<Ţ Ţ®ŢŢŢ ŢHERALDO DE ARAGÓN 3 de enero de 2016 ● ● ● A fondo Trabajadores de Pardo en la vieja fábrica que se trasladó hace dos años a Centrovía. G. MESTRE Operarios al final de la línea de montaje de la planta de Figueruelas. A. NAVARRO La línea ascendente de la economía se mantendrá este año que comienza, dicen distintos empresarios, que piden al nuevo Gobierno, sea el que sea, reducir la presión fiscal y los costes energéticos y logísticos :78>\ŢŢ\Ţ ŢŢŢ E stabilidad, además de una mayor inversión en I+D+i, mejores infraestructuras, una energía más barata y menor presión fiscal. Estos son los deseos que algunas de las grandes empresas que trabajan en Aragón le piden a los Gobiernos central y autonómico. Sabedores de que 2016 será un año de crecimiento, pero más moderado que el registrado en 2015, los empresarios piden un Ejecutivo fuerte que acometa los cambios necesarios para anclar la mejoría económica. «Es insoportable que cada 4 años se ponga en cuestión todo el modelo de convivencia, desde el marco económico, fiscal, laboral, educativo hasta el propio modelo de Estado. Solo ocurre en España y es un freno definitivo para nuestro desarrollo como país», critica José Longás, consejero delegado de BSH España. «No se puede ir hacia adelante y luego hacia atrás, tejiendo y destejiendo leyes porque así no se avanza», insiste. Máximo Valenciano, director general de Inycom, exige también «un pacto nacional en materia de I+D+i, (igual que debería haberlo en educación y sanidad), para que se respete, independientemente del gobierno de turno». Ramón Alejandro Balet, presidente de Saica, también considera «muy necesario un Gobierno fuerte que acometa cambios y reformas para que podamos mantener buenos niveles de crecimien- to en el largo plazo» destacando que «el coste energético de España continua siendo un lastre a la competitividad de las empresas españolas». Enrique Garay, director general de Simply, va un poco más allá al pedir que se disipe pronto la incertidumbre política y «se trabaje en un marco consensuado por todos los partidos, que genere más creación de empleo». Además pide reducir la presión fiscal bajando el IVA y el IRPF. «En estos momentos lo que más podría ayudar a nuestra economía es la estabilidad. El contexto económico en España está mejorando desde hace ya bastantes meses y es fundamental que se garantice en el futuro inmediato una estabilidad en las instituciones, que permita mantener la necesaria confianza en el mercado», subraya José Antonio González, consejero delegado del grupo Pikolin. Asimismo, Benito Tesier, director general de Brembo España y presidente del Cluster de la Automoción de Aragón (CAAR), advierte l*Ţ. Ţ+1 Ţ$-Ţ/ %$ )*Ţ 5Ţ ./ %$ )*Ţ' 5 .[ŢŢ .ĐŢ)*Ţ. Ţ2)6[Ţ'Ţ)1 2*ŢŢ *$ -)*Ţ' Ţ+ $-ĐŢ,1 ŢŢ " ) -. Ţ(-*.Ţ+- $p ' .Ţ Ţ ./$'$m de que la inestabilidad política «no es la mejor receta para favorecer las inversiones» y de que «se necesitarán pactos para seguir atrayendo inversión internacional». Defensor a ultranza de la industria, pide «un mayor apoyo a la inversión industrial mediante deducciones fiscales». Por su parte, Antonio Cobo, director general de General Motors España, desea que «el nuevo Gobierno, sea el que sea, muestre sensibilidad hacia los muchos beneficios que a la economía aporta la industria y, en particular, la del automóvil» y que «dote a nuestras fábricas con medidas que aumenten nuestra competitividad frente a países europeos o asiáticos». En este llamamiento a la sensibilidad del Ejecutivo que está aún por conformarse, incide también Balet, desde Saica, al solicitar la simplificación de las distintas modalidades de contratación, el favorecimiento de la flexibilidad en la empresa y la moderación en los costes salariales. Cobo, de General Motors, reclama, por su parte, al Ejecutivo que «aplique medidas de mejora de los costes logísticos e infraestructuras, de reducción de los costes de la energía, de racionalización de las cargas fiscales y de fomento del desarrollo del talento y la formación de nuestros profesionales, así como de la inversión privada en I+D». Las empresas piden un mayor esfuerzo público en innovación que complemente la apuesta que por su parte ya vienen haciendo. Por ejemplo, en el caso de General Motors España, se han invertido, según Cobo, «más de 500 millones de euros en el periodo de 2013-2015 y en los dos próximos años vamos a continuar en esta línea». BSH España también piensa seguir con las fuertes inversiones acometidas que ascendieron solo el año pasado a 23 millones. En Saica, asegura la compañía aragonesa, las inversiones corrientes –que no incluyen adquisiciones de empresas ni desarrollo de nuevas plantas o nuevos proyectos industriales– se mantendrán para 2016 en torno a 60/70 millones. En el caso de Simply, «está previsto en 2016 mantener las inversiones» que cifran en 20,5 millones en 2015 destinadas sobre todo a la reforma y adaptación de centros al nuevo modelo comercial, la apertura de dos supermercados propios en Bilbao y la finalización de la ampliación de la plataforma logística de Madrid. 2016 también será un año decisivo para Pikolin en inversiones ya que ha iniciado la construcción de la nueva fábrica ubicada en Plaza y presupuestada en 50 millones, que se añade al almacén logístico que ya se inauguró en esta plataforma en 2011, y que se estrenará a finales del año próximo. Benito Tesier, responsable del CAAR, que pide más apoyo para innovación e internacionalización en las pymes, también prevé que en 2016 las inversiones en auxiliares de automoción superen los cien millones de 2015. Como toda inversión conlleva crecimiento, los empresarios confían en que 2016 sea un buen año, aunque posiblemente la economía crezca algo menos que en 2015. «Nuestro plan es seguir aumentando nuestra cuota de mercado en España, norte de África y en los países más próximos de la UE. Hasta ahora el petróleo barato, la disponibilidad de crédito y el tipo de cambio del euro han ayudado y adicionalmente creemos que el incremento del consumo privado permitirá a España seguir creciendo», prevé Ramón Alejandro Ballet, de Saica. Perspectivas optimistas Desde Pikolin, José Antonio González mantiene también buenas perspectivas sobre el consumo en los hogares. «Nuestro mercado crecerá en torno al 3,6% en valor, aunque se encuentra aún lejos de las cifras anteriores a la crisis». No obstante, añade, «somos optimistas: vamos a crecer en facturación por encima del sector y ganar cuota en nuestros principales mercados. La cifra de negocio del grupo se situará en 2015 en torno a 400 millones». Su apuesta por la diversificación, con la compra en 2012 de Pardo, le ha permitido a Pikolin estar en todos los segmentos del sector del descanso. «Parece que 2016 será un año parecido a 2015, con un crecimiento general de la economía, aunque quizás no al mismo ritmo», pronostica Tesier. Tampoco Máximo Valenciano, director general de Inycom, ve mucho cambio. «2016 será muy parecido porque la salida de la crisis es muy lenta, las Administraciones no tienen dinero y sigue la parálisis en inversión pública». No obstante, en su caso, al llevar invirtiendo alrededor del 4% en los últimos ejercicios en I+D+i, internacionalización y mejora continua, cerrarán 2015 con 3 de enero de 2016 HERALDO DE ARAGÓNŢ Ţ®ŢŢŢ Ţ= ● ● ● £ŢLŢŢŢŢ®Ţ El experto advierte que nuestro nivel de deuda pública es lo suficientemente preocupante para no sobrepasarlo y que solo se puede contener igualando ingresos y gastos. Eso sí, avisa, la línea de recortes vía gastos está agotada l .$/(*.Ţ- 1$-Ţ )1 ./-*Ţ ) 1($ )/*m un incremento en facturación pasando de 28,8 millones a 31,8. «No espero que 2016 sea un año sencillo, pero en nuestro caso será, sin duda, ilusionante porque vamos a prepararnos para la fabricación de los dos nuevos modelos que tenemos asignados», afirma Antonio Cobo, de General Motors España. Respecto al ERE anunciado, confía en que sea «coyuntural para 2016» y que los planes para 2017 sean «muy diferentes con la llegada de nuevos productos, pero el mercado nos dirá». Infraestructuras y formación «Cruzar directamente el Pirineo con eficientes ferrocarriles de mercancías con un ágil sistema intermodal». Eso es lo que reivindica cada año José Longás, de BSH España. También Enrique Garay, de Simply, se cansa de repetir que «la Travesía Central por el Pirineo debe ser un proyecto de Estado» junto con la intermodalidad y el desarrollo aeroportuario. Máximo Valenciano, de Inycom, cree que las infraestructuras son fundamentales pero también invertir más en investigación y en desarrollo tecnológico. «Será la asignatura pendiente de este país por muchos años si no se toman medidas». Por eso, «dedicar más esfuerzos a la formación en sector TIC resulta imprescindible». Concluye Longás, de BSH, con una advertencia al Gobierno aragonés: «El incremento de presión fiscal a la que empresas e individuos van a ser sometidos en Aragón va a provocar dificultades para la inversión y la captación de talento». Y también con una esperanza: «Los pasos de fusión de organizaciones empresariales que ya han comenzado son una prueba de la generosidad y visión a largo plazo de sus dirigentes». M. LLORENTE Con una economía que crece al 3% no se puede tener un déficit presupuestario cercano al 5 y pensar que estamos en equilibrio. El aumento de la deuda pública solo se puede contener si se igualan ingresos y gastos y el 100% del PIB es una cifra lo suficientemente preocupante como para que no se sobrepase. Ahora bien, la vía de los recortes lineales del gasto está agotada. Es necesario repensar la estructura de las Administraciones con reformas ambiciosas y acuerdos de todos los niveles y una reforma tributaria que vaya más allá de los aumentos vegetativos de impuestos que se han practicado hasta ahora. ¿Mejorará el empleo o el mercado laboral continuará como este año, con contratos fundamentalmente temporales y a tiempo parcial? El aumento del empleo dependerá fundamentalmente de la continuidad del crecimiento, de manera que lo que nos debe preocupar sobre todo, en relación con el mercado de trabajo, es el crecimiento. El desempleo es además la principal fuente de desigualdad y marginación, por eso es preciso combatirlo enérgicamente. Por desgracia, la crisis ha sido tan intensa y prolon- Ţ *)*(ĐŢ . "1$-øŢŢ - $ )*ŢŢ1)Ţ -$/(*Ţ -)*Ţ 'Ţ;OŢ/1' « Imagen de 2012 de trabajadores de Inycom. GUILLERMO MESTRE José María Serrano. OLIVER DUCH » Un investigador, en los laboratorios de BSH en Montañana. BSH ¿Qué espera de 2016?, ¿Cree que el resultado de las elecciones va a afectar a la economía? Si no cambian las condiciones ambientales, la economía seguirá creciendo a un ritmo parecido al actual, es decir, cercano al 3% anual, que es un buen ritmo. Pero la economía española es vulnerable, porque está todavía convaleciente y es muy sensible al clima en que se desenvuelve. Dos son los principales condicionantes de ese clima: una política económica apropiada con estabilidad institucional y un entorno internacional favorable. Por eso ahora la economía depende mucho de la política. Los resultados de las elecciones generales han dejado un panorama muy abierto que es preciso despejar cuanto antes. A la economía le iría bien un gobierno estable y capaz de alcanzar acuerdos muy amplios en las reformas pendientes, que sirvan para asentar el marco institucional para algunos decenios, incluida una solución de la cuestión catalana. Y el entorno internacional, ¿puede incidir? Pues intensamente, porque la economía española es muy abierta y está muy endeudada con el resto del mundo, así que no podemos abstraernos de lo que pase fuera. Necesitamos exportar y reducir sin sobresaltos nuestro endeudamiento. Para ello nos deben preocupar tres cosas: que se mantenga la estabilidad financiera internacional –amenazada por la debilidad de los emergentes, la incertidumbre china y la subida de intereses en Estados Unidos–, el bajo precio de las materias primas y la continuidad de la recuperación europea. Por supuesto, dando por hecho que se mantendrá una razonable estabilidad geopolítica, pues una agudización de las tensiones o un conflicto de grandes dimensiones serían nefastos. ¿Cree que el nuevo Gobierno tendrá que imponer más recortes?, ¿espera que se acometa una reforma fiscal ambiciosa? y ¿cómo se puede frenar el nivel de endeudamiento público? El nuevo Gobierno debería tener claro que se han hecho esfuerzos en el ajuste, pero no se ha conseguido llegar al equilibrio presupuestario y éste debe ser un objetivo irrenunciable. gada que ha dejado como secuela colectivos enteros de personas mayores, muchos de ellos con escasa cualificación, de difícil empleabilidad ahora. Para atenderlos no se puede descuidar la política social y la preservación de un Estado de Bienestar adecuado a nuestras posibilidades. También es necesario pensar en los jóvenes, cuyo empleo depende, sobre todo, de la mejora en la cualificación y las reglas de contratación. No se debe permitir que su situación se prolongue tanto que se acaben sumando al grupo de los que son inempleables. ¿Piensa que 2016 supondrá ya la normalización del sistema bancario y que volverá a fluir el crédito o todavía lentamente? El proceso de desendeudamiento de familias y empresas ha sido impresionante desde el comienzo de la crisis. La deuda con los bancos se ha reducido en casi la mitad de la renta nacional y hoy España no destaca ya como uno de los países con más deuda del sector privado no financiero. Por su parte el sistema financiero ha reducido su tamaño, ha eliminado sus excesos de otro tiempo, está saneado y en condiciones de cumplir el papel de intermediario entre ahorradores e inversores. Tiene además el apoyo de una política monetaria expansiva por parte del Banco Central Europeo, de manera que no debería haber problemas de crédito. Las dificultades están en que probablemente han pasado de una completa alegría en la evaluación de los riesgos al conceder créditos a un exceso de prudencia, en la incertidumbre sobre la continuidad del crecimiento y en la limitada rentabilidad con tipos de interés tan bajos. Y respecto a Aragón, ¿cree que la incipiente recuperación económica se habrá consolidado como para que las empresas puedan desarrollar mayores inversiones en la comunidad? En economía, como en política, Aragón es Ohio, así que, invirtiendo los términos, lo dicho para la economía española vale para la aragonesa. Las inversiones, el empleo, dependen de que se mantenga un entorno ambiental favorable. Esa es la tarea ahora del sector público y la misión de la política en esta hora. M. LL