II.- EL SIGNIFICADO DE LAS PALABRAS. LA SEMÁNTICA LÉXICA 1. LA SEMÁNTICA. CONCEPTOS GENERALES. Se puede definir la Semántica como la descripción del significado de las palabras, de la estructura que esos significados tienen y de las diferentes relaciones que mantienen unos con otros dentro del sistema de la lengua. 1.1. SIGNIFICADO Y REFERENCIA. No hay que confundir el significado de un signo con su referente (libro de primero). El referente es el objeto u objetos a los que el signo representa en un enunciado concreto; el significado, en cambio, es la representación mental del objeto, la imagen o concepto que tenemos en nuestra mente y que el signo evoca. El significado de una palabra pertenece al sistema de la lengua y es constante: cada signo tiene un significado que es único y que no cambia con los distintos usos que hagamos de él. En cambio, la referencia es una relación que se establece en el discurso, es decir, en el uso de la palabra en un enunciado determinado, y, por tanto, puede cambiar de uno a otro, o incluso dentro del mismo enunciado: “Tu caballo es más rápido que el otro caballo del establo.” Esta distinción entre significado y referencia es fundamental, porque permite entender que haya signos que carecen de referente real, como “unicornio”, o que sea habitual encontrarse en un enunciado con palabras de diferente significado pero que comparten referente (es decir, son correferentes): “A mi gato lo mató un coche cuando el pobre animal cruzaba la calzada”. Atendiendo a esto, podemos clasificar las palabras en función del tipo de referencia que establecen con la realidad: Palabras de Referencia Singular. Tienen como referente un ser único, individual: (la) Tierra, Madrid, Luis y todos los nombres propios. Palabras de Referencia Genérica, como los sustantivos comunes, por ejemplo, que designan a una clase (o género) de entidades. Usadas en un discurso, pueden referirse tanto a individuos concretos de esa clase (“Me he comprado un caballo”), como a la clase entera (“El caballo es un animal de tiro”). Palabras de Referencia Relativa, como los determinativos, pronombres y adverbios deícticos y anafóricos (este, su, ahora, etc.). Se caracterizan porque su referente es variable, depende de la situación comunicativa o del contexto lingüístico. Hay palabras sin referencia, porque no tienen capacidad para designar la realidad extralingüística: en, de, porque… carecen de referente en el discurso y significan relaciones gramaticales. 1 1.2. SIGNIFICADO LÉXICO Y SIGNIFICADO GRAMATICAL. Significado Léxico: Es el propio de los lexemas y, por lo tanto, de todas las palabras que contienen un lexema en su estructura. Tienen significado léxico los nombres, los adjetivos, los verbos y algunos adverbios (que tienen base léxica, como estupendamente). Significado Gramatical. Otros elementos lingüísticos significan sólo relaciones puramente estructurales (o gramaticales) entre las unidades léxicas dentro del discurso. Además de todos los morfemas gramaticales (derivativos y flexivos), tienen significado gramatical el artículo, los determinativos y pronombres, las preposiciones, las conjunciones y algunos adverbios. En general, se puede decir que el significado de todas las palabras que pertenecen a las llamadas categorías mayores (verbos, sustantivos y adjetivos) están formadas por la suma del significado léxico de su tema y del significado gramatical de las desinencias que incorpore. 1.3. POLISEMIA Y MONOSEMIA. Se denomina polisemia al hecho de que una misma palabra tenga varios significados distintos (manzana). A cada uno de estos significados distintos se les denomina acepción. El concepto de polisemia se opone al de monosemia, consistente en que una palabra posea un único significado (ferrovanadio). La polisemia constituye uno de los principales recursos de economía lingüística al permitir al hablante expresar gran cantidad de significados con un número limitado de palabras; además, ha de tenerse en cuanta que no se produce sólo en el nivel léxico: muchos morfemas gramaticales son también polisémicos (-in). Por otro lado, el mayor número de voces monosémicas son términos usados en alguna variedad específica de la lengua (hematíe). Es importante no confundir la polisemia con la homonimia: son homónimas dos palabras distintas cuya forma ha llegado a coincidir a causa de la evolución fonética o de la derivación. Las palabras homónimas constituyen entradas diferentes en el diccionario. Existen dos tipos de palabras homónimas: Homónimos Homófonos: Comparten el mismo sonido pero difieren en la ortografía (cabo y cavo). Homófonos Homógrafos: Se escriben y pronuncian de la misma manera (bote, de “pote”; bote, del inglés “bot”). 1.4. DENOTACIONES Y CONOTACIONES. El significado de una palabra está formado por un conjunto de rasgos semánticos elementales: los semas, que podemos definir como cada uno de los rasgos semánticos de significación de una palabra. Al conjunto de estos semas lo denominamos semema. El conjunto se sememas constituye la denotación de una palabra en una determinada acepción. La denotación es el significado primario y básico de una palabra, constituido por el conjunto de notas semánticas que define las propiedades de una clase de seres designada por la palabra. La denotación la constituyen, pues, todos los semas aplicables a todos los contextos. El significado denotativo tiene las siguientes características: 2 En esencia, es común a todos los hablantes de una lengua. Es un componente estable del significado de la palabra: no puede ser alterado a voluntad por un hablante. Es además constante: el significado denotativo de una palabra aparece siempre que se la utiliza para referirse a un miembro de la clase de seres que designa. Constituye una información objetiva sobre el referente de la palabra, pues en principio no implica ninguna valoración sobre él. Además, las palabras pueden adquirir rasgos de significado no denotativos. A estos valores que aparecen en el discurso relacionados a la denotación de un término se les denomina significados asociativos o connotaciones. Se trata de contenidos que el hablante sugiere o evoca intencionada o involuntariamente en la mente del oyente y que éste ha de comprender para que la comunicación tenga éxito y sea completa. Las connotaciones, en conclusión, constituyen el significado secundario de una palabra; son significados añadidos que aparecen con el uso de la palabra y están a asociados a su denotación. Existen diferentes tipos, establecidos en función de los distintos fenómenos de asociación de ideas que las han formado: Significados connotativos propiamente dichos: rasgos de significación sugeridos en virtud de cierta valoración social y cultural que se hace del referente. Generalmente, están relacionados con las imágenes arquetípicas que una cultura fabrica sobre las ideas o las cosas que sirven como referentes de las palabras. Hay connotaciones que afectan a toda la comunidad de hablantes (audaz y temerario); otras muy extendidas, pero no generales (toro como “nobleza” o “bravura”); otras que son válidas para un determinado grupo social y no para otros (rojo como “comunista”). Significados afectivos: son aquellas asociaciones de significado de carácter subjetivo que revelan emociones o sentimientos del hablante ligados a su experiencia. Significados Estilísticos: en muchas ocasiones el uso de una palabra u otra para designar un referente expresa contenidos que se asocian con el carácter del emisor o con las circunstancias en que se produce la comunicación (esposa, señora, mujer o parienta). 2. NATURALEZA Y ESTRUCTURA DEL SIGNIFICADO DENOTATIVO. Los semas (rasgos distintivos de significación de una palabra) tienen un carácter distintivo, es decir, sirven para diferenciar una palabra de otra que está semánticamente cercana a ella. Por su parte, los sememas permiten explicar tanto las semejanzas como las diferencias de contenido entre estas unidades léxicas: son semejantes porque comparten ciertos rasgos (semas comunes), pero se diferencian porque en cada uno existe un rasgo opuesto a los de las otras (semas distinguidores). Un campo semántico está formado por todos aquellos elementos que comparten un significado y por tanto pueden aparecer en el mismo lugar de la cadena hablada. (campo semántico de las relaciones familiares: padre, madre, hijo, tío, sobrina, abuelo, nieto…) Un campo léxico está formado por términos distintos que comparten un mismo concepto. (miedo, terror, horror, pavor) Un campo distribucional está compuesto por los distintos contextos en los que puede aparecer un término con significado distinto. (campo distribucional de mano: 3 echar una mano, dar la mano, pedir la mano, dar una mano de pintura, ganar por la mano, ser mano derecha…) Un campo derivativo (o familia léxica) lo forman los distintos términos que comparten un lexema (belleza, bello, embellecer). Entendemos como oposiciones proporcionales a los términos que para diferenciar el masculino del femenino tienen palabras diferentes. (caballo yegua; vaca-toro; hombremujer) 3. RELACIONES DE SIGNIFICADO Los campos semánticos no tienen todos la misma estructura, ni las relaciones entre los elementos que los componen son del mismo tipo. Se han descrito varias configuraciones o modelos posibles de organización léxica: 3.1. JERARQUIZACIÓN DE SIGNIFICADOS: Relaciones ramificantes: Hiperonimia: Es la relación de inclusión de un término en otro. Cuando el significado de un término incluye el de otro se dice que es su hiperónimo (animalperro). El hiperónimo, es pues, un término que contiene menos comprensión (menos rasgos concretos, más general) y mayor extensión (es aplicable a más seres). Hiponimia: El la relación inversa. Se da cuando el significado de un término está incluido en el de otro (mamífero-animal). Tiene mayor comprensión y menor extensión. Todos los términos que comparten hiponimia de un mismo hiperónimo son cohipónimos. Téngase en cuenta que un hipónimo puede ser al mismo tiempo hiperónimo de otros términos (animal- mamífero - perro). 3.2. CONFIGURACIONES LINEALES: Otros campos semánticos presentan estructuras no ramificantes, sino constituidas por una serie ordenada de elementos. Este orden puede ser de varios tipos (espacial, temporal, tamaño, etc.) de manera que la relación existente entre las unidades léxicas que lo forman es la de sucesión (infancia, adolescencia, juventud, ancianidad). Las configuraciones lineales pueden ser cíclicas (noviembre, diciembre, enero, febrero) o bien, los límites entre las unidades léxicas que la forman, dependiendo de cual sea el referente, pueden ser discretos (días de la semana) o borrosos (fresco- tibio). 3.3. OPOSICIONES LÉXICAS. Una oposición léxica es una relación de contraposición de significado que se produce entre dos palabras determinadas. Existen varios tipos: Complementariedad: las unidades léxicas complementarias someten a la realidad a la que designan a una participación completa y, desde el punto de vista lingüístico, perfecta, de manera que la negación de una de ellas implica necesariamente la afirmación de la otra (vivo/muerto). Antonimia: Es la relación que se da entre los miembros prototípicos o generales de una oposición escalar, en la que es posible diferenciar grados o niveles diferentes (caliente/frío). Su carácter escalar explica su principal característica: estos términos 4 pueden ser graduados mediante cuantificación (muy caliente/bastante frío), cosa que no permiten los complementarios. Inversión: Se dice de dos palabras que describen una misma realidad desde puntos de vista alternativos, de modo que un significado implica el otro (padre/hijo). También se incluyen las unidades léxicas que denotan la posición en los extremos de un eje (izquierda/derecha). 3.4. IDENTIDAD DE SIGNIFICADOS. La sinonimia se define como la identidad del significado de dos unidades lingüísticas diferentes. Existen diferentes grados: Sinonimia completa: palabras cuyos significados coincidan en todas sus acepciones y usos. Es muy poco frecuente (empezar y comenzar). Sinonimia conceptual o cognitiva: identidad semántica de dos palabras que, en determinada acepción, tienen la misma denotación y pueden referirse a las mismas entidades de la realidad. (mortífero y letal) Sinonimia connotativa: hay términos con diferente denotación y que, sin embargo, comparten los mismos valores connotativos (rojo y comunista, listo y zorro). Falsa sinonimia: no son sinónimos conceptuales algunas entidades léxicas cuyas denotaciones guardan cierta similitud- lo que permite que en ciertos contextos se puedan asociar- pero que no son en verdad idénticas (niebla y bruma; matar y asesinar; guapo y atractivo, listo e inteligente). Sinonimia referencial: los términos remiten al mismo referente pero no significan lo mismo. (sol = astro rey; villa = el guaje) Sinonimia contextual: términos que pueden conmutarse en un contexto dado sin alterar el significado de la secuencia. En otros casos no es posible. (Los garbanzos son pesados para la cena, este piano es pesado, Pepe es un pesado; listo y preparado) 5