IDENTIFICACIÓN Y CARTOGRAFÍA DE TIPOS ESTRUCTURALES Y NIVELES DE MADUREZ EN LA VEGETACIÓN DE LA ISLA DE MALLORCA C. LÓPEZ LEIVA. Unidad de Botánica. Escuela Universitaria de Ingeniería Técnica Forestal. Universidad Politécnica de Madrid. Ciudad Univesritaria s/n. 28040 MADRID M. ORTI MORIS. Departamento de Ciencias Agroforestales. Escuela Politécnica Superior. Campus Universitario de La Rábida. Universidad de Huelva. 21819 Palos de la Frontera (HUELVA) Resumen Se describen los Tipos Estructurales (TE) de vegetación presentes en Mallorca y asimismo se establecen escalas de Niveles de Madurez de las unidades actuales dentro de cada TE, basándose en los conceptos fijados por RUIZ DE LA TORRE (1990), que sirvieron para la preparación del Mapa Forestal de España (MFE), publicado a escala 1:200.000 y cuya finalización ha tenido lugar recientemente. Los autores presentan aquí una síntesis descriptiva de las principales unidades de paisaje vegetal y su posición dinámica, como resultado de los trabajos del MFE y exponen algunas consideraciones acerca de los procesos dinámicos en la vegetación mallorquina. Summary In this report the Structural Types of vegetation in Mallorca Island are described along with the settlement of scales of Maturity Level within each Type, based on Ruiz de la Torre’s concepts, which served to prepare the Forest Map of Spain, published on scale 1:200,000 and recently ended. The authors present a descriptive synthesis of the main landscape units and their dynamical position; some considerations about dynamical processes are offered. P. C.: Cartografía de vegetación-Tipos Estructurales-Nivel de Madurez-Isla de Mallorca K.W.: Vegetation mapping-Structural Types-Maturity Level-Mallorca Island Síntesis de la vegetación en la isla de Mallorca Las principales unidades cartografiadas en el MFE (LÓPEZ LEIVA & ORTI MORIS) son: Pinar de pi blanc (Pinus halepensis). La agrupación arbórea que ocupa mayor extensión. Las masas más representativas se hallan en la parte noroccidental, central y meridional, sin faltar en otras zonas (Noreste). Forma mezclas y mosaicos con el alzinar en las áreas de éste, masas puras extensas y combinaciones con formaciones arbóreo-arbustivas más termófilas, como los ullastrares y las marinas (franja Sur) y todo tipo de garrigas. En la orla costera alterna con agrupaciones propias de ámbitos hiperxerófilos (garrigas termófilas, marinas del litoral y restos de sabinares). Sus masas pueden ser pluriestratificadas, con dosel francamente penetrable por la luz solar y por tanto con subpiso heliófilo desarrollado e incluso denso si no hay explotación intensa. Densidad de media-alta a media-baja. Talla arbórea dominante y arbustiva frecuente. Alzinar. Bosque (bosc) esclerófilo dominado por Quercus ilex ilex, a veces con participación apreciable de Pinus halepensis. Abunda en la Serra de Tramuntana, puro o en mosaico con otras agrupaciones, principalmente en el tercio central y oriental, generalmente a partir de los 600-700 m. En la zona Centro-Oeste de la Plana puede bajar en altitud y se combina, formando rodales, con cultivos agrícolas y teselas de pinar; los pisos más bajos albergan formas intermedias entre las dos subespecies de la estirpe. En las estaciones más frescas y húmedas se acompaña de elementos dispersos propios del ámbito subsclerófilo y en su subpiso llegan a aparecer estirpes calcífugas como Erica arborea, Calicotome spinosa y Pteridium aquilinum. Potencialmente monostrato, pero en la actualidad predominan las piezas con subpiso empobrecido, por diversas razones. Densidad del dosel arbóreo media-alta y alta, a veces incluso cuando se asienta sobre sustrato rocoso. Tallas no muy elevadas (arbóreas-arbustivas), por la historia de la explotación de sus masas o por falta de suelo. Ullastrares y marinas(LÓPEZ LEIVA, 1995). Agrupaciones dominadas por Olea europaea sylvestris y con participación apreciable, hasta codominante, de otras especies arbóreas y arbustivas de carácter termófilo. Abundan en la franja meridional insular, penetrando en ciertas áreas del llano central. Alcanzan tallas arbustivas y subarbustivas y conforman masas de densidad media, o media- baja en la zona litoral, donde destacan las marinas con la tríada de dominantes O. europaea sylvestris-Pistacia lentiscus-Cistus monspeliensis, en ocasiones muy aclaradas por efecto del pastoreo y a menudo en mezcla con rodales de pinar. Con tallas aún menores se encuentran las marines baixes en estaciones más secas y con peores suelos o bajo explotación más intensa. Garrigas. El fondo de cubiertas vegetales está ocupado por agrupaciones subarbustivas, de tallas medias o incluso bajas: las garrigas. Destacan, entre las distintas variantes, las siguientes: A) Garrigas baleáricas, matorrales mixtos asentados principalmente sobre roquedos kársticos, con abundancia de estirpes endémicas; de talla baja o media-baja y densidad media, en muchos casos están dominadas por el càrritx (Ampelodesma mauritanica), que desempeña un claro papel serial (sector oriental de la Tramuntana, macizo de Artá); B) Garrigas mixtas con predominio o significación de algunas especies características como Arbutus unedo, Pistacia lentiscus, Chamaerops humilis, Euphorbia dendroides, Erica multiflora, Cistus monspeliensis, Quercus coccifera etc., con cierta variabilidad en su estructura (densidad y talla) y posición dinámica (degradación); C) Garrigas termófilas, en las zonas más secas y soleadas de la Isla, especialmente en la orla costera centrooccidental y meridional, con especies como Globularia alypum, Lavandula dentata y Anthyllis cytisoides; D) Otros matorrales calcícolas de diversa composición. Otras agrupaciones. Citaremos las vegetaciones de marjal (destacando los carrizales de Phragmites y los masegares de Cladium), los restos de tarajal (Tamarix spp.); los matorrales bajos halohidrófilos con predominio de Quenopodiáceas; los de especies espinosas almohadilladas (socarrells); los psammófilos; las exiguas comunidades glicohidrófilas de Fraxinus angustifolia, Populus alba o Vitex agnus-castus. Y, por último, las comunidades de cantiles y roquedos calcáreos, con una gran proporción de endemismos. Tipos Estructurales (TE) presentes en Mallorca y su distribución. Dentro de los zonales (tipos climático-estructurales) y por orden de higrofilia decreciente están: el Subsclerófilo (S), a partir de los (600)-700-800 m en las umbrías de la Tramuntana (Alfàbia-Puntals, Cúber, etc.), pero con escasa representación real por intrazonalidad debida a la presencia de roquedos kársticos de montaña; el Esclerófilo (E), claramente dominante, con tres variantes: la de tendencia subsclerófila en el Norte, la esclerófila típica y la más termófila y xerófila en el Centro y Sur. Ésta ultima da paso, en estaciones litorales con mayor xericidad por efecto de vientos desecantes combinados con suelos pobres a un Hiperxerófilo (H) atenuado, con posibilidad de formaciones arbóreas (pinares) en mezcla con garrigas termófilas y retazos de sabinares (Santa Ponça, Illa del Toro, Cap Blanc; tramo costero desde Santanyí hasta Son Servera) (RUIZ DE LA TORRE, 1995). Los de mayor significación, entre los intrazonales (tipos sustrático-estructurales) destacan, por orden de extensión decreciente: el kárstico-rupícola (K, F), ampliamente representado en la corona altitudinal de los macizos de la Serra de Tramuntana, con acompañamiento del tipo glareícola (J) en canchales y acumulación de derrubios; el arenícola (R), en los tramos costeros de las bahías de Palma, Pollença y Alcúdia, generalmente en estado de degradación avanzada; el hidrófilo parcial o francamente halófilo (L), en las albuferas del Este insular, en aguazales litorales ligados a la desembocadura de torrents y en los salobrales de Campos y S’Avall (a este Tipo habría que agregar la variante de vegetación aerohalófila representada por los matorrales pulvinulares espinosos de socarrells en los acantilados costeros, destacadamente los de Formentor); y, por último, el glicohidrófilo (P), con muy exigua representación –incluso potencial- en algunos tramos de torrente en llanos (Puigpunyent, San Jordi –Pollença-). Los Niveles de Madurez. Asignando a las agrupaciones concretas actuales cifras estimadoras del nivel de madurez comprendidas entre el 0 (desierto completo) y el 9 (situación teórica estable de máxima adaptación al medio), se obtiene una jerarquía evolutiva que, en síntesis, y dentro de cada Tipo Estructural, queda como sigue: Tipo S (o E más mesófilo): El nivel máximo corresponde al 6 (alzinar)y el mínimo al 2 (carritxar con rodales de Calicotome spinosa y pies dispersos de Pinus halepensis en las umbrías de Cúber).En los niveles intermedios, partiendo del máximo, aparecen alzinares de inferior categoría estructural y florística, seguidos en la escala por masas con inclusiones de Pinus halepensis en los niveles inferiores, hasta el nivel 3, en el que ya existen masas puras de pinar. Los núcleos principales aparecen en Esporles-Banyalbufar, Valldemossa-Deià, Sóller, umbrías de la Serra d’Alfàbia y los extensos alzinares de Lluc-Escorca-Pollença. Tipo E (E típico y E más xerófilo): Los niveles máximos asignados (6 y 5) corresponden a formaciones arboladas de cubierta alta, con subpiso bien conformado, a base de encinas (Puigpunyent-Esporles, Valldemossa, Bunyola-Alaró, umbrías de Pas d’en Bisquerra, Selva, Pollença) y, secundariamente, pinos (Felanitx, Puig de Sant Salvador). Niveles intermedios (4 y 3) representan formaciones arboladas con estructuras de menor talla y densidad y composiciones en las que intervienen especies y agrupaciones progresivamente más xerófilas y/o heliófilas: ullastrares, marinas y garrigas –hasta aquéllas dominadas por el càrritx- con frecuentes inclusiones de elementos con significación superior (rodales de pinar o ullastrar e incluso encina). Grandes extensiones del extremo noroccidental (península de Andratx, las solanas de la Tramuntana y los enclaves forestales del llano central y del macizo de Artà) pertenecen al ámbito de las cubiertas de madurez intermedia. Los niveles de madurez baja corresponden a las garrigas degradadas o incipientes (colonizadoras de olivares abandonados) y a otras agrupaciones que sufren regresión por explotación intensa (urbanizaciones, incendios, canteras etc.). Tipo H (atenuado). El nivel máximo (6) corresponde a pinares abiertos con subpiso de garriga termófila (Cala Figuera). El 5 está representado por pinares puros, mezclados o en mosaico con marinas o garrigas termófilas (Cap Blanc, Garonda, tramo litoral desde el Cap de Ses Salines hasta Santanyí, Cala Mondragó). En los niveles intermedios (4 y 3) se emplazan las marinas de la zona Sur-Occidental (Cap Enderrocat, Cap Roig) y del Llevant (Porto Cristo, Cala Falcó, Punta Rasa, Punta de n’Amer), con inclusiones frecuentes de pinar y sabinar disperso o abundante lentiscar (n’Amer). Tipos K y F. A partir del nivel mínimo (1) para semidesiertos rocosos, frecuentes en los sectores central y oriental de la Tramuntana, se asciende a niveles bajos e intermedios cuando aparecen garrigas de càrritx incipientes o por degradación de agrupaciones más maduras; su nivel será tanto mayor cuanto más crezca la proporción de otros elementos como el palmito (Artà), garrigas baleáricas (Alfàbia, flanco litoral desde Sóller a Formentor, Norte de Campanet-Pollença), pinos y rodales de pinar (Andratx-Estellencs, Alfàbia) e inclusiones varias de encina. Los máximos niveles (6 y 5) correponden a estructuras arboladas claras de encina y/o pino (Valldemossa, Caimari-Lluc, Formentor). Tipo R. Desde un nivel 5 para pinares de Pinus halepensis, un 4 para pinares con inclusiones de Juniperus phoenicea o con matorral psammófilo; 3, matorral sobre arenal con inclusiones varias de pino; 1 para semidesiertos de arena y 0 para desiertos de arena (Arenal de Sa Cànova, Son Reial, Can’n Picafort). Tipo L. Nivel máximo de 3 para carrizal (Phragmites australis) con junquera mixta o con herbazal alto de tabla, junquera mixta con matorral halo-hidrófilo o éste mismo con pies dispersos de Tamarix gallica (albuferas de Alcúdia y Pollença). Nivel mínimo de 2 para matorral mixto halo-hidrófilo (Es Salobrar de Campos). Tipo P. Nivel máximo (5) en vegetación de ribera con predominio de Fraxinus angustifolia y otras especies arbóreas de galería y pies dispersos de Quercus faginea (Puigpunyent) y mínimo de 3 para carrizales con junquera mixta. Complejos evolutivos presentes en Mallorca. Para los tipos zonales se distinguen los presididos por bosques y otras formaciones dominadas por: 1.- Quercus ilex ilex; 2.- Quercus ilex ilex con formas intermedias a Q. ilex rotundifolia; 3.- Pinus halepensis; 4.- Olea europaea sylvestris y 5.Juniperus phoenicea. Se trataría, en gran número de casos, de masas mixtas con co-participación de elementos arbóreos (alzinas-pinos, ullastres-pinos etc.), a excepción de los encinares de variante más higrófila, en que la proporción de heliófilos y xerófilos, como el pino, se vería limitada a formación de rodales de desigual extensión, en función de las características microclimáticas de la estación. En esta variante, se agregarían las estirpes caracterítiscas del Tipo. Para los tipos intrazonales las fases de mayor madurez vienen representadas por: formaciones arbóreas y arbustivas de densidad media con 1.- Quercus ilex; 2.- Pinus halepensis o 3.- Mezcla de ambas en el Tipo kárstico-rupícola, con abundante representación intercalar de garrigas y palmitares; 1.- Pinus halepensis con Juniperus oxycedrus macrocarpa y J. phoenicea en el Tipo arenícola; 1.- Tamarix spp. alternando con agrupaciones de halófitos y con posibilidad de entrada de Populus alba en el Tipo halohidrófilo (si bien los matorrales de salobrar constituirían la fase más evolucionada en zonas con alta concentración de sales): y galerías arbóreas a base de Fraxinus angustifolia, Ulmus minor y/o Populus alba para el Tipo glicohidrófilo, sin excluir las comunidades arbustivas de Vitex. La variante aerohalófila se ve ennoblecida si a los matorrales de socarrells se suman pequeños rodales de pinar. Algunos ejemplos sobre procesos dinámicos: Progresión. Sucede cuando cesa un tratamiento, baja su intensidad o cuando disminuye la explotación natural. Actualmente, los cambios progresivos comportan complicación de la estructura vertical (aumenta el número de estratos, se eleva la talla dominante) u horizontal (se espesan las masas), siendo los cambios de composición más difícilmente observables en plazos cortos, de manera que, manteniéndose los componentes principales, las masas acceden a mayores niveles de madurez, en saltos discretos. Se observa progresión en el espesamiento del subpiso de algunos pinares y alzinares o en la colonización paulatina de las garrigas por elementos arbóreos. Regresión. Se desencadena por sentidos de los cambios inversos al caso anterior. La sobrecarga ganadera o la sobrepoblación son los factores más relevantes. La regresión puede conllevar un proceso aún más intenso de degradación, tanto más avanzada cuanto más serios sean los efectos de los factores degradantes, dando paso a los saltos evolutivos regresivos. Saltos evolutivos. Progresivos, se pueden observar en la colonización de antiguas laderas abancaladas con cultivos de olivar que, al ser abandonados, van siendo colonizados por agrupaciones arbustivas (garrigas) o directamente por pinares; de forma artificial, pueden producirse por instalación ex novo de masas a base de especies arbóreas con crecimientos moderadamente rápidos (repoblaciones con pino). Por el contrario, saltos regresivos suponen cambios bruscos del paisaje por efecto de factores degradantes de gran intensidad como incendios forestales o urbanización masiva. En la Isla se observa la sustitución de pinares incendiados por garrigas que, por recurrencia del fuego, pasan a carritxares (macizo de Artà). Alternancias y ciclos. Pasos evolutivos a niveles de madurez equivalentes los encontramos en los cambios de componente principal en formaciones arbóreas (alzinares de variante seca a pinares) y en pasos entre distintas formaciones (arbolados claros a arbustedos: pinares aclarados a ullastrares o pinares a garrigas). Los agentes desencadenantes suelen ser: el fuego y la presión ganadera. Bloqueos evolutivos. La evolución se detiene por explotación moderada en las agrupaciones más maduras, como en los alzinares de la Serra de Tramuntana, en los que una tradición ganadera con empleo del fuego para provocar el rebrote pastable en garrigas y carritxares, combinada con la extracción de leñas en masas arbóreas suponía una estabilidad forzada que puede verse alterada, al desaparecer los agentes principales, hacia una mayor madurez si comienzan a agregarse elementos ennoblecedores. Bibliografía LÓPEZ LEIVA, C. & M. ORTI MORIS (1995): Mapa Forestal de España. Cartografía de la Hoja 10-7 “Palma de Mallorca”. ICONA. Madrid. LÓPEZ LEIVA, C. (1995): Memoria de vegetación de la Hoja “Palma de Mallorca”. Mapa Forestal de España. ICONA. Madrid. RUIZ DE LA TORRE, J. (1990): Memoria General del Mapa Forestal de España. ICONA, Madrid. RUIZ DE LA TORRE, J. (1995): Características de la zona representada en la Hoja “Palma de Mallorca”. Mapa Forestal de España. ICONA. Madrid.