Antes de enfocar el título del presente te-ma, vamos a dar una idea general sobre lo que es la moral y la religión. El comportamiento del hombre y de los grupos sociales, está regulado por determina-das acciones y actividades, unas de tipo ma-terial y otras de índole espiritual. Creemos que las acciones que caen en el campo espiritual son las que más influyen en la conducta personal y colectiva del hombre y del grupo social, entre las que se destacan la moral y la religión. Pero ¿qué es la moral? No podemos verla ni tocarla como podríamos hacerlo con un objeto cualquiera, porque la moral es un conjunto de Facultades del espíritu. Es una virtud que está en nuestra interioridad que valoriza la rectitud de los actos humanos, conscientes y libres, y que sólo podemos demostrarla o exhibirla, observando una con-ducta intachable ajustada a los principios éticos que demanda y exige la sociedad don-de nos ha tocado vivir. La justicia, aplicada por una familia, una tribu, un tribunal, o cualquier grupo humano organizado, es una demostración fehaciente de que la sociedad concede una valoración moral a los actos humanos, lo que de por sí constituye un gran fenómeno social. En otro sentido, la moral es la ciencia que enseña las reglas que deben seguirse para ha-cer el bien y evitar el mal. Tomando en cuen-ta esto, ella constituye uno de los elementos esenciales de todas las religiones, las cuales se ocupan de sus límites, tratando de definir lo lícito o lo ¡lícito dentro de cada una de ellas. Otra pregunta que obligadamente surge es la siguiente: ¿Qué es la religión? La Religión está llamada a enseñar al hom-bre un conjunto de normas para orientar su conducta y valorar sus actos, por eso sé afir-ma que ella constituye el mayor freno para el buen comportamiento del individuo en la sociedad. La religión, también, es el medio por el cual el hombre tributa el culto, el amor, el respeto y la reverencia a Dios, como ser su-premo de la humanidad. Aún cuando no se cumplan ni practiquen los ritos de una iglesia determinada, la creen-cia religiosa es necesaria en todo hombre ci-vilizado. Por eso, puede afirmarse que resul-taría nociva y hasta peligrosa, la indiferencia religiosa del ser humano, pues, tradicional-mente, la religión ha constituido el factor básico en la formación humana. La mejor forma de enseñar el contenido de la religión es predicando con la palabra y practicando con el ejemplo los principios y fundamentos que la misma encierra y predi-ca. La religión es sinónima de fe, piedad, creencia y devoción, por lo que, junto a la moral tiene una influencia decisiva en la conducta personal y social del individuo. Ambos regulan el comportamiento humano frente a la sociedad y a los semejantes a quienes el Señor recomienda "amaos los unos a los otros", tal como reza uno de los diez mandamientos de la Ley de Dios. Finalmente, podemos afirmar que si la re-ligión y la moral influyen en la conducta personal, también influyen en el comportamiento de la en general lo que constituye una efectiva contribución para la comprensión y la paz moral. Por esta razón. Debemos estimular que todo hombre profese una religión o un credo determinado, evitando la existencia en la sociedad de hombres indiferentes, a quienes les importa un comino que en la 1 comunidad haya guerra, odios e intranquilidad. La rectitud de la moral y la pureza de la religión, son factores positivos en la organi-zación y dirección de los pueblos para obte-ner una conducta de integración social de los hombres y de las naciones que forman es-te mundo ávido de paz, comprensión y con-cordia. CREDOS Y CREENCIAS EN LA RELIGION CRISTIANA El cristianismo es la religión fundada por nuestro Señor Jesucristo hace veinte siglos. Sus fundamentos y principios están conteni-dos en las Sagradas Escrituras, y particular-mente en los Santo Evangelios, escritos por los evangelistas San Juan, San Lucas, San Marcos y San Mateo, quienes tuvieron el privilegio de vivir junto al mismo Cristo. La Escritura cristiana fue ampliamente activada por San Pablo, a quien se le llamó Apóstol de los Gentiles. En sus comienzos, la fe cristiana sólo contó con clases sociales humildes; pero muy pronto se fueron inte-grando prosélitos de todos los órganos de la sociedad. En los primeros siglos de la cristiandad existió una gran unidad entre los seguidores de esta religión; sin embargo, posteriormen-te surgieron divisiones, pudiendo señalar que, en la actualidad, el cristianismo aparece dividido en tres grandes grupos: católicos, protestantes y cismáticos, aunque todos si-guen y tienen a Cristo como centro de sus creencias. He aquí las principales religiones cristianas: CATOLICISMO: Congregación de fieles que tiene como cabeza invisible a Nuestro Señor Jesucristo y como cabeza visible al Vicario de Cristo en la tierra, Su Santidad el Papa, Obispo de Roma y asiento principal de la religión Católica. Según el dogma de la iglesia Católica, sus feligreses deben seguir y creer a todo cuanto ésta ordenó creer, por medio del Papa, a quien se le considera infalible, o sea que no se equivoca, pero solamente cuando habla como pastor universal, "ex cathedra", sobre asuntos referentes a la fe y a las buena costumbres. Las verdades del catolicismo están contenidas en la Revelación, las Sagradas Escrituras y la Tradición, las que se consideran como sus tres fuentes principales. Aunque más del 90% de la población dominicana profesa el catolicismo, nuestra Constitución, dentro de los derechos duales y sociales, consagra la libertad de conciencia y de cultos, razón por la cual los dominicanos pueden seguir cualquier credo o creencia existente o no, dentro del territorio nacional. Otras creencias, algunas de las cuales han sido desprendimiento del catolicismo, son las siguientes: LUTERANISMO: Doctrina fundamento en las enseñanzas de Martín Lutero, en la que el Evangelio se convierte en la única norma de conducta y se niega la autoridad del Papa. Actualmente cuenta con uno setenta millones de seguidores, y está considerada como la comunidad protestante grande del mundo. ANGLICANISMO: Esta creencia predomina en Inglaterra y otros países de influencia británica, y se originó en las famosas disputas político−religiosas entre Enrique VIII y el Papado. Su principio fundamental es si su carácter nacional, la subordinación al rey, considerado como su supremo pontífice, radical desconocimiento de la autoridad Papa. Esta creencia tiene mucha similitud con la católica, en lo que respecta a la 1iturgia y orden jerárquico, cuya tradición mantienen a no ser que se encuentre en ella una Clara oposición a la palabra 2 de Dios. En los últimos años se ha venido hablando de un estrecho acercamiento entre el catolicismo y anglicanismo. ADVENTISTA: Es una secta americana fundada por el norteamericano William Mi-ller en 1831. Espera un segundo y próximo advenimiento de Cristo. Esta secta alcanzó muchos seguidores que a su vez sé dividie-ron en otras sectas, la más importante de las cuales es la de los Adventistas del Séptimo Día. CALVINISMO: Creencia fundada por Calvino. Constituye una de las formas más importantes del protestantismo. Desconoce la autoridad del Papa y de los obispos y preconiza el celibato de los sacerdotes. Según Calvino la única regla de la fe son las Escrituras. Además de las creencias señaladas, hay otras que forman parte del protestantismo. Entre ellas figuran: presbiterianos, pente-costales, bautistas, episcopalianos, testigos de Jehová, etc. Actualmente el número de creyentes protestantes alcanza a los 230 millones entre las diversas comunidades. 3 4