análisis de participación y resultados del equipo olímpico

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ANÁLISIS DE PARTICIPACIÓN Y RESULTADOS
DEL EQUIPO OLÍMPICO ESPAÑOL EN LOS
JUEGOS OLÍMPICOS DE VERANO
(1896-2008)
Ricardo Leiva Román
FACULTAD DE EDUCACIÓN Tesis Doctoral ANÁLISIS DE PARTICIPACIÓN Y RESULTADOS DEL EQUIPO OLÍMPICO ESPAÑOL EN LOS JUEGOS OLÍMPICOS DE VERANO (1896-­2008) Ricardo Leiva Román Directores Dra. Dña. María José Martínez Patiño Dr. D. José Antonio Pérez Turpin Alicante, 2012 AGRADECIMIENTOS Mi primer agradecimiento y el más especial es para el Presidente del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco Bravo, por proponerme en enero de 2006, formar parte de su equipo de trabajo como Director de Deportes del Comité Olímpico Español, sin duda esa oportunidad de trabajar con los deportistas olímpicos de nuestro país ha sido la que me ha permitido cumplir con uno de mis sueños, estudiar los resultados y la evolución del Equipo Olímpico Español a lo largo de la historia. Gracias Presidente por confiar en mí y por darme la oportunidad de tener el privilegio de trabajar junto a ti en el Comité Olímpico Español. Agradezco en segundo lugar a mis directores de tesis a la Dra. María José Martínez Patiño de la Universidad de Vigo y al Dr. José Antonio Pérez Turpin de la Universidad de Alicante que con inusitada paciencia me han marcado el camino para conseguir realizar este trabajo, sin ellos y sin sus constantes llamadas de ánimo, sus orientaciones y conocimientos nunca hubiera realizado esta tesis. Al Dr. Juan José Chinchilla Mira, mi más sincero agradecimiento por su encomiable labor de poner orden y concierto a una amalgama de datos, gráficas y tablas que han sido la base y génesis de este estudio de investigación. Al Comité Olímpico Español y a todos los que en el trabajan, en especial al Presidente de la Academia Olímpica Española D. Conrado Durántez Corral, por permitirme consultar y explotar la i base de datos del COE, y contestar a mis incansables preguntas con su extrema amabilidad y educación. A Macario García mi maestro y profesor de Judo que sembró en mi con su actitud y ejemplo la semilla de deportista y persona que ahora soy. A mis profesores y compañeros del INEF quien con su trabajo y amistad me dieron la base de mi formación académica. A mis padres por creer en mí y por luchar para que hoy pudiera estar donde estoy. A Beatriz y Alejandro, mis hijos, por todo el tiempo que les he quitado a lo largo de estos años para dedicarme a mi pasión y a mi vida, el deporte. A Ana, mi mujer por su paciencia, saber estar y apoyo incondicional para realizar esta tesis doctoral, sin ella nunca hubiera sido quien soy. ii ÍNDICE GENERAL AGRADECIMIENTOS ......................................................................................... i ÍNDICE GENERAL ............................................................................................ iii ÍNDICE DE FIGURAS ...................................................................................... vii INTRODUCCIÓN ............................................................................................... 1 PRIMERA PARTE: MARCO CONCEPTUAL Y FUNDAMENTACIÓN TEÓRICA ........................................................................................................... 3 1. Planteamiento del problema de estudio ..................................................... 7 2. Fundamentación Teórica ........................................................................... 15 2.1 Nacimiento y evolución del deporte moderno, desde una perspectiva sociocultural ........................................................................................... 15 2.1.1 Los deportes en la Inglaterra del siglo XVIII y los factores socioculturales que promovieron su transformación al sistema deportivo moderno ........................................................................ 23 2.1.2 Procesos de estandarización y difusión del sistema deportivo moderno ........................................................................................ 29 2.2 Nacimiento y evolución del Olimpismo. ................................................... 33 2.2.1 Pierre de Fredi, Barón de Coubertin: inventor del Olimpismo moderno ........................................................................................ 33 2.2.2 Epistemología del Olimpismo ....................................................... 37 2.2.3 Constitución, evolución y estructura actual del Comité Olímpico Internacional. ................................................................................. 40 2.2.4. Historia de los Juegos Olímpicos Modernos (1896-­2008). .......... 47 2.3. El deporte en España hasta el siglo XIX ................................................ 79 2.4. Origen del Olimpismo en España: Constitución del Comité Olímpico Español .................................................................................................. 90 PARTE SEGUNDA: MARCO METODOLÓGICO ............................................ 95 3. Objetivos de investigación ........................................................................ 99 4. Método ....................................................................................................... 103 4.1 Estrategia de Investigación ................................................................... 104 4.2 Metodología .......................................................................................... 105 4.3 Fuentes ................................................................................................. 109 iii 4.4 Hipótesis ............................................................................................... 111 5. Resultados y discusión ........................................................................... 115 5.1 Primera etapa histórica: de 1875 a 1900 .............................................. 115 5.1.1 Análisis de la estructura “de base”: factores tecnoeconómicos y sociodemográficos. .......................................................................... 116 5.1.2 Análisis de la estructura “intermedia”: factores sociopolíticos, economía política y estructura social. .............................................. 116 5.1.3 Análisis de la estructura “final”: sistema deportivo general, situación del Olimpismo, participación en los Juegos Olímpicos. ................... 117 5.2 Segunda etapa histórica: de 1900 a 1918. ............................................ 119 5.2.1 Análisis de la estructura “de base”: factores tecnoeconómicos y sociodemográficos. .......................................................................... 119 5.2.2 Análisis de la estructura “intermedia”: factores sociopolíticos, economía política y estructura social. .............................................. 120 5.2.3 Análisis de la estructura final: sistema deportivo general, situación del Olimpismo, participación en los Juegos Olímpicos. ......................... 122 5.3 Tercera etapa histórica: de 1918 a 1939. ............................................. 124 5.3.1 Análisis de la estructura “de base”: factores tecnoeconómicos y sociodemográficos. .......................................................................... 125 5.3.2 Análisis de la estructura “intermedia”: factores sociopolíticos, economía política y estructura social. .............................................. 125 5.3.3 Análisis de la estructura “final”: sistema deportivo general, situación del Olimpismo, participación en los Juegos Olímpicos. ................... 126 5.4 Cuarta etapa histórica: de 1939 a 1960. ............................................... 132 5.4.1 Análisis de la estructura “de base”: factores tecnoeconómicos y sociodemográficos. .......................................................................... 132 5.4.2 Análisis de la estructura “intermedia”: factores sociopolíticos, economía política y estructura social. .............................................. 133 5.4.3 Análisis de la estructura “final”: sistema deportivo general, situación del Olimpismo, participación en los Juegos Olímpicos. ................... 133 5.5 Quinta etapa histórica: de 1960 a 1978. ............................................... 137 5.5.1 Análisis de la estructura “de base”: factores tecnoeconómicos y sociodemográficos. .......................................................................... 138 5.5.2 Análisis de la estructura “intermedia”: factores sociopolíticos, economía política y estructura social. .............................................. 138 5.5.3 Análisis de la estructura “final”: sistema deportivo general, situación del Olimpismo, participación en los Juegos Olímpicos. ................... 139 iv 5.6 Sexta etapa histórica: de 1978 a 2008. ................................................. 144 5.6.1 Análisis de la estructura “de base”: factores tecnoeconómicos y sociodemográficos. .......................................................................... 145 5.6.2 Análisis de la estructura “intermedia”: factores sociopolíticos, economía política y estructura social. .............................................. 145 5.5.3 Análisis de la estructura “final”: sistema deportivo general, situación del Olimpismo, participación en los Juegos Olímpicos. ................... 146 6. Conclusiones ............................................................................................ 155 7. Propuestas de mejora y líneas futuras de investigación. ..................... 173 8. Referencias bibliográficas. ...................................................................... 177 9. Anexos ........................................................................................................... i v vi ÍNDICE DE FIGURAS Figura 1. Estructura del CIO. Tomado de Jinxia y Mangan (2008). .................. 44 Figura 2. Distribución de los miembros del CIO y de la población mundial por continentes (CIO, s.f.;; ONU, 2009). ....................................................... 46 Figura 3. Espacio y Tiempo, y el discurso historiográfico. Tomado de Martínez, González, Souto y Blanco, 2009. ............................................... 106 Figura 4. Participación del equipo olímpico español, por género en los JJOO (1918-­1939). .................................................................................... 130 Figura 5. Participación del equipo olímpico español, por modalidad en los JJOO (1918-­1939). .................................................................................... 130 Figura 6. Participación del equipo olímpico español, por género en los JJOO (1939-­1960). .................................................................................... 136 Figura 7. Participación del equipo olímpico español, por modalidad en los JJOO (1939-­1960). .................................................................................... 136 Figura 8. Participación del equipo olímpico español, por género en los JJOO (1960-­1978). .................................................................................... 143 Figura 9. Participación del equipo olimpico español, por modalidad en los JJOO (1960-­1978). .................................................................................... 143 Figura 10. Participación del equipo olimpico español, por género en los JJOO (1978-­2008). .................................................................................... 149 Figura 11. Participación del equipo olimpico español, por modalidad en los JJOO (1978-­2008). .................................................................................... 150 Figura 12. Participación del equipo olímpico español, por género en todos los JJOO. ................................................................................................... 155 Figura 13. Participación del equipo olímpico español, por modalidad deportiva en todos los JJOO. ..................................................................... 156 vii Figura 14. Resultados en medallas del equipo olímpico español, por modalidad deportiva en todos los JJOO. ................................................... 157 Figura 15. Resultados en diplomas del equipo olímpico español, por modalidad deportiva en todos los JJOO. ................................................... 158 Figura 16. Número de licencias por deportes con más medallas conseguidas a lo largo de todos los JJOO. ................................................ 159 Figura 17. Participación del equipo olímpico español, por zona geográfica en todos los JJOO. ..................................................................................... 160 Figura 18. Participación del equipo olímpico español, en género masculino en los JJOO (1918-­1939). ................................................................................ i Figura 19. Participación del equipo olímpico español, en género femenino en los JJOO (1918-­1939). ................................................................................ i Figura 20. Participación del equipo olímpico español, en género masculino por modalidades deportivas en los JJOO (1918-­1939). .................................. ii Figura 21. Participación del equipo olímpico español, en género femenino por modalidades deportivas en los JJOO (1918-­1939). .................................. ii Figura 22. Participación del equipo olímpico español, comparada por género y modalidades deportivas en los JJOO (1918-­1939). ........................ iii Figura 23. Participación del equipo olímpico español, en género masculino en los JJOO (1939-­1960). .............................................................................. iii Figura 24. Participación del equipo olímpico español, en género femenino en los JJOO (1939-­1960). .............................................................................. iv Figura 25. Participación del equipo olímpico español, en género masculino por modalidad deportiva en los JJOO (1939-­1960). ........................................ v Figura 26. Participación del equipo olímpico español, en género femenino por modalidad deportiva en los JJOO (1939-­1960). ....................................... vi viii Figura 27. Participación del equipo olímpico español, comparando por género y modalidad deportiva en los JJOO (1939-­1960). ............................. vii Figura 28. Participación del equipo olímpico español, en el género masculino en los JJOO (1960-­1978). ............................................................ vii Figura 29. Participación del equipo olímpico español, en el género femenino en los JJOO (1960-­1978). ............................................................ viii Figura 30. Participación del equipo olímpico español, en el género masculino y por modalidad en los JJOO (1960-­1978). .................................. ix Figura 31. Participación del equipo olímpico español, en el género femenino y por modalidad en los JJOO (1960-­1978). ..................................... x Figura 32. Participación del equipo olímpico español, comparativa por género y modalidad en los JJOO (1960-­1978). .............................................. xi Figura 33. Participación del equipo olímpico español, en género masculino de los JJOO (1978-­2008). .............................................................................. xi Figura 34. Participación del equipo olímpico español, en género femenino de los JJOO (1978-­2008). ............................................................................. xii Figura 35. Participación del equipo olímpico español, comparación entre géneros en los JJOO (1978-­2008). ............................................................... xii Figura 36. Participación del equipo olímpico español, en género masculino y por modalidad en los JJOO (1978-­2008). ................................................. xiii Figura 37. Participación del equipo olímpico español, en género femenino y por modalidad en los JJOO (1978-­2008). ................................................. xiv Figura 38. Participación del equipo olímpico español, comparada por género y por modalidad en los JJOO (1978-­2008). ..................................... xv Figura 39. Participación del equipo olímpico español, en todos los JJOO. ....... xv Figura 40. Participación del equipo olímpico español, en todos los JJOO por modalidad deportiva. .............................................................................. xvi ix Figura 41. Participación del equipo olímpico español, en todos los JJOO comparado por modalidad y género. ............................................................ xvi Figura 42. Participación del equipo olímpico español, en los JJOO por porcentaje de modalidades deportivas. ....................................................... xvii Figura 43. Participación del equipo olímpico español, en los JJOO por porcentaje de modalidades deportivas en el género femenino. ................. xviii Figura 44. Participación del equipo olímpico español, en los JJOO por porcentaje de modalidades deportivas en el género masculino. ................ xviii Figura 45. Diplomas del equipo olímpico español, en los JJOO en el género masculino. ........................................................................................ xix Figura 46. Diplomas del equipo olímpico español, en los JJOO en el género femenino. ......................................................................................... xix Figura 47. Diplomas del equipo olímpico español, en los JJOO comparado por género. .................................................................................................... xx Figura 48. Diplomas del equipo olímpico español en los JJOO. ....................... xx Figura 49. Diplomas del equipo olímpico español, en los JJOO por modalidad deportiva. .................................................................................... xxi Figura 50. Medallas del equipo olímpico español, en los JJOO en el género masculino. ....................................................................................... xxii Figura 51. Medallas del equipo olímpico español, en los JJOO en el género femenino. ....................................................................................... xxiii Figura 52. Número de licencias de los deportes del 5º al 10º puesto, con mayor número de medallas obtenidos en los JJOO. .................................. xxiv Figura 53. Número de licencias de los deportes del 10º al 15º puesto, con mayor número de medallas obtenidos en los JJOO. .................................. xxiv Figura 54. Participación de deportistas masculinos en los JJOO, por Comunidad Autónoma. ............................................................................... xxv x Figura 55. Participación de deportistas femeninas en los JJOO, por Comunidad Autónoma. ............................................................................... xxv Figura 56. Comparativa en la participación de deportistas femeninos y masculinos en los JJOO, por Comunidad Autónoma. ................................ xxvi Figura 57. Participación de deportistas en los JJOO, por Comunidad Autónoma. .................................................................................................. xxvi xi INTRODUCCIÓN Introducción Origen de la Tesis INTRODUCCIÓN El fenómeno Olímpico representa un apoyo incontestable en el desarrollo de la paz, la igualdad, la ecología y la superación de los seres humanos, valores todos ellos intrínsecos a los Juegos Olímpicos, ya que representan las herramientas más utilizadas en la búsqueda de una sociedad mejor. La presente investigación es un estudio profundo y analítico de la historia de los Juegos Olímpicos, donde se pone de manifiesto una de las inquietudes que más me motivó a realizar el trabajo en profundidad sobre la participación de los españoles en todos los Juegos Olímpicos, que fue, sin duda, la cantidad de datos que he tenido que trabajar en estos últimos años, desde mi perspectiva profesional. La tesis doctoral se presenta estructurada en torno a dos ejes principales: el marco conceptual y el marco empírico. Unido a lo anterior, estos grandes ejes se distribuyen a lo largo de nueve capítulos, que abarcan desde la introducción hasta los anexos. De forma clarificadora, se puede indicar que los distintos apartados abarcarían: el marco conceptual, con el planteamiento de la cuestión de investigación, la justificación y la fundamentación teórica. En una segunda etapa, tendríamos el marco empírico, con los objetivos, metodología, resultados, discusión, conclusiones y las propuestas de líneas de investigación futuras. La historia es algo que pertenece a todos los seres humanos. Pertenece igualmente a las sociedades y a todas las partes del mundo. Por ello, para entender la necesidad de este estudio es necesario resaltar que, el fenómeno Olímpico se ha convertido, progresivamente, en una realidad sociocultural muy popular entre la población española, la visión dinámica de la sociedad se postula como una nueva forma de ver el mundo, un entendimiento entre los pueblos y las razas, algo que esta más allá de las fronteras y que crea distintos ambientes de positivismo que faltan hoy día en nuestra sociedad. El éxito del fenómeno Olímpico, indudable e indiscutible, tanto por los resultados derivados de la participación de los deportistas españoles, como por la repercusión mediática, debe hacer avanzar socialmente a un país con el resto del mundo. Ricardo Leiva Román 1 Introducción Origen de la Tesis Por todo lo anterior, pasamos a introducirnos en esta investigación que creemos necesaria en nuestra sociedad deportiva actual. 2 Ricardo Leiva Román PRIMERA PARTE: MARCO CONCEPTUAL Y FUNDAMENTACIÓN TEÓRICA I. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA DE ESTUDIO Fundamentación Teórica Problema de Estudio 1. Planteamiento del problema de estudio Esta investigación tiene como objetivo fundamental, analizar la participación de los deportistas españoles a lo largo de la historia de los Juegos Olímpicos modernos. No se trata exclusivamente -­aunque también-­ de ofrecer simplemente los datos de la misma, en una especie de descripción ordenada con intención meramente clasificatoria o informativa. Aunque se trata de una intención complicada, pues el objeto de estudio lo es en sí mismo y es difícil de abordar en su complejidad, la finalidad principal del estudio consiste dilucidar la existencia, o no, de variables de carácter sociológico –en su sentido más amplio, en el que se deberán incluir factores de tipo económico, político, social, cultural, etc.– que puedan servir para interpretar, comprender y, tal vez, explicar, determinados aspectos de esa participación y su evolución a lo largo de la historia, porque, entre otras consideraciones que se mostrarán a lo largo de esta tesis, ésta ha sufrido cambios enormemente significativos en todo su decurso. Para alcanzar los ambiciosos objetivos propuestos, se ha diseñado una línea estratégica de investigación que hemos de considerar como relativamente novedosa, no ya en el campo de las Ciencias Sociales, donde su utilización en el fenómenos sociales particulares, ha sido -­y seguirá siéndolo, con toda seguridad– amplia, extensa y generalizada, sino en el particular objeto de estudio de esta investigación, teniendo en cuenta que, por un lado, no se encuentra un número importante y desatacado de estudios que realicen una minuciosa y detallada exploración sobre historia, evolución y desarrollo, impacto social, consecuencias de otro orden, causas o interpretaciones de lo anteriormente señalado, etc., que el fenómeno olímpico, en su conjunto y en términos globales, ha mostrado explícitamente, a lo largo de su historia, en España. Por otra parte, menos aún, se encuentran investigaciones sobre el objeto de estudio de referencia, en el que se analice el mismo desde el prisma del análisis social, en términos de la posibilidad, por una parte, de encontrar un conjunto de variables que mantengan su influencia sobre esta cuestión a lo largo de amplios periodos temporales y, por otra, la de encontrar relaciones Ricardo Leiva Román 7 Fundamentación Teórica Problema de Estudio estructurales y funcionales entre esas variables, que permitan la comprensión o interpretación de los mecanismos profundos del mismo, e incluso, la obtención de un conjunto o grupo de causas que expliquen una parte de las consecuencias, de las que ya se han producido a través de la historia y de las que se podría anticipar que sucederán, por lo tanto, con una cierta capacidad predictiva, por lo menos, con un alcance prospectivo o exploratorio. Con relación al conjunto de estudios al que se hace referencia, Tamayo (2001), en su tesis doctoral, relata los que hasta la fecha de elaboración de la misma, se han publicado en España, relacionadas con la historia de la participación de deportistas olímpicos españoles a través de la historia, enumerando y describiendo el contenido de los siguientes: ‡ La exhaustiva y rigurosa recopilación de los resultados deportivos de los deportistas españoles en los Juegos Olímpicos y en los Juegos Olímpicos de Invierno, publicada por Alcoba, en 1992. ‡ Un análisis de datos, sobre los resultados olímpicos de una modalidad deportiva concreta: la historia del atletismo olímpico español, editada por la Real Federación Española de Atletismo, en 1992. ‡ Estudio de carácter local, consistente en la recopilación de la participación y resultados de los deportistas olímpicos vallisoletanos, publicada por Ortega, en 1992. ‡ La propia tesis de Tamayo, concluida en 2001, que ha de considerarse como la investigación que cuenta con una mayor proximidad o similitud, en relación a los objetivos y procedimientos de esta misma. Las diferencias fundamentales estribarían, por una parte, en el modelo metodológico de análisis y, por otra, en el procedimiento de recogida de datos, teniendo en cuenta que Tamayo utiliza de un modo muy original e interesante, no exclusivamente, pero sí con un peso importante, la información ofrecida por varios medios de comunicación escrita, de tirada nacional, a lo largo del periodo histórico objeto de estudio. 8 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Problema de Estudio Existen otras investigaciones de gran interés y validez científica, que ponen en relación al fenómeno olímpico y a la participación de los deportistas españoles en el mismo, como por ejemplo, la realizada por Ferrando, en 1996 para el Consejo Superior de Deportes, en la que realiza el análisis del perfil sociológico de los deportistas españoles participantes en los Juegos Olímpicos celebrados entre 1980 y 1992, es decir, en los Juegos de Moscú de 1980, de Los Ángeles de 1984, de Seúl de 1988 y, finalmente, los de Barcelona de 1992. Sin embargo, ni los objetivos de la misma, ni la perspectiva general empleada, ni la población objeto de la investigación, son equivalentes a los que corresponden a esta investigación, en concreto. Volviendo a la estrategia de investigación elegida en función a los objetivos generales a alcanzar en el estudio, como ya se mencionaba más arriba, hay que decir que la misma se expresa con una línea argumentativa coherente, rigurosa y sólida, por medio de la división de la investigación en dos partes bien definidas, pero mostrando, a su vez, con claridad, una dependencia funcional entre las dos, que revela el mantenimiento de esa línea argumental ya mencionada, desarrollando esa división en la estructura de la tesis con el fin de incrementar la deconstrucción analítica, pero tratando de que no exista perdida alguna de la visión global del conjunto del razonamiento que, a su vez, permita justificar los resultados y conclusiones obtenidas al finalizar el mismo. Los objetivos parciales pretendidos, en cada una de las dos partes mencionadas, son, de manera sucinta, los siguientes: A. La primera parte pretende mostrar, descriptivamente, el fenómeno de estudio en una secuencia progresivamente decreciente, desde el conocimiento de la configuración más genérica del mismo: el sistema deportivo contemporáneo, con la definición teórica conceptual del mismo, las cusas de su origen, su evolución y desarrollo, pasando posteriormente, a analizar una faceta específica de éste, tal es el caso del Olimpismo moderno, mostrando su origen y su pasado, su estructura actual, su significancia, impacto e importancia sociológica actual. Por último, se incorporan los aspectos particulares de la expresión de este fenómeno en el caso particular español. La Ricardo Leiva Román 9 Fundamentación Teórica Problema de Estudio compilación y recogida de los datos necesarios, para el desarrollo del constructor argumentativo, se realizó, principalmente, en fuentes contrastadas y muy utilizadas en investigaciones de perspectiva sociológica y antropológica sociocultural aplicadas al ámbito del deporte, de tipo bibliográfico y hemerográfico. B. Planteado conceptualmente el objeto genérico de estudio durante la primera parte, como se ha expuesto con anterioridad, en esta segunda parte se desarrolla el análisis de la plasmación particular del fenómeno de investigación en el caso español: la participación de los deportistas olímpicos españoles a lo largo de la historia de los Juegos, con la intención de hallar variables -­en el caso de estas se mostrasen con evidencia lógica como tales-­ que expliquen, o que por lo menos, permitan comprender o interpretar, diversas facetas de los resultados de dicha participación. Para esta tarea, se ha optado por recurrir a un modelo de análisis ampliamente utilizado en el campo general de las Ciencias Sociales y, sobre todo, dentro de las mismas, en el ámbito de la Antropología Sociocultural: el modelo del “Materialismo Cultural” (Harris, 2004;; Blanchard y Cheska, 1986;; Bohannan y Glazer, 2007). De manera concisa, ya que el modelo será tratado con mayor profundidad y extensión en el punto dedicado a metodología, el mismo propone como fuente inicial explicativa de los fenómenos socioculturales, los componentes materiales de la sociedad en la que se produce dicho fenómeno. Metodológicamente no descarta a priori ningún otro grupo de causas, siempre y cuando el análisis de las causas materiales no sea satisfactorio y no muestre, empíricamente, la suficiente potencia explicativa. La aplicación del modelo se desarrolla utilizando tres niveles de análisis, a modo de filtros que realizan una criba selectiva de los datos existentes y, muy importante, permiten mostrar las relaciones causa-­efecto hasta el objeto sociocultural que pretende ser explicado. Estos tres niveles serían los siguientes: 10 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Problema de Estudio o Un primer nivel, constituyendo la “base” del sistema, que correspondería al estudio de los factores “tecnoeconómicos”: medios y modos de producción material y a factores “sociodemográficos”: situación y evolución de la población de la sociedad investigada. o Un segundo nivel, que expondría la configuración “intermedia” de la estructura del sistema: la estructura política, con su proyección interior y exterior, la estratificación de la sociedad, las estructuras normativo -­ legales. o Por último, un tercer nivel, que mostraría los constructos finales de orden sociocultural: sistemas de ideas, arte y, por supuesto, el deporte. Como indican taxativa y literalmente Blanchard y Cheska (1986): “El modelo del materialismo cultural trata el deporte como un aspecto del comportamiento sociopolítico de la cultura y como tal se le considera un producto de la base material. Es decir, que el deporte solo se puede comprender por referencia a la tecnología y a la economía del sistema en que se halla”. En la aplicación específica de este modelo al proceso de análisis, fundamental para alcanzar los fines de esta investigación, en primer lugar, se ha diseccionado todo el espacio temporal que correspondería al proceso histórico donde se desarrolla el fenómeno de estudio, en varias épocas intermedias que pueden ser intervaladas aplicando criterios significativos de carácter histórico. En cada una de esas fracciones temporales, en las que, como dato relevante y referente fundamental, se indican los Juegos Olímpicos celebrados en cada una de ellas y se muestran los datos detallados de la participación de los deportistas españoles, se aplica el modelo de análisis propuesto, con el fin de interpretar y explicar los resultados generales expuestos y determinadas facetas de los mismos, por medio de una línea lógico-­argumental, apoyada en los datos empíricos de los que se dispone y que, para esta parte de la investigación, se han recopilado fuentes bibliográficas, hemerográficas y documentales. Estas últimas, aportadas por bases de datos de contenido específico, gestionadas por instituciones Ricardo Leiva Román 11 Fundamentación Teórica Problema de Estudio deportivas de máximo nivel y relacionadas directamente con el objeto y la finalidad del estudio: Comité Olímpico Internacional (COI – IOC) y Comité Olímpico Español (COE). Para finalizar, la exposición de la línea argumentativa que se intenta seguir a través del proceso investigador, pretende responder a la pregunta general clave que se plantea contestar en esta tesis: ¿Es posible atribuir causalidad a determinadas variables de orden sociocultural -­cambiantes a lo largo del decurso histórico-­ de los diversos resultados de nuestros deportistas -­valorando distintas facetas y factores con potencial posibilidad de verse sujetos al análisis-­ en sus participaciones en los Juegos Olímpicos modernos celebrados hasta la fecha? Las preguntas específicas de investigación son las siguientes: 1.-­) ¿Es posible conocer la participación española por género, en todos los Juegos Olímpicos de verano en la era moderna? 2.-­) ¿Es posible conocer la participación española por modalidad deportiva, en todos los Juegos Olímpicos de verano en la era moderna? 3.-­) ¿Es posible analizar los resultados de la participación española, en todos los Juegos Olímpicos de verano en la era moderna? 4.-­) ¿Es posible conocer la participación española, en todos los Juegos Olímpicos de verano en la era moderna, desde el punto de vista de la estructura deportiva? 5.-­) ¿Es posible conocer la participación española en todos los Juegos Olímpicos de verano en la era moderna, desde el punto de vista de la zona geográfica? 12 Ricardo Leiva Román II. FUNDAMENTACIÓN TEÓRICA Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico 2. Fundamentación Teórica 2.1 Nacimiento y evolución del deporte moderno, desde una perspectiva sociocultural Con la noción de deporte sucede como con otros conceptos e ideas que han surgido de la productiva creatividad mental de los seres humanos y que pretenden acotar, definir, determinar, interpretar, explicar, etc., determinadas prácticas y actividades que éstos han desarrollado a lo largo de su historia, desde los más remotos inicios de la misma: que resulta mucho más sencillo reconocer tales actividades en su expresión fáctica, en el marco de la experiencia cotidiana, que conceptualizarlas con el rigor que su análisis científico requiere. Para proceder a un intento inicial de aproximación, es necesario aplicar al fenómeno una serie de afirmaciones previas que, tal vez, puedan parecer excesivamente simplistas y tópicas a primera vista, pero resultan imprescindibles para acometer esta tarea de un modo argumentativamente estructurado. Del deporte puede decirse, como punto de partida, que: x Se trata de un fenómeno sociocultural de elevada complejidad, debido a su polisemia intercultural y a su estructura multifacética. x Cuenta con un pasado histórico muy dilatado, en el que se han dado procesos de evolución convergente y divergente, así como de difusión, con una implantación prácticamente universal. x En las últimas décadas, para nuestra cultura occidental o “euroamericana”, ha supuesto un objeto de estudio científico de elevado interés, principalmente, en el campo de las Ciencias Sociales, debido, casi con total seguridad, a su importante y acelerado impacto sociológico. Ricardo Leiva Román 15 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Es, precisamente, este último punto, el que se va a desarrollar a continuación con el objetivo de establecer una aproximación, lo más rigurosa posible, desde criterios académico-­científicos, a la definición conceptual del fenómeno deportivo, tal y como se había apuntado anteriormente y para ello, se hace imprescindible enumerar lo que las distintas ramas o disciplinas de las Ciencias Sociales han concluido como producto de sus análisis e investigaciones respecto al fenómeno en cuestión -­siempre con carácter relativo y provisional, como no podía ser de otro modo, debido, precisamente, al sostenimiento en todo momento, del imprescindible rigor científico-­. Con el fin de que esta recopilación del saber científico multidisciplinar acerca del fenómeno deportivo ofrezca la suficiente claridad argumentativa e imprescindible fundamentación teórica, con los insoslayables estándares de seriedad científica, pero evitando el riesgo de dispersión y de una posible pérdida de contextualización expositiva por la superación de los márgenes que ofrecen los límites de los objetivos generales y específicos de esta investigación, se tratará de explicitar, del modo más sintético posible, todo lo que, a fecha de hoy, constituye el inmenso corpus de conocimiento relacionado con el deporte: concepto, origen, evolución y desarrollo, consecuencias de carácter sociocultural, en términos globales y específicos, etc., desde la perspectiva de las más representativas disciplinas académicas y científicas que lo han abordado, que son las siguientes: A) Conceptualización teórica del deporte, desde la perspectiva de la Sociología. Es necesario indicar, como factor fundamental y, a su vez, particular de la ciencia sociológica, y con el fin de facilitar la comprensión de sus potencialidades y también de sus limitaciones a la hora de ser capaz de acotar los márgenes que delimiten el significado y el concepto de deporte, su estrategia de estudio de carácter casi exclusivamente sincrónica. Ésta es una perspectiva que suele dejar fuera del análisis y el estudio los factores que corresponden al origen y evolución del fenómeno y se centra, fundamentalmente, en los distintos aspectos que muestra el deporte en la 16 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico forma contemporánea y en las sociedades de cultura occidental u occidentalizada. Según Contreras y col. (2001) (en Garay y Hernández, 2005) en la posición sociológica dominante, las características esenciales que definirían al deporte, serían: x Una gran obsesión por lo medible. x Creación de ambientes e implementos propios. x El rendimiento como presupuesto. x La alta valoración de los principios de mérito y esfuerzo. x Un esquema piramidal de funcionamiento. En este procedimiento de definir el deporte utilizando la exposición de sus características definitorias esenciales, García Ferrando (1990) (en Paredes Ortiz, 2002) enumera las siguientes: x Es una actividad física e intelectual humana. x De naturaleza competitiva. x Gobernada por reglas. x Socialmente institucionalizada. También García Ferrando, Puig y Lagardera (2005) hacen un repaso detallado de lo que han propuesto distintas corrientes sociológicas teóricas, para definir, dotar de comprensión y significado e interpretar las consecuencias del deporte contemporáneo: a) La perspectiva Funcionalista: la explicación funcionalista justifica la existencia de un fenómeno en términos de sus consecuencias, más en concreto, de su contribución al mantenimiento de un orden social estable, por lo tanto, la existencia del deporte quedaría justificada por su contribución a mantener el orden social existente. El sociólogo moderno más destacado de esta corriente es Robert Merton. Ricardo Leiva Román 17 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico b) La perspectiva marxista: para el marxismo, en general, la “acción social” es el resultado de un enfrentamiento en el que se deciden los intereses de personas, grupos y sectores sociales. Esta lucha entre “clases” conduce al cambio social, que es universal y permanente. Aplicadas al mundo del deporte, las interpretaciones marxistas hacen hincapié en que el deporte es un producto genuino de la revolución industrial y del nuevo orden establecido por la burguesía. Para la sociología marxista, el deporte constituye un refuerzo positivo e ideológico del que se vale el sistema capitalista para conseguir en la masa social una aquiescencia moral y fáctica, que hace posible que las relaciones de dominación y poder sigan inalterables. Los sociólogos del deporte destacados adscritos a esta corriente, son: B. Rigauer, J.M. Brohm y Hargreaves. c) La corriente Figurativa: Norbert Elías y Eric Dunning son los creadores de la perspectiva “figurativa”. Su tesis principal es que en el proceso de civilización se fue instaurando un nuevo código moral y de comportamiento en la aristocracia, en el que la agresividad había perdido peso como valor destacado. Por otra parte, el Estado moderno, capitalista y parlamentario, emergido de la presión de la burguesía, se atribuyó el monopolio de la violencia. En este contexto sociohistórico surgió el deporte moderno, como acomodación de los otrora violentos sports populares ingleses al nuevo ordenamiento jurídico, político y moral. En este sentido, para Elías, el deporte es una de las claves sociales que nos permiten comprender el origen y evolución de los tiempos modernos. d) La sociología Estructuralista: el sociólogo representante de esta corriente, originariamente lingüista (F. de Saussure y R. Jakobson) y antropológica (Claude Lévi-­Strauss) es Pierre Bourdieu. Para Bourdieu, el deporte es un signo del sistema como cualquier otro fenómeno sociocultural. Estudiando los sistemas se pueden comprender las estructuras. Su conocimiento permite elaborar modelos que hagan inteligible la realidad antroposocial. 18 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Para Bourdieu, el deporte no se inscribe en el marco de una sociedad aparte, sino que es necesario estudiar el sistema deportivo en el conjunto del sistema sociocultural general. Por ejemplo, a partir de este principio afirma que los gustos por distintas prácticas deportivas vienen determinados por la adscripción de clase, pues se trata de esquemas incorporados, mecanismos que funcionan de forma inconsciente y que van decantando la inclinación de las personas hacia ciertos modelos de prácticas. Estas afirmaciones son sostenidas, también, por otros sociólogos como Pociello y por Parlebas. e) El Interaccionismo Simbólico: adoptado por la Sociología. El origen del interaccionismo simbólico corresponde a la antropología sociocultural y a su metodología etnográfica. El interaccionismo estudia las formas en las que los individuos otorgan dispares significados a los mundos sociales en los que habitan. La atención se dirige a los flujos de actividad de la vida cotidiana y real, con sus continuos ajustes y, con frecuencia, con sus imprevisibles resultados. Como institución “nueva”, el deporte no solo hace uso de sus propias atribuciones, sino que le son transferidas otras que anteriormente desempeñaban otras instituciones, siendo la atribución de significados muy dependiente de los patrones culturales de procedencia. Pese a lo dicho anteriormente, recopilado de la ciencia sociológica, el propio García Ferrando (1998) (en Paredes Ortiz, 2002) ofrece una característica inherente al propio deporte y que le confiere un progresiva dificultad para ser definido, porque cambia sin cesar y amplía sus significados, en tanto en cuanto actitud y actividad humana y como realidad social muy compleja. B) Conceptualización teórica del deporte, desde la perspectiva de la Filosofía. También desde el punto de vista de uno de nuestros más reconocidos filósofos que ocupó toda su actividad investigadora en los terrenos del deporte y de la educación física, José María Cagigal (1981) (en paredes Ortiz, 2002) resulta difícil definir al deporte y afirmaba que nadie había podido hacerlo con general aceptación: ni como realidad antropocultural ni como realidad social. Ricardo Leiva Román 19 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Pese a ello, Paredes (2002) trata de construir una definición del deporte desde la recolección de afirmaciones del propio Cagigal, dispersas en la pléyade de escritos del autor a lo largo de su labor académica y divulgativa: x Recreación, regulada por el espíritu noble del hombre. x Ejercicio físico y superación, que conforma una práctica física humana. x Actividad lúdica. x Actividad “agonal”. x Juego competitivo. x Expresión. x Diversión libre y espontánea. x Expansión del espíritu. x Ejercicio físico sometido a reglas. x Actividad social. x Espectáculo C) Conceptualización teórica del deporte, desde la perspectiva de la Antropología Sociocultural. A diferencia de la Ciencia Sociológica, tal y como se señalaba más arriba, la Antropología Sociocultural se ocupa del estudio del deporte, tanto desde una óptica sincrónica, referente a sus formas y facetas contemporáneas, como a una perspectiva diacrónica o evolutiva, interesándose también por las causas de su origen, de los procesos de cambio que han podido promover evoluciones de carácter convergente o, por el contrario, de tendencia divergente. Además, no sólo se ocupa del deporte como fenómeno del las sociedades de cultura occidental, sino que se ocupa de su característica de universal humano, y por lo tanto, aplica a su estudio una visión de carácter transcultural. 20 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Atendiendo al factor de las causas en la génesis del deporte, generalizables a todas las culturas y a cualquier momento histórico en cada una de ellas y según un modelo “evolucionista” de análisis Blanchard y Cheska (1986), los factores determinantes del origen y la forma que adoptará el deporte, en distintas realidades socioculturales, son los siguientes: a) Los medios de subsistencia: la tecnología, las instituciones y los modos de producción material, condicionan todos los demás aspectos del sistema sociocultural, incluidas, por supuesto, las características específicas que adoptarán los deportes. b) La estructura sociopolítica: La naturaleza de la organización social y de la vida política en cualquier cultura se refleja en sus actividades deportivas. c) Las variables geográficas y ecológicas: El medio físico en el que se desenvuelven habitualmente los sujetos que constituyen un sistema sociocultural, condicionará las potencialidades y limitaciones, e influirá, indudablemente, como a otros rasgos del sistema, en la variedad y características de los deportes practicados. Blanchard y Cheska (1986), con una definición atemporal o sincrónica de deporte, mencionan las características que lo categorizan: x El deporte, al igual que el juego, es un acto comunicativo, pero su mensaje no es una nueva paradoja. Es la actualización de la paradoja, lo que hace real lo irreal. Es un meta juego. x El principal objetivo del deporte, la clave que revela este meta juego es la competición. La competición es un aspecto de la vida, un aspecto de la cadena de subsistencia. Independientemente del hecho de que algunas sociedades sean más agresivas o den más importancia a la competición que otras, todas las colectividades son competitivas. Parte del proceso de adaptación cultural corresponde a la adecuación de comportamientos competitivos y cooperativos. La competición ayuda a conceptualizar la cooperación. En la dicotomía competición -­ cooperación cada factor es confrontado con (y clarificado por) el otro. El competidor comprende mejor la cooperación gracias a la adopción de un Ricardo Leiva Román 21 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico comportamiento que no es el suyo. En estos distintos aspectos, el deporte demostrará ser útil en todo sistema social que repose sobre la cooperación. x El deporte puede considerarse como una institución evolutiva y como un importante componente de desarrollo de la cultura humana. x En última instancia, el deporte es una actividad física fatigante, competitiva y agresiva, sometida a definiciones y reglamentos constrictivos. Es un componente cultural con pautas rituales, y en su composición entran proporciones variables de juego, trabajo y ocio. D) Conceptualización teórica del deporte, desde la perspectiva de las Ciencias del Deporte También, como es lógico, las Ciencias del Deporte y las instituciones y organismos relacionados con él, han pretendido asumir la tarea de definirlo. En este sentido, Paredes (2002) cita la definición de (B.I.D.I) “Bureau International de Documentatión et d´Informatión” del Consejo Internacional de Educación Física y Deporte de la UNESCO y afirma que es una “actividad humana significante que se manifiesta y se concreta en la práctica de ejercicios, bajo forma de competición”. Otra definición alternativa se ofrecía en la Carta Europea del Deporte, publicada en mayo de 1992: “Todo tipo de actividades físicas que mediante una participación organizada o de otro tipo tengan por finalidad la expresión o mejora de la condición física y psíquica, el desarrollo de relaciones sociales y el logro de resultados en competiciones de todos los niveles”. Por su parte, González Lozano (2001) (en Garay y Hernández, 2005) ofrecen un conjunto de características distintivas del deporte, tratando de acotar y delimitar su complejidad polisémicas: x Actividad con finalidad explícita: el triunfo o la victoria. x Requiere de preparación y entrenamiento, lo que facilita el objetivo del triunfo. 22 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico x Tiene reglas rígidas y obligatorias que dan estructura a cada modalidad deportiva determinada. x La competición es su esencia. x El esfuerzo a realizar es muy elevado. x En algunos contextos o escenarios puede considerarse como actividad lúdica, pero también puede considerarse como una actividad laboral, altamente especializada. x Los materiales necesarios son específicos de cada deporte y deben cumplir una normativa relativa a sus características físicas. x El elemento económico está presente: se consume deporte y el deporte profesional mueve grandes sumas de dinero. Este repaso analítico realizado sobre el concepto y el dominio del deporte muestra la dificultad práctica de esta tarea, probablemente intrínseca al propio objeto de análisis, debido a su estructura multiforme y a su polisemia en los distintos contextos culturales. Sin embargo, es necesario continuar con esta labor, teniendo en cuenta, su posición nuclear en esta investigación y para esto, conviene trasladar el foco del análisis hacia otras líneas de proyección. En este sentido, se acudirá a la exploración de la vía histórica, ya que como en muchas otras ocasiones han demostrado las Ciencias Sociales, los fenómenos estudiados en el presente pueden ser explicados o, por lo menos comprendidos, por lo que sucedió con ellos en el pasado, cómo u cuáles fueron los motivos de su génesis y cuál ha sido su proceso y trayecto evolutivo. 2.1.1 Los deportes en la Inglaterra del siglo XVIII y los factores socioculturales que promovieron su transformación al sistema deportivo moderno. Constituye un consenso en el ámbito académico e investigador, prácticamente general, la certeza de que el deporte -­o, el “juego deportivo”, o el “predeporte”, o el “protodeporte”, o el “paradeporte”, o cualesquiera de los términos que se elijan para denominar un fenómeno con características Ricardo Leiva Román 23 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico esenciales y básicas, similares a las de nuestro actual “deporte”-­ nació y se fue desarrollando en las civilizaciones “prístinas”, tal y como han afirmado reconocidos miembros de la comunidad científica, como el historiador del deporte Mandell (1986) o los antropólogos del deporte Blanchard y Cheska (1986). Ahora bien, también es cierto, indudablemente, que la forma actual de nuestro sistema deportivo y de la mayor parte de nuestros deportes contemporáneos, pero tradicionales, puede adscribirse a un momento histórico concreto, en un espacio geográfico particular y en unas condiciones contextuales de índole sociocultural, novedosas y que se producían por primera vez en la historia de la Humanidad. Ni que decir tiene, que desarrollar un proceso argumentativo con el fin de interpretar o explicar el conjunto de procesos evolutivos que iniciaron un fenómeno de tanta complejidad como el deporte, incrustado en un contexto histórico y social, a su vez, tan complejo como el apuntado anteriormente, resultaría, necesariamente, con una extensión que desbordaría los límites de este trabajo de investigación y que tampoco es el objeto del mismo. Es más, por sí mismo ya tendría el interés científico y la profundidad apropiada para convertirse en el objetivo principal de una tesis como tal. Ahora bien, dicho esto, es posible definir y detallar, de manera sucinta, pero con suficiente rigor, cuáles han sido los factores principales de este proceso, tanto los que pueden considerarse como desencadenantes del mismo, como los que se han mostrado como coadyuvantes o sinérgicos, cuya actividad ha sido la de potenciar y redirigir a los promotores principales del mismo. También resultará pertinente indicar cuáles fueron las consecuencias fundamentales y los resultados de éstos, que acabaron extendiéndose hasta nuestra época. Con relación a lo apuntado anteriormente, historiadores del deporte, como Mandell (1986) y Salvador (2004), coinciden en el grupo principal de causas y de consecuencias, aunque difieren en algunos aspectos, tales como la categorización de determinados factores como desencadenantes primigenios o, por el contrario, como sinérgicos o coadyuvantes, lo que en el fondo, es una cierta discrepancia en términos de relaciones causa -­efecto, pero el conjunto global de la argumentación contiene más motivos de coincidencia que de diferencia. Por lo tanto, no sería acientífico asegurar que, para estos autores, 24 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico los factores socioculturales determinantes en el proceso de transformación de las formas deportivas antiguas, que se inició en Inglaterra entre los siglos XVII – XVIII, y, ya de un modo generalizado, e incluso, masivo, en el siglo XIX y que explican en gran medida nuestro modelo de sistema deportivo actual, fueron los siguientes, según Mandell (1986) y Salvador (2004): x El desarrollo de carácter tecnoeconómico, fundamentalmente en el campo del dominio de nuevas fuentes de energía, promovido por el desarrollo tecnológico en el ámbito de la maquinaría y sus aplicaciones en la agricultura y la industria, lo que se ha dado en llamar la Revolución Industrial. Esta estructura tecnoeconómica “de base” trajo, como marco imprescindible para su estabilidad de funcionamiento y su retroalimentación, una estructura socioeconómica llamada capitalista. x Esta novedosa estructura socioeconómica capitalista, o de mercado, supuso una importante modificación de la estructura “intermedia”, por un lado, con el nacimiento y rápido crecimiento de una nueva clase social: la burguesía, que desarrolló una ideología política y económica propia: el Liberalismo y que construyó un modelo de Estado y de gobierno a la medida de las necesidades de la su estructura socioeconómica, con la que, evidentemente, se veían favorecidos sus intereses: la Democracia Representativa Parlamentaria. x El Estado moderno, capitalista y parlamentario, emergido de la presión de la burguesía, se atribuyó el monopolio de la violencia. En este contexto sociohistórico surgió el deporte moderno, como acomodación de los otrora violentos sports populares ingleses al nuevo ordenamiento jurídico, político y moral. x Por otra parte, la preeminencia de un individualismo ontológico como sustrato filosófico -­ ideológico, fomentaba la creencia en el propio potencial y en el trabajo y esfuerzo para plasmarlo, como medio de obtener logros elevados, pero alcanzables, por medio de esta actitud, incluido, por supuesto, las capacidades potenciales para el rendimiento motor y para sus expresiones específicas, tales como los juegos y los deportes. Ricardo Leiva Román 25 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico x Unas posibilidades -­siempre tomándolo como un criterio relativo, pero más reales que en otros lugares-­ de “movilidad social”. x Unas, moderadamente, mejores condiciones de vida de las clases trabajadoras, frente a las de sus coetáneos del continente. x Un progresivo incremento del mundo de las apuestas, y no de las apuestas rituales o propias de los mecanismos de redistribución, sino producto del estudio e intento de control y predicción sobre variables medibles y cuantificables. Esto potenció la idea de una real rentabilidad económica de las actividades deportivas, generando un poderoso motivo para su promoción. Es importante destacar esto porque es una de las consecuencias directas del desarrollo tecnológico, en el sentido de que, estas actividades y las características de las mismas se vieron favorecidas, por ejemplo, por el incremento en la fiabilidad y precisión de los instrumentos de medición, tanto del tiempo, como de las distancias y consecuencia de esto. Los resultados de las pruebas atléticas o de otras modalidades deportivas pudieron ser rigurosamente estandarizados y objetivados, a la vez que, se incrementó enormemente la fiabilidad contrastable de los mismos, con la lógica disminución de suspicacias o dudas sobre los mismos y el incremento de su reconocimiento pleno y generalizado. x Otra consecuencia de gran importancia y calado, sobre todo por las derivaciones que trajo consigo, no ya para el deporte inglés, sino como se mencionará más adelante, en los posteriores procesos de difusión de este modelo deportivo en otros contextos sociales, entre otras cosas porque ello está plenamente relacionado con el contenido y objetivos de esta investigación, al igual que en el continente, es que en Inglaterra surge una figura fundamental en la pedagogía física: Thomas Arnold, que para tratar de reconducir la creciente falta de comportamiento moral que mostraban los alumnos de las instituciones educativas de la nobleza y la burguesía -­Eton, Harrow, Rugby, etc.-­. Fue quien introdujo las prácticas físico-­deportivas en las actividades educativas cotidianas de los mismos. 26 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico x Para tal fin, Arnold no desarrolló sistema gimnástico alguno, sino que tomó las prácticas deportivas existentes ya en su época y las introdujo en el ámbito educativo. Ahora bien, para obtener el resultado educativo deseado, no las orienta al ejercicio de la disciplina y la autoridad, lo que hace es impulsar a los alumnos a que sean ellos los que se organicen, establezcan las normas y las hagan cumplir. Por este motivo, se considera a Arnold como el iniciador de los métodos pedagógicos socializadores, de autogobierno o autoenseñanza. Fue Arnold y el éxito de su método educativo los que influyeron decisivamente en Pierre de Fredy, Barón de Coubertin y en su ideario olímpico: el Olimpismo. Todos estos factores de orden sociocultural, que pueden ser calificados como causales, se explicitaron a modo de consecuencias, en un conjunto de elementos característicos y peculiares, producto de la conjunción de los mencionados factores con las actividades deportivas existentes en Inglaterra, en la época a la que se hace referencia, que no eran muy distintas de las que se practicaban en otras Naciones o Estados de componente cultural similar. Sin embargo, como resultado de este contexto específico, produjeron las mencionadas características novedosas y peculiares, siendo éstas, la base sustancial de las que en la actualidad reconocemos como totalmente familiares, integradas plenamente en nuestra concepción cultural del deporte, que nos sirven como línea de referencia para que, en una actitud comparativa, diferenciemos nuestro fenómeno deportivo actual de otras realidades culturales y de las prácticas deportivas que se desarrollaron en otras épocas históricas, incluso en nuestra propia cultura y que, en definitiva, calificamos y distinguimos como propias de nuestro sistema deportivo contemporáneo. En un repaso necesariamente somero de estas características, expuestas por Mandell (1986) y Salvador (2004), se podría apuntar las siguientes, como más distintivas: x Innumerables pruebas y modalidades deportivas, por ejemplo, en el atletismo: el salto de longitud, el triple salto, las carreras de vallas, de obstáculos, etc., como resultado de procesos de estandarización. Ricardo Leiva Román 27 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico x Las normas y reglamentos de la gran mayoría de los deportes contemporáneos: fútbol, rugby, hockey hierba, tenis, polo, etc. x Materiales deportivos, de juego y medida: las embarcaciones olímpicas de remo y deportivas de vela, los guantes de boxeo, las porterías de fútbol y rugby, los cronómetros de precisión, etc. x El concepto de ventaja (hándicap) con el fin de aumentar la emoción al incrementar la incertidumbre del resultado y, por lo tanto, el atractivo para el espectáculo y para la generalización de las apuestas, lo que influyó determinantemente en una vía de profesionalización del deporte. x El concepto de récord, consecuencia de la aplicación al deporte de criterios de cuantificación, progresivamente presentes en el conjunto de los procesos generales socioculturales de la época. x En términos más difíciles de objetivar por ser elementos conceptuales, por un lado, la asunción de la conveniencia de someter los intereses individuales al objetivo colectivo: el trabajo de equipo y, por otro, el entender las ventajas de planificar actividades con resultados a largo plazo: el entrenamiento deportivo. Parece que es indudable el afirmar que este conjunto de características del deporte, que fueron el resultado de un proceso evolutivo particular, en un contexto sociocultural concreto, son fácilmente reconocibles en nuestro modelo deportivo actual. En este sentido, y para continuar con la línea argumentativa, debe mostrarse cómo se produjo el proceso de “contagio” o, utilizando terminología propia de la ciencia antropológica, de “difusión” y/o aculturación, que extendió progresivamente este fenómeno, históricamente y geográficamente particular, prácticamente a todo el orbe mundial. 28 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico 2.1.2 Procesos de estandarización y difusión del sistema deportivo moderno. Realizando una síntesis de las líneas de argumentación desarrolladas por Mandell (1986) y Salvador (2004), se puede plantear una estrategia explicativa sobre el proceso general de extensión del modelo deportivo inglés -­británico, en un sentido político, que no cultural, más preciso-­ que se desarrollo, aproximadamente y grosso modo, durante unos doscientos años. Para esto, será imprescindible interpretar los resultados de las combinaciones de factores de dos clases o tipos fundamentales: por un lado, factores de orden predominantemente sociopolítico y/o de orden predominantemente socioeconómico, que indujeron a dos clases de procesos de carácter sociocultural o de la recombinación de ambos: procesos de aculturación y /o procesos de difusión o préstamo. Con relación a estos dos conceptos teóricos que hacen referencia a procesos generales de tipo sociocultural, convendría exponerlos brevemente para aclarar su significado: x Según el Diccionario Akal de Etnología y Antropología (2005) el término aculturación hace referencia a los procesos complejos por medio de los cuales, sociedades o grupos sociales reciben como imposición rasgos o conjuntos de rasgos culturales de otras sociedades. Los procesos de aculturación corresponderían a la dominación cultural que una cultura impone sobre otra u otras. La aculturación nunca es el rasgo único de tal dominación. Por el contrario, generalmente es la extensión de esa relación de dominación-­
dependencia: en el ámbito político, económico, militar, etc. x Según Harris (2004) el significado del concepto difusión corresponde a la trasmisión de rasgos culturales de una cultura o sociedad a otra. En este caso, a diferencia de la aculturación, la asimilación del rasgo o conjuntos de rasgos se produce en una relación globalmente equilibrada y no de dominación / dependencia. Ricardo Leiva Román 29 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Desde esta línea argumentativa, utilizando los elementos con capacidad explicativa -­factores funcionales y procesos-­ es posible señalar la descripción de los diferentes vectores de expansión del modelo deportivo inglés y estos serían, principalmente, tres: A. Un primer vector de expansión que se constituye a partir de los procesos generales de colonización, principalmente, en África, en los territorios centrales y meridionales del continente;; en Asia, fundamentalmente en la India y, por último, en Oceanía, concretamente, en Australia y Nueva Zelanda. En este caso, el proceso principal de implantación de los deportes ingleses habría que atribuírselo a la aculturación. La dominación hegemónica contribuyó a promover una asimilación forzosa de distintos rasgos culturales, siendo el deporte, una parte importante de los mismos. Los altos funcionarios y los militares trasladados a esas latitudes llevaron consigo los sistemas culturales, con el deporte como uno de sus rasgos distintivos principales, teniendo en cuenta que esos mismos funcionarios y militares procedían de los publics schools de los collages y de las universidades, donde se habían generalizado los métodos pedagógicos de Thomas Arnold, en los que el deporte era un elemento central e indispensable. Por otra parte, esta situación se vio favorecida y reforzada por la forma de gobierno elegida por el Imperio para sus colonias: el Indirect Rule o gobierno “indirecto”. En esta fórmula de gobierno, la administración colonial elegía, atendiendo a sus intereses, por supuesto, a un grupo social autóctono y a éste le responsabilizaba de las acciones ejecutivas de gobierno, como representante legítimo del Imperio. Los miembros de esos grupos obtenían por esa labor innumerables privilegios frente a sus sometidos paisanos y, a la vez, inmersos como estaban en una situación de dominación hegemónica directa, trataban de parecerse en todo lo posible a sus “patrones”, adoptando muchas de sus costumbres, incluidas las prácticas deportivas de estos. 30 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica B. El siguiente vector correspondería Perfil del Deportista Olímpico al norte de América, fundamentalmente, a los Estados Unidos de América, pero también a Canadá. Este caso sería fácil de atribuir causalmente, también, a la aculturación, por el pasado histórico de los dos Estados como colonias del Imperio británico. Sin embargo, esta condición cambia temporalmente, antes de que realmente se produzca la “revolución” en las características del sistema deportivo inglés. Por lo tanto, no es posible asociar, por lo menos exclusivamente a un proceso de aculturación, la extensión las forma deportivas inglesas en los Estados de Estados Unidos de América y de Canadá;; por un lado, la situación de aculturación permitió y posibilitó la implantación de modalidades deportivas que procedían de la metrópoli, ya con ciertas características evolucionadas. En ese proceso sociocultural se intercala el proceso sociopolítico de la independización de las dos naciones, pero pese a ello, los dos nuevos Estados, los Estados Unidos de América con mayor claridad, ya que Canadá tenía también una relación sociocultural muy intensa con Francia, nunca rompen totalmente con el imperio colonial, situación que se mantiene hasta hoy en día, y sobre todo, en términos culturales, lo que, con toda seguridad, mantuvo -­e incluso, al haber desaparecido la situación de dominación política y económica del Imperio sobre la colonia, es muy posible que en esta cierta relación, ya de igualdad, es posible que no solo se mantuviera, sino que se incrementara– el proceso de difusión cultural, por lo menos al principio, en el sentido de Inglaterra hacia las excolonias, incluyendo, sin ninguna duda, al deporte como uno de los elementos culturales de primer orden en el mismo. Por lo tanto, las características esenciales y básicas del original sistema deportivo inglés se fueron instalando progresivamente e integrando en el sistema sociocultural estadounidense y asentándose definitivamente, pese a que también se dieran situaciones de invención original y modificaciones significativas, tales como, nuevas especialidades deportivas: el béisbol, el fútbol americano, el baloncesto y el balonvolea, y sobre todo, y muy importante para el futuro del sistema deportivo mundial, el rápido y muy Ricardo Leiva Román 31 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico intenso proceso de profesionalización, factor que fue una invención independiente del deporte estadounidense y que durante una época importante chocó con la conceptualización del “amateurismo”, típicamente inglés. Con posterioridad y relacionado con los procesos históricos generales de extensión mundial, los propios Estados Unidos de América, sobre todo después de la 2ª Guerra Mundial, se convirtieron en la máxima potencia planetaria, e implantaron, principalmente por medio de procesos de aculturación, los rasgos principales de su propio sistema cultural, incluyendo el deporte, pero éste, a su vez, y como ya se ha comentado anteriormente, contaba con una esencia básica y originaria, en lo fundamental, de procedencia inglesa. C. El último vector que es posible apuntar en este proceso de extensión o mundialización del sistema deportivo inglés, que además supuso una estandarización uniformadora de las prácticas deportivas, con mayor o menor resistencia, fueron los procesos de difusión del sistema deportivo inglés en algunos países de Europa. En este caso, no se puede hablar de aculturación porque no se produjo una situación de dominación directa como las anteriores, lo que sí se produjo fue una situación similar, no completamente paralela por su desarrollo más tardío, de proceso evolutivo de carácter socioeconómico, con la implantación y extensión de la industrialización y los cambios en la estructura social asociados a este proceso, similares a los que se dieron en Inglaterra en los siglos XVIII y XIX, aunque como ya se ha mencionado, de forma más irregular y tardía. Para abundar en la argumentación, hay que añadir a este contexto socioeconómico y socioestructural, una diferencia importante de orden sociocultural: en Europa, ya existía un potente y muy institucionalizado sistema cultural, en relación a las actividades, prácticas y pedagogías físicas, que había tomado formas diversas en función de la diversidad de las Naciones que las habían integrado: los sistemas gimnásticos centroeuropeos, del norte de Europa y el particular sistema francés. Sin 32 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico embargo, esta circunstancia no impidió que los contactos permanentes que existieron, principalmente, entre las clases sociales aristocráticas y burguesas, produjera un proceso de difusión, lento y con resistencias, pero progresivo e imparable, que fue integrando los elementos fundamentales del sistema deportivo inglés, en las prácticas deportivas de las clases sociales mencionadas más arriba, probablemente, por la asociación de este tipo de formas deportivas, integradas con un éxito indudable en el sistema educativo, y la potencia, expansión y, en definitiva, triunfo como Estado, que el Imperio Británico mostraba al mundo en esa época. Ejemplo paradigmático de esto, fue la influencia que ejerció en Pierre de Fredy, Barón de Coubertin y su creación del Olimpismo, algo que reconocía él mismo permanentemente. Esta exposición de los factores de carácter sociocultural, en una perspectiva diacrónica de cambio, se considera que explica, o por lo menos, interpreta, las fuerzas que impulsaron el sistema deportivo inglés que, fundamentalmente, es nuestro sistema deportivo contemporáneo, por lo menos, con relación a una faceta principal del mismo y que, en su expresión particular en un Estado concreto: en nuestra Nación, España, corresponde a los objetivos generales y específicos de esta investigación: el Olimpismo moderno y los Juegos Olímpicos y la historia de nuestra participación en los mismos, siendo este fenómeno particular del sistema deportivo actual, lo que se va a analizar a continuación de manera precisa y rigurosa. 2.2 Nacimiento y evolución del Olimpismo. 2.2.1 Pierre de Fredi, Barón de Coubertin: inventor del Olimpismo moderno. Pierre de Fredy, Barón de Coubertin. Nacido el 1 de enero de 1863, dentro del seno de una familia acomodada y noble de ascendencia italiana, cuyos antepasados se remontan a un primer Fredy conocido, que sirvió al Rey francés Luis XI, quien le otorgó título nobiliario en 1471. Uno de los Fredy adquiere en 1567, el Señorío de Coubertin cerca de París, acogiendo el nombre que con posterioridad adoptará la familia. Pierre estudiará en París, en Ricardo Leiva Román 33 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico la Escuela Primaria, y posteriormente en la Universidad de Ciencias Políticas (Durántez, 2009;; Garcés, 2003). Coubertin siempre tuvo un sentimiento especial por la pedagogía a la que dedicó su vida. Su padre quería que fuese militar, pero su temperamento sensible chocó con la dura disciplina de la Academia Militar Saint-­Cry, por lo que colgó las armas de improviso, para dedicarse la pedagogía de pleno, donde realmente se siente realizado por sus ideales. “He decidido -­decía-­ cambiar bruscamente mi carrera en el deseo de unir mi nombre al de una gran reforma pedagógica (…), ya que lo más importante en la vida de los pueblos modernos es la educación (…). La educación que ha de ser el prefacio de la vida (…) y lo que así expreso, en el resultado de las observaciones adquiridas en mis viajes por los Estados de Europa y América del Norte, donde he podido constatar la existencia de grandes corrientes de reforma pedagógica, independientes de los sistemas gubernamentales e incluso superiores a las mismas tradiciones nacionales” (Durántez, 2009). Como gran político que era, intenta aprovechar la política para cambiar toda la sociedad, que él veía perdida y desorientada. Con el paso del tiempo, observa que no puede cambiar por este camino político, los aspectos sociales que él hubiera deseado, y es en este punto cuando piensa en la educación como forma de cambio de una sociedad que se encontraba ceñida en la oscuridad. Pierre de Coubertin estaba convencido de que a través de la educación se puede cambiar la sociedad. Él ya expresaba que “ninguna reforma de orden político, económico o social, podrá ser fecunda sin la reforma previa de la pedagogía” (Coubertin, 1890). En esta visión pedagógica, Pierre de Coubertin estuvo muy influido por Comte y especialmente por Thomas Arnold, encargado de una reforma educativa de similar grandeza en el Reino Unido, y que Coubertin tomó como referente. Como Comte, buscando las claves de la paz social y del orden en una sociedad que él veía desorientada como ya hemos comentado, Coubertin trató de individuar las causas que estaban al origen de la gran expansión colonial inglesa y de su afortunada paz social, llegando a la conclusión de que la educación deportiva y las característica que se han derivado de la misma, de 34 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico la elite del Reino Unido, habían sido un factor de vital importancia en el éxito de la empresa colonial inglés. Como el mismo expresaba: “a los méritos de esta educación hay que atribuir en gran parte la enorme expansión del reino británico y el desarrollo de la potencia inglesa en la época victoriana” (Garcés, 2003). Y así lo interpretó Coubertin en su Ideario Olímpico (p. 25) “En general la mayoría de las grandes cuestiones nacionales se reducen a una sola cuestión educacional, sobre todo en los países democráticos. Es necesario buscar siempre en la escuela y en la universidad el secreto de la grandeza o decadencia de una democracia. Un hombre convencido de esta verdad debería pensar de modo natural que introducir en la vida escolar un poco de esa vitalidad física, de esa energía animal, cuyos beneficios han experimentado nuestros vecinos, sería igualmente bueno para Francia”. El deporte de élite, disciplinado, democrático y espectacular responde a las necesidades espirituales y míticas de una sociedad en rápidas vías de industrialización. El deporte moderno podría haber alcanzado el status internacional mucho antes si se hubieran multiplicado las reuniones masivas, con o sin el nombre de “Juegos Olímpicos”. Pero la forma regular adoptada por las manifestaciones cumbre del deporte moderno se debe a esta visión y tenacidad de Pierre de Coubertin. Está reforma educativa, está completamente relacionada con las publics schools de la élite inglesa. Sobre los años 1850, se produce la reforma escolar de la élite británica. Thomas Arnold, autor de la reforma pedagógica británica, explica la situación que el encontró en el Rugby, pero que era común a todas las escuelas públicas: “lugares donde reinan toda clase de vicios y borracheras, donde se usa generalmente la mentira ampliamente tolerada, la crueldad sistemática, el espíritu de rebelión, el gusto por quebrantar las reglas en cuanto tales, espíritu de cuerpo para hacer el mal” (Zentner, 1935). Ante esto, Arnold no intentó modificar este espíritu de violencia, sino que lo funcionalizó. Y el precio pagado por Arnold para conseguir esto fue la tolerancia. Usó tolerancia sólo en relación con las estructuras jerárquicas, carentes de espíritu de solidaridad (Garcés, R. 2003). “Una Public School no Ricardo Leiva Román 35 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico será jamás la que podría y debería ser si no aprende que el primer deber de un maestro es dejar que se pierdan los irrecuperables. Expulsar a uno de estos no significa castigar al individuo singular, sino tutelar al resto. Existiría sin duda un sistema mejor: que el mal no existiera, pero dado que el mal es inevitable, nosotros no trabajamos en una prisión donde se encierra al culpable, sino en un centro educativo del cual debemos expulsarlo, para evitar la contaminación” (Arnold, en Zentner, 1935). Arnold asignó una función al deporte estudiantil, dándole una salida con la institucionalización de las competiciones entre los estudiantes. Con la introducción de la competición reglada se institucionalizaron criterios de legitimidad aparentemente objetivos a favor de estructuras jerárquicas de poder. Y es esto lo que Coubertin toma de Arnold, el deporte como medio de educación social. La evolución de la enseñanza superior ingles le sirvió a Coubertin de modelo para su estrategia disciplinadora de la sociedad. Pierre entendió la afinidad del deporte con la mentalidad tecnocrática y en febrero de 1914 escribía de Arnold en los siguientes términos: "fue un inglés que en la mitad del siglo XIX se hizo benemérito de la humanidad. Nadie antes de él había pensado en buscar en el deporte la principal fuerza motriz de la educación viril. Fue el primero en creer que podía formar con él al hombre y al ciudadano no sólo físicamente sino también moral y socialmente. Se sirvió del deporte como del factor más eficaz y seguro para el perfeccionamiento tanto físico como espiritual sobre el cual se puede contar en vista al desarrollo de los jóvenes” (Citado en Zentner, 1935). A partir de aquí donde Coubertin se convence de que a través del deporte puede cambiar la educación, y a través de la educación, la sociedad. A partir de 1889, Coubertin dedicó toda su energía y medios económicos a la tarea de organizar el deporte en Francia. Y no tardó en llegar a la conclusión de que la práctica y los logros del deporte, en su variante anglosajona, solo atraían a unos pocos seguidores, mientras que el gusto por el lado festivo de las cosas era prácticamente universal. Coubertin vio que la ciencia, por ejemplo, estaba avanzando mucho, y gran parte de este avance era gracias a las exposiciones universales que se 36 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico llevaban a cabo en el mundo. Pensó que se podía realizar algo parecido con el deporte. Una exposición universal del deporte: Los Juegos Olímpicos. 2.2.2 Epistemología del Olimpismo El deporte, en general, y el Olimpismo en particular constituyen una de las fuerzas sociales más importantes y notorias de los siglos XX y XXI. Pero para poder entender un poco más todo aquello que rodea al Olimpismo moderno, debemos realizar una primera aproximación sobre lo que todo esto significa. Muchas veces, la confusión sobre alguno de estos aspectos provoca un uso incorrecto de toda la terminología relacionada especialmente con los Juegos Olímpicos. “Precisamente porque se habla mucho de Olimpismo, de Juegos Olímpicos, de Olimpiadas y, por consiguiente, de Deporte, habría que utilizar cada uno de estos términos con especial cuidado” (Poyán, 1990, p.49). El Olimpismo moderno, como ya hemos explicado, fue concebido por Pierre de Coubertin, a cuya iniciativa se reunió el Congreso Internacional Atlético de París en junio de 1894. La carta olímpica, dentro de sus principios fundamentales describe que “el olimpismo es una filosofía de la vida, que exalta y combina en un conjunto armónico las cualidades del cuerpo, la voluntad y el espíritu. Al asociar el deporte con la cultura y la formación, el Olimpismo se propone crear un estilo de vida basado en la alegría del esfuerzo, el valor educativo del buen ejemplo y el respeto por los principios éticos fundamentales universales” (Comité Olímpico Internacional, 2007). Es por ello que el objetivo del Olimpismo es poner siempre el deporte al servicio del desarrollo armónico del hombre, con el fin de favorecer el establecimiento de una sociedad pacifica y comprometida con el mantenimiento de la dignidad humana. Para ello, el Movimiento Olímpico lleva a cabo solo, o en cooperación con otros organismos y dentro de sus posibilidades, acciones a favor de la paz. Dice Coubertin: “Los juegos son la primavera cuatrienal de la juventud... de la mejor juventud del mundo, de 202 países con Comités Olímpicos Nacionales, (CON), que se dan cita en los juegos tengan o no atletas clasificados. No puede un CON no asistir solo con el pretexto que ninguno de sus atletas Ricardo Leiva Román 37 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico clasificó, en estos casos, el Comité Olímpico Internacional invita a cierto número de atletas y sus respectivos oficiales”. Porqué el objetivo final de los juegos, para su creador, no es determinar la excelencia física de unos sobre otros, sino reunir a la mejor juventud, de todos los rincones del mundo para que se conozcan, se comprendan, se toleren, y que con el tiempo, a través de estos jóvenes embajadores, se logre la paz mundial. Si alguien me pidiera la receta para “olimpizarse”-­ decía Coubertin en 1918-­ le diría: la primera condición es estar alegre. Y añade en su discurso de 1920;; “El día en que el deportista deje de considerar por encima de todo, la alegría de su propio esfuerzo y la embriaguez de poder y de equilibrio corporal que de él deriva, el día que se deje dominar por las consideraciones de vanidad o de interés, ese día su ideal se acabará y el valor pedagógico de este ideal, si se puede emplear esta expresión, disminuiría irremediablemente” (Pisani, 2008). En todo lo referente a los estudios olímpicos es normal encontrar declaraciones generales que resalta el valor propio del Olimpismo, como del que fuera presidente de la Academia Olímpica Internacional, el griego Nissiotis, quien declaró que: “el término Olimpismo debe ser interpretado como expresión de un complejo de ideas y de valores que se refieren al Movimiento Olímpico. El Olimpismo, la Ideología Olímpica, la Idea y los Ideales Olímpicos son todos términos sinónimos que designan los elementos positivos de una tradición moral espiritual que no puede convertirse en un sistema de valores con proposiciones exhaustivas referentes a la posible aplicación con una constancia severa y uniformidad en todos los lugares y en todos los tiempos. El Olimpismo representa una visión global del esfuerzo continuo del hombre en sobreponerse y superar el orden social existente hacia un objetivo siempre más elevado de dignidad humana” (Molina, 2011). Además es necesario tener claro que Olimpismo, Movimiento Olímpico y Juegos Olímpicos poseen conceptos y valores históricamente distintos. Si nos vamos a la Real Academia Española de la Lengua (RAE), define el Olimpismo como “conjunto de todo lo relativo a las olimpiadas”. Una definición que deja muy abierta el significado y sentido de la misma. Por ello, si nos referimos a la Carta Olímpica, y como ya comentamos anteriormente, se define Olimpismo 38 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico como una filosofía de vida, y se da una definición mucho más acotada del significado del mismo. Además, haciendo referencia nuevamente a la RAE, encontramos una contradicción si pasamos a analizar la palabra olimpiada, a la que la RAE otorga cuatro significados diferentes. Por un lado dice que se trata de “una competición universal de diversos deportes que se celebra modernamente cada cuatro años en un lugar previamente determinado” y por otro lado que es “un período de cuatro años comprendido entre dos celebraciones consecutivas de juegos olímpicos. Fue costumbre entre los griegos contar el tiempo por olimpiadas a partir del solsticio de verano del año 776 a.C, en que se fijó la primera”. Esta segunda definición haría referencia al verdadero significado del término “Olimpiada”, pero la primera de las definiciones no hace otra cosa que definir el término de “Juegos Olímpicos” y no el de Olimpiada, que sería exclusivamente para hacer referencia al tiempo entre Juegos Olímpicos. En la actualidad, es común escuchar y leer estos dos términos indistintamente, pero a esta situación se opuso Coubertin al explicar que una olimpiada es un intervalo del calendario: “Es, por tanto, incorrecto, histórica y gramaticalmente, hacer de la palabra Olimpiada el equivalente de los Juegos Olímpicos, y cuando dicen, como algunos lo hacen vulgarmente, “las Olimpiadas de Amsterdam”, nos estropean los oídos con un doble barbarismo” (Coubertin, 1973). Si hacemos referencia a la actual Carta Olímpica (CIO, 2011) con el término Olimpiada nos referimos a un periodo de cuatros años civiles consecutivos, iniciado a partir de los Juegos de Atenas 1896. La no celebración de los JJOO por ejemplo, no impide contabilizar el número de Olimpiadas. Mientras que los Juegos Olímpicos son definidos por la Carta Olímpico como “competiciones entre atletas, en pruebas individuales o por equipos, y no entre países. Reúnen a atletas seleccionados por sus respectivos CON, cuyas inscripciones han sido aceptadas por el COI. Los atletas compiten bajo la dirección técnica de las Federaciones Internaciones correspondientes. Los Juegos Olímpicos se componen de los Juegos de la Olimpiada y de los Juegos Olímpicos de Invierno” (CIO, 2011). Ricardo Leiva Román 39 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Por otro lado, el Movimiento Olímpico abarca a las organizaciones, deportistas y demás personas que se ajusten a la Carta Olímpica. El objetivo del Movimiento Olímpico es contribuir a la construcción de un mundo mejor y más pacífico, educando a la juventud a través de una práctica deportiva conforme con el Olimpismo y sus valores, como bien indica la Carta Olímpica en su contenido. 2.2.3 Constitución, evolución y estructura actual del Comité Olímpico Internacional. A finales de 1892 se celebra en París la asamblea de la Union des societes françaises des sports athlétiques con la asistencia de celebridades en el mundo de la política y las letras. En su discurso de clausura, Coubertin lanzó la propuesta de restablecer los Juegos Olímpicos, adaptándolos a la vida moderna. Fue muy aplaudido en su idea, pero a la vez incomprendido y finalmente, su inicial e ilusionado intento, fracasó 1. Coubertin, que se sentía muy desalentado frente a la actitud de los organizadores de la Exposición de París, que se negaron a realizar allí esa primera exposición universal del deporte, no dudó en aceptar la propuesta del delegado de Grecia, Dimitrios Bikelas, para que Atenas fuera la primera sede de los Juegos Olímpicos Modernos (Mandell, 1986: 205-­225). Los preparativos empezaron sin tardanza, pero la monarquía reinante estaba en crisis, razón por la que el primer ministro heleno notificó que los Juegos no podrían celebrarse allí, porque no había fondos suficientes para ello. Entonces, Coubertin se trasladó a Atenas, donde convenció al monarca y a sus hermanos de que tomasen las riendas del proyecto olímpico. Se lograron importantes contribuciones de los griegos ricos residentes en el extranjero, una de ellas considerable para restaurar el estadio de Herodes con mármol blanco de Pentelí. También la emisión de sellos de correos fue un éxito. 1
Su propia nación, no acabo de apoyar su idea. Por ello tuvo que contar con el apoyo de Grecia en su idea de restaurar los Juegos Olímpicos en la época moderna. 40 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Los organizadores de Atenas, sorprendidos por el éxito de la financiación del proyecto, accedieron a las pretensiones de Coubertin, acordando la celebración de la ceremonia de inauguración, así como la de clausura 2. La población local estaba entusiasmada ante tal evento. Como era de esperar los participantes fueron en su mayoría griegos, aunque fueron los alemanes los que vencieron en casi todas las pruebas. A partir de aquí, los griegos, ante el éxito cosechado, pretendieron que se celebraran allí los sucesivos JJOO, a lo que Coubertin se opuso. “No hace falta recordar que los Juegos Olímpicos no son propiedad de ningún país, ni de ninguna raza en concreto y que no puede ser monopolizados por ningún grupo. Son mundiales. Todos los pueblos deber ser admitidos en ellos sin discusión y todos los deportes deben ser tratados en pie de igualdad, sin preocuparse por las fluctuaciones o los caprichos de la opinión” (Coubertin, 1925). Y así, nace el Olimpismo moderno. Para Coubertin, “El Olimpismo no es un sistema sino un estado de espíritu imbuido de un doble culto, el del esfuerzo y de la euritmia;; la pasión por el exceso y la medida combinados. Es una gran maquinaria silenciosa, cuyas ruedas no rechinan y cuyo movimiento no cesa nunca, a pesar de los puñados de arena que algunos lanzan contra ella, con tanta perseverancia como falta de éxito, para trata de impedir su funcionamiento” (Durántez 2009:89). Así pues, después del fracaso en la reunión en el Claustro Universitario de la parisina Sorbona, dos años más tarde, el 23 de junio de 1894, en la misma sala y lugar, Coubertin logra al fin su empeño, aprobándose por decisión unánime de los asistentes el restablecimiento de los Juegos Olímpicos (Durántez Olimpia: 358-­359). Así se crea la composición del Comité Olímpico Internacional, creado a su instancia, para regir y dirigir los destinos del olimpismo renovado. Se integró por una lista de once miembros además del propio Coubertin, elegidos y seleccionados por aquél en razón a la personal 2
La idea de Coubertin era realizar todo tipo de concierto, espectáculos durante los Juegos Olímpicos. Esto no pudo llevarse a cabo. Aún así, fueron un éxito, y recibió el apoyo del público local con entusiasmo y aceptación. Ricardo Leiva Román 41 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico amistad e influencia en sus respectivos países. El histórico grupo se compuso por: Bikelas (Grecia), Callot (Francia), Sloane (Estados Unidos), Jiri Guth (Bohemia), Fr Kémeny (Hungría), C Herbert y Lord Amphill (Inglaterra), Zubiaur (Argentina) L. A. Cuff (Nueva Zelanda), Luchesi Palli (Italia) y Max de Bousies (Bélgica). La convocatoria desarrolló y éxito de los Juegos Olímpicos de Atenas en 1896, primeros de la era moderna, motivan poderosamente a Coubertin para dedicarse en totalidad vital a la ordenación, estructuración e impulso de la colosal empresa. Su primera medida es la de ampliar el grupo de miembros del Comité Olímpico Internacional que en razón a su meditada y calculada influencia social pudiera ser decisivos valedores de su idea en los respectivos países. De ahí que por esta razón al finalizar los Juegos de Atenas, el número de miembros del COI había aumentado ya a 16 cuando a nivel de asociacionismo deportivo solo existían tres Federaciones Internacionales y trece Comités Olímpicos Nacionales (Durántez y Español, 2003:18). El Comité Olímpico Internacional (COI) es la autoridad suprema del movimiento y posee todos los derechos relativos a los Juegos Olímpicos. Es una organización internacional no gubernamental sin fines lucrativos, de duración ilimitada, constituida como asociación dotada de personalidad jurídica, reconocida por el Consejo Federal Suizo, en virtud de un acuerdo fechado el 1 de noviembre de 2000 (Comité Olímpico Internacional, 2007). Su función principal es la de promover los ideales olímpicos. La Carta Olímpica define claramente la misión y las funciones específicas del COI. Algunas de las más importantes las vemos a continuación: x Estimular y apoyar la promoción ética en el deporte y la educación de la juventud a través del deporte, así como dedicar sus esfuerzos y velar para que se imponga el fair play y se excluya la violencia en el deporte. x Estimular y apoyar la organización, desarrollo y coordinación del deporte y de las competiciones deportivas. x Garantizar la celebración regular de los Juegos Olímpicos. 42 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico x Actuar con el objetivo de proteger y reforzar la unidad e independencia del Movimiento Olímpico. x Estimular y apoyar la promoción de las mujeres en el deporte. Así como oponerse a todo tipo de discriminación que afecte al Movimiento Olímpico. x Estimular y apoyar el desarrollo del deporte para todos, oponiéndose a todo abuso político o comercial del deporte y de los atletas. En cuanto a los miembros y la composición del COI, también nos referimos a la Carta Olímpica, para dar una serie de detalles importante sobre la misma. Los miembros del COI son personas físicas. Su número no puede exceder de 115. El COI se compone: ¾ De una mayoría de miembros cuya calidad como tales no está relacionada con una función o cargo específico, y su número no puede exceder de 70. ¾ De atletas en activo, cuyo número no puede exceder de 15. ¾ De presidente o dirigentes al más alto nivel de las Federaciones Internaciones, de las asociaciones de Federaciones Internacionales o de otras organizaciones reconocidas por el COI, cuyo número no puede exceder de 15. ¾ De presidentes o dirigentes al más alto nivel de los CON o de las asociaciones mundiales o continentales de CON, cuyo número no puede exceder de 15. Ricardo Leiva Román 43 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Figura 1. Estructura del CIO. Tomado de Mangan y Jinxia (2008). Dentro de toda esta estructura, la Carta Olímpica, en su capítulo II, que dedica al COI, define las principales características de la Sesión, de la comisión ejecutiva y del presidente. La Sesión en la asamblea general del los miembros del COI, se considera como el órgano supremo. Sus acuerdos son definitivos y suele tener lugar una vez al año. Las atribuciones de la Sesión son entre otros: adoptar o modificar la Carta Olímpica;; elegir a los miembros del COI;; elegir la ciudad sede de los Juegos Olímpicos y en definitiva resolver y determinar las demás cuestiones que le atribuye la ley y la ley y la Carta Olímpica. Por otro lado, la comisión ejecutiva del COI es responsable de la organización y preparación de todas las sesiones, incluyendo los aspectos financieros relacionados con las mismas. Esta comisión ejecutiva se compone del presidente, de cuatro vicepresidentes y de otros diez vocales. La comisión ejecutiva del COI asume la responsabilidad general de la administración del COI y la gestión de sus asuntos. En particular, desempeña las siguientes funciones: 44 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Vela por la observancia de la Carta Olímpica;; aprueba todas las disposiciones de dirección y gestión internas relativas a su organización;; presenta un informe anual que incluye las cuentas del año y lo somete a la Sesión, junto con el informe de los censores de cuentas;; somete a la sesión un informe sobre todas las propuestas de modificación de Normas o de textos de aplicación;; somete a la Sesión los nombres de las personas que recomienda para ser elegidas miembros del COI;; establece y supervisa el procedimiento de admisión y selección de las candidaturas a la organización de los Juegos Olímpicos;; adopta todas las decisiones y estipula, de la manera que estime más apropiada, los reglamentos del COI legalmente vinculantes, como por ejemplo códigos, reglamentos, normas, directrices, guías, manuales, instrucciones, condiciones, y demás decisiones, incluyendo pero no exclusivamente todas las disposiciones necesarias para la aplicación de la Cata Olímpica y de la organización de los Juegos Olímpicos. Por último, en lo referente al Presidente, la Sesión elige, entre sus miembros, al mismo, mediante voto secreto, para un periodo de ocho años, renovable una sola vez para otros cuatro años. El presidente puede tomar una iniciativa o adoptar una decisión en nombre del COI cuando las circunstancias no permiten que lo haga la Sesión o la comisión ejecutiva del COI. Tales iniciativas o decisiones deben someterse rápidamente a la ratificación del órgano competente. Además de estos altos cargos, se puede constituir comisiones del COI con el objeto de asesorar a la Sesión, a la comisión ejecutiva del COI y al presidente, según proceda. En la Carta Olímpica podemos encontrar las siguientes comisiones, cada una de las cuales, será presidida por un miembro del COI: ¾ Comisión de atletas del COI. ¾ Comisión de ética del COI. ¾ Comisión de nombramientos del COI. ¾ Comisión de Solidaridad Olímpica. Ricardo Leiva Román 45 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico ¾ Comisiones de evaluación de las ciudades candidatas. ¾ Comisiones de coordinación de los Juegos Olímpicos. ¾ Comisión médica del COI. Analizando brevemente la evolución del COI, durante la presidencia de Coubertin, el COI realizaba el reclutamiento entre hombres de influencia y relevancia social que a menudo pertenecían a familias de alto poder adquisitivo, y en muchos casos de familias nombres y reales. Para desterrar la postura crítica de anquilosamiento, el COI comenzó un proceso de elección entre personas independientes, deportistas, directivos o personas con una función ejecutiva o de liderazgo dentro de las federaciones internaciones y los CON. En la actualidad, los miembros del COI son elegidos para un mandato de ocho años, aunque puede ser reelegido para uno o más mandatos sucesivos siempre y cuando no alcancen la edad máxima de 70 años. Estas y otros aspectos quedan reflejados en la Carta Olímpica. Otro aspecto relevante es la representividad entre los miembros del COI en relación con el número de CON que lo componen. Más de la mitad de los 205 CON reconocidos, no tienen representividad en la Asamblea del COI. Figura 2. Distribución de los miembros del CIO y de la población mundial por continentes (CIO, s.f.;; ONU, 2009). 46 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico 2.2.4. Historia de los Juegos Olímpicos Modernos (1896-­2008). ATENAS, 1896 Los Juegos de la I Olimpiada supusieron el renacimiento del olimpismo, que tuvo una gran repercusión en la prensa de toda Europa pero no así en la prensa de nuestro país. En estos primeros Juegos Olímpicos se muestra todo su potencial. A Coubertín no le debió quedar ninguna duda de que la renovación de los Juegos Olímpicos era algo más que una feliz idea. Los Juegos de 1896 eran como un experimento, cuyos resultados fueron realmente satisfactorios, a pesar de los problemas previos para la organización de los mismos, que hubiera sido inviable sin la ayuda de importantes sumas de dinero debido a donaciones particulares, y principalmente la del multimillonario Georges Averoff, al que se le construyó una estatua por este motivo. En estos primeros Juegos Olímpicos, nos encontramos con 295 atletas, todo varones. De ellos 197 fueron de Grecia;; el segundo equipo, Alemania, tuvo solo 19 representantes. Asistieron Trece naciones diferentes, entre las que no se encontraba España. Y con sólo 43 pruebas en 9 deportes diferentes: Atletismo, ciclismo, esgrima, gimnasia, levantamiento de peso, tenis, lucha, natación y tiro (Rodriguez López, 2000). La organización de estos primeros Juegos fue todavía rudimentaria, pero a pesar de ellos consiguieron encarnar la idea original: hacer competir juntos atletas de diferentes países y centrar la atención del mundo sobre las competiciones. Un hecho sorprendente con la relación a los Juegos de la I Olimpiada es que en las lecturas sobre estos Juegos, y lo más importante, en el informe oficial, hay una manifiesta ausencia del nombre de Coubertín. No figura ni siquiera entre las personalidades a las que se le enviaron cartas de agradecimiento. Mayer calificó este hecho como un exceso de nacionalismo, sin duda, ante el éxito de los Juegos, del que intentaron apropiarse los dirigentes griegos (Mayer, 1964:29). Ricardo Leiva Román 47 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico PARÍS, 1900 Comenzamos por los Juegos Olímpicos de París, que para la posterioridad quedarán así: “La capital francesa fue el segundo escenario olímpico, aunque casi no merece el nombre de Olimpiada, pues ni fue convocada como tal ni se celebró como Coubertín la había planeado” (Rodríguez López, 2000). Esto fue debido principalmente a que Francia hizo coincidir los Juegos con la gran Exposición Universal celebrada a la vez en París. Pierre de Coubertin esperaba un nuevo éxito después de la gran entrada que tuvieron los anteriores Juegos Olímpicos en Atenas, pero nada iba a ser igual desde el principio. Los 21 países participantes, con un total de 1077 deportistas, en 17 deportes distintos, y la participación por primera vez de la mujer en deportes como golf y tenis, hacía presagiar un éxito, cosa que no pasaría. Desde el comienzo hubo una gran confusión en las pruebas y entre los organizadores. Muchos de los atletas ni llegaron a disputar sus pruebas, y otros muchos, no estaban seguros de haber participado en los Juegos Olímpicos, que fueron llamados Concours Internationaux d´Exercices Physiques et de Sports. Fueron incluidas dentro de la gran Exposición de París como una actividad más, que pasaba desapercibida como un pequeño pez, dentro de un gran mar. No hubo ni ceremonia de inauguración, ni de clausura, y sus resultados no fueron homologados oficialmente por primera y única vez en la historia. Pero tras este fracaso, Coubertín no se rindió, y no hizo otra cosa que en la sombra, comenzar a preparar los siguientes Juegos Olímpicos. En cuanto a España, encontramos los primeros deportistas nacionales participantes en unos Juegos Olímpicos. Además se consiguieron las primeras medallas, si bien una aún en nuestros días es discutida como la primera medalla olímpica, de Pedro Vidal, que consiguió el segundo puesto en tiro al pichón, pero que fue descartada debido a la profesionalización de la prueba, ya que ganó 5000 francos con la victoria. También se consiguió una medalla de Oro en pelota vasca, de la mano de Francisco Villota y José de Amezola. 48 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico La proximidad del país organizador animó a algunos de nuestros deportistas, pero el papel de España, tanto en los Juegos Olímpicos, como en la Exposición Universal seguía siendo muy pobre, como podemos observar en la cita crítica realizada por La Vanguardia con relación a la falta de presencia de expositores españoles en la Exposición Universal de París. “Doloroso es decirlo;; pero España hace tristísimo papel. ¿Acaso España no tiene más que lo que ha expuesto? No estamos muy quebrantados, pero no muertos;; vivimos, y podemos, haciendo un esfuerzo, volver a colocarnos en condiciones de prosperidad. Sin embargo, en la Exposición Universal parece que hemos querido demostrar que la decadencia es irremediable. No hay expositores españoles” (La Vanguardia, 1900). Esto mostraba las carencias de nuestro país en aquellos principios del siglo, y explica un poco el retraso que llevamos con el resto de países de la Europa occidental. SAN LUIS, 1904 Los Juegos Olímpicos de San Luis, en 1904. Esta tercera edición de los Juegos Olímpicos tuvo algunas similitudes con los de París. Por un lado, coincidieron nuevamente con la Exposición Universal, que restaba protagonismo a la competición Olímpica en sí. Por otro lado, esta coincidencia con la Exposición Universal hacía que los juegos Olímpicos se alargaran durante algunos meses al igual que en París, cosa no muy positiva desde el punto de vista del interés hacia la propia competición, que prolongaba demasiado, y no concentraba el espectáculo de los Juegos. La distancia con respecto a Europa fue una de las principales causas que incidieron sobre el descenso considerable en el número de participantes. Tan solo asistieron 554 deportistas en representación de 12 países. Los Países europeos que fueron representaron son: Alemania, Gran Bretaña (con un solo representante), Grecia, Hungría y Noruega. En muchas pruebas, tan solo participaron deportistas estadounidenses, en un programa formado por 15 deportes (COOB, 1992:117). Ricardo Leiva Román 49 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico La prensa española no publicó ninguna noticia referente a la celebración de estos Juegos, a los que España, no envió ninguna representación (Agulla, 1990). La situación de España en todos los ámbitos seguía siendo muy parecida, y el alto coste del viaje y del cruce del océano hacia un nuevo continente, cerró toda posibilidad de participación española en estos Juegos Olímpicos. Tal vez el punto triste de la Olimpiada fue la Anthropological Day, competiciones bufonescas de “atletas” para hacer reír a los espectadores a través de la discriminación entre razas y constituciones físicas. Fue necesaria toda la paciencia y la energía de Coubertín para que las Olimpiadas modernas no fuesen enterradas en San Louis (La Vanguardia, 23 de agosto de 1972). LONDRES, 1908 Posteriores a estos juegos de San Luis, nos encontramos con los Juegos Olímpicos de Londres, en 1908. Es a partir de este momento cuando se comienza a hablar de una consagración definitiva de los Juegos Olímpicos. En 1906 se celebran de manera no oficial unos Juegos Olímpicos en Atenas, pero no fueron aceptados por el Comité Olímpico Internacional de forma oficial, a pesar de celebrarse con todo su esplendor. Los de 1908 fueron ofrecidos a Roma, pero la erupción del Vesubio, problemas económicos y problemas sociales, le hicieron renunciar a estos juegos que pasan a Inglaterra como sede definitiva. Los Juegos se celebraron desde el 27 de abril al 31 de octubre. En ellos participan 2034 atletas de 22 naciones, siendo el número de deportes de 21, con un programa perfectamente detallado. Por primera vez participaron mujeres de manera oficial, 36 en total (COOB, 1992:121-­122). Aunque los deportes en los que participaron eran considerados de exhibición, por lo que su participación oficial deberá esperar hasta los Juegos Olímpicos de Ámsterdam, en 1928. 50 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico La prensa española escribió sobre los aspectos más relevantes de estos Juegos, a pesar de la no participación española en los mismos. El movimiento olímpico, de reconocimiento mundial en estos momentos, iba haciendo que la prensa no quisiera dejar pasar la oportunidad de mostrar la importancia de las mismas. La participación española, y la implicación española en el movimiento olímpico no se harían esperar. Con D. Gonzalo de Figueroa como miembro del COI, y su hermano nombrado nuevo Presidente, tras el asesinato de Canaletas, se crearía el Comité Olímpico Español con D. Gonzalo como presidente, y como el inicio del verdadero Olimpismo en nuestra nación. Los Juegos de Londres se caracterizan por una meticulosa organización. Por primera vez los participantes empezaban a representar a sus países. Estos Juegos Olímpicos constituyen un importante impulso para el movimiento olímpico. La existencia de un comité organizador preocupado de llevar a cabo un programa coherente, junto con el apoyo de las autoridades y el pueblo británico, fueron los dos pilares en los que se asentó el buen desarrollo de estos Juegos (Guillen, 2008). ESTOCOLMO, 1912 Estocolmo en el año 1912, que no hizo sino consolidar la consolidación de los Juegos Olímpicos Modernos. Se celebraron del 5 de mayo al 22 de julio, con una organización impecable, igual que en los Juegos Olímpicos anteriores, en Londres. Hubo 2504 deportistas, de las cuales 57 fueron mujeres, procedentes de 28 países de los cinco continentes. Todo esto hacia presagiar un éxito en los mismos. Algo había cambiado en el movimiento olímpico. La importancia de los Juegos y la implicación del mundo con los mismos estaban creciendo rápidamente. Lo más importante de todo fue la gran implicación del pueblo y gobierno suecos, que fue una de las claves. Previamente a los Juegos Olímpicos de Estocolmo surgieron los primeros problemas políticos de la historia del olimpismo, con relación a la participación de Bohemia, Finlandia y Hungría. Bohemia y Hungría pertenecían al Imperio Austro-­Húngaro, el Gran Ducado de Finlandia a la Rusia de los zares. El Ricardo Leiva Román 51 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico imperio Austro-­Húngaro y Rusia exigieron la exclusión de Bohemia, Finlandia y Hungría, proponiendo la inscripción de sus atletas bajo los colores de los países soberanos de los que efectivamente dependía. Sin embargo, Coubertin no aceptó estas presiones, motivadas por aspectos políticos, ya que el COI había predicado el apoliticismo. Era partidario, incluso, de admitir a Irlanda y a Polonia, si estas nacionalidades hubieran constituido un Comité Olímpico Nacional, condición que no se dio. Finlandia fue, además, uno de los países que mejores resultados obtuvo en los Juegos de Estocolmo, en 1912. El deporte se adelantó así a la política (Meyer, 1966:238-­239). Pero para el futuro del olimpismo moderno, lo realmente importante fue la consolidación que significó la celebración de estos Juegos Olímpicos. Cagigal afirmó que los Juegos de la V Olimpiada constituyeron, por su dimensión y su significado internacional, la consolidación definitiva del movimiento olímpico. (Mora, 1996:807) En España, la prensa mostraba un interés creciente por la incorporación al movimiento olímpico. Se solicitaba y se reclamaban cada vez con más fuerza la presencia de deportistas españoles. Este hecho podría hacer reflexionar al pueblo y al gobierno español sobre la importancia de un buen desarrollo de la cultura física y la necesidad de apoyar al deporte en general, y porque no decirlo, desde un punto de vista económico. Aunque la prensa era consciente de que este apoyo en este momento, no existía, como mostraban en sus ediciones: “Al desdoblar diariamente la prensa extranjera, con el afán de enterarnos de los resultados que arrojan los diferentes concursos que con éxito extraordinario vienen celebrándose desde hace unos días en Estocolmo, lo primero que se percibe es una larga lista en la que aparecen los nombres de las naciones que están representadas entre los que no figura el de España” (Masferrer, 1912:4). Teniendo en cuenta el contexto social, político y económico de España a principios de siglo, y la poca preocupación existente en nuestro país por el deporte, existe cierto pesimismo con relación a la incorporación de España al movimiento olímpico. Pero debido a la creación del COE, como ya hemos comentado con anterioridad, y un cambio de rumbo en la mente del gobierno, 52 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico esto se producirá en la siguiente edición, celebrada en el año 1920, puesto que, los Juegos Olímpicos de 1916, previstos para celebrarse en Berlín, no llegaron a realizarse debido a la trágica I Guerra Mundial. AMBERES, 1920 Comenzando con los Juegos Olímpicos de Amberes en 1920, tenemos que decir que son los primeros Juegos tras la I Guerra Mundial, y que esta pasó factura al no ser invitados a la cita olímpica Alemania, Austria, Hungría y Turquía. A pesar de esto la participación fue numerosa. Las instalaciones eran las propias de un país cuya economía había sido seriamente dañada por la guerra;; los alojamientos de los atletas fueron cuarteles, escuelas y casas familiares. Las lluvias, caídas durante la celebración de los Juegos, tampoco contribuyeron a su éxito (Rodriguez López, 2000). Los juegos fueron inaugurados el 12 de Agosto de 1920, y se extendieron hasta el 12 de septiembre del mismo año. La participación ascendió a 2591 deportistas, de los cuales 64 eran mujeres, pertenecientes a 29 países, en 21 deportes seleccionados. Como datos relevantes del olimpismo, se introduce el “juramento olímpico”, pronunciado por Victor Boin, participante belga. La fórmula empleada, según las normas olímpicas, debía ser la siguiente: “Juramos que nos presentamos a los Juegos Olímpicos en competencia leal, respetuosos con los reglamentos que los rigen y deseosos de participar en ellos con espíritu caballeroso por el honor de nuestro país y la gloria del deporte” (COI, 1950:20-­22). Además, también se introduce la bandera olímpica diseñada por Coubertín, con los cinco aros entrelazados simbolizando los cinco continentes. El color de fondo de la bandera es blanco, simbolizando la paz, que se comenzó a recuperar en estos Juegos tras la guerra acontecida años antes. En lo referente a España, por primera vez llevaba una delegación oficial, abanderada por el futbolista Arrate. Consiguieron dos medallas de plata, una el equipo de polo, y la otra nuestro equipo de fútbol. La delegación española contó con 31 deportistas, toda ella compuesta por hombres. La participación Ricardo Leiva Román 53 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico general fue de 2626 deportistas de 29 países diferentes, con 2561 hombres y solamente 65 mujeres. El presidente del COE en este momento era Gonzalo de Figueroa y Torres. Aunque otros autores argumentan que el total de deportistas participantes fueron 64, y que formaron el primer equipo olímpico oficial, representando a nuestra nación en los Juegos Olímpicos, participando en siete diferentes modalidades: 13 deportistas en atletismo, 19 en fútbol, 2 en natación, 5 en polo, 6 en tenis, 8 en tiro y 11 en waterpolo (Alcoba, 1992:20-­22). PARÍS, 1924 París repitió la condición de sede de los Juegos, aunque en esta ocasión, la organización de estos Juegos supuso una compensación positiva a la inefable gestión de los anteriores, poniéndose de manifiesto, entre otras cosas, en haber sido los primeros en incorporar una Villa Olímpica para el alojamiento agrupado de los deportistas (Durántez, 2001). Algunos de los deportistas más destacados, en estos Juegos, han pasado a la leyenda del deporte: en pruebas pedestres de resistencia, el finlandés Paavo Nurmi, en pruebas atléticas de velocidad, los atletas ingleses Harold Abraham y Erik Liddel, en natación, el famosísimo Johnny Weissmüller. Estos juegos fueron los últimos de Pierre de Coubertin como presidente del COI, sucediéndole el Conde de Baillet-­Latour. Coubertin vio cumplido su deseo de unos JJOO celebrados con brillantez en la capital de su país antes de abandonar la presidencia. Tras la restauración y relativa improvisación que suponen los Juegos de Amberes, los Juegos de París se presentaban como plenitud;; con más tiempo de preparación para los atletas, con mucha más experiencia en el ámbito del entrenamiento deportivo y además, con la ilusión de borrar la deficiente imagen de los anteriores JJOO celebrados en París en 1900, los resultados fueron espléndidos. El incremento de participación de naciones es muy fuerte, 44 frente a 29 de la edición anterior y muchos más atletas, 3075 de ellos eran, 136 mujeres. Los deportes incluidos fueron 17: Atletismo, boxeo, ciclismo, deportes ecuestres, 54 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico esgrima, fútbol, gimnasia, pentatlón moderno, remo, tiro, natación, tenis, levantamiento de peso, lucha, vela, polo y rugby. Estos JJOO suponen mejoras técnicas tanto en instalaciones como en la complejidad de su organización, con más de 600.000 espectadores y 1.000 periodistas y serán los primeros retrasmitidos por radio. La delegación española contó con 99 deportistas, con la participación de 4 mujeres. La participación general fue de 3089 deportistas de 44 países diferentes, con 2954 hombres y solamente 135 mujeres. El presidente del COE en este momento era Santiago Güell y López. No se consiguió ninguna medalla y la actuación fue bastante floja. Nuestra mejor actuación fue un cuarto puesto conseguido por el equipo de polo. Otra de las actuaciones destacadas fue la del equipo de waterpolo, que consiguió llegar a cuartos de final. También, en tenis, en cuya modalidad la deportista Lili Álvarez consiguió llegar también a cuartos de final. Estos juegos fueron los últimos de Pierre de Coubertin como presidente del COI, sucediéndole el Conde de Baillet-­Latour. AMSTERDAM, 1928 Estos Juegos tuvieron un éxito importante de participación, de espectadores y en cuanto a la organización (Salvador, 2004). Estos juegos fueron los primeros en que las mujeres participaron en las pruebas de atletismo. Para España fueron muy importantes, ya que se consiguió el primer oro olímpico. Fueron los jinetes José Navarro Morenés, José Álvarez de las Asturias y Julio García Fernández, tres jóvenes capitanes del ejército español, los que formaban el equipo que ganó la medalla. La delegación española contó con 85 deportistas, y en este caso, sin la participación de mujeres. Se participó en las siguientes especialidades deportivas: Atletismo, Boxeo, Hípica, Ciclismo, Esgrima, Fútbol, Hockey, Natación, Waterpolo y Vela (Durántez, 2001). La participación general fue de 2883 deportistas de 46 países diferentes, con 2606 hombres y 277 mujeres. Ricardo Leiva Román 55 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico En los días previos a la inauguración de los Juegos de la IX Olimpiada, celebrados en Amsterdam se produjo un hecho de enorme importancia en la historia del olimpismo mundial, como fue la retirada definitiva del barón Pierre de Coubertin, debido a su delicado estado de salud, del movimiento olímpico. El problema principal con el que se encontraron los organizadores de estos Juegos fue la falta de apoyo oficial por parte del Gobierno holandés de la reina Guillermina;; que, obligó a disputar las pruebas en unas instalaciones deficientes, no acordes con la importancia del evento deportivo que en ellas se celebró en ellas. El número de deportes que formaron parte del programa olímpico de estos Juegos fue inferior al de la anterior edición, ya que desaparecieron el polo, el rugby, el tenis y e l tiro olímpico, recuperándose el hockey sobre hierba (que no estuvo en París, pero estará presente en todas las ediciones celebradas posteriormente) (COOB, 1992:137-­8). En estos JJOO, como marcas más significativas, se establece un nuevo récord olímpico de 1500 m, 3’ 53” 2/10, por el finlandés Harri Larva. En 110 m vallas, un sudafricano bate el récord mundial en una eliminatoria, 14” 6/10. En 3000 obstáculos continúa el dominio finlandés y se bate el récord olímpico, 9’ 21” 8/10. Estos juegos fueron los primeros en que las mujeres participaron en las pruebas de atletismo. Para España fueron muy importantes, ya que se consiguió el primer oro olímpico. Fueron los jinetes José Navarro Morenés, José Álvarez de las Asturias y Julio García Fernández, tres jóvenes capitanes del ejército español, los que formaban el equipo que ganó la medalla. La delegación española contó con 85 deportistas, y en este caso, sin la participación de mujeres. La participación general fue de 2883 deportistas de 46 países diferentes, con 2606 hombres y 277 mujeres. El presidente del COE en este momento era Eusebio López y Díaz de Quijano. LOS ÁNGELES, 1932 La celebración de los Juegos en Estados Unidos suposo un descenso en la participación, por la carestía o dificultades del viaje para los equipos europeos. esistieron 38 países, 1331 participantes, de las cuales 127 mujeres, en un total 56 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico de 14 disciplinas deportivas. Eso significa una participación mejor de la mitad, en hombres y mujeres, que en los JJOO anteriores. Y, de hecho, en los JJOO posteriores, en Berlín, se triplicará esta cifra de participantes. A pesar de esta baja participación, la organización fue espléndida, con modernas instalaciones y ayudado por un clima idóneo, que propició unos resultados excelentes con 16 récords mundiales y 30 récords olímpicos, muchos de los cuales tardarían en batirse décadas (Rodriguez López, 2000). Estas marcas se debía en gran parte, a que había comenzado una nueva era del entrenamiento deportivo más disciplinado, científico y especializado, que sería imprescindible de aquí en adelante para la obtención de buenas marcas y para poder competir por los primeros puestos en cada edición de los Juegos Olímpicos. El conde de Baillet Latour clausuró la X Olimpiada, haciendo su discurso en francés, ofreciendo la más viva gratitud del Comité Olímpico al presidente Hoover, a los miembros del Comité Olímpico de los Estados Unidos, por la brillantez de los Juegos desarrollados en Los Ángeles: “Declaramos clausurados los Juegos de la X Olimpiada de acuerdo con la tradición y hacemos un llamamiento a la juventud de todas las naciones para la reunión que debe celebrarse en Berlín dentro de cuatro años como final de la XI Olimpiada Que se hagan intérpretes de la generosidad y la concordancia mientras lleven la antorcha olímpica cada vez con más ahínco, valor y honor para el bien de la humanidad a través de la edades”. La participación española fue realmente escasa ya que sólo acudieron seis deportistas, consiguiéndose una medalla de bronce por parte del catalán Santiago Amat Casino, en la especialidad de vela. No hubo participación de mujeres. La participación general fue de 1332 deportistas, con 1206 hombres y 126 mujeres. BERLÍN, 1936 Los Juegos Olímpicos de Berlín, comenzaron ya mucho antes con el estigma de la crítica y la polémica, a raíz de la proclamación de los mismos en 1931 frente a la candidatura competidora de Barcelona, aduciendo los Ricardo Leiva Román 57 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico miembros del Comité Olímpico Internacional que, proclamada la Segunda República Española, la situación en el país era de progresiva inestabilidad e inseguridad social. Por otro lado, la encomienda de organización de los Juegos que se realizó en esa fecha al gobierno democrático de la República de Weimar, fue a recaer dos años más tarde, con su ascenso al poder en 1933, al gobierno del Partido Nazi liderado por Adolf Hitler. En este sentido y como indica Salvador (2004), el Partido Nazi se oponía a los Juegos por varios motivos: por su carácter “cosmopolita”, por su elevado coste económico y por dos motivos que no aireaban en público, pero que, probablemente, eran determinantes en su postura: los Juegos eran integradores e interraciales. Pese a esto, con posterioridad les encontraron una capacidad que, inicialmente les había pasado desapercibida: su capacidad propagandística. Como prueba de ello, y probablemente, a pesar de las intenciones reales de su creadora, la película documental Olympia, de la directora Leni Riefenstahl, se convirtió, por una parte, en uno de los medios más destacados de propaganda utilizados por el régimen nazi, así como, uno de los grandes iconos de aquellos Juegos que ha perdurado y, posiblemente, perdurará para siempre en la historia del Olimpismo. En otro orden de cosas, los Juegos Olímpicos de Berlín destacaron enormemente por sus aspectos técnicos de organización y gestión, siendo los responsables de ello, dos altos funcionarios con una amplísima experiencia en el deporte: el profesor, y con el paso del tiempo, una de las máximas autoridades científicas mundiales sobre deporte y, entre otras cosas, fundador en Berlín del primer Centro de Estudios Olímpicos y, muy posteriormente, de la Academia Olímpica Internacional, a petición, tanto el uno como la otra, del propio Barón de Coubertin: Karl Diem, acompañado de Theodor Lewald. Al propio Karl Diem, hay que atribuir uno de los símbolos más destacados del ritual Olímpico: el traslado desde Olimpia, por medio de relevos, del fuego sagrado Olímpico y el posterior encendido de una antorcha, que se mantendría así desde el inicio de los Juegos, hasta la ceremonia de clausura. Abundando en el terreno puramente deportivo, estos Juegos siempre serán recordados por la actuación de uno de los mejores velocistas y saltadores de longitud de la historia: el atleta de la Universidad de Ohio, Jesse Owens, que fue medalla de 58 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico oro en las pruebas de velocidad de los 100, los 200, los 4x100 y el salto de longitud (Durántez, 2001). Estos Juegos fueron los últimos celebrados antes del estallido de la Segunda Guerra Mundial. Poco antes del comienzo de estos Juegos estalló la Guerra Civil en España, lo que impidió la participación de deportistas españoles en los mismos. LONDRES, 1948 Lo más importante a destacar de estos Juegos fue, precisamente, el restablecimiento de su celebración después de la gran tragedia de la Segunda Guerra Mundial. Por ese motivo, fueron unos Juegos eminentemente austeros, al existir una situación económica mundial con grandes dificultades, producto del inmenso desgaste bélico. Al igual que en el Juegos Olímpicos de Amberes, de 1920, se prohibió la participación de los países derrotados: Alemania y Japón, manteniendo, también la prohibición a la Unión Soviética, pese a ser uno de los países vencedores y de los que más sufrió la locura nazi. La delegación española contó con 63 deportistas, sin la participación de mujeres. La participación general fue de 4104 deportistas de 59 países diferentes, con 3714 hombres y 390 mujeres. Los efectos de la II Guerra Mundial se notaron en gran medida en el ámbito deportivo, al no batirse ni siquiera un récord olímpico. Algo lógico, si tenemos en cuenta que la mayoría de los deportistas que acudieron a Londres en 1948, no habían podido entrenar ni competir (ante la ausencia de competiciones de carácter internacional) con normalidad. Además, algunos deportistas destacados habían muerto en la contienda y otros habían sufrido sus efectos, física y/o psicológicamente. Pero el problema más grave con el que se encontraron los organizadores de estos Juegos Olímpicos fue el de la alimentación, ante la escasez existente y las grandes necesidades que tenían los deportistas participantes. Esta situación llevó a algunos países a traer sus propios alimentos, muy abundantes, como en el caso de los Estados Unidos;; o bien, los hicieron enviar cuando conocieron la precaria situación. La situación llegó a ser tan tensa que algunos equipos amenazaron con retirarse de los Juegos Olímpicos si continuaba la escasez de alimentos (Alfil, 1948:13). Ricardo Leiva Román 59 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Los efectos derivados de la II Guerra Mundial condicionaron en gran medida la organización y desarrollo de los Juegos Olímpicos de Londres. Pero, tras la suspensión de las dos ediciones anteriores, la posibilidad de llevarlos a cabo era un hecho de tal relevancia que hizo superar todos los posibles inconvenientes. Además, se vio respaldado por la numerosa presencia de deportistas y naciones participantes, a pesar de la época de penuria y dificultades económicas que estaban pasando gran cantidad de países. La delegación española contó con 63 deportistas, sin la participación de mujeres. La participación general fue de 4104 deportistas de 59 países diferentes, con 3714 hombres y 390 mujeres. El presidente del COE en este momento era José Moscardo Ituarte. La única medalla conseguida por España fue una de plata en pruebas hípicas, lograda por el equipo formado por, el Comandante Marcelino Gavilán y Ponce de León, el Teniente Coronel José Navarro Morenés y el Comandante Jaime García Cruz. HELSINKI, 1952 Los éxitos conseguidos por los deportistas finlandeses en JJOO anteriores con 80 medallas de oro, promovió la organización de unos Juegos en Finlandia. La ciudad se preparó para construir con su propio presupuesto nuevas instalaciones y agrandar las existentes. Aunque algunas voces se levantaron en contra por miedo a que la ciudad no fuera capaz de celebrar los Juegos con la debida dignidad. Finalmente fue aprobada como sede. Los juegos se celebrarían del 19 de julio al 3 de agosto. Aumentó en gran medida el número de participantes, estableciéndose un nuevo récord de asistencia a unos Juegos Olímpicos, con 5.867 deportistas, de los que 518 eran mujeres, pertenecientes a 69 comités olímpicos nacionales diferentes. Los miembros del COI continuaron esforzándose por mantener un número limitado de disciplinas deportivas en el programa olímpico, de acuerdo con los principios de Coubertin. Compitiéndose, de nuevo, en 17 modalidades deportivas distintas (COOB, 1992:153). 60 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Los resultados serán excelentes, siendo batidos la gran mayoría de los récords. El héroe de los Juegos es Zatopeck, al que han hecho teniente coronel del ejército checo. Su mujer, Dana Zatopkova, vence en jabalina. Las atletas rusas dominan los lanzamientos, consiguiendo 7 de las 9 medallas. En figuras individuales femeninas destaca la australiana Marjorie Jackson que vence en los 100 y 200 m. Siendo la anécdota más destacada la celebración del triunfo de Monsieur Boiteux, que se tiró al agua vestido cuando su hijo obtuvo la victoria en 400 metros libres. En la clasificación final de países Rusia se acerca, aunque Estados Unidos conserva todavía su reinado deportivo. La delegación española contó con 29 deportistas, otra vez, sin la intervención de mujeres. La participación general fue de 4955 deportistas, con 4436 hombres y 519 mujeres. Los representantes españoles participaron en 6 de los 17 deportes, obteniendo una sola medalla, a manos del policía Ángel León Gonzalo, campeón de España de tiro con pistola, que ganó la medalla de plata. La Unión Soviética participa por primera vez en unos Juegos MELBOURNE, 1956 Estos Juegos estuvieron marcados por dos circunstancias: por un lado fueron los primeros que se celebraron fuera de Europa o de los Estados Unidos de América, por otro lado la invasión Soviética de Hungría, que provocaría una especie de mini-­boicot, en el que se involucraría España. Pese a ello, como el concurso hípico se realizó unos meses antes que los Juegos en sí y aún no se había producido la invasión, el COE envió una delegación compuesta por, exclusivamente, 6 deportistas masculinos. Por último, un interesante apunte que realiza Salvador (2004) y que tendría importantes consecuencias en el futuro para el deporte de alto nivel: “El éxito soviético (que obtuvo en estos Juegos) como luego ocurriría con los alemanes del Este, estaba basado en un trabajo interdisciplinar y cultos modelos procedían de otros campos científicos. La ciencia del Estado soviético aplicada al deporte superaba, en mucho, el cuidado y la determinación con los que los escasos biólogos, ingenieros y entrenadores de las universidades norteamericanas habían estudiado las extremidades de los atletas en los deportes que exigían la potencia, el consumo de oxígeno en las pruebas de resistencia o la eficacia de los textiles Ricardo Leiva Román 61 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico en los deportes de alta velocidad y peligro”... ...”Después de esta Olimpiada (sic) los dirigentes deportivos comprobaron que el deporte estaba al alcance de cualquiera que se lo propusiera. Los australianos y los californianos decidieron imitar a los soviéticos en sus formas de seleccionar y entrenar a sus nadadores. Los canadienses aplicaron los mismos métodos a sus patinadores sobre hielo en carreras y en la modalidad artística, los franceses crearon escuelas de esgrima, de esquí y de ciclismo...” (sic). En cuanto a la participación de atletas es de 3342, mucho menos que en la anterior edición, entre ellos 384 mujeres. El número de naciones es de 67. Esto sigue con la línea de descenso en la participación cuando los JJOO salen de Europa. El programa es idéntico en cuanto a deportes que en los dos Juegos anteriores, fijado en 17 por el COI: atletismo, baloncesto, hockey, pentatlón moderno, remo, tiro, natación, levantamiento de peso, lucha y vela. En lo referente a resultados, se bate el récord olímpico en 18 pruebas de atletismo, con 4 récords mundiales. ROMA, 1960 Según palabras de Salvador (2004), “Roma montó unos Juegos Olímpicos fastuosos, con una organizada y espectacular puesta en escena de gran belleza ambiental y acompañada por una alto nivel competitivo” (sic). Otros hechos destacados por su importancia, también por sus consecuencias futuras, es que fueron los primeros Juegos Olímpicos televisados a todo el mundo y la primera vez que se disputaron unos Juegos Paralímpicos. La delegación española contó con 134 deportistas, con la intervención de 11 mujeres. La participación general fue de 5338 deportistas de 83 países diferentes, con 4727 hombres y 611 mujeres. Los Juegos Olímpicos de Roma, celebrados entre el 25 de agosto y el 11 de septiembre de 1960, recuperaron e impulsaron, con su gran esplendor, el movimiento olímpico de la era moderna. La grandiosidad de las instalaciones construidas con motivo de estos Juegos y el aumento en la participación, marcaron la celebración de ediciones posteriores (Filliol y Grosbios, 1960:33). 62 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Junto con la alta participación, lo más relevante de estos Juegos fue, por tanto, “los estupendos e inigualables escenarios en que se ha empezado y se va a desarrollar esta edición soñada por Pierde de Coubertin”. Entre todas las magníficas instalaciones deportivas, construidas en Roma con motivo de los Juegos de la XVII Olimpiada, destacó el Estadio Olímpico, equipado con dos enormes tableros sobre los cuales aparecerían los resultados de las pruebas inmediatamente después de su desarrollo. Pero, no sólo impresionó por su calidad y características, sino también por el acierto de haberlo soterrado para no condicionar el paisaje de esta ciudad milenaria (Cortes-­Cavanillas, 1960:36) En cuanto a los resultados, como hecho más relevante en esta edición de los Juegos Olímpicos, los soviéticos obtienen 42 medallas de oro, superando a Estados Unidos. Y también obtenemos la “resurrección” de Alemania. Además observamos el despertar del deporte africano, y continúa el dominio australiano en natación. TOKIO, 1964 Fueron los de Tokio, nuevamente, un alarde de espectacularidad en las instalaciones y la organización. Eran los primeros Juegos celebrados en el continente asiático y los japoneses respondieron al reto a la perfección. Destacaron, en general, las actuaciones de los equipos japoneses de voleibol masculino y femenino, deporte que era incluido por primera vez en el concurso oficial de los Juegos. El velocista estadounidense Bob Hayes, el gran fondista Abebe Bikila, que conseguiría su segundo oro olímpico en la Maratón. Por último, el enfrentamiento mítico se produjo en judo, en la categoría de “pesados”, entre el holandés Antón Geesik y la figura local y favorito, Kaminaga, que para gran decepción de todo el pueblo japonés y, por supuesto, para él mismo, se decanto a favor del primero (Durántez, 2001). La participación general fue de 5151 deportistas de 94 países, con 4473 hombres y 678 mujeres. De esta forma se establece un nuevo récord de asistencia de países, al superar los que participaron en los JJOO de Roma (1960), siendo Costa Rica el último país inscrito. Sin embargo, no se consigue batir el récord de deportistas participantes. Ricardo Leiva Román 63 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico La organización de estos Juegos fue muy elogiada en el ámbito internacional. No se puede dudar de que la mayor parte del pueblo japonés, desde sus gobernantes hasta el último de sus ciudadanos, se volcó en estos Juegos. Fueron creadas grandes infraestructuras, desarrollando los proyectos planificados con la máxima antelación posible e intentando supervisar el mínimo detalle durante la celebración de esto Juegos;; que contaron con una elevada presencia y participación del público nipón. En los resultados deportivos, Estados Unidos encabezó nuevamente el medallero, con 36 medallas de oro, 26 de plata y 28 de bronce, seguido de Rusia (30-­31-­35), Japón (16-­5-­8), Alemania (10-­22-­18) e Italia (10-­10-­7). Siendo estos los cinco países más destacados, con gran igualdad entre los dos primeros clasificados y, también, en el tercer puesto entre los tres siguientes países clasificados (Alfil, 1964:20). España no consiguió ninguna medalla en su viaje al continente asiático. Sólo cabe destacar el cuarto puesto logrado por el equipo masculino de hockey sobre hierba. La delegación española contó con 50 deportistas, con la aportación de 3 mujeres. La participación general fue de 5151 deportistas, con 4473 hombres y 678 mujeres. El presidente del COE en estos Juegos Olímpicos continuaba siendo José Antonio Elola Olaso. MÉXICO, 1968 Los Juegos Olímpicos de México son recordados en el ámbito puramente deportivo, principalmente, por dos hechos excepcionales acaecidos en la misma disciplina deportiva el Atletismo. El primero, por su espectacularidad y, en los primeros instantes, por la perplejidad que causó: el increíble vuelo del saltador estadounidense Bob Beamon que, con una marca de 8,90 metros, se adelantó en más de dos décadas a la posibilidad de ser superado y batía en 53 centímetros el record del mundo que estaba establecido en su época. El segundo, la revolucionaria técnica de salto de altura con la que se presentó el, también saltador estadounidense, Dick Fosbury, que le permitió, puntualmente, obtener la medalla de oro en estos juegos, pero que, además, ha sido la técnica que han adoptado todos los saltadores de altura hasta la actualidad y sin viso alguno de ser sustituida por ninguna otra, en el corto o medio plazo. 64 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico También, en el terreno extradeportivo, se hicieron visibles las reivindicaciones civiles del grupo social “afroamericano” de los Estados Unidos de América, por medio del conjunto de velocistas -­ Smith, John Carlos, James, Evans y Freeman -­ que al recibir los trofeos en el podio, logrados por sus talentos deportivos, exhibieron los símbolos externos propios del movimiento llamado Black Power. Los Juegos se celebraron y los atletas fueron descalificados;; se entiende que en ambos casos no consiguieron sus propósitos los atletas reivindicadores. Todo intento de ir contra el poder del olimpismo, de sus rituales o de su organización, está destinado a fracasar. En cuanto a la intervención general, en estos JJOO celebrados entre el 12 y el 27 de octubre, encontramos 6626 atletas, de las cuales 781 fueron mujeres, que participarán en 18 deportes diferentes. Participaron 112 países y la delegación del COE estuvo compuesta por 124 hombres y 2 mujeres. No se pudo obtener ninguna medalla, siendo lo más destacado, el cuarto puesto del equipo de fútbol y el sexto puesto en la modalidad de hockey sobre hierba. MUNICH, 1972 Desgraciadamente, estos Juegos Olímpicos presenciaron la mayor tragedia en su historia, sufrida por el Movimiento Olímpico y el Olimpismo en su conjunto. El 5 de septiembre de 1972 un grupo terrorista denominado Septiembre Negro, grupo radical perteneciente al Movimiento para la Liberación de Palestina, primero asaltó las estancias del equipo olímpico de Israel, matando a uno de sus miembros e hiriendo a otro y secuestrando al resto. El inmensamente traumático incidente se resolvió de la manera más trágica posible: nueve de los rehenes, cinco terroristas y un policía mueren en el intento de neutralización de los secuestradores y liberación de los secuestrados. Los Juegos vivieron una posibilidad real de ser suspendidos por el luctuoso suceso. Finalmente, se decidió continuar con la celebración de los mismos, fundamentalmente, para no dar pie a más pretensiones de manipulación utilizando la violencia y lo que se desarrolló fue un ritual de duelo y un funeral colectivo, al que asistieron presencialmente 80000 espectadores (Durántez, 2001). Ricardo Leiva Román 65 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico En cuanto a la participación, y centrándonos plenamente en los JJOO, asciende a 7121 atletas;; 121 países y con un programa formado por 21 deportes. En el terreno deportivo, lo más destacado fue la aparición de una leyenda de la natación: Mark Spitz, que consiguió la increíble cantidad de 7 medallas de oro. La representación española tuvo en 116 deportistas masculinos y 4 femeninos, participando en 17 especialidades deportivas. Se consiguió una medalla de bronce en la modalidad de boxeo y el atleta pedestre Mariano Haro fue cuarto en la final de los 10000 metros lisos. MONTREAL, 1976 El 17 de julio de 1976 se inauguraron los Juegos de la XXI Olimpiada, un chico y una chica encendieron juntos el pebetero, simbolizando así la fraternidad entre las dos comunidades lingüísticas presentes en Quebec: la francófona y la anglófona. En esta edición, participaron 6189 deportistas, de los cuales 1251 eran mujeres, representando a 88 países. Fue la representación más numerosa. Así mismo se confirmó un aumento notable de la participación femenina. El importante descenso en el número de deportistas y países participantes fue debido al boicot protagonizado por la mayoría de los países africanos. Como novedad, se estableció una edad mínima para poder participar, que quedó fijada en 14 años. Los ciudadanos de Montreal no se volcaron con sus Juegos. Junto con la gravedad de los problemas políticos y sus consecuencias, la transmisión mundial por televisión de los Juegos Olímpicos, se vio amenazada a causa de una disputa laboral en la que estaban implicados los trabajadores canadienses de Telecomunicaciones, reafirmando así la progresiva importancia que iban adquiriendo los Juegos Olímpicos en el ámbito mundial. Por primera vez, había más periodistas (7066) que deportistas (6189). El atletismo y natación continuaban siendo considerados los deportes más importantes de los Juegos Olímpicos. 66 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Después de lo ocurrido en los Juegos de Múnich, la mayor preocupación de los responsables de los Juegos de Montreal fue la seguridad, entre el ejército y la policía, lo que hizo más difícil conjugar el buen ambiente y la concordia. La lucha contra el dopaje seguía su evolución, con el COI como máximo impulsor, realizando 1500 comprobaciones en quince días, desposeyendo de sus medallas a todos aquellos deportistas que se demostró que habían tomado algunos de los noventa productos prohibidos por el COI. Con motivo de los Juegos de la XXI Olimpiada, fueron numerosos los problemas políticos, de peligrosas implicaciones, que persiguieron a los organizadores desde el principio. La ciudad de Montreal constituía la única zona de la provincia francoparlante de Quebec con una importante población angloparlante. A esto hay que unir que la escalada de los costes obligó a Montreal y a la provincia de Quebec a endeudarse más allá de sus posibilidades, alcanzando un déficit que superó los mil millones de dólares. Junto a la problemática interna de Canadá, hubo problemas políticos de carácter internacional con enorme relevancia y que influyeron negativamente en el desarrollo de estos Juegos como: -­‐ La exclusión de Taiwan, por su negativa a participar bajo otra denominación que no fuese “República China”, debido a que el gobierno canadiense mantenía relaciones con Pekín, que no reconocía a los atletas de Taiwan como legítimos representantes de China, por lo que no autorizaban su participación. Para participar, sólo podían hacerlo sin representar a la República de China, a lo que no accedieron y se retiraron, pese a la incursión de EEUU para permitir que participasen o anunciarían su retirada también. Estos hechos hicieron que el COI pensase en la cancelación de los Juegos Olímpicos. -­‐ El boicot de los países del “África negra” por la participación de Nueva Zelanda, que había mantenido relaciones deportivas con la racista Sudáfrica, tras haber participado en un campeonato de rugby. Un total de 33 países abandonaron los Juegos, lo que supuso que muchos atletas solicitaran al COI Ricardo Leiva Román 67 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico participar individualmente, ya que los atletas se sintieron como objetos políticos. -­‐ Las peticiones de asilo político. Antes de finalizar los Juegos, tres deportistas ya habían pedido asilo político. El Gobierno puso la condición de que se hallasen fuera de cualquier instalación o lugar olímpico. La creciente utilización política del movimiento olímpico hizo modificar el texto de juramento. En lo deportivo, la estrella de aquellos Juegos fue, sin ninguna duda, Nadia Comaneci, que obtuvo el increíble record de siete puntuaciones de diez. También destacaron con luz propia, dos deportistas cubanos: Teófilo Stevenson, el boxeador cubano de los pesos pesados y Alberto Juantorena, apodado “el caballo cubano” que se proclamó Campeón Olímpico en las pruebas atléticas de 400 y 800 metros lisos. Por último, los Juegos Olímpicos de Montreal se convirtieron, a su pesar, en un ejemplo paradigmático de las crecientes dificultades para financiar unos Juegos cada vez más caros y, probablemente, la imperiosa necesidad de un cambio de modelo que permitiera su realización, sin la asunción de unos costes desmedidos para los Estados que, a su vez, se mostraban de difícil (por no decir, imposible) amortización. El COE envió una delegación de 104 deportistas masculinos y 11 femeninos. Se obtuvieron 2 medallas, de plata, una en la especialidad de vela, en la modalidad de 470, siendo sus protagonistas Gorostegui y Millet, y la otra en piragüismo, en la modalidad de K4, componiendo el bote por Menéndez, Díaz, Flor y Misioné. MOSCÚ, 1980 Sólo participaron 80 países por un nuevo boicot, impuesto, en esta ocasión, por el “Bloque Occidental” como represalia a la Unión Soviética por su invasión de Afganistán. Pero los Juegos Olímpicos de Moscú, constituyeron unos Juegos muy especiales para el Comité Olímpico Español, el deporte español en general y el mismo Estado español: el 16 de julio de 1980, un español alcanzaba la más alta responsabilidad, en la tarea de dirigir el deporte mundial, Juan Antonio Samaranch era designado Presidente del Comité Olímpico 68 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Internacional. Pese a ello, la delegación española desfiló bajo bandera olímpica y estuvo compuesta de 147 deportistas masculinos y 9 femeninos. Se consiguieron 6 medallas: 1 oro, 3 platas y 2 bronces y, también, 11 Diplomas Olímpicos. En el plano deportivo general, los deportistas más destacados en aquellos Juegos fueron, por un lado, el nadador soviético, Vladimir Salnikov, que logró tres oros y los atletas británicos, Steve Ovett y Sebastian Coe, que protagonizaban un duelo personal, que venía de largo y que finalizó con el oro para Ovett en la prueba de 800 metros y el oro para Coe en la de 1500 metros. En la 75ª sesión del COI, celebrada en Viena, en octubre de 1974, se escogió la candidatura de Moscú para los Juegos de la XXII Olimpiada. Era la primera vez que unos Juegos iban a ser organizados por un país del bloque del Este. El boicot promovido por los EE.UU. supuso la ausencia de 38 países, que dio lugar a la participación más reducida de naciones desde los Juegos Olímpicos de Melbourne (1956): 81 comités olímpicos nacionales y un total de 5932 deportistas (COOB, 1992:181). España fue uno de los países participantes pese a que en el ámbito deportivo no existían grandes avances aún. La historia de España en los Juegos Olímpicos no hacía albergar grandes esperanzas de conseguir buenos resultados en Moscú’80;; aunque, el boicot de países de tanta importancia en el ámbito deportivo mundial, elevaba las posibilidades de los deportistas españoles. El COI había concedido los Juegos de 1980 a Moscú, lo que suponía un reconocimiento de la seriedad y del éxito de los deportes del bloque soviético en materia de promoción del deporte. Moscú disponía ya de excelentes instalaciones deportivas y los preparativos complementarios discurrieron a la perfección (Mandell, 1986:270). Pero los problemas políticos, dieron lugar a un boicot impulsado por EEUU emborronó unos Juegos Olímpicos que debían haber pasado a la historia por su meticulosa organización, magníficas instalaciones y espectaculares enfrentamientos deportivos de alto nivel. Ricardo Leiva Román 69 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Durante la disputa de los Juegos celebrados en Moscú, el COI aprobó una serie de medidas que conducían a aumentar el gigantismo de los futuros Juegos Olímpicos, añadiendo nuevos deportes al programa olímpico y nuevas pruebas dentro de algunos de los deportes que ya lo conocían. Las estrictas medidas de seguridad impuestas por los organizadores soviéticos de la Olimpiada se ponían de manifiesto en cuanto cualquier persona quería entrar en algún edificio más o menos directamente relacionado con los Juegos Olímpicos (Casanova, 1980:26). En cuanto al doping, se produce el desarrollo de métodos más complejos que ayudasen a combatir la cada vez más extendida y sofisticada práctica del dopaje. Nuevos métodos de análisis clínicos y una computadora que permitía a los médicos descubrir restos de esteroides anabólicos incluso cinco meses después de haberlos ingerido. La grave incidencia de aspectos políticos en las últimas ediciones de los Juegos Olímpicos celebradas llevó a algunos periodistas a hablar incluso de la existencia de algún tipo de maleficio, “M” de maleficio, ya que cuatro Juegos Olímpicos fueron un rosario de muertes, males y boicot: México-­68, Munich-­72, Montreal-­76 y Moscú-­80 (Armengol, 1980:30). La delegación española desfiló bajo bandera olímpica y estuvo compuesta de 147 deportistas masculinos y 9 femeninos. Se consiguieron 6 medallas: 1 oro, 3 platas y 2 bronces y, también 11 diplomas olímpicos. LOS ANGELES, 1984 Para la candidatura de los que debían ser los Juegos Olímpicos de 1984, solo concurrió la ciudad de Los Ángeles y obviamente, obtuvo la adjudicación como sede de los mismos. Esa falta de competencia se debió, indudablemente, al inmenso coste de las dos anteriores ediciones, Montreal 1976 y Moscú 1980. Para financiar los Juegos, los responsables de la candidatura estadounidense, acudieron a la iniciativa privada y obtuvieron el suficiente éxito como para poder sufragar los gastos. En estos Juegos, se utilizó el mismo Estadio Olímpico que albergó los Juegos de 1932, el Memorial Coliseum. 70 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Participaron 140 países, pese al boicot, y como respuesta al que se produjo en los Juegos de Moscú de 1980, de la URSS y de los países del llamado “Telón de Acero”. El COE envió a una delegación compuesta por 166 deportistas masculinos y 16 femeninos. Los resultados más destacados fueron 5 medallas, 1 de oro, 2 de plata y 2 de bronce. Los deportistas más destacados en estos Juegos fueron, sin duda: Carl Lewis, que en las pruebas atléticas de velocidad consiguió el oro en 100 metros, 200 metros, el relevo 4x100 metros y en el salto de longitud;; el también atleta, Edwin Moses, en los 400 metros vallas y el decatleta británico, Daley Thompson. Además, hay que destacar le elevada asistencia de público. En Los Ángeles, sumando el número de espectadores asistentes a todas las competiciones olímpicas, se establece un nuevo récord de asistencia de espectadores en unos Juegos Olímpicos. Aunque sin duda, uno de los mayores éxitos y de mayor relevancia en estos Juegos, dados los precedentes de las ediciones disputadas con anterioridad, fue el apartado económico, al conseguir importantes beneficios. En cuanto a resultados, hubo un claro triunfo de los deportistas locales, donde Estados Unidos ganó 83 medallas de oro y consiguió el récord absoluto de primeros puestos en la historia de los Juegos Olímpicos, batiendo el anterior establecido por la Unión Soviética en Moscú. SEUL, 1988 Lo primero a destacar de estos Juegos fue la ausencia de cualquier tipo de boicot, lo que permitió una participación masiva de todos los Comités Olímpicos Nacionales. Desgraciadamente, también estos Juegos tuvieron su escándalo, con el positivo por dopaje con sustancia anabolizante, del velocista canadiense Ben Jonhson. Al margen de este hecho, durante los Juegos se batieron diecinueve récords mundiales y cuarenta y siete olímpicos, lo que da una idea de alto nivel competitivo que se mostró en los mismos. La participación general correspondió a 159 países, con 9.147 deportistas. Ricardo Leiva Román 71 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Estos Juegos se celebraron desde el 17 de septiembre al 2 de octubre. De la participación arriba mencionada, hay que comentar que la asistencia femenina seguía batiendo su récord, ahora el 26,2% de los deportistas. Corea del Norte hubiera deseado organizar parte de las competiciones. Samaranch debió intervenir para que Seúl los organizara en exclusiva, lo que produjo que en protesta por este hecho no participara Cuba y algunos otros pequeños países de ideología comunista, de escaso potencial deportivo. En el programa deportivo olímpico, tanto masculino como femenino, quedan incluidos el tenis y el tenis de mesa, deporte de dominio asiático en el que Corea y China alcanzarán la mayoría de las medallas (Rodríguez López, 2000). Otro de los aspectos importantes fue la aparición masiva del doping, con el caso concreto y que más sobresalto al mundo de Ben Johnson. El doping era algo nefasto, muy grave para el olimpismo en su conjunto. En general, esto se comprendía bien, la plaga del doping había que atajarla de otra manera: “He perdido la poca inocencia olímpica que me quedaba. Y la culpa no la tiene exclusivamente Ben Johnson. <<También la tiene ese coro de hipócritas que tratan de convertir a Johnson en la excepción que confirma la regla de la virtud deportiva. Por muy alquimista que sea Johnson, no está en condiciones de hacerse o recatarse a sí mismo las pócimas que permiten bajar de los 10 segundos en los 100 metros. A su lado ha habido técnicos, médicos y políticos deportivos que han chupado récords mientras el pipí salía transparente. Ahora nadie quiere el pipí de Johnson >> (M. Vázquez Montalbán. El País). La delegación que representaba a España estaba compuesta por 198 deportistas masculinos y 31 deportistas femeninas. Al final de los Juegos, el balance de medallas fue el siguiente: un total de 4 medalla, con 1 oro, 2 de plata y 1 de bronce. BARCELONA, 1992 Los Juegos Olímpicos se celebran en España. “La ciudad candidata española ostentaba el récord de vocación olímpica, cuando en la votación realizada en la tarde del 17 de octubre de 1986, en el Palacio de Beaulieu, salió vencedora de la puja frente a París, Birmingham, Ámsterdam, Brisbane y 72 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Belgrado. Antes, la capital catalana había concursado sin éxito, para los Juegos de 1924, 1936, 1940 y 1972” (Durántez, 2001). No cabe duda de que fue un momento histórico, inigualable e inolvidable para nuestro país, pero también lo fue para los propios Juegos porque marcó un antes y un después en el modelo de organización y de realización de los mismos. La participación general siguió creciendo, siendo la más elevada de la historia con 169 países. España, como país anfitrión, inscribió a 311 deportistas masculinos y a una elevadísima representación femenina que creció, con relación a todos los Juegos anteriores, hasta las 128 deportistas femeninas. En cuanto al programa olímpico de estos Juegos, la Carta Olímpica vigente para la organización de los mismos incluía una lista de 24 deportes: los 23 que habían sido oficiales en Seúl (atletismo, baloncesto, boxeo, ciclismo, esgrima, fútbol, gimnasia, halterofilia, balonmano, hípica, hockey, judo, lucha, natación, pentatlón moderno, piragüismo, remo, tenis, tenis de mesa, tiro con arco, tiro olímpico, vela y voleibol), con el añadido del bádminton. Los Juegos Olímpicos quedaron oficialmente inaugurados por Su Majestad el Rey Juan Carlos I. El momento cumbre del espectáculo con el que fueron inaugurados estos Juegos en su final, con la llegada de la antorcha y la llama olímpica al Estadio, y con el espectacular acto del encendido del pebetero a través de un arquero que disparó una flecha encendida, una imagen que siempre será recordada por todos los asistentes y espectadores que presenciaron el acto (Frias, 1992:74). Los resultados deportivos fueron los más positivos de la historia olímpica española: 22 metales, de los cuales, 13 fueron de oro, 7 de plata y 2 de bronce. No cabe alguna duda que, en gran medida, este éxito fue debido al apoyo de un modelo estratégico denominado “Plan ADO”, que demostró que lo único que necesitaban nuestros deportistas para competir en igualdad de condiciones eran las mismas condiciones institucionales y materiales de apoyo que recibían los demás. El presidente que condujo desde el COE a aquel imborrable momento para el Olimpismo español fue, el siempre recordado Carlos Ferrer Salat. Ricardo Leiva Román 73 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico ATLANTA, 1996 La fecha de los Juegos de Atlanta encarnó el centenario de realización de los mismos y pese a que optó, como no podía ser de otra manera, la ciudad de Atenas, representando el legado histórico-­cultural de los Juegos Olímpicos Antiguos y el inicio de los Juegos Olímpicos Modernos. En esta ocasión se impuso el poderoso atractivo del dinero, representado por la histórica firma de la ciudad: Coca-­Cola, que también, era un histórico patrocinador oficial del Comité Olímpico Internacional. Si lo hubiera presenciado Coubertin, seguramente habría afirmado que había sido una gran fortuna para los Juegos Olímpicos, pero un triste revés para el Olimpismo. Como no podía ser de otra forma, contaron con la participación más amplia de la historia, con 197 países. Se celebraron del 19 de julio al 4 de agosto. Se superaba el número de naciones (197), el de pruebas (271), y el de competidores (10332 sobre 9368 en Barcelona y 8473 en Seúl). Se dijo que Atlanta fueron los Juegos de la mujer. Más mujeres que nunca participaban en las competiciones de atletismo. En el atletismo masculino, aparece una nueva leyenda: Michael Johnson. Era el primer hombre en la historia que en los Juegos había conseguido vencer en 200 y 400 m., pero, sobre todo, había conseguido una plusmarca en los 200 m.. Fue el rey de los Juegos de Atlanta. Johnson se convierte en uno de los mejores atletas de todos los tiempos, tras su récord de 200 m. en la que marcó unos increíbles 19.32 que tardará en ser batidos. La clasificación general de los Juegos Olímpicos quedaría así: Estados Unidos, Rusia, Alemania, China, Francia, Italia, Australia, Corea, Cuba, Polonia, Ucrania, España. Se batieron los récords mundiales de natación de 100 m de braza masculino y femenino;; 100 m de mariposa y 400 m estilos, masculino. Y en atletismo, se baten los récords mundiales de 100 y 200 m. La delegación española también fue extensa, con 196 deportista masculinos y 95 femeninos. Los resultados deportivos en la competición, no siendo como los de Barcelona, aún fueron memorables: 17 medallas, con 5 oros, 6 platas y 6 bronces. 74 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico SIDNEY, 2000 Los Juegos de Sídney volvieron a marcar un record en la participación general: 200 países y contaron con la segunda más numerosa participación española de la historia: 218 deportistas masculinos y 105 femeninos. Los resultados, en cuanto a medallas, volvieron a ser notables aunque, ya en ligero retroceso con respecto a los Juegos de Barcelona y Atlanta. Se obtuvieron 11 medallas, con 3 oros, 3 platas y, finalmente, 5 bronces. En estos Juegos hay que destacar el hecho de que fueran los últimos de Juan Antonio Samaranch como Presidente del Comité Olímpico Internacional, probablemente, después del Barón de Coubertin, el más destacado y el que más hizo más por los Juegos Olímpicos, pese a las dificultades a las que tuvo que enfrentarse: boicots políticos, crecimiento exponencial de los gastos de celebración de los mismos, visibilidad del dopaje, etc. Como acontecimientos más relevantes podemos nombrar una serie de aspectos como: ¾ Durante la Ceremonia de Apertura de los Juegos, la atleta Cathy Freeman se convirtió en la primera nativa en encender la llama olímpica y la segunda mujer en hacerlo, después de la mexicana Enriqueta Basilio. ¾ Por primera vez, Corea del Norte y Corea del Sur marcharon bajo una misma bandera durante la Ceremonia inaugural;; la cual era blanca con el territorio de la península en color azul. ¾ El australiano Ian Thorpe, de sólo 17 años, obtuvo tres medallas de oro y batió la marca de 400 m estilo libre en natación. ¾ Éric Moussambani, nadador Guineano que será recordado por todos los espectadores que presenciaron su carrera, competidor en los 100 metros libres, nadó en solitario debido a la descalificación de sus rivales, tardando cerca de 2 minutos en recorrer la distancia. La felicidad de acabar del nadador 1 minuto más tarde que el último clasificado, fue una de las notas más carismáticas o significativas de esta edición. Ricardo Leiva Román 75 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico En cuanto a los resultados y el medallero, Estados Unidos acabó al frente del medallero con 36 medallas de Oro y 91 medallas totales, seguida de Rusia, China y Australia, que ante su público realizó una gran competición, obteniendo 16 medallas de Oro, 25 de plata y 17 de bronce, para un total de 58 medallas en sus Juegos. La segunda más numerosa participación española de la historia: 218 deportistas masculinos y 105 femeninos. Los resultados, en cuanto a medallas, volvieron a ser notables aunque, ya en ligero retroceso con respecto a los Juegos de Barcelona y Atlanta. Se obtuvieron 11 medallas, con 3 oros, 3 platas y, finalmente, 5 bronces. ATENAS, 2004 Los Juegos Olímpicos volvían al origen de los mismos, al ámbito geográfico, histórico, sociocultural que significo la fuente primigenia de la cultura occidental: Grecia. En palabras de Conrado Durántez (2001) Presidente de la Academia Olímpica Española: “El símbolo de Atenas 2004 significa el ciclo de la vida, la paz, los valores del Olimpismo y el legado cultural griego, del que se nutre mayoritariamente la cultura occidental”. Los XXVIII Juegos Olímpicos de verano se celebraron en Atenas desde el 13 al 29 de Agosto. Durante estos 16 días se celebraron los eventos deportivos, que reunieron a delegados de 201 países y más de 10000 atletas (5296 hombres y 5329 mujeres). A nivel estrictamente deportivo, el gran protagonista fue Michael Phelps. El joven nadador americano llegaba a Atenas con la mente puesta en los siete oros olímpicos del mítico Mark Spitz. Todo, con sólo 19 años. Al final no pudo igualar a Spitz, pero acabó con un palmarés para la historia: seis oros, dos bronces y un récord del mundo. Las medallas tienen más valor todavía si se tiene en cuenta que compitió contra otros dos monstruos como el australiano Ian Thorpe o el holandés Peter van den Hoogenband. La final de los 200 metros lisos, que Thorpe arrebató al joven estadounidense es uno de los momentos que quedaron para la historia de la natación y del olimpismo. 76 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Y si los de Atenas fueron los Juegos Olímpicos que dieron la bienvenida a Phelps como figura del deporte mundial, hubo otros que en Grecia se despidieron tras una trayectoria envidiable. Es el caso, por ejemplo, de Maurice Greene, otrora recordman mundial de los 100 metros lisos, que fue superado en la final de esta disciplina por su compatriota Justin Gatlin. Fue el final de una trayectoria llena de éxitos, con un oro olímpico y tres campeonatos mundiales, tan sólo ensombrecida por las lesiones. Pero quizás el caso más paradigmático fuera el del polaco Robert Korzeniowski, plusmarquista mundial de los 50 km. marcha y campeón olímpico. Lo curioso del caso es que Korzeniowski, un mito dentro del mundo del atletismo, dejó la competición para pasar a entrenar al que había sido uno de sus rivales de más entidad: el español Paquillo Fernández. En cuanto al medallero, la clasificación se mantuvo de manera muy similar a las anteriores Juegos Olímpicos de Sídney, con Estados Unidos al frente con 36 medallas de oro y 102 medallas en total, siendo China segunda en el medallero con 32 de oro, y relegando a Rusia al tercer lugar con más medallas en general, pero solo 27 de oro. En cuanto lugar se mantuvo Australia, seguida de Japón, Alemania, Francia, Italia, Corea del Sur y Reino Unido que cierra el top 10 de esta edición de los Juegos. Los resultados, 3 oros, 11 platas y 4 bronces, si nos remitimos exclusivamente al número de galardonados con medalla, no fueron excesivamente exitosos. Ahora bien, es necesario destacar un elemento ciertamente positivo: la participación femenina española, que en estos Juegos se aproximó ostensiblemente a la masculina. Concretamente, los deportistas masculinos convocados por el COE fueron 182 y los femeninos, la no despreciable cantidad de 139. La aproximación entre unos y otros fue evidente. BEJING, 2008 Los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 se disputaron entre 8 y el 24 de agosto de 2008. Comenzó el 08/08/2008 debido a la importancia del número 8 en este país, considerado el número de la suerte chino, y con el dorsal que, curiosamente, nuestro ciclista español Samuel Sánchez consiguió la medalla de oro en la prueba de ciclismo en ruta. Ricardo Leiva Román 77 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Esta edición de los Juegos Olímpicos contó con 302 pruebas en 28 deportes en las que participaron unos 11000 atletas provenientes de 204 comités olímpicos nacionales. Los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 se convirtieron en el evento más costoso de la historia olímpica, alcanzando un costo que habría superado los 44000 millones de dólares, casi triplicando el presupuesto final de su antecesor. Beijing 2008, probablemente fueron los mejores juegos y las mejores instalaciones de la historia, donde cada deportista es una estrella en busca de la perfección absoluta. A continuación comentamos los momentos cumbres o más relevantes de estos juegos, en cuanto a la competición deportiva se refiere. ¾ Las lágrimas de todo un país. Liu Xiang, el ídolo nacional, no pasa de semifinales en los 110 metros vallas. Una lesión grave y demasiada presión, apagaron la esperanza China. ¾ La caída de Marta Domínguez en la recta de meta de los 3000 metros obstáculos cuando luchaba por su medalla. ¾ Usain Bolt, protagonista absoluto en el atletismo. Nacido para correr y para ser el hombre más rápido del planeta. El más veloz de todos los tiempos. Sin límites. 100 metros en 9 segundos 69 centésimas. 200 metros en 19 segundos 30 centésimas. ¾ Michel Phelps, auténtico protagonista de los Juegos Olímpicos, con sus 8 medallas de Oro y sus 15 records del mundo, superando la marca de 7 Oros de otro grande como Splitz. En la memoria de todos, la carrera donde ganó su octavo oro por una sola centésima. En cuanto a los resultados y medallero, China desbancó a Estados Unidos del primer puesto del medallero con sólo 100 medallas, por las 110 de Estados Unidos, pero con 51 de oro, por las “sólo” 36 de los americanos. En tercer lugar se sitúa Rusia con 23 de oro, seguido de Reino Unido, Alemania, Australia, Corea del Sur, Japón, Italia y Francia que cierra el top 10 de esta edición de los Juegos Olímpicos. 78 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico La participación española fue de 164 hombres y 122 mujeres teniendo un aumento en la cantidad total de mujeres españolas participantes. En el medallero, España sumó 5 de oro, 10 plata y 3 de bronce. 2.3. El deporte en España hasta el siglo XIX. Para poder entrar a valorar posteriormente la relación existente entre la realidad social, política y económica, y la consecución de resultados deportivos y más concretamente en los JJOO, es necesario realizar un análisis previo y contextualizar en qué situación se encontraba el deporte en España hasta este siglo XIX, contextualizando también de manera general como se encontraba el deporte a nivel mundial. Para comenzar, es muy importante resaltar lo que nos dice el Diccionario de las Ciencias del Deporte: “El deporte resulta de la transformación de los contextos de la realidad en términos de ritualización y de simbolización de acciones reales. Las acciones deportivas (sobre todo las actividades motrices) son en cierto sentido acciones liberadas, acciones sustraídas a las finalidades determinadas del mundo cotidiano y del mundo del trabajo, lo cual no significa que carezcan de objeto, pero hace que no estén sometidas exclusivamente a consideraciones tradicionales de utilidad. La caza o la pesca son dos ejemplos claros de cómo una actividad, en principio utilitaria, se ha convertido en disciplinas deportivas, estableciéndose reglas y procedimientos, que debemos interpretar, comparándolas con la acción original, como formas de acción ritualizadas” (Diccionario de las Ciencias del Deporte, 1992:574-­575). Al deporte lo podemos distinguir a lo largo de la historia humana de una forma cambiante, como cualquier otra manifestación humana, adaptándose a las condiciones y exigencias culturales del momento. De hecho, su denominación no ha sido siempre igual, como podemos comprobar con ejemplo en Jovellanos, que a la hora de definir la caza o los juegos de pelota se refieren a ellos como pasatiempos o diversiones (Vázquez, 2003). Las formas del deporte habrían ido evolucionando conforme evolucionaba la sociedad, adaptándose a la misma, reflejando esas características y reforzando en sus miembros esos principios de organización social. Más que un cambio de Ricardo Leiva Román 79 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico unos a otros deportes distintos según el grado evolutivo del grupo o sociedad, sería un cambio en las formas, de los mismo o parecidos deportes (Rodriguez López, 2000). Ya con Platón (427-­347 a. de C.), filósofo que más importancia ha dado al deporte en la educación, encontramos aspectos que relatan la importancia del deporte para él. Platón daba gran importancia a la música y la gimnasia para la educación general, para la formación del “carácter” como el mismo expresaba: “Son pues, estos dos principios los que, en mi opinión podríamos considerar como causas de que la divinidad haya otorgado a los hombres dos artes, la música y la gimnástica, no para el alma y el cuerpo, excepto de una manera secundario (…) con el fin de que estos principios lleguen, mediante tensiones o relajaciones, al punto necesario de mutua armonía. (…) Por consiguiente, el que mejor sepa combinar gimnástica y música y aplicarlas a su alma con arreglo a la más justa proporción, ese será el hombre a quien podamos considerar como el más perfecto y armonioso músico, con mucha más razón que a quien no hace otra cosa que armonizar entre si las cuerdas de un instrumento”. También Aristóteles hacía referencia al deporte en alguno de sus escritos: “Puesto que es notoria que la educación debe hacerse primero mediante el hábito antes que por la razón, y que se ha de ocupar del cuerpo antes que de la mente, es claro que los niños deben ser confiados al maestro de gimnasia y al entrenador deportivo, que les harán adquirir cierta disposición física y cierta destreza en sus acciones, respectivamente” (Política, V.3). Para algunos pensadores el deporte no es más que un tipo de juego;; Huizinga considera al deporte “como una forma lúdica, aunque admite que desde el último cuarto del siglo XIX, los juegos en forma de deporte se han tomado cada vez más en serio” (Huizinga, 1990). El autor además destaca que el tránsito de la diversión momentánea a un sistema organizado de clubes, distingue el juego de siempre con el deporte moderno (Vázquez, 2003). 80 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Reuniendo alguna definición más sobre deporte encontramos la de Van Blijenburg, que dice que “el deporte es todo esfuerzo corporal, individual o colectivo practicado con el fin de afirmar victoriosamente la superioridad del individuo o del equipo sobre sí mismo o sobre el adversario inerte o animado”. Por su parte Carl Diem definiría el deporte como “un juego portador de valor y seriedad, practicado con entrega, sometido a reglas, integrador y perfeccionador, ambicioso de lo más elevados resultados. En otro trabajo, Diem nos dice que el deporte es la realización explosiva del mundo civilizado en forma de estallido deportivo como la protesta viva de nuestras fuerzas anuales contra la restricción de movimiento impuesta por el tecnicismo. Deporte es recuerdo y renovación cósmica de fuerzas vitales”. Podemos afirmar que el juego deportivo como manifestación cultural se ha producido en todas las épocas de la evolución de la especie humana, aunque con diferentes nombres y significados. Lo que también es claro es que en toda la terminología deportiva que empleamos surge a menudo, la palabra juego para definir algunas de sus acciones. Pero al hacer referencia al deporte o juego deportivo debemos remitirnos mucho más atrás en la historia. Ya en la Prehistoria (2.500.000 y 4.000.000 a. C.) encontramos en el registro arqueológico gran parte de material constituido por accesorios relacionados con el juego: tableros de puntuación, dados, palos, bolas de piedra, artefactos de juego. Aunque el ejemplo mejor documentado del deporte prehistórico es el juego de pelota mesoamericano, debido a su gran distribución geográfica, las numerosas canchas existentes, las representaciones pictóricas de los incidentes del juego. También debemos hacer referencia al juego deportivo en la cultura griega (VII-­II a.C.). Gimnasia y deporte pasarán a ser piezas esenciales en la educación estética y moral, y así lo señala con claridad la siguiente máxima griega: “No hay educación sin deporte, no hay belleza sin deporte, sólo el hombre educado físicamente es verdaderamente educado y hermoso” (Vázquez, 2003). Ricardo Leiva Román 81 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Para los griegos la competición era un principio vital, no sólo por el rendimiento deseado, sino por su propia práctica con independencia de todo objetivo. Este amor por el deporte y la competición hacen posible la aparición de diferentes competiciones o espectáculos deportivos en los que encontraríamos los Juegos Olímpico de la antigua Grecia, con actividades de lanzamiento, carrera, salto… Juegos Olímpicos recuperados en la época moderna como hemos visto en puntos anteriores. Tampoco podemos olvidar el deporte en Roma (509 a.C-­476 d. C). Roma muestra una singularidad e importancia muy destacable en la historia del deporte. Sus característica son la pasividad frente a la actividad del deporte griego;; el deporte en Roma es, fundamentalmente, un gran espectáculo montado para cumplir una función política. La literatura sobre juegos y espectáculos romanos es abundante. Y con esta breve contextualización global, pasamos a centrarnos al juego deportivo en nuestro país. En concreto, comenzaremos analizando el juego deportivo en la España medieval. Los juegos y los espectáculos públicos durante la Alta Edad Media como los juegos circenses, juegos gladiatorios, termas y representaciones teatrales, decaen rápidamente al tiempo que desaparece la vida urbana y la presión moral cristiana que siempre estuvo en contra de estas actividades. En esta época es importante el nombre de Isidoro de Sevilla, enciclopedista, historiador, poeta, filósofo, sabia y santo y unas de las mentes más preclaras de Europa. Con relación a las actividades relacionadas con los juegos y las diversiones públicas, el libro V que trata de las leyes y los tiempos, nos habla de las Olimpiadas, diciendo que: “entre los griegos comenzaron a celebrarse las Olimpiadas cerca de la ciudad griega de Elide, cuando los elios empezaron a disputar juegos y torneos quinquenales, dejando transcurrir entre ellos un lapso de cuatro años” (Isidoro de Sevilla, 1995). Además a lo largo de sus escritos hace referencia también a los edificios y campos cuando nos dice: “Gimnasio designa, en general, el lugar donde se hace ejercicio. (…) Pero también los baños y lugares en que se practican carreras y atletismo reciben el nombre de gimnasio”. 82 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico En toda esta época seguían teniendo su importancia, algunas actividades que más que deportes eran espectáculos a los que Isidoro recomendaba no asistir. Entre los Juegos gimnásticos, que consiste en la velocidad y el motivo de gloría para los hombres, nos dice que hay cinco clases diferentes: salto, carrera, lanzamiento, fuerza y lucha. También señala que el salto puede ser de altura o de longitud. La carrera debe su denominación a la velocidad de piernas. El lanzamiento deriva de iacere (arrojar). A la práctica de este deporte pertenece el lanzar lo más lejos posible piedras levantadas a pulso, el arrojar lanzas de determinado peso y disparar flechas con el arco. La lucha recibe su nombre de la acción de trabarse los costados, en los que se apoyan los luchadores que en griego reciben el nombre de atletas. También es obligado hacer referencia al juego deportivo en la España musulmana. Tras la invasión árabe, la estructura construida durante siglos por Roma y el Cristianismo fue destruida pero, sin embargo, ese periodo significó para gran parte de la Península una época de expansión cultura y económica. Con relación al deporte en esta época, con la poca información que sea dispuesto para investigar este aspecto, podemos pensar que tuvieron un pasado rico en juegos y diversiones deportivas. Sorprende comprobar cómo en la cultura árabe no ha quedado nada relacionado con el mundo del juego, ni en las tradiciones orales ni en las tradiciones escritas (Vázquez, 2003). En cuanto actividades deportivas encontramos la caza, el polo, la danza, la tabla (consiste en que jinetes a galope que lanzaban con destreza unos palos sobre un blanco de madera), y tal vez, lo más importante, los Juegos moriscos organizados por Aben Humeya en 1569. Las pruebas que se organizan en la actualidad intentan ajustarse con la máxima fidelidad posible a las competiciones que convocó el rey morisco: lucha, levantamiento de peso, sostenimiento de ladrillo, carrera de velocidad y tiro con arco. De cara a la recuperación del juego deportivo en nuestro país es muy importante, dado que es el único rasgo histórico que representa la celebración de unos Juegos en el siglo XVI, cuando la tradición olímpica del mundo griego estaba olvidada. Los juegos moriscos de Purchena, según Pérez de Hita fueron los siguientes: Ricardo Leiva Román 83 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico “Pues es de saber que Abenhuyema, después del cerco de Vera, tan vano a su pretensión, se retiró a Purchena con todo su campo, determinando a aguardar allí a Murcia y su reino, si acaso si fuera lo querían seguir, y visto que Lorca y Murcia no le seguían, determinó hacer unas solemnes fiestas de esta forma: 1. Al que en travada lucha mejor lo hiziese, le darían cien escudos de oro y le coronaría de hojas de laurel. 2. Más aquel que se mostrase más suelto y corriese más ligero y llegase primero al puesto disputado, otros cien escudos de oro. 3. Más al que de tres saltos alcançase más tierra por medio le daría otros cien ducados de oro. 4. Más al que más tiempo sustentase un canto de seis arrobas en el ombro, le daría cien ducados de oro y un rico alfanxe. 5. Más al que mejor y más gallardamente dançase la zambra con una bella Mora, le daría la ropa de seda fina hecha en Argel. 6. Más a la mora que mejor dançase, le daría una riquísima marlota y quatro almaizales finos. 7. Más al moro que mejor tañese y cantase a la morisca y mejor canción dixesse o romance, le daría un hermoso caballo aderezado y enjaezado. 8. Más a la mora que cantase mejor y mejor canción arábifa dixese, le daría una hermosa marlota guarnecida de oro. 9. Más al moro que mejor tirador fuese de canto, treinta escudos de oro y un alfanxe. 10. Más al moro que mejor tirase con escopeta o arco le daría diez ducados de oro. 11. Más al moro que tirase más derecho y más certero con honda le daría diez ducados de oro. 84 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico 12. Todas estas fiestas y cosas se avían de hacer en la Plaça de Purchena, que para poderlos hacer era muy grande y ancha y para esso mandó que la plaça fuese aderezada y arenada, y todas las paredes y ventanas entoldadas de ricas telas de seda y lienços labrados y blancos…, todo lo cual se debía hacer en doce días. Mandó Abenhumeya que a un lado de la plaça se pusiese un rico dosel de seda y debaxo del dosel un rico asiento para que él se sentase, y otros asientos de no tanto valor para sus Capitanes y Cavalleros más allegados” (Acosta Moreno, 1979 en Vázquez, 2003:228). Aunque en esta contextualización y cronología histórica del juego y del deporte, no podemos olvidarnos de la figura de Alfonso X El Sabio (1252-­
1284). Uno de los primeros autores del juego en nuestro país fue él, que veía en ellos un don de Dios. Es en “Las Siete Partidas” donde Alfonso X recoge toda la información necesaria para conocer como se vivía en la época en que se compuso el texto: usos y costumbres de las gentes, ceremonias, faustos, galas, rituales, la guerra y la paz, el cautiverio, la convivencia entre moros, cristianos y judíos, la enseñanza y sus instituciones, etc. A lo largo de la obra, el juego deportivo es tratado con cierto rigor estableciendo las normas para su práctica y definiendo las actividades propias de la época, sobre todo aquellas relacionadas con la guerra, la caza y los toros, actividades estrechamente ligadas a la clase caballeresca, clase dominante y protectora de la sociedad medieval. Cuando se refiere a otras clases sociales como la religiosa o el pueblo llano, casi siempre es para limitar su práctica o para prohibirla, por lo que no toda la sociedad tenía acceso a estas actividades deportivas. A partir de aquí ya nos introducimos en los juegos y actividades deportivas en España de los siglos XVI y XVII dentro de la edad moderna. Podemos indicar que el juego deportivo se fue desligando del mundo religioso, en contra de la Iglesia que hacía todo lo posible para controlarlo. Durante estos siglos, en España hubo un movimiento muy fuerte contra el mundo del juego, procedente de los sectores religiosos más conservadores que de alguna forma prolongó Ricardo Leiva Román 85 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico una trayectoria que veía de atrás y que siempre había hecho un tratamiento del juego con ciertos matices y recorte de cara a su difusión en el ámbito popular. Sin lugar a dudas, el siglo XVII fue para España un siglo de conflictos, crisis permanente, ruina económica y derrumbamiento imparable. El hecho de mantener la misma estructura social de los siglos pasados, agravado por las continuas guerras, donde nuestro país salía de perdedor, y las grandes epidemias y problemas sociales, hizo que la situación general fuera de desastre generalizado (Vázquez, 2003). Todo esto comienza a cambiar en el siglo XVIII y el movimiento ilustrado, movimiento intelectual que trata de conseguir la modernización de la cultura y la reforma de la sociedad. Algunas de las ideas de este movimiento pueden resumirse en: ¾ Carácter universal de la razón humana. ¾ Respeto por la naturaleza. ¾ Creencia en la necesidad de un progreso. ¾ Un nuevo humanismo. ¾ La tolerancia religiosa. ¾ Preocupación por la educación como medio fundamental para cambiar la forma de pensar de la gente. Y todo esto cambio afecta de manera directa, como es obvio, en la práctica física. Jovellanos, en algunos de sus escritos, nos sorprende introduciendo en el campo educativo algunas actividades deportivas: bailar, nadar, esgrima y equitación. Es el primer autor español, que hace un tratamiento específico sobre la educación física, diciendo que la educación pública que pertenece al gobierno tiene por objeto, o la perfección física, o la intelectual y moral de los ciudadanos. La primera se puede hacer por medio de ejercicios corporales y debe ser general para todos los ciudadanos;; la segunda por medio de enseñanzas literarias (Jovellanos, 1995:299). 86 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Pero si alguien es importante en el cambio de la educación física y el deporte en general en nuestro país, esta es la figura de Francisco Amorós (1770-­1848), y que nos mete ya en las primeras décadas del siglo XIX. Amorós pasó su infancia en un ambiente militar y finalizados sus estudios civiles y militares a los 17 años es nombrado segundo teniente. Debido a sus relaciones con Godoy, es nombrado directo en 1806, del Real Instituto Pestalozziano de Madrid. Es en este punto cuando Amorós entre en juego, ya que orienta al centro hacia una formación militar y más gimnástica. Pero tras el resultado de la Guerra de la Independencia, el Instituto deja de funcionar y tiene que exiliar a Francia, donde consigue implantar su método gimnástico. Junto con el alemán Jahn y el sueco Ling, es considerado como uno de los artífices de la historia de la gimnasia moderna (AAVV, 1988). Amorós en su obra Nuevo Manuel completo de Educación Física, Gimnasia y Moral nos define lo que entiende por gimnasia: “La gimnasia es la esencia razonada de nuestros movimientos, de sus relaciones con nuestros sentidos, nuestra inteligencia, nuestros sentimientos, nuestras costumbres y el desarrollo de todas nuestras facultades. La gimnasia abarca la práctica de todos aquellos ejercicios que tienden a hacer al hombre más valiente, más intrépido, más inteligente, más sensible, más fuerte, más laborioso, más diestro, más veloz, más flexible y ágil, preparándole para resistir todas las inclemencias de las estaciones. Todas las variaciones del clima, para soportar todas las privaciones y contrariedades de la vida, vencer todas las dificultades, triunfar de todos los peligros y de todos los obstáculos, para rendir en fin, de insignes servicios al estado y a la humanidad. El bienhacer y la utilidad comunes son el fin principal de la gimnasia;; son sus medios la práctica de todas las virtudes sociales, de todos los sacrificios más arduos y generosos;; son sus resultados positivos la salud y la prolongación de la vida, la riqueza individual y pública” (Vázquez, 2003). Lo cierto es que la influencia de Amorós en nuestro país fue casi nula debido, por un lado, a que el centro tuvo una vida efímera, y por otro, su saluda a Francia que hizo que su obra no se conociese en España hasta muy entrado el siglo XIX. Ricardo Leiva Román 87 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Si hubo alguna manifestación lúdico deportiva a destacar sobre todas las demás a lo largo del siglo XVIII, esa fue la de los toros. Se convirtió en la actividad preferida de los españoles. El segundo juego en importancia fue el juego de pelota, que en algunas regiones alcanzó un auge extraordinario, como por ejemplo el País Vasco. Se jugaba a la pelota prácticamente por toda España. Otros juegos en este siglo de los que tenemos información de su práctica a nivel popular son los juegos de bolos, de billar, trucos, sortija, lanzamiento de barra y diversas modalidades relacionadas con el mundo rural. En este siglo la caza sigue siendo aún un deporte de nobles, y su práctica está prohibida para el resto de los ciudadanos. Pero es ya en el último tercio del siglo XIX cuando se asienta la cultura y la práctica deportiva en España. Desde una perspectiva social y cultura, el deporte se convierte en una realidad materializada y se consolida con el paso de los años entre sectores de la ciudadanía que lo acogen como signo y símbolo de un tiempo nuevo percibido con optimismo. En España, el impulso necesario para el desarrollo del deporte proviene de un ámbito urbano en imparable proceso de transformación. Este fenómeno se tiende a focalizar en ciudades como Barcelona, Madrid, o Bilbao;; sin embargo, en mayor o menos medida, lo experimentan gran parte de los espacios urbanos españoles desde mediados del siglo XIX. Los espacios urbanos se redefinen y en ellos se fraguan nuevas formas de concebir el tiempo y nuevos marcos de sociabilidad propios de una incipiente cultura del ocio, del que unos ciudadanos disfrutan y otros ansían disfrutar, convirtiendo su posesión en una constante reivindicación en la lucha por sus derechos. Es en este marco, donde social y culturalmente comienza a propagarse la idea de la actividad física como una manifestación del progreso y una cualidad de la civilización, entendida como el modelo de vida propio de los territorios considerados más desarrollados (Pujadas, 2011). 88 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico El gimnasio, organizado en 1879, es una más de las distintas experiencias que encuentran ahora acomodo en España. Este hecho lo corrobora que Madrid, por ejemplo, ya contará con 7 gimnasios en 1882. Toda esta explosión contribuye a la incorporación de distintas prácticas deportivas, como la organización habitual de un programa de regatas de remo, la introducción del patinaje, la promoción de una práctica unida a la modernidad como el ciclismo, o en el plano estatal, participar en la constitución de la Confederación Gimnástica Española, siendo una de las sociedades más antiguas entre las que configuran. La cultura del bienestar se convierte en un elemento referencial para entender la consolidación del deporte en España, una cultura que además ha llegado hasta nuestros días. En el caso de la asociación ejercicio físico y salid, es necesario integrarla en un marco social en el que el saber científico está muy bien considerado. Pero la función preponderante del gimnasio como espacio dedicado a la sociabilidad culta y elegante, la salud y la estética, lastra el desenvolvimiento de la gimnasia desde el plano de la actividad deportiva competitiva. Es necesario la existencia de una nueva generación, socializada desde la infancia en su práctica, para que se desarrolle esta vertiente de la gimnasia, lo que desemboca en 1899 en la constitución de la Confederación Gimnástica Española. De tardía organización, teniendo en cuenta que el gimnasio significa el primer hito en la penetración social del deporte en España (Pujadas, 2011). También hay que resaltar el nombre del ciclismo, cuya práctica se normaliza socialmente en España más tarde que la gimnasia, pero, a diferencia de lo sucedido con ésta, más acorde en el tiempo con lo que acontece en el espacio europeo, va a ser el primer deporte que se organice institucionalmente a nivel estatal, mediante la fundación, en 1895, de la Federación Española de Ciclismo (Pujadas, 1994). Entre el éxito de los gimnasios y el del ciclismo se producen dos hechos notables: el asentamiento de la cultura deportiva en España y que ésta comience a dar síntoma de una potencial difusión social. El deporte o, más Ricardo Leiva Román 89 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico propio del momento, el sport, asociado con éxito a la modernidad y que entronca con una cultura juvenil que se comienza a configurar en esta época de transformaciones, arraiga como un modelo de vida, que caracteriza a individuos más cultos y abiertos a los cambios. El éxito del ciclismo supone un punto sin retorno en lo que se refiere a la implantación de la cultura deportiva en España. La definitiva consolidación de ésta se produce con el arraigo de los deportes británicos, en un marco cronológico comparable al resto de Europa, completándose entre 1914 y 1920 lo que se podría denominar el primer ciclo de la deportivización en España (Elías, 1992). Y es ya en esos últimos años del siglo XIX, y ya entrando de pleno en el siglo XX que analizaremos más adelante, cuando se incorpora y entra con una fuerza descomunal en la sociedad el deporte del futbol. El éxito asociativo del fútbol, su grado de popularización, el creciente interés social en su práctica, su afianzamiento como espectáculo moderno vinculado a una incipiente sociedad de masas es una nueva realidad que llama la atención a las gentes que viven los años previos a la guerra 1914. Todo este interés de adaptación a la cultura deportiva por nuevos colectivos e instituciones significa una aceptación de que la sociedad se encuentra inmersa en un proceso de modernización del que ya no se puede permanecer al margen si se quiere seguir ejerciendo alguna influencia. Además, el hecho de promover la práctica deportiva como una fórmula válida para la socialización de fieles, reclutas, militantes o jóvenes a los que hay que regenerar físicamente o dotarlos de valores válidos para determinados colectivos, contribuye, sin lugar a dudas, a una mayor y más temprana difusión de esta práctica y le garantiza una participación, en un sentido cultura o social. 2.4. Origen del Olimpismo en España: Constitución del Comité Olímpico Español. A comienzos de siglo y en su plan y voluntad de aumentar en el mundo el número de embajadores olímpicos, Coubertin contacta con la casa reinante en España. La petición de Coubertin solicitando un miembro COI en España, 90 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico coincide con la regencia de la reina María Cristina, que encomienda la petición de Coubertin al criterio del Príncipe Carlos de Borbón que seleccionó para tal cometido a D. Gonzalo de Figueroa y Torres, Conde de Mejorada del Campo y Marqués de Villamejor. En carta dirigida a Coubertin, el 21 de febrero de 1902, D. Gonzalo de Figueroa le comunica: “acepto con satisfacción el honor de representar a la España deportiva formando parte de su Comité. Gran entusiasta del deporte, me he convertido por desgracia y desde hace cinco años en simple adorador platónico a causa de una desgraciada caída de caballo. Los deportes en España, después de la muerte de nuestro recordado Rey, Alfonso XII, no están muy en boga, pero es de esperar que con un joven monarca, tengamos por lo menos un poderoso protector. Tengo igualmente dos títulos heredados de mi familia, el de Marqués de Villamejor y el de Duque de las Torres. Como usted puede ver, resulta un poco complicado. Siguiendo sus consejos, he encargado al Sr Lozoya, muy conocido en los medios deportivos, que os girara visita en mi nombre, y la tarea de agrupar a los representantes de las diferentes sociedades. Desgraciadamente, siempre existe la misma respuesta, pues temen no poder hacer un buen papel en un concurso internacional, y rechazan presentarse. Todos los deportes – continua-­ que figuran en sus concursos, son de importación demasiado reciente en España;; nuestros deportes nacionales, son el juego de pelota y el manejo de los toros, sin incluir naturalmente las corridas de toros. Realizo todos mis esfuerzos para poder enviar un equipo de corredores y otro de esgrima”. En el contexto de la carta de Villamejor se traduce la preocupación por el desarrollo de un cometido que Coubertin le ha confiado, cual es el de la creación de un Comité Olímpico que pueda agrupar a los clubes deportivos existentes y hace a la vez desalentador balance del nivel técnico medio de las diversas modalidades deportivas internacionalmente en boga, integradoras del calendario de los Juegos Olímpicos recién restaurados (Durántez y Español, 2003). Durante este periodo, Coubertin presiona una y otra vez para que se constituya un Comité Olímpico en España, enviando inclusive una medalla conmemorativa a la Reina para que esta se interese por los Juegos Olímpicos. Ricardo Leiva Román 91 Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico Sin embargo, el empeño del Presidente del COI no acaba de encajar en España, ante la incomprensión de los que un Comité Olímpico podría significar. Tras unos años de confusión, y resignado, D. Gonzalo continua en su puesto de miembro del COI a pesar de la carga de sus muchas responsabilidades política y su delicado estado de salud. Pero los acontecimientos políticos nacionales, habrían de influir de forma involuntaria pero decisiva, en el panorama olímpico nacional. El asesinato de José Canalejas en noviembre de 1912, a manos del anarquista Pardiñas, hace que le sustituya en la Presidencia del Consejo de Ministros, el liberal D. Álvaro de Figueroa y Torres, Conde de Romanones. El talante intelectual, activo y aperturista del nuevo Presidente, habrá de influir sin duda en estímulo y apoyo a su hermano Gonzalo, a quien convence, ilusiona y motiva en las funciones olímpicas, que hasta el momento había venido desempeñando de forma un tanto irregular… Ello da inicio al nuevo período, que con la fecha de creación del Comité Olímpico Español ocurrida el 23 de noviembre de 1912, según carta de D. Gonzalo de Figueroa a Coubertin de 20 de noviembre del mismo año, la que por su importancia y primicia se transcribe íntegra: “Querido Presidente y amigo, el odioso crimen del que ha sido víctima el Sr. Canalejas, pudo así privarnos también del Sr. Alba en el Ministerio de Instrucción Pública, lo que sería entonces un trabajo a recomenzar con el nuevo Ministro. Afortunadamente, él continua como todos los Ministros, bajo la Presidencia de mi hermano Romanones, y adjunto su respuesta favorable, pues ha aceptado la invitación y va a nombrar un representante para el Congreso de Psicología y Filosofía Deportiva. Pide también, todos los antecedentes sobre el acontecimiento. Tengo también la satisfacción de comunicarnos, que el sábado constituiré mi Comité Español de los Juegos Olímpicos, estando decidido a consagrarme a él en cuerpo y alma, temiendo siempre no haber sido el hombre adecuado para el cargo, pero en este caso de Vd. Será la culpa, por no haberme querido reemplazar”. Veinticuatro días más tarde y en carta fecha del 2 de diciembre de 1912, Villamejor remite a Coubertin el Acta constitutiva del Comité Olímpico Español: “adjunto –le dice-­ el Acta de constitución de nuestro Comité. Si hubiera algún defecto, ruego me la devuelva para corregirla. Espero que llegaremos a 92 Ricardo Leiva Román Fundamentación Teórica Perfil del Deportista Olímpico obtener buenos resultados y una vez más será a vuestra perseverancia y energía a quien se deberán”. El diligente dinamismo de Coubertin, se pone una vez más de manifiesto, debiendo de responder con inmediata misiva de júbilo congratulante a la constitución del COE comunicada. A ella contesta Villamejor el 9 del mismo mes y año 1912: “Con gran place he recibido vuestros parabienes. Pero es a Ud. A quien corresponde la gloria de la constitución de nuestro Comité. Como veréis, cuando disponga de papel timbrado, nosotros no somos más que una filial del Comité Internacional, ubicados bajo vuestro alto patronaje” (Durántez y Español, 2003). Y de esta manera queda constituido el Comité Olímpico Español, siendo el primer presidente D. Gonzalo de Figueroa y Torres (1912-­
1921), y cogiendo la presidencia en 1924 D. Santiago Güell y López Barón de Güell, después de 2 años de desconcierto tras la muerte de Gonzalo de Figueroa, quedando nuevamente constituido el COE tras esos años sin presidente. La nueva constitución del COE, figuraría en el nº 14, entre los más antiguos, únicamente por detrás de: Francia (1894), Grecia (1895), Alemania (1895), Hungría (1895), Noruega (1900), Dinamarca (1905), Gran Bretaña (1905), Bélgica (1906), Finlandia (1907), Canadá (1907), Portugal (1909), Turquía (1911) y Suiza (1912) (Gómez, 2010:4). Ricardo Leiva Román 93 PARTE SEGUNDA: MARCO METODOLÓGICO III. OBJETIVOS Marco Metodológico Objetivos de Investigación 3. Objetivos de investigación Después de realizar el planteamiento de la cuestión, la justificación y la fundamentación teórica, donde se ha realizado una argumentación del nacimiento y evolución del deporte moderno, desde una perspectiva sociocultural, junto a la descripción del nacimiento y evolución del olimpismo, para finalizar con el deporte en España y el Comité Olímpico Español, nos encontramos en la disposición de plantear los objetivos de nuestra investigación. A continuación exponemos el objetivo general: Conocer el efecto de las distintas variables de orden sociocultural, en los participantes en todos los Juegos Olímpicos modernos celebrados hasta la fecha. Y en consecuencia, los objetivos específicos de nuestra investigación son: 1. Conocer el número de participantes del equipo español por género en todos los Juegos Olímpicos modernos 2. Conocer el número de participantes del equipo español por modalidad deportiva en todos los Juegos Olímpicos modernos 3. Analizar el resultado de los participantes del equipo español en todos los Juegos Olímpicos modernos 4. Conocer el número de participantes del equipo español por estructura deportiva en todos los Juegos Olímpicos modernos 5. Conocer el número de participantes del equipo español por zona geográfica en todos los Juegos Olímpicos modernos Ricardo Leiva Román 99 IV. METODOLOGÍA Marco Metodológico Metodología 4. Método En este capítulo, se desarrolla el verdadero eje vertebrador de la investigación, con la intención de estudiar a los deportistas españoles que participaron en los Juegos Olímpicos de la era moderna y sus resultados, desde 1896 hasta 2008. Al afrontar esta parte tan importante de nuestro trabajo, debemos resaltar los procesos realizados, de forma clara y eficaz. Esta investigación se ha realizado desde una planificación y posterior desarrollo de la misma, que han permitido seguir el proceso con rigor y orden. La planificación que hemos seguido es: Primera fase: (Enero 2011 a Septiembre 2011) Definición del problema. Investigación documental. Construcción de la fundamentación teórica. Elaboración de los objetivos. Delimitación del objeto de estudio. Formulación de las hipótesis. Planificación del diseño metodológico. Segunda fase (Octubre 2011 a Junio 2012) Análisis e interpretación de los resultados. Comprobación de las hipótesis. Obtención de las conclusiones. Revisión de cada una de las partes. Elaboración final de la investigación. Ricardo Leiva Román 103 Marco Metodológico Metodología 4.1 Estrategia de Investigación La investigación es un proceso separado en etapas, desde la pregunta de investigación hasta la conclusión final, dicho proceso dependiendo de bajo qué condiciones serán obtenidos los datos que nos van a permitir dar respuesta a las preguntas de investigación planteadas. Podremos estar hablando de un paradigma cualitativo o cuantitativo. Se trata de proporcionar dentro de una modalidad de investigación apropiada, las respuestas más válidas y acertadas a las preguntas que se formulan (McMillan y Schumacher, 2005). Para Heinemann (2003), los historiadores del deporte escogen documentos en los archivos y realizan entrevistas cualitativas a testigos de una temporalidad que se quiere estudiar, con el objetivo de comprender mejor la evolución del deporte. Por ello, en conformidad con los objetivos y las preguntas de investigación planteados en este estudio, la presente tesis doctoral se enmarca dentro de una investigación historiográfica, a través del cual se pretende describir la participación y el resultado de los deportistas españoles a lo largo de todos los Juegos Olímpicos de verano desde 1896 a 2008. Para este fin, se optó por una investigación histórica comparativa. La investigación no experimental se caracteriza por llevar a cabo estudios empíricos y sistemáticos en los que el investigador no posee el control directo de las variables independientes (Kerlinger y Lee, 2002), es decir, el investigador no ejerce ninguna influencia directa o manipulación sobre los factores que pueden influir en el comportamiento. Este tipo de investigación es bastante frecuente en el ámbito de la ciencias sociales y, más concretamente, en educación, ya que muchas variables de interés son difícilmente manipulables. Dentro de la investigación no experimental, los estudios históricos comparativos constituyen una de las modalidades de investigación más habituales, a través de los cuales se pretende proporcionar información sobre los hechos, los intereses, las actitudes, los comportamientos u otras características de un grupo de sujetos a lo largo de una temporalidad. La finalidad de estos estudios es comparar la situación histórica de un fenómeno en el momento de realizarse el estudio social (Cardona, 2002). 104 Ricardo Leiva Román Marco Metodológico Metodología Los procesos sociales y deportivos se caracterizan por su carácter complejo, en el que las interacciones entre los distintos tramos de la historia presentan una cronología de acontecimientos no lineal. De este modo Martínez, González, Souto y Blanco (2009), argumentan que: En la historia de las configuraciones sociales el campo de probabilidades se distribuye desigualmente, en función de las posibilidades de ocurrencia, dibujando escenarios de mayor o menor probabilidad, articulados sobre la base de las complejas interacciones entre los ecosistemas sociales y los campos de expectativas y percepciones en juego, cuyas relaciones sociodinámicas pueden resultar alteradas por la irrupción de lo inesperado, lo imprevisto y lo azaroso, recombinando en una nueva configuración las variables sociales en juego, diseñando nuevos escenarios sociales en los que el horizonte de sucesos es recompuesto en un nuevo campo de probabilidades, donde las representaciones y percepciones sociales, las identidades, las coordenadas sociales, económicas, políticas y culturales son reconfiguradas en nuevos sistemas de referencia, que configuran las distintas coyunturas que una vez acontecidas se transforman en Historia. El conocimiento historiográfico es capaz de reconstruir las trayectorias en las que los campos de probabilidades quedan resueltos en una particular configuración espaciotemporal. En este sentido, la búsqueda en distintas fuentes, permite recabar información significativa sobre una población en tiempo determinado (Wallen y Fraenkel, 2001), a la vez que permite comparar distintos tramos temporales de una época. Los objetivos y preguntas de investigación en esta tesis guiaron, por tanto, el diseño de una investigación historiográfica, que incluye comparaciones múltiples, considerando la búsqueda en las fuentes como el procedimiento de investigación más adecuado para responder a los problemas de investigación planteados. 4.2 Metodología En la presente investigación, la metodología utilizada ha sido la historiografía comparativa, donde se pone de manifestó el transcurso histórico de los Juegos Olímpicos de Verano de la era moderna y la participación de los deportistas españoles. Sin lugar a dudas, la primera actuación es la definición y contextualización del camino de investigación elegido, según Martínez, González, Souto y Blanco (2009): Ricardo Leiva Román 105 Marco Metodológico Metodología La historiografía está obligada a abandonar su carácter probabilístico para transformarse en lo ya sucedido, aunque los trayectos recorridos sean objeto de múltiples reconstrucciones, no todas ellas resultan pertinentes y esto es lo que distingue a la historiografía de la literatura o la ficción, lo que distingue al conocimiento científico del pensamiento mágico. Ahora exponemos una figura explicativa sobre la metodología historiográfica: Figura 3. Espacio y Tiempo, y el discurso historiográfico. Tomado de Martínez, González, Souto y Blanco, 2009. La historia puede servir para la reconstrucción de algo que intentamos descubrir. Junto a ello, la investigación histórica permite orientar y dar a conocer datos que puedan ayudar en el presente y en el futuro. Para Tamayo (2001): 106 Ricardo Leiva Román Marco Metodológico Metodología A lo largo del siglo XX, especialmente en su segunda mitad, diferentes autores han estudiado el movimiento olímpico, en el ámbito mundial, desde el punto de vista histórico. Pero, son muy escasos los estudios de este tipo en el ámbito del olimpismo español. Por ello, en la presente tesis doctoral, hemos intentado abandonar el estudio superficial de la historia del deporte y ofrecer un estudio profundo y sistemático de la historia del olimpismo español en los Juegos Olímpicos de verano de la era moderna;; desde sus orígenes hasta la celebración en Barcelona de los Juegos de la XXV Olimpiada, integrando todos los aspectos que lo conforman. Esta investigación incluye, no sólo los aspectos técnicos, sino también el estudio de la importancia económica en el deporte olímpico, sus influencias en la cultura y la sociedad española y, por supuesto, implicaciones de carácter político o social. Todo ello, encuadrado en el marco general de la historia de España y del olimpismo mundial. Partiendo del estudio de Tamayo (2001) sobre la historia de los españoles en los Juegos Olímpicos, nosotros hemos querido aumentar el objeto de estudio de esta importante temática, realizando un estudio comparativo entre periodos temporales, combinados con las variables: género, modalidad deportiva, resultados, estructura deportiva y zona geográfica. Siguiendo con Tamayo (2001), sobre las fuentes de investigación: Utilizando los datos obtenidos de las fuentes comentadas con anterioridad, para la elaboración de esta tesis doctoral hemos usado el instrumental metodológico que nos ofrecen las disciplinas sociales, en especial la historia. Hemos utilizado el procedimiento de análisis histórico, para encuadrar cada ciclo en su respectivo momento social y cultural, y así conocer las coordenadas en que se desenvolvieron las Olimpiadas de la era moderna;; ante la imposibilidad de aplicar el método experimental, debido a que esta tesis se centra en objetivos de contenido fundamentalmente histórico”. En nuestra investigación hemos diferenciado los Juegos Olímpicos en seis grandes periodos, con el objetivo de centrar en momentos históricos semejantes, ya que la fracción cada cuatro años, no nos permitía analizar los momentos históricos concomitantes. Tamayo (2001), realiza una explicación sobre las variables de su investigación histórica: Para ello, hemos agrupado por épocas, condicionadas por la propia historia de España en el siglo XX;; excepto las dos primeras épocas y la última, marcadas por la participación oficial de España en los Juegos Olímpicos y por la designación de Barcelona como sede de los Juegos de la XXV Olimpiada. Dentro de cada capítulo, aunque centrados en el olimpismo español, hemos resaltado los aspectos más relevantes en el ámbito mundial de cada edición Ricardo Leiva Román 107 Marco Metodológico Metodología de los Juegos, a fin de contextualizar la historia del olimpismo español con relación a la historia del olimpismo mundial, desde el punto de vista de la prensa española. En el abordaje de las distintas vertientes de estudio en las diferentes épocas, basándonos en este autor, hemos creído conveniente una nueva agrupación en: análisis de estructura de base, análisis de estructura intermedia y análisis de estructura final. Para finalizar, y siguiendo a Tamayo (2001): Hemos intentado abandonar el estudio superficial de la historia del olimpismo, que recoge los resultados técnicos y las anécdotas más relevantes sucedidas en cada edición de los Juegos. Para ello, introducimos la contextualización del olimpismo español en el olimpismo mundial, abordándolo desde las distintas vertientes en las que va teniendo incidencia: social, política económica, organizativa;; así como, las relaciones existentes entre estos aspectos, lo que sin duda permite una visión más real y equilibrada del tema y sus repercusiones. A pesar de la escasez de datos existentes, sobre todo en la primera mitad del siglo XX, hemos seguido un procedimiento mediante el que pretendíamos obtener un conocimiento objetivo de la realidad histórica del olimpismo español. Basándonos en Tamayo (2001), hemos realizado un estudio en profundidad de la participación y resultados de los deportistas españoles en los Juegos Olímpicos de verano desde 1896 a 2008, siendo fieles a nuestra estrategia metodológica y aportando una clasificación única en variables para la interpretación de toda la información de las fuentes. Dichas variables se escogieron a partir de la tesis doctoral inédita de Blanco (2012), titulada: Análisis socio-­deportivo del equipo olímpico español en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008. A partir de éste, se realizó la adaptación específica y fue sometido a un riguroso proceso de análisis en base a las siguientes variables: A) La perspectiva de género, sobre la participación y el resultado en los Juegos Olímpicos de verano, desde 1896 al 2008. B) Aspectos relacionados con la modalidad deportiva, sobre la participación y el resultado en los Juegos Olímpicos de verano, desde 1896 al 2008. 108 Ricardo Leiva Román Marco Metodológico Metodología C) Aspectos relacionados con los resultados deportivos, en los Juegos Olímpicos de verano desde 1896 al 2008. D) La estructura deportiva vinculada a la participación y el resultado en los Juegos Olímpicos de verano, desde 1896 al 2008. E) El contexto geográfico, desde la perspectiva de la participación y el resultado en los Juegos Olímpicos de verano, desde 1896 al 2008. Además, se consultó a profesionales expertos, entre los que se encuentran psicólogos, sociólogos y atletas olímpicos, de reconocido prestigio para la elaboración de las variables. 4.3 Fuentes En este aparado se identifica las fuentes consultadas para la realización de la presente tesis doctoral, y permite elaborar el planteamiento de la investigación, la construcción del marco teórico y el establecimiento del diseño metodológico. Junto a ello, hemos tenido que analizar una gran cantidad de datos, centrándonos en la historia del olimpismo español, 1896-­2008, en el contexto de los Juegos Olímpicos de verano. En el capítulo 9 recogemos toda la bibliografía consultada, basada en las fuentes primarias que son aquellas que conforman información en sí mismas. Son, por ejemplo, las leyes, los boletines oficiales, y las web institucionales. En cuanto a las fuentes secundarias nos referimos a material bibliográfico básico (libros y artículos en bases de datos). La bibliografía consultada asciende a más de 100 libros y artículos de revistas nacionales e internacionales. Básicamente, han sido analizadas en una búsqueda separadas por las variables objeto de estudio: Género, Modalidad Deportiva, Resultados, Estructura Deportiva y Zonas Geográficas. A continuación citamos las fuentes principales que nos han servido para obtener toda esta información: -­‐ Bibliográficas: monografías y compilaciones sobre olimpismo y Juegos Olímpicos. Ricardo Leiva Román 109 Marco Metodológico Metodología -­‐ Hemerográficas: revistas y artículos de revista generales y especializadas. -­‐ Documentales: Archivos de los registros del Comité Olímpico Internacional, y Comité Olímpico Español. Con relación a los centros de documentación consultados, los enumeramos según sean generales o especializados: Centros de documentación: Catálogo de la Biblioteca Nacional (base de datos): http://www.bne.es. Consulta en el Centro de datos Rebium (base de datos): http://www.rebiun.crue.org. TESEO, base de datos de tesis doctorales leídas en España, elaborada por el MEC, desde 1976. Se puede consultar un resumen de cada una de ellas y su localización. Consultado en http://www.mcu.es/TESEO/index.html. Tesis internacionales, Dissertation abstracts internacional (DAI), en http://www.oclc.org/oclc/fs_spanish/diss.htm. En el CSIC (base de datos): ISOC, ICYT, IME, CIRBICL, CIRBICR. ISOC, base de datos que incluye las referencias de artículos publicados desde 1975 en más de 1780 revistas de ámbito estatal, especializadas en ciencias sociales y humanidades (Economía, Psicología y Educación, Filosofía y Lingüística, etc.). Ofrece los datos bibliográficos y de localización. Los campos temáticos son: ciencias sociales y humanidades. FRANCIS, en campos temáticos (base de datos): Ciencias humanas, sociales y económicas, desde 1984. Centros de documentación relacionados con el Deporte y el Olimpismo: -­ 110 SPORTdiscus (base de datos). Ricardo Leiva Román Marco Metodológico Metodología - ATLANTIS (base de datos): base SPORT, distribuida por DIALOG y accesible en el Servicio de Información de la biblioteca de la Universidad de Alcalá. El campo temático corresponde a la documentación española sobre deporte desde 1980. - HÉRACLÈS, campos temáticos (directorio): Deportes, condición física, educación física, etc. Documentación en lengua francesa mayoritariamente, desde 1975. En http://www.sportdoc.unicaen.fr/heracles. - DIALNET - SCOPUS - ISI WEB (SPORT SCIENCE) - CONSEJO SUPERIOR DE DEPORTES - COMITÉ OLIMPICO ESPAÑOL 4.4 Hipótesis Para tener constancia de un proceso de realización de las hipótesis, partimos de la necesidad de acercar las variables de estudio a cada una de ellas. Por ello, hemos realizado la formulación de las hipótesis tenido en cuenta la revisión de las distintas fuentes de nuestra investigación. Primera Hipótesis: Existirán diferencias en la participación femenina y masculina en los Juegos Olímpicos de verano entre 1896 a 2008. Segunda Hipótesis: Existirán diferencias en la participación por modalidad deportiva en los Juegos Olímpicos de verano entre 1896 a 2008. Tercera Hipótesis: Existirán diferencias en los resultados en los Juegos Olímpicos de verano entre 1896 a 2008. Ricardo Leiva Román 111 Marco Metodológico Metodología Cuarta Hipótesis: Existirán diferencias entre la estructura deportiva en los Juegos Olímpicos de verano entre 1896 a 2008. Quinta Hipótesis: Existirán diferencias en la participación femenina y masculina por zona geográfica en los Juegos Olímpicos de verano entre 1896 a 2008. 112 Ricardo Leiva Román V. RESULTADOS Y DISCUSIÓN Resultados y Discusión 5. Resultados y discusión Vamos a reflejar los resultados y las discusiones separados por épocas. En primer lugar, vamos a empezar con el primer apartado de nuestra investigación dedicado a distintas etapas históricas, sobre la participación y el resultado en los Juegos Olímpicos de verano desde 1896 al 2008. En segundo lugar, y para un mejor entendimiento de la investigación introduciremos las variables de investigación en cada periodo histórico, dichos periodos están separados por distintos acontecimientos que han marcado las diferentes épocas de la investigación, por lo tanto, hemos creído conveniente separarla por 6 etapas cronológicas de la participación del equipo olímpico español: 1.-­Etapa desde 1875 a 1900 2.-­Etapa desde 1900 a 1918 3.-­Etapa desde 1918 a 1939 4.-­Etapa desde 1939 a 1960 5.-­Etapa desde 1960 a 1978 6.-­Etapa desde 1978 a 2008 5.1 Primera etapa histórica: de 1875 a 1900 La elección de este intervalo temporal se justifica por los hechos de carácter general, acaecidos en la historia de España, de importancia determinante por sus consecuencias futuras y de elevado impacto en la sociedad española de la época. Por una parte, el año 1875 es el punto medio entre los años 1874, en el que es “restaurado” el sistema político monárquico, con la figura de Alfonso XII y el año 1876, al que se añade el retorno del sistema “constitucional”, con la proclamación de una nueva Constitución, la más duradera hasta la fecha de la historia de España. Por otra, 1900 es un año con carga simbólica, pues representa el comienzo de siglo, dos años después de que España perdiera los últimos vestigios coloniales de ultramar: Cuba, Puerto Rico y las Filipinas. Ricardo Leiva Román 115 Resultados y Discusión 5.1.1 Análisis de la estructura “de base”: factores tecnoeconómicos y sociodemográficos. x Factores tecnoeconómicos: Para Tusell (1980), el sistema productivo español en esta época está dominado, predominantemente, por la agricultura. Centrada en cultivos mediterráneos tradicionales (trigo, vid, olivo) con unos rendimientos, por hectárea, cinco veces inferiores a Alemania o Inglaterra. Las técnicas agrícolas difícilmente se pueden modernizar por la imposibilidad de acceso al crédito. Los otros dos sectores predominantes son la ganadería, asociada a la agricultura y la minería, con rendimientos muy irregulares. En Cataluña existe un cierto grado de industrialización, fundamentalmente, en el textil y en la provincia de Vizcaya, comienza el proceso de industrialización vasco, centrado en la metalurgia. Carr (2010) confirma los datos aportados por Tusell, añadiendo que al factor financiero, que dificulta la modernización de las técnicas agrícolas, añade como fuente de desincentivación, la muy abundante mano de obra barata. x Factores sociodemográficos: Cortázar y Vesga (2011) apuntan que el crecimiento de la población evoluciona de 1874 a 1900, de 16.500.000 a 18.500.000, lo que consideran un ritmo próximo a la media de Europa Occidental. Tusell (1980) señala que el índice de mortalidad, alrededor de 1900, en España, del 29%, cuando la media en Europa Occidental es del 18%. 5.1.2 Análisis de la estructura “intermedia”: factores sociopolíticos, economía política y estructura social. x Factores sociopolíticos: Tusell (1980) sostiene que el sistema de gobierno político, desde la proclamada Constitución de 1876, es una Monarquía Liberal, de representación parlamentaria. Sin embargo, afirma que no ha de considerarse un sistema plenamente democrático, por lo menos porque el hacho de que el Rey compartía con la Cortes en poder legislativo y en el Senado tenían representación grupos no dependientes del “sufragio popular”, como la Iglesia y la Nobleza. Por 116 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión otro lado, también hay que señalar, como contrapartida, que existe el “sufragio universal” (masculino) en 1890, cuando en Inglaterra no existía plenamente. En el ámbito de la política exterior, para Tusell (1980) la relación con Europa es vaga y ambigua, de poca dependencia y relación y de pocos compromisos o pactos. x Economía política: Carr (2010) afirma que la economía es muy autárquica, localista y carrada, con productos económicos muy lastrados por tarifas proteccionistas. Cortázar y Vesga (2011) confirman a Carr, en cuanto a que las intervenciones económicas proteccionistas del gobierno mantienen a la economía española en una situación autárquica, a costa de una producción cara y de mediocre calidad. x Estructura social: a partir de los datos de Tusell (1980) y Carr (2010), la cantidad de población dedicada a tareas agrícolas y de vida en el ámbito rural fluctúa en un rango que va del 70% al 85%. Según Tusell (1980) solo el 16% se dedica a la industria y una porción de población que alcanza a las 300.000 personas trabaja en el servicio doméstico. Cortázar y Vesga (2011) afirman, que hacia el año 1900 la población activa española solo representaba el 35% y que un tercio de la población podía encuadrarse en una difusa categoría de “clase media”. El resto correspondía al proletariado agrícola e industrial. Según Tusell (1980), en 1900 el 63% de la población no sabía leer ni escribir (como comparación, esta situación en Francia solo representaba el 28% de la población). Por último, el sueldo medio fluctuaba entre las tres pesetas diarias en la industria catalana y la peseta diaria para los jornaleros del campo andaluz y extremeño. 5.1.3 Análisis de la estructura “final”: sistema deportivo general, situación del Olimpismo, participación en los Juegos Olímpicos. x Sistema deportivo general: Según Domínguez (2011), desde los últimos veinticinco años del siglo XI, el deporte, desde una perspectiva más cualitativa que cuantitativa, inicia su tímida implantación, comenzando a consolidarse a comienzos del siglo XX. Esta implantación muestra resistencias, en ocasiones intensas, en sectores tradicionales Ricardo Leiva Román 117 Resultados y Discusión de la sociedad, como por ejemplo, desde posiciones fundamentalistas en la Iglesia. Por otra parte, afirma que el Estado muestra muy poco interés y una alta desafección por este nuevo fenómeno, y apunta, explícitamente, que es esa actitud la que provoca que España no esté presente en los comienzos del Olimpismo y de la tardanza en la participación de los deportistas españoles en los Juegos. A partir de 1900, el incremento en la prosperidad económica, que principalmente se manifiesta en las ciudades de Madrid, Barcelona y Bilbao, y como resultado de la misma, va desarrollando progresivamente una nueva clase social, que va a tener un papel protagonista como motor que impulse a la promoción de las actividades deportivas: la burguesía empresarial. A falta del empuje del Estado, es este grupo social el que impulsa el asociacionismo, creando clubes deportivos y gimnasios. La burguesía urbana asocia el deporte a la modernidad y el progreso, lo que dota al deporte de un papel sociocultural más general. Al finalizar este periodo, los deportes que, concretamente, más se han establecido y difundido son, por una parte, el ciclismo no en vano, el primer ejemplo en España de organización institucional del deporte, lo representa el ciclismo con la creación de la primera federación deportiva en 1895: la Federación Española de Ciclismo, por otra, el fútbol que a principios de siglo comienza su imparable expansión -­el Barcelona F.C. se funda en 1899-­. x Situación del Olimpismo: Según Durántez (2003), en el congreso fundacional del Olimpismo y del Comité Olímpico Internacional de 1894, ya estuvieron presentes representantes españoles: los profesores de la Universidad de Oviedo, Aniceto Sela y Adolfo Posada y Adolfo Buylla, aunque no pasaron a formar parte del grupo de miembros del COI. Sin embargo, existía un deseo claro, por parte de Coubertin, de incorporar algún representante español a la composición del COI. Así, formuló su petición a la reina regente María Cristina, siendo nombrado, finalmente, para tal cargo, Gonzalo de Figueroa y Torres, Conde de Mejorada del Campo y Marqués de Villamejor. Éste recibe los encargos de constituir un comité nacional y preparar la primera representación española en los 118 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión Juegos. Sin embargo, para los dos objetivos encuentra dificultades insalvables, principalmente, por el momento de desarrollo que presenta el deporte de modelo anglosajón en España y por no recibir un mayor apoyo institucional. x Participación de los deportistas españoles en los Juegos Olímpicos de este periodo histórico: ATENAS 1896 En estos primeros Juegos Olímpicos nos encontramos con 295 atletas, todos hombres;; de ellos 197 fueron de Grecia;; el segundo equipo, Alemania, tuvo solo 19. Trece naciones diferentes, donde no se encontraba España. Y con sólo 43 pruebas en 9 deportes diferentes: Atletismo, ciclismo, esgrima, gimnasia, levantamiento de peso, tenis, lucha, natación y tiro (Rodríguez López, 2000). 5.2 Segunda etapa histórica: de 1900 a 1918. El intervalo de fechas es elegido por un criterio de continuidad, iniciándose el año 1900, final de la anterior etapa, con la significación ya indicada, y clausurándola en 1918, fecha de finalización del primero de los dos grandes conflictos bélicos (1914-­1918) que asolarán Europa durante el siglo XX, pero que en la práctica supuso una oportunidad histórica para España, fundamentalmente, por su neutralidad en el conflicto. De hecho, algunos historiadores de la economía han valorado esta etapa con el significativo calificativo de “el inicio del capitalismo español”, porque, básicamente, fue un momento que propició la entrada de grandes masas de capital y permitió la inicial acumulación del mismo para su posterior aplicación financiera y productiva. 5.2.1 Análisis de la estructura “de base”: factores tecnoeconómicos y sociodemográficos. x Factores tecnoeconómicos: Según Tusell (1980) en este periodo histórico se produce la introducción y generalización de nuevas técnicas agrícolas, que constituyen un factor muy positivo en la rentabilización de la principal fuente económica del país. También se ampliaron y Ricardo Leiva Román 119 Resultados y Discusión mejoraron ostensiblemente las infraestructuras de regadío, lo que permitió, entre otras cosas, el incremento de producción de variedades más rentables económicamente, como la naranja y la remolacha, entre otras. En el ámbito de otros sectores económicos, se produce una amplia expansión en el desarrollo de la producción industrial, aunque se sigue remitiendo a Cataluña y el País Vasco. x Factores sociodemográficos: Carr (2010) señala el proceso migratorio que se produjo en España durante los primeros quince años del siglo, proceso de migración de las zonas rurales a las grandes ciudades. Barcelona y Bilbao. Cortázar y Vesga (2011) indican la gran corriente emigratoria desarrollada en ese quinquenio en dirección, principalmente, hacia América y de modo, infinitamente más reducido, hacia Europa, principalmente a Francia: 1.500.000 de personas. También estos autores, señalan que el comienzo de siglo es el inicio de una curva de crecimiento poblacional, con una tendencia uniformemente acelerada, y que se extenderá más allá de este periodo, pese al momentáneo incremento de la mortalidad y descenso de natalidad, que se produjo por la epidemia mundial de gripe de 1918, con un cierto parón en esa curva de crecimiento de población. 5.2.2 Análisis de la estructura “intermedia”: factores sociopolíticos, economía política y estructura social. x Factores sociopolíticos: con relación a la política interior, Tusell (1980), Carr (2010), Cortázar y Vesga (2011) coinciden, grosso modo en que pese a que se mantiene estable la forma de gobierno de una manera relativamente estable -­ya mencionada en el análisis del periodo histórico anterior-­ da comienzo a un proceso de inestabilidad social, producto, entre otros factores, al crecimiento rápido de determinadas clases sociales con mayores oportunidades y motivos para la toma de conciencia política, críticas con sus situaciones socioeconómicas y sociopolíticas prácticas y que producen alternativas de actuación muy variadas. 120 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión Por otra parte, en el terreno de la política exterior, la aún reminiscencia del mayor interés de España por sus relaciones con las recientemente perdidas colonias ultramarinas y por sus últimas colonias en el norte de África, mantienen un importante distanciamiento con Europa, lo que influyó, con toda seguridad, en su posición neutral durante el primer gran conflicto bélico, de origen europeo, pero de extensión mundial. Sin embargo, también es cierto que esa posición neutral le ofreció un incremento relativo, en cuanto a su proyección mundial, con toda seguridad, por la influencia del -­casi obligado-­ incremento de las relaciones comerciales con los Estados en guerra. Un hecho que confirma esta situación circunstancial es la incorporación de España a la Sociedad de Naciones en 1919. x Economía política: Tusell (1980) indica, por una parte, que la pérdida de las colonias ultramarinas supuso, como factor positivo, la repatriación de capitales a España, que él cifra en la cantidad de unos 1.000 millones de pesetas de la época, lo que provocó, entre otras cosas, la creación de importantes entidades financieras (bancos) y se constituyó como uno de los motivos, del ya mencionado proceso de acumulación de capital. También señala que prosiguió la política proteccionista, pero que en esta ocasión, provocó consecuencias positivas para la economía del Estado, concluyendo que a partir de 1906, se produjo una indudable prosperidad económica. Posteriormente añade, que la Gran Guerra y la posición de neutralidad española, supusieron un impulso fundamental al capitalismo español: “algunos economistas cifran en 5.000 millones de pesetas de la época, el monto total de capital que entró en las arcas de los comerciantes e industriales españoles”. Finaliza señalando, que el proceso de cumulación de capital promovió la continuidad del proceso de crecimiento bancario y que éste fue un decisivo promotor, a su vez, del desarrollo industrial. x Estructura social: existe una coincidencia global en Tusell (1980), Carr (2010) y Cortázar y Veigas (2011) en que la estructura de la sociedad se diversifica, heterogeniza y pluraliza, incrementándose el proletariado industrial, en zonas industriales de atracción migratoria, el proletariado Ricardo Leiva Román 121 Resultados y Discusión agrario, compuesto por trabajadores del campo por cuenta ajena y, también, la clase media urbana, formada por una variopinta mezcolanza de perfiles sociales, muy ligados a actividades, tales como: funcionarios administrativos, militares, profesionales independientes, pequeños comerciantes, servicio doméstico, etc. 5.2.3 Análisis de la estructura final: sistema deportivo general, situación del Olimpismo, participación en los Juegos Olímpicos. x Sistema deportivo general: Bahamonde (2011) señala que son tres los factores principales que promovieron la introducción del deporte en España y su extensión: las ciudades portuarias, abiertas al mar, como el caso de Barcelona, el asociacionismo promovido por la sociedad civil y no por el Estado y su dinámica paralela con el nacimiento y desarrollo del capitalismo español. En esta época, como expresión de la relevancia que va tomando en la sociedad este fenómeno, el deporte adquiere progresivamente más presencia en la prensa, e incluso comienzan a editarse periódicos y revistas deportivas. Por otra parte, el deporte empieza a introducirse en las instituciones más tradicionales, caso de la Iglesia y el Ejército. Según Domínguez (2011) el fútbol mantiene su imparable expansión, principalmente, entre las clases populares, debido, indudablemente, a lo económico de su práctica, lo que, por otra parte, provoca un cierto rechazo en las clases más altas. x Situación del Olimpismo: Durántez (2003), afirma que pese a la insistencia de Coubertin, desde principios de 1900, para que se cree en España un Comité Olímpico Nacional, esto no sucede hasta el 23 de noviembre de 1912, fundamentalmente, por cambios drásticos en la composición del Gobierno de España, que colocan como Presidente del Consejo de Ministros a Álvaro de Figueroa y Torres, Conde de Romanones, a la sazón, hermano de Gonzalo de Figueroa, que como ya se ha mencionado anteriormente, era el encargado por Coubertin para implantar el Olimpismo en el Estado español. En este sentido, se inicia una labor intensa, pero prácticamente individual, por parte de Gonzalo de Figueroa, de difusión del Olimpismo en los ambientes y 122 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión organizaciones del incipiente proceso de implantación del deporte en la sociedad española. Prosigue Durántez (2003) en su análisis histórico, señalando que era Cataluña, en general y Barcelona, en particular, las únicas regiones y localidades de España en las que el deporte tenía una presencia generalizada. En este sentido, el alcalde de la ciudad de Barcelona, Manuel Rius y Rius, en 1917, ya había solicitado la sede de los Juegos Olímpicos, que fuesen celebrados después del fin de la guerra (Primera Guerra Mundial) para la ciudad de Barcelona. Algo que no logró, muy probablemente, por el efecto disuasorio que el intento del nacionalismo catalán por apropiarse del gobierno y el protagonismo del desarrollo del proyecto olímpico en España, provocó en Coubertin. x Participación de los deportistas españoles en los Juegos Olímpicos de este periodo histórico: PARÍS, 1900 En cuanto a España, encontramos los primeros deportistas nacionales participantes en unos Juegos Olímpicos. Además se consiguieron las primeras medallas, si bien una aún en nuestros días es discutida como la primera medalla olímpica, de Pedro Vidal, que consiguió el segundo puesto en tiro al pichón, pero que fue descartada debido a la profesionalización de la prueba, ya que ganó 5000 francos con la victoria. También se consiguió una medalla de Oro en pelota vasca, de la mano de Francisco Villota y José de Amezola. SAN LUIS, 1904 La distancia con respecto a Europa fue una de las principales causas que incidieron sobre el descenso considerable en el número de participantes. Tan sólo, asistieron 554 deportistas en representación de 12 países. Países europeos que se presentaron fueron Alemania, Gran Bretaña (con un solo representante), Grecia, Hungría y Noruega. En muchas pruebas, tan sólo participaron deportistas estadounidenses, en un programa formado por 15 deportes. Ricardo Leiva Román 123 Resultados y Discusión La prensa española no publicó ninguna noticia referente a la celebración de estos Juegos, a los que España no envió ninguna representación (Agulla, 1990). La situación de España en todos los ámbitos seguía siendo muy parecida, y el alto coste del viaje y del cruce del océano hacia un nuevo continente, cerró toda posibilidad de participación española en estos Juegos Olímpicos. LONDRES, 1908 La prensa española escribió sobre los aspectos más relevantes de estos Juegos, a pesar de la no participación española en los mismos. El movimiento olímpico, de reconocimiento mundial en estos momentos, iba haciendo que la prensa no quisiera dejar pasar la oportunidad de mostrar la importancia de las mismas. La participación española, y la implicación española en el movimiento olímpico no se harían esperar. Con D. Gonzalo de Figueroa como miembro del COI, y su hermano nombrado nuevo Presidente, tras el asesinato de Canaletas, se crearía el Comité Olímpico Español con D. Gonzalo como presidente, y como el inicio del verdadero Olimpismo en nuestro país. ESTOCOLMO, 1912 En España, la prensa mostraba un interés creciente por la incorporación al movimiento olímpico. Se solicitaba y se reclamaban cada vez con más fuerza la presencia de deportistas españoles. Este hecho podría hacer reflexionar al pueblo y al gobierno español sobre la importancia de un buen desarrollo de la cultura física y la necesidad de apoyar al deporte en general, y por qué no decirlo, desde un punto de vista económico 5.3 Tercera etapa histórica: de 1918 a 1939. Comienza esta etapa con el fin del a Primera Guerra Mundial y concluye con el fin de nuestra trágica Guerra Civil. En el decurso intermedio, una sociedad que progresivamente se inestabiliza, producto, en parte, de los acontecimientos en el exterior. 124 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión 5.3.1 Análisis de la estructura “de base”: factores tecnoeconómicos y sociodemográficos. x Factores tecnoeconómicos: en el comienzo de esta etapa, continúa produciéndose la reinversión de los medios de producción material: la industria frente a la agricultura, sin embargo, también se sigue manteniendo la modernización de los dos. x Factores sociodemográficos: Tusell (1980) afirma que se mantiene la curva de crecimiento poblacional: de 18,5 millones en 1900, a más de 21 millones en 1921 y a 23 millones en 1931. 5.3.2 Análisis de la estructura “intermedia”: factores sociopolíticos, economía política y estructura social. x Factores sociopolíticos: la política interior es muy compleja en esta época, incrementada por factores externos: uno económico y el otro, el que concierne a las relaciones con el exterior. En ésta se suceden tres formulas de gobierno y finaliza con un conflicto bélico civil de alcance total, e incluso, posteriormente, de gran influencia mundial. Se inicia con la continuidad de la Monarquía Parlamentaria Liberal, pero es sustituida “de facto”, aunque no formalmente, en 1923 por la Dictadura del general Primo de Rivera, posteriormente, en 1931, es proclamada la Segunda República y finaliza, entre los años 1936-­39 con la Guerra Civil. Las relaciones exteriores se amplían, pero en términos generales, no para beneficiar a España, sino para incorporar sus intereses en un progresivo incremento y gravedad de las disputas nacionales y contribuir a la inestabilidad política interior (Carr, 2010). x Economía política: para Tusell (1980) este periodo se debe dividir en dos. bien diferenciados: primero, con relación a la mayor parte del gobierno de Primo de Rivera, este autor hace una valoración positiva de las medidas económicas adoptadas, siempre en términos generales y con matices. Por una parte, aumentó el gasto público por medio del incremento de la emisión de Deuda Pública, financiando una gran cantidad de infraestructuras y de obra pública y se convirtió en el motor Ricardo Leiva Román 125 Resultados y Discusión de un proceso de expansión industrial. Por otro lado, el momento positivo económico benefició, principalmente, a las clases pudientes, porque no estuvo acompañado de un cambio en la progresividad de los tributos, es decir, no se produjo un proceso de redistribución de la riqueza, ni de reequilibrio de la misma. El segundo periodo es diametralmente opuesto y, entre otras consecuencias, según Tusell (1980) y Carr (2010) la economía fue uno de los principales factores de la caída de la Dictadura y de la propia República: todo comienza con el “crack” de la bolsa de Nueva York de 1929, continúa con la “Gran Depresión” de la economía productiva y su contagio y extensión a todo el orbe. Es decir, la República comenzó con un lastre económico, que tampoco supieron combatir y superar los sucesivos gobiernos de la misma. x Estructura social: hasta 1930, lo más destacable es la reinversión de los porcentajes de población pertenecientes a las clases agrarias e industriales. A partir de 1930, lo principal es la progresiva reducción de la población activa, con el incremento de la población en paro, producto de la crisis económica. 5.3.3 Análisis de la estructura “final”: sistema deportivo general, situación del Olimpismo, participación en los Juegos Olímpicos. x Sistema deportivo general: para Bahamonde (2011) se empieza a producir una disociación entre grupos sociales, con relación a las modalidades deportivas asociadas a cada una ellas: deportes minoritarios, practicados por la clase social media y las demás clases hacia arriba en la escala social: el polo, la equitación o el tenis;; la natación por la falta de infraestructuras y también, el hockey, el baloncesto y el rugby. Por el contrario, los deportes más practicados y vistos por las clases populares son: el fútbol, el ciclismo y el boxeo. Es Cataluña y, sobre todo Barcelona, la principal difusora de los nuevos deportes, en donde surgió el primitivo tejido asociativo deportivo y una gran cantidad de las primeras federaciones deportivas. Para este autor, son tres los factores que introducen y expanden la práctica deportiva en 126 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión las clases obreras, que se va plasmando, significativamente, desde 1920: el descanso dominical pagado (1905), la jornada de ocho horas (1919) y una cierta mejora relativa de los salarios desde 1920. Estos factores, inician una cierta cultura del ocio y su reivindicación por las clases populares. Entre los años 20 y 30, el fútbol muestra su potencial como deporte de masas: en el periodo entre los años 1926 – 28, funcionaban en España 705 equipos, en 15 federaciones regionales, con unos 14.100 deportistas federados. Bahamonde (2011) señala una serie de factores a los que les atribuye la responsabilidad de la modernización del deporte y son los siguientes: -­‐ La creación y extensión de entidades deportivas: Interclasistas y abiertas, en las que se abandona el clasismo excluyente, reuniendo grupos con intereses comunes. -­‐ Consolidación del deporte como fenómeno público: que el Estado, aunque no lo hubiera apoyado, lo tuvo que aceptar. En este proceso tuvo un papel relevante la prensa. -­‐ Institucionalización del deporte: en 1920 se creó la Real Federación de Atletismo, también en 1920, la Federación Española de Natación, en 1923 la Real Federación Española de Baloncesto, el rugby se introdujo en 1921, etc. -­‐ Mercantilización del deporte: la propia lógica del desarrollo capitalista, empezó a vincular, de manera lenta, pero inexorable, deporte y dinero, desde 1920. Al igual que en los países europeos, fue el fútbol el que marco el camino: se acepta la práctica profesional de este deporte desde 1926. -­‐ El efecto “emulador”: el efecto del incremento de las relaciones con el exterior fue estimulador, a partir, sobre todo, de los contactos de los jóvenes de las clases burguesas, que en gran medida salieron a Europa y, sobre todo, a Inglaterra, regresando con actitudes y costumbres incorporadas, entre ellas, las Ricardo Leiva Román 127 Resultados y Discusión actividades deportivas que se practicaban en los prestigiosos centros educativos británicos. -­‐ La creación de espacios específicos: pese a la falta de financiación por parte del Estado, desde la década de los años veinte, por medio de financiación privada –socios de los clubes, mecenazgo y donaciones, etc. -­se fue generalizando, lentamente la construcción de instalaciones deportivas. -­‐ La eclosión de la prensa deportiva: con relación a esta cuestión, Bahamonde (2011) dice: “El periodismo deportivo desempeñó una función básica y esencial en la construcción, codificación y difusión del deporte español. En primer lugar, porque introdujo las claves de la cultura deportiva entre unos lectores noveles en esta clase de discursos, tanto en lo referente a la elaboración de un lenguaje propio para el deporte como en la transmisión de las normativas y de los códigos de funcionamiento de las distintas disciplinas. En segundo lugar, porque vinculó el deporte español con el europeo”, y en tercer lugar, porque tanto los periódicos generalistas como los deportivos, actuaron como mecenas de muchos eventos deportivos. -­‐ La mirada del mundo obrero hacia el deporte: la incorporación de las masas proletarias de manera generalizada, no se produjo hasta la década de los años treinta, hasta que no fueron mejorando las condiciones de trabajo de esta colectivo. Las organizaciones políticas y laborales que representaban a este colectivo, participaron activamente en la promoción de las actividades deportivas, ahora bien, con diferentes formas de organización y con diferentes finalidades, consecuencia de sus diferentes presupuestos ideológicos. -­‐ La participación femenina: las mujeres en el deporte sufrieron la reproducción de los roles de género que tenían adjudicados en el ámbito social general. Pese a esto, se puede hablar de una tímida, pero constante incorporación de la mujer a las actividades 128 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión deportivas que, por otra parte, contaban con un modelo, que también reproducía los roles y los valores asociados al género masculino, lo que dificultaba la adaptación de las mujeres al mismo. x Situación del Olimpismo: este periodo se inicia con la primera participación oficial del COE en unos Juegos Olímpicos: los de Amberes de 1920. Pero hay que mencionar un aspecto particular de aquel primera participación: fue financiada inicialmente y de forma directa por los propios Gonzalo de Figueroa y por su hermano, el Conde de Romanones -­aunque, posteriormente, recibieron una subvención del Estado para resarcirles de aquel gasto-­ Durántez (2003) lo que prueba la falta de apoyo e interés del Estado por el Olimpismo, en particular y por el deporte, en general. En 1921 muere Gonzalo de Figueroa y a raíz de esto, el COE pasa por toda una serie de vicisitudes, que “de hecho” supusieron su desaparición durante dos años, hasta que el 17 de septiembres de 1926, es reconstituido, ya con una figura jurídica propia, en forma de Estatutos, con sede en Barcelona y presidido por Eusebio López y Díaz de Quijano, marqués de Lamadrid. Para finalizar este periodo, destacar la hegemonía de Cataluña y Barcelona en la constitución y plasmación del ideal olímpico, reflejo del mayor estado de implantación y de desarrollo del deporte en general con relación a las otras regiones del Estado y prueba de ello fue, la continúa postulación para ser la ciudad – sede de unos Juegos, en este caso, para los de 1924 -­ perdió, en favor de París -­ y para los de 1936, que finalmente se llevaron a cabo en Berlín. x Participación de los deportistas españoles en los Juegos Olímpicos de este periodo histórico: Ricardo Leiva Román 129 Resultados y Discusión Figura 4. Participación del equipo olímpico español, por género en los JJOO (1918-­1939). Figura 5. Participación del equipo olímpico español, por modalidad en los JJOO (1918-­1939). 130 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión En las figuras 4 y 5 se observa la participación del equipo olímpico español en la época (1918-­1939). Hemos creído conveniente realizar un resumen de cada Juego Olímpico: AMBERES, 1920: por primera vez, España llevaba una delegación oficial, abanderada por el futbolista Arrate. Consiguieron dos medallas de plata, una el equipo de polo, y la otra nuestro equipo de fútbol. La delegación española contó con 31 deportistas, toda ella compuesta por hombres. La participación general fue de 2626 deportistas de 29 países diferentes, con 2561 hombres y solamente 65 mujeres. El presidente del COE en este momento era Gonzalo de Figueroa y Torres. PARÍS, 1924: la delegación española contó con 99 deportistas, con la participación de 4 mujeres. La participación general fue de 3089 deportistas de 44 países diferentes, con 2954 hombres y solamente 135 mujeres. El presidente del COE en este momento era Santiago Güell y López. No se consiguió ninguna medalla y la actuación fue bastante floja. Nuestra mejor actuación fue un cuarto puesto conseguido por el equipo de polo. Otra de las actuaciones destacadas fue la del equipo de waterpolo, que consiguió llegar a cuartos de final. También, en tenis, en cuya modalidad la deportista Lili Álvarez consiguió llegar también a cuartos de final. Estos juegos fueron los últimos de Pierre de Coubertin como presidente del COI, sucediéndole el Conde de Baillet-­Latour. ÁMSTERDAM, 1928: Estos juegos fueron los primeros en que las mujeres participaron en las pruebas de atletismo. Para España fueron muy importantes, ya que se consiguió el primer oro olímpico. Fueron los jinetes José Navarro Morenés, José Álvarez de las Asturias y Julio García Fernández, tres jóvenes capitanes del ejército español, los que formaban el equipo que ganó la medalla. La delegación española contó con 85 deportistas, y en este caso, sin la participación de mujeres. La participación general fue de 2883 deportistas de 46 países diferentes, con 2606 hombres y 277 mujeres. El presidente del COE en este momento era Eusebio López y Díaz de Quijano. Ricardo Leiva Román 131 Resultados y Discusión LOS ÁNGELES, 1932: La participación española fue realmente escasa ya que sólo acudieron seis deportistas, consiguiéndose una medalla de bronce por parte del catalán Santiago Amat Casino, en la especialidad de vela. La delegación española contó con 6 deportistas, como ya hemos comentado, y sin la participación de mujeres. La participación general fue de 1332 deportistas, con 1206 hombres y 126 mujeres. BERLÍN, 1936: Fueron los últimos celebrados antes de la Segunda Guerra Mundial. Poco antes del comienzo de estos juegos estalló la Guerra Civil en España, lo que impidió la participación de deportistas españoles. 5.4 Cuarta etapa histórica: de 1939 a 1960. El intervalo histórico ha sido elegido por constituir, por una parte, el fin de una etapa en la historia de España, que como se ha mostrado, fue evolucionando a lo largo de treinta años hasta su final, marcado por una trágica y cruenta contienda bélica entre los españoles y, a su vez, siendo el inicio de una durísima etapa, marcada por la posguerra, hasta el año que resulta ser, el comienzo de una década que fue decisiva para una nueva transformación de la sociedad española. 5.4.1 Análisis de la estructura “de base”: factores tecnoeconómicos y sociodemográficos. x Factores tecnoeconómicos: el proceso de incorporación de novedades técnicas en la agricultura y la industria, no solo se detuvo bruscamente, sino que involucionó fuertemente, fruto de la inmensa destrucción de bienes, incluidos por supuesto, los bienes de producción (Tusell, 1980) x Factores sociodemográficos: Tusell (1980) indica que, la población se pudo reducir en, aproximadamente, un millón de personas, producto de los muertos directos, exiliados, “no nacidos” por lo avatares de la guerra y los ejecutados en la posguerra. 132 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión 5.4.2 Análisis de la estructura “intermedia”: factores sociopolíticos, economía política y estructura social. x Factores sociopolíticos: en política interior: forma de gobierno dictatorial, con eliminación de las libertades individuales y fuerte represión, sobre todo, en este periodo analizado. En cuanto a la política exterior, intenso aislamiento internacional, sobre todo, desde 1945 hasta la mitad de la década de los 50. x Economía política: este factor esta totalmente condicionado por la inmensa destrucción de bienes y de riqueza, y el importante endeudamiento exterior, producto del gasto inmenso de la guerra civil y de que los Estados que la habían avalado, a su vez, habían perdido la suya. Las dos medidas principales llevadas a cabo por el Estado, con relación a la economía, son: la “autarquía”, con el cierre de fronteras a los productos del exterior y un fuerte intervencionismo del mismo en la economía del país. x Estructura social: los cambios más apreciables en la estructura social supusieron que ésta quedaba configurada de un modo muy simple: una reducida clase social privilegiada -­ la que siempre lo había sido, más los “afectos” al Régimen – y una inmensa clase popular tremendamente empobrecida, en estándares de vida similares a los de 150 años atrás (Tusell, 1980). 5.4.3 Análisis de la estructura “final”: sistema deportivo general, situación del Olimpismo, participación en los Juegos Olímpicos. x Sistema deportivo general: señala Santacana (2011) lo publicado en el BOE del 5 de marzo de 1941: el Decreto – Ley que creaba la Dirección Nacional de Deportes de Falange Española Tradicionalista de las JONS. Continúa diciendo: “... se creó un organigrama deportivo controlado por la Falange, pero lo más importante es que por vez primera el deporte dejaba de ser una actividad de organización formalmente privada con conexiones intermitentes y puntuales con los poderes públicos... y órganos de decisión independientes para pasar a ser una actividad que Ricardo Leiva Román 133 Resultados y Discusión se organizaría de forma jerárquica desde el poder político ...” El Estado franquista dio, prácticamente en exclusiva, el deporte a la Falange, evidentemente, con una finalidad clara de control social y político. la nueva situación resultaba, cuando menos, paradójica: el sistema deportivo español, que se había caracterizado hasta la fecha por recibir nulo o poco interés por parte del Estado y que había crecido a expensas de la iniciativa privada o civil, pasaba a convertirse en un fenómeno de características totalmente contrapuestas a las anteriores: toda la iniciativa y promoción, por supuesto orientada, controlada y vigilada, pasaba a ser responsabilidad del Estado y se convertía en una de las herramientas privilegiadas del régimen para la formación de los ciudadanos del “nuevo” Estado. Esta función principal del deporte para los gobernantes de la época, disminuía la visibilidad de la falta de promoción del deporte, de dotación de recursos para el mismo y de un interés real, al margen de su utilidad como vehículo de propaganda y control social. A partir de la segunda mitad de la década de los 50, la Falange empezó a dejar de influir, progresivamente, en la organización del deporte. La Delegación Nacional de Deporte pasó a llamarse Delegación Nacional de Educación Física y Deportes, lo que denotaba un cambio de actitud hacia la incorporación de otro tipo de fines, en este caso, educativos. También se incremento la preocupación por los aspectos técnico – científicos del deporte, expresada, por ejemplo, en la creación de un Servicio de Divulgación Técnico Deportiva y de la Mutualidad General Deportiva, aunque, algo tan fundamental para alcanzar objetivos mínimamente ambiciosos, como los medios de financiación, no cambió hasta algún año más tarde. Por último, en este periodo algunos deportistas españoles obtuvieron éxitos internacionales muy destacados, por ejemplo, Timoner, campeón del mundo de ciclismo en pista;; Bahamontes, ganador del Tour en 1959;; Blume, campeón de Europa de gimnasia (“deportiva” en aquella época) y gran esperanza para una medalla olímpica;; o los éxitos del Real Madrid de fútbol de la década de los 50;; sin embargo, no dejaron de ser los éxitos aislados de individuos extremadamente talentosos, al margen de la tónica general. 134 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión x Situación del Olimpismo: siguiendo a Santacana (2011) destacar el hecho, por otra parte insólito y, a su vez, al margen de la legalidad establecida por el propio Comité Olímpico Internacional, que cuando se creó en 1941 la Dirección Nacional de Deportes, el COE quedó integrada en ella, como también lo haría la representación española del COI, vulnerando el principio de total independencia que deben mantener todos los CONs en los Estados donde son los representantes del COI. Esta situación totalmente irregular se mantuvo hasta 1956, en que se le separó de la DND dotándolo de independencia jurídica, aunque en la práctica no cambiaba tanto, pues el delegado nacional de deportes era automáticamente el presidente del COE. Por otra parte, la participación y los resultados de los deportistas españoles en los Juegos Olímpicos siempre fue una preocupación para el régimen en esta época, fundamentalmente, porque la repercusión de estos resultados publicitaba la imagen del régimen en el exterior. Dicho esto, nunca se tradujo en que la preocupación se tornara en ocupación, es decir, nunca se proporcionó desde el Estado al COE, los recursos necesarios para cambiar la mediocre realidad de la participación española en los Juegos, de hecho, Santacana (2011) señala textualmente: “... uno de los elementos que demuestra de forma más palpable el bajísimo nivel competitivo del deporte español en estas décadas fue su reiterado fracaso en los Juegos Olímpicos, ya que si no se conseguía o proponía incorporar a sectores mayoritarios de la población a la práctica deportiva, el fracaso olímpico significaba que tampoco obtenían resultados apreciables en la élite deportiva. La precariedad de medios de la delegación y el COE estatalizado tuvieron su máxima expresión con motivo de los Juegos de 1956, a celebrar en Melbourne, y que oficialmente fueron boicoteados por el COE en protesta por la invasión soviética de Hungría, aunque este incidente político fue muy oportuno para las autoridades españolas, que no disponían de fondos para enviar a una delegación deportiva tan onerosa para la época” x Participación de los deportistas españoles en los Juegos Olímpicos en este periodo histórico: Ricardo Leiva Román 135 Resultados y Discusión Figura 6. Participación del equipo olímpico español, por género en los JJOO (1939-­1960). Figura 7. Participación del equipo olímpico español, por modalidad en los JJOO (1939-­1960). 136 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión A continuación exponemos un resumen de la figura 6 y 7, por Juegos Olímpicos en esta época: LONDRES, 1948: la delegación española contó con 63 deportistas, sin la participación de mujeres. La participación general fue de 4104 deportistas de 59 países diferentes, con 3714 hombres y 390 mujeres. El presidente del COE en este momento era José Moscardo Ituarte. La única medalla conseguida por España fue una de plata en pruebas hípicas, lograda por el equipo formado por, el Comandante Marcelino Gavilán y Ponce de León, el Teniente Coronel José Navarro Morenés y el Comandante Jaime García Cruz. HELSINKI, 1952: la delegación española contó con 29 deportistas, otra vez, sin la intervención de mujeres. La participación general fue de 4955 deportistas, con 4436 hombres y 519 mujeres. Los representantes españoles participaron en 6 de los 17 deportes, obteniendo una sola medalla, a manos del policía Ángel León Gonzalo, campeón de España de tiro con pistola, que ganó la medalla de plata. La Unión Soviética participa por primera vez en unos Juegos. ESTOCOLMO, 1956: El COE envió una delegación compuesta por, exclusivamente, 6 deportistas masculinos. ROMA, 1960: La delegación española contó con 134 deportistas, con la intervención de 11 mujeres. La participación general fue de 5338 deportistas de 83 países diferentes, con 4727 hombres y 611 mujeres. El presidente del COE en este momento era José Antonio Elola Olaso. Es posible observar un alto incremento de participantes, tanto a nivel general, como especialmente, en 31 el caso de la representación española. España participó en 16 de los 17 deportes, destacando la meritoria tercera plaza del equipo de hockey hierba, que venció en el partido por el tercer y cuarto puesto a Inglaterra por 2-­1. 5.5 Quinta etapa histórica: de 1960 a 1978. Este periodo supone una etapa fundamental en el devenir histórico de la sociedad española del último siglo. La misma se inicia un cambio total en la política económica de la Dictadura, con un resultado espectacular en ese terreno -­ sin ninguna duda, la mayor transformación económica del Estado Ricardo Leiva Román 137 Resultados y Discusión español en toda su historia como realidad sociopolítica – que, empujó, a su vez, a toda una serie de transformaciones sociales y culturales, que concluyeron en un esencial y determinante cambio de forma de gobierno, que es, precisamente, el que actualmente disfrutamos y que incorporó definitivamente a España, en términos generales, al conjunto de sociedades mundiales más avanzadas. 5.5.1 Análisis de la estructura “de base”: factores tecnoeconómicos y sociodemográficos. x Factores tecnoeconómicos: desde los inicios de la década de los 60 se produce un proceso imparable de modernización de las técnicas de producción de bienes y servicios, en todos los sectores productivos pero, destacando la importancia y profundidad del fenómeno en el sector industrial (Tusell, 1980;; Carr, 2010) x Factores sociodemográficos: tres son las situaciones destacables en este sentido: -­‐ La población crece a un ritmo del 1% anual (Delgado y Jiménez, 2003;; en Aja, 2011). -­‐ Emigración generalizada del mundo rural al urbano (Delgado y Jiménez, 2003;; en Aja, 2011). -­‐ Se mantiene durante la década de los 60 la emigración al exterior, principalmente, a Europa, pero va descendiendo, progresivamente, el ritmo (Tusell, 1980). 5.5.2 Análisis de la estructura “intermedia”: factores sociopolíticos, economía política y estructura social. x Factores sociopolíticos: se mantiene el régimen político de la Dictadura, pero ésta, tratando de adaptarse a la esencial transformación social, incorpora algunas dinámicas de apertura y relajación de sus mecanismos represores, esto supuso una cierta pugna entre sectores del Régimen calificados de “aperturistas” y otros que fueron denominados como “inmovilistas”. La situación geoestratégica en un 138 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión contexto histórico sociopolítico mundial concreto y los tímidos mensajes de apertura del Régimen, promueven una progresiva eliminación de la política de aislamiento internacional sostenida durante el periodo anterior. x Economía política: El Régimen consideró agotadas las políticas económicas llevadas a cabo en la época anterior: la autarquía y el intervencionismo extremo, sustituyéndolas por la apertura a la economía exterior y por “Planes de Desarrollo” para estimular ordenadamente a los distintos sectores económicos. Según Delgado y Jiménez (2003) (en Aja, 2011) esto pudo llevarse a cabo por tres motivos: -­‐ Explotación masiva del sector turístico. -­‐ Entrada de remesas de capital procedentes de la emigración. -­‐ Entradas de capital extranjero de inversión. Esto, entre otras cosas, permitió la mayor industrialización de la historia de España y la “verdadera etapa de creación del capitalismo español” (Carr, 2010). x Estructura social: Se produce un incremento, progresivo pero imparable, de las clases medias y de mejora de las condiciones de vida de las clases más populares -­según Delgado y Jiménez, 2003 (en Aja, 2011) la renta media por habitante creció a un ritmo anual del 6,7% en este periodo-­. 5.5.3 Análisis de la estructura “final”: sistema deportivo general, situación del Olimpismo, participación en los Juegos Olímpicos. x Sistema deportivo general: En términos generales, las importantes transformaciones económicas y sociales que trajo este periodo, influyeron positivamente en el sistema deportivo, sin embargo, de un modo mucho menos amplio y profundo que en otros sectores, incluido el cultural -­ el deporte fue, también durante esta época, el “hermano pobre” y esto fue debido, principalmente, a que el principal interés del Estado por él, no se modificó sustancialmente: el político – Ricardo Leiva Román 139 Resultados y Discusión propagandístico. No quiere decir esto que no se modificara el “status quo”, como se verá más adelante, pero es irrefutable que el beneficio y el impulso que podría haber recibido, asociado al crecimiento de los factores materiales que se estaba produciendo en la sociedad española de la época, no fue aprovechado. Tomando de Aja (2011) y desarrollando el sentido principal de lo expuesto inmediatamente antes, hay que decir, que este periodo comienza con un hecho importante, desde el punto de vista normativo: la promulgación en 1961, de la Ley de Educación Física y Deportes que, entre otras consideraciones, supuso un incremento en la financiación del deporte por medio del incremento del porcentaje extraído de la recaudación de las quinielas -­ pasó del 6% anterior al 22% -­ si bien es cierto, que supeditaba la financiación presupuestaria anual del deporte a un ingreso variable, lo que contribuía a dificultar a medio y largo plazo la presupuestación de planes de promoción y desarrollo y de infraestructuras, gastos que necesariamente se extienden más allá de un ejercicio presupuestario. Como quiera que, la dotación económica en los presupuestos del Estado, es una prueba fundamental del interés por el sector de actividad al que afectan, está dotación irregular y sometida a avatares circunstanciales -­ más generosa que la anterior, no cabe duda, pero en el fondo, insuficiente -­ denota, de manera inequívoca y objetiva, el relativo interés del Estado por la promoción del deporte, en términos generales. También en esta ley, hubieron elementos objetivamente positivos: desde el punto de vista de la formación y de la investigación en el campo de la educación física y el deporte, esta ley contribuyó con la aprobación de la creación del Instituto Nacional de Educación Física (INEF) y, en lo referente a la promoción del ejercicio físico y el deporte en las primeras edades, contribuyó con la creación de los Juegos Escolares Nacionales. Tomando como inicio del hilo conductor este último dato señalado, conviene tocar un tema de elevada importancia social, en general y en el ámbito del deporte, en particular: la posición y situación de la mujer en este terreno sociocultural. Incluida la época anteriormente analizada y también ésta, hay que destacar que, si la finalidad principal del deporte en la sociedad fue la del control político – 140 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión social, en términos de la relación mujer – deporte, esto se produjo de manera mucho más exacerbada, aunque es indudable, también, que ello se fue suavizando progresivamente, pero no está de más señalar, que la Sección Femenina de la Falange, órgano del Movimiento en el que se había depositado la responsabilidad de la formación deportiva de la mujer desde el principio del Régimen, continuó su labor hasta 1977, es decir, dos años después del final formal de éste, y que hasta 1969 no estuvo regulada y, por lo tanto no se produjo, la participación de las mujeres en los Juegos Escolares Nacionales. Lo anteriormente dicho, es una explicación plausible del retraso en los triunfos deportivos internacionales de las deportistas españolas, aunque en ello, la situación fue similar a la de los deportistas masculinos: éxitos aislados y esporádicos, fruto de el talento excepcional de deportistas individuales, como por ejemplo, Carmen Valero, campeona del mundo de “cross” en 1976 y 1977 y primera mujer atleta en participar en unos Juegos Olímpicos;; Montreal, 1976 o Mari Paz Corominas, que en 1969 fue medalla en los campeonatos de Europa de natación. Atendiendo a otras perspectivas sobre el sistema deportivo español en este periodo, hay que indicar, que en 1966, Juan Antonio Samaranch, era nombrado Delegado Nacional de Educación Física y Deportes y pretendiendo promocionar el concepto “Deporte para todos”, lanzó la campaña de promoción deportiva “¿Contamos contigo?”. La campaña tuvo una impacto notable en cuanto al conocimiento entre los españoles de la misma -­ fue conocida por el 79% de los españoles mayores de 10 años -­, sin embargo, no se tradujo en un incremento significativo de la práctica deportiva por parte de los ciudadanos, entre otras cosas, porque las consignas institucionales para la participación en actividades promovidas desde las propias instituciones, realmente no contribuía a facilitar la misma de un modo generalizado. Algunas de ellas eran las siguientes: -­‐ Para edades de entre 12 y 25 años. -­‐ Niveles previos de rendimiento deportivo medio / alto. Ricardo Leiva Román 141 Resultados y Discusión -­‐ Pertenencia a clubes deportivos que, a su vez, estuvieran federados. Realmente, estas condiciones estaban más orientadas a un cierto proceso de selección de talentos que a la promoción deportiva en todos los estratos de la población normal. Por último, señalar la influencia que tuvo la televisión en la promoción del espectáculo deportivo -­ que no, en la práctica deportiva – y en la visibilidad y presencia del deporte como otro tipo de espectáculo de ocio. En esta faceta, es donde aún se explicitó el uso utilitarista que hizo el Régimen del deporte, como herramienta y vehículo de propaganda ideológico – política. x Situación del Olimpismo: La mencionada anteriormente Ley de 1961, también tuvo influencia en el terreno de la gestión y organización del olimpismo en la España de la época porque, por una parte, reconocía oficialmente la existencia del COE y su autonomía y, por otro, su responsabilidad a la hora de organizar la participación de los deportistas españoles en cada una de las ediciones a celebrar, de los Juegos Olímpicos. Pese a esto, Aja (2011) señala que: “... donde se notaban más las carencias del deporte español a nivel internacional era en los Juegos Olímpicos. En los seis Juegos Olímpicos en los que participó España durante los años de la Dictadura, sólo ganó una medalla de oro, dos de plata y dos de bronce. Es un balance lamentable, peor que el de pequeños países como Finlandia, Nueva Zelanda o Irlanda...”. x Participación de los deportistas españoles en los Juegos Olímpicos de este periodo histórico: 142 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión Figura 8. Participación del equipo olímpico español, por género en los JJOO (1960-­1978). Figura 9. Participación del equipo olimpico español, por modalidad en los JJOO (1960-­1978). Ricardo Leiva Román 143 Resultados y Discusión En las figuras 8 y 9 se puede observar la evolución en esta etapa de la participación del equipo olímpico español. A continuación exponemos un resumen detallado por Juegos Olímpicos: TOKIO, 1964: España no consiguió ninguna medalla en su viaje al continente asiático. Sólo cabe destacar, el cuarto puesto logrado por el equipo masculino de hockey sobre hierba. La delegación española contó con 50 deportistas, con la aportación de 3 mujeres. La participación general fue de 5151 deportistas, con 4473 hombres y 678 mujeres. El presidente del COE en estos Juegos Olímpicos continuaba siendo José Antonio Elola Olaso. MEXICO, 1968: participaron 112 países y la delegación del COE estuvo compuesta por 124 hombres y 2 mujeres. No se pudo obtener ninguna medalla, siendo lo más destacado, el cuarto puesto del equipo de fútbol y el sexto puesto en la modalidad de hockey sobre hierba. MUNICH, 1972: en estos Juegos participaron 121 países. La representación española consistió en 116 deportistas masculinos y 4 femeninos, participando en 17 especialidades deportivas. Se consiguió una medalla de bronce en la modalidad de boxeo y el atleta pedestre Mariano Haro fue cuarto en la final de los 10.000 metros lisos. MONTREAL, 1976: la participación general correspondió a 92 países. El COE envió una delegación de 104 deportistas masculinos y 11 femeninos. Se obtuvieron 2 medallas, de plata, una en la especialidad de vela, en la modalidad de 470, siendo sus protagonistas Gorostegui y Millet, y la otra en piragüismo, en la modalidad de K4, componiendo el bote por Menéndez, Díaz, Flor y Misioné. 5.6 Sexta etapa histórica: de 1978 a 2008. Esta última etapa, es en la que se encuentra España en la actualidad. Comienza con uno de los hechos más importantes de la historia de la Nación: la ratificación por parte del pueblo español de la nueva Constitución, que significa, por lo pronto, el fin de cuarenta años de Dictadura y el inicio de una era plenamente democrática. Finalmente, el País se incorpora, definitivamente, a la senda de la modernidad, al mismo nivel que los países más avanzados. 144 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión 5.6.1 Análisis de la estructura “de base”: factores tecnoeconómicos y sociodemográficos. x Factores tecnoeconómicos: en unas sociedades tan complejas, ya no es posible, con brevedad, enumerar todos y cada uno de los medios y modos de producción predominantes. Lo que se puede decir es que, en términos generales, las técnicas de producción material están entre las más modernas y avanzadas. x Factores sociodemográficos: continúa progresivamente el crecimiento poblacional, principalmente, por disminución de la mortalidad e incremento de la esperanza de vida y, a partir del final de la década de los noventa, por el importante incremento inmigratorio, principalmente de Hispanoamérica, del norte de África, del África subsahariana y de China. Por último, la disminución progresiva de la natalidad y el incremento de la esperanza de vida, introducen cambios en la pirámide de población, que reflejan el envejecimiento de la misma. 5.6.2 Análisis de la estructura “intermedia”: factores sociopolíticos, economía política y estructura social. x Factores sociopolíticos: la forma de gobierno adoptada es la Monarquía Constitucional Parlamentaria, de representación democrática a través de partidos políticos. Pese a unos primeros años muy difíciles, con peligro de involución, desde el año 1982, primer gobierno socialdemócrata, la situación de la política interior es totalmente estable. En cuanto a la política exterior, España se convierte en un Estado plenamente integrado en su entorno natural histórico, en lo político, lo económico, lo social y lo cultural: miembro de la Unión Europea y de la Unión Monetaria, de la OTAN, etc. x Economía política: su economía es, fundamentalmente, Capitalista de Libre Mercado, aunque como constitucionalmente se define como Estado Social, los distintos gobiernos, en función de su fundamentos ideológicos – políticos, establecen medidas político – económicas para controlar los desequilibrios. No obstante, su esencia capitalista y de libre Ricardo Leiva Román 145 Resultados y Discusión mercado, le hace estar expuesto periódicamente al impacto de las crisis económicas. x Estructura social: la estructura de la sociedad va adquiriendo la complejidad de las sociedades de los países más desarrollados y avanzados: plural, con diversidad cultural, predominancia de las clases medias, aunque el proceso parece que conduce a una disminución de las mismas, con un ligero incremento de las más altas, con un incremento mucho más apreciable de las bajas y con incremento, también, de las bolsas de marginalidad. 5.5.3 Análisis de la estructura “final”: sistema deportivo general, situación del Olimpismo, participación en los Juegos Olímpicos. x Sistema deportivo general: según Abadía (2011) la situación del sistema deportivo en España al inicio de este periodo era “una realidad deportiva poco alentadora” y continúa “... durante estos primeros años de transición el asociacionismo deportivo continuó asumiendo buena parte de la responsabilidad en la promoción y la expansión del deporte español, quedando relegada la acción gubernamental a un papel secundario y de continuidad en su incidencia en la realidad deportiva”. Entre 1977 y 1978 es cuando se produjeron cambios sustanciales de carácter organizativo y de gestión del sistema deportivo: desaparece en abril de 1977 la Delegación Nacional de Educación Física y Deportes y en agosto nace el Consejo Superior de Deportes (CSD), en aquel momento, dependiente del Ministerio de Cultura y Bienestar. Desde un principio planteó tres líneas básicas de actuación: una de “educación física y promoción”, otra de “tecnificación” y una de “competición”. Sin embargo, en su nacimiento se encontró con los problemas de la delicada situación política y de la crisis económica de 1973, que frenó el crecimiento económico mundial y en el caso del reciente creado CSD, la disminución de 2.000 millones de pesetas de presupuesto, lo que como señala Abadía (2011) “... sin duda limitó la reestructuración y la evolución del deporte español y, sobre todo, afianzó la percepción del inmovilismo en los avances en materia deportiva”. Por otra parte, desde 146 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión el terreno político, es significativo que en los programas de las cuatro fuerzas políticas más votadas en los primeros comicios democráticos, el deporte, prácticamente ni se mencionara. Ahora bien, en esta situación un hecho político, se ha mostrado como el factor de inflexión en la misma: las primeras elecciones municipales democráticas, porque el análisis posterior ha demostrado, la importancia que tuvieron los municipios en el impulso al sistema deportivo, principalmente, en el ámbito de la promoción en el “Deporte para todos”, pero también, en el deporte de competición, ya que participaron decisivamente, creando organismos específicos deportivos: fundaciones, patronatos, servicios municipales y en la construcción y gestión de instalaciones polideportivas. Un elemento clave en el arranque del proceso de crecimiento del deporte español, fue la promulgación de la Ley General de la Cultura Física y del Deporte de 1980, que sustituía a la de 1961, cuyos puntos principales eran los siguientes: -­‐ Obligatoriedad de la educación física en los distintos niveles educativos. -­‐ Organización y competencias del CSD y del COE. -­‐ Asignación al CSD del 22% de la recaudación íntegra de las Apuestas Mutuas Deportivo – Benéficas. -­‐ Rango universitario de los INEF. -­‐ Descentralización de la organización administrativa para la promoción del deporte. A partir de este momento, el deporte en España no ha dejado de desarrollarse en todas sus facetas, múltiples y diversas, como sistema “abierto” que es (Ferrando, 2005): recreación, profesionalismo, espectáculo, pedagogía, ocio, negocio, investigación, etc. Como indica Sánchez (2011) “... desde la segunda mitad de 1980 y en especial durante la de 1990 se constatan cada vez más las transformaciones que suceden en el sistema deportivo español y se vinculan a los cambios económicos (productivos y de mercado) sociales y culturales que acontecen en las sociedades contemporáneas. Transformaciones que Ricardo Leiva Román 147 Resultados y Discusión llevan a una creciente diversificación e individualización del sistema deportivo”. x Situación del Olimpismo: Lo más importante a destacar en este periodo, con referencia al Olimpismo, al margen de los resultados obtenidos por los deportistas españoles en los Juegos Olímpicos y, sobre todo, de los resultados en los Juegos Olímpicos de Barcelona 92, que supusieron un giro “copernicano” en los mismos, principalmente (aunque, no únicamente) por la concepción y aplicación desde 1988, del Plan de Ayuda al Deporte Olímpico (ADO) que dotó a todos los deportistas de élite, de aquellas modalidades deportivas con práctica competitiva no plenamente “profesional”, de los recursos económicos suficientes para la preparación de los mismos, el progresivo reconocimiento institucional y su clarificador encuadramiento jurídico y la no menos importante declaración como “Ente asociativo de utilidad pública”, del Comité Olímpico Español, primero con la ley de 1980 y, posteriormente, con la actualmente vigente Ley “Del Deporte” de 1990. Siguiendo a Durántez (2003) esto a supuesto el reconocimiento del COE como una institución con actividad permanente, no sólo, para la puntual función de organización y preparación de la participación de los deportistas españoles en los Juegos Olímpicos, sino para, además, la labor continua de difusión del Olimpismo y de la Pedagogía Olímpica, siendo todo ello, lo que asegura la pervivencia del “Proyecto Olímpico” en España, en una perspectiva de futuro. x Participación de los deportistas españoles en los Juegos Olímpicos de este periodo histórico: 148 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión Figura 10. Participación del equipo olimpico español, por género en los JJOO (1978-­2008). Ricardo Leiva Román 149 Resultados y Discusión Figura 11. Participación del equipo olimpico español, por modalidad en los JJOO (1978-­2008). Como podemos observar en las figuras 9 y 10 en esta etapa la participación del equipo olímpico español, desarrolló el siguiente resultado: MOSCÚ, 1980: sólo participaron 80 países por el boicot impuesto por el “bloque occidental”, como represalia a la Unión Soviética por su invasión de Afganistán. La delegación española desfiló bajo bandera olímpica y estuvo compuesta de 147 deportistas masculinos y 9 femeninos. Se consiguieron 6 medallas: 1 oro, 3 platas y 2 bronces y, también, 11 diplomas olímpicos. LOS ÁNGELES, 1984: participaron 140 países, pese al boicot, en esta ocasión y como respuesta al que se produjo en los Juegos de Moscú de 1980, de la URSS y de los países del llamado “Telón de Acero”. El COE envió a una delegación compuesta por 166 deportistas masculinos y 16 femeninos. Los 150 Ricardo Leiva Román Resultados y Discusión resultados más destacados fueron 5 medallas, 1 de oro, 2 de plata y 2 de bronce. SEÚL, 1988: la participación general correspondió a 159 países. La delegación que representaba a España estaba compuesta por 198 deportistas masculinos y 31 deportistas femeninos. Al final de los Juegos, el balance de medallas fue el siguiente: un total de 4 medalla, con 1 oro, 2 de plata y 1 de bronce. BARCELONA, 1992: los Juegos Olímpicos se celebran en España. No cabe duda de que fue un momento histórico, inigualable e inolvidable para nuestro país, pero también lo fue para los propios Juegos porque marcó un antes y un después en el modelo de organización y de realización de los mismos. La participación general siguió creciendo, siendo la más elevada de la historia con 169 países. España, como país anfitrión, inscribió a 311 deportistas masculinos y a una elevadísima representación femenina que creció, con relación a todos los Juegos anteriores, hasta los 128 deportistas femeninos. Los resultados deportivos fueron los más positivos de la historia olímpica española: 22 metales, de los cuales, 13 fueron de oro, 7 de plata y 2 de bronce. No cabe alguna duda que, en gran medida, este éxito fue debido al apoyo de un modelo estratégico denominado “Plan ADO”, que demostró que lo único que necesitaban nuestros deportistas para competir en igualdad de condiciones eran, las mismas condiciones institucionales y materiales de apoyo que recibían los demás. El presidente que condujo desde el COE a aquel imborrable momento para el Olimpismo español fue, el siempre recordado Carlos Ferrer Salat. ATLANTA, 1996: la fecha de los Juegos de Atlanta representó el centenario de realización de los mismos. Como no podía ser de otra forma, contaron con la participación más amplia de la historia, con 197 países. La delegación española también fue extensa, con 196 deportista masculinos y 95 femeninos. Los resultados deportivos en la competición, no siendo como los de Barcelona, aún fueron memorables: 17 medallas, con 5 oros, 6 platas y 6 bronces. Ricardo Leiva Román 151 Resultados y Discusión SYDNEY, 2000: los Juegos de Sydney volvieron a marcar un “record” en la participación general: 200 países y contaron con la segunda más numerosa participación española de la historia: 218 deportistas masculinos y 105 femeninos. Los resultados, en cuanto a medallas, volvieron a ser notables aunque, ya en ligero retroceso con respecto a los Juegos de Barcelona y Atlanta. Se obtuvieron 11 medallas, con 3 oros, 3 platas y, finalmente, 5 bronces. ATENAS, 2004: los Juegos Olímpicos volvían al origen de los mismos, al ámbito geográfico, histórico, sociocultural que significo la fuente primigenia de la cultura occidental: Grecia. Los resultados, 3 oros, 11 platas y 4 bronces, si nos remitimos exclusivamente al número de galardonados con medalla, no fueron excesivamente exitosos, ahora bien, es necesario destacar un elemento ciertamente positivo: la participación femenina española, que en estos Juegos se aproximó ostensiblemente a la masculina. Concretamente, los deportistas masculinos convocados por el COE fueron 182 y los femeninos, la no despreciable cantidad de 139. La aproximación entre unos y otros fue evidente. PEKIN, 2008: la participación española fue de 164 hombres y 122 mujeres teniendo un aumento en la cantidad total de mujeres españolas participantes. En el medallero España sumo 5 de oro, 10 plata y 3 de bronce. En el anexo nº1: adjuntamos figuras adicionales del desarrollo de nuestra investigación por etapas. 152 Ricardo Leiva Román VI. CONCLUSIONES Conclusiones 6. Conclusiones En este apartado vamos a exponer las conclusiones en forma de distribución por variables: Género, Modalidad Deportiva, Resultados, Estructura Deportiva y Zonas Geográficas. En primer lugar, se iniciará el apartado de conclusiones con el bloque dedicado a la participación y resultados por “género”. Figura 12. Participación del equipo olímpico español, por género en todos los JJOO. 1. En los distintos Juegos Olímpicos se manifiesta una aparición progresiva de la mujer española, este hecho es un reflejo de la sociedad de cada época. 2. El verdadero auge de participación femenina y masculina fue en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, y la tendencia actual es de aumento y consolidación. Ricardo Leiva Román 155 Conclusiones 3. Los datos señalan que la evolución de la mujer española en los Juegos Olímpicos representa un avance social. 4. La participación masculina en los Juegos Olímpicos ha sido continua, aunque se observa algunas diferencias entre las distintas épocas. 5. Se demuestra que existe una tendencia a la igualdad en la participación por género en los últimos Juegos Olímpicos. A continuación exponemos las conclusiones de la segunda variable referida a la “modalidad deportiva”. Figura 13. Participación del equipo olímpico español, por modalidad deportiva en todos los JJOO. 6. Los datos señalan que el mayor porcentaje de participación recae en el deporte del atletismo con un 15% de la participación total a lo largo de la historia. 7. Se refleja que la natación con un 14% y el Hockey con 10% son deportes con alta participación histórica en los Juegos Olímpicos. 156 Ricardo Leiva Román Conclusiones 8. Existe una franja porcentual sobre el 5%, en donde se encuentran la mayoría de modalidades deportivas en cuanto a su participación histórica en los Juegos Olímpicos. 9. Se destaca que la gimnasia es una modalidad deportiva mayoritariamente con participación femenina. 10. Existe una relación directa entre la participación femenina y el resultado, esto ocurre en modalidades específicas como es el caso del judo. 11. En cuanto a la participación únicamente masculina se puede constatar las modalidades deportivas como el boxeo y el fútbol. La tercera variable hace referencia a la “Resultados”. Figura 14. Resultados en medallas del equipo olímpico español, por modalidad deportiva en todos los JJOO. Ricardo Leiva Román 157 Conclusiones 12. Se constata que la vela ha sido y es el deporte con más medallas conseguidas en todos los Juegos Olímpicos con 17 medallas. 13. Podemos corroborar que no existe una relación entre el número de participantes por modalidad deportiva y los resultados conseguidos en la historia de los Juegos. 14. Se pone de manifiesto la gran importancia en los resultados de los deportes individuales como son: ciclismo, atletismo, tenis, piragüismo, natación, gimnasia y judo. 15. El medallero olímpico español se sustenta en tres deportes: vela, ciclismo y atletismo, aunque es muy considerable la aportación de otros deportes. 16. El tenis es el deporte con más medallas de plata, junto al piragüismo y ciclismo que son los que más medallas de bronce han adquirido a lo largo de la historia de los Juegos Olímpicos. Figura 15. Resultados en diplomas del equipo olímpico español, por modalidad deportiva en todos los JJOO. 158 Ricardo Leiva Román Conclusiones 17. En cuanto a los diplomas olímpicos la modalidad deportiva que más aporta es el atletismo con 52, le sigue un grupo de modalidades como son: natación con 31, el piragüismo con 28 y ciclismo 27, en todos los Juegos Olímpicos. 18. Los diplomas femeninos son mayoritariamente en las modalidades deportivas de judo, tenis y gimnasia. 19. Los diplomas totales de los participantes son: 217 en masculino y 88 en femenino. En lo concerniente a la cuarta variable “estructura deportiva”. Figura 16. Número de licencias por deportes con más medallas conseguidas a lo largo de todos los JJOO. 20. En cuanto al número de licencias el deporte olímpico del fútbol es el que más tiene. 21. Podemos afirmar que los deportes con una tendencia de aumento progresivo en el número de licencias son: triatlón, tenis, fútbol y baloncesto. Ricardo Leiva Román 159 Conclusiones 22. Los cinco deportes con mayor número de licencias son fútbol, baloncesto, balonmano, judo y tenis. De ellos, podemos destacar el tenis que esta igualmente, en los cinco deportes con mayor número de medallas en la historia. 23. El deporte con más aportación en el medallero, la vela, se encuentra en el puesto número 11, respecto al número de licencias. 24. En cuanto a los deportes que más diplomas olímpicos han aportado y su relación con el número de licenciadas son: el atletismo está en el puesto número 6 del total de licencias en la historia, la natación en el 10 y el piragüismo en el 13. Pasamos a presentar las conclusiones de la quinta variable que hace referencia a “las zonas geográficas”. Figura 17. Participación del equipo olímpico español, por zona geográfica en todos los JJOO. 160 Ricardo Leiva Román Conclusiones 25. Podemos llegar a corroborar que es una representación diversa y plural de todas y todos los españoles. 26. Existe una alta participación de deportistas procedentes de Cataluña con 653 participantes, Comunidad de Madrid con 373, País Vasco con 272 y Andalucía 216, en todos los Juegos Olímpicos. 27. Las Comunidades Autónomas con participación mediana se encuentran: Castilla-­León 138, Comunidad Valenciana 114, Galicia 112 y Canarias con 103. 28. En cuanto a la participación por género y por zona geográfica, tenemos que decir que, las Comunidades Autónomas de Madrid y Valencia presentan un menor distanciamiento entre la participación masculina y la femenina. En el anexo nº2: adjuntamos figuras adicionales del desarrollo de nuestra investigación por variables. En resumen, podemos decir que la participación del equipo olímpico español a lo largo de la historia representa una muestra magnifica de la evolución histórica de nuestro país. Nos llena de orgullo y satisfacción comprobar como ha sido posible analizar la participación y los resultados de nuestro equipo, el verdadero equipo de todas y todos los españoles. Un equipo que ha superado todo las dificultades políticas, económicas y sociales de nuestro país, y de los distintos entornos internacionales. En adición a lo que antecede, la inclusión de la mujer en el equipo olímpico español ha representado uno de los avances sociales más importantes. Junto a ello, los resultados obtenidos por dicho equipo a lo largo de la historia representa la visibilidad de nuestro país a través del deporte. Aunque, es necesario puntualizar que las modalidades deportivas más fructíferas han sido la vela, el atletismo y el ciclismo, constatando que el verdadero auge de participación femenina y masculina fue en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992. Ricardo Leiva Román 161 Conclusiones Estamos totalmente convencidos que el equipo olímpico español, a lo largo de la historia de los Juegos Olímpicos, ha realizado una labor de embajadores de nuestro país, desarrollando una imagen muy positiva de España. Del mismo modo, nuestro equipo representa a una sociedad española que esta avanzando en el uso del deporte como medio de vida, como se puede comprobar en las distintas estructuras organizativas del deporte en nuestro país. Igualmente, el conjunto de participantes en el equipo olímpico español a lo largo de la historia ha representado a una gran diversidad de provincias y comunidades autónomas, lo que ha fortalecido los lazos de unión entre las distintas zonas geográficas de nuestro país. En definitiva, el equipo olímpico español ha sido una representación ejemplar de la historia de España, además de conseguir unos excelentes resultados deportivos, que han hecho que los Juegos Olímpicos sean un evento en donde todos los españoles nos hemos sentido identificados. Tabla 1. Relación entre objetivos y conclusiones. OBJETIVOS CONCLUSIÓN En los distintos Juegos Olímpicos se manifiesta una Conocer el número de participantes género. por aparición progresiva de la mujer española, este hecho es un reflejo de la sociedad de cada época. El verdadero auge de participación femenina y masculina fue en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, y la tendencia actual es de aumento y consolidación. Los datos señalan que la evolución de la mujer española en los Juegos Olímpicos representa un avance social. La participación masculina en los Juegos Olímpicos ha sido continua, aunque se observa algunas 162 Ricardo Leiva Román Conclusiones diferencias entre las distintas épocas. Se demuestra que existe una tendencia a la igualdad en la participación por género en los últimos Juegos Olímpicos. OBJETIVOS CONCLUSIÓN Los datos señalan que el mayor porcentaje de Conocer el número de participantes por participación recae en el deporte del atletismo con modalidad deportiva. un 15% de la participación total a lo largo de la historia. Se refleja que la natación con un 14% y el Hockey con 10% son deportes con alta participación histórica en los Juegos Olímpicos. Existe una franja porcentual sobre el 5%, en donde se encuentran la mayoría de modalidades deportivas en cuanto a su participación histórica en los Juegos Olímpicos. Se destaca que la gimnasia es una modalidad deportiva mayoritariamente con participación femenina. Existe una relación directa entre la participación femenina y el resultado, esto ocurre en modalidades específicas como es el caso del judo. En cuanto a la participación únicamente masculina se puede constatar las modalidades deportivas como el boxeo y el fútbol. Ricardo Leiva Román 163 Conclusiones OBJETIVOS CONCLUSIÓN Analizar el resultado Se constata que la vela ha sido y es el deporte con de los participantes más medallas conseguidas en todos los Juegos españoles en todos Olímpicos con 17 medallas. los JJOO. Podemos corroborar que no existe una relación entre el número de participantes por modalidad deportiva y los resultados conseguidos en la historia de los Juegos. Se pone de manifiesto la gran importancia en los resultados de los deportes individuales como son: ciclismo, atletismo, tenis, piragüismo, natación, gimnasia y judo. El medallero olímpico español se sustenta en tres deportes: vela, ciclismo y atletismo, aunque es muy considerable la aportación de otros deportes. El tenis es el deporte con más medallas de plata, junto al piragüismo y ciclismo que son los que más medallas de bronce han adquirido a lo largo de la historia de los Juegos Olímpicos. En cuanto a los diplomas olímpicos la modalidad deportiva que más aporta es el atletismo con 52, le sigue un grupo de modalidades como son: natación con 31, el piragüismo con 28 y ciclismo 27, en todos los Juegos Olímpicos. Los diplomas femeninos son mayoritariamente en las modalidades deportivas de judo, tenis y gimnasia. 164 Ricardo Leiva Román Conclusiones Los diplomas totales de los participantes son: 217 en masculino y 88 en femenino. OBJETIVOS CONCLUSIÓN Conocer el número de En cuanto al número de licencias el deporte participantes por olímpico del fútbol es el que más tiene. estructura deportiva. Podemos afirmar que los deportes con una tendencia de aumento progresivo en el número de licencias son: triatlón, tenis, fútbol y baloncesto. Los cinco deportes con mayor número de licencias son fútbol, baloncesto, balonmano, judo y tenis. De ellos, podemos destacar el tenis que esta igualmente, en los cinco deportes con mayor número de medallas en la historia. El deporte con más aportación en el medallero, la vela, se encuentra en el puesto número 11. En cuanto a los deportes que más diplomas olímpicos han aportado y su relación con el número de licenciadas son: el atletismo en el puesto número 6 del total de licencias en la historia, la natación en el 10 y el piragüismo en el 13. Ricardo Leiva Román 165 Conclusiones OBJETIVOS CONCLUSIONES Conocer el número de Podemos llegar a corroborar que es una participantes por zona representación diversa y plural de todas y todos los geográfica. españoles. Existe una alta participación de deportistas procedentes de Cataluña con 653 participantes, Comunidad de Madrid con 373, País Vasco con 272 y Andalucía 216, en los Juegos Olímpicos. Las Comunidades Autónomas con participación mediana se encuentran: Castilla-­León 138, Comunidad Valenciana 114, Galicia 112 y Canarias con 103. En cuanto a la participación por género y por zona geográfica, tenemos que decir que, las Comunidades Autónomas de Madrid y Valencia presentan un menor distanciamiento entre la participación masculina y la femenina. Tabla 2. Conclusiones relativas a las preguntas planteadas. PREGUNTAS PLANTEADAS CONCLUSIONES ¿Es posible conocer la En los distintos Juegos Olímpicos se participación española por manifiesta una aparición progresiva de la género, en todos los Juegos mujer española, este hecho es un reflejo de la Olímpicos de verano en la sociedad de cada época. era moderna? El verdadero auge de participación femenina y masculina fue en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, y la tendencia actual es de aumento y consolidación. 166 Ricardo Leiva Román Conclusiones Los datos señalan que la evolución de la mujer española en los Juegos Olímpicos representa un avance social. La participación masculina en los Juegos Olímpicos ha sido continua, aunque se observa algunas diferencias entre las distintas épocas. Se demuestra que existe una tendencia a la igualdad en la participación por género en los últimos Juegos Olímpicos. PREGUNTAS PLANTEADAS CONCLUSIONES ¿Es posible conocer la Los datos señalan que el mayor porcentaje participación española por de participación recae en el deporte del modalidad deportiva, en atletismo con un 15% de la participación total todos los Juegos Olímpicos a lo largo de la historia. de verano en la era moderna? Se refleja que la natación con un 14% y el Hockey con 10% son deportes con alta participación histórica en los Juegos Olímpicos. Existe una franja porcentual sobre el 5%, en donde se encuentran la mayoría de modalidades deportivas en cuanto a su participación histórica en los Juegos Olímpicos. Se destaca que la gimnasia es una modalidad deportiva mayoritariamente con participación femenina. Ricardo Leiva Román 167 Conclusiones Existe una relación directa entre la participación femenina y el resultado, esto ocurre en modalidades específicas como es el caso del judo. En cuanto a la participación únicamente masculina se puede constatar las modalidades deportivas como el boxeo y el fútbol. PREGUNTAS PLANTEADAS CONCLUSIONES ¿Es posible analizar los Se constata que la vela ha sido y es el resultados la deporte con más medallas conseguidas en de participación española, en todos los Juegos Olímpicos con 17 medallas. todos los Juegos Olímpicos de verano moderna? en la era Podemos corroborar que no existe una relación entre el número de participantes por modalidad deportiva y los resultados conseguidos en la historia de los Juegos. Se pone de manifiesto la gran importancia en los resultados de los deportes individuales como son: ciclismo, atletismo, tenis, piragüismo, natación, gimnasia y judo. El medallero olímpico español se sustenta en tres deportes: vela, ciclismo y atletismo, aunque es muy considerable la aportación de otros deportes. El tenis es el deporte con más medallas de plata, junto al piragüismo y ciclismo que son 168 Ricardo Leiva Román Conclusiones los que más medallas de bronce han adquirido a lo largo de la historia de los Juegos Olímpicos. En cuanto a los diplomas olímpicos la modalidad deportiva que más aporta es el atletismo con 52, le sigue un grupo de modalidades como son: natación con 31, el piragüismo con 28 y ciclismo 27, en todos los Juegos Olímpicos. Los diplomas mayoritariamente femeninos en las son modalidades deportivas de judo, tenis y gimnasia. Los diplomas totales de los participantes son: 217 en masculino y 88 en femenino. PREGUNTAS PLANTEADAS CONCLUSIONES ¿Es posible conocer la En cuanto al número de licencias el deporte participación española, en olímpico del fútbol es el que más tiene. todos los Juegos Olímpicos de verano en la era Podemos afirmar que los deportes con una moderna, desde el punto de tendencia de aumento progresivo en el vista de la estructura número de licencias son: triatlón, tenis, fútbol deportiva? y baloncesto. Los cinco deportes con mayor número de licencias son fútbol, baloncesto, balonmano, judo y tenis. De ellos, podemos destacar el tenis que esta igualmente, en los cinco deportes con mayor número de medallas en la historia. Ricardo Leiva Román 169 Conclusiones El deporte con más aportación en el medallero, la vela, se encuentra en el puesto número 11. En cuanto a los deportes que más diplomas olímpicos han aportado y su relación con el número de licenciadas son: el atletismo está en el puesto número 6 del total de licencias en la historia, la natación en el 10 y el piragüismo en el 13. PREGUNTAS PLANTEADAS CONCLUSIONES ¿Es posible conocer la Podemos llegar a corroborar que es una participación española en representación diversa y plural de todas y todos los Juegos Olímpicos de todos los españoles. verano en la era moderna, desde el punto de vista de la Existe una alta participación de deportistas zona geográfica? procedentes de Cataluña con 653 participantes, Comunidad de Madrid con 373, País Vasco con 272 y Andalucía 216, en los Juegos Olímpicos. Las Comunidades participación mediana Autónomas se con encuentran: Castilla-­León 138, Comunidad Valenciana 114, Galicia 112 y Canarias con 103. En cuanto a la participación por género y por zona geográfica, tenemos que decir que, las Comunidades Autónomas de Madrid y Valencia presentan un menor distanciamiento entre la participación masculina y la femenina. 170 Ricardo Leiva Román VII. PROPUESTAS DE MEJORA Y LÍNEAS FUTURAS DE INVESTIGACIÓN Líneas Futuras 7. Propuestas de mejora y líneas futuras de investigación. Al ser un estudio histórico debemos ser conscientes de las limitaciones de las fuentes consultadas. Somos conscientes de que nuestro estudio puede y debe ampliarse a otros Juegos Olímpicos. Las conclusiones de nuestra investigación nos deben ayudar a reconducir nuestras deficiencias y fortalecer las trayectorias positivas. Ya que, este estudio no es más que la representación real de nuestra sociedad y deporte. Se podría realizar la misma investigación con otros eventos deportivos, y de ese modo poder establecer relaciones longitudinales. Igualmente, se podía realizar nuestro estudio a diferentes Comités Olímpicos Nacionales pertenecientes al COI. Ricardo Leiva Román 173 VIII. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS Referencias bibliográficas 8. Referencias bibliográficas. x AA.VV. (2005). Diccionario Akal de Etnología y Antropología. Madrid: Akal Ediciones. x AAVV. (1988). Seminario Francisco Amorós. Su obra entre dos cultura. Madrid: INEF. x Abadía-­Naudí, S. (2011). Deporte, ciudadanía y libertad: la Transición en España y el deporte, 1975-­1982. En: Pujadas, X. (coord.). Atletas y ciudadanos. Historia social del deporte en España 1870-­2010. Madrid: Alianza Editorial. x Agulla, J. (1990). Apuntes históricos. Olimpia. Barcelona: Olimpia. x Alcoba, A. (1992). España en los Juegos Olímpicos. Madrid: Lerko Print. x Alfil (1964). La XVIII Olimpiada, clausurada en presencia de los emperadores. 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deportivas. (varios artículos): Relaciones de las mujeres adolescentes con el deporte y rasgos que definen dicha relación. Estudio cuantitativo similar, divido por variables. Encuestas y cuestionarios. Colección ICD, CSD, Núm. 38. Historia cultural del deporte y la mujer en la España de la primera mitad del siglo XX. Estudio de investigación biográfico que da a conocer la vida y obra de ‘Lilí Álvarez’, pionera deportista y escritora;; profundiza sobre la relación entre el deporte y la mujer en la España de la primera mitad del siglo XX. Colección ICD, CSD. Núm. 35. Las mujeres y las actividades físico-­deportivas. Relación de las alumnas de la ESO, su conocimiento sobre el deporte, práctica deportiva en la ESO y la práctica en edad adulta o la evolución. Explicación del diseño y la metodología de la investigación. (PÁG 12). Cuestionario cuantitativo con 40 ítems Colección ICD, CSD. Núm. 30. Las mujeres en la alta competición deportiva. Participación de la mujer en Sídney. Gráficas comparativas con JJOO anteriores. Estudio historiográfico. Colección ICD, CSD. Núm. 15. Experiencia de formación de docentes y entrenadores en el ámbito de la actividad física y del deporte: Vínculos y relaciones con la actividad física en los estudiantes de maestro/a en la especialidad de educación física. Este estudio busca la relación entre los estudiantes diplomados de maestro de educación física, con la actividad física y el ejercicio físico que realizan. Estudio por cuestionario. Muestra de diferentes comunidades autónomas y de todos los magisterios, pero en mayor porcentaje educación física. Estudio cuantitativo similar al nuestro. Colección ICD, CSD. Núm. 3. Indicadores para la detección de talentos deportivos. Análisis de los determinantes sociales que intervienen en el proceso de detección de talentos en el deporte. Investigación empírica de carácter no experimental-­seleccional basada en muestra y con un diseño seccional-­descriptivo acorde con los objetivos. Encuesta. CUALITATIVO no cuantitativo. Colección ICD, CSD. Núm. 4. Estructura ocupacional y mercado laboral en el deporte. Estructura ocupacional del deporte en España. Encuesta de los sectores de entrenamiento, docencia, animación y dirección. Encuesta. Cuestionarios de técnicos, de directores de entidades privadas y de directores de Servicios Deportivos Municipales. Poca relación con nuestro trabajo. No explica metodología. 188 Ricardo Leiva Román IX. ANEXOS Anexos 9. Anexos Anexo 1. En el anexo nº1: adjuntamos figuras adicionales del desarrollo de nuestra investigación por épocas: Etapa (1918-­1939). Figura 18. Participación del equipo olímpico español, en género masculino en los JJOO (1918-­
1939). Figura 19. Participación del equipo olímpico español, en género femenino en los JJOO (1918-­
1939). Ricardo Leiva Román i Anexos Figura 20. Participación del equipo olímpico español, en género masculino por modalidades deportivas en los JJOO (1918-­1939). Figura 21. Participación del equipo olímpico español, en género femenino por modalidades deportivas en los JJOO (1918-­1939). ii Ricardo Leiva Román Anexos Figura 22. Participación del equipo olímpico español, comparada por género y modalidades deportivas en los JJOO (1918-­1939). Etapa (1939-­1960). Figura 23. Participación del equipo olímpico español, en género masculino en los JJOO (1939-­
1960). Ricardo Leiva Román iii Anexos Figura 24. Participación del equipo olímpico español, en género femenino en los JJOO (1939-­
1960). iv Ricardo Leiva Román Anexos Figura 25. Participación del equipo olímpico español, en género masculino por modalidad deportiva en los JJOO (1939-­1960). Ricardo Leiva Román v Anexos Figura 26. Participación del equipo olímpico español, en género femenino por modalidad deportiva en los JJOO (1939-­1960). vi Ricardo Leiva Román Anexos Figura 27. Participación del equipo olímpico español, comparando por género y modalidad deportiva en los JJOO (1939-­1960). Etapa (1960-­1978). Figura 28. Participación del equipo olímpico español, en el género masculino en los JJOO (1960-­1978). Ricardo Leiva Román vii Anexos Figura 29. Participación del equipo olímpico español, en el género femenino en los JJOO (1960-­1978). viii Ricardo Leiva Román Anexos Figura 30. Participación del equipo olímpico español, en el género masculino y por modalidad en los JJOO (1960-­1978). Ricardo Leiva Román ix Anexos Figura 31. Participación del equipo olímpico español, en el género femenino y por modalidad en los JJOO (1960-­1978). x Ricardo Leiva Román Anexos Figura 32. Participación del equipo olímpico español, comparativa por género y modalidad en los JJOO (1960-­1978). Etapa (1978-­2008). Figura 33. Participación del equipo olímpico español, en género masculino de los JJOO (1978-­
2008). Ricardo Leiva Román xi Anexos Figura 34. Participación del equipo olímpico español, en género femenino de los JJOO (1978-­
2008). Figura 35. Participación del equipo olímpico español, comparación entre géneros en los JJOO (1978-­2008). xii Ricardo Leiva Román Anexos Figura 36. Participación del equipo olímpico español, en género masculino y por modalidad en los JJOO (1978-­2008). Ricardo Leiva Román xiii Anexos Figura 37. Participación del equipo olímpico español, en género femenino y por modalidad en los JJOO (1978-­2008). xiv Ricardo Leiva Román Anexos Figura 38. Participación del equipo olímpico español, comparada por género y por modalidad en los JJOO (1978-­2008). Anexo 2. En el anexo nº2: adjuntamos figuras adicionales del desarrollo de nuestra investigación por variables. Figura 39. Participación del equipo olímpico español, en todos los JJOO. Ricardo Leiva Román xv Anexos Figura 40. Participación del equipo olímpico español, en todos los JJOO por modalidad deportiva. Figura 41. Participación del equipo olímpico español, en todos los JJOO comparado por modalidad y género. xvi Ricardo Leiva Román Anexos Figura 42. Participación del equipo olímpico español, en los JJOO por porcentaje de modalidades deportivas. Ricardo Leiva Román xvii Anexos Figura 43. Participación del equipo olímpico español, en los JJOO por porcentaje de modalidades deportivas en el género femenino. Figura 44. Participación del equipo olímpico español, en los JJOO por porcentaje de modalidades deportivas en el género masculino. xviii Ricardo Leiva Román Anexos Figura 45. Diplomas del equipo olímpico español, en los JJOO en el género masculino. Figura 46. Diplomas del equipo olímpico español, en los JJOO en el género femenino. Ricardo Leiva Román xix Anexos Figura 47. Diplomas del equipo olímpico español, en los JJOO comparado por género. Figura 48. Diplomas del equipo olímpico español en los JJOO. xx Ricardo Leiva Román Anexos Figura 49. Diplomas del equipo olímpico español, en los JJOO por modalidad deportiva. Ricardo Leiva Román xxi Anexos Figura 50. Medallas del equipo olímpico español, en los JJOO en el género masculino. xxii Ricardo Leiva Román Anexos Figura 51. Medallas del equipo olímpico español, en los JJOO en el género femenino. Ricardo Leiva Román xxiii Anexos Figura 52. Número de licencias de los deportes del 5º al 10º puesto, con mayor número de medallas obtenidos en los JJOO. Figura 53. Número de licencias de los deportes del 10º al 15º puesto, con mayor número de medallas obtenidos en los JJOO. xxiv Ricardo Leiva Román Anexos Figura 54. Participación de deportistas masculinos en los JJOO, por Comunidad Autónoma. Figura 55. Participación de deportistas femeninas en los JJOO, por Comunidad Autónoma. Ricardo Leiva Román xxv Anexos Figura 56. Comparativa en la participación de deportistas femeninos y masculinos en los JJOO, por Comunidad Autónoma. Figura 57. Participación de deportistas en los JJOO, por Comunidad Autónoma.
xxvi Ricardo Leiva Román 
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