el ozono estratosférico y la capa de ozono

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Meteorología Colombiana
N2
pp. 47–55
Octubre, 2000
Bogotá D.C.
ISSN-0124-6984
EL OZONO ESTRATOSFERICO Y LA CAPA DE OZONO
JORGE ANIBAL ZEA MAZO
Profesor Asociado, Departamento de Geociencias-Facultad de Ciencias-Universidad Nacional de Colombia
Investigador Científico IDEAM
GLORIA ESPERANZA LEON ARISTIZABAL
Profesora Asociada, Departamento de Geociencias-Facultad de Ciencias-Universidad Nacional de Colombia
Investigador Científico IDEAM
JESUS ANTONIO ESLAVA RAMIREZ
Profesor Titular, Departamento de Geociencias-Facultad de Ciencias-Universidad Nacional de Colombia
Zea J., G. León & J. Eslava. 2000: El ozono estratosférico y la capa de ozono. Meteorol. Colomb. 2:47-55. ISSN 01246984. Bogotá, D.C. – Colombia.
RESUMEN
Se presenta una sinopsis de las características principales del ozono estratosférico en la
atmósfera de la Tierra y se destaca su comportamiento en el trópico y el agujero del ozono de los
polos. También se describen algunos de los efectos que se han producido en la atmósfera como
consecuencia de las diferentes actividades que desarrolla el hombre en ella y se presentan
algunos datos del ozono estratosférico. Se resalta la existencia de un núcleo mínimo de ozono en
la zona tropical, el cual se extiende desde Sudamérica hasta Africa Central con valores inferiores
a 240 U.D. en el promedio anual, siendo menores a los que se registran en latitudes medias y
muy cercanos a los valores promedios del polo sur. La existencia de este núcleo de ozono
mínimo tropical se confirma con valores medidos por instrumentos en tierra o por observaciones
satelitales en diferentes sectores de Colombia, como en Medellín, Bogotá y Leticia.
ABSTRACT
We present an overview of the principal characteristics of the stratospheric ozone in the Earth’s
atmosphere, with particular emphasis on the tropics and the ozone hole over the poles. Some
effects produced in the atmosphere as a consequence of the different human activities will be
described, and some data on stratospheric ozone will be shown. We point out the existence of a
nucleus of least ozone in the tropics, stretching from South America to central Africa, with annual
mean values less than 240 DU, a value lower than in the middle latitudes and close to the mean
values at the South Pole. The existence of such a minimum is confirmed by mean values from
measurements made on satellites or with earthbound instruments, for different sectors in
Colombia, like Medellín, Bogotá and Leticia.
1. INTRODUCCION
El alcance de un conocimiento profundo de la atmósfera
resulta de vital importancia ya que en ella nos
encontramos inmersos y en ella desarrollamos nuestras
actividades; por lo tanto, dependemos de la calidad de
esa atmósfera y de los cambios que en ella se puedan
dar, no solo de origen natural sino también de aquellos
producidos por el hombre, en particular aquellos que
afectan la química atmosférica, la cual regula la radiación
que se recibe del Sol y la que emite la Tierra al espacio.
Este balance de radiación determina el tiempo y el clima,
o
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METEOROLOGIA COLOMBIANA N 2, OCTUBRE 2000
así como su relación con los demás componentes del
sistema climático.
tanto en lo referente a su composición como a su
estructura. Por ello y con el propósito de poder
conservarla en la mejor forma posible y de esa manera
poder disfrutar de una calidad de vida agradable, no solo
en el presente sino también en un futuro, resulta de
especial importancia como primera prioridad adquirir los
mejores conocimientos sobre los diversos aspectos
relacionados con la atmósfera en nuestro territorio.
Las actividades realizadas por el hombre se están
reflejando en cambios peligrosos para el equilibrio del
medio ambiente atmosférico y por lo tanto para la misma
humanidad, los animales, las plantas y , en general, para
los ecosistemas del planeta Tierra.
La población humana se ha venido incrementando cada
vez más y se ha hecho más dependiente de los recursos
naturales del planeta Tierra. Desde la era de la
industrialización ha ido creciendo en el hombre su
dependencia del petróleo y sus productos derivados,
para obtener un nivel de vida más alto y cómodo. El uso
de estos productos tiene un impacto en la cantidad y en
el tipo de gases que se emiten al ambiente. Los gases
como el dióxido de carbono, el metano, el óxido nitroso, y
otros químicos sintéticos como los CFC producen
contaminación y el conocido efecto de invernadero. El
ozono que se encuentra en superficie es uno de los
componentes principales de la contaminación y junto con
los llamados VOCs constituyen los compuestos orgánicos
volátiles.
Por su ubicación en la zona tropical, la atmósfera sobre el
territorio colombiano presenta algunas particularidades
que la distinguen de aquella situada sobre otras latitudes,
2. EL OZONO ESTRATOSFERICO Y LA CAPA
DE OZONO
El contenido de ozono estratosférico, es mayor en las
latitudes medias que en la zona tropical (Fig.1). Es
posible notar zonas con alto contenido de ozono sobre
Norteamérica y sobre Asia, en el hemisferio norte y sobre
el sur del Océano Indico y Sudeste del Océano Pacífico,
en el hemisferio sur, con valores superiores a 300 U.D.
También se destacan dos zonas con menor contenido de
ozono: una ubicada sobre la Antártida y otra en la zona
tropical sobre el norte de Sudamérica, el Atlántico tropical
y Africa central, donde se registran valores por debajo de
280 U.D. Este último núcleo de valores relativamente
bajos de ozono total (240 U.D.) alcanza a cubrir la mayor
parte del territorio colombiano, excepto la Región Caribe.
Figura 1. Distribución media del ozono total, en unidades Dobson (o miliatmósferas) contenido en una columna de
2
aire de 1 cm de sección que va desde la superficie de la Tierra hasta el tope de la atmósfera. (Fuente: Organización
Meteorológica Mundial)
ZEA, LEON & ESLAVA: EL OZONO ESTRATOSFERICO Y LA CAPA DE OZONO
En la Fig.2, se presentan algunos valores diarios de
ozono durante los últimos días de diciembre de 1997 y
primeros de enero de 1998, para Bogotá y Medellín, a
partir de observaciones del satélite EARTH PROBE.
Como se puede apreciar los valores de ozono son
relativamente pequeños, en armonía con la distribución
49
espacial de este gas. Es de anotar que los valores para el
núcleo mínimo de ozono tropical son bastante bajos
comparados con las medidas medias anuales para otras
regiones del mundo, donde los valores pueden llegar a
ser superiores a 360 U.D.
Bogotá
Medellín
Figura 2. Cantidad de ozono total sobre Bogotá y Medellín, obtenida de los datos de satélite Earth Probe, del 22 de
diciembre de 1997 al 21 de enero de 1998.
La interacción de la radiación ultravioleta del espectro
solar con el oxígeno a la altura de la estratósfera produce
continuamente ozono, el cual a su vez se descompone
por colisión con el oxígeno atómico y por interacción con
nitrógeno, hidrógeno, clorinos y brominos. Tales
componentes están presentes en la atmósfera en forma
natural desde tiempos remotos. Actualmente se está
incrementando el proceso de destrucción del ozono con
las emisiones de una cantidad adicional de clorinos y
brominos producidos por la actividad humana.
El ozono es un gas muy raro en la atmósfera, ya que
existe una relación de 3 moléculas de ozono por cada 10
millones de moléculas de aire. Este gas se mide en
unidades Dobson. Mil unidades Dobson equivalen a una
columna uniforme de ozono de un centímetro de espesor
en condiciones normales de presión (1atm o nivel del
mar) y temperatura (273ºK o 0ºC).
En la Fig.3 se muestra la tendencia del ozono durante los
últimos años en la estación Halley Bay, en la Antártida;
como se puede apreciar el proceso de destrucción del
ozono es muy marcado, a mediados del siglo se
registraban valores cercanos a 500 U.D., mientras que en
la década de los noventa se aproximaron a 150 U.D.
Durante los últimos años se ha producido una zona con
un reducido contenido de este gas (valores inferiores a
200 U.D.), a la cual se le ha denominado el agujero de
ozono y se presenta temporalmente entre febrero-abril y
septiembre-noviembre de cada año, en los polos Norte y
Sur,
respectivamente,
siendo
particularmente
extraordinario el de la Antártida.
o
50
METEOROLOGIA COLOMBIANA N 2, OCTUBRE 2000
Figura 3. Variación interanual del ozono, en unidades
Dobson (o miliatmósferas) contenido en una columna
2
de aire de 1 cm de sección que va desde la
superficie de la Tierra hasta el tope de la atmósfera),
medidos en la estación Halley Bay, Antártida,.
(Fuente: University of Cambrigde, U.K.)
Figura 4. Desviación del ozono estacional, promedio
sobre la Antártida, para las estaciones de verano y de
primavera. (Fuente: Organización Meteorológica
Mundial).
En la Fig.4, se muestra el rápido descenso en la cantidad
de ozono durante la estación de primavera y mucho
menos acentuado durante el verano sobre la Antártida.
En las Figs.5-6 se puede observar la declinación de la
cantidad mínima de ozono y el aumento del tamaño del
agujero de ozono.
Con base en la información disponible sobre el contenido
de ozono para la zona tropical, donde se ubica Colombia,
se puede inferir que sus variaciones temporales han sido
relativamente pequeñas, lo que indica que es bajo el
ritmo de deterioro de la capa de ozono sobre esta zona.
Figura 5. Cantidad promedia y mínima de ozono unidades Dobson (o miliatmósferas), sobre la Antártida para el área
ubicada entre las latitudes 80ºS y 90ºS, durante la primavera (1 de septiembre a 30 de noviembre). (Fuente:
NASA/GSFC).
ZEA, LEON & ESLAVA: EL OZONO ESTRATOSFERICO Y LA CAPA DE OZONO
51
Las observaciones atmosféricas, las investigaciones
teóricas y de laboratorio y estudios de modelamiento han
suministrado un profundo entendimiento de los cambios
químicos de origen natural y antropogénico en la
atmósfera y su relación con el deterioro de la capa de
ozono y los posibles efectos del balance radiativo del
sistema climático. Estos estudios indican que productos
hechos por el hombre como los CFCs y halones son los
responsables por la destrucción del ozono Antártico.
Las principales conclusiones se resumen en:
Figura 6. Tamaño del agujero de ozono durante la
2
primavera, en millones de km . (Fuente: NASA/GSFC).
En las Figs.7-8 se presenta la distribución del ozono
durante el mes de marzo para el hemisferio norte y
octubre para el hemisferio sur, donde se puede observar
el agujero de ozono, especialmente sobre la Antártida. La
regeneración del ozono es muy importante, sin la cual el
Agujero Artico y Antártico no sería un fenómeno cíclico.
Gracias a la formación de ozono, los niveles se
normalizan entre verano y otoño.
El informe de la tercera reunión de Directores de
Investigación del Ozono de las Partes del convenio de
Viena para la protección de la capa de ozono, realizada
el 19 de marzo de 1996, concluye que:
El deterioro del ozono total, el cual inicio en la década de
los 70, continua. Estadísticamente es significativo para
todos los años, excepto para el cinturón tropical sobre los
20°N-20°S. Con un buen control de calidad de los datos
de mas de 40 estaciones con series largas y otras 100
estaciones suplementarias, además de la información de
satélites durante los últimos 20 años muestran que el
ozono se ha debilitado sobre las latitudes medias y
polares alrededor del 10% con respecto a los niveles de
1950 y 1960. Considerando la variabilidad natural (ciclos
anual y solar y la Oscilación Cuasibienal) el deterioro en
los dos hemisferios es especialmente fuerte durante el
invierno-primavera (> 6-7 % por década) y durante
verano y otoño es aproximadamente la mitad. Estudios
detallados muestran un incremento, estadísticamente
significativo, en tasas de tendencia negativa del ozono
cercanas a 1.5-2.0% durante 1981-1991, comparadas
con 1970-1980. La pérdida de ozono no es simétrica
latitudinal y longitudinalmente y con el correr del tiempo
puede tener consecuencias importantes en la circulación
atmosférica.
Figura 7. Distribución del ozono total en el hemisferio norte para el mes de marzo. (Fuente: NASA)
o
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METEOROLOGIA COLOMBIANA N 2, OCTUBRE 2000
ESTA FIGURA NO ESTA DISPONIBLE EN DIGITAL
Figura 8. Distribución del ozono total en el hemisferio sur para el mes de octubre. Se ve claramente el área del
agujero de ozono que cubre una zona considerable sobre la Antártida (Fuente: NASA)
La principal pérdida ocurre en la baja estratosfera,
especialmente entre noviembre-mayo, sobre las latitudes
medias, donde el deterioro del ozono ha excedido el 20%
en las dos ultimas décadas. Las estaciones de sondeo de
Europa y Japón muestran incremento del ozono
troposférico, particularmente fuerte entre las décadas del
60 y 80.
Hay fuerte evidencia de concentraciones de ozono en la
capa limite sobre regiones populosas del hemisferio norte
y a aumentado en un 50% en los últimos 30 años, por
producción fotoquímica de precursores de origen
antopogénico (CO, NOx, hidrocarburos) (WMO, 1994).
Este ozono exportado de Norte América es una fuente
significativa en la región del Atlántico Norte durante el
verano. También se ha mostrado que la combustión de
biomasa es una fuente significativa de ozono (y monóxido
de carbono) en los trópicos durante la estación seca. Un
incremento en la radiación UV-B por el deterioro del
ozono estratosférico es esperado y además puede alterar
la concentración de algunos constituyentes troposféricos
químicos y climáticos importantes, tales como OH, CO y
CH4. Muchos de los procesos que afectan el balance del
ozono troposférico no esta adecuadamente representado
o verificado en los modelos y la precisión de sus
proyecciones es limitada.
Una evaluación precisa del efecto de los cambios de
ozono es limitada por las lagunas de información
detallada sobre la variación vertical de la distribución del
ozono con la latitud y longitud. Sin embargo, recientes
cálculos (WMO, 1994) concluyen que el deterioro del
ozono estratosférico, en las ultimas décadas, es el
resultado de un forzamiento radiativo negativo (un efecto
de enfriamiento en el clima) que tiene un factor de
compensación cerca de 15-20% por el forzamiento
positivo en los gases de efecto invernadero. El
incremento del ozono desde la época pre-industrial ha
fortalecido en un 20% el forzamiento total por gases de
efecto invernadero. El incremento de ozono troposférico
entre 1970 y 1980 ha causado un forzamiento positivo
igual al forzamiento debido a los cambios de los gases de
efecto invernadero durante el mismo periodo. Tales
cambios pueden tener un impacto en el balance radiativo
del sistema de la atmósfera de la Tierra y a la estructura
térmica de la atmósfera y además cambios impredecibles
en los patrones de la circulación.
El drástico deterioro del ozono total sobre la región
Antártica aparece durante la primavera austral desde
principios de 1980, cuando la cantidad de ozono
disminuyo a menos de 200 m atm cm características
conocidas como el agujero de ozono. Los valores de
ozono en agosto de 1995 fueron, generalmente, 25% a
30% por debajo de los promedios del pre-agujero de
ozono. La capa de ozono sobre la región Antártica
durante la primavera austral de 1995 fue masivamente
destruida, especialmente durante la segunda mitad de
septiembre y octubre, cuando las deficiencias fueron
cerca de 50% del promedio del pre-agujero de ozono
1957-1979 y unos pocos días fue del 70%. Iniciando a
finales de septiembre y por un periodo de seis semanas
consecutivas los ozonosondas de Marambio, Neumayer y
Syowa que indicaron una casi completa destrucción del
ozono para altitudes entre 14 y 20 kilómetros. Durante
este periodo, la extensión del agujero de ozono (área
cubierta con menos de 220-200 m atm cm de ozono total)
excedió 20 millones de km2 (cerca de dos veces el área
ZEA, LEON & ESLAVA: EL OZONO ESTRATOSFERICO Y LA CAPA DE OZONO
de Europa) y duró 40 días. En 1991 hubo 32 días con
agujero de ozono; en 1992, 49 días; en 1993, 63 días; en
1994, 55 días y en 1995, 71 días.
En el hemisferio norte, en latitudes medias y polares
durante los tres primeros meses de las estaciones de
invierno y primavera, diciembre-enero-febrero de 1996 la
cantidad promedio de ozono fue cerca del 5 a 10% por
debajo del promedio (1957-1979). Esto corresponde al
debilitamiento del nivel de ozono esperado debido a los
CFCs de acuerdo con la tendencia lineal extendida desde
principios de 1970. Sin embargo, durante muchos días en
enero, mediados de febrero y marzo, sobre la región
entre Groenlandia-Escandinavia y el oeste de Rusia
Artica hubo deficiencia de ozono entre 15-20%. Los
valores de ozone por debajo de 250 m atm cm fueron
registrados por muchos días. En contraste con el
Antártico, los valores bajos extremos de ozono en el
Artico ocurren durante algunas semanas pero no meses.
El vórtice estratosférico polar con su extremada baja fría
estratosférica dominó esta región y las bajas
temperaturas facilitaron los procesos de destrucción del
ozono en presencia del CLO. Deficiencias en los niveles
del ozono, del orden de 20 a 35% fueron observadas en
1995 durante invierno-primavera, especialmente sobre
Siberia, como también en 1992 y 1993 durante inviernoprimavera sobre Norte América, Europa y Siberia.
Durante las estaciones de invierno-primavera, cuando los
vientos estratosféricos ecuatoriales (QBO) se encuentran
en la fase oeste, las deficiencias del ozono son mayores.
Fourtuin (1996), determino a través de observaciones de
ozonosondas, que en las latitudes bajas y subtropicales
del hemisferio norte, la estacionalidad en la distribución
media del ozono llegó a ser menos pronunciada cuando
la tropopausa y la altitud de las concentraciones máximas
de ozono se desplazan uniformemente hacia arriba. La
varianza tiene un máximo pronunciado a finales de
invierno, el cual parece estar localizado encima y debajo
de la tropopausa. Cerca del ecuador, variaciones
estacionales fuertes son discernibles en la altura de la
tropopausa cuando las concentraciones estratosféricas
máximas medias parecen coincidir con el periodo máximo
de insolación solar.
El informe final del IPCC de 1995 concluye que mientras
el aumento del ozono troposférico, desde la era preindustrial ha conducido a un forzamiento positivo del
balance de energía (tendencia de calentamiento) cerca
2
de 0.4 Wm , la disminución del ozono estratosférico ha
dado lugar a un forzamiento negativo de cerca de 0.1
2
Wm . Un gran número de estudios recientes del
forzamiento radiativo del ozono (Hansen et al., 1997;
Forster et al., 1997; Portmann et al. 1997) han
resaltado
su
complejidad,
particularmente
su
dependencia con la altitud, la estación y la latitud donde
ocurren los cambios en el ozono.
Largos registros con una buena cobertura geográfica del
comportamiento del ozono son necesarios para estimar el
efecto en la tendencia del forzamiento radiativo. La
tendencia de la distribución vertical del ozono es
importante en los cálculos del forzamiento radiativo.
Actualmente, las tendencias entre 15 y 20 km de altitud
53
no son muy confiables a causa de que son derivadas de
conjunto de datos muy pobres. Hay cuatro conjuntos
principales de datos que pueden suministrar análisis de
tendencia y provienen de medidas satelitales SAGE y
SBUV, ozonosondas y la técnica Umkehr usando
instrumentos Dobson en tierra. Unicamente de estos
datos, los ozonosondas y los SAGE tienen suficiente
resolución vertical en la baja estratosfera. Información
regular de ozonosondas, con registros de 30 años esta
disponible solamente para algunas pocas estaciones.
Para una cobertura geográfica mejor, el SAGE suministra
información para 18 años y el SAGEII para 13 años. Por
ello, es importante que los programas de ozono
realizados por muchos países sean complementarios
para asegurar la calidad y resolución de los datos. Por tal
razón, cualquier programa de medida de ozono deberá
ser internacionalmente acordada para que sea además
útil a la comunidad mundial.
3. LA RADIACION ULTRAVIOLETA
El sol emite una gran cantidad de energía, de la cual sólo
un 2% corresponde a la radiación ultravioleta (UV). Esta
radiación ultravioleta (UV) es una forma de energía
radiante invisible, usualmente clasificada en tres
categorías de radiación, de acuerdo con la longitud de
onda: UV-A entre 320 y 400 nm (nanómetro es una
millonésima parte de un milímetro), UV-B entre 280 y 320
nm y UV-C entre 200 y 280 nm. Mientras más corta sea
la longitud de onda de UV, biológicamente es más
dañina.
La radiación UV-A es la forma menos dañina de rayos
ultravioleta y es la que llega a la Tierra en mayores
cantidades, causa envejecimiento de la piel, arrugas y
pueden incluso dañar pinturas y plásticos que se
encuentren a la intemperie. La radiación UV-B es
potencialmente muy dañina, reduce el crecimiento de
plantas, puede causar daños a la salud tales como
cataratas en los ojos, cáncer de piel y reducción de la
eficiencia del sistema inmunológico y daños a otras
formas de vida, los cuales se han visto incrementado en
los últimos años; la mayoría de esta radiación es
absorbida por la capa de ozono estratosférico. Los rayos
UV-C son la forma más dañina de toda la gama de rayos
ultravioleta porque es muy energética, pero esta
radiación UV-C es absorbida por el oxígeno y el ozono en
la estratósfera y nunca llega a la superficie terrestre.
La cantidad de radiación UV-B que llega a la superficie
de un lugar, está inversamente relacionada con el ozono
total: a menor cantidad de ozono mayor radiación UV-B
ingresa a la superficie. Por ello, las mayores cantidades
de radiación UV-B se reciben en aquellas regiones donde
su contenido de ozono es menor tal como ocurre en la
Antártida en las áreas que están bajo la influencia del
agujero de ozono.
La cantidad de radiación UV que llega a la superficie de
la tierra en un lugar determinado depende de la posición
del sol, la cantidad de ozono, las condiciones
meteorológicas y la contaminación en el lugar.
o
54
METEOROLOGIA COLOMBIANA N 2, OCTUBRE 2000
La radiación ultravioleta varía de acuerdo con la
ubicación geográfica; sobre la zona ecuatorial los rayos
solares caen más directamente que en las latitudes
medias y la radiación solar resulta ser más intensa en
esa área y, por la tanto, también es mayor la radiación
UV en las latitudes cercanas al ecuador tal como el caso
de Colombia.
La radiación ultravioleta varía diariamente de acuerdo
con el ángulo que forman los rayos solares con la
superficie de la Tierra; cuando el sol se encuentra sobre
el horizonte, los rayos viajan una mayor distancia y
pierden más intensidad y al ser absorbidos por agua y
otros componentes atmosféricos en mayor proporción
que cuando el sol alcanza mayor altura sobre el suelo y
de esta manera es menor la radiación ultravioleta que
recibimos. La mayor cantidad de radiación nos llega
durante el mediodía cuando el sol está en su punto de
máxima altura.
La radiación ultravioleta también depende de algunas
condiciones fisiográficas y del estado del tiempo. La
altitud determina la cantidad de radiación UV que se
recibe, debido a que en zonas de alta montaña el aire es
más limpio y más delgada la capa atmosférica que deben
recorrer los rayos solares, por ello llega más UV, de
manera que a mayor altitud mayor radiación UV. Las
nubes pueden tener un impacto importante en la cantidad
de UV que recibe la superficie terrestre, generalmente las
nubes densas bloquean más UV que una nube delgada.
Las condiciones de lluvia reducen la cantidad de UV. La
contaminación trabaja en forma similar que las nubes, de
tal forma que la contaminación urbana reduce la cantidad
de radiación UV que llega a la superficie de la tierra.
La radiación UV reflejada puede producir los mismos
efectos que la radiación UV que llega a la superficie de la
Tierra. La nieve es la superficie que más refleja,
alcanzando hasta un 85%, mientras que la arena seca y
el concreto reflejan hasta un 12% y el agua apenas un
5%.
Las mayores disminuciones en la cantidad de ozono que
se han observado sobre el continente Antártico,
especialmente en septiembre y octubre, han servido
como evidencia de la relación entre radiación UV y los
niveles de ozono. Además durante los últimos años se
han realizado mediciones simultáneas de UV y ozono, lo
que ha demostrado fehacientemente tal relación.
Mediciones de la radiación UV-B realizadas en territorio
colombiano durante 1995 corroboran la existencia del
núcleo de mínimo contenido de ozono del norte de
Sudamérica y, a la vez, muestran que en gran parte del
territorio nacional se observan niveles relativamente altos
de la misma. En la Tabla 1 se presentan los resultados
de las mediciones preliminares de este tipo de radiación
en el país.
Tabla 1 Niveles de radiación UV-B y de UV-A (en
µW/cm2) en diferentes sitios del territorio
colombiano. (Fuente: IDEAM)
LUGAR
Leticia
Gaviotas
Bogotá
Riohacha
UV-B
(306nm)
14.1
11.5
15.6
10.2
UV-A
(368nm)
92.7
74.4
94.7
70.6
Fecha de
observación
28/Sep/1995
15/Dic/1995
27/Nov/1995
26/Jul/1995
Es conveniente destacar que los valores obtenidos de
mediciones para Bogotá y Leticia son del orden de los
registrados en algunas áreas circumpolares de la
Antártida, es decir son relativamente altos y concuerdan
con los valores de ozono obtenidos a través de las
mediciones satelitales y los análisis mundiales. Por lo
tanto se confirma la existencia de un núcleo de ozono
mínimo o radiación ultravioleta alto sobre la región
tropical y que cubre parte de Colombia.
CONCLUSIONES
Estudios de varios autores indican la existencia de un
núcleo mínimo de ozono en la zona tropical, que se
extiende desde Sudamérica hasta Africa Central con
valores inferiores a 240 U.D. en el promedio anual. Se
identifica como un núcleo mínimo al ser comparado con
valores de hasta de 360 U.D. que se registran en
distintos sectores de las latitudes medias y a los valores
promedios de del polo sur (inferiores a 280 U.D.). El
núcleo mínimo de ozono tropical se confirma con valores
medidos por instrumentos en tierra o por observaciones
satelitales en diferentes sectores de Colombia, como en
Medellín, Bogotá y Leticia.
El agujero de ozono es definido por valores inferiores a
200 U.D., es de carácter estacional y se confina a la
época de invierno-primavera en las zonas polares, lo
cual sirve de referencia para establecer una
categorización de la capa de ozono en las zonas
tropicales.
Las observaciones atmosféricas, las investigaciones y los
estudios han suministrado un profundo entendimiento de
los cambios químicos de origen natural y antropogénico
en la atmósfera y su relación con el deterioro de la capa
de ozono en los polos y sobre los posibles efectos del
balance radiativo del sistema climático, sin embargo, para
el trópico son muy pocos los trabajos efectuados y en su
contexto no se encuentra ninguna relevancia a los
valores relativamente bajos de ozono en el área tropical
comprendida entre Sur América y Africa Central.
Una evaluación precisa del comportamiento espacial y
temporal del ozono en Colombia es necesaria para
identificar la variabilidad que puede presentar, como
también para establecer su relación con la altitud y la
latitud, con la estructura térmica de la atmósfera y los
patrones de la circulación, considerando la variabilidad
natural, como los ciclos anual, solar y de la Oscilación
Cuasibienal.
Reconocimientos
Trabajo realizado dentro del marco del Grupo de
ZEA, LEON & ESLAVA: EL OZONO ESTRATOSFERICO Y LA CAPA DE OZONO
Investigaciones en Meteorología - U.N., que cuenta con
el apoyo financiero de COLCIENCIAS y el BID, contrato
COLCIENCIAS-U.N. No.562/98. Forma parte de los
resultados del Proyecto de Investigación apoyado por
COLCIENCIAS y el BID “Proyecciones climáticas e
impactos socioeconómicos del cambio climático en
Colombia", contrato COLCIENCIAS-U.N. No.321-98
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios
Ambientales-IDEAM, facilitó a los autores las condiciones
para la realización de este trabajo dentro de sus líneas de
investigación.
55
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
Hansen, J., M. Sato & R. Ruedy. 1997: Radiative forcing
and climate response, J. Geophys. Res., 102:6831-6864.
Forster, P., F. Freckleton & K. Shine. 1997: On aspects of
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Portmann, R., S. Solomon, J. Fishman, J. Olson, J.
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