que tiene la variable elegida. 15 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) demanda, los cuáles, según la visión neoclásica, tenderá a retornar al equilibrio por mecanismos intrínsecos del libre juego de oferta y demanda: El punto β es el equilibrio estable si el precio se ubica por encima de Po se producirá un exceso de oferta. Ante esto los oferentes competirán entre sí para lograr vender su producto y esa competencia se dará a través del precio. Por ende, el precio comenzará a caer y, en ese proceso, también se reducirá la cantidad de oferentes en tanto que aumentarán los demandantes. Este movimiento a lo largo de las curvas culminará nuevamente en el punto β Recíprocamente, cuando el precio se ubique por debajo de Po, se producirá un exceso de demanda que se ajustará por la competencia que se producirá entre los demandantes la cuál hará subir el precio de mercado hasta que el mercado retorne a β. VARIABLES QUE SUBYACEN EN LAS CURVAS DE OFERTA Y DEMANDA Así como las variaciones en el precio del bien (Po) generan movimientos a lo largo de las curvas de oferta y demanda; las restantes variables que afectan a oferta y demanda generan desplazamientos de las citadas curvas. Cuando esas variables cambian y, por lo tanto, producen modificaciones en las variables dependientes, los mismos son reflejados mediante movimientos expansivos o contractivos de las curvas de oferta y demanda. Como se puede apreciar en el GRAFICO 5, se habla de desplazamiento expansivo de la demanda cuando se mueve hacia D´, en cambio cuando el movimiento se produce hacia D” se habla de un desplazamiento contractivo de la demanda. Por otra parte, en el GRAFICO 5, se muestra el movimiento expansivo de la curva de oferta (O´) y el desplazamiento contractivo (O”) 16 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) P GRAFICO 5 GRAFICO 5 5.A 54 O” P O O O´ P0 P0 D´ D D” Q0 D Q0 Q VARIABLES QUE AFECTAN A LA CURVA DE DEMANDA Como ya se dejó establecido las variables que subyacen en la curva de demanda son el precio del bien sustituto, el del complementario, el ingreso y los gustos. Ahora, será aplicada la condición de ceteris paribus, aislando el efecto que cada una de estas variables produce sobre la curva de demanda del bien que se está analizando: 1) Precio del bien sustituto (Ps): Son bienes sustitutos aquellos que pueden consumirse alternativamente logrando la satisfacción de una misma necesidad (ej.: camisa y remera); siendo, entonces que, cuando crece la demanda de uno de ellos, cae la del bien sustituto y viceversa. Si “A” y “B” son bienes sustitutos; cuando aumente el precio de “A”, los consumidores reducirán el consumo de este bien y lo reemplazaran por el de “B”, que satisface similarmente la misma satisfacción, generando así un movimiento expansivo de la curva de demanda de “B”. Por lo tanto puede decirse que el aumento del precio de un bien sustituto, redunda en un desplazamiento expansivo de la curva de demanda del bien que estamos analizando (la curva de demanda se desplazará hacia D´). Desde luego que una reducción en el precio del bien sustituto, generará el efecto contrario. 2) Precio del bien complementario (Pc): Se habla de que dos bienes son complementarios cuando es preciso consumirlos conjuntamente para dar satisfacción a determinada necesidad (ej. Automóvil y combustible). 17 Q EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Si “A” y “B” son bienes complementarios; cuando aumente el precio de “A”, los consumidores reducirán el consumo de este bien y consecuentemente también reducirán el consumo de “B”, generando así un movimiento contractivo de la curva de demanda de “B”. Por lo tanto puede decirse que el aumento del precio de un bien complementario, redunda en una desplazamiento contractivo de la curva de demanda del bien que estamos analizando (la curva de demanda se desplazará hacia D”). Desde luego que, una reducción en el precio del bien complementario, generará el efecto contrario. 3) El Ingreso de los consumidores (Y): Para hacer una referencia a los efectos que produce una modificación en el ingreso sobre la curva de demanda; deben diferenciarse dos tipos de bienes, los bienes normales y los bienes inferiores: 3.1) Los bienes normales son aquellos que gozan de buena reputación entre los consumidores. Es decir que estos entienden que tales bienes satisfacen adecuadamente sus necesidades. En estos casos, cuando el ingreso mejora, el público se volcará a consumir una cantidad mayor de estos bienes; en tanto que sólo se privará de ellos ante una caída de sus ingresos. Puede decirse entonces que un incremento del nivel de ingreso, provocará un movimiento expansivo de la curva de demanda de cualquier bien normal (desplazamiento hacia D´). Por el contrario, una caída en el nivel de ingreso, inducirá a un desplazamiento contractivo de la curva de demanda (hacia D”) 3.2) Los bienes inferiores, en cambio, son aquellos que no son bien valorados por la sociedad; es decir que el público entiende que no satisfacen adecuadamente sus necesidades aunque tienen la virtud de ser mas baratos. De modo tal que los consumidores sólo los demandan cuando se ven obligados a hacerlo por el escaso poder adquisitivo que tienen. Por los tanto, cuando se verifica una mejora en el nivel de ingreso, la curva de demanda de estos bienes experimenta un movimiento contractivo (hacia D”). Contrariamente, ante una caída del nivel de ingreso de los consumidores, la curva de demanda, de estos bienes, mostrará un desplazamiento expansivo (hacia D´). 4) Los Gustos de los Consumidores o La Moda (G): En la medida que un determinado bien se “ponga de moda”, su curva de demanda experimentará un movimiento expansivo (desplazándose hacia D¨). En cambio, cuando deja de ser moda o, mas aún, si sufre un proceso de obsolescencia, su curva de demanda mostrará un desplazamiento contractivo hacia D”. 18 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) VARIABLES QUE AFECTAN A LA CURVA DE OFERTA El paso siguiente es aplicar la condición de ceteris paribus para analizar como afectan a la curva de oferta, las variables que subyacen en ella: 1) El precio del bien sustituto desde el punto de vista del productor (Psp): Se define aquí a los bienes sustitutos como aquellos que pueden producirse alternativamente, con las mismas dotaciones de Capital, Tierra y Trabajo. Es decir que el productor debe decidir si producirá uno o el otro; buscando, desde luego, la maximización de su beneficio (ej. Un productor agropecuario de la pampa húmeda debe decidir si sembrará trigo, maíz o soja). En tal sentido, ceteris paribus, un aumento en el precio del bien sustituto, mejora el beneficio en la comercialización del mismo y, por lo tanto, el empresario se decidirá por producir ese bien, en detrimento del bien cuya oferta se analice. En resumen, un aumento del precio del bien sustituto, provocará un desplazamiento contractivo de la curva de oferta del bien analizado (se moverá hacia O”); en tanto que una caída en el precio del bien sustituto, inducirá a una suba en la oferta del bien analizado que se verá reflejado en el desplazamiento expansivo de dicha curva (hacia O´). 2) El Costo de los Factores (CF): Se entiende por costo de factores, lo que el empresario debe abonar por la utilización de los factores de producción que no son de su propiedad (salarios, renta, tasa de interés, insumos, etc.). De modo tal que, cualquier aumento del costo de los factores redundará en una caída del beneficio, lo que implicará una reducción en la producción del bien al que nos estemos refiriendo (en este caso la curva de oferta experimenta un desplazamiento contractivo hacia O”). Una caída del costo de los factores, provocará el efecto inverso y la curva de oferta se moverá hacia O´. 3) La Tecnología Existente: El patrón tecnológico o desarrollo tecnológico con que cuenta determinada rama de producción, en un momento dado, pone un techo a sus posibilidades de oferta, la cuál se conoce como Frontera de Posibilidades de Producción (FPP). En la medida que, a partir de nuevos inventos o de mejoras incorporadas a lo existente, se amplíe esa FPP, la curva de oferta del producto tendrá un desplazamiento expansivo dirigiéndose hacia O´. En cambio, en presencia de una 19 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) destrucción tecnológica o de una tecnología que fuese alcanzada por un proceso de obsolescencia, la FPP se contraerá teniendo un efecto contractivo sobre la curva de oferta que se dirigirá hacia O”. LA TEORIA DEL CONSUMIDOR Y LA CURVA DE DEMANDA INTRODUCCION Hasta aquí se ha planteado que existe una relación inversa entre las cantidades demandadas de cualquier bien y su precio, amparándonos en la denominada “ley de la demanda”. Ahora resulta necesario explorar por qué los neoclásicos sostienen que la demanda se comporta de ese modo. La escuela neoclásica funda su modelo en una teoría subjetiva del valor. Es decir que el valor de las mercancías está estrechamente vinculado a su “valor de uso” o a la utilidad de un bien para satisfacer determinada necesidad. Sin embargo, la utilidad que puede brindar determinado bien no es la misma para todos los consumidores, de allí el carácter subjetivo de esta forma de encarar la medición del valor. Si para cada individuo, la utilidad de un bien es diferente, diferente será el valor que cada uno le asigne a ese bien; ¿Cómo puede, entonces, fijarse un valor de mercado? Los neoclásicos entienden que de la interacción de los diferentes sujetos (la cual tendrá lugar en el mercado) surgirá una parte importante de la determinación del valor (la otra parte tiene que ver con el comportamiento de la oferta, la cuál abordaremos mas adelante). Esta forma de abordar la cuestión del valor se contrapone a una teoría objetiva del valor, como es la teoría del valor trabajo en la que Marx cimenta todo su análisis del sistema capitalista. Puede pensarse que los neoclásicos tenían el objetivo (no declarado) de criticar la teoría del valor trabajo que sacaba a la luz las contradicciones de una sociedad de clases, que ellos pretendían mantener sumergida en una idílica comunidad de individuos que encuentran, en el mercado, la mejor forma de asignar el producto y reasignar sus recursos. Sin embargo, para sustentar su teoría, también debían confrontar con quien fuera su más preciado mentor ideológico. Efectivamente, fue Adam Smith quien sostuvo que no se podía encarar el estudio del valor a partir de una teoría subjetiva del valor. Para probar la ineficiencia del “valor de uso” como medida de valor, Smith recurrió a la paradoja del agua y el diamante. Allí explicitaba el hecho de que siendo el agua un bien esencial para vida humana (y por lo tanto con un alto “valor de uso” para todo consumidor), su valor, en el mercado, era muy inferior al del diamante, cuya utilidad era muy poca. Concluía, entonces, que no habría de ser el “valor de uso” la sustancia de valor de las mercancías. Los economistas neoclásicos comenzaron, entonces, por responder esta “paradoja”. Lo hicieron afirmando dos cuestiones; la primera se refería a que una 20 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) teoría del valor sólo podía aplicarse a bienes que fuesen escasos, pues sólo estos bienes tenían necesidad de ser asignados mediante mecanismos mercantiles 8 . El segundo argumento, el que le va a legar un apodo a la escuela neoclásica, se refería a que lo que determina el valor de un bien no es la utilidad absoluta de ese bien sino su “utilidad marginal”. Se entiende por utilidad marginal de un bien x, cuánto se incrementa la utilidad total de un individuo, al adicionar una unidad de ese bien x, a su consumo total (manteniéndose constante el consumo de las restantes mercancías). Asimismo los economistas neoclásicos sostienen que esa utilidad marginal es decreciente; es decir que a medida que se incrementa el consumo de un bien, la utilidad que agrega cada unidad adicional de ese bien es menor que la anterior. Esto se explicaría por el hecho de que, cuanto más abundante es el consumo de un bien, mas satisfecha se encontraría la necesidad que este bien cubre. Volviendo a “la paradoja”; los neoclásicos sostienen que, en condiciones normales, los individuos consumen agua en las cantidades necesarias y suficientes para su subsistencia y, por ende, agregar una unidad adicional de agua, a su consumo total, le reporta una pequeña utilidad marginal. En cambio, en general, el consumo individual de diamantes es muy pequeño y, entonces, adicionar una unidad de “diamantes”, suele reportar una alta utilidad marginal a todos (o a la mayoría de) los consumidores. Aquí radicaría, entonces, la explicación de que el diamante tenga un valor superior al del agua. Quedaba por definir cómo medir la utilidad que brinda el consumo de determinado bien y, en general, poder determinar el nivel de utilidad total que puede alcanzar un individuo. Los primeros autores que abordaron este tema, William Stanley Jevons, León Walras, Karl Menger y el mismo Alfred Marshall, sostenían que la utilidad era medible en términos “cardinales”, es decir que existía una unidad de medida de la utilidad que era “el útil”. Por lo tanto, las diferencias entre dos medidas de utilidad tienen un sentido numérico; en tal sentido, todo consumidor estaría en condiciones de afirmar, por ejemplo, que el quinto vaso de agua le reporta una utilidad marginal de 4 útiles y que la primera unidad de diamante le confiere una utilidad marginal de 8 útiles. A todas luces, esto suena un poco oscuro… no conformes con explicar el valor de las mercancías a través de las valoraciones subjetivas de los distintos consumidores; ahora resulta que esa subjetividad puede medirse “exactamente” a partir de una unidad de medida cuya magnitud se desconoce. Es decir una unidad de medida (“el útil”) que también sería subjetiva. Para aquellos lectores que estén experimentando el mismo grado de fastidio y desorientación que experimentaron los autores de este trabajo cuando tomaron contacto, por primera vez, con esta teoría; debe agregarse que una segunda camada 8 En aquellos “dorados tiempos”, el agua era sobrabundante y su valor prácticamente nulo…Tal vez, en un futuro no muy lejano, la paradoja del agua y el diamante pierda el carácter de paradoja. 21 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) de neoclásicos (Slutzky, Hicks y Paretto) desestimó este supuesto de la utilidad medible en sentido cardinal, para reemplazarlo por la idea de que la utilidad de los bienes era medible en sentido ordinal Esto quiere decir que los consumidores pueden establecer sus preferencias, aunque no puedan medirlas numéricamente. Puedo decir, entonces, que prefiero consumir una primer unidad de diamante antes que un quinto vaso de agua, aunque no pueda hablar de ni de 8 ni de 4 útiles. Haciendo este solo cambio, los “ordinalistas” reconstruyen la teoría del consumidor arribando a las mismas conclusiones que sus antecesores, los “cardinalistas”. DESARROLLO DE LA TEORIA DEL CONSUMIDOR Primeramente, será desarrollada la teoría considerando que la utilidad puede ser medida cardinalmente, luego entendiendo que la utilidad sólo puede ser medible en sentido “ordinal”; pudiendo observar que las conclusiones a las que arriban son las mismas. Por último, se demostrará que la forma típica de la curva de demanda, se deriva de esta teoría del consumidor. SUPUESTOS ADICIONALES Además de los supuestos que ya han sido explicados anteriormente (Homo Economicus y Mercado de Competencia Perfecta), esta teoría incorpora algunos supuestos adicionales: a) Los consumidores siempre están en condiciones de establecer sus preferencias. Es decir que puestos ante dos bienes A y B, podrán expresar que prefieren A o que prefieren B o que son indiferentes ante ambos. b) Las preferencias de los consumidores tienen carácter “transitivo”; o sea que sus decisiones son consistentes. Supongamos un consumidor que debe elegir entre tres bienes A, B y C. Entre A y B, manifiesta preferir A y puesto a elegir entre B y C, indica que prefiere B; entonces, cuando se lo interrogue sobre su preferencia entre A y C, deberá elegir A ya que cualquier otra respuesta no sería consistente con sus elecciones anteriores. c) Los consumidores siempre preferirán consumir una mayor cantidad de cada una de las mercancías. Supongamos la existencia de dos canastas de bienes A y B; la canasta A incluye un departamento, un auto, 2 trajes, 30 kg de carne y 3 kg de pan, en tanto que la canasta B, también contiene un departamento, un auto, 2 trajes, 30 kg de carne y 3 kg de pan, pero además incluye un caramelo. En ese caso todos los consumidores preferirán la canasta B antes que la canasta A, PLANTEO CENTRAL DE LA TEORIA Considerando los supuestos enunciados y recordando que la utilidad marginal es decreciente, la teoría plantea que todo consumidor racional, en base a sus preferencias, tratará de elegir la canasta de bienes que maximice su nivel de 22 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) utilidad total, sujeto a su restricción presupuestaria; restricción presupuestaria que está determinada por el ingreso del consumidor y los precios de las mercancías. La maximización del nivel de utilidad del consumidor se alcanzará cuando, habiendo asignado completamente su ingreso entre las diversas mercancías, la relación entre la UMg de cada mercancía y el precio de la misma sea igual para todas las mercancías elegidas. Otra forma de expresarlo sería decir que, en la canasta óptima, la utilidad marginal del último peso gastado en cada una de las mercancías que la componen debe ser igual para todas las mercancías: Cuando el consumidor alcanza una canasta de bienes con esta característica, ya no puede reemplazar el consumo de un bien por otro sin empeorar su nivel de utilidad total. EL ENFOQUE “CARDINAL” DE LA TEORIA DEL CONSUMIDOR Suponiendo la existencia de un consumidor que debe integrar su canasta optima combinando el consumo de dos bienes “X” e “Y”; que su restricción presupuestaria está determinada por su ingreso que asciende a $ 6.- y que los precios de mercado son los siguientes: Px = $ 1.- y Py = $ 2.-. En la Tabla 1 se consignan las distintas utilidades marginales que le reportan al consumidor, las unidades consumidas de cada uno de los bienes; en tanto que en la Tabla 2 se muestran todas las combinaciones posibles de “X” e “Y”, considerando que el consumidor gaste íntegramente su ingreso. Cabe aclarar que las utilidades marginales indicadas son obviamente arbitrarias, aunque respetan la condición de que la utilidad marginal es decreciente: TABLA 1 TABLA 2 23 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Como se puede apreciar, la combinación que optimiza la utilidad total del consumidor es la de 4.- unidades de “X” y 1.- unidad de “Y”. Si el consumidor quisiese sacrificar una unidad de “Y”, para adicionar dos unidades de “X”, su nivel de utilidad total descendería de 42.- a 36.- y si intentase sacrificar dos unidades de “X” para adicionar una unidad de “Y”, también caería su nivel de utilidad total desde 42.hasta 40.-. En la canasta óptima que se ha determinado se cumple la condición de la teoría en el sentido de que el último peso gastado en cada bien reporta, al consumidor, un mismo nivel de utilidad marginal: Sin embargo, todavía sigue vigente el absurdo supuesto de que la utilidad es medible en términos cardinales; a continuación será desarrollado el enfoque de quienes sostienen que la utilidad solo es medible en un sentido ordinal. Cabe reiterar que esto significa que el consumidor sólo puede ordenar de menor a mayor las diversas canastas de mercado con respecto a la satisfacción que le brindan. EL ENFOQUE “ORDINAL” DE LA TEORIA DEL CONSUMIDOR Para representar los gustos y las preferencias de los consumidores, se recurre a una herramienta analítica conocida como “curva de indiferencia”. La curva de indiferencia existe en un diagrama de ejes cartesianos y cada uno de sus puntos determinan una combinación de dos bienes (X e Y) que le reportan al consumidor un mismo nivel de satisfacción o utilidad. Puede resultar extraño que el mercado capitalista, multimillonario en cantidad de mercancías que luchan por capturar el deseo del consumidor, pueda representarse en un universo donde sólo hay dos bienes. Sin embargo, hay un artilugio de la teoría marginalista que lo permite. Se entiende que, en el eje de abscisas, el bien X representa el bien cuyo mercado está siendo analizado; en cambio, en el eje de ordenadas, el bien Y, representa los n-1 bienes de la economía, es decir todos los restantes bienes, en los que el consumidor puede gastar su ingreso, además del bien X. En realidad se habla de que existe un “mapa de curvas de indiferencia”, compuesto por infinitas curvas de indiferencia, cada una de las cuales indica un distinto nivel de satisfacción para el consumidor. Por último diremos que cada consumidor tiene un mapa de curvas de indiferencia que le es propio y que está determinado por sus preferencias. 24 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) En el gráfico 6, se muestra un mapa de curvas de indiferencia: GRAFICO 6 6RAFICO 66 6 LAS PREFERENCIAS DEL CONSUMIDOR Y LAS CURVAS DE INDIFERENCIA Las características de las curvas de indiferencia son las siguientes: 1.- Siempre tienen pendiente negativa, pues los consumidores no son indiferentes a consumir más que menos. 2.- Las curvas más alejadas del origen son las que brindan un mayor nivel de utilidad total para el consumidor; de modo tal que todo consumidor intentará situarse en una curva de indiferencia lo más alejada posible. 3.- Las curvas de indiferencia no pueden cortarse en el plano; si así sucediese, se estaría violando el supuesto de que las decisiones del consumidor son consistentes. En el gráfico 7, se puede ver que un consumidor que actuase de esta forma, estaría sosteniendo que consumir A le es indiferente respecto de B o C y, sin embargo, también manifiesta que prefiere consumir C a B. GRAFICO 7 Qy LA CANASTA “A” ES INDIFERENTE CON RESPECTO A LA CANASTA “B” Y TAMBIEN LO ES RESPECTO DE “C” SIN EMBARGO, EN ESTE MAPA, SE DICE QUE LA CANASTA “C” ES PREFERIBLE A LA CANASTA “B” A C B II I 25 Qx EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) 4.- Las curvas de indiferencia son convexas al origen; de este modo reflejan el planteo de que la UMg es decreciente. Si se observa el gráfico 8, puede visualizarse que cuando el consumidor está parado en un punto de la curva de indiferencia, donde el consumo de X es inferior al de Y, estará dispuesto a sacrificar varias unidades de Y para incorporar una sola unidad de X, manteniendo un mismo nivel de utilidad total, es decir en la misma curva de indiferencia (esto sucede cuando cambia de la canasta “A”, a la canasta “B”). En cambio, cuando se mueve desde la canasta “C” a la “D”, donde el consumo de X es superior al de Y, estará dispuesto a sacrificar menos de una unidad de consumo de Y para adicionar una sola unidad de X. GRAFICO 8 La Tasa Marginal de Sustitución (TMgS) A partir de lo expresado en el último de los supuestos desarrollados, surge el concepto de TMgS; la misma es la medida de la importancia relativa que el consumidor le asigna a los diversos bienes (X e Y). Su magnitud indica la cantidad de unidades del bien Y, que está dispuesto a sacrificar el consumidor, para adicionar una unidad de bien X, a su consumo total, manteniendo el mismo nivel de utilidad total, es decir manteniéndose en la misma curva de indiferencia. Si se observa nuevamente el gráfico 8, veremos que las canastas A y B, que se encuentran sobre la misma curva de indiferencia, producen el mismo grado de utilidad total para el consumidor. Sin embargo, la canasta B tiene mayor cantidad del bien X (y menor cantidad del bien Y) que la canasta A. Para pasar de la canasta A a la canasta B, el consumidor está dispuesto a sacrificar 3 unidades del bien Y a cambio de 1 sola unidad del bien X, lo cual quiere decir que, en ese punto, la UMgX será tres veces mayor que la UMgY. Es decir que la Tasa Marginal de Sustitución es el cociente entre la 26 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) UMgX y la UMgY que, a su vez, es la pendiente de la curva de indiferencia (en valores absolutos). TMgS(X,Y) = UMgx UMgy Echando un manto de piedad, sobre el hecho de que, de contrabando, nuevamente se pretende introducir la idea de que la utilidad es medible, puede continuarse con el desarrollo de la teoría. Una vez que el consumidor ha establecido sus preferencias, construyendo su mapa de curvas de indiferencia (que, cabe reiterar, es solo suyo, o sea que cada consumidor tiene su particular mapa de curvas de indiferencia basado en su subjetividad); debe ahora prestarse atención a la restricción presupuestaria que condicionará su nivel de consumo. EL INGRESO DEL CONSUMIDOR, LOS PRECIOS Y LA RECTA DE PRESUPUESTO Se sabe que la capacidad de consumo del consumidor, se encuentra restringida por su ingreso y por los precios relativos de la economía. En el esquema de ejes cartesianos, planteado por la teoría del consumidor, esta restricción está representada por la denominada Recta de Presupuesto. En esa recta están todas las combinaciones posibles de Qx y Qy que el consumidor está en condiciones de comprar, suponiendo que gaste todo su ingreso. La ecuación de esa recta sería entonces como sigue: a) Entendiendo que el consumidor gasta todo su ingreso, pues su objetivo es maximizar su nivel de utilidad, tenemos que: Ingreso = I = Px * Qx + Py * Qy b) Si se quiere despejar cuanto se ha gastado en el bien Y, al hacerse pasaje de términos se tiene: Py * Qy = I - Px * Qx c) Por último, la ecuación quedaría como sigue: Qy = I - Px * Qx Py Py Donde I/Py sería la ordenada al origen y (- Px/Py) la pendiente de la curva denominada Recta presupuestaria. En el gráfico 9 se observa la recta presupuestaria. Todos los puntos sobre la recta, son las combinaciones de los bienes X e Y que el consumidor puede comprar gastando todo su ingreso. Ejemplo de esto son las canastas A y B,; en cambio la canasta D, se encuentra fuera de las posibilidades del consumidor. Por último, la canasta C podría ser comprada por el consumidor pero, en ese caso, no estaría cumpliendo con el requisito de maximizar su nivel de utilidad pues no estaría gastando la totalidad de su ingreso. 27 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) GRAFICO 9 Esta recta puede sufrir modificaciones, a lo largo del tiempo; puede desplazarse sin modificar su pendiente cuando, ceteris paribus, sufre modificaciones el ingreso del consumidor. Como se puede apreciar en el gráfico 10-a, cuando el ingreso crece se desplazará expansivamente, hasta alcanzar, por ejemplo, la canasta D; en cambio si el ingreso del consumidor disminuye, la recta presupuestaria experimentará un desplazamiento contractivo, pudiendo sólo alcanzar la canasta C. También puede experimentar “rotaciones”, variando su pendiente sin modificar la ordenada al origen. Las rotaciones se producen cuando, sin que haya modificaciones en el ingreso del consumidor, se produce una alteración en los precios relativos de la economía. En el gráfico 10-b, puede verse que la curva tendrá una rotación expansiva (llegando a la canasta D) cuando el Px caiga, en cambio cuando, ceteris paribus, el Px suba, la rotación será contractiva, moviéndose en dirección de la canasta C. Gráfico 10 28 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) LAS CURVAS DE INDIFERENCIA, LA RECTA DE PRESUPUESTO Y EL EQUILIBRIO DEL CONSUMIDOR Ahora llegó el momento de determinar cómo alcanza, el consumidor, su canasta de consumo óptima; es decir aquella canasta que maximiza su nivel de utilidad total, tomando en cuenta la restricción presupuestaria a la que está sujeto. Para ello, se recurre nuevamente al plano de ejes cartesianos, relacionando el mapa de curvas de indiferencia con la recta de presupuesto. En el gráfico 11, puede apreciarse que el consumidor alcanza la curva mas alejada del origen (es decir la que le brinda mayor nivel de utilidad), allí donde la recta de presupuesto se hace tangente a una curva de indiferencia. Allí, donde se ubica a la canasta A, el consumidor alcanza el mayor nivel de satisfacción que está en condiciones de pagar. Cualquier otra canasta que le reporte igual o mayor nivel de utilidad no podrá pagarla, pues se encuentran fuera de su capacidad presupuestaria. Ese es el caso de la canasta B, que le reporta igual nivel de utilidad que la canasta A o el caso de la canasta D, que le reporta mayor nivel de utilidad total pero que está aún mas lejana de sus posibilidades presupuestarias. También puede analizarse el caso de la canasta C que, como todas las que se encuentran sobre la recta presupuestaria, puede ser pagada por el consumidor; sin embargo, cualquiera de ellas, le reportará un menor nivel de utilidad total. GRAFICO 11 Sólo resta pensar que es lo que está sucediendo en el punto donde se encuentra la canasta A; es decir en el punto donde el consumidor alcanza su punto de maximización de la utilidad total. Allí la pendiente de la curva de indiferencia (- UMgX / UMgY) se igual con la pendiente de la recta presupuestaria (- Px/Py). Es decir: 29 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Umg x Umg y = Px Py Haciendo un sencillo pasaje de términos, se obtiene entonces: Es decir, exactamente la misma conclusión a la que habían arribado sus antecesores (los cardinalistas); el consumidor alcanza su equilibrio o punto de maximización de su utilidad total, allí donde el último peso gastado en cada una de las mercancías, le provoca un mismo grado de utilidad marginal. LA TEORIA DEL CONSUMIDOR Y LA CURVA DE DEMANDA La curva de demanda típica, en el modelo neoclásico, es la consecuencia de esta teoría del consumidor. Si miramos el gráfico 12.a, advertiremos que como consecuencia de los cambios en el precio del bien X (Px0, Px1 y Px2) la recta presupuestaria va a experimentar rotaciones que conducirán a diferentes puntos de tangencia con distintas curvas de indiferencia; lo cuál implicará distintos niveles de consumo del bien X (Qx0, Qx1 y Qx2). Es decir que se pueden determinar distintas correspondencias entre el precio del bien X y las cantidades demandadas del bien X que hará el consumidor; de ese modo, como se puede ver en el gráfico 12.b, se obtiene la curva de demanda de el consumidor. La sumatoria de las curvas de demanda de todos los consumidores del bien X, dará como resultado la Curva de demanda en el mercado del bien X. La curva de demanda del consumidor individual, muestra la relación inversa entre precios y cantidades demandadas, cosa que ocurrirá con todos los consumidores del bien X y, por lo tanto, la curva de demanda del mercado, también mostrará una relación inversa entre precios y cantidades demandadas: 30 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) LA TEORIA DE LA EMPRESA Y LA CURVA DE OFERTA INTRODUCCION Anteriormente se ha planteado que existe una relación directa entre el las cantidades ofrecidas de cualquier bien y su precio, amparándonos en la denominada “ley de la oferta”. Ahora este trabajo se propone explorar por qué los neoclásicos sostienen que la oferta se comporta de ese modo. Así como la curva de demanda del modelo neoclásico, se deriva de la teoría del consumidor, es decir que se analiza la conducta de la pequeña unidad de demanda (el consumidor), para extrapolar resultados al mercado todo; en el caso de la oferta, los neoclásicos nuevamente recurren al estudio de la conducta de la pequeña unidad productiva (la empresa) para sacar conclusiones acerca de la curva de oferta. SUPUESTOS DE LA TEORÍA DE LA EMPRESA Los supuestos en los que se va a enmarcar el análisis de la empresa son los siguientes: a) Las empresas se mueven en un mercado de competencia perfecta. b) El objetivo central de la empresa es el de maximizar el valor presente del flujo de beneficios futuros esperados. En un mundo incierto, es más correcto hablar de beneficios futuros esperados y, por lo tanto, cuando se calculan los mismos hay que asociarles una probabilidad de ocurrencia; sin embargo, para simplificar, supondremos que tales beneficios son ciertos y que la empresa tiene por objetivo la maximización de los mismos. c) Sujeta a la restricción que supone el patrón tecnológico existente, la producción de la empresa depende de las dotaciones de Capital (K), Tierra (T) y Trabajo (L). A los fines prácticos, agruparemos Capital y Tierra en “K” y denominaremos “L” al Trabajo humano. Es decir que: Producto Total = Q = f (K; T; L) (+) (+) (+) d) En este análisis de corto plazo, se supone la existencia de insumos fijos, es decir aquellos que no son susceptibles de ser modificados en el periodo bajo análisis; en cambio los insumos variables, son aquellos que pueden ser modificados en periodo analizado. En el modelo de corto plazo que se va a desarrollar, se considera al Capital (K) y la Tierra (T) como insumos fijos, en tanto que el Trabajo (L) es el único insumo variable. Si se efectúa un análisis de largo plazo, todos los insumos son variables. e) Los procesos productivos pueden ser de proporciones fijas o de proporciones variables. En el primer caso hay una única combinación de K, T y L que permite obtener el producto final; en cambio, en el segundo, se pueden alterar las proporciones reemplazando insumos fijos por insumos variables. 31 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) En este modelo se supone que se está trabajando con procesos productivos de proporciones variables. LA FUNCION DE PRODUCCION – PRODUCTO MEDIO Y PRODUCTO MARGINAL La Función de Producción es la relación entre las distintas cantidades de insumo variable (en nuestro caso “Trabajo”) y el producto total máximo que puede obtenerse. Es decir que cada punto de la función de producción, representa el volumen máximo de producto total (Q) que puede obtenerse con determinada dotación de Trabajo (L), considerando que Tierra y Capital permanecen constantes. Es por ello que, a la función de producción, también se la denomina como Frontera de Posibilidades de Producción. Puede re expresarse a la función de producción de la siguiente forma: Q = f (L) El producto medio es lo que, en promedio, produce cada trabajador ocupado. De modo tal que puede decirse que: PMe = Q / L Por último, el producto marginal mide cuanto crece el producto cuando crece infinitesimalmente el volumen de ocupación existente. En términos discretos, puede decirse que el producto marginal, mide cuánto crece el producto total (Q), cuando crece en una unidad el volumen de ocupación existente (L). Esto podría ser expresado como sigue: PMg = Q L En la tabla siguiente se consigna un ejemplo para ver el comportamiento que adoptan, en el esquema de este modelo, las tres funciones planteadas, o sea, Producto Total (Q), Producto Medio (PMe) y Producto Marginal (PMg): C A N T ID A D D E T R A B A JA D O R ES ( L) 0 P R O D UC T O T OT A L (Q) P R O D UC T O M E D IO ( P M e ) P R O D UC T O M A R G IN A L ( P M g) 0,0000 0,0000 0,0000 1 6,0000 6,0000 6,0000 2 13,2500 6,6250 7,2500 3 20,9900 6,9967 7,7400 4 28,0000 7,0000 7,0100 = 7,0000 5 34,0000 6,8000 6,0000 6 38,0000 6,3333 4,0000 7 38,0000 5,4286 0,0000 8 37,0000 4,6250 -1,0000 32 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) En el gráfico 13 se muestran las tres funciones: EL PRODUCTO TOTAL Y EL PRODUCTO MARGINAL Como se puede apreciar, la función de producción presenta un tramo donde crece a tasa creciente, un segundo tramo donde sigue creciendo pero a tasas decrecientes, para luego ingresar a un sector donde se torna decreciente. Este último sector de la función de producción es planteado como una eventualidad teórica pero no será explorado porque ningún empresario maximizador de beneficios se situará en ese lugar. La forma que adopta la función de producción se explica por la productividad del factor variable, en este caso el Trabajo. Para observarlo mejor, debe analizarse la curva de producto marginal; esta crece desde su nacimiento hasta alcanzar su máximo (en tres trabajadores ocupados), definiendo la zona de rendimientos crecientes a escala. Desde ese punto comienza a decrecer hasta hacerse nula en el volumen de empleo de 7.- trabajadores, determinando la zona de rendimientos decrecientes a escala y, a partir de ese punto se convierte en negativa. Entonces, mientras el producto marginal del trabajo es creciente (zona de rendimientos crecientes), la función de producción crece a tasa creciente; cuando el producto marginal del trabajo alcanza su máximo, se produce un punto de inflexión de la función de producción que pasa de crecer a tasa creciente, a crecer a tasa decreciente, justo en la zona de rendimientos decrecientes a escala, es decir cuando el producto marginal es decreciente. Por último, cuando el producto marginal se hace nulo (7.- trabajadores ocupados) el Producto Total (Q) se hace máximo (38.- unidades). ¿Qué significa la existencia de rendimientos crecientes a escala o producto marginal creciente? 33 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Significa que el último trabajador incorporado al volumen de ocupación existente ha hecho crecer el producto total más que lo que lo había hecho crecer el penúltimo trabajador que había incorporado la empresa. En el ejemplo, el segundo trabajador incorporado a la producción, hace crecer el producto total en 7,25 unidades, mientras que el primer trabajador sólo había aportado 6 unidades de producto, y el tercer trabajador produce un aumento de 7,74 unidades. ¿Qué significará, entonces, rendimientos decrecientes a escala o producto marginal decreciente? Se habla de producto marginal decreciente, cuando el último trabajador incorporado al volumen de empleo, hace crecer el producto total, en un quantun inferior al que lo había hecho crecer el penúltimo trabajador incorporado. Es decir que el producto crece pero a un ritmo menor que lo que lo venía haciendo. Por ejemplo (ver tabla) el quinto trabajador ocupado hace crecer el producto total en 6.unidades, mientras que el cuarto trabajador ocupado había aportado un crecimiento de 7.- unidades en el producto total. ¿Cuál será la causa del rendimiento marginal decreciente del trabajo, o sea del Producto marginal decreciente del trabajo? Primeramente, debemos aclarar que no se trata de virtudes o defectos personales de los trabajadores. En el ejemplo presentado, no se quiere decir que el trabajador incorporado en quinto término es menos eficiente que el cuarto trabajador; de lo que se trata es que el conjunto del personal empleado, superada cierta cuantía, comienza a rendir decrecientemente. ¿Por qué sucede esto? ¿Porque existe alguna indolencia del colectivo obrero?; Nada de eso, lo que ocurre es que la restricción que supone la existencia de factores de producción fijos (capital y tierra), hace que, en determinado nivel de empleo del factor variable (el trabajo), éste se torne redundante y, por lo tanto, su productividad comience a decrecer. Es la misma idea que plantea el propio Marshall, cuando se refiere a la ley de los rendimientos decrecientes en la producción agrícola: “La ley o manifestación de tendencia al rendimiento decreciente puede enunciarse provisionalmente como sigue: Un aumento en el capital y el trabajo aplicados al cultivo de un terreno causa en general un aumento menos que proporcional en la cantidad de producto obtenido, a no ser que venga a coincidir con una mejora de los procedimientos agrícolas (...) Nuestra enunciación final de la tendencia puede, pues, dividirse en dos partes, del siguiente modo (…) la aplicación de capital y trabajo adicionales a un terreno proporcionará un aumento menos que proporcional en el producto obtenido, a no ser que haya habido entre tanto un aumento en la habilidad del cultivador individual. En segundo lugar, cualquiera que pueda ser el desarrollo futuro de los procedimientos agrícolas, de una aumento continuado en la aplicación de capital y trabajo a la tierra, debe resultar, finalmente una disminución del producto adicional que puede obtenerse mediante una cantidad dada de capital y trabajos adicionales” (5) “Podemos considerar el capital y el trabajo aplicados a la tierra como formados por dosis iguales sucesivas. Como hemos visto, el rendimiento de las primeras dosis puede ser pequeño, y un gran número de dosis puede lograr un rendimiento proporcional mayor; el de las dosis sucesivas hasta puede, en casos excepcionales, aumentar y disminuir alternativamente. Pero nuestra ley establece que, más tarde o más temprano, se llegará a un punto en el cual todas las dosis posteriores obtendrán un 34 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) rendimiento menos que proporcional con respecto a las anteriores (...) La dosis que sólo remunera justamente los gastos realizados al cultivador puede denominarse dosis marginal y el rendimiento que proporciona rendimiento marginal”9 Supóngase que alguien tiene una parcela de tierra, un tractor, un arado y una pala. Si comienza a contratar trabajadores, para poner a producir esa parcela; el primer trabajador subutilizará el capital pues mientras usa la pala, no puede conducir el tractor ni manejar el arado. Por lo tanto, si se contrata un segundo y un tercer trabajador, el rendimiento del trabajo será creciente, pues todas las máquinas y herramientas se estarán poniendo en funcionamiento al unísono (rendimientos crecientes). Pero, si se incorpora un cuarto trabajador, alguno de los cuatro permanecerá inactivo en algún momento de la jornada (rendimientos decrecientes). Si más allá del cuarto trabajador, se siguen incorporando trabajadores, llegará un momento en que habrá tal cantidad de trabajadores, en esa parcela, que se entorpecerán mutuamente para trabajar (rendimientos negativos). En resumen, el origen del producto marginal decreciente del trabajo, habría que buscarlo en la escasez y/o mala asignación de los factores fijos (capital y tierra). Cabría preguntarse ¿por qué el modelo neoclásico trata al trabajo como “insumo variable” y al capital y a la tierra como “insumos fijos”?; aunque jamás se haya declarado, este enfoque supone el poder del capital en la relación de producción. El centro de la producción es un capitalista que, poseyendo maquinarias, equipos y tierras, resuelve cuál es la cantidad de trabajadores a emplear para hacer óptimo el rendimiento de sus medios de producción. El trabajador no tiene arte ni parte en este proceso decisorio, se limita a ser un insumo más que, en las cantidades adecuadas, permitirá la maximización del beneficio. EL PRODUCTO MEDIO Y EL PRODUCTO MARGINAL La forma de la curva del Producto Medio (PMe), está también vinculada con el Producto Marginal (PMg). Mientras el PMg sea superior al PMe, es decir que el trabajador agregado al volumen de empleo hace crecer el producto total en más de lo que, hasta ese momento, cada trabajador producía en promedio; el PMe será creciente. En el punto donde el PMg se iguala con el PMe (en el ejemplo, 4.- trabajadores ocupados), el PMe será el máximo y, a partir de allí, el PMe se hará decreciente pues pasa a ser superior al PMg. LA ESTRUCTURA DE COSTOS DE LA EMPRESA: COSTO TOTAL, MEDIO Y MARGINAL Antes de ingresar en este análisis, se define al costo de producción como la sumatoria de los insumos empleados más las retribuciones pagadas a los distintos 9 MARSHALL, Alfred – Principios de Economía - Libro IV-Capítulo 3—Páginas 129 a 132 35 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) participantes en la producción. O sea que el costo de producción incluye los salarios, la renta, el interés y el beneficio normal de plaza. Se tiene entonces: COSTO TOTAL = INSUMOS + w + r + i + g Por lo tanto, a diferencia de los típicos análisis contables, si el costo unitario (o medio) es igual al precio de venta; diremos que el empresario obtuvo el beneficio normal de plaza. En cambio, si el precio se ubica por encima del costo medio, el empresario estará obteniendo un beneficio extraordinario Costos Fijos y Variables Así como se ha dicho que, en el proceso de producción, existían factores fijos y factores variables; debemos entender que también hay costos que son fijos y costos que son variables. Los costos fijos son independientes del volumen de producción, en tanto que los variables crecen pari passu con el quantun producido (Ver grafico 14). A los fines de este análisis, cabe señalar que el costo variable está referido al único factor variable existente. Es decir, que el costo variable es equivalente al total de los salarios pagados. De este modo, puede decirse que: COSTO TOTAL (CT) = COSTOS FIJOS + COSTOS VARIABLES. Grafico 14 LA CURVA DEL COSTO MEDIO (CMe) El costo medio o costo unitario, es lo que ha costado, en promedio, cada unidad producida. Por lo tanto el costo medio surge de distribuir el costo total incurrido, entre las unidades producidas (producto total): CMe = CT / Q 36 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Así como el costo total tiene un componente fijo y otro variable, también el costo medio tendrá una parte fija y una variable: CMe = CFMe + CVMe Puede re expresarse la igualdad anterior de la siguiente forma, donde CFT es costo fijo total y CVT es el costo variable total: CMe = CFT + CVT Q Q El CFMe será decreciente, a medida que crezca el producto, según se puede ver en el siguiente gráfico: CFMe CFT Q La forma que adoptará el CVMe, merece una consideración adicional. Teniendo presente que el costo variable es el total de salarios pagados, se tiene que CVT = w * L, donde w es el salario por cada trabajador y “L” representa la cantidad de trabajadores ocupados. Por lo tanto el CVMe puede ser definido como sigue: CVMe = CVT w*L Q Q = COMO L Q = 1 PMe ENTONCES CVMe = 1 w * PMe De este modo, podemos advertir que la curva de CVMe, tendrá un comportamiento inverso al de la curva de PMe. Cuando el PMe crece el CVMe será decreciente, cuando el PMe alcanza su máximo, el CVMe se posicionará en su mínimo y, por último, si el PMe está decreciendo, el CVMe será creciente. La curva de costo medio (CMe) tendrá un comportamiento similar al de la curva de CVMe pero, por el efecto del CFMe decreciente, alcanzará su mínimo en un volumen de producción superior al del mínimo del CVMe. LA CURVA DEL COSTO MARGINAL (CMg) El Costo Marginal (CMg) mide cuanto crece el costo total al adicionar una unidad más al volumen de producción existente, o sea que indica cuánto crecerá el costo total si el empresario decide incrementar su producto total en una unidad. Entonces: 37 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Como el costo total se compone de una parte fija y otra variable, puede reescribirse la igualdad anterior. CMg = CFT Q + CVT Q Se sabe también que el Costo Fijo es independiente del volumen de producción, de modo tal que: CFT Q = 0.- Por lo tanto la ecuación del costo marginal queda reducida a CMg = CVT / Q y, como costo variable es el costo laboral (w * L), puede ser re expresado el costo marginal como sigue: Observando la última expresión, y recordando que el PMg = Q / L, puede verse que existe una relación inversa entre el CMg y el Pmg: Por lo tanto, el comportamiento de la curva típica de costo marginal será inverso al de la curva de producto marginal; es decir que: a) En la zona de rendimientos crecientes (donde el PMg crece), el CMg tenderá a decrecer; b) En el punto de inflexión de la función de producción, allí donde se pasa de la zona de rendimientos crecientes a rendimientos decrecientes, el PMg se hacía máximo y, por ende, el CMg alcanzará su mínimo y c) En la zona de rendimientos decrecientes a escala, donde el PMg era decreciente, el CMg será creciente. 38 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Ahora al efectuar una última relación, se tiene que: Y Cuando PMe = PMg, resultará entonces que CMe = CMg; y, así como cuando se igualan PMe y PMg el producto medio es el máximo, tendremos que cuando se igualan CMe y el CMg, el Costo Medio será el mínimo. A este punto se lo denomina PUNTO ÓPTIMO TECNICO. Siguiendo con el ejemplo que se viene desarrollando, (recordando el gráfico 13 y viendo su correlato en le gráfico 15), tendríamos lo siguiente: grafico 13 LA ESTRUCTURA DE INGRESOS DE LA EMPRESA – INGRESO TOTAL, MEDIO Y MARGINAL Ya se ha estudiado la estructura de costos de una empresa y ahora se verá que el comportamiento de los ingresos ya que de la diferencia entre ingresos y costos surge el beneficio cuya maximización es el objetivo del empresario. El ingreso total de la empresa se obtiene multiplicando las cantidades vendidas por el precio de venta de las mercancías, es decir que IT = P * Q. El ingreso medio (IMe), es el ingreso que proporciona cada unidad vendida, lo que claramente será igual al precio de la mercancía: 39 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) El ingreso marginal (IMg), mide cuanto crece el ingreso total cuando se aumenta en una unidad el volumen de ventas: El incremental del IT, se traduce así en el incremental de una multiplicación (P * Q). Es decir que cuánto variará el IT, cuando se aumenta en unidad el volumen de ventas, dependerá de cuanto cambia “P” por ese incremento de ventas y de cuanto cambia “Q”. La forma de resolver la derivada (incremental) de una multiplicación es calcular la siguiente: Simplificando el cociente de como sigue: Q / Q =1, se tiene que el Ingreso Marginal queda LA ELASTICIDAD PRECIO DE LA DEMANDA, EL INGRESO MARGINAL Y EL I NGRESO TOTAL Antes de continuar desarrollando la maximización del beneficio en competencia perfecta, se hace necesario explorar la relación que existe entre la elasticidad precio de la demanda y el ingreso marginal, considerando el efecto que producen sobre el ingreso total. Como ya se dijo la Elasticidad precio de la demanda, es una medida de sensibilidad que mide el grado de respuesta de las cantidades demandadas, ante una variación en el precio, Tal medición se efectúa recurriendo a un cociente de variaciones porcentuales: 40 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) que podemos reexpresar asi Digamos también que, en la curva de demanda, hay un punto de Ep = 1 (elasticidad unitaria) donde la variación porcentual en las cantidades demandadas es igual a la experimentada por el precio; por encima de ese punto se extiende el tramo de la curva de Ep > 1 (elástico), donde la caída (suba) en las cantidades demandadas será más intensa que la suba (caída) en el precio. En cambio por debajo del punto Ep=1, se despliega el tramo de la curva donde Ep < 1 (inelástico); en esa zona, la intensidad de respuesta de las cantidades demandadas será menor que la variación experimentada por el precio. Es decir que, en una misma curva de demanda, se encuentran diferentes elasticidades según sea el punto (P/Q) en el que se mida, ya que -Q / P (pendiente de la curva), es la misma en todos los puntos de la curva. Como se puede apreciar en el gráfico siguiente, existe una relación entre la elasticidad precio, el ingreso marginal y el ingreso total. Podemos ver que, a) cuando Ep >1, el ingreso marginal es positivo y el ingreso total es creciente; b) cuando Ep = 1, el ingreso marginal es nulo y el Ingreso total alcanza su máximo y c) cuando la Ep < 1, el ingreso marginal es negativo y el ingreso total decrece: Así como existen distintas elasticidades precio para un mismo bien, según sea la particular combinación de P y Q, donde se realiza la medición; también debemos considerar que existen bienes cuya demanda, en general, es más elástica que la de otro. 41 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) La demanda de distintos bienes puede tener mayor o menor intensidad de respuesta, a cambios en los precios, dependiendo de lo siguiente: 1) Cuanto más necesario sea un bien, más inelástica será la Ep de su demanda. 2) Cuánto mayor sea su participación en el presupuesto de los consumidores, más elástica será su demanda. 3) A mayor cantidad de bienes sustitutos, más elástica será su demanda; y 4) Cualquier bien tiene una demanda más elástica cuando se lo analiza en el largo plazo que cuando el análisis es de corto plazo. Esto se debe a la idea de que, en el largo plazo, es más factible que aparezcan bienes sustitutos. Gráficamente, la mayor o menor elasticidad de los bienes se encuentra representada por la pendiente de la curva de demanda. En el gráfico 17 tomamos dos bienes “A” y “B”; medimos la Ep en el punto P2 Q2 y vemos que cuando el precio sube hasta P1, la respuesta del bien “B”, es mas intensa que la del bien “A”: Hay dos casos extremos que se representan en la figura siguiente. El primero es la curva de demanda “perfectamente inelástica” que representa un bien cuya demanda está fija en una cuantía, con independencia del precio que alcance el bien, Es decir que los distintos niveles de la oferta fijaran diversos precios de mercado pero no modificaran las cantidades transadas; una contracción de la oferta tendrá, por único efecto, una suba en el precio; en tanto que la expansión de la oferta provocará caídas en los precios. El otro caso, el de mayor interés para los fines de este trabajo, es el de la curva de demanda “perfectamente elástica”. Esta curva está indicando que a un determinado precio (Po), la demanda del bien puede ser infinita; las diferentes expansiones de la oferta siempre encontraran consumidores dispuestos a demandarlos, en tanto y en cuanto, se ofrezcan a (Po). Esta curva tiene especial interés porque es la curva de demanda del productor individual en un mercado de competencia perfecta. Efectivamente, lo que plantean tanto la escuela clásica como los neoclásicos, es que si un productor individual, en un mercado de competencia perfecta, acepta el precio fijado por el mercado (Po), a ese precio podrá vender toda su producción. 42 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Para ver esta relación en forma analítica, se hace necesario recordar la expresión del Ingreso marginal (IMg) y la de Elasticidad precio de la demanda (Ep): Si ahora se considera la inversa de Ep y la volvemos a comparar con el IMg, veremos que el primer término del IMg es igual a la inversa de Ep multiplicada por (P): Entonces puede reescribirse el IMg de la siguiente forma, dejando establecida la relación existente entre el mismo y la Ep: 43 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) En consecuencia queda demostrado que, según sea el valor que tenga la Ep, será el valor del IMg y, consiguientemente el del Ingreso total; puede afirmarse lo siguiente: Ep>1(Elástico) Ep>1(Elástico) Ep=1(Unitaria) Ep=1(Unitaria) Ep<1(Elástico) Ep<1(Elástico) 1 1 < 1 IMg>0 IMg>0 IT IT CRECE CRECE = 1 Img=0 Img=0 IT IT MAXIMO MAXIMO > 1 Img<0 Img<0 IT IT DECRECE DECRECE Ep< 1 Ep 1 1 Ep= 1 Ep 1 1 Ep> 1 Ep ¿Qué sucederá si la Ep tiende a infinito? En ese caso se tiene que la inversa de Ep (1/Ep) tenderá a cero y por lo tanto la ecuación del ingreso marginal quedará como sigue: Cabe recordar que si la Ep tiende a infinito, la curva de demanda es perfectamente elástica y, que la curva de demanda perfectamente elástica, es la que enfrenta un productor individual, en un modelo de competencia perfecta. De modo tal que sólo en competencia perfecta IMg = P. O sea, mientras que en los mercados de competencia imperfecta tenemos que P = IMe > IMg; en el mercado de competencia perfecta se tiene que P = IMe = IMg. Esta característica (P = IMg) suele emparentarse con la incapacidad del productor competitivo de modificar el precio de mercado; en cambio, como se verá en la tercera parte de este trabajo, cuando el P > IMg nos está indicando cierto “poder de mercado” que tiene el productor para imponer el precio. Cuento mayor sea la diferencia entre el precio y el IMg, mayor será este “poder de mercado”. ¿Por qué se dice que el productor individual, en un mercado de competencia perfecta, tiene una demanda perfectamente elástica? ; Debe tenerse presente que cuando se mencionaron las causas para que la demanda de un bien fuese más o menos elástica, se planteó que cuantos más bienes sustitutos tenga un bien, cualquiera sea, mayor habría de ser su Ep. Resulta ser que, en un mercado de competencia perfecta que, por definición, debe ser atomizado y tener un producto homogéneo; existen miles de productores que ofrecen una mercancía que sería un sustituto perfecto de la mercancía que produce nuestro “productor individual”, por ende su curva de demanda debe ser, por fuerza, la más elástica de todas (una curva de demanda perfectamente elástica). En el gráfico 19 puede apreciarse cómo se plantea, en el modelo neoclásico, esta idea de la curva de demanda perfectamente elástica. En el gráfico 19 a, se ha visto que el precio de mercado (Po) surge del libre juego de la oferta y la demanda; donde el productor individual es apenas uno entre cientos o miles de oferentes, sin ningún poder especial en la fijación de ese Po. El precio de mercado es “aceptado” por el productor individual y, lo que le dice el 44 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) modelo es que, a ese precio todo lo que produzca y ofrezca podrá ser vendido. Eso quiere decir la curva de demanda “perfectamente elástica” que se observa en el gráfico 19 b. EL PUNTO COMPETITVO DE MAXIMIZACION DEL BENEFICIO DEL PRODUCTOR Por lo tanto una vez que el productor individual conoce y acepta el precio fijado por el mercado; sólo debe determinar la cantidad que producirá y ofrecerá en dicho mercado. El criterio, con el que elegirá ese volumen de producción, será el de la “maximización del beneficio” que ya se ha supuesto como la condición sine quanon de todo empresario. Para ello recurrirá a un análisis de tipo marginal, es decir irá viendo si le conviene o no agregar una unidad más, al volumen de producción existente. Siempre le convendrá producir una unidad más, si esa unidad le genera un ingreso adicional superior al costo adicional en que incurre al producirla. Dicho de otra forma, el productor estará dispuesto a producir una unidad adicional, si el IMg > CMg. De ninguna manera producirá una unidad adicional si el IMg < CMg, pues estaría haciendo caer su beneficio total. Por lo tanto, como podemos ver en la figura 20, el productor irá aumentando la producción hasta Qmax pues, a partir de allí, una unidad adicional hace caer su beneficio. En Qmax el CMg = IMg, es decir que el productor individual maximiza su beneficio en el volumen de producción donde se igualan el CMg y el IMg. Como ya se ha adelantado, y luego será profundizado, esta condición se da en todos los mercados (sean de competencia perfecta o imperfecta), por lo tanto puede afirmarse que LA MAXIMIZACION DEL BENEFICIO SE OBTIENE EN EL PUNTO DONDE IMg = CMg 45 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Si se observa nuevamente la figura 20, puede verse que, a la izquierda de Qmax, el productor siempre estará tentado de adicionar una unidad más, pues siempre el IMg > CMg; en cambio, si produce una unidad más de Qmax (hacia la derecha de Qmax) el CMg > IMg. Una vez determinado el punto de maximización del beneficio, para saber si este punto es rentable, y cuan rentable es, debe ser relacionado con la curva de CMe. Así se tiene la figura 21: figura 21 - Maximización del Beneficio de Corto Plazo P P MERCADO DEL BIEN “X” CMg CMe PRODUCTOR INDIVIDUAL DEL BIEN “X” O PO PO BENEFICIO D = IMg = IMe = P EXTRAORDINARIO D Q pot Q Q max Q EN ESE VOLUMEN DE PRODUCCION EL Cme < P, DE MODO TAL QUE EL PRODUCTOR OBTIENE UN BENEFICIO EXTRAORDINARIO QUE, EN EL LARGO PLAZO TIENDE A DESAPARECER En el gráfico 21 se observa que, en Qmax (punto de maximización del beneficio), el CMe < IMe y, por lo tanto, el productor recibe un beneficio extraordinario10 en el corto plazo. 10 Recordemos que el P = IMe, incluye el beneficio normal de plaza. Por ende, si el P = CMe, el productor estaría obteniendo ese beneficio; al ser superior el P al CMe, por sobre el beneficio normal de plaza, el productor estará logrando un beneficio extraordinario. 46 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Asimismo, se puede apreciar que el volumen de ventas que maximiza el beneficio (Qmax), es superior al volumen de producción en el punto óptimo técnico (Qpot). ¿Por qué se plantea la posibilidad de existencia de un beneficio extraordinario sólo en el corto plazo? Porque el modelo de competencia perfecta supone que, en el largo plazo, atraídos por la existencia de ese beneficio extraordinario; nuevos productores se sumaran a la oferta de mercado provocando un desplazamiento expansivo de la misma que redundará en una caída del precio de mercado. Esa caída en el precio de mercado irá reduciendo el beneficio extraordinario, hasta eliminarlo para todos los competidores que, en el largo plazo, sólo obtendrán el beneficio normal de plaza. Si se observa la figura 22, puede verse como, a partir de la situación original planteada en la figura 21; el ingreso de nuevos competidores al mercado, logra que se provoque un movimiento expansivo de la curva de oferta (desde O hacia O´). Ceteris paribus, este desplazamiento de la curva de oferta, determina una caída en el precio de mercado (desde Po hasta P1). Ahora, el productor individual, aceptando el nuevo precio de mercado (P1), enfrenta una nueva curva de demanda (P1 = IMe = IMg). Deberá buscar el nuevo punto de maximización del beneficio, allí donde el CMg = IMg, y este se encuentra en Q1 maz. Pero, en ese punto ocurre algo que antes no sucedía: CMg y el IMg (iguales entre sí) también se igualan con el CMe. En este equilibrio de “Largo Plazo”, donde IMg = CMg = IMe = CMe, el beneficio extraordinario ha desaparecido: CMe figura 22 - Maximizacion del Beneficio en el Largo Plazo CMg P P MERCADO DEL BIEN “X” PRODUCTOR INDIVIDUAL DEL BIEN “X” O O´ PO P1 PO P1 D = IMg = IMe = P D Q Q1 max EL EQUILIBRIO DE LARGO PLAZO SE ALCANZA DONDE EL Q CMg = Img = Ime = CMe Cme = CMg Cme MINIMO o PUNTO OPTIMO TECNICO Obsérvese que cuando el CMe se iguala con el CMg, el CMe resulta ser el mínimo. De modo tal que el modelo plantea que, en competencia perfecta, todos los productores terminan produciendo en el punto óptimo técnico. En esto consiste la tan mentada eficiencia del mercado competitivo, según el modelo neoclásico; la competencia genera que la producción crezca hasta el punto donde todos los productores están produciendo sus mercancías en las mejores condiciones de eficiencia posibles. Esto se verá alterado en los denominados 47 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Mercados de Competencia Imperfecta que serán abordados en la tercera parte. Como ya se dijo, en “competencia perfecta” los empresarios adoptan como conducta la aceptación del precio de mercado como un dato de la realidad que no pueden cambiar; lo que significa que el poder de mercado es cero, es decir que el IMg es constante e igual al precio. En tales circunstancias se verifica que la empresa alcanzará el máximo beneficio cuando el CMg crece por encima del Cme. Por lo tanto, las cantidades del “punto óptimo técnico” (Qpot) serán menores a las cantidades de máximo beneficio (Q max) es decir que las empresas que lo deseen, deben cumplir con un requisito de eficiencia para poder ingresar a un mercado competitivo En cambio, cuando en la sección siguiente se analicen los mercados de competencia imperfecta; se verá que, si bien, también se verifica que la maximización de beneficios se logra cuando se igualan el ingreso marginal (IMg) y el costo marginal (CMg); ese costo marginal estará en el tramo decreciente y será superior al CMe Esto ocurre porque la “competencia imperfecta” se caracteriza por el hecho que los empresarios tienen un poder de mercado mayor que cero (es decir P > IMg) El poder de mercado nace a partir de las ventajas que obtiene la gran empresa sobre la pequeña en el rendimiento de los factores productivos que se traducen en el hecho que el tramo decreciente del CMe involucra un mayor nivel de producción para una gran empresa lo cual le permite establecer precios más bajos y desplazar así a la empresa más pequeña. Esa ventaja que obtienen las empresas más grandes sobre las más pequeñas depende de la introducción de maquinaria especializada, de la especialización de la fuerza de trabajo en esa maquinaria y de la investigación y desarrollo especializado que hace posible la creación de nuevas tecnologías. Así, las grandes empresas poseen más altas economías de escala porque con costos medios decrecientes pueden producir mayores cantidades y, por ende, aumentar su poder de mercado. Esto se traduce en que la gran empresa logra maximizar beneficios, en el corto plazo, antes de llegar al punto óptimo técnico (es decir que Qmax < Qpot), y esto implica que la gran empresa nunca llega a producir en niveles donde el CMg > CMe; e inclusive, nunca llegará al punto óptimo técnico. DECISION DE PRODUCIR O SUSPENDER TEMPORARIAMENTE LA PRODUCCION Aunque hasta ahora no ha sido desarrollado, puede ocurrir que, en el punto de maximización de beneficio de corto plazo, el productor competitivo, lejos de tener un beneficio extraordinario, tenga un quebranto. En ese caso, como no puede modificar el precio fijado por el mercado ni alterar dramáticamente su curva de CMg; el productor podrá optar por discontinuar temporariamente la producción hasta que las condiciones de mercado o su mejoramiento en la eficiencia productiva, le permitan reinsertarse en el mercado. 48 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) El empresario decidirá suspender la producción cuándo el cierre temporario de la planta le produzca un quebranto inferior al que le ocasionaría poner a producir la fábrica en el punto de maximización del beneficio. Esta decisión estará ligada con la estructura de costos (fijos y variables) que tenga la empresa. Como sabemos, aunque la planta no produzca ni una sola unidad, el empresario deberá sufragar íntegramente los costos fijos; por lo tanto aquí cobra importancia capital el análisis del denominado “Margen de Contribución” (MGC) que surge de la diferencia entre el Precio de mercado (P) y el Costo Variable Medio (CVMe). Se lo denomina así pues esa diferencia es el margen con el que cada unidad producida contribuye a pagar la totalidad de los costos fijos. MGC = P - CVMe A partir de allí, se dice que el empresario decidirá continuar produciendo, en tanto ese MGC sea positivo o, a lo sumo nulo. En cambio la decisión será indudablemente la de suspender transitoriamente la producción cuando el CVMe sea superior al P, es decir cuando MCG sea negativo. La siguiente tabla contiene algunos ejemplos que ayudaran a comprender mejor lo dicho hasta aquí; suponemos una empresa cuyo Qmax = 1.000.-, su CVMe = 15.y sus costos fijos totales son de $ 5.000.-: CASO CANTIDAD PRECIO CVMe MGC INGRESO TOTAL COSTO VARIABLE TOTAL CFT RESULTADO SI SE PRODUCE DECISION A TOMAR 1 1.000,00 25,00 15,00 10,00 25.000,00 15.000,00 5.000,00 5.000,00 2 1.000,00 23,00 15,00 8,00 23.000,00 15.000,00 5.000,00 3.000,00 3 1.000,00 20,00 15,00 5,00 20.000,00 15.000,00 5.000,00 0,00 4 1.000,00 15,10 15,00 0,10 15.100,00 15.000,00 5.000,00 -4.900,00 5 1.000,00 15,00 15,00 0,00 15.000,00 15.000,00 5.000,00 -5.000,00 P = CVMe => Mg de Contribución = 0.PUNTO DE INDIFERENCIA 6 1.000,00 14,90 15,00 -0,10 14.900,00 15.000,00 5.000,00 -5.100,00 P < CVMe => Mg de Contribución < 0.DISCONTINUAR TEMPORARIAMENTE P > CVMe => Mg de Contribución > 0,CONVIENE PRODUCIR Dependiendo de los diversos precios que pueda tener el bien en el mercado, el productor tomará sus decisiones de producción. En los casos 1 y 2, el empresario estará obteniendo beneficios extraordinarios si produce las 1.000.- unidades que son su volumen óptimo de producción y venta. En el caso 3, donde el resultado contable es 0.-, el empresario estaría obteniendo el beneficio normal de plaza y, por ende también le conviene producir. El caso 4 puede generar alguna duda, ya que al tomar la decisión de producir, el empresario está incurriendo en un quebranto de $ 4.900.-; sin embargo si su decisión fuese la de sus pender temporariamente la producción, entonces su costo total sería equivalente a sus costos fijos, o sea $ 5.000.49 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) El caso 5 plantea el punto de indiferencia, allí donde P = CVMe y el MGC se reduce a 0.-. En ese punto límite, tanto producir como suspender temporariamente la producción generan un quebranto de $ 5.000.-. En esa situación, el empresario puede decidir seguir produciendo a efectos de no perder mercado a manos de sus competidores. En cambio, en el caso 6 (P < CVMe), sin dudar el empresario debe discontinuar temporariamente la producción pues al producir pierde $100.más que si no produjera. DERIVACION DE LA CURVA DE OFERTA Ya se ha visto que a partir de su curva de costo marginal y de su curva de demanda perfectamente elástica, el productor encuentra su volumen óptimo de producción allí donde CMg = IMg. La curva de CMg no experimenta variaciones, en el corto plazo, ya que está relacionada con la estructura de costos de la empresa y su eficiencia, las cuales no varían dramáticamente en ese lapso. En cambio la curva de demanda individual del productor, puede desplazarse (expansiva o contractivamente), según los vaivenes del precio. Como puede verse en la figura 23, la interacción de la oferta y demanda del mercado pueden determinar diversos precios de mercado que, a su vez, redundan en distintas curvas de demanda individuales del productor. Para cada una de esas curvas, existirá una distinta Qmax del productor: Figura 23: 50 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Puede decirse entonces que la curva de CMg, en el tramo relevante, es a su vez la curva de oferta del productor individual. Por último, la sumatoria de las diversas curvas de CMg de los distintos productores individuales, dará como resultante la curva de oferta del mercado. 51 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Tercera Parte COMPETENCIA IMPERFECTA La teoría microeconómica corriente establece como válido que, bajo los supuestos usuales de un mercado de competencia perfecta, los recursos disponibles en la economía son asignados eficientemente a través del mecanismo de los precios. Mediante este mecanismo, las actividades ineficientes tienden a desaparecer y los recursos se movilizan a los sectores más rentables. Sin considerar las consecuencias sociales que generan estos movimientos de recursos tales como las familias (aglutinados bajo el factor Trabajo) y máquinas e inmuebles (aglutinados bajo el factor capital), vale destacar que, aún funcionando el sistema correctamente tal cual lo establece la teoría, presentan resistencia a los ajustes vía precios. Bajo esta teoría, todo aquello que no cumple con los supuestos de competencia perfecta es COMPETENCIA IMPERFECTA. La existencia de monopolios, oligopolios, competencia monopolística o cualquier otra clasificación que escape de los supuestos de competencia perfecta son vistas como rarezas. Sin embargo, la competencia imperfecta prevalece en el mundo real en sus diversos matices y por lo tanto, es necesario explicar algunas modalidades que puede adoptar la misma. MONOPOLIO El monopolio es definido, entonces, como una industria en donde hay un solo oferente de un producto. Esto puede suceder por ser un bien sin sustitutos cercanos o ser una industria a la que es muy difícil entrar por existencia de barreras legales o técnicas, dentro de las cuales podemos mencionar las siguientes. 1) Si alguien controla la producción de un insumo básico para producir determinada mercancía, probablemente se convierta en el único productor de esa mercancía. El ejemplo típico era cuando la bauxita (insumo básico en la producción de aluminio) era controlado, en los EEUU, por la “Aluminium Company of América (ALCOA) quien, a su vez sostenía el monopolio del aluminio en aquel país. 2) Una empresa que alcance su costo medio mínimo en un volumen de producción suficiente como para abastecer toda la demanda de mercado, se convertirá automáticamente en productor monopólico. Esto se conoce como monopolio natural y requiere de una regulación por parte del Estado o, escapándonos del modelo neoclásico, sería necesario que el propio Estado tome en sus manos dicha producción. Se trata de industrias con fuertes inversiones en activos fijos como por ejemplo generación de energía o transporte por vía férrea. 3) Una empresa que posea una patente para producir determinado producto se convierte en productor monopólico de dicho bien, al menos por el lapso de vigencia de la misma. Las patentes se otorgan con el objetivo de incentivar la investigación y el desarrollo de productos; la idea es que quien inventa un nuevo 52 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) producto, como recompensa, goza de la exclusividad en la comercialización del mismo, durante un periodo determinado. 4) Por último, puede producirse un monopolio por el otorgamiento de franquicias o concesiones por parte del Estado, en cuyo caso, se espera que el propio Estado fiscalice la conducta del monopolista. En resumen, el monopolio reúne estas características principales: a) Hay una sola empresa que influye drásticamente en el precio de mercado. b) El acceso a ese mercado es difícil, es decir que se observan trabas tecnológicas y sobretodo legales que impiden el ingreso de nuevos empresarios al mercado. c) Es un mercado sin transparencia donde la única empresa puede discriminar precios en distintos mercados aunque ofrezca un mismo producto, perjudicando a los consumidores. d) En dicho mercado no tiene sentido hablar de producto homogéneo porque hay un solo producto y un solo vendedor. MAXIMIZACION DEL BENEFICIO DE UN PRODUCTOR MONOPOLICO Un productor monopólico tiene, igualmente, una suerte de competencia, en el sentido de que compite con todos los otros bienes de la economía para obtener un lugar en el presupuesto del consumidor y, más específicamente, compite con los bienes sustitutos. Sin embargo, puede afirmarse que, en el mercado del bien analizado, el productor monopólico es el único oferente y, por lo tanto su curva de demanda individual, resulta ser la curva de demanda de todo el mercado. Por ende, la curva de IMg del productor monopólico será, como ya hemos visto, decreciente, estando representado por una curva que se extiende por debajo de la curva de demanda; de modo tal que, también podemos afirmar que el IMg siempre será inferior al IMe, es decir inferior al precio. En el gráfico 24 puede verse la forma que tomará el ingreso marginal, debiendo recordar que cuando el IMg es positivo, el ingreso total crece; cuándo el IMg = 0, el Ingreso total será máximo y cuando el IMg es negativo, el ingreso total será decreciente. GRAFICO 24 53 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) En lo referido a la estructura de costos del monopolista, el supuesto que plantea el modelo es que, a la hora de comprar insumos y factores de producción, el productor se mueve en un mercado competitivo. Este supuesto, si bien resulta un tanto fuerte, induce a la idea de que las curvas de costo medio y costo marginal del monopolista son las curvas típicas que ya se han visto para el productor competitivo (ver gráfico 25): GRAFICO 25 El monopolista, desde luego, tiene el objetivo de maximizar su beneficio y, para ello, también deberá comparar el IMg con el CMg, para determinar si le conviene agregar una unidad más a su volumen de producción. Siendo que el IMg es decreciente y que el CMg, en su tramo relevante, es creciente, es fácil comprender que el punto de maximización de beneficio se obtiene cuando el IMg = CMg. Si se observa el gráfico 26, puede verse que, antes del punto de igualación, el IMg > CMg y, por ende, conviene incrementar el volumen de producción; en cambio luego del punto de maximización del beneficio, el IMg < CMg y, entonces, ya no conviene incrementar la producción. En el gráfico 26, también puede advertirse que, en el punto de maximización del beneficio, el productor obtiene un beneficio extraordinario, el cual no tenderá a desaparecer como ocurría en el mercado competitivo ya que, aquella desaparición, era un efecto de la competencia, la cual no existe en el mercado monopólico. Por último, puede apreciarse que el volumen de ventas que maximiza el beneficio (Qmax) es inferior al volumen de producción del punto óptimo técnico (Qpot). En el punto en donde el productor monopólico maximiza su beneficio, el Costo Medio sigue bajando, con lo cual refuerza aún más las ventajas del productor monopólico para mantener su posición. 54 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) GRAFICO 26 MAXIMIZACION DEL BENEFICIO DEL MONOPOLISTA CMe CMg P El empresario tiene el objetivo de maximizar su beneficio: PO Cme a) BT = IT - CT BENEFICIO EXTRAORDINARIO b) dBT = dIT – dCT dQ dQ dQ D IMg Q Q MAX Q POT c) dBT = IMg - CMg dQ Se ha dicho, sin embargo, que el monopolista se encontraba sometido a una suerte de competencia con todos los otros bienes de que dispone el consumidor, especialmente los sustitutos. Por lo tanto puede ocurrir que su curva de demanda experimente un desplazamiento contractivo, reduciendo la demanda del bien que el produce. En competencia perfecta, cuándo se expande la oferta o se contrae la demanda, el beneficio extraordinario del productor tiende a desaparecer. Este no será el caso del productor monopólico quien, ante una caída en la demanda, procederá a reducir la oferta de modo tal que, si bien se reduce, conserva su beneficio extraordinario. En el gráfico 27 puede verse cómo cuando se contrae la demanda desde D hacia D1, se determina una nueva curva de ingreso marginal (IMg 1), la cual intersecta a la curva de CMg en un volumen de producción inferior al anterior. De este modo, el monopolista conserva un beneficio extraordinario aunque inferior al que tenía antes. Asimismo, cabe advertir que la reducción del volumen de producción lo aleja todavía más del punto óptimo técnico, de modo tal que la caída de la demanda, refuerza la ineficiencia del monopolio en términos sociales. 55 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) OLIGOPOLIO El mercado oligopólico se caracteriza por la existencia de pocos e importantes vendedores, que tienen un poder en la fijación del precio de mercado. Estos pocos oligopolistas pueden estar produciendo un producto homogéneo, en cuyo caso hablamos de Oligopolio Puro; en cambio si el producto es diferenciado, se dice que es un Oligopolio Diferenciado. La diferenciación de producto puede ser real, es decir que existen cualidades distintivas entre los productos de los diversos oligopolistas, o puede que se trate de una mera diferenciación virtual por la vía publicitaria. Un mercado típicamente oligopólico es el mercado de los automóviles, si un automóvil es más veloz o más seguro por tener mejores frenos, o por tener barra de torsión, estaríamos hablando de una diferenciación real; en cambio si la publicidad aludiese a que conducir determinado auto convierte a su dueño en una persona más exitosa y más feliz, entonces existiría una diferenciación virtual. Dentro del oligopolio puro, los productores sólo pueden competir por precio, en tanto que en un oligopolio diferenciado, los competidores pueden acordar competir solamente por diferenciación de producto. En ambos casos (Puro o Diferenciado), los oligopolistas pueden optar por competir entre sí o bien por alcanzar ciertos acuerdos colusivos que les permitan aumentar su preeminencia en el mercado. Usualmente optan por este último camino ya que la competencia entre productores tan poderosos trae aparejado grandes riesgos para todos. Aún compitiendo, tenderían a obtener beneficios extraordinarios que sostendrían en el largo plazo y su Qmax, si bien sería superior en conjunto al del monopolio, también distaría de que cada productor encontrase su volumen de ventas que maximiza el beneficio, en el punto óptimo técnico. LA CURVA DE DEMANDA CON ESQUINA (PAUL SWEEZY – 1939) Suponiendo un mercado oligopólico con competencia, es decir un oligopolio puro sin acuerdos colusivos; el autor trata de desentrañar por qué, en ese mercado oligopólico, existe cierta rigidez de precios. Lo que sostiene Sweezy es que cada productor oligopólico enfrenta una curva de demanda individual que presenta una “esquina” que, en el gráfico 28 señalamos con “R”. En ese punto, el precio de la mercancía y también la cantidad ofrecida, adquieren cierta rigidez. ¿Por qué sucede esto?, porque el productor oligopólico compite con otros productores de gran envergadura que tienen tanta o más capacidad que él para soportar caídas en sus ventas para aumentar el precio o de enfrentar caídas en los precios, con el objetivo de ganar una porción del mercado. 56 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Por lo tanto, en el punto R, es como si se cruzasen dos curvas de demanda Ds y Db. Ds es la curva que enfrentaría el productor si decidiese aumentar el precio del bien y Db es la curva que enfrentaría si tuviese el plan de bajar el precio del bien para ganar una porción adicional del mercado. Como se puede apreciar en el gráfico 28, en lo referido a la elasticidad precio de la demanda, la curva Ds es más elástica Db. Si el productor sube el precio con el objetivo de incrementar su ingreso total, sus competidores tendrían el poder suficiente como para no subir sus precios y, por ende, quitarle una porción del mercado. Es por ello que, al subir el precio, enfrenta una Demanda más elástica que lo disuade de no aumentar dicho precio. Si, por el contrario, mejorase su curva de CMg y esto le permitiese bajar el precio del bien, intentando ganar una porción mayor del mercado; sus competidores podrían, aún en peores condiciones, acompañar esa baja en el precio, anulando la posibilidad de ganar esa porción adicional de mercado. Su curva de demanda a la baja (Db) se presenta como más inelástica e induce al productor oligopólico a desestimar la posibilidad de bajar el precio de su bien. Grafico 28 De alguna manera, en este modelo, vuelve a aparecer la idea de que la competencia entre grandes productores oligopólicos es demasiado costosa para los propios productores y, por lo tanto, estos generalmente optan por encontrar acuerdos colusivos que les evitan estos costos, al costo de empeorar las condiciones de vida de los consumidores. 57 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Estos acuerdos implican, en general, que los competidores oligopólicos resignan el competir por precio. Para ello pueden recurrir a la fijación de un precio mínimo que debe ser respetado por todos los productores oligopolistas o a una distribución geográfica del mercado entre las distintas empresas que forman el oligopolio. Se busca pues la conformación de coaliciones, de manera que se impongan las soluciones que se consideren preferidas para todos sí se compara con el resultado de la ausencia de entendimiento. Sin embargo, las soluciones de tipo cooperativo presentan algunos problemas esenciales: -Son generalmente indeterminadas es decir, no únicas ya que se deja abierta la cuestión del reparto de los frutos de la cooperación entre los jugadores; - Con frecuencia no son “estables” en la medida en que ciertos jugadores, sino todos, tienen interés en “romper el acuerdo” para sacar un beneficio adicional sobre sus competidores. Dilema del prisionero: Para ilustrar por qué los competidores oligopólicos están tentados a “romper los acuerdos”, suele recurrirse a una “pequeña historia” propuesta por A.W. Tucker denominada el dilema del prisionero; la cual se puede resumir de la siguiente manera. Dos individuos sospechosos de haber cometido un robo son detenidos por al policía que los lleva ante el juez, quien los interroga separadamente. Cada uno puede callar o denunciar a su cómplice; y ambos se encuentran ante las siguientes posibilidades: - Callar y salir libre si el otro hace lo mismo; - Callar y ser condenado si el otro escoge denunciarlo; - Denunciar al otro y salir libre, ganándose, además, una recompensa si el otro se calla; - Denunciar al otro y quedarse en prisión por un tiempo si el otro decide de la misma manera la delación. Se constata fácilmente que el único equilibrio (de Nash) consiste en una denuncia mutua, lo que evidentemente es subóptimo ya que los dos sufren una condena, en tanto que si se hubieran callado habrían sido liberados. No obstante este equilibrio es “robusto” en el sentido en que la estrategia de acusar al otro es dominante cualquiera que sea la elección del otro, la denuncia le procura una ganancia superior. Notemos que acá hay un dilema porque cada cual toma su decisión sólo considerando sus propios intereses y sabiendo que el otro actúa de la misma manera. Incluso, aceptando que los dos individuos se puedan comunicar previamente, la cuestión no cambia en nada, ya que al momento de escoger la estrategia dominante, “denunciar al otro” se impone. El problema no está pues en la posibilidad de comunicarse o no antes de tomar una decisión, sino más bien en la existencia de 58 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) acuerdos obligatorios cuyo incumplimiento implica sanciones y de instituciones que velen por su aplicación, las cuales son difíciles de introducir en el ejemplo que nos ocupa. El dilema del prisionero, o más exactamente las situaciones que representa, crean un problema fundamental, porque queda claro el hecho de las decisiones racionales por parte de individuos puede conducir a una “solución” -equilibrio- poco satisfactoria, es decir, subóptima por tanto “colectivamente irracional”. De ahí las numerosas tentativas de los teóricos de los juegos para salir de este “dilema”, pero siempre preservando el principio según el cual cada cual sólo busca su propio beneficio, es decir, maximizar sus ganancias. De todas formas, es importante aclarar que aunque exista un acuerdo previo de ambos para callar, el desconocimiento de las acciones a llevar a cabo de uno por el otro, produce que sea más beneficioso “jugar solo” y romper el acuerdo buscando un beneficio adicional (la recompensa) o la menor pérdida (NO ir a la cárcel) que creer que el otro mantendrá el acuerdo, más considerando que la ruptura del acuerdo implica para aquel que no lo rompa una pérdida grande (Ir a la cárcel). DUOPOLIO Se trata de un caso extremo de oligopolio donde sólo existen dos empresas (A y B), y cada empresa produce un bien que presenta cierta diferenciación respecto del de su competidor (supongamos que la empresa A produce el bien X y la empresa B produce el bien Y). Vamos a considerar que poseen estructuras de costos similares y la condición necesaria para estimar el óptimo de la producción para ambas empresas será cuando se iguale el Costo Marginal=Ingreso Marginal. Dadas las circunstancias mencionadas, veamos como influye el aumento de los costos de producción del bien Y que ocasiona un aumento del precio del bien. Al aumentar el precio del bien Y, la demanda del bien X se expande porque ambos bienes son sustitutos. Al expandirse la demanda del bien X, la demanda del bien Y disminuirá y se equilibrará el consumo de ambos bienes. En síntesis, el aumento de los costos de producción del bien Y generaría una transferencia del consumo hacia el bien X. Otro caso que puede tener lugar es una mejora en la producción. Si una de las empresas innova en la producción y reduce sus costos tendrá mayor margen de beneficio. Supongamos que la empresa A reduce sus costos de producción y puede disminuir el precio del bien X sin perder margen de ganancia. Esto ocasionaría que aumente la demanda del bien X y, consecuentemente, se contraiga la demanda del bien Y Al disminuir las ventas de Y, la empresa B se vería forzada a reducir costos para no perder participación en el mercado. En el caso de la disminución de los costos de 59 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) producción, el costo variable medio sería el que se modifica. Luego, el cruce de las nuevas curvas de costo marginal y de ingreso marginal se ubicará más abajo y a la derecha del cruce original. Así el precio del bien X será menor y la demanda del bien Y se contraerá (ver Gráfico 29). Gráfico 29 COMPETENCIA MONOPOLISTICA (Edward Chamberlin – 1933) La competencia monopolística es un tipo de mercado en la que existe una cantidad significativa de productores sin que exista un control dominante por parte de ninguno de estos en particular. El número de vendedores es suficientemente grande como para que ellos actúen independientemente y no estén preocupados por su interacción con los posibles competidores. Otra de las características esenciales es que los productos no son homogéneos, aunque tienen sustitutos cercanos y la amplitud de los desplazamientos dependerá también de la solidez de las respectivas preferencias de los compradores. Las diferencias mayormente vienen dadas por las cualidades del producto y diferenciaciones por Marca y/o Publicidad. Podemos citar, como ejemplo, la actividad desarrollada por los restaurantes; allí existen diferentes variantes de preparar la misma comida, obteniendo productos con características similares pero diferentes. La cuestión clave en este caso es que se presenta una diferenciación del producto, mercancía no homogénea; cada productor le imprime a su mercancía alguna particularidad que le permite ser, en algún aspecto, “monopólico” respecto de los demás productos similares hechos por las empresas competidoras. La competencia, entonces, no se dará por precios sino, por ejemplo, por la calidad del producto, el servicio durante la venta o ubicación y el acceso al producto, la publicidad y el empaque, etc. Otra característica para destacar de la competencia monopolística es la de la fácil entrada y salida a la industria por parte de los productores. Un gran número 60 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) de productores de un bien determinado permite que las empresas no necesiten grandes cantidades de dinero, ni un gran tamaño, para competir; los costos, sin embargo, se pueden incrementar por la necesidad de buscar diferenciarse de los demás competidores. En síntesis, los supuestos relevantes para el análisis de este mercado son: 1) Producto levemente diferenciado y producido por un gran número de empresas. 2).Vendedores atomizados y con la creencia que sus acciones pasarán desapercibidas. 3) La curva de demanda y la curva de costos es la misma para todos los productores. En este escenario, las empresas intentarán quedarse con una participación mayor de mercado (Mayores Ventas). Para ello, tienen diferentes opciones que son: a) Cambiar el precio del producto. b) Cambiar las características del producto. c) Aumentar gastos de publicidad. Cambio del precio del producto En este caso, según se visualiza en el gráfico 30, podemos hablar de la existencia de dos curvas de demanda posibles. La primera de ellas “d” contiene el supuesto que las acciones del productor pasarán inadvertidas para sus competidores, por lo tanto, frente a una baja de sus precios podrá quedarse con una participación más que proporcional a la reducción de precios. La segunda muestra que la reacción de todos es bajar los precios, por lo tanto, la curva relevante es “D”. que es más inelástica que “d”. Gráfico 30 La empresa que participa en ese mercado de competencia monopolística, actuará pensando que su curva de demanda relevante es “d”. Es decir que partirá del supuesto de que sus competidores no tomaran nota de sus acciones; entonces, como se puede apreciar en el gráfico 31, producirá en Qe. 61 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) P Gráfico30 31 Gráfico CMg Pe d IMg Qe Q Sin embargo, todas las empresas que fabrican ese producto se comportarán de la misma manera y, por lo tanto, la curva de demanda relevante será la curva D. Gráfico 32 P Q De esta manera, la empresa queda produciendo en un punto Qo en donde el Img es mayor al Cmg. Entonces, la empresa estará tentada a disminuir su precio de venta, a efectos de aumentar las cantidades vendidas, hasta alcanzar la igualación del IMg con el CMg. 62 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Gráfico 33 P Q Al reducir el precio a P1, la empresa espera vender Qe1, pero, en realidad, terminará vendiendo Q1, ya que la curva de demanda relevante vuelve a ser “D”. En este punto, el IMg vuelve a ser mayor al CMg y esto incentiva a una reducción adicional de precios. Se irán produciendo sendos ajuste sucesivos hasta alcanzar el equilibrio en el punto de intersección de ambas curvas de demanda (D=d) (Gráfico 33); en esas circunstancias, el CMg=IMg. Aquí la empresa maximiza beneficios, pero tendría que evaluar si recibe beneficios extraordinarios o no en el corto plazo. En el Largo Plazo, los beneficios extraordinarios desaparecen por la libre entrada de competidores. Gráfico 34 CMe Pero también es necesario tener en cuenta el ajuste de grupo. De acuerdo con los diversos movimientos que hagan el resto de los vendedores de productos serán éstos más o menos sustitutos. Un aumento en los precios de todo el grupo puede aumentar el número de vendedores de productos sustitutivos; la publicidad realizada por uno de ellos puede disminuir el número de compradores de los otros pero también puede 63 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) aumentar el número de compradores potenciales al aumentar el deseo del producto conjunto. Para cada una de las decisiones tomadas por cada uno de los vendedores cambian las elasticidades cruzadas del grupo variando la elasticidad de la curva de demanda de cada producto, por lo que existe una curva de demanda de producto para cada uno de los ajustes de grupo. Puede, por tanto, aplicarse a la teoría de la competencia monopolística toda la teoría del monopolio, en el bien entendido de que en lugar de tratarse de una excepción a la teoría general, es una teoría general aplicable a cada uno de los ajustes de grupo realizados. 64 PRODUCTO COMP 65 MUCHOS MUCHOS MUCHOS OLIGOPOLIO CONCENTRADO OLIGOPOLIO DIFERENCIADO COMPETENCIA MONOPOLISTICA MUCHOS POCOS POCOS UNO LEVEMENTE DIFERENCIADO DIFERENCIADO HOMOGENEO NO TIENE SENTIDO SI SI SI SI SI PUEDE EXISTIR AUNQUE LO MAS COMUN SON LOS ACUERDOS COLUSIVOS SI LIBRE NO NO NO NO SI INF. SI NO NO NO SI DE CAPITAL PERFECTA MOVILIDAD EXISTE NO SI SI SI NO LARGO PLAZO EXTRAORD. DE BENEFICIOS SOSTIENE Qpot = VOLUMEN DE PRODUCCIÓN EN EL PUNTO OPTIMO TECNICO MUCHOS SI VEND ACTUACION INDEPENDIENTE MUCHOS MUCHOS HOMOGENEO SI COMPRADOR VENDEDOR MONOPOLIO COMPETENCIA PERFECTA MERCADO ATOMIZACION Qmax Q ENTRE pot y NO NO NO SI FIJACION DEL PRECIO CMg = IMg =< P Qpot > Qmax POCA CMg = IMg < P Qpot > Qmax CMg = IMg < P Qpot > Qmax CMg = IMg < P Qpot > Qmax CMg = IMg = P Qpot < Qmax (QM AX ) BENEFICIO RELACION EN EL TRANSP. MAXIMIZCION DE CORTO PLAZO EN LA VOLUMEN DE EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) MONOPOLIO NATURAL Ya hemos definido el monopolio como una industria en donde hay un solo oferente de un producto. Esto puede suceder por ser un bien sin sustitutos cercanos o ser una industria a la que es muy difícil entrar para una nueva firma. Las barreras a la entrada son: Restricciones legales, como leyes que entreguen la concesión de la producción de un bien o servicio a una sola firma o el caso de las patentes que otorgan exclusividad para producir determinado bien. Control de los recursos. Si un insumo clave es controlado totalmente por una firma. Tecnológicas. En el caso que una firma este en la vanguardia tecnológica de su industria. Economías de Escala, que den la posibilidad de reducir costos a medida que se aumente la producción. Esta última barrera es la que nos permite introducirnos en el monopolio natural. Las industrias en las que los rendimientos crecientes son tales que sólo debe haber una empresa, se denominan monopolios naturales. Esto suele ir acompañado de enormes costos hundidos 11 por lo cual el ingreso de competencia en algunas industrias se ve disuadidos por las empresas existentes. En el monopolio natural la tecnología tiene como consecuencia que las economías de escala crezcan y se reduzcan los costos a mayor producción, haciendo que no existan límites naturales de capacidad productiva en el mercado relevante. Entonces es más eficiente (ahorrador de costos) para una firma operar con un alto volumen. En este caso, el poder de mercado será inevitable acompañante de la tecnología eficiente. La globalización de los mercados y los cambios tecnológicos han reducido la importancia de algunos monopolios naturales. Sin embargo, la globalización y la tecnología han creado una nueva clase de monopolio natural, el monopolio natural global. Con caída del costo para sus productos y servicios, aún si este servicio es dado en el mundo entero. Sin embargo, un monopolio natural no necesita ser una gran firma si el mercado es pequeño. Lo que importa es el tamaño relativo de la firma con respecto a la demanda total del producto. En el siguiente gráfico podemos ver como cae la curva de costo medio (Cme) en el caso de una firma que posee las características de monopolio natural. 11 Porción de los costos fijos en que se incurre para iniciar una actividad y no son recuperables. 66 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Además, como se ve en el grafico 35, que la curva de Costo Medio tenga pendiente negativa implica que la curva de costo marginal (Cmg) pase por debajo de la curva de costo medio en todo su recorrido. De todas maneras, al igual que en competencia perfecta sigue vigente en el monopolio natural la regla de maximización del beneficio en donde el Costo Marginal se iguala al Ingreso Marginal. Luego, la diferencia existente entre el Costo Medio y el Precio será el beneficio de la empresa. En esta situación habrá que encontrar soluciones en donde intervenga de alguna manera el Estado. Si los monopolios son más eficientes, las políticas posibles tienen pocas alternativas y las podemos enumerar. 1. No intervenir, permitiendo que las empresas operen como un monopolio ordinario, 2. Permitir el monopolio, pero regularlo para limitar su libertad en la fijación de precios u otros parámetros equivalentes 3. Mantener el monopolio dentro del sector público. 67 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) EXTERNALIDADES Las actividades económicas tienen consecuencias que no sólo afectan a aquellos que deciden realizarlas sino también a terceros. Estas consecuencias reciben el nombre de externalidades. Una de las externalidades más significativa suele darse en nuestra relación con el medio ambiente. Podemos citar un ejemplo importante como es el caso de las papeleras. Las fábricas de papel generan dioxina como un resultado secundario derivado de su actividad principal. Una vez vertida al medio ambiente (en el agua), la dioxina acaba introduciéndose en el tejido adiposo de cada persona y en la leche de las madres provocando cáncer y defectos congénitos. En este caso, la Papelera debería pagar un precio que refleje el valor del recurso escaso (agua) susceptible de ser utilizado en actividades más útiles. Sin embargo, la papelera no paga por el uso del recurso contaminado. Seguramente, el resto de los recursos es pagado por la papelera al precio de mercado pero el agua, al no ser propiedad de nadie (y de todos) es sobre utilizada. Por lo tanto, una EXTERNALIDAD es la consecuencia de la dificultad o imposibilidad de definir los derechos de propiedad. Al no ser claro quien es el dueño del recurso, todos los que tengan acceso a él intentarán sacar el máximo provecho sin considerar los efectos de sus actos sobre el resto de la sociedad. Cuando alguien es propietario de un determinado recurso, su precio reflejará el valor de sus usos alternativos y éste será explotado de manera eficiente. Por el contrario, los recursos que son de propiedad común se sobre utilizarán en la mayoría de los casos. Cabe agregar que las externalidades pueden ser producidas tanto por los consumidores como productores, son de naturaleza recíproca y pueden ser positivas o negativas como en el ejemplo dado. Costo Marginal Social 68 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) En el gráfico 37 podemos ver que el productor intentará ubicarse en donde CMg priv = Img priv (punto a) sin tener en cuenta los costos sociales (daño a la población) pero este no será el punto de producción socialmente eficiente. Para llegar al punto óptimo también deberíamos tener en cuenta el daño provocado a la sociedad (DMg Social con pendiente positiva) y que en el gráfico consideramos que crece a medida que crece la producción. Por lo tanto, el punto óptimo social sería b en donde se iguala el Img priv = CMg social, que es la suma del costo privado más el daño ocasionado a la sociedad. Este análisis sugiere que los mercados privados no necesariamente generan un nivel de producción eficiente. Entonces, los bienes que poseen una externalidad negativa se producen en cantidades excesivas en relación con el nivel de producción que resultaría eficiente. Además, este análisis gráfico nos permite medir los beneficios de la reducción del nivel óptimo privado al óptimo social. Observemos nuevamente el gráfico para poder distinguir cual es la ganancia de la sociedad: Ganancia Social Como podemos observar en el gráfico 38, el beneficio obtenido, visto como el menor daño social por pasar de B a A, por la reducción de la producción es mayor a lo que deja de ganar el productor por no ubicarse en su punto óptimo de producción. Para visualizar porque el productor no se ubica en su punto óptimo recordemos que el beneficio máximo se da en donde el costo marginal es igual al ingreso marginal. Si el ingreso marginal es mayor, entonces podría seguir incrementando sus ganancias aumentando la cantidad vendida hasta el punto en donde se igualen las dos curvas. Pero debido a que la producción social se ubica en A, entonces el triangulo marcado 69 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) en el gráfico es lo que pierde la empresa. Por lo tanto, la reducción de la producción es netamente beneficiosa. Por último, este análisis demuestra que la no-contaminación no es posible. Siempre existirá un grado de contaminación. Eliminarla totalmente implicaría prohibir toda producción. Soluciones privadas a las externalidades Fusiones Una manera de corregir una externalidad es internalizarla. Si dos fábricas tienen problemas por el uso de algún recurso pero una de ellas adquiere a la otra, entonces deja de existir una externalidad ya que los perjuicios-beneficios entre ambas fábricas pasarán a ser considerados por la nueva dirección que tengan en común. Soluciones públicas a las externalidades Impuestos pigouvianos Es un impuesto que grava cada una de las unidades producidas por un agente que contamina en una cuantía igual al daño marginal provocado. Lo que logra el impuesto es aumentar el costo del productor contaminante que de esta manera se ve inducido a reducir la producción. Pero presenta graves problemas de implementación ya que el daño provocado, o mejor dicho la valoración de ese daño, es de difícil medición y en muchos casos también es difícil determinar quién o quienes son los agentes contaminantes. Subvenciones Otra forma de intervención que posee el Estado es a través del pago de una subvención por cada unidad no producida. Por supuesto, que las consecuencias distributivas son totalmente diferentes. En el caso de los impuestos la empresa paga y en el caso de las subvenciones la empresa cobra. Además en este caso puede haber cierta incentivación a que ingresen otras empresas y se incremente la contaminación debido al cobro de la subvención. Creación de un mercado El Estado podría establecer un mercado de compraventa de permisos de contaminación. Lo importante, es saber cual es (determinar) la cantidad máxima a contaminar y el ámbito de aplicación. Estos derechos serían subastados por el Estado en un primer momento ya que la cantidad de permisos a emitir guardaría relación con la máxima contaminación tolerada. Por lo tanto, la oferta sería completamente inelástica, con lo cual el precio dependería de los cambios en la demanda y esta demanda dependería principalmente del cambio tecnológico y de la utilización de procesos menos contaminantes. Las empresas que compren este permiso lo harían hasta que se iguale el costo de los permisos con el costo de reducir la contaminación, mediante la compra o construcción de máquinas y/o insumos menos contaminantes. 70 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Derechos de propiedad (Teorema de Coase) El teorema de Coase dice que independientemente de cómo se asignen los derechos de propiedad, la solución eficiente puede ser alcanzada si los derechos de propiedad son asignados a alguien. Una vez que los derechos de propiedad quedan establecidos la intervención pública deja de ser necesaria para tratar el problema de las externalidades. Pero, no en todos los casos es factible establecer derechos de propiedad. El teorema requiere que los costos de negociación no disuadan a las partes de encontrar por sí mismas una solución eficiente y que los propietarios de los recursos sean capaces de identificar el origen del daño que sufren sus propiedades. En el caso de la contaminación atmosférica afecta a millones de personas, dificultando la negociación, y no está claro que se pueda identificar a todos los agentes contaminantes. Este teorema es más relevante en aquellos supuestos en los que hay un número limitado de partes afectadas y la fuente (el origen) de la externalidad se encuentra bien definida. Externalidades positivas Además del aspecto negativo tenemos el positivo en las externalidades. Supongamos que una empresa gasta dinero en investigación y desarrollo. Entonces como sucede en cualquier otro caso, querrá igualar costo marginal e ingreso marginal generado por los frutos de la I+D encarada. Pero supondremos que los beneficios obtenidos por esta firma se extienden a otras firmas que no pagan por su uso. En ese caso el beneficio obtenido por el conjunto de la sociedad será mayor que el obtenido únicamente por la firma que invirtió en I+D. También puede observarse gráficamente que el gasto óptimo en I+D para el conjunto de la sociedad (Q 1) es mayor que el gasto que estará dispuesta a realizar la empresa (Q 0), por lo tanto, existe una externalidad positiva. 71 EL MODELO NEOCLASICO Y LA MICROECONOMÍA (JUAN A. VIGO DEANDREIS – LEONARDO ALBERTO) Externalidades de Red Una red es un conjunto de nodos conectados. Uno de los casos más importantes se presenta en la telefonía o en el uso de software. Si uno va a utilizar un procesador de texto, es altamente probable que elija uno que posea amplia participación en el mercado, dado que esto le permitirá intercambiar archivos con otros usuarios. Esto permite reducir costos a medida que se suman más usuarios y se reducen los problemas para enviar/recibir documentos electrónicos. Por lo tanto, si una firma domina el mercado será muy difícil disputarle ese dominio. Pero, ¿por qué surge la externalidad? Porque el último usuario que se incorpora a la red paga un precio que es menor al beneficio que obtendrá al incorporarse nuevos usuarios. BIBLIOGRAFIA UTILIZADA - FUCCI, Pablo y VIGO DEANDREIS, Juan: “Introducción a la Microeconomía” – Ficha de cátedra 2010. - BEKER, Víctor, PINDYCK Robert y RUBINFELD, Daniel: “Microeconomía” (2000)- Prentice Hall - FUCCI, Pablo: “Economía Política y Economía”-(2004) Ediciones Cooperativas - GALBRAITH, John: “Historia de la Economía”(1987) Ediciones Ariel 1993) - HEILBRONER, Robert y THUROW, Lester: “Economía”(1984) Prentice Hall - MANSFIELD, Edwin . “Microeconomía Teoría y Aplicaciones” Tesis Grupo Editorial Norma S.A. (1996) - MARSHALL, Alfred: “Principios de Economía” (1891) Ediciones Aguilar (1927) - MOCHON, Francisco y BEKER, Víctor: "Economía"(1993)-Mc Graw Hill Ediciones (1997) - PARKIN, Michael: “Microeconomía”Versión para Latinoamérica (2005) AddisonWesley Ediciones (2006) - SCHUMPETER, Joseph: “Historia del análisis económico”(1950) Edic.Ariel(1971) - WONNACOTT, Paul y Ronald: “Economía” (1989) Mc Graw Hill Edciones(1992) Vigo Deandreis, Juan Ángel El modelo neoclásico y la microeconomía / Juan Ángel Vigo Deandreis y Leonardo Mario Alberto . - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Fucci-Vigo Ediciones, 2012. 72 p. ; 20x15 cm. ISBN 978-987-27896-0-2 1. Economía. I. Alberto , Leonardo Mario II. Título CDD 330.1 Fecha de catalogación: 06/03/2012 72