Comentarios a B i o g r a f í a s d e p rotag o n i s ta s de la Independencia MEXICO • MMX Comentarios a "Los Sentimientos de la Nación". Biografías de protagonistas de la Independencia Primera edición, junio de 2010 © 2010 Instituto Electoral del Estado de México Paseo Tollocan no. 944, col. Santa Ana Tlapaltitlán, C. P. 50160, Toluca, México www.ieem.org.mx Derechos reservados conforme a la ley ISBN: 978-607-9028-01-5 La información contenida en el presente documento fue proporcionada por la Dirección de Capacitación Imagen en Portada Anónimo, José María Morelos, ca. 1812. Imagen tomada del libro: Eduardo Báez, La pintura militar en el siglo XIX, México, SDN, 1992, p. 38. Impreso en México Publicación de distribución gratuita •CONTENIDO• PRESENTACIÓN 5 Comentarios del Dr. José Martínez Vilchis 7 a "LOS SENTIMIENTOS DE LA NACIÓN” FACSÍMIL Y TRANSCRIPCIÓN DE LOS 13 “SENTIMIENTOS DE LA NACIÓN” BIOGRAFÍAS DE PROTAGONISTAS DE LA INDEPENDENCIA DE MÉXICO 23 •Presentación• La revolución armada por la Independencia de México es, sin duda, el acontecimiento social más importante para México, desde la instauración de la colonia. La consolidación de la Independencia de México representa el perfecto colofón de la rebelión, primero velada y después abierta, que fue consecuencia de la marcada diferencia de clases, ya que los privilegios sociales, económicos y políticos de los españoles peninsulares, eran motivo de rezago del grueso social compuesto por los indígenas, mestizos y criollos, de la Nueva España, un ejemplo de ello es el privilegio para ocupar los cargos públicos importantes, los cuales estaban destinados sólo a españoles nacidos en Europa; y los grupos sociales de americanos de la Nueva España, se limitaban a un estatus medio y bajo. El Instituto Electoral del Estado de México, en cumplimiento de sus atribuciones de promover y difundir la cultura política democrática, integró el presente documento, que se compone por dos apartados, en el primero, se aprecian los comentarios del Dr. José Martínez Vilchis, Consejero Electoral de este Instituto, sobre los “Sentimientos de la Nación”, texto elaborado por el Generalísimo Don José María Morelos y Pavón, y presentado en el Congreso de Chilpancingo, el día 14 de septiembre de 1813. Este documento, sin llegar a ser ley sancionada, sentó las bases del constitucionalismo del México Independiente, a eso debe su trascendencia e importancia cultural e histórica, y cuyo contenido, en palabras del Consejero José Martínez Vilchis, es expuesto de una forma clara, comparando la vigencia, evolución ‹6› y actualidad de algunos preceptos que han marcado el rumbo político de nuestra sociedad, a lo largo de 200 años. El segundo apartado, presenta una serie de biografías cortas de personajes importantes de la lucha por la Independencia, con datos relevantes sobre su vida y actuación en la lucha por la Independencia de México, publicadas por el gobierno federal, en la página electrónica conmemorativa del bicentenario de la Independencia. El documento resultante es fiel testimonio de la importancia que para el Instituto Electoral representa este hecho histórico y cultural, y es oportunidad para difundir entre la población del Estado y del mundo entero, las bases políticas de nuestra nación y los protagonistas que hicieron posible nuestra Independencia. Instituto Electoral del Estado de México •Comentarios del Dr. José Martínez Vilchis a LOS SENTIMIENTOS DE LA NACIÓN•1 Son los tiempos de humanizar a los héroes de la independencia de México. Algunos historiadores, novelistas e intelectuales han tomado como tarea escribir sobre el lado “auténtico” y menos “oficial” acerca de las mujeres y hombres que propiciaron la lucha armada que nos permitió constituirnos en una nación independiente. Los investigadores más serios y más profundos aportan información nueva y, con sus obras, permiten conocer más a fondo el comportamiento social, político y militar de nuestros íconos independentistas. Los investigadores de la UAEM, en particular de la facultad de humanidades, dando una muestra de su talla en el campo de la investigación en ciencias sociales y humanidades, lograron la publicación de una obra muy valiosa que editó el Gobierno del Estado de México, cuyo título es Bicentenario de la Independencia: Estado de México. En este espléndido trabajo se aporta información nueva sobre el papel que el Estado de México y sus personajes jugaron en la cruenta guerra de independencia y en sus resultados finales. Los novelistas aportan obras que parte verdad y parte ficción pretenden acercar a la lectura —aspiración muy loable— a más mexicanos que, quizá movidos más por el morbo que por el puro afán de conocimiento histórico, se interesan en conocer o en imaginar los comportamientos de la vida privada de los héroes. Es el tipo de saber histórico que no será muy útil a la hora de formarse opiniones y 1. Comentarios del Doctor José Martínez Vilchis, Consejero Electoral del Instituto Electoral del Estado de México, al documento histórico “Sentimientos de la Nación”. ‹8› criterios sobre las decisiones de la vida pública que a todos nos competen. Para esto sirve la historia, aunque para algunos teóricos de la investigación educativa aprender historia resulte ocioso o poco importante lo cual es un grave error que ha conducido en México a un reducido orgullo nacional por lo que somos y aún más grave, por lo que podemos llegar a ser. Mi interés en este breve ensayo, es aportar mi opinión sobre la importancia de los postulados que el siervo de la nación, José María Morelos, plasmó en los llamados “Sentimientos de la Nación”, publicados el 14 de septiembre de 1813 y que sintetizan el pensamiento no sólo de Morelos sino de un grupo de intelectuales y mexicanos que a tres años de iniciado el movimiento de independencia, escribieron lo que consideraron los principios y postulados bajo los cuales el futuro nuevo país, debería perfilar su primera constitución, máxima norma jurídica de la futura república. En los 23 puntos que integran el documento mencionado se encuentran planteamientos de cuatro tipos: • Religiosos: En cuatro puntos que tratan —de manera polémica para el actual laicismo del Estado— lo referente a la religión oficial y a su sostenimiento, puntos 2°, 3°, 4° y 19. • Políticos: División de poderes como forma de gobierno; la soberanía que dimana del pueblo expresada en representantes ante el Supremo Congreso Nacional; y los emolumentos a los vocales, puntos 5°, 6°, 7°, 8° y 11°. • Económicos: Distribución de la riqueza al aumentar el jornal al pobre; tasas de impuestos justos a pagar; mejoramiento social y cultural cuando señala que se deben mejorar las costumbres de la gente y alejar su ignorancia; puntos 9°, 10°, 12°, 16° y 22°. • Legislativos: De creación de las leyes, puntos 12°, 13° y 14°. La vigencia de los ideales en materia económica Al estudiar la práctica militar y el pensamiento político y social de Morelos se observa la confluencia de las ideas progresistas de las clases que mayoritariamente empujaban la independencia: el pueblo campesino y obrero y las clases medias con afanes de progreso. ‹9› Luis Villoro, en el libro Historia General de México, de El Colegio de México (p. 510), reconoce el agrarismo de Morelos y las ideas políticas de avanzada para su época. Encuentra un evidente humanismo igualitario y cristiano del generalísimo en sus “Sentimientos de la Nación”. Esta es la aportación escrita más importante del movimiento de independencia atribuida a una sola persona porque plantea una mejor justicia económica, entendida como redistribución de la riqueza, como “moderación de la opulencia y la indigencia”. Esta es una de las metas permanentes que se exigen a la acción del gobierno en todos los tiempos y en todos los sistemas económicos. Es desafortunado que en el año 2010, 197 años después de hecho el planteamiento por Morelos, los “Sentimientos de la Nación” sigan siendo vigentes en sus aspiraciones de una menor desigualdad en México. En otras palabras, desearíamos que los “Sentimientos de la Nación” hubieren perdido su vigencia al haberse logrado sus objetivos, pero el país aún aguarda paciente el cumplimiento de estos afanes y de muchos otros que se han plasmado en las diferentes constituciones que nos hemos dado como país. Los ideales del documento de Morelos en materia económica, son más vigentes que nunca si recordamos el número de mexicanos que viven en la pobreza extrema. Con ellos, los gobiernos deben estar no sólo obligados sino comprometidos moralmente para alcanzar una mejor distribución de la riqueza. La vigencia del deber ser del régimen político Sobre la división de poderes Por lo que se refiere a los planteamientos políticos, el documento que analizamos perfila la división de poderes como sustento del nuevo régimen de gobierno que vendría como resultado de la lucha de independencia. El ejercicio del poder, dividido entre el ejecutivo, el legislativo y el judicial es una aspiración tan antigua como la polis griega o como la teoría del contrato social de Rousseau o la que suscribían John Locke o Montesquieu. De 1813, año en que aparecen los “Sentimientos de la Nación”, al año 2010, hemos sido testigos en México de la dominación del poder ejecutivo sobre los otros dos poderes. A lo largo de los años, hemos observado etapas en las que los poderes legislativo y judicial han luchado por tener mayor fuerza política, como cuando el poder legislativo ha promulgado las constituciones más importantes en la historia de México como en 1857 o en 1917 o como en el siglo XXI donde el poder judicial ‹ 10 › cuenta con una mayor autonomía e independencia en la toma de decisiones. Podemos decir entonces que en la experiencia vivida con el esquema de gobierno republicano de México, el poder ejecutivo ha tenido una preeminencia enorme sobre los otros dos poderes, lo que visto a la luz de los “Sentimientos de la Nación” refrenda su vigencia, vista como una aspiración de un gobierno que logre los sanos equilibrios entre sus poderes para una mejor vida política en nuestro país. La no vigencia de las ideas religiosas Los planteamientos religiosos expresados por Morelos en los “Sentimientos de la Nación” sí han perdido su vigencia porque vivimos —con todo y sus problemas y excepciones— en una república laica, que debe dejar la convicción religiosa a la vida privada de las personas. En Morelos, sus ideas religiosas formaron parte importante de su formación personal, que él expresó en el documento que sujetamos al análisis. Prefiero discutir los temas económicos, políticos y sociales que por ser públicos, a todos nos atañen y en los que el siervo de la nación aportó con nitidez su pensamiento y lo sometió al escrutinio y a la crítica de todos al plasmarlos de la forma más comprometedora: dejarlos por escrito en un texto que hoy, frente a los festejos del bicentenario y el centenario, como hemos observado, aún espera pasar a la completa caducidad al haberse cumplido. La ulterior constitución de Apatzingan de 1814, primer texto que hablaba de un nuevo país independiente, recogió algunos de los ideales de los “Sentimientos de la Nación” que aún esperan con paciencia a que los mexicanos los honremos cabalmente. La vigencia de los ideales democráticos La definición de democracia plasmada magistralmente en el artículo 3° de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, incluye los siguientes elementos: entender a la democracia no sólo como un régimen político sino como un sistema de vida basado en el mejoramiento constante de las condiciones económicas, sociales y culturales de su pueblo. ‹ 11 › Para Morelos la justicia económica era una meta importante en la obra que estamos analizando, como lo es ahora para la mayoría de los Mexicanos. Por su parte, las óptimas condiciones sociales y culturales a que aspira la democracia mexicana son las metas que hoy, en el siglo XXI, necesita el país, como en su momento lo fueron las propias aspiraciones políticas, religiosas y de ser un país independiente. Honremos a Morelos, aspirando a lograr los ideales planteados en la definición de democracia citada en el artículo 3° de nuestra Carta Magna, no sólo la democracia como sistema electoral sino como ya lo señalamos, como sistema justo de vivir en sociedad. 2. Facsímil con transcripción de los “Sentimientos de la Nación”, Archivo General de la Nación, José María Morelos y Pavón, 14 de septiembre de 1813. ‹ 15 › •Sentimientos de la Nación• 1. Que la América es libre é independiente de España y de toda otra Nación, Govierno ó Monarquía y que así se sancione, dando al mundo las razones. 2. Que la Religión Catolica sea la única, sin tolerancia de otra. 3. Que todos sus ministros se sustenten de todos y solos los Diezmos y primicias; y el Pueblo no tenga que pagar mas Obenciones que las de su deboción y ofrenda. 4. Que él dogma sea sostenido por la Gerarquía de la Yglesia que son el Papa, los Obispos y los Curas, por que se debe arrancár toda planta que Dios no plantó: omnis plantatis quam nom plantabit Pater meus Celestis Cradicabitur. Mat. Cap. XV. 5. La Soberanía dimana inmediatamente del Pueblo, él que solo quiere depositarla en sus representantes dividiendose los poderes de ella en legislativo, executivo y judiciario, eligiendo las provincias sus vocales, y estos á los demas que deven ser sujetos sabios y de providad. 6. Que los Poderes Legislativo, Executivo y Judicial estén dibididos en los cuerpos compatibles para exercerlos. 7. Que funcionarán quatro años los vocales, turnándose, saliendo los mas antiguos, para que ocupen él lugár los nuebos electos. 8. La dotacion de los vocales, será una congrüa suficiente y no superflua, y no pasará por ahora de 8000 pesos. 9. Que los empleos los obtengan solo los Americanos. 10. Que no se admitan extrangeros, si no son Artesanos capaces de instruír, y libres de toda sospecha. ‹ 17 › 11. Que la Patria no será del todo libre y nuestra, mientras no se reforme él Gobierno, abatiendo él tiranico, substituyendo él liberal y hechando fuera de ntro. suelo ál enemigo Español, que tanto se há declarado contra esta Nacion. 12. Que como la buena Ley es Superior á todo hombre, las que dicte ntro. Congreso deben sér tales, que obliguen á constancia, y patriotismo, moderen la opulencia y la indigencia; y de tál suerte se aumente él Jornál del pobre, que mejore sus costumbres, alexe la ignorancia, la rapiña y él hurto. 13. Que las Leyes grales. comprendan á todos, sin ecepción de Cuerp. Privilegiados: y que estos solo lo seán en quanto él uso de su ministerio. 14. Que para dictar una ley se discuta en el congreso, y decida a pluralidad de votos. 15. Que la Esclabitud se proscriba para siempre, y lo mismo la distinción de Castas, quedando todos iguales, y solo distinguirá á un Americano de otro él vicio y la Virtúd. 16. Que ntros. Puertos se franquen á las Naciones extrangeras amigas, pero que éstas no se internen al Reyno, por mas amigas que séan, y solo haya Puertos señalados para él efecto, prohibiendo él desembarco en todos los demás, señalando él diez por ciento u otra gavela a sus mercancias. 17. Que á cada uno se le guarden sus propiedades, y respete en su Casa, como en un asilo sagrado, señalando penas á los infractores. ‹ 19 › 18. Que en la nueba Legislación no se admita la Tortura. 19. Que en la misma se establezca por Ley Constitucionál, la celebracion del dia doce de Diciembre en todos los Pueblos, dedicado á la Patrona de ntra. Libertad Maria Sma. de Guad., encargando á todos los pueblos la debocion mensál. 20. Que las Tropas extrangeras ó de otro Reyno, no pisen ntro. Suelo, y si fuere en alluda, no estarán donde la Suprema Junta. 21. Que no se hagan expediciones fuera de los limites del Reyno, especialmente ultramarinas, pero que no son de esta clase, propagar la Fé á ntros. hermanos de tierradentro. 22. Que se quite la infinidad de tributos, pechos, é imposisiones que nos agobian, y se señale á cada indibiduo un sinco por ciento en sus ganancias, u otra carga igual de ligera, que no oprima tanto, como la alcabala, él Estanco, él Tributo y otros, pues con esta corta contribuc., y la buena administracion de los bienes confiscados al enemigo, podrá llebarse el peso de la Guerra y honorarios de empleados. Chilpancingo 14 de Septiembre de 1813. José Ma. Morelos. 23. Que igualm.te se solemnise el dia 16 de Septiembre, todos los años, como él dia Anibersario en q.e se lebantó la voz, de la independencia y ntra. Santa libertad comenzó, pues en ese dia fué en él que se abrieron los labios de ‹ 21 › la Nacion para reclamár sus derechos y empuño la Espada para ser oida, recordando siempre el merito del grande Heroé el Señor Dn. Miguel Hidalgo y su Compañero Dn. Ignacio Ayende. Repuestas en 21 de Nov. de 1813, y por tanto quedan abolidas estas, quedando spre. sugetos al parecer de S.A.S. ‹ 23 › •Biografías de protagonistas de la independencia de méxico• Miguel Hidalgo y Costilla (1753-1811) Miguel Gregorio Antonio Ignacio Hidalgo y Costilla Gallaga Mondarte Villaseñor (Hacienda de Corralejo cerca de Pénjamo, Guanajuato, 8 de mayo de 1753 – Chihuahua, Chihuahua, 30 de julio de 1811) fue un sacerdote y militar que destacó en la primera etapa de la Guerra de Independencia de México, que inició con un acto conocido en la historiografía mexicana como Grito de Dolores. Dirigió la primera parte del movimiento independentista, pero tras una serie de derrotas fue capturado el 21 de marzo de 1811 y llevado prisionero a la ciudad de Chihuahua, donde fue juzgado y fusilado el 30 de julio3. 3. http://www.bicentenario.gob.mx/index.php?option=com_content&view=article&id=58 ‹ 24 › José María Morelos y Pavón (1765-1815) Originario de Valladolid (Morelia), José María Morelos fue hijo de José Manuel Morelos, carpintero, y de Juana María Guadalupe Pérez Pavón. Fue registrado como español, pero en realidad era mestizo, con algo de ascendencia negra. Entre 1779 y 1790 trabajó en la hacienda cañera de Tahuejo, en Apatzingán, quizá como escribano o contador. En 1790 ingresó en el Colegio de San Nicolás, en Valladolid, donde estudió gramática latina y retórica, filosofía y moral. En el Seminario Tridentino de aquella ciudad estudió en 1795 teología moral y filosofía. Viajó a la ciudad de México para presentar el 28 de abril de ese año el examen de bachiller en artes en la Real y Pontificia Universidad. A principios de octubre de 1810 Morelos tuvo noticia del levantamiento de Hidalgo y el 19 de ese mes salió en su busca. Lo alcanzó al día siguiente y se entrevistó con él en el trayecto de Charo a Indaparapeo, y recibió la comisión de levantar en armas la costa del sur. Después de solicitar licencia a la mitra de Michoacán, Morelos se dirigió a Carácuaro, donde armó 25 hombres, con los que inició su primera campaña militar el 25 de octubre. Pasó por Nocupétaro, luego a Huetamo, Coahuayutla, Zacatula y Petatlán. En esos lugares consiguió hombres y armas. El 7 de noviembre entró en Tecpan, donde se le unieron Juan José, Antonio y Pablo Galeana, quienes le facilitaron además un cañón pequeño, apodado “El Niño”, primera pieza de artillería con que contó Morelos. Siguió su camino hacia Acapulco, y en Coyuca se le unió Juan Alvarez. El 13 de ese mes sus tropas entraron por primera vez en combate, al enfrentarse a las del realista Luis Calatayud, en El Veladero. El 17 de noviembre Morelos emitió un bando en el que suprimía la esclavitud y las castas. ‹ 25 › El 10 de noviembre, tras diversas derrotas, salió hacia Oaxaca, la que tomó el día 25. Mandó fusilar a los realistas González Sarabia y Régules Villasante y organizó la celebración de la jura de la Suprema Junta, además de dictar otras disposiciones sobre el gobierno de la zona dominada por él y de iniciar la publicación del periódico Sud. El 31 de agosto salió hacia Chilpancingo, donde el 14 de septiembre se inauguró el Congreso, con la elección de diputados y la lectura de los “Sentimientos de la Nación”, escritos por Morelos. Al día siguiente, el Congreso lo eligió Generalísimo encargado del Poder Ejecutivo, y el 18 declaró disuelta la Suprema Junta. El 6 de noviembre el Congreso emitió su Acta de Independencia, y 2 días después Morelos se dirigió hacia Valladolid, con lo que inició su quinta campaña. Llegó a Mezcala y en Tlacotepec emitió unos Rudimentos Militares el 21 de noviembre. Las derrotas continuaron y el Congreso lo separó del poder ejecutivo el 14 de marzo de 1814. A fines de mes, Morelos mandó quemar Acapulco. Perseguido por los realistas, llegó a Apatzingán, donde el Congreso publicó su Decreto Constitucional para la Libertad de la América Mexicana el 22 de octubre. Con Cos y Liceaga fue electo para formar el Supremo Gobierno. Morelos se ocupó entonces del gobierno insurgente, pero no de problemas militares. Pasó a Tancítaro y luego a Uruapan. Volvió a Apatzingán, donde permaneció hasta el 16 de diciembre. En mayo de 1815 el Supremo Gobierno dejó Ario y Morelos pasó a Cutzamala y Tlalchapa, y a principios de junio llegó a Puruarán. En agosto pasó a Uruapan. A causa de la persecución realista, el Congreso decidió pasar a Tehuacan, y Morelos fue el encargado de su custodia. El 28 de septiembre salió hacia Huetamo, Cutzamala y Tlalchapa, y el 2 de noviembre llegó a Atenango del Río. Al día siguiente llegó a Temalaca y el día 5, al salir hacia Pilcaya, fue atacado por Concha y hecho prisionero por Matías Carrasco, antiguo insurgente. Se le llevó a Atenango del Río y se ordenó su traslado a la capital. Llegó a Tlalpan el 21 de noviembre y el 22 a la ciudad de México. Se le inició causa y el día 27 fue declarado hereje y degradado. Pasó a la Ciudadela, y el 20 de diciembre Calleja lo sentenció a muerte. Fue llevado a San Cristóbal Ecatepec, donde se le fusiló. Su prisión y muerte fueron el golpe más duro que recibió la insurgencia. En 1828 su ciudad natal recibió el nombre de Morelia. ‹ 26 › Maximiliano le erigió una estatua en 1865 y, en 1869, Benito Juárez decretó la creación del estado que lleva su nombre. El 16 de septiembre de 1925 sus restos fueron llevados a la Columna de la Independencia4. Ignacio Allende, 1769-1811 Nació en San Miguel el Grande (hoy San Miguel de Allende), en Guanajuato. Hijo de españoles, heredero de regular fortuna, abrazó la carrera de las armas. Ganó sus primeros ascensos en Texas a las órdenes de Félix María Calleja, cuando en 1801 batieron a Nolland, un aventurero estadounidense. En 1806, ya era capitán. Empezó desde entonces a mostrarse partidario de la independencia. En San Miguel estaba al mando del Regimiento de Dragones de la Reina. Acogió con entusiasmo los proyectos de los conspiradores de Valladolid, y a pesar de ser éstos aprehendidos, siguió conspirando. De acuerdo con Miguel Hidalgo, se fijó el 1 de octubre de 1810 el inicio de la Guerra de Independencia. Sospechoso ante el intendente de Guanajuato, se giraron órdenes para arrestarlo al mismo tiempo que se descubría la conspiración. Hidalgo le hizo marchar de San Miguel a Dolores. La denuncia de Querétaro los retuvo dos días en Dolores, hasta que Hidalgo resolvió lanzarse a la lucha. Allende no puso objeciones y fue a sublevar el Regimiento de la Reina. La circunstancia de que el padre Hidalgo fuera el más resuelto, determinó que la jefatura recayera en su persona, y no en Allende, que parecía el caudillo más lógico. Entraron los insurgentes a San Miguel y luego a Celaya. En esa ciudad Allende empezó a organizar su ejército, que ya pasaba de 40 mil hombres. 4. http://www.bicentenario.gob.mx/index.php?option=com_content&view=article&id=72:jose-mariamorelos-y-pavon-1765-1815&catid=84:biografias-independencia. ‹ 27 › El 22 de septiembre se le nombró teniente general; Hidalgo ostentaba el título de capitán general. La indisciplina en las filas insurgentes le hizo marchar sobre Guanajuato, y no sobre Querétaro, ya fortificado. En el camino hacia la Ciudad de México, al pasar por Acámbaro, Hidalgo, fue proclamado generalísimo y Allende capitán general, por un ejército de ochenta mil hombres. Allende hizo retroceder al realista Torcuato Trujillo hacia el Monte de Las Cruces, batalla en que triunfaron los insurgentes. Sostuvo Allende la necesidad de marchar sobre México, dado el indudable prestigio que su ocupación ocasionaría, además de la fuga o prisión del virrey y la desorganización del gobierno de la capital.Prevaleció la opinión de Hidalgo y los insurgentes retrocedieron cuando se encontraban a pocos kilómetros de la ciudad de México. La dispersión que esto ocasionó se agravó con la derrota de Aculco donde se impuso el brigadier Félix María Calleja. Allende se separó de Hidalgo y regresó a Guanajuato. Puso a la ciudad en estado de defensa y mostró sus cualidades de organizador: fundió cañones, barrenó peñascos; fabricó armas y pólvora y solicitó auxilios de Hidalgo, quien se hallaba en Valladolid; de Torres, dueño de Guadalajara, y de Iriarte en San Luis Potosí; este último intentó auxiliarle, pero el rápido movimiento de los realistas lo impidió. Al llegar Calleja a Guanajuato y tomar las principales posesiones, Allende tuvo que abandonar la ciudad y marchó a Guadalajara. Las diferencias con Hidalgo le hicieron apartarse del gobierno civil, dedicándose sólo a la organización del ejército. En la batalla de Puente de Calderón, Allende mostró una vez más sus dotes militares, secundado por Aldama y Abasolo. Tres veces fueron rechazados los realistas a las órdenes de Manuel Flon, y en dos ocasiones volvieron la espalda las tropas de Calleja cuya pericia, unida a la explosión de un carro lleno de municiones en el lado insurgente, inclinaron la victoria por los ejércitos virreinales. Allende, perdida toda esperanza, marchó rumbo a Zacatecas para unirse allí con Hidalgo. Las discordias entre los insurgentes aumentaron. Hidalgo dimitió verbalmente del mando y Allende fue reconocido generalísimo. Ordenó que la retirada se hiciera hasta Saltillo. Antes se adelantó a Matehuala para imponer respeto a los realistas. En una junta del 16 de marzo de 1811 se nombró jefe a Ignacio Rayón y se acordó marchar hacia Estados Unidos. El 21 de marzo fueron hechos prisioneros ‹ 28 › por Ignacio Elizondo en Acatita de Baján: Allende fue el único que hizo resistencia y vio morir a su hijo en la refriega. Se les condujo a Monclova y luego a Chihuahua, donde se les procesó desde el 6 de mayo. Luego de ser sometido a un proceso, fue sentenciado a muerte y se le pasó por las armas el 26 de junio de 1811, en unión de Jiménez, Juan Aldama y Manuel Santamaría. Su cabeza fue colgada en uno de los ángulos de la Alhóndiga de Granaditas, hasta marzo de 1821, cuando el general Anastasio Bustamante la hizo quitar. Sus restos reposan en la cripta de la Columna de la Independencia, del Paseo de la Reforma en la Ciudad de México5. Josefa Ortiz de Domínguez (1773-1829) Hija de Juan José Ortiz y Manuela Girón, quedó, muy niña, bajo el amparo de una hermana. Nació el 19 de abril de 1773 en la ciudad de México. Fue educada en el Colegio de las Vizcaínas, de donde salió en 1791. Se casó en secreto con Miguel Domínguez, quien sería corregidor de Querétaro. La boda se celebró en el Sagrario Metropolitano de la ciudad de México el 24 de enero de 1793. “La Corregidora” es el nombre con el cual la historia la inmortalizó. Su participación en la insurgencia fue definitiva. Como era la esposa del corregidor, era un seguro enlace entre los futuros insurgentes que tenían en la ciudad de Querétaro el centro de su conspiración y a quienes informaba de todo lo que convenía a la causa. Indujo a su esposo a participar en la conjura. 4. http://www.bicentenario.gob.mx/index.php?option=com_content&view=article&id=59:ignacio-allende1769-1811&catid=84:biografias-independencia&Itemid=33 ‹ 29 › Cuando los conspiradores fueron denunciados el corregidor se vio obligado a iniciar una averiguación formal y ordenar el cateo de la casa donde se guardaba el material de guerra. Al marchar para realizar estas diligencias, encerró a su mujer, pero ésta logró enviar noticia de lo ocurrido a Miguel Hidalgo, Ignacio Allende y los Aldama. Iniciado el movimiento insurgente, la corregidora fue denunciada por el capitán Arias, se le encerró en el convento de Santa Clara y después fue llevada a la ciudad de México, donde se le recluyó en el convento de Santa Teresa. Por encontrarse embarazada, su prisión fue benigna al principio, pero después se le trasladó al convento de Santa Catarina de Sena, donde permaneció durante tres años6. Mariano Matamoros (1770-1814) Nació en la ciudad de México el 14 de agosto. Era hijo de José Matamoros y de Mariana Guridi. Estudió en el Colegio de Santa Cruz de Tlatelolco y en 1789 se recibió de bachiller en artes y teología. Cuando se inició el movimiento insurgente era cura de Jantetelco, en Jonacatepec. Por sospechas de abrigar simpatías por la insurgencia se dio orden de aprehensión en su contra, pero Matamoros logró escapar y se unió a Morelos en Izúcar el 18 de diciembre de 1811. Permaneció en esta población a la salida de aquel jefe hacia Cuautla. 6. bicentenario.gob.mx/index.php?option=com_content&view=article&id=74:josefa-ortiz-17731829&catid=84:biografias-independencia ‹ 30 › A principios de 1812 Matamoros llegó a Taxco, donde el 4 de enero Morelos lo nombró coronel de infantería. A pocos días salieron hacia Tenancingo. De allí, pasaron los insurgentes a Cuautla, a donde entraron el 9 de febrero en el sitio que a esta población puso Félix María Calleja. Matamoros se distinguió por su valor. El 21 de abril salió de Cuautla con Manuel Perdiz para tratar de conseguir víveres para los sitiados. Llegó a Ocuituco y se reunió con Miguel Bravo, pero no lograron llevar alimentos a Cuautla. El 27 de ese mes. Matamoros se reunió con Morelos en Chiautla después de que éste rompió el sitio de Cuautla, y de allí pasó a Izúcar. Allí reorganizó sus tropas y levantó un regimiento de dragones llamado del Apóstol San Pedro, con la divisa “Inmunidad Eclesiástica”, como protesta contra el bando emitido por el virrey Venegas el 25 de junio. Morelos lo nombró su segundo en jefe el 12 de septiembre, y el 9 de noviembre siguiente Matamoros se le unió en Tehuacán. Al día siguiente salieron hacia Oaxaca, a donde llegaron el 25 de noviembre. Matamoros se distinguió en el ataque y toma de la ciudad. A principios de febrero de 1813, se dirigió a Yanhuitlán, donde se unió a Morelos el día 15. Matamoros permaneció en dicha población a la salida de aquel jefe insurgente, y en abril siguiente salió en persecución de Manuel Dambrini, realista procedente de Guatemala, a quien derrotó en Tonalá el 19 de ese mes. Regresó entonces a Oaxaca, donde fue recibido triunfalmente el 28 de mayo. Matamoros tuvo algunos desacuerdos con Nicolás Bravo, y el 12 de junio siguiente, en unión de Carlos María de Bustamante, solicitó se le removiera del rumbo de Veracruz y se dejase en su lugar a Mariano Rincón. Morelos, en Acapulco, lo nombró su teniente general. Matamoros pasó de Oaxaca a Yanhuitlán, donde continuó la organización de sus tropas y la fabricación de armas. El 16 de agosto se dirigió a la Mixteca para tratar de recuperar Izúcar, pero el 21 de septiembre Morelos le ordenó auxiliar a Nicolás Bravo, sitiado en San Juan Coscomatepec. Matamoros no llegó a tiempo para evitar la derrota de Bravo. Matamoros se estableció después en Tehuizingo, pero acudió al llamado de Morelos para atacar Valladolid, y en diciembre se reunió con él y otros jefes insurgentes en Cutzamala. Pasaron después a Huetamo, Tacámbaro y Tiripetío. En Llano Grande, Matamoros fue encargado el 20 de diciembre de conseguir el carbón suficiente para pintar las caras y manos de las tropas para atacar Valladolid. ‹ 31 › El 23 de diciembre iniciaron el ataque, pero fueron derrotados por Ciriaco de Llano y Agustín de Iturbide. Los insurgentes se retiraron por Chupío y Puruarán, donde el 5 de enero de 1814, Llano e Iturbide los atacaron de nuevo y Matamoros, quien estaba al mando de las tropas insurgentes, fue hecho prisionero por el dragón José Eusebio Rodríguez. Se le condujo preso a Pátzcuaro, donde entró el 12 de enero, y 3 días después llegó a Valladolid. En esta ciudad se le instruyó causa, y el 21 de ese mes firmó su retractación. A pesar de la oferta hecha por Morelos el 24 de ese mes de entregar 200 prisioneros realistas a cambio de Matamoros, éste fue fusilado el 3 de febrero. En 1823 se le declaró Benemérito de la Patria, y sus restos descansan ahora en la columna de la Independencia7. Leona Vicario (1789-1842) Huérfana muy niña, quedó al cuidado de un tío, Agustín Pomposo Fernández de San Salvador, abogado en cuyo despacho trabajaba Andrés Quintana Roo. Al estallar la Guerra de Independencia, Leona Vicario se dedicó a informar a los insurgentes de todos los movimientos que podían interesarles y que ocurrían en la capital. También, con sus bienes, ayudaba a la causa libertaria. Intentó persuadir a los mejores armeros vizcaínos para que se unieran a los partidarios de la Independencia. Por ello, y al negarse a descubrir a sus cómplices, se le aprisionó en el convento de Belén de las Mochas. 7. http://www.bicentenario.gob.mx/index.php?option=com_content&view=article&id=69 ‹ 32 › Logró escapar ayudada por los coroneles Antonio Vázquez Aldarna y Luis Alconedo. Disfrazada, llegó hasta Oaxaca, donde se encontraba el caudillo José María Morelos. Acompañó al Ejército Insurgente, que poco después sufrió varias derrotas, por lo que pasó grandes penalidades. Sus bienes fueron confiscados. Como, además de sus esfuerzos personales, había contribuido a la lucha con más de ochenta mil pesos, se le otorgó, como recompensa, la hacienda de Ocotepec, en los llanos de Apam; el acto se decretó por el Congreso en 1822. En los mismos días de la lucha se casó con Andrés Quintana Roo. Murió en su ciudad natal8. Nicolás Bravo (1786-1854) Nació en Chilpancingo, en el actual estado de Guerrero. Después de sus primeros estudios se dedicó a la agricultura en la hacienda de Chichihualco, propiedad de su familia. Al iniciarse el movimiento insurgente mostró, al igual que sus familiares, simpatías por la emancipación política de México. Molestias de las autoridades virreinales. En mayo de 1811 se unió a las fuerzas de Hermenegildo Galeana, cuando éste, mandando la vanguardia de la fuerza de Morelos, fue a atacar a Chichihualco. Concurrió Bravo a las varias acciones dadas por Morelos en el sur, y en el sitio de Cuautla se destacó por su valor. Después fue nombrado comandante militar de la Provincia de Veracruz. 8. http://www.bicentenario.gob.mx/index.php?option=com_content&view=article&id=79:leona-vicario1789-1842&catid=84:biografias-independencia ‹ 33 › En la acción del Palmar derrotó al realista Juan Labaqui. En ese lugar recibió la noticia de la prisión y ajusticiamiento de su padre, don Leonardo. Dispuso que los 300 prisioneros del Palmar se presentaran ante sus tropas formadas. Les hizo conocer entonces el hecho, interrogándoles qué debía hacer con ellos. Rompió el silencio que allí reinaba con las palabras: “Quedáis en libertad.” El hecho de que no levantara tropas contra los insurgentes, como en otras haciendas, le ocasionó Retirado a su hacienda en 1816, fue aprehendido en 1817 y permaneció encarcelado con grilletes en los pies, hasta su liberación en octubre de 1820. Radicado en Cuernavaca, Bravo se unió al Plan de Iguala, y con una fuerte brigada se presentó en Puebla, sitiada por Iturbide, que le concedió el grado de coronel. Más tarde el Congreso Constituyente le eligió consejero de estado en la Segunda Regencia, de abril a mediados de mayo de 1822. En 1839 figuró como presidente del Consejo, y al separarse de la presidencia Santa Anna, entró a desempeñarla Bravo como interino desde el 10 de julio de 1839 al 19 del mismo mes y año. Electo diputado en 1841 por el Estado de México, Santa-Anna le nombró presidente sustituto por decreto del 10 de octubre de 1842. Prestó juramento ante el Consejo de Representantes de los Departamentos y tomó posesión de la presidencia en 26 del mismo mes. Gobernó hasta el 4 de mayo de 1843. Otra vez ocupó la presidencia de la República, en virtud de la licencia concedida al general Mariano Paredes para mandar al ejército, en decreto de 20 de junio de 1846. Bravo tomó posesión en 28 de julio de ese mismo año. La revolución proclamada en la Ciudadela en la madrugada del 4 del siguiente agosto, puso fin a su corta administración. En 1847 se le nombró comandante general de Puebla y después jefe de la línea del sur de la capital. Estuvo en la defensa de Chapultepec, donde el 13 de septiembre fue hecho prisionero. Las versiones alrededor de este episodio en la vida de Bravo fueron objeto de acerbos comentarios y lesionaron su reputación de militar, obligándole a desaparecer definitivamente de la escena nacional. Retirado en Chilpancingo, vino la revolución de Ayutla y, al parecer, invitado a participar en el movimiento, no aceptó; primero, por ser la revolución contraria a sus ideas; segundo por sus enfermedades. Al morir poco después, se dijo que tanto él como su esposa, muertos el mismo día y con intervalo de horas, habían sido envenenados. ‹ 34 › En la época se ligó ese rumor con el fusilamiento, en la Isla de Caballos, de un médico apellidado Avilés, considerado como el que proporcionó el veneno al matrimonio. Declarado Bravo desde 1823 Benemérito de la Patria, el gobierno de Guerrero le dedicó un monumento en la ciudad de Chilpancingo, su ciudad natal9. Andrés Quintana Roo (1757-1751) Originario de Mérida, Yucatán. Estudió en el Seminario Conciliar de dicha ciudad, y en 1808 pasó a la Universidad de México, donde cursó leyes. Casó con Doña Leona Vicario. Afiliado a la insurgencia, difundió la causa en el Semanario Patriótico Americano y en el Ilustrador Americano. Presidió la Asamblea Nacional Constituyente, que hizo la declaratoria de la Independencia en 1813. Cuando Iturbide ocupó el trono de México nombró a Quintana Roo subsecretario de relaciones [exteriores], cargo que ocupó de agosto de 1822 a febrero de 1823, pero como se mostrara en desacuerdo con los procedimientos del gobierno, fue destituido y procesado. A la caída del Imperio tuvo un lugar distinguido entre los diputados que formaron los siguientes Congresos. A causa del asesinato de Guerrero, Quintana Roo atacó al gobierno desde su periódico El Federalista, y orientó a la opinión pública de la época. En el primer periodo presidencial de Santa Anna, y siendo Valentín Gómez Farías vicepresidente encargado del Ejecutivo, desempeñó el Ministerio de Justicia, 9. http://www.bicentenario.gob.mx/index.php?option=com_content&view=article&id=61 ‹ 35 › de septiembre a octubre de 1833. Escribía entonces interesantes artículos políticos en El Correo de la Federación. Por su honradez y criterio recto e independiente ocupó, hasta su muerte, importantes puestos en el gobierno del país. Sus restos mortales descansan en la Rotonda de las Personas Ilustres. Además de sus artículos periodísticos y de sus discursos de prosa enérgica. Quintana Roo se dio a conocer como poeta en el Diario de México. Pertenece al primer grupo de románticos que Ignacio Manuel Altamirano clasificó como “poetas de la Independencia”. Es muy conocida su “Oda al dieciséis de septiembre”. Quintana Roo fue el primer presidente de la Academia de Letrán, fundada por Guillermo Prieto y los hermanos Lacunza en 183610. Ignacio López Rayón (1773-1832) Nació en Tlalpujahua, Michoacán. En 1786 ingresó al Colegio de San Nicolás, de Valladolid (Morelia), donde hizo estudios de bachiller. Pasó a la ciudad de México y en el Colegio de San Ildefonso hizo la carrera de abogado. Graduado en 1796. Más tarde regresó a su pueblo para dedicarse a la agricultura y la minería. Partidario de la Independencia, fue de los primeros en incorporarse a las fuerzas de Hidalgo, en Maravatío. Después de la batalla del Monte de las Cruces y de la marcha sobre Guadalajara, en los que acompañó a Hidalgo, propuso el establecimiento de una junta directora. Fue http://www.bicentenario.gob.mx/index.php?option=com_content&view=article&id=76 10. ‹ 36 › secretario de Hidalgo; estuvo en la batalla del Puente de Calderón y en la de Aculco. En Guadalajara, con el cargo de secretario de estado, luchó por reorganizar el gobierno y fue el promotor de la publicación de El Despertador Americano, órgano de la revolución de independencia. Estaba a favor de que se entablaran relaciones diplomáticas con Estados Unidos. En la derrota de Calderón salvó los caudales del ejército, que ascendían a 300 mil pesos. De acuerdo con Allende, lograron entrar victoriosamente a Zacatecas. Marchó con los caudillos derrotados. En Saltillo, en previsión de sucesos venideros, se le designó jefe para mandar al ejército y se le dieron instrucciones para continuar la guerra. Después de la aprehensión y muerte de los iniciadores, volvió a Michoacán. Se atrincheró en Zitácuaro y se defendió con fortuna. En agosto de 1811, en la propia Zitácuaro organizó la Junta Suprema Gubernativa, en la que figuró como presidente, con José María Liceaga y José Sixto Verduzco como vocales. Expidió leyes, proclamas y reglamentos, que se imprimían en una imprenta de tipos de madera, que luego cambió por otra más eficaz. El 1 de enero de 1812, un ejército mandado por Félix María Calleja y fuertemente pertrechado, se presentó frente a Zitácuaro; los insurgentes presentaron una gran resistencia pero tuvieron que abandonar la plaza. Después Rayón marchó sobre Toluca, Lerma, y estableció su cuartel en el Campo del Gallo, no lejos de Tlalpujahua. Formó parte del Congreso instalado por Morelos en Chilpancingo. En 1813 se fortificó en el cerro del Cóporo, convertido en poderosa fortaleza en unión de su hermano Ramón. Atacado por Agustín de Iturbide y por Llano, sostuvo un sitio de muchos meses. El 7 de enero de 1817, capituló con todos los honores. El no reconocer a la Junta de Jaujilla le trajo serias dificultades: fue perseguido y el propio Nicolás Bravo le entregó a los realistas. En la ciudad de México se le instruyó el proceso correspondiente y se le sentenció a muerte. Se aplazó la ejecución, pero quedó preso hasta 1820. Consumada la Independencia, se le nombró tesorero en San Luis Potosí. Alcanzó el grado de divisionario, fue comandante general de Jalisco y presidente del Tribunal Militar. Murió en la ciudad de México11. http://www.bicentenario.gob.mx/index.php?option=com_content&view=article&id=67:ignacio-rayon- 11. 1773-1832&catid=84:biografias-independencia ‹ 37 › Agustín de Iturbide (1783-1824) Militar realista y después emperador de México. Nacido en Valladolid (Morelia), sus padres fueron José Joaquín de Iturbide, español, y Josefa de Arámburu, de una familia michoacana. Estudió en el seminario de la misma ciudad donde nació y a los quince años se dedicó a las labores del campo. Rehusó el grado de general que le ofreció Hidalgo, según versiones del mismo Iturbide. Tomó parte en diversas batallas, desde la del Monte de las Cruces, al lado de las fuerzas realistas. Se distinguió por su valor y por la tenacidad con que persiguió a los partidarios de la insurgencia. Combatió contra Morelos y para 1820 había alcanzado el grado de coronel del ejército realista. Se encontraba en México, casi inactivo, cuando se restableció ese año la Constitución española, de corte liberal y se inició la conspiración de la Profesa, cuya finalidad era impedir el restablecimiento de dicha Constitución en México, para continuar con el régimen absolutista. Después de entrevistarse en Acatempan, ambos jefes se pusieron de acuerdo y el Plan de Iguala fue proclamado por Iturbide. La última fase de la campaña de la Independencia termina con la entrada a México de Iturbide al frente del Ejército Trigarante el 27 de septiembre de 1821. Consumada la Independencia, Agustín de Iturbide tomó a su cargo la dirección de los asuntos públicos, nombrando una Junta Gubernativa compuesta de 38 miembros y que excluyó a los veteranos de la insurgencia. Después fue nombrado presidente de la Regencia. ‹ 38 › Las dificultades comenzaron pronto con el Congreso. Iturbide lo disolvió; aprehendió y persiguió a muchos de sus miembros, pero no logró establecer la paz. Al realizarse su jura, el 24 de enero de 1823, ya había estallado la rebelión, que inició Antonio López de Santa Anna, con el Plan de Casa Mata; en él se pedía la reinstalación del Congreso, el reconocimiento de la soberanía de la nación y prohibía se atentase contra la persona del emperador. Los rebeldes comenzaron a ganar terreno y determinaron la abdicación de Iturbide, que se efectuó ante el Congreso, reinstalado, el 19 de marzo de 1823. Salió con su familia de Tacubaya, donde tenía su residencia. El 29 de marzo marchó a Veracruz y luego a Europa. El 4 de mayo salió de Londres para México, instado por algunos de sus partidarios. Desembarcó en Soto la Marina, Tamaulipas, el 14 de julio. Allí se le aprehendió; el Congreso local lo sentenció a muerte, y fue ejecutado en el pueblo de Padilla, del mismo Estado el 19 de julio de 1824. Su nombre permaneció proscrito y sus restos olvidados hasta 1833, en que siendo presidente Santa Anna, investido de facultades extraordinarias, mandó que los restos de Iturbide fueran conducidos a México y conservados en la urna destinada a los primeros héroes de la Independencia. El decreto quedó sin cumplir, hasta que en agosto de 1838, bajo el gobierno de Anastasio Bustamante, obtuvo del Congreso un nuevo decreto, confirmatorio del anterior. Los restos de Iturbide fueron trasladados a México y sepultados con pompa en un sepulcro que se erigió en la capilla de la catedral dedicada a San Felipe de Jesús. Las letras de oro con el nombre de Iturbide, que figuraban en uno de los muros del salón de sesiones de la Cámara de Diputados, fueron desprendidas por iniciativa aprobada el 5 de octubre de 1921, por una mayoría de 77 diputados, y cinco en contra12. http://www.bicentenario.gob.mx/index.php?option=com_content&view=article&id=66:agustin-de- 12. iturbide-1783-1824&catid=84:biografias-independencia ‹ 39 › Guadalupe Victoria (1786-1843) Primer presidente de la República. Nació en la Villa de Tamazula, en la provincia de Nueva Vizcaya, en el actual estado de Durango. Su nombre fue Miguel Fernández Félix, que él cambió por el de Guadalupe Victoria. Estudió en el Seminario de Durango y, en la ciudad de México, en 1811, ingresó en el Colegio de San Ildefonso. Dejó la ciudad para unirse a los insurgentes. Combatió como aliado de Morelos, y se distinguió en el asalto de Oaxaca, ocurrido el 25 de noviembre de 1812. Allí fue donde cambió de nombre. Concentró sus actividades en el camino de Veracruz y tuvo su centro de operaciones en Puente del Rey hasta 1815, cuando se le desalojó. Derrotado en Palmillas en 1817, se ocultó, pues nunca aceptó la amnistía. Reapareció con el Plan de Iguala. Después, al proclamarse la República, se unió a Santa Anna en Veracruz para derrocar el Imperio. Diputado por Durango, fue electo presidente de la República; fue el primero en ocupar ese cargo, del 10 de octubre de 1824 al 21 de marzo de 1829. Durante su gobierno se firmó un tratado con la Gran Bretaña, se rindió el castillo de San Juan de Ulúa, último reducto español; también se declaró abolida la esclavitud, se formó el Museo Nacional y se impulsó la educación. Decretó la expulsión de españoles y casi al final de su gestión ocurrió el saqueo del Parián, ocasionado por el Motín de la Acordada. Terminado su gobierno, se retiró a su hacienda “El Jobo”, en Veracruz. Trasladado al castillo de Perote, para que se le atendiera la epilepsia, murió allí, sepultándosele en la misma fortaleza. El Congreso lo declaró Benemérito de la Patria el 25 de agosto de 1843. Sus restos fueron trasladados a Puebla en 1863 por el general Alejandro García, y posteriormente se depositaron en la Columna de la Independencia, en la ciudad de México13. http://www.bicentenario.gob.mx/index.php?option=com_content&view=article&id=80:guadalupe- 13. victoria-1786-1843&catid=84:biografias-independencia ‹ 41 › •Fuentes• www.agn.gob.mx www.bicentenario.gob.mx IMÁGENES Catedral de Valladolid Imagen tomada del libro: Vicente Riva Palacio y otros. México a través de los siglos: historia general y completa del desenvolvimiento social, político, religioso, militar, artístico, científico y literario de México desde la antigüedad más remota hasta la época actual, tomo III, México, Ballesca y compañía, 1884-1889, p. 137. Miguel Hidalgo y Costilla Imagen tomada del: Diccionario Porrúa de Historia, Biografía y Geografía de México. Jose María Morelos y Pavón Imagen tomada del: Diccionario Porrúa de Historia, Biografía y Geografía de México. Ignacio Allende Salvador Pruneda, tinta sobre papel. Archivo Gráfico de El Nacional, Fondo Gráficos, 1968, INEHRM. ‹ 42 › Doña Josefa Ortiz de Domínguez Imagen tomada del libro: Vicente Riva Palacio y otros. México a través de los siglos: historia general y completa del desenvolvimiento social, político, religioso, militar, artístico, científico y literario de México desde la antigüedad más remota hasta la época actual, t. III, México, Ballesca y compañía, 1884-1889, p. 96. Nicolás Bravo Imagen tomada de la litografía de Thierry Fréres, Cité Bergere, a París. Don Andrés Quintana Roo Imagen tomada de: José Inés Tovilla, 1911, Memoria 2010. Ignacio López Rayón Imagen tomada del libro: Gustavo Casasola, Seis siglos de Historia Gráfica de México, 1325-1976, tomo II, México, Editorial Gustavo Casasola, 1978, p. 533. Don Agustín de Iturbide Anónimo, Agustín de Iturbide, litografía tomada de: La Ilustración Mexicana, 1851. Imagen tomada del libro: Nación de imágenes. La litografía mexicana del siglo XIX, INBA/ MUNAL/ Banamex/ ICA/ Elek/ Moreno Valle y Asociados, 1994, p. 218. Guadalupe Victoria Imagen tomada de la revista: Artes de México, número 175, “Gobernantes de México, 1325-1911”, México, 1960, p. 61. •CONSEJO GENERAL• M. en D. Jesús Castillo Sandoval Consejero Presidente Lic. J. Policarpo Montes de Oca Vázquez Mtro. Arturo Bolio Cerdán M. en D. Abel Aguilar Sánchez M. en D. Jesús G. Jardón Nava D. en A. P. José Martínez Vilchis Lic. Juan Carlos Villarreal Martínez Consejeros Electorales Ing. Francisco Javier López Corral Secretario Ejecutivo General Representantes de los Partidos Políticos PAN Lic. Armando Olán Niño PRI Lic. Eduardo Guadalupe Bernal Martínez PRD Lic. Marcos Álvarez Pérez PT Lic. Joel Cruz Canseco PVEM Lic. Rolando Elías Wismayer C Lic. Evanivaldo Mecalco González NA Lic. Benjamín Ramírez Retama •JUNTA GENERAL• Mtro. Jesús Castillo Sandoval Consejero Presidente Ing. Francisco Javier López Corral Secretario Ejecutivo General Director de Organización Lic. Jesús George Zamora Director de Capacitación Lic. Rafael Plutarco Garduño García Director de Partidos Políticos Dr. Sergio Anguiano Meléndez Director de Administración Lic. José Mondragón Pedrero Director del Servicio Electoral Profesional Lic. Humberto Infante Ojeda Directora Jurídico-Consultiva Lic. Alma Patricia Sam Carbajal Titular del Órgano Técnico de Fiscalización Lic. Hernán Mejía López Contralor General Mtro. Ruperto Retana Ramírez Jefe de la Unidad de Informática y Estadística Ing. Pablo Carmona Villena Titular del Centro de Formación y Documentación Electoral Dr. Ángel Gustavo López Montiel Jefe de la Unidad de Comunicación Social Mtro. Juan Carlos Muciño González Rafael Plutarco Garduño García Director de Capacitación Bernardo Hernández Jiménez Subdirector de Desarrollo de la Democracia, Difusión de la Cultura Política, Democrática y Educación Cívica Gabriel Ibarra Ríos Jefe del Departamento de Desarrollo de la Democracia Ángel Gustavo López Montiel Titular del Centro de Formación y Documentación Electoral Ciro García Marín Subdirector de Documentación y Promoción Editorial Departamento de Promoción Editorial Jorge Armando Becerril Sánchez Guadalupe Bernal Martínez Área de diseño gráfico y editorial Ana Llely Reyes Pérez Tania López Reyes Área editorial Comentarios a Los Sentimientos de la Nación y Biografías de Portagonistas de la Independencia, se terminó de imprimir en el mes de mayo de 2010. En el área de diseño gráfico, aplicación de imagen y servicios de impresión del Instituto Electoral del Estado de México. La edición estuvo a cargo del Departamento de Promoción Editorial del Centro de Formación y Documentación Electoral del Instituto Electoral del Estado de México. Esta edición consta de 100 ejemplares. Publicación de distribución gratuita