MEDIO AMBIENTE Y DESARROLLO SUSTENTABLE Introducción El desarrollo sustentable se ha convertido en un concepto exitoso en la literatura económica y política en las últimas décadas, y puede ser definido como "un desarrollo que satisfaga las necesidades del presente sin poner en peligro la capacidad de las generaciones futuras para atender sus propias necesidades". La preocupación por la pérdida de la biodiversidad , el agotamiento de los recursos renovables, la contaminación del agua y el aire, el efecto invernadero, el deterioro de la capa de ozono, la erosión y deforestación, han impulsado el debate social sobre la sustentabilidad del desarrollo económico desde el punto de vista medioambiental. Implicaciones del desarrollo sustentable El desarrollo sustentable no solo significa el aseguramiento en la provisión de los recursos para las generaciones futuras, sino también la capacidad de gestionar los recursos no renovables, de acuerdo con el potencial de los recursos renovables para reemplazarlos, y limitar los residuos y emisiones al entorno a la capacidad de absorción de este, lo que implica que debe ser: • Económicamente sustentable: compatible con la competitividad de una economía global. Por lo que no es sustentable un desarrollo económico que, que aunque sea muy respetuoso con su entorno, se base en una economía subsidiada. • Socialmente sustentable: es fundamental la inversión en capital humano y la concepción del desarrollo como un modelo compartido, que exige que los ciudadanos y sus instituciones sociales asuman un papel protagonista en su elaboración, ejecución y evaluación. • Medioambientalmente sustentable: que no mantenga el consumo presente a costa del bienestar futuro Ahora bien, las consecuencias de los modelos de desarrollo, que no han tomado en cuenta el medio ambiente, se manifiestan en problemas de orden mundial como el cambio climático. Aunque el modelo global de desarrollo ha propiciado mejoras en algunos países y regiones, el medio ambiente y los recursos naturales continúan deteriorándose a una velocidad alarmante. Los patrones de producción y consumo, así como las presiones demográficas, podrían provocar transformaciones masivas en el entorno que enfrentarán las generaciones futuras, de entre las cuales destacan • El cambio climático. • La reducción de la capa de ozono. • La lluvia ácida. • El incremento de los residuos municipales e industriales, • La contaminación del suelo y el agua por metales pesados y desechos tóxicos, • La pérdida de recursos forestales. • La desertificación. • La sobreexplotación de los recursos hídricos. • La pérdida de la biodiversidad. Y para que un país transite por la senda de la sustentabilidad ambiental es indispensable que los sectores productivos y la población adopten modalidades de producción y consumo que aprovechen con responsabilidad los recursos naturales. Para lo cual se requiere de una serie de reformas en la normatividad, que vinculen el Desarrollo económico con el desarrollo ecológico, factor que en muchos países, en especial en los países en vías de desarrollo, tiene que recorrer un largo camino. DESARROLLO México enfrenta grandes retos en materia ambiental. Dentro de los temas principales se encuentran: la conciliación de la protección del medio ambiente (la mitigación del cambio climático, la reforestación de bosques y selvas, la conservación y uso del agua y del suelo, la preservación de la biodiversidad, el ordenamiento ecológico y la gestión ambiental) con la competitividad de los sectores productivos y con el desarrollo social. El agotamiento de los recursos naturales y la degradación del medio ambiente relacionados con procesos productivos representan un costo anual de 941 mil 670 millones de pesos, equivalente al 7.9 por ciento del producto interno bruto (INEGI, 2010). Lo implica que se debe de hacer un análisis de las implicaciones, que no solo en el plano ambiental, sino también dentro del plano económico, representa el deterioro de los recursos naturales. El reporte Cuentas Económicas y Ecológicas de México 2005-2013, detalla que la contaminación atmosférica representó los mayores costos ambientales en el último año al ubicarse en 520 mil 300 millones de pesos, seguida por el agotamiento de hidrocarburos, con 178 mil 906 millones, y la degradación del suelo, con 70 mil 904 millones. Los costos de la contaminación son un factor problemático en cuento a su determinación, debido a que están integrados por una serie de datos a los cuales es difícil acceder. En el caso de México, en cuanto a los costos económicos, los costos mayores fueron generados por la minería, con 179 mil 770 millones de pesos; el transporte, con 178 mil 420 millones, y la agricultura, ganadería, aprovechamiento forestal, pesca y caza con 172 mil 654 millones. Así, reuniendo toda una caracterización de las implicaciones sociales, económicas y ambientales en las que se incurren con el agotamiento y/o explotación indiscriminada del medio ambiente, se puede crear una agenda de discusión que permita esbozar en el plano de las economías a nivel mundial, los instrumentos idóneos adaptables a las realidades regionales que logren las porcentaje significativo los efectos devastadores que hasta el momento se han experimentado a lo largo y ancho del planta. políticas y modelos de producción, para que con ello se logre minimizar en un porcentaje significativo los efectos devastadores que hasta el momento se han experimentado a lo largo y ancho del planta. A la fecha, México ha suscrito cerca de 100 acuerdos internacionales relacionados con el medio ambiente y el desarrollo sustentable y se dice que se ha realizado aportaciones importantes tanto al desarrollo de los regímenes internacionales de carácter global, como de aquellos enfocados a la atención de asuntos regionales. Pero en el entorno nacional, muy poca evidencia se puede observar en cuanto al alcance de dichos acuerdos. Si bien el avance en el reconocimiento de los problema ambientales que aquejan cada vez más a los países como México, con una gran disponibilidad de recursos, pero con pocos programas o leyes de protección, han permitido reorientar los métodos de acción de cierto tipo de empresas, que han encontrado en las propuestas de solución a los problemas medioambientales una estrategia orientada no ya a un gasto, sino a una inversión. Para pensar el desarrollo sustentable en Baja California hay que reconocer vocaciones y límites naturales del territorio. En tierra contamos con una biodiversidad única, con vegetación frágil y de lento crecimiento. La lluvia es exigua. Los paisajes son de cautivadora belleza. La península es un enclave de la conservación. Basten como muestra el libro The Gulf of California, a World Apart (Robles Gil, Ezcurra y Mellink, 2001) y la película Oasis marino. Tenemos en el mar una biodiversidad notable y una productividad natural -gracias a las condiciones oceanográficas- de las más elevadas del mundo que se traducen en pesca abundante y opciones para la maricultura. Los recursos naturales están fundamentalmente en las costas. Sus delicados valles y desiertos son para la conservación y usos de muy bajo impacto. Tales son las riquezas y fragilidades. Todo desarrollo que respete lo anterior es sustentable. Otro elemento es la circunstancia histórica, las presiones, oportunidades y visiones de desarrollo. La región es una hoja en blanco, siendo de las pocas en el mundo que pueden proyectar su desarrollo incorporando el paradigma sustentable. No obstante, no contamos con un acuerdo sobre cómo desarrollarla. Una visión la percibe como un espacio para la preservación purista con alguna oferta de recreación: "el Mar de Cortés es el 'acuario del mundo' y los pescadores de Baja California son la mayor amenaza para la biodiversidad". La propuesta desconsidera las necesidades sociales y la soberanía. En contraparte, despreciando la capacidad de carga demográfica, hay una impulso desarrollista que ve a la península bordeada de puertos como motor económico Todavía podemos rescatar las costas, es necesario eliminar la corrupción que ha auspiciado la piratería en la pesca, debemos fr4enar las amenazas que derivan del desarrollo de infraestructura turística, comercial o industrial en zonas costeras de alto valor natural como lo son las lagunas costeras, bahías y humedales. La disponibilidad del agua , factor indispensable para definir las políticas públicas. Aún es tiempo de lograr un proyecto sustentable regional cuya divisa sea la conservación y el buen manejo del territorio, la mejoría en la calidad de vida. La tarea comienza con una visión articulada de desarrollo en el gobierno y en la academia. No hay planes, ni cultura, ni instituciones para ello. Los movimientos ciudadanos son incipientes. Para salir del laberinto, necesitamos equipos interdisciplinarios que produzcan escenarios para la toma de decisiones, en una gobernabilidad que integre lo social, lo económico y lo ambiental. Fundada en la ciencia, esta visión endógena va a la par de la justicia social. Con base en el buen uso de los recursos renovables, debe incorporarse el desarrollo tecnológico vanguardista. Esta visión se integra -a la par del desarrollo de instituciones ad hoc- como un mosaico congruente de proyectos que resuelven las tensiones que se dan entre lo urbano y lo rural, las fuerzas globales y las situaciones locales, la viabilidad económica y la conservación. Tienen vocación sustentable regional, entre otras actividades, el ecoturismo de bajo impacto en las costas y el desierto; el turismo cultural hacia las misiones, la pesca y la acuacultura; la extracción y transformación de materiales pétreos, y la producción de sal. Igualmente, la consistente trayectoria científica regional abre una gran oportunidad para una especialización en educación superior, investigación científica y desarrollo tecnológico, particularmente en torno a los temas de conservación, ecología, recursos naturales y energías alternativas. Por otra parte las energías renovables ofrecen la oportunidad de obtener energía útil para diversas aplicaciones, su aprovechamiento tiene menores impactos ambiental que la de fuentes convencionales y poseen el potencial para las necesidades de energía de todo el estado., además su utilización contribuye a conservar los recursos energéticos no renovables y proporciona el desarrollo regional sustentable en baja california. Cabe destacar que otra de las ventajas de promover la energía limpia, distinta a alas tradicionales que proporcionan mayor contaminación y por ende daña nuestro ecosistema. El playas de rosarito, hace falta programas en los cuales se eduque a la ciudadanía para el cuidado adecuado de los recursos renovables de la localidad . Como ejemplo tenemos la pesca de la langosta roja y la almeja generosa que su reproducción y captura son privilegio de nuestras costas y por la falta de educación nuestros pescadores están cavando con ellas ya que no respetan las vedas de las especies, esto se pudiera evitar educando y trayendo programas del gobierno federal ya existentes para la educación delos pescadores sin que estos pierdan su ganancia económica. Almeja generosa langosta roja Nuestro municipio cuenta con hermosas playas que atraen turismo internacional, pero no solo contamos con playas también contamos con valles y praderas con cerros representativos de nuestro municipio como el cerro de la mesa redonda y el cerro del coronel, entre estos cerros se encuentran un sin número de rancherías que ofrecen sus instalaciones para turistas pero por falta de la promoción los turistas no los visitan es importantísimo promover el ecoturismo en rosarito ya es una gran entrada económica así nuestro municipio. Cerro del coronel Cerro de la mesa redonda Además de lo mencionado es indispensable reforestar y crear nueva áreas verdes, ya que nuestros parques casi no tienen arboles debido a la falta de cuidado de la ciudadanía por eso es impórtate la creación de un programa de reforestación donde los colonos vecinos de los parques tengan participación y reciban algunos cursos sobre el cuidado y el cultivo delas plantas además del aprendizaje del reciclado . Desde mi punto de vista personal podemos hacer de rosarito un municipio auto sustentable en materia económica a través de los recursos sustentables que nos ofrece la naturaleza. Conclusión Lo anterior nos lleva a esbozar que el análisis de impacto ambiental en las políticas públicas debe estar acompañado de un gran impulso a la investigación y desarrollo de ciencia y tecnología. Se trata, en suma, de mantener el capital natural que permita el desarrollo y una alta calidad de vida de la población, en el presente y en el futuro. Por lo que se requiere una metodología exhaustiva para medir el impacto económico del daño causado al medio ambiente, que debe incluir temas relevantes de la agenda ambiental, como la biodiversidad terrestre y marina, los suelos, los recursos hídricos, la salud pública, los riesgos, la vulnerabilidad, y no solo la depredación de los activos Frenar el creciente deterioro de los ecosistemas no significa dejar de utilizar los recursos naturales, sino encontrar una mejor manera de aprovecharlos. Bibliografía. Garcia a. 1998. Población y medioambiente Roman , c. aprendiendo a innovar Contaminación atmosférica y agotamiento delos recursos. Y degradación del suelo. Alfonso Aguirre ocenalogo . Foro ciudadano. Plan nacional de desarrollo 2007-2012 eje.4 sustentabilidad ambiental