Siglo nuevo La familia de origen (en cuyo seno nacimos), el trabajo (donde se obtiene satisfacción e ingreso) y la vida social (para alcanzar recreación y diversión) son espacios privilegiados para confiar. Todos sin la presencia física de la pareja. Verdadera profilaxis para el encuentro que nos deja rebosantes por su calidad. Los celos en la vida de pareja son un evento significativo que requiere de atención en sus dos facetas fundamentales: una luminosa que promueve la integración, y otra oscura que suele devenir en desastre. Confianza es la palabra clave para beneficiar a todos. § Cada miembro de la pareja es responsable de su propia confianza. Nada más. No es posible confiar por el otro padres como esposos, el hijo puede asumir el hecho aprendido y suspender su reproducción. A veces por sí mismo, a veces con apoyo externo, incluso profesional. TRABAJO INDIVIDUAL Ejercitar la confianza es una ruta valiosa para dar sentido a la propia vida y al vínculo con los demás, en especial con 8 • Sn quienes ingresan de ordinaCada miembro de la parerio a nuestro espacio vital. La ja es responsable de su propráctica se consigue avanzan- pia confianza. Nada más. No do de lo sencillo y neutro -co- es posible confiar por el otro. mo expresar el gusto por un El simple hecho de intentarsabor de nieve-, a lo complejo lo inicia el desgaste físico y y profundo, que se explicita al psicológico en la consecución compartir lo que se siente por de una misión imposible: haalguien. Quien se mantiene en cer lo que sólo el otro puede lleforma ofrece al otro la oportu- var a cabo, confiar. La resulnidad de hacer lo mismo, pues tante es minar el santuario de en el testimonio de vida está el la intimidad y llenar la vida regalo. de incertidumbre. Correo-e: juanmanuel.torres@ lag.uia.mx Si los celos son señales de amor, es como la fiebre en el hombre enfermo, que el tenerla es señal de tener vida, pero vida enferma y mal dispuesta. Miguel de Cervantes Saavedra, literato español (1547–1616) Los celos cuando son furiosos, producen más crímenes que el interés y la ambición. Voltaire, filósofo francés (1694–1778)