El fútbol según Johan Cruyff This is some text prior to the author information. You can change this text from the admin section of WP-Gravatar To change this standard text, you have to enter some information about your self in the Dashboard -> Users -> Your Profile box. Mucho se habla de que el Barça es lo que es hoy en día gracias a Johan Cruyff, que llegó al club a ejercer de entrenador y lo revolucionó de arriba abajo. Revolucionó el club, revolucionó la cantera y revolucionó el fútbol por completo. Más de 20 años después todo aquello se conoce como “filosofía Cruyff”, pero si uno pregunta en qué se basaba el fútbol de Johan Cruyff y, por ende, el del FC Barcelona, sólo recibe vagos comentarios. Veamos pues a partir de frases que “El Flaco” acuñó o reutilizó cuál era la idea del fútbol de Johan Cruyff. Si tú tienes el balón, el rival no lo tiene La frase principal que resume el fútbol según Cruyff. Tan simple como se ve a simple vista, va más allá de lo que parece: aquellos que hablan de que la mejor defensa es un buen ataque están equivocados. Y los que hablan de que hay recibir un gol menos que el contrario también lo están. Cruyff dice que si tienes el balón, como sólo hay uno, no recibirás ocasiones en contra ni goles en contra sino que los anotarás tú. Jugadores técnicos, capaces de jugar en espacios muy pequeños. La mejor defensa es tener el balón, y el mejor ataque es tener el balón. Y para ello Johan utilizó el sistema que mejor le garantiza la posesión del balón: el 3-43. Arriesgadísimo para la época y algo que pocos han repetido y ya hace 20 años. 3-4-3 porque fortaleces la delantera y el centro del campo, y sobretodo porque cada jugador tiene como mínimo dos salidas sencillas cerca. Lo mismo ocurre con el 4-3-3, que es lo que usa Guardiola hoy en día (el fútbol es hoy más defensivo que hace 20 años). El sistema se basa en que todos los jugadores forman un triángulo con otros dos, estén en la posición que estén y siempre un triángulo, de manera que en caso de sentirse presionado a la hora de sacar un balón, el futbolista lo tendrá más fácil para retenerlo. Un sistema simétrico vertical y horizontalmente en el que hay dos piezas claves: el 4 o lo que hoy llamaríamos pivote, y el 10 o lo que llamaríamos mediapunta. De ahí que la capacidad de mantener la posición sea tan importante en el esquema Barça: un jugador desorientado romperá el triángulo y complicará la vida de sus compañeros más cercanos y de todo el equipo. Salid y disfrutad – Prefiero ganar 5-4 que 1-0 Cuenta la leyenda que la primera frase la dijo Johan a sus jugadores antes de salir al campo en la histórica final de Wembley de 1992. Para Cruyff el fútbol es importante, es casi una religión, pero al final acaba siendo un juego y un espectáculo. El jugador tiene que evitar sentirse presionado por las circunstancias porque entonces no es capaz de mover el balón con claridad. Y se debe a sus aficionados, que han ido a ver el partido a disfrutar y a pasar la tarde o noche o lo que toque. Así no tiene que estar pendiente de lo que puede pasar si gana o pierde sino simplemente de disfrutar del deporte. De ahí la segunda frase: puestos a ganar por un gol de diferencia prefiero meter 5 y encajar 4 porque eso garantizará más espectáculo al aficionado. Y al revés lo mismo: Cruyff prefiere que su equipo pierda 3-6 que 0-3. El gol es la salsa del fútbol y Johan Cruyff quiere que la salsa desborde y caiga del plato si es posible. Ganar es importante, sí, pero más importante es jugar bien, puesto que jugando bien se gana casi siempre y jugando mal se gana a veces. El extremo izquierdo no puede dormirse cuando el entrenador habla sobre el lateral derecho O lo que es lo mismo, el destierro de los especialistas. Cruyff quiere que cualquier jugador pueda colaborar en cualquier parte del campo. Si el lateral ha perdido su posición, el extremo debe ocuparlo y por tanto debe conocer los movimientos y tácticas del equipo. Cada jugador intercambiará, especialmente en ataque, su posición con algún otro en algún momento del partido y tiene que saber qué debe hacer. De esta manera, el rival también tiene más difícil el marcaje al hombre. Y por lo tanto, todos los jugadores realizan las tareas de todos. El delantero centro, que naturalmente se queda adelantado y sin correr mucho, debe ser el primer defensa y presionar a la defensa rival, pues si ésta pierde un balón en fase de creación habrá peligro en un alto porcentaje de ocasiones. De ahí que en un principio el Dream Team jugara sin delantero centro nato: Cruyff prefería a Laudrup, que era capaz de sacrificarse en la presión, antes que un ariete de los de toda la vida que no le garantizaba esfuerzo. Mis delanteros sólo deben correr 15 metros, a no ser que sean estúpidos o estén durmiendo Muy parecida a la frase de su por aquel entonces estrecho colaborador Charly Rexach que decía aquello de “correr es de cobardes”. En el fútbol de Cruyff el que corre es el balón, no el jugador. Lo importante es el ritmo que adquiera la pelota. Para que el balón corriera, el equipo tenía que estrecharse y jugar en un pequeño espacio de terreno, con lo que no fallar un pase era una tarea más complicada que en cualquier otro equipo de fútbol, de ahí que tantos jugadores de nivel hayan fracasado en el Barça: Hleb, Witschge, Ibrahimovic… Al final del partido, el equipo rival había corrido y por tanto se había cansado más que el Barcelona. De ahí que el Barça no necesite jugadores con un físico descomunal, más que, quizá, en el centro del campo, para bajar los balones que saca el portero rival. Si tocas una vez, juegas muy bien. Si tocas dos, bien. Si tocas tres, mal El balón corre más que el jugador y por tanto el ritmo, que es tan importante, será más rápido si se toca menos veces. La conducción del balón está penada en el fútbol del Barça. Básico en el equipo de Cruyff era José Mari Bakero, un jugador que realmente no era una excelencia técnica como podía ser Michael Laudrup pero que jugaba continuamente a un solo toque. Lo más parecido en el Barça de hoy en día es Sergio Busquets. Para facilitar la tarea introdujo en los entrenos la figura del rondo, ese ejercicio en el cual los futbolistas en un círculo más o menos ancho se pasaban el balón tocándolo como mucho dos veces con un jugador en el centro que intentaba tocarlo. Un entrenamiento más bien de fútbol sala, que Johan llevaba al extremo realizando círculos estrechísimos en los que estaba permitido tocar el balón solo una vez. Hoy en día el FC Barcelona y muchos equipos del mundo entrenan utilizando el rondo. Sin duda el fútbol de Cruyff va más allá de este pequeño resumen, pero es suficiente para entender cuál es su filosofía y por qué. Johan Cruyff ha tenido sus fallos y sobretodo muchas salidas desafortunadas, pero es un genio que pudo realizar su labor en el fútbol y gracias a ello lo revolucionó. Introdujo en el Barça un estilo y una filosofía que hoy maravilla en toda Europa gracias a la buena mano de Guardiola, armó un equipo de leyenda y fue uno de los mejores jugadores de la historia. El mundo del fútbol tiene mucho que agradecer a Johan Cruyff.