UNIVERSIDAD DE COLIMA FACULTAD DE CIENCIAS MARINAS PRODUCCION DE QUISTES DE Artemia franciscana (Kellog, 1906) BAJO CONDICIONES CONTROLADAS Y DETERMINACION DE SU CALIDAD CON FINES ACUICOLAS TESIS PARA OBTENER EL GRADO DE MAESTRIA EN ACUACULTURA PRESENTA BIOL. JOB DE LA CRUZ VELOZ ASESOR DE TESIS DR. ALEJANDRO OTTO MEYER WILLERER CAMPUS EL NARANJO MANZANILLO, COLIMA, NOVIEMBRE DE 1999 Facultad de Ciencias Marinas M. en C. Sergio Alberto Lau Cham Director de la Facultad de Ciencias Marinas Presente. Los que suscriben, Sinodales de la Comisión nombrada para examinar el manuscrito de Tesis titulado: “Producción de quistes de Artemia franciscana (Kellog, 1906), bajo condiciones controladas y determinación de su calidad con fines acuícolas”. que presenta el candidato al Grado Académico de Maestro en Acuacultura, el C. JOB DE LA CRUZ VELOZ Manifiestan su aceptación a dicho trabajo en virtud de que satisface los requisitos señalados por las disposiciones reglamentarias y que se han hecho las correcciones que cada uno en particular consideró pertinentes. Atentamente Asesor de tesis Sinodal Propietario Dr Alejandro Otto Meyer Willerer M. C. Donaciano Pérez Castro Sinodal Propietario Sinodal suplente ---T-’ M. C. Sonia Quijano Scheggia Dr. Marco Antonio Galicia Pérez Kilometro 20 / Carretera Manzanillo-Barra de Navidad / A.P. 9-21 / Telefax 01 (333) 5 OO 01 / Colima, México / E-mail: facimar@volcan.ucol mx A mi asesor el gr. Alejandra Otto Meyer Willerer que con su paciencia y profesionalismo guió mi trabajo. Al Ing. Efrén García Hernández, Director del Cet Mar No. 12. Manzanillo Col. quien me brindó su apoyo incondicional para poder efuctuur mis estudios de maestria en acuacultura y el desarrollo de la presente tesis. Al comité turorlal M.C. Donaciano Pérez Castro, M.C. Sonia Quijano Scheggia y Dr. Marco Antonio Galicia Pérez por sus acertadas correcciones y sugerencias. Al Director da la Facultad de Gíencias Marinas, M.C. Sergio Alberto Lau Gham Al Director del CEUNIVO de la Universidad de Colima Dr. Juan Gaviño Rodríguez. Al Dr. Manual Garcia Ulloa Gómez por sus sugerencias y comentarios. A la M.C. María Cruz Rivera Rodríguez por su ayuda incondicional en la trabaja. parte estadística del presente A todos mg gracias. A DIOS: Por permitirme llegar a alcanzar un peldaño más, y que me ayude a seguir adelante. A MIS PADRES: Por su infinito amor, confianza y apoyo, que en muchas ocasiones les ha provocado grandes sacrificios y esfuerzos, pero sin embargo, siguen creyendo en mí. A MI ESPOSA: Por su valiosa ayuda y su gran apoyo y comprensión. A MIS HIJOS: Karla Areli y Job Alan por su comprensión. A MIS HERMANOS Y AMIGOS: Gracias por su apoyo y amistad. El presente trabajo fue apoyado económicamente con el proyecto clave 96-01-017 perteneciente al CONACYT SIMORELOS “Vinculación de las instituciones para la producción y el aprovechamiento integral de los recursos alimenticios de la costa occidente del pacífico” bajo la dirección del Dr. Alejandro 0. Meyer Willerer, además del apoyo técnico del Centro de Investigaciones Oceanológícas de la Universidad de Colima (CEUNIVO). Parte del presente trabajo fue presentado en Nacional de Ciencia y Tecnología del Mar, que se Sinaloa, el 17 de noviembre de 1999 cuyo título quistes de Artemia franciscana variando salinidad el Sexto Congreso celebró en Mazatlán, fue: “Producción de y temperatura”. RESUMEN De In Cruz Veloz, J. 1999. Producción de quistes de Artemia franciscana (Kellog, 1906) bajo condiciones controladas y determinación de su calidad con fines acuícolas. Tesis para obtener el grado de Maestro en Ciencias con especialidad en Acuacultura. Facultad de Ciencias Marinas, Universidad de Colima. 59 pp. El cultivo de ciertas especies acuícolas utilizan quistes de Artemia. La producción de quistes de A. franciscana, se efectuó en matraces con adultos incrementando la salinidad en un sistema bifactorial (6x6) 80 a 160 g/L de salinidad y de 20 a 30°C por triplicado. Los quistes se cosechaban por flotación. Los mejores ensayos resultaron a 14Og/L de salinidad y temperaturas bajas, donde la producción de nauplios fue mínima. La producción máxima se obtuvo a 20°C con 130 quistes y menos de cinco nauplios por hembra. Los quistes más grandes resultaron a 20°C y salinidad de 16Og/L, midiendo en promedio 242.4µm. A temperatura mayor de 20°C, el diámetro del quiste decreció con el incremento en la salinidad. La producción de quistes de Artemia franciscana, es mayor a salinidad de 14O±lOg/L y temperatura de 22±2°C, ya que la producción o eclosión de nauplios es menor bajo estas condiciones. ABSTRACT De la Cruz Veloz, J. 1999. Cyst production of Artemia franciscana (Kellog, 1906) under controlled conditions and the determination of their quality for aquacultural purposes. Thesis for Master in Science degree in Aquaculture. Facultad de Ciencias Marinas, Universidad de Colima. 59 pp. The development of certain aquacultural species employ Artemia cysts. A. franciscana cyst production was developed in flasks with adults increasing salinity in a bifactorial system (6x6) 80 to 16Og/L of salinity and 20 to 30°C by triplicate. The cysts were harvested by flotation. The best assays resulted at 140 g/L salinity and low temperature, where nauplii production was minimum. Maximum production was enhanced at 20°C with 130 cysts and less than five nauplii per female The biggest cysts were obtained at 20°C and a salinity of 16Og/L, measuring in average 242.4µm. At higher temperatures as 20°C the cyst diameter decreased, when salinity increased. At 28 or 30°C and salinity higher than 140 g/L, no cysts were harvested. Artemiafranciscana cyst production is greatest, when salinity is 140±l0g/L temperature is 22±2°C, and the since production or hatching of nauplii is least under these conditions. INDICE 1. lNTRODUCCION . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ...................................................................................... . 1 11. ANTECEDENTES ............................................................................................................................ 5 2.1. PRODUCCJON DE QUISTES.. .................................................................................................... 2.2. JUSTIFICACION .......................................................................................................................... 2.3 HIPOTESIS.. ................................................................................................................................ III. OBJETIVO GENERAL .................................................................................................................. 5 8 10 ll 3.1. OBJETIVOS ESPECIFICOS ....................................................................................................... ll IV. MATERIAL Y METODOS ........................................................................................................... 12 4.1. MATERIAL UTILIZADO ......... ....................................................... ............................................... 4.2. MÉTODOS.. ................................................................................................................................... 4.2.1. Descapsulado ........................................................................................................................ 4.2.2. Condiciones generales para la incubación de los quistes ......................................................... 4.2.3. Crecimiento de los nauplios ................................................................................................... 4.2.4. Enquistamiento ...................................................................................................................... 4.2.5. Producción masiva de quistes de A. franciscana en condiciones controladas .......................... 4.2.6. Almacenamiento de quistes .................................................................................................... 4.2.7. Evaluación de la calidad de quistes obtenidos a temperaturas y salinidades diferentes ........... 4.2.X. Evaluación bromatológica de los nauplios obtenidos.. ........................................................... V. RESULTADOS ................................................................................................................................ 5.1 DESCAPSULADO. ........................................................................................................................... 5.2 CONDICIONES GENERALES PARA EL DESCAPSULADO Y LA INCUBACIÓN DE Q UISTES .......................... 5.3 CRECIMIENTO DE NAUPLIOS A ADULTOS ......................................................................................... 5.4 PRODUCCIÓN DE QUISTES. ............................................................................................................. 5.5. PRODUCCIÓN MASIVA DE QUISTES BAJO CONDICIONES ÓPTIMAS Y ALMACENAMIENTO.. ................... 5.6 EVALUACIÓN DE LA CALIDAD DE QUISTES ..................................................................................... 5.6.1 Porcentaje de eclosión de quistes ............................................................................................ 5.6.2 Medición de adultos por sexo ................................................................................................ 5.6.3 Determinación del diámetro de los quistes hidratados.. .................... . ...................................... 5.7 PRODUCCIÓN DE ADULTOS A PARTIR DE QUISTES PARAOBTENER BIOMASA ....................................... 5.8 PERFIL DE Á CIDOS GRASOS A P ARTIR DE BIOMASA OBTENIDA DE ADULTOS ...................................... VI. DISCUSION ................................................................................................................................... 6.1 DESCAPSULADO .......................................................................................................................... 6.2 CONDICIONES G ENERALES PARA EL DESCAPSULADO E INCUBACIÓN DE LOS QUISISTES ......................... 6.3 CRECIMIENTO DE NAUPLIOS A ADULTOS ......................................................................................... ................................................. 6.4 PRODUCCIÓN DE QUISISTES ........................................................... 6.5 PRODUC C I Ó N MASIVA DE QIJISTES BA.10 CONDICIONES ÓPTIMAS Y ALMACENAMIENTO.. .................... 6.6 EVALUACIÓN DE L A CALIDAD DE QUISTES ....................................................................................... 6.6. I Porcentaje de eclosión de quistes ............................................................................................ 66.2 Medición de adultos por sexo ................................................................................................. 6.6.3 Determinación del diámetro de los quistes hidratados ............................................................. 6.7 PRODUCCIÓN DE ADULTOS A PARTIR DE QUISTES PARA OBTENER BIOMASA ...................................... 6.8 PERFIL DE ÁCIDOS GRASOS A PARTIR DE BIOMASA.. ......................................................................... 12 12 12 13 14 15 16 17 18 19 21 21 2 1 21 21 25 25 25 30 30 30 36 38 38 39 40 40 43 43 43 44 45 46 47 VII. CONCLUSIONES ........................................................................................................................ 51 . VIII. BIBLIOGRAFÍA CITADA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .5 3 INDICE DE TABLAS Tabla 1. Biomasa de diferentes lotes de Artemia y Chaetoceros calcitrans húmeda y seca cosechados (para su análisis del perfil de ácidos grasos). . . . . . . . . . . . . ..30 Tabla 2. Porcentaje de la fracción total de ácidos grasos determinada en biomasa de Artemia adulta a partir de quistes producidos en el laboratorio. También se comparan con los ácidos grasos del alimento dado, que fue Chaetoceros calcitrans.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ...36 . Tabla 3. Contenido de ácidos grasos saturados (Cl4:0, C16:O y C18:0), mono-insaturados (C16: l), C18: 1) y poli-insaturados (C18:2, C: 18:3, C20:3 y C22:6) de adultos de Artemia franciscana y Chaetoceros calcitrans expresados en g de ácidos grasos/100 g de muestra . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3 7 111 INDICE DE FIGURAS Fig. 1. Producción diaria de quistes y nauplios por hembra obtenidos a diferente temperatura en una salmuera con 80g/L de salinidad. 23 (A) quistes. (B) nauplios. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .......................... .... Fig. 2. Producción diaria de quistes y nauplios por hembra obtenidos a diferente temperatura en una salmuera con 12Og/L de salinidad. 24 (A) quistes. (B) nauplios . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ...’ Fig. 3. Producción diaria de quistes y nauplios por hembra obtenidos a diferente temperatura en una salmuera con 13Og/L de salinidad. 26 (A) quistes. (B) nauplios . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Fig. 4. Producción diaria de quistes y nauplios por hembra obtenidos a diferente temperatura en una salmuera con l4Og/L de salinidad. . ........... 2 7 (A) quistes. (B) nauplios. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Fig. 5. Producción diaria de quistes y nauplios por hembra obtenidos a diferente temperatura en una salmuera con 15Og/L de salinidad. ............ 2 8 (A) quistes. (B) nauplios . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Fig. 6. Producción diaria de quistes y nauplios por hembra obtenidos a diferente temperatura en una salmuera con 16Og/L de salinidad. 29 (A) quistes. (B) nauplios . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Fig. 7. Porcentaje relativo de eclosión de nauplios vivos emergidos a 24 y 48 horas a partir de quistes obtenidos de Artemiafranciscana cultivados a 24°C y 100g/L de salinidad. El tiempo de almacenamiento de los quistes desde que fueron colectados hasta su eclosión, fue durante 1 a 4 semanas a temperatura de 4, 14 ó 24°C y a presión del medio ambiente ó aplicando presión reducida. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3 1 Fig. 8. Talla de Artemiafranciscana adulta obtenida de nauplios vivos emergidos de quistes producidos. Las condiciones de almacenamiento de los quistes desde que fueron colectados hasta su eclosión, fue durante 1 a 4 semanas a temperatura de 4, 14 ó 24°C y a presión del medio ambiente ó aplicando presión reducida. (M = machos. H = hembras) . . . . . . . . . . . . . . . . . 32 Fig. 9. Diámetro de quistes obtenidos (promedio ± error estándar) a una temperatura de 20 ± 0. 1°C y a diferente salinidad y tiempo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 33 Fig. 10. Diámetro de quistes obtenidos (promedio ± error estándar) a una 33 temperatura de 22 ± 0. 1°C y a diferente salinidad y tiempo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Fig. ll. Diámetro de quistes obtenidos (promedio ± error estándar) a una temperatura de 24 ±0.1°C y a diferente salinidad y tiempo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .......... . 3 4 Fig. 12. Diámetro de quistes obtenidos (promedio ± error estándar) a una temperatura de 26 ± 0. 1°C y a diferente salinidad y tiempo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3 4 Fig. 13. Diámetro de quistes obtenidos (promedio ± error estándar) a una temperatura de 28 ±0. l°C y a diferente salinidad y tiempo.. . . . . .................... . . . . . . . 35 Fig. 14. Diámetro de quistes obtenidos (promedio ± error estándar) a una temperatura de 30 ±0.1°C y a diferente salinidad y tiempo.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3 5 1 1. INTRODUCCION La población natural de Artemia se distribuye sobre los cinco continentes en variedades de biotopos aislados, tales como lagos interiores de sal, albúferas y lagunacosteras y especialmente salinas costeras asociadas con la producción comercial de sal. Una lista de sitios donde se da la Artemia en forma natural fue compilada por Vanhaecke et al. (1987) la cual se extiende a más de 350 lugares. El mayor número de poblaciones de Artemia registradas en el mundo se encuentra en aguas en cuya composición química predomina el cloruro de sodio; el menor número de poblaciones se localiza en aguas con otra composición química (Sorgeloos et al., 1986). El pequeño crustáceo conocido como Artemia es una fuente de proteína y lípidos que se utiliza frecuentemente en la alimentación de especies cultivables en la acuacultura; la utilización de su estadío naupliar es necesario en la larvicultura de especies con alto valor comercial, como son los camarones peneidos. En la actualidad, la acuacultura mundial y específicamente la larvicultura, requiere de nauplios de Artemia que constituyen un alimento básico, que se usa en las primeras etapas de vida de las larvas en cultivo; esto ha provocado que el consumo de quistes se encuentre por arriba de las 1700 toneladas al año a nivel mundial (Sorgeloos et al., 1991). Una vez dominada la técnica de producción de quistes de Artemia, la actividad acuícola nacional dispondrá de dicho recurso en cualquier tiempo y época del año, pues los huevos enquistados son altamente resistentes al manejo y a las condiciones adversas, y mediante su incubación darán origen a nauplios en un lapso de 24 horas. Si el acuacultor necesita nauplios de Artemia en menor tiempo, se pueden utilizar técnicas de descapsulación con hipoclorito de sodio que producen nauplios casi libres de bacterias en menor tiempo que cuando se utiliza sin descapsular (Sorgeloos et al., 1986). Esta técnica permite tener nauplios vivos en casos imprevistos o de emergencia. El nauplio de Artemia es el alimento más utilizado a nivel mundial en los cultivos de especies acuícolas 2 comerciales, principalmente en sus fases tempranas. En su fase adulta, se ha preferido como alimento complementario en la maduración y reproducción de camarones peneidos (Ortiz el al., 199 1). Últimamente, se ha utilizado Artemia en sus diferentes fases de crecimiento como un biotrasportador y enriquecedor de ácidos grasos poliinsaturados esenciales y de otras substancias como las vitaminas. Esto se hace con el objeto de proporcionarle a las larvas de peneidos o alevines de pez un paquete de estos ácidos grasos o vitaminas que garantizan un menor tiempo de crecimiento y mayor porcentaje de sobrevivencia (Dhont et al., 1993). El uso de Artemia para el cultivo de especies comerciales ha dado buenos resultados, como es el caso de Japón con el cultivo del camarón Penaeus japonicus y con los peces Pagrus major, Achanthopagrus schlegeli y Seriola quinqueradiata (Watanabe, 1987). La calidad nutritiva .y el tamaño de los nauplios varía entre lotes y cepas de Artemia, mientras que los adultos y juveniles que se suministran para el desarrollo de etapas más avanzadas, presentan nuevas variaciones en su contenido y mayor cantidad de proteínas con aminoácidos esenciales (Sorgeloos et al., 1986). La Artemio adulta se consume viva, congelada y seca, aunque se ha demostrado que los mejores resultados se consiguen con Artemia s p . viva, porque no descompone el agua (Conklin el al., 1978). El desarrollo del cultivo de camarones peneidos en América Latina depende en gran parte de la importación masiva de quistes de Artemia provenientes en su mayoría de las compañías productoras que se encuentran en los Estados Unidos de Norteamérica. Para evitar esta dependencia deben efectuarse estudios prospectivos que identifiquen poblaciones naturales de Artemia ó lugares propicios ‘para su cultivo, además de investigaciones para determinar las condiciones favorables de su ciclo biológico para lograr el enquistamiento de sus huevos (Alvarez y Sánchez, 1994). En la acuicultura, uno de los mayores problemas, es la obtención y la sobrevivencia de los primeros estadíos de vida de las especies de peces marinos y 3 crustáceos de alto valor comercial. Después de dominar las técnicas de reproducción, el siguiente reto en la acuicuitura es el desarrollo óptimo de los organismos en las primeras fases de su vida para que puedan llegar a la fase crítica de la metamorfosis y pasar a la etapa de engorda para alcanzar las tallas comerciales (Amat, 1985). Se sabe que una gran cantidad de larvas rechazan el alimento que se les suministra en esta fase, debido principalmente a que el mayor número de alimentos no reúne las características necesarias de acuerdo con los requerimientos nutricionales de la especie. Desde que Seale (1933), Gross (1937) y Rollefsen (1939) dieron a conocer la aceptación de los nauplios de Artemia sp. como alimento de diferentes organismos acuáticos, su empleo se ha generalizado rápidamente hasta el punto en que el 85% de los organismos marinos que se cultivan, se emplea Artemia como alimento único o complementario para éxito de sus cultivos (Amat, 1985, Amat e t a l 1992). Artemia tiene demanda por el tamaño que presenta en sus diferentes etapas de desarrollo (quiste, nauplios y adultos, Newmark, 1992). Los quistes pueden permanecer en estado de diapausa por largos períodos de tiempo, así se ha visto que algunos que han estado guardados durante diez años, aún son viables (Castro y Gallardo, 1985). Debido a las características de reproducción que presenta Artemia de enquistar los embriones bajo ciertas condiciones ambientales, es posible también comerciar con dichos quistes, ya que son fácilmente almacenados y transportados, pudiendo rehidratarlos bajo técnicas muy sencillas, con la consecuente eclosión de los nauplios. Actualmente en el mercado mundial una l a t a de quistes de Artemia de aproximadamente 1 libra de peso (454 g) tiene un costo aproximado de $70.00 Dlls. U.S. presentando una perspectiva potencialmente en aumento. interesante de explotación por el gran mercado 4 Lo anterior habla de por sí de la importancia de Artemia de su biología, de su cultivo, de su explotación y finalmente su comercialización principalmente en su fase de vida latente (quiste) por su fácil manejo, almacenamiento y transporte (Sorgeloos, 1986). Artemia se encuentra en un lugar de gran relevancia en la producción acuícola del país y de la región. Su utilización ha sido satisfactoria en el cultivo de camarones peneidos donde ha influido básicamente en sus fases tempranas de desarrollo. En consecuencia éste trabajo tiene como propósito fundamental, contribuir a un estudio sobre la producción de quistes de Arlemia.franciscana y la producción de quistes en salineras y laboratorios destinadas a la producción de peces y crustáceos de interés comercial. 5 II. ANTECEDENTES 2.1. PRODUCCION DE QUISTES En el ciclo biológico de Artemia se conocen dos alternativas reproductivas que implican diferencias marcadas en el tiempo de desarrollo. En una alternativa, el ciclo es continuo desde la fecundación del huevo hasta la forma adulta; mientras que en la otra alternativa, el ciclo se divide en dos fases, la fase de preemergencia y la fase de emergencia. La primera fase abarca desde el estado de blástula avanzada o gástrula incipiente hasta la ruptura del corión e inicio de la salida del nauplio (prenauplio). La segunda fase cubre el proceso de salida del nauplio envuelto en la membrana cuticular, la que aún permanece unida al corión roto, hasta la liberación completa del nauplio propiamente dicho, conocido como estado larval II y a partir de éste se habla de metanauplios juveniles, los que finalmente alcanzan el estadío de adulto (Castro y de Lara, 1991). Artemia se reproduce por partenogénesis y en forma sexual (Sorgeloos, 1989). Algunos autores relacionan la partenogénesis con la formarción de quistes, como se ha visto en algunos rotíferos y cladóceros, pero en el caso de Artemia no hay ninguna relación entre la partenogénesis y la formación de quistes (Lavens y Sorgeloos 1984). Tanto las cepas bisexuales como las partenogenéticas se pueden reproducir vivípara y ovovivíparamente (Versichele y Sorgeloos 1980). En las hembras partenogenéticas, la formación de los óvulos se inicia con los oocitos, se transforman en óvulos y pasan a los oviductos laterales en los cuales permanecen un día, y después pasan al útero donde continúan su desarrollo hasta gástrula, o bien alcanzan el estado de nauplio y son liberados por la hembra (Dutrieu, 1960; Fautrez y Fautrez, 1971). Para las cepas de reproducción vivípara, se han observado hembras que expulsan 300 nauplios cada 5 días durante su ciclo biológico, la cual puede prolongarse hasta 12 . meses, y en la variedad partenogenética, algunas veces se producen machos en una tasa tan baja de sólo 0.00 1% (Lavens y Sorgeloos, 1984). 6 En la reproducción ovovivípara la glándula de la cáscara o glándula de Brown desarrolla una gran actividad. Dicha glándula secreta la sustancia que forma el cascarón de los quistes antes de ser liberados por la hembra (Clegg y Conte, 1980). Los factores que inducen esta activación de la glándula de la cáscara y la consiguiente aparición del corión alrededor de los embriones gastrulados son: 1. El aumento de la salinidad. 2. La variación en la temperatura. 3. La disminución en la concentración de oxígeno disuelto. 4. la falta en el tipo y abundancia de alimento. 5. El continuo “stress” debido a bajas concentraciones de oxígeno disuelto 6. La presencia de iones Fe++ en el medio inducen a una acentuada producción de huevos císticos (Dutrieu, 1960). Para producir biomasa y quistes en cultivo, es necesario manejar diferentes concentraciones de salinidad desde 40 g/L hasta 90 g/L para nauplios; a partir de 130 g/L se empiezan a producir los quistes (Castro, 1993). En varias ocasiones Lavens y Sorgeloos (1984) observaron en hábitats tropicales, que poblaciones introducidas recientemente exhibieron inicialmente un alto rango de reproducción ovíparo. Siguió sin embargo, una disminución drástica en la producción del quiste en el momento en que la población se estableció totalmente al adaptarse a un nuevo ambiente o biotopo estabilizado completamente. Esto sucedió en Brasil, Tailandia y Vietnam. Este fenómeno se observó recientemente por segunda vez en Macao, Brasil. La reaparición de la producción del quiste a finales de 1987 y principios de 1988 fue asociado con la transformación de las granjas camaroneras locales a salinas en las que se evaporaba el agua en los estanques para la producción de sal, presentando un nuevo biotopo para Artemia. Berthélemy-Okazaki y Hedgecock (1987), presumieron que esta disminución drástica citada anteriormente en la producción del quiste es debido principalmente a u n a renovación de los genotipos hacia una predisposición de 7 poblaciones ovíparas. Desde el punto de vista comercial es importante conocer la calidad de los quistes, pues de ésta depende el rendimiento de una marca comercial. En virtud de que no existe un precio uniforme, ni sistemas “estándar” para garantizar sus características cualitativas específicas de las diferentes marcas comerciales de quistes, la calidad del producto obtenido depende grandemente de la capacidad de negociación del comprador que ajuste su presupuesto a la compra de una mayor cantidad de quistes de regulares condiciones, para obtener un mayor rendimiento de acuerdo a sus necesidades. Aparte de sus aspectos comerciales como son precio y fletes, los siguientes criterios pueden ser utilizados para la selección de un producto específico de quistes como: La biomasa obtenida, eficiencia de eclosión, porcentaje eclosión y rango de eclosión, valor alimenticio y tamaño del nauplio eclosionado y condición de los quistes envasados (Sorgeloos et al., 1983). De acuerdo a Colin .( 1973), la reproducción ovovivípara se produce cuando las condiciones del medio son favorables. Amat (1985) sugiere, que la acción continua de “stress” debido a concentraciones variables de oxígeno y la acción de iones de Fe” presentes en le medio, parecen inducir una acentuada producción de huevos císticos. Así mismo, Sorgeloos (1975) destaca, que el tipo de reproducción está estrictamente ligada a la concentración de oxígeno. El obtuvo nauplios de una cepa del estado de Utah, cuando la concentración de oxígeno fue mayor de 4mg/L. y quistes cuando bajó la concentración a menos de 2 mg/L. Evidentemente, al aumentar la salinidad del medio se redujo la concentración de oxígeno, lo que indujo a una alta producción de hemoglobina, la que a su vez produjo un derivado Ilamado hematina, que fue entonces excretada por la glándula de la cáscara e incorporada en la corión de los quistes (estado de gástrula), dando así la reproducción ovípara. Amat (1985) encontró que bajo salinidades entre el 40 y 1 OO% (g/L) y oxígeno a saturación, el factor desencadenante del oviparismo fue invariablemente la hipoalimentación. Asimismo, Roman y Rodríguez (1986) aseveraron, que la producción de quistes en las salineras existió cuando la relación clorofila a y la densidad de Artemia 8 descendió, lo cual los indujo a concluir, que el principal factor que incidió sobre la aparición de quistes fue la falta de alimento. D’Agostino y Provasoli (1968) también indicaron que la oviparidad fue inducida por la cantidad y/o la calidad del alimento. 2.2. JUSTIFICAClON En los últimos años, el número de empresas de acuacultura marina con diferentes tamaños y objetivos, ha aumentado en la zona costera a nivel mundial. Como organizaciones comerciales, la mayoría normalmente requiere de un suministro de cantidades variables de quistes de Artemia para cumplir sus necesidades de alimentación de larva. Las características especiales del nauplio de Arlemia, principalmente su aceptabilidad por parte de casi todas las especies marinas y su valor nutritivo, aseguran buenos resultados en esta área. Entre las razones propuestas para explicar su conveniencia, se puede mencionar su composición bioquímica, asociada a su atracción organoléptica, su cutícula delgada y su movilidad. Estas características mencionadas pueden encontrarse en otros organismos marinos, pero hay una propiedad especial en este crustáceo que no puede reemplazarse tan fácilmente, fundamentalmente su capacidad de sobrevivir en condiciones ambientales extremas usualmente en ecosistemas hipersalinos. Artemia puede vivir en extremas variaciones de salinidad y temperatura y se protege a sí misma produciendo quistes cuando las condiciones ambientales son extremadamente adversas. Esta característica singular permite el manejo de un producto aparentemente inerte, un quiste en vida latente siempre y cuando, los quistes sean mantenidos alejados de la humedad, oxígeno y luz, el cual puede ser convenientemente transformado en dieta viva, pequeña y de alta calidad. El comprador de quistes no sólo busca un cierto nivel de eclosión adecuada, disponibilidad o mejor precio, sino también la seguridad en los requisitos nutritivos de la larva. Las cualidades heterogéneas presentadas por los quistes de Artemia l ofrecidos en el mercado hacen muy necesario, si no esencial, desarrollar un control de calidad de sus principales aspectos antes de ser usados como alimento en el cultivo de especies marinas. 9 Por lo antes mencionado, la presente propuesta de trabajo de investigación ha tomado en consideración que existen salinas en la ribera de la Laguna de Cuyutlán, que con 18 1 socios produjeron cada uno 77 toneladas de sal en promedio en 1996 y que con 201 socias produjeron 82 toneladas en promedio en 1997 (Sociedad Cooperativa Salineros de Colima, comunicación personal) y éstas se pueden aprovechar simultánea o paralelamente para un cultivo de Artemia con el objeto de producir quistes de calidad. Este trabajo de laboratorio puede contribuir con conocimientos básicos para poder adaptar este cultivo a los sistemas de salinas del Estado de Colima. Se desconoce si en México se producen quistes a gran escala, a excepción de la producción semi-intensiva en Yávaros, Sonora, México. La utilización de nauplios de Artemia como alimentos de larvas de especies marinas sigue siendo una práctica habitual en todas las instalaciones dedicadas a la acuicultura, a pesar de su alto costo y los múltiples problemas que ello implica. Su sustitución por alimentos inertes no parece posible a corto plazo, puesto que las alternativas hasta el momento ensayadas, no producen rendimientos equiparables al alimento vivo (Beck y Bengtson 1979; Sandifer y Williams 1980). La situación de cuello de botella para la acuicultura mundial que podría producir la escasez de quistes de Artemia, y que empezó a vislumbrarse a mitad de la década de los setenta (Sorgeloos 1976) no solo no ha encontrado solución, sino que se ha agravado notablemente, dado al constante aumento de la demanda y el descenso en la disponibilidad de las mentes tradicionales de quistes de Artemia (Brasil, Salinas de San Francisco, California, USA). De este modo, el único suministro regular y en cantidad suficiente lo ofrecen los quistes procedentes del Great Salt Lake (Utah, USA). Ante tales circunstancias, se ha desarrollado una intensa actividad de localización y estudio de nuevas poblaciones de Artemia sp. en todo el mundo (Sorgeloos et al., 1986) con la finalidad de constatar su potencial de explotación y uso como fuentes de quistes y biomasa aplicables a la 10 acuicultura de la zona donde se encuentren y, en su caso, contribuir al abastecimiento a nivel nacional ó a la exportación (Navarro 1990). Las salinas además de producir cloruro de sodio, albergan una biota planctónica; en estos ambientes abundan las algas cianofitas o verde azules, las bacterias halofiticas del género Halohacterium y el crustáceo Artemia sp. (Davis, 1980). La comunidad de la salina constituye un sistema biológico que favorece la producción y la calidad de la sal, Anemia sp. participa en este proceso, degradando la materia orgánica y junto con Halohacterium, contribuye a la evaporación. En varios países, sobre todo en los asiáticos, se produce simultáneamente sal y Artemia sp. A este respecto es digno de mencionar los cultivos en Tailandia (Tarnchalanukit y Wongrat, 1987), en donde se da preferencia a la producción de biomasa y de quistes de Artemia debido a que las ganancias son mayores y su cosecha es más fácil. En Filipinas existen sistemas de producción integrados a las salinas que producen sal, Artemia .sp., camarones peneidos y peces (Jumalon et al., 1987). En los países mencionados se han hecho adaptaciones con poca inversión para el propósito señalado. Estos diferentes tipos de cultivos propuestos podrían implementarse en las salinas de México. Del cultivo de Artemia en las salinas podrían obtenerse ingresos adicionales y proporcionar fuentes de empleo durante casi todo el año. 2.3 HIPO TESIS La hipótesis alterna (Ha) establece que la producción de quistes a partir de adultos de Artemia franciscana varía cuando cambia la salinidad del medio acuoso entre 80 y 160 g/L y la temperatura entre 20 y 30°C. La hipótesis nula (Ho) plantea que no existen diferencias en la producción de quistes al variar salinidad del medio acuoso y la temperatura. l 11 III. OBJETIVO GENERAL Producir quistes de Artemia franciscana bajo condiciones controladas y determinar su calidad para fines acuaculturales. 3.1. OBJETIVOS ESPECIFICOS l Determinar las condiciones de temperatura y salinidad para la producción de quistes de A.. franciscana. l Determinar el porcentaje de eclosión de los quistes de A. franciscana almacenados bajo diferentes condiciones. l Evaluar la calidad de quistes obtenidos de A. franciscana considerando el tamaño de quistes, biomasa obtenida y eficiencia de eclosión. l Determinar la calidad alimenticia del adulto a partir de quistes obtenidos de A. franciscana para su utilización en la Acuacultura. 12 IV. MATERIAL Y METODOS 4.1. Material Utilizado Para la determinación de la salinidad se utilizó un refractómetro de campo marca Atago S/MilI-E (0-100%) (% equivalentes a g/L) y un densímetro (1.00 - 1.50 grados Baumè ± 0.01). En relación a la concentración de oxígeno disuelto se empleó un oxímetro de campo marca YSI Incorporated Modelo 55/12 FT (O-19.99 mg/L ± 0.01 mg/L) que tiene un sensor de temperatura (0-50.0°C ± 0.l°C). El oxígeno se mantuvo cerca de la concentración de saturación. Se utilizó para control continuo un termómetro de inmersión de -5 a 50 °C (± 1°C). Para la iluminación del cultivo de algas se emplearon tubos de neón de 70 watts y lámparas fluorescentes de 20 watts para la eclosión de los quistes. Como descapsuladores se utilizaron conos de Imhoff de 1 litro de capacidad. Para la prueba masiva de producción de quistes se utilizaron tanques de fibra de vidrio de 60 L de capacidad. Para las pruebas de salinidad y temperatura se emplearon matraces de 500 mL. Los quistes que se utilizaron para el desarrollo del trabajo experimental fueron de A. franciscana y procedieron de su presentación comercial en forma de lata (Great Lake Artemia, Salt Lake City, South Arm, Utah, U. S. A). 4.2. Métodos 4.21. Dascapsulado El cultivo de A. franciscana Universitario de Investigaciones Universidad de Colima. . se realizó en las instalaciones del Centro Oceanológicas (CEUNIVO) dependiente de la 13 El descapsulado de A. f r a n c i s c a n a se realizó tomando en cuenta, la mortalidad, viabilidad, el manejo de los quistes y la buena esterilización del material (Castro, 1980). Para el tratamiento de los quistes con respecto a su descapsulado, se utilizaron conos Imhoff con una capacidad de 1 L utilizando agua marina filtrada y tratada con Na2-EDTA (Laboratorio Ciencias Marinas, FACENA, U.A. Guadalajara, Barra de Navidad, Jal.). La técnica del descapsulado que se utilizó fue la propuesta por Sorgeloos (1977) que consiste en que los quistes secos son hidratados en un contenedor de fondo cónico con agua marina y son mantenidos en suspensión con aireación desde el fondo del contenedor (Castro y Gallardo, 1983). 4.2.2.Condiciones generales para la incubación de los quistes Una vez que los quistes fueron lavados con agua dulce o marina, se pasaron al eclosionador donde se incubaron en agua de mar bajo las siguientes condiciones: l l La temperatura del agua permaneció entre los 24 y 30”. La cantidad de quistes no fue superior de 3 g por litro (Great Lake Artemia, Salt Lake City, Utah, U.S.A). l El rango óptimo de salinidad fue de 25 a 30 g/L. l El pH se mantuvo en 8.5 ± 0.1; si este valor bajaba, se añadió una solución de carbonato de sodio (Na2 CO3) a concentraciones de 2 g por litro. l La iluminación de los quistes es esencial durante las primeras horas de la hidratación para alcanzar resultados óptimos de eclosión (Sorgeloos, 1973). Por lo tanto una iluminación continua con intensidad de 1000 lux aseguró resultados óptimos. Esto se logró con tubos de luz fluorescente de 40 watts, colocándolos a 20 cm de los recipientes de eclosión. El oxígeno se mantuvo cercano a la concentración de saturación (6 mg/L). El burbujeo además ayudó a mantener los quistes en suspensión hasta su eclosión y obtención de los nauplios. La aireación se mantuvo constante con la ayuda de una turbina aireadora marca Sweetwater Aquatic Eco-Systems Inc., 1/3 Hp. El proceso de eclosión duró de 17 a 24 horas dependiendo de la cepa de quiste. 14 4.2.3. Crecimiento de los nauplios El cultivo continuo de Chaetoceros calcitrans de acuerdo al sistemas de cultivo de microalgas del CEUNIVO (Pérez Castro, 1995), fue desarrollado en garrafones con capacidad de 20 litros, donde se adicionaron 15 litros de medio enriquecido con la fórmula de Guillard (1973), con el medio de cultivo específico para microalgas (Microalgae Grow Florida, Aqua Farms Inc. Advanced Products For Avanced Aquarist). Se empleó agua marina a 35 mg/L, pH 8.0 (± 0. l), una temperatura continua de 25°C (± 0.l°C), una intensidad de luz de 4780 ± 1800 lux y con intervalos de 12 horas luz y 12 oscuridad, el agua marina fue esterilizada a 125°C, 1.05 kglcm2 durante 15 minutos. Los conteos de microalgas se realizaron de acuerdo a la técnica de Guillard (1973) usando una cámara de Neubauer de 0. lmm de profundidad, utilizando como fijador lugol al 0.25%. Las muestras fueron contadas diariamente, las lecturas fueron las determinaciones de cuatro cámaras de cada triplicado de las especies, durante el tiempo que duró este experimento. La muestra obtenida para los conteos de cada matraz fue de 0.5mL, de ésta se tomó una alícuota para llenar el hematocitómetro. Para los cálculos poblacionales se usaron las fórmulas de. a) cálculo de la población (D); b) tasa de crecimiento específico (µ); c) tasa de duplicación (T.D.); d) divisiones por día (K); e) producción diaria de microalgas (P.D.) y f) variación porcentual de la densidad (V.P.), todas estas fórmulas según De la Cruz y Alfonso (1985) Paniagua y Bückle (1984) en: Pérez Castro (1995). Para la eclosión de nauplios fue necesaria la iluminación para lograr una buena hidratación, por esta razón se le proporcionó una iluminación continua y una intensidad de 1000 lux. Esto se logró con tubos de luz fluorescentes de 20 watts de capacidad colocándolos a 0.20 m de distancia del cono eclosionador. 15 Los nauplios obtenidos como resultado de la incubación de los quistes A. franciscana se transfirieron a matraces erlermeyer de 500 mL. Esto se efectuó por triplicado alimentándolos diariamente con la microalga Chaeroceros calcitrans a una densidad mínima de 1x 106 células por mL. Este tipo de alimento se suministró hasta llegar a su fase juvenil, adulta y reproductiva iniciando ésta, cuando A. franciscana empieza a formar parejas de reproductores. Una vez que los organismos alcanzaron su estado adulto o lograron su apareamiento, se seleccionaron 30 parejas por matraz y por triplicado (180 organismos). 4.2.4. Enquistamiento A la población de reproductores introducidos en los matraces se les incrementó la salinidad preestablecida para inducirlos a que expulsen los quistes y desde ese momento se empezaron a contabilizar éstos para posteriormente cosecharlos cada tres días. Las variables dependen de las condiciones del medio como la salinidad, oxígeno, de la cantidad y calidad del alimento y de la edad de la hembra. Para poder determinar únicamente las variables del presente estudio (salinidad y temperatura), se procedió a mantener constantes las demás variables (oxígeno disuelto, cantidad de alimento, edad de los adultos). Para determinar la salinidad requerida para cada ensayo con 80, 120, 130, 140, 150, 160 g/L, se empleó agua marina a 35 g/L y para incrementarla se le agregó sal de grano de las salinas de Cuyutlán, Colima hasta ajustar la salinidad previamente establecida. Esta se verificó (80 g/L) con el refractómetro de campo y para los ensayos con la salinidad correspondiente de 120, 130, 140, 1.50 y 160 g/L, se utilizó un densimetro (1 .OO - 1.. 50 grados Baumè). Para mantener la temperatura fija en cada uno de los ensayos a 20, 22, 24, 26, 28 y 30°C (± 0.1 °C) utilizadas para la inducción de A. franciscana a la producción de huevos o huevos císticos, fue necesario utilizar una incubadora DB0 modelo SP 101 A digital. Todos los ensayos se efectuaron por triplicado. 16 La obtención de los quistes se realizó bajo un sistema de cultivo estático sin aireación a partir de 60 adultos. El ciclo reproductivo duró de 4 a 6 días desde el momento en que fueron adultos. Con esta misma frecuencia las hembras de A. franciscana efectuaron la expulsión de quistes, cuyo número total fue variable dependiendo de las condiciones que fueron la salinidad y la temperatura. Se incrementó la salinidad en cada matraz adicionando a la solución que contenía a los adultos con las microalgas, sal de grano de las Salinas de Colima, Cuyutlán hasta ajustar la salinidad correspondiente utilizando el densímetro. Se colectaron los quistes y nauplios utilizando una serie de mallas (28 y 230 µm de luz de malla) para filtrar los adultos y recogiendo los quistes. Estos se contaron bajo un microscopio estereoscópico marca Swift. Se registraron los valores en forma periódica cada tercer día hasta completar dos semanas. Para la obtención de mayores cantidades de quistes una vez desarrollados los ensayos en los recipientes de 500 mL, se realizaron los enquistamientos en tanques de fibra de vidrio cilíndricos con capacidad de 60 L. En estos tanques se manejaron los parámetros de temperatura y salinidad con los que se obtuvo mayor cantidad de quistes de A.franciscana de la serie de experimentos anteriores para determinar, si en volúmenes mayores, se obtenían en forma similar la cantidad de quistes. 4.2.5. Producción masiva de quistes de A. franciscana en condiciones controladas Para la producción de huevos císticos fue necesario someter a la población de reproductores provenientes del eclosionamiento de quistes de A. franciscana en cono Imhoff a temperatura de 24” C y salinidad de 80 g/L y alimentados con Chaetoceros calcitrans, producidas para este propósito. La alimentación de la población de los reproductores consistió en agregar en los estadíos naupliares 50 mL de cultivo, aumentando la cantidad de alimento 300, 500 y 1000 mL conforme a su crecimiento hasta llegar a su fase adulta y conformaran parejas para su reproducción. Para este fin se incrementó la salinidad gradualmente agregando sal 17 de grano de las salineras antes mencionada, hasta establecer la salinidad necesaria (100 g/L) en garrafones de vidrio de 2 L de capacidad con un volumen de cultivo de 1 L verificándose esta con el refractómetro manual utilizado en los experimentos anteriormente realizados. Después de haber establecido la saiinidad deseada y haberla verificado, se introdujo la población de reproductores de A. franciscana (garrafones de 2 litros) al interior de la incubadora con la temperatura previamente programada de 24°C ( ± 0. l°C). De esta forma las hembras empezaron a producir quistes y posteriormente se procedió a cosecharlos La cosecha o colecta se llevó a cabo cada dos días, desarrollando las siguientes actividades. Primeramente se separaron los reproductores del garrafón de cultivo. Para ello fue necesario utilizar una malla construida especialmente para este propósito (430 µm de luz). Después de haber separado la población de reproductores, se procedió a cosechar los quistes utilizando otra malla construida para este fin (28 µm de luz). Esta malla permitió filtrar el agua y colectarlos para que posteriormente almacenarlos en salmuera durante 30 días. 4.2.6. Almacenamiento de quistes El almacenamiento de los quistes A.franciscana se llevó a cabo utilizando tubos de ensaye de 25 mL de capacidad, dividiendo los quistes cosechados en cuatro lores y conservados previamente en salmuera y lavados con agua dulce para su almacenamiento. Este ensayo que se efectuó por triplicado, se midió la capacidad de almacenamiento de los quistes bajo diferentes condiciones. En el primer tratamiento se almacenaron al vacío, se procedió a introducirlos en un desecador sin sílica, que tuviera una válvula para poder efectuar el vacío con una bomba (Millipore, Inc.), manteniéndolos a 24°C ( ± 0.1 °C). En un segundo, tercer y cuarto tratamientos se mantuvieron los quistes a 4°C ( ± 0.1 °C), 14°C (± 0.1 °C), y 24°C (± 0.1 °C), respectivamente. Se determinó el porcentaje de eclosión una vez transcurrido el tiempo de almacenamiento que fue de una, dos, tres y cuatro semanas. El sistema de eclosión fue el mismo descrito arriba. Se procedió a evaluar la viabilidad de quistes determinando el tiempo necesario para que se cumpla un ciclo completo, desde 18 nauplio hasta adulto en reproducción y la aparición de nauplios nuevos. Las condiciones de cultivo de los nauplios fueron las mismas descritas anteriormente. Estos ensayos se efectuaron también por triplicado. Para poder determinar el porcentaje de eclosión de los quistes de A.. franciscana almacenados bajo diferentes condiciones, se efectuó la eclosión como se describe arriba y se contaron los nauplios vivos que se encontraron nadando en forma libre para poder relacionar con la cantidad de quistes que se utilizaron para la eclosión. Para esto se efectuaron análisis de varianza (Statgraphics 1993) para establecer si existieron diferencias estadísticamente significativas (p<0,05) entre naupiios y quistes a diferentes temperaturas y salinidad. Se procedió a evaluar la viabilidad de los quistes almacenados una vez transcurrido el tiempo necesario de almacenamiento hasta que se cumplió el ciclo completo desde nauplio, adulto y su fase reproductiva, hasta que aparecieron nauplios nuevamente. Para separar los quistes de los nauplios que eclosionaron, se procedió a elevar la salinidad hasta saturación, donde morían los nauplios y los quistes flotaban. Estos se recogían con una red y se enjuagaban con agua dulce secándolos sobre papel absorbente. 4.2.7. Evaluación de la calidad de quistes obtenidos a temperaturas y salinidades diferentes Para evaluar la calidad de quistes obtenidos de A.. franciscarza, se consideraron los trabajos efectuados en el Laboratorio de Acuacultura y Centro de Referencia de Artemia de la Universidad de Gante, Bélgica, que propone ciertas normas para evaluar la calidad de quistes. Entre estos se contemplan a) el peso y tamaño de los quistes obtenidos, b) porcentaje de eclosión, c) eficiencia de eclosión, d) biomasa obtenida, e) el rango de eclosión, f) peso seco y húmedo por nauplio. 19 Para evaluar los quistes de A. franciscana que se obtuvieron (24°C y 80 g/L de salinidad) y que se almacenaron a diferentes temperaturas (4°C ± 0.1 “C), 14°C ± 0.1 °C, y 24°C ± 0.1 °C) y condiciones, fue necesario su eclosionamiento. El proceso se realizó bajo una temperatura constante de 24°C aplicándose a todos los tubos que fueron almacenados a diferentes temperaturas, a presión reducida obtenida por medio de la succión de aire con ayuda de una jeringa con aguja hipodérmica y 24°C a diferentes períodos de tiempo en semanas (1,2,3 y 4). Se consideraron los siguientes parámetros para medir la calidad de los quistes producidos: tamaño y porcentaje de eclosión: a) El tamaño de los quistes se determinó bajo un microscopio óptico que tuvo una reglilla graduada y estandarizada en el ocular midiendo 30 quistes por ensayo. b) Para poder determinar el porcentaje de eclosión de los quistes de A.. franciscana, se efectuó la eclosión como se describe arriba de un número exacto de quistes y se contaron los nauplios vivos que se encontraron nadando en forma libre y se relacionaron con la cantidad de quistes que se utilizaron para la eclosión calculando posteriormente a porcentaje. c) El rango de eclosión de quistes obtenidos se calculó a partir del tiempo de eclosión y el porcentaje de eclosión. Este procedimiento se realizó en tubos de ensaye aplicándose iluminación y aireación constantemente con la ayuda de un capilar de 100 µL por cada tubo hasta que se obtuvieron los nauplios. Posteriormente los nauplios obtenidos fueron sembrados o transferidos a volúmenes mayores (500, 1000 y 2000 mL) y alimentados con Chaeroceros calcitrans durante sus diferentes estadíos hasta llegar a adultos para ser cosechados y obtener su biomasa. 4.2.8. Evaluación bromatológicas de los nauplios obtenidos Los nauplios eclosionados de aquellos quistes obtenidos en el laboratorio que se consideraron de buena calidad, se les permitió crecer hasta adultos. A éstos se les efectuó 20 análisis bromatológicos. Se mandaron determinar en el laboratorio especializado para ácidos grasos del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo, A.C. (CIAD). 4.3. Análisis es tadís tico En el presente estudio, se formula la hipótesis acerca de la producción de quistes o nauplios y se trata de ver si como consecuencia de un conjunto de valores muestrales, se debe aceptar o rechazar la hipótesis formulada con los márgenes de error previamente fijados. Si los valores muestrales difieren mucho de los valores teóricos que cabría esperar bajo la hipótesis formulada, se puede pensar en rechazar la hipótesis, pues se diría que las diferencias son significativas. Para cada muestra el estadístico tomará un valor y tendrá una distribución en el muestreo. Se puede determinar un valor particular crítico de dicho estimador, tal que la probabilidad de que este estimador tome un valor mayor que el valor particular crítico, sea igual a un valor fijado que se llama nivel de significación. A partir de este momento se adopta la norma de aceptar la hipótesis formulada, si la diferencia anterior es menor que el valor particular que se ha determinado y rechazarla en el caso contrario. La hipótesis nula (H0) es la que se formula y se quiere contrastar. En el presente estudio se define, como un tratamiento experimental que no produce diferencias en el rendimiento de quistes o nauplios con respecto a los demás tratamientos. A su vez, la hipótesis alterna (H,), que es cualquier otra hipotesis que difiere de la formulada y que sitúa frente a H0 , de forma que si se acepta H0 se rechaza Ha y si se acepta Ha se rechaza H0 (Vizmanos y Asencio, 1976). La evaluación estadística de producción de quistes o nauplios se realizó en una PC-486 con 32 Mb de RAM utilizando el paquete estadístico STATGRAPHICS versión 7.0. A los resultados de cada ensayo se les efectuó un ‘análisis de varianza mediante análisis de rangos múltiples para determinar si existen diferencias ó no entre los diferentes tiempos y las variables por determinar. Los márgenes de error de este programa con α = 0.05 preestablecidos, significa que se rechaza un 5% de las veces la hipótesis nula siendo cierta. 21 V. RESULTADOS 5.1 Descapsulado Se efectuaron los experimentos del presente estudio con quistes de una lata nueva. Las características de porcentaje de eclosión según el proveedor fueron las mismas, que las que se obtuvieron. El tiempo de eclosión, sin embargo fue mayor, teniendo un porcentaje de eclosión de 90% a las 24 horas. La eclosión obtenida fue de 92.7% al inicio de los experimentos y de 91.4% al final. 5.2 Condiciones generales para el descapsulado y la incubación de quistes Las condiciones del descapsulado sin uso de hipoclorito y la incubación fueron controladas y constantes para todos los experimentos. La incubación en el cuarto con temperatura y luz controladas resultó ser adecuada y duró entre 17 y 24 horas. 5.3 Crecimiento de nauplios a adultos El crecimiento de nauplios de Artemia hasta adultos se efectuó en el cuarto con temperatura y luz controladas. La diatomea Chaetoceros calcitrans es un alimento usado por su sencillez de producción y su reproducción relativamente rápida, utilizada comúnmente en los laboratorios de producción de larvas de camarón. 5.4 Producción de quístes Los quistes de Artemia fueron producidos a partir de adultos que fueron adaptados a soluciones salinas. Para controlar la temperatura con rangos pequeños de oscilación (± 0.l°C), se montaron los matraces en una incubadora que tiene un ventilador para l mantener el aire en circulación. La producción de quistes que se obtuvieron en solución salina de 80 g/L y a diferentes temperaturas, se muestra en la Fig. la. Se relacionó la 22 cantidad de quiste por hembra para poder comparar entre todos los tratamientos. El valor promedio obtenido para el error estándar f u e de 33%. A 20, 22, 26, 28 y 30°C los valores de quistes/hembra/día no muestran diferencias significativas (p>O.O5), aquellos a 24°C si muestran diferencias significativas (p<O.05). Aquellos quistes que lograron eclosionar antes de cosechar (a los 3 días), se contabilizaron como nauplios, la cantidad de éstos se representan en la Fig. lb. La producción de quistes que se obtuvieron en solución salina de 120 g/L y a diferentes temperaturas, se muestra en la Fig. 2a. No hubo diferencias significativas (p>0.05) en la producción de quistes/hembra/día a las temperaturas de 20, 22, 26, 28 y 30°C. A 24°C hubo diferencias significativas (p<O.05) con respecto a todos los demás tratamientos. El valor del error estándar para los tratamientos fue de 37.5% en promedio. Aquellos quistes que lograron eclosionar antes de cosechar (a los 3 días), se contabilizaron como nauplios. la cantidad de éstos se representan en la Fig. 2b. La producción de quistes que se obtuvieron en solución salina de 130 g/L y a diferentes temperaturas, se muestra en la Fig. 3a. No hubo diferencias significativas (p>O.O5) en la producción de quistes/hembra/día a las temperaturas de 20, 22, 26 y 28°C. A 24°C hubo diferencias significativas (p<0.05) con respecto a todos los demás tratamientos. El valor de error estándar para los tratamientos fue de 5 1.2% en promedio. Aquellos quistes que lograron eclosionar antes de cosechar (a los 3 días), se contabilizaron como nauplios, la cantidad de éstos se representan en la Fig. 3b. La producción de quistes que se obtuvieron en solución salina de 140 g/L y a diferentes temperaturas, se muestra en la Fig. 4a. No hubo diferencias significativas (p>O.O5) en la producción de quistes/hembra/día a las temperaturas de 20, 22 y 26°C. A 24°C hubo diferencias significativas (p<0.05)con respecto a todos los demás tratamientos. El valor de error estándar para los tratamientos fue de 3 1.7% en promedio. Aquellos quistes que lograron eclosionar antes de cosechar (a, los 3 días), se contabilizaron como nauplios, la cantidad de éstos se representan en la Fig. 4b. 140 120 Quistes/ hembra/ día 100 80 60 40 20 0 A I 140 . Nauplios 100 80 /hembra/ 60 día 40 20 I B Fig. 1. Producción diaria de quistes y nauplios por hembra obtenidos a diferente temperatura en una salmuera con 80g/L de salinidad. (A) quistes. (B) nauplios. 140 120 Quistes/ hembra/ día 100 80 60 40 A - Nauplios /hembra bra/ 100 día Fig. 2. Producción diwia de quistes y nauplios por hembra obtenidos a diferente temperatura en una salmuera con 120 g/L de salinidad. (A) quistes. (B) nauplios. 25 La producción de quistes que se obtuvieron en solución salina de 150 g/L y a diferentes temperaturas, se muestra en la Fig. 5a. No hubo diferencias significativas (p>0.05) en la producción de quistes/hembra/día a las temperaturas de 20 y 26°C. A 22 y 24°C hubo diferencias significativas (p<0.05) con respecto a todos los demás tratamientos. El valor del error estándar para los tratamientos fue de 39.7% en promedio. Aquellos quistes que lograron eclosionar antes de cosechar (a los 3 días), se contabilizaron como nauplios, la cantidad de éstos se representan en la Fig. 5b. La producción de quistes que se obtuvieron en solución salina de 160 g/L y a diferentes temperaturas, se muestra en la Fig. 6a. No hubo diferencias significativas (p>0.05) en la producción de quistes/hembra/día a las temperaturas de 20, 22 y 26°C. A 24°C hubo diferencias significativas (p<0.05) con respecto a todos los demás tratamientos. El valor del error estándar para los tratamientos fue de 38.5% en promedio. Aquellos quistes que lograron eclosionar antes de cosechar (a los 3 días), se contabilizaron como nauplios, la cantidad de éstos se representan en la Fig. 6b. 5 . 5 . P r o d u c c i ó n m a s i v a d e q u i s t e s b a j o condiciones óptimas y almacenamiento La microalga que se utilizó para la reproducción de Artemia franciscana fue Chaetoceros calcitrans con la que se obtuvieron los quistes a temperatura cercana al óptimo de 24°C y a una salinidad de 100 g/L La cosecha fue de 0.5 g peso seco. El almacenamiento de porciones de quistes homogenizados por agitación se efectuó a diferentes temperaturas a presión atmosférica normal y a presión menor a la atmosférica utilizando una jeringa. El tiempo de almacenamiento fue de una a cuatro semanas. 5.6 Evaluacíón de la calidad de quistes 5.6.1 Porcentaje de eclosión de quistes Los quistes almacenados a diferentes temperaturas y a presión ambiente o a presión menor a la atmosférica (vacío parcial) se eclosionaron en agua marina esterilizada y se contabilizaron los nauplios presentes. Los porcentajes de eclosión de los diferentes tratamientos de almacenaje se presentan en la figura 7. -- L -------‘r 140 Quistes/ hembra/ día A Fig. 3. Producción diaria de quistes y nauplios por hembra obtenidos a diferente temperatura en una salmuera con 13Og/L de salinidad. (A) quistes. (B) nauplios. ------ Quistes/ hembra/ día A 140 120 Nauplios /hembra/ día 100 80 60 40 20 0 Fig. 4. Producción diaria de quistes y nauplios por hembra obtenidos a diferente temperatura en una salmuera con 14Og/L de salinidad. (A) quistes. (B) nauplios. 28 140 / í20 Quistes/ ‘Oo hembra/ 8o día ‘O 40 I 20 I 0 A (I día Fig. 5. Producción diaria de quistes y nauplios por hembra obtenidos a diferente temperatura en una salmuera con 15Og/L de salinidad. (A) quistes. (B) nauplios. 29 1 1 Quistes/ hembra/ día 100 A Nauplios /hembra/ ‘he& bra/ día B Fig. 6. Producción diaria de quistes y nauplios por hembra obtenidos a diferente temperatura en una salmuera con 16Og/L de salinidad. (A) quistes. (B) nauplios. 30 5.6.2 Medición de adultos por sexo La determinación del tamaño de los adultos obtenidos a partir de los quistes eclosionados bajo diferentes tratamientos se efectuó con los diferentes lotes que se mantuvieron durante 1, 2, 3 y 4 semanas. Se presentan los tamaños de Artemia diferenciando por sexo y por tratamiento y por tiempo de almacenamiento en la figura 8. 5.6.3 Determinación del diámetro de los quistes hidratados El diámetro de los quistes obtenidos a diferentes temperaturas y salinidades fueron determinados con una regleta adaptada en el ocular de un microscopio. Los resultados de los promedios obtenidos de 30 quistes para cada tratamiento a 20°C se presentan en la figura 9 , a 22°C en la figura 10, a 24°C en la figura 11, a 26°C en la figura 12, a 28°C en la figura 13 y a 30°C en la figura 14. 5.T Producción de adultos a partir de quistes para obtener biomasa La biomasa de Artemia húmeda y seca obtenida de los diferentes lotes de quistes analizados y de la diatomea Chaetoceros calcitrans que sirvió de alimento se enumeran en la tabla 1. Tabla 1. Biomasa de diferentes lotes de Artemia y Chaetoceros calcitrans húmeda y seca . cosechados (para su análisis del perfil de ácidos grasos). Biomasa (peso húmedo, g) Biomasa (peso seco, g) Cría de laboratorio (a) 5.4812 0.4122 Cría de laboratorio (b) 5.4563 0.3843 Cría de lata nueva (a) 5.5693 0.4448 Cría de lata nueva (b) 5.6116 0.4436 Cría de lata vieja (a) 5.3248 0.4665 Cría de lata vieja (b) 4.9226 0.3021 Chaetoceros calcitrans Chaetoceros calcitrans (a) 10.4687 0.7846 (b) 10.6359 0.7621 Porcentaje de elosión (%) 31 I 60 50 40 30 20 10 24°C ambiente :- 24” C vacío ’ 14°C ambiente l 4°C ambiente TIEMPO DE ALMACENAMIENTO (Semanas) Fig. 7. Porcentaje relativo de eclosión de nauplios vivos emergidos a 24 y 48 horas a partir de quistes obtenidos de Artemia franciscana cultivados a 24°C y 100gL de salinidad. El tiempo de almacenamiento de los quistes desde que fueron colectados hasta su eclosión fue durante 1 a 4 semanas a temperatura de 4, 14 ó 24°C y a presión del medio ambiente ó aplicando presión reducida. 32 alla (mm) vacío 3 4. ambiente ambiente ’ ambiente Tiempo (semanas) Fig. 8. Taila de Aetemia franciscana adulta obtenida de nauplios vivos emergidos de quistes producidos. Las condiciones de almacenamiento de los quistes desde que fueron colectados hasta su eclosión, fue durante 1 a 4 semanas a temperatura de 4, 14 ó 24°C y a presión del medio ambiente ó aplicando presión reducida. (M = machos. H = hembras). 33 250,0 - 20°C Diámetro (µm) 240,O 230,O 220,0 - -e- 80 g/L 210,O - - - E) - -120 g/L +130 g/L 200,0 - -X- 140 g/L --*--150 g/L 190,0 - -8-160 g/L 180,O 170,0 160,O / 3 I I 6 Tiernpi (días) , 12 l 15 Fig. 9. Diámetro de quistes obtenidos (promedio ± error estándar) a una temperatura de 20 ± 0.l°C y a diferente salinidad y tiempo. 250,0 Diametro (µm) 240,O 230,O 220,0 210,0 200,0 190,0 180,O 170,0 160,O 3 6 9 12 15 Tiempo (días) Fig. 10. Diámetro de quistes obtenidos (promedio & error estándar) a una temperatura de 22 ± 0.1°C y a diferente salinidad y tiempo. 74 250 24°C Diámetro (µm) 240 230 220 210 200 rm 190 180 170 160 , 3, 6 Tiemp: (días) 15 12 Fig. ll. Diámetro de quistes obtenidos (promedio ± error estándar) a una temperatura de 24 ± 0.1 oC y a diferente salinidad y tiempo. 250,o 240,O 30,O =20,0 26OC 1 -e- 80 g/L - - n--12OglL +130 g/L -*- 140 g/L -.*,-- 150 g/L 180,O +--160 ---- 170,o 160,O r- 3 l 6 l Tiernp~ (días) I 12 g/L I 15 l Fig. 12. Diámetro de quistes obtenidos (promedio ± error estándar) a una temperatura de 26 ± O.l”C y a diferente salinidad y tiempo. 35 250 28°C 240 Diámetro (µ) É-230 --t- 8C g/L ~-0--12og/L 220 210 -130 g/L -x- 140 g/L 200 --*--1SOglL 190 --8- 160 g/L 180 170 160 -0 1 3 6 12 9 15 Tiempo (días) Fig. 13. Diámetro de quistes obtenidos (promedio ±error estándar) a una temperatura de 28 ± 0.l°C y a diferente salinidad y tiempo. 250 240 Diámetro (µ) É-230 220 210 200 190 180 170 160 3 6 9 12 15 Tiempo (días) _--.-.-__ 0 Fig. 14. Diámetro de quistes obtenidos (promedio ± error estándar) a una temperatura de 30 ± 0.l°C y a diferente salinidad y tiempo. 36 5.8 Perfil de ácidos grasos a partir de biomasa obtenida de adultos La biomasa obtenida en forma de Artemia adulta a partir de quistes producidos en el laboratorio fueron analizados en su contenido de ácidos grasos. Se compara con biomasa de Artemia adulta a partir de quistes de lata vieja y lata nueva de la misma especie Artemia franciscana y del mismo sitio de recolección del brazo sur del Gran Lago Salado, Utah, Estados Unidos de Norteamérica. También se comparan con los ácidos grasos del alimento dado, que fue Chaetoceros calcitrans. (Promedio de dos: valores determinados). Los valores en porciento de las diferentes fracciones se presentan en la tabla 2. Tabla 2. Porcentaje de la fracción total de ácidos grasos determinada en biomasa de adulta a partir de quistes producidos en el laboratorio. También se comparan con los ácidos grasos del alimento dado, que fue Chaetoceros calcitrans. Artemia Acidos grasos Adultos a partir de quistés de laboratorio (%) De lata nueva (%) De lata vieja (%) Chaetoceros calci trans 4, 6, 8 , 10, ll, 0.4045 0.4255 0.3345 0.4750 15:1, 17, 17:1, 21,23 15.2935 16.5360 17.4940 26.3935 Saturados (14 a 31.4825 37.1150 38.3545 45.6010 Monoinsaturados( 14: 1 a 24: 1) Di-insaturados (18:2 a 22:2) Poli-insaturados (18:3 a 22:6) 17.6940 19.3765 16.2430 19.3210 24.8830 18.3400 19.3245 6.2880 10.2420 8.2065 8.2495 1.9230 12,13 15, 24) % 37 Tabla 3. Contenido de ácidos grasos saturados (C 14:0, C 16:O y C 1 8:0), mono-insaturados (C16:1, C18:l) y poli-insaturados (C18:2, C18:3, C20:3 y C22:6) de adultos de Artemia franciscana y Chaetoceros calcitrans expresados en g de ácidos grasos/1 OO g de muestra. ORIGEN DE Saturados MUESTRA Cría de laboratorio a ) 0.625 Mono-insaturados Poli-insaturados - 0.235 1.035 Lata nueva de quistes a) 0.555 0.185 0.705 Lata vieja de quistes a) 1.135 0.280 1.295 Chae toceros calcitrans 0.990 0.065 0.290 0.040 0.043 0.036 (este trabajo) a) Artemia alimentada con Chaetoceros calcitrans (García Ulloa, 1998) a) Promedio de dos muestras analizadas 38 VI. DISCUSION 6.7 Descapsulado El descapsulado de quistes de la primer lata de Artemia franciscana (Great Salt Lake, South Arm) dio como resultado una producción de nauplios de 62% a las 24 horas (diciembre 1996). Los datos de la lata proporcionados denotaban un porcentaje de eclosión de > 90% y una tasa de eclosión al 90% en 18 horas. Estos valores fueron declinando con el tiempo (octubre 1997) hasta 7.95% prolongando el tiempo de eclosión de 24 a 48 horas. Debido a. que el valor de eclosión no fue muy elevado se sospechó de la baja calidad de los quistes, por lo que se utilizó otra lata nueva de quistes a partir de enero 1998 de la misma especie y del mismo sitio de recolección de la marca “Great Lake Artemia”. Los quistes de Artemia franciscana que se utilizaron en el descapsulado procedieron de la segunda lata, los cuales no presentaron ninguna dificultad para eclosionar. No fue necesario utilizar hipoclorito de sodio como descapsulador para obtener buenos resultados de nauplios. Se adoptó la técnica de descapsulación propuesta por Sorgeloos et al. (1977), ésta consistió en hidratar los quistes secos hidratados en un contenedor de fondo cónico con agua marina y se mantuvieron en suspensión por medio de aireación desde el fondo. En el presente estudio se hidrataron los quistes en agua marina con 35 g/L, aplicando aireación de fondo y en forma continua para mantenerlos en suspensión hasta que se obtuvieron los nauplios. Los mejores resultados para la eclosión de grandes densidades de quistes se obtuvieron en conos transparentes con aireación desde el fondo como lo sugieren Castro et al. (1988), logrando mantener una concentración de oxígeno disuelto cercano al de la saturación, El pH se mantuvo siempre por encima de 8.3 sin la necesidad de regularlo durante la eclosión. Bowen y Sterling (1978) recomienda que este valor no deberá de descender a valores menores de 8.0, ya que entre más ácido se encuentre el medio, la tasa de 39 mortalidad será mayor y el crecimiento de los nauplios emergidos también se ve afectado negativamente. En el presente trabajo no se observaron mortalidades de nauplios. Durante la incubación de los quistes se aseguró proporcionar luz blanca durante las primeras horas del descapsulamiento una vez iniciado el período controlado de encendido de la luz blanca. Esto se efectuó por la recomendación que hace Sorgeloos (1973). 6.2 Condiciones generales para el descapsulado e incubación de los quistes La incubación de los quistes se desarrolló bajo la influencia de algunas variables con respecto a los trabajos de Sorgeloos et al., (1977) y Castro et al., (1991). Estas fueron la salinidad, (35 en vez de 38 g/L), la temperatura que fue constante y la presencia de luz blanca con un régimen diurno constante. Por razones prácticas en la incubación de los quistes se empleó agua marina con 35 g/L. El utilizar agua marina facilitaba el proceso de incubación; además se uniformizó el criterio de incubación como otros laboratorios que trabajan con Artemia (Castro et al., 1997). Está demostrado que Artemia alcanza mejores niveles de eclosión a salinidades menores. La tasa óptima de eclosión está cercana a los límites inferiores de tolerancia de salinidad correspondiente a 5 g/L y en un lapso de 10 h. A 100 g/L los quistes no se hidratan completamente, y a 30 g/L la ruptura del corion se presenta a las 15 h posteriores a su hidratación (Sorgeloos, 1980; Vanhaecke y Sorgeloos, 1983). Clegg (1964) en sus trabajos experimentales tiene una explicación, a una salinidad menor del medio se traduce en menores diferencias de presión osmótica entre el interior del quiste, es decir menores necesidades de la síntesis de glicerina por el embrión para romper el corion con el consiguiente ahorro energético. El proceso de incubación duró 2 a 9h más que el que se lee en las etiquetas de las latas de quiste, cuando se incuban en agua con 28 g/L (T90: 18 h)., es decir menor tiempo con salinidad menor. A partir de las 24 h de haberse colocado el quiste en agua, se iniciaba la alimentación. 40 La temperatura es un factor importante en la eclosión de los quistes. Cuando ésta se incrementa, la tasa de eclosión aumenta hasta ciertos límites. Normalmente recomiendan temperaturas entre 24 y 30°C siendo 28°C la óptima. Esto se debe a que a mayor temperatura la conversión de la trehalosa a glicerol es mayor (Castro y Gallardo, 1985). La temperatura para la eclosión de los nauplios en el presente trabajo permaneció constante en la cámara termostatizada (26.0 ± 0. 1°C). 6.3 Crecimiento de nauplios a adultos El alimento proporcionado Chaetoceros calcitrans citrans fue óptimo. Su producción fue constante y el mantenimiento de grandes cantidades para garantizar alimento a la población de Artemia generada fue sencillo. Además esta diatomea resistió los cambios graduales que se efectuaban en la salinidad para inducir a la Artemia a producir quistes, ya que se proporcionaba junto con la Artemia para no frenar su producción de quistes. El tiempo de crecimiento de los nauplios hasta adultos fue entre 14 y 21 días. El tiempo de diferenciación sexual coincide en el presente trabajo con el de Castro et al., (1997). El tiempo para concluir un ciclo donde se observó el primer nauplio fue de 14 días, siendo mayor debido a la temperatura más baja, que el tiempo observado por PérezCastro (1995) de ll días con 13 horas a temperatura de 29.0 ± 1 .0°C 6.4 Producción de quistes La producción de quistes se efectuó en cada caso por triplicado y simultáneamente a la misma temperatura que se dejaba graduar en la incubadora. Lo que se modificaba en cada experimento simultáneo era la salinidad, manteniendo la temperatura constante. Este diseño bidimensional por lo tanto se llevó a cabo en periodos que tardaron 18 días. El conteo se relacionó a larcantidad de hembras presentes. 41 Pata poder determinar la temperatura y la salinidad en la que se obtuviera la mayor cantidad de quistes, se tuvo también que cuantificar a los nauplios que eclosionaron durante el lapso de recolección y conteo que fue de 3 días. Se consideró entre los ensayos de mayor producción a aquellos que originaban una mayor cantidad de quistes sin que eclosionaran a nauplios. Con una salinidad de 80 g/L la producción de nauplios fue heterogénea, tanto en relación de la temperatura, como en el factor tiempo. Existe una tendencia que a menor temperatura la mayor producción de quistes se efectuó principalmente durante los primeros 9 días de haber iniciado el experimento. A mayor temperatura la mayor producción se desfasa a los 12 ó 15 días siendo menor. Comparado con la cantidad de nauplios que eclosionaron, coincide la producción de quistes con la de nauplios en las temperaturas de 20 y 22°C. En las demás temperaturas la cantidad de nauplios fue insignificante. La cantidad de quistes producidos a 120 g/L de salinidad fue mayor entre 20 y 26°C, principalmente entre los 6 y 9 días de haber iniciado. A 28 ó 30°C la producción fue mínima comparada con los demás experimentos. Comparado con la eclosión de nauplios coincide con la obtenida a 80 g/L de salinidad y a 20 ó 22°C. Tampoco fue muy elevada la producción de éstos en los últimos días (12 a 18). A 130 g/L de salinidad se observa una mayor producción de quistes a 20 y a 22°C, comparado con los experimentos a 120 g/L de salinidad. Esta producción fue elevada durante todo el período de producción teniendo un máximo a los 3 días de haber iniciado el experimento y a 22 °C. Sin embargo también eclosionaron considerables cantidades de nauplios precisamente a la temperatura de 22°C, donde se ‘produjeron la mayor cantidad de quistes. Si se suman los quistes y los nauplios, se observa que la mayor cantidad es efectivamente a 22°C a la salinidad de 130 g/L. A 26 y 28°C la producción de quistes fue menor al 5% registrado a 22°C y la eclosión de nauplios fue menor de 2% en relación a aquellos registrados a 22°C. A 30°C no hubo producción de quistes. 42 A salinidad de 140 g/L, la mayor producción de quistes fue a 20°C seguido de los producidos a 22 y 24°C decreciendo a menos de 10% aquellos producidos a 26°C. A 28 ó a 30°C no se produjeron quistes. Comparando con la eclosión de nauplios, se observa que fue mínima. A 20°C la eclosión durante los 18 días fue menor a 7%, a 22 y 24°C fue alrededor de 3%, y a 26°C fue del 20%. En los experimentos con salinidad de 150 g/L se obtuvo la mayor cantidad de quistes a 2O°C, seguido de la serie a 22°C y de la serie a 24°C. A 26°C la producción fue de 9% comparada con la serie de 20°C. A 28 y 30°C tampoco se produjeron quistes. La eclosión, sin embargo, fue mayor que con los experimentos anteriores (80-140 g/L), a 20°C eclosionaron alrededor de 20%, a 22°C fue alrededor de SO%, a 24°C fue de 2% y a 26°C fue del 15%. En la serie con salinidad de 160 g/L la producción de quistes fue alrededor del 50% menor que comparada con la serie a 150 g/L a temperatura de 20 y 22°C. A 24°C sólo se produjo el 12% de quistes y a 26°C sólo se produjo el 10% de quistes comparado con la serie de 150 g/L de salinidad. En las temperaturas mas elevadas tampoco se produjeron quistes. La cantidad de nauplios fue considerablemente mayor que a 150 g/L de salinidad. A 20°C se produjeron 33% de nauplios, a 22°C eclosionaron 115% más de nauplios que quistes producidos. A 24 y 26°C se produjeron 10% de nauplios comparado con los quistes. Para fines comparativos, no se encontraron trabajos que mencionen la producción y cuantificación de quistes, tanto en medio natural como controlado. , varió con respecto a la salinidad. Cuando se La proporción de quistes - nauplios suman los quistes producidos a las diferentes temperaturas y se comparan con los nauplios eclosionados a dichas temperaturas, se obtiene que a salinidad de 80, 120 y 150 g/L la propoción es de que por cada tres quistes producidos, eclosionaba un nauplio. A 130 g/L de salinidad la proporción fue que por cada dos quistes producidos, eclosionaba un nauplio. A 140 g/L de salinidad la proporción resultó de la siguiente manera; por cada 20 quistes, eclosionaba un nauplio. Finalmente a salinidad de 160 g/L por cada quiste producido, eclosionaba un nauplio. En relación a la proporción de quistes producidos y 43 nauplios eclosionados con las variables trabajadas en el presente estudio (salinidad, temperatura y tiempo), tampoco se encontraron trabajos para fines comparativos. En relación a temperatura se observa que a 24°C los análisis estadísticos aplicados presentan diferencias significativas (p<0.05) en relación a las demás temperaturas en los diferentes ensayos con salinidades desde 80 hasta 160 g/l. Las demás temperaturas entre sí, no mostraron diferencias significativas (p>0.05). Esta observación concuerda con el rango de temperatura (22 a 24°C) en donde se obtiene la mayor cantidad de quistes. 6.5 Producción masiva de quistes bajo condiciones óptimas y almacenamiento Se seleccionó la temperatura de 24°C para la producción masiva de quistes por tener una cámara adaptada a esa temperatura. La salinidad utilizada para la producción masiva se seleccionó de 150 g/L ya que resultó ser aquella en donde se produjeron gran cantidad de quistes y una -menor cantidad de nauplios. La cantidad obtenida es sin embargo baja, ya que de los quistes obtenidos no todos resultaron fértiles. 6.6 Evaluación de la calidad de quistes 6.6.1 Porcentaje de eclosión de quistes La determinación de la eclosión de quistes almacenados a diferentes temperaturas, a presión ambiental y a presión disminuida, muestra que el factor tiempo juega un papel importante. Esta cepa de quistes definitivamente eclosiona mejor dejándola 48 horas en agua que a 24 horas. En todos los experimentos la eclosión fue por lo menos 100% mayor a las 48 horas que a las 24 horas. Comparando con el porcentaje de eclosión de quistes de la lata comercial, éstos eclosionaron 60,53% a las 24 h y 92,76% a las 48 h. La etiqueta menciona que a las siete horas inicia la eclosión y a 24 h se puede esperar una población de nauplios de 9O% . Para comparación se efectuó la cuantificación de quistes eclosionados de una lata vieja siendo de 0,89% a las 24 h y de 7,99% a las 48 h. 44 La temperatura de almacenamiento de quistes también influyó significativamente. Considerando que a las 24 h no habían eclosionado todos los nauplios, se compararán los datos obtenidos de eclosión a las 48 h. A una semana de haber almacenado los quistes a 4, 14 y 24°C, la eclosión fue alrededor de los 25%. A las dos semanas el porcentaje de eclosión fue casi igual dando un valor de 27%. A la tercer semana de almacenaje los valores fueron de alrededor de 34% para los quistes guardados a 4 y 14°C mas sin embargo para aquellos almacenados a 24°C el valor fue 3/5 partes del registrado a temperaturas bajas. A la cuarta semana la eclosión fue mejor a 24°C, seguido del de 4°C y finalmente a 14°C. Cuando se aplicaba vacío parcial, a la primera y a la tercer semana se obtuvo mejor eclosión. Para las pruebas de la segunda y cuarta semanas, la eclosión fue superior sin aplicación de vacío, Se puede resumir que la mayor eclosión se obtuvo a 24°C con o sin aplicación de vacío parcial y a las 4 semanas de haberse iniciado el almacenamiento. Este resultado parece tener que ver con el tiempo de deshidratación y la presencia de escasa humedad. El producto comercial reporta un porcentaje de humedad de 6.5%. Si la humedad y el tiempo de deshidratación son los factores determinantes, entonces un tiempo mayor de deshidratación y almacén de quistes producirá una mayor eclosión. También se puede mencionar, que se observaron huevos infértiles, ya que tenían una coloración diferente a los demás quistes. En la industria la recolección en los lagos salados se efectúa con redes, los cuales se lavan y se secan, Posteriormente se seleccionan por densidad, ya que en la naturaleza no habrá una producción al 100% de quistes viables. En el presente estudio la cantidad reducida de quistes obtenidos no permitió efectuar una selección por densidad. 6.6.2 Medición de adultos por sexo Las hembras resultaron todas mayores en los diferentes experimentos comparadas con el tamaño de los machos (Fig. 8). También se observa que a mayor temperatura (24°C) la de Artemia fue menor (7 a 8 mm) y sólo algunas hembras presentaron saco con pocos quistes, que comparadas con la de menor temperatura (4°C), en donde crecieron 45 algunos crustáceos hasta 12 mm y la mayor parte de las hembras presentaron un gran saco lleno de quistes, habiendo diferencias significativas entre 24 y 4°C (p<0.05) a la primera, segunda y cuarta semanas. La talla de Artemia eclosionada de quistes almacenados a 24°C con o sin vacío, no mostraron diferencias significativas en las tallas una vez desarrolladas. El error estándar acumulado calculado para estos casos fue de 2.2 y 3.6%, respectivamente; el error estándar acumulado para 14 y 4°C fue de 3.1 y 5.7%, respectivamente. Estos valores son algo mayores que para los datos obtenidos a 24°C. 6.6.3 Determinación del diámetro de los quistes hidratados El diámetro de los quistes mostró diferencias a las diferentes temperaturas en las que se desarrollaron las Artemias adultas. A 20°C se obtuvieron los quistes más grandes, sobre todo aquellos a 160 g/L de salinidad a nueve días de haber iniciado el experimento. También a menor salinidad (120 a 150 g/L) el diámetro de los quistes fue mayor a 230µm observándose una tendencia-a incrementarse con el incremento de salinidad. También a 80 g/L de salinidad el máximo del diámetro de los quistes se determinó al noveno día como en los demás ensayos, disminuyendo ligeramente a fechas posteriores. El error estándar acumulado promedio del tamaño de los quistes en los ensayos a 80, 120 y 130 g/L de salinidad fue de 1.15% y de aquellos a 140, 150 y 160 g/L de salinidad fue de 2.09%, lo que significa que a salinidades mas bajas los quistes presentan un diámetro más homogéneo, que aquellos a salinidades superiores. A 22°C el diámetro de los quistes varió con respecto a la salinidad y el tiempo de haberse iniciado el experimento. A 80 g/L de salinidad el diámetro fue constante (2 13 µm). En los demás ensayos con respecto a la salinidad, el diámetro de los quistes no fue tan grande como a 20°C observándose un promedio de 207.8 µm. La tendencia de producción durante los 15 días del experimento no fue constante, a excepción del ensayo a 80 y 130 g/L de salinidad. A 24°C hubo una tendencia a disminuir de tamaño de los quistes conforme pasaban los días. Se observa un máximo al inicio del experimento de 226 µm, una ligera 46 disminución del diámetro a los nueve días de haber iniciado el experimento con un mínimo de 167 µm y presentándose un ligero incremento alrededor de 200 µm a los 15 días. A 26°C se observa una tendencia en la cual disminuye el diámetro de los quistes a los nueve días (192 µm) con un ligero incremento a los 15 días de haber iniciado el experimento. Aquellos producidos a 80 g/L de salinidad fueron mayores en diámetro durante los primeros nueve días con un comportamiento similar a los de salinidad de 150 g/L. Aquellos a 130, 140 y 160 g/L de salinidad muestran una tendencia similar con respecto a1 tiempo. A 28°C el diámetro de los quistes dio un promedio de 212 µm, que corresponde a aquellos producidos entre 80 y 130 g/L de salinidad. Este valor coincide con el diámetro menor obtenido en los experimentos efectuados a 20°C. A mayor salinidad no se produjeron quistes. La producción a través de los días no varió considerablemente. A 30°C el diámetro de los quistes dio un valor medio de 211,O µm a una salinidad de 8Og/L con una ligera tendencia a incrementarse con el tiempo. A una salinidad de 120 g/L sólo se obtuvieron quistes durante los primeros seis días dando un promedio de 198,3 µm. No hubo producción posterior a este tiempo. Tampoco se produjeron quistes a mayor salinidad. No se encontraron trabajos relacionados con el tamaño de quiste variando temperatura o salinidad. Si se requiere de quistes grandes, se recomienda por lo tanto trabajar a una temperatura de 20°C y una salinidad entre 150 y 160 g/L. 6.7 Producción de adultos a partir de quistes para obtener biomasa La biomasa obtenida de Artemia franciscana adulta a partir de quistes obtenidos l en el laboratorio resultó alrededor de 5 g en base a peso húmedo. Estos valores que se obtuvieron por duplicado, concuerdan con los valores obtenidos para quistes de lata 47 nueva y de Lata vieja. La biomasa de la diatomea que sirvió de alimento a los nauplios para crecer hasta adultos fue mayor. Una vez deshidratados parcialmente, se calculó la biomasa en base a peso deshidratado parcial, la cual se fue alrededor de 7.5% de la biomasa en base a peso húmedo. Esta cantidad de biomasa parcialmente seca fue suficiente para poder extraer y determinar los ácidos grasos en forma de ésteres volátiles. La humedad remanente de las muestras fue de alrededor de 17%. La biomasa totalmente seca obtenida de la húmeda por lo tanto fue alrededor de 6.2%. La producción de biomasa de Artemia franciscana descrita por García Ulloa (1998) fue mayor a la del presente trabajo. Sin embargo, la biomasa de A. franciscana alimentada con Chaetoceros calcitrans, misma que fue utilizada en el presente trabajo, fue la de menor rendimiento en su trabajo Además al secar la biomasa del crustáceo, reporta un valor de 2.3% del rendimiento, el cual significa que su biomasa húmeda tenía demasiada agua retenida. Dato similar obtuvo para A . franciscana alimentada con Tetraselmis sp.; para dietas con harina de trigo o harina de soya o sus combinaciones, el porcentaje de materia seca en relación a biomasa húmeda fue alrededor de 8% que se asemeja al del presente trabajo. Con Spirulina el porcentaje fue de 6.7% que es casi igual al calculado en el presente trabajo. 6.8 Perfil de ácidos grasos a partir de biomasa El perfil de ácidos grasos que presentan las Artemias adultas obtenidas de quistes de latas y de los experimentos del presente trabajo varían poco entre sí. El perfil de la diatomea es muy diferente al de los adultos obtenidos. El análisis muestra una pequeña fracción de ácidos grasos con cadena lineal saturada de número de carbonos reducido (de 4 a 13 carbonos). Estos son productos intermediarios catabolismo y anabolismo de los ácidos grasos para formar aceites o grasas incluyendo los fosfolípidos. El porcentaje en los diferentes lotes de adultos y de Chaetoceros calcitrans no rebasa 0.5% del total de ácidos grasos registrados. También se l registraron ácidos grasos con números impares de carbonos como el pentadecanoico C 15:0, el cis- 1 0-pentadecenioco C 15: 1, heptadecanoico C 17:0, cis- 10-heptadecenoico 48 C17: 1, heneicosanoico C21:O y tricosanoico C23:O. En el presente trabajo estos contribuyeron con más del 26% en la diatomea y disminuyeron en los adultos obtenidos de quistes de diferente procedencia a valores entre 15 y 17% del total de ácidos grasos. Es importante que conforme se avejenta el quiste, más ácidos grasos de este grupo con número non de carbonos son almacenados en el organismo adulto. Un grupo importante son los saturados con número par de carbonos, el mirística C14:0, el palmítico C16:0, el esteárico Cl8:O, el araquidónico C20:0, el behénico C22:O y el lignocérico C24:O. En la diatomea este grupo aportó más del 45% de los ácidos grasos, mientras que en los adultos este valor fluctuó entre 3 1 y 38%. Es notorio que conforme se avejenta el quiste, el adulto almacena más ácidos grasos saturados en su organismo. Otro grupo significativo es el de los ácidos grasos mono-insaturados. Este incluye al miristoleico C 14: 1, palmitoleico C 16: 1, oleico C 18: 1, cis-1 1 -eicosenoico C20: 1, erúcico C22: 1 y el nervónico C24: 1. Estos se detectaron alrededor del 19%, tanto en la diatomea que sirvió de alimento, como en los adultos provenientes de quistes de diferentes fuentes. Los ácidos di-insaturados son otro grupo importante, entre ellos se detectó linoleico C 18:2, cis- ll, 14-eicosadienoico C20:2 y el cis-13,l 6-docosadienoico C22:2. Estos contribuyeron con 6% de los ácidos grasos de la diatomea y los adultos los acumularon de tres a cuatro veces más o los sintetizaron de otros ácidos grasos presentes. El último grupo que se presenta es el de los ácidos poli-insaturados en donde se detectó al ácido linolénico C 18:3, el cis-1 1,14,17-eicosatrienoico C20:4, cis-5,8,11,14,17-eicosapentaenoico C20:3, araquidónico C20:5 y e l cis-4,7,10,13,16,19-docosahexa- enoico C22:6. En la diatomea se presentaron alrededor de 2% del total de ácidos grasos detectados y en los adultos de Artemia de quistes de diferente procedencia, se cuantificaron cuatro a cinco veces más, lo que significa que los acumulan 0 los sintetizan . a partir de otros. 49 Se complica el trabajo de comparación con otros publicados, ya que se presentan diferencias en la procedencia de los quistes, la forma de engorda, el análisis de los ácidos grasos, y sobre todo la calidad de los alimentos que ingirieron las Artemias durante su desarrollo. En relación a A. franciscana alimentada con diferentes dietas, se tiene el trabajo de García Ulloa (1998), que suministró el mismo alimento a sus crustáceos, la diatomea Chaetoceros calcitrans. Para fines comparativos se concentran los ácidos grasos en la tabla 3 (pág 37), donde se muestran aquellos que son mencionados como saturados, mono-insaturados y poli-insaturados por García Ulloa (1998) y que fueron expresados en g de ácidos grasos/100 g de muestra. Otro trabajo con el que se puede comparar es el de Sorgeloos et al. (1986). Ellos presentan en una tabla el contenido de ácidos grasos de cepas de Artemia, entre ellas se encuentra la del Lago Salado, Utah, la cual fue alimentada con Chaetoceros sp. Los valores presentados son del ácido graso 16:0 con 11.7%. La diatomea presentó un valor 50% menor de este ácido graso, la Artemia de la lata vieja y la obtenida a partir de quistes en el laboratorio presentó valores ligeramente menores a la de Sorgeloos et al (1986), y la Artemia de la lata nueva mostró valores ligeramente mayores que las presentadas por estos autores. En relación al 16: 1 estos autores presentan un valor de 22.5% que se considera muy elevado comparado con los valores del presente trabajo, en el cual se obtuvieron datos máximos de 1.7% de este ácido graso. La diatomea presentó un valor de 0.32% de ese ácido. El ácido graso 18: 1 presentó un valor de 17.2% en el trabajo citado. En el presente trabajo los valores fluctuaron entre 5.2 y 12.5% y la diatomea presentó un valor de 1.5%. El 18:2 presentó un valor de 5.0% en el trabajo de Sorgeloos y colaboradores, la diatomea utilizada presentó un valor superior de 6.1% y el valor para Artemia fue entre 13.0 y 24.7%, valores bastante mas elevados que los reportados. El valor para el 18:3 presentado por Sorgéloos y colaboradores es de 0.9%, para la diatomea se encontró alrededor de 50% más y las muestras de Artemia fluctuaron entre 6.9 y 10.3%, valores varias veces mayor. Los valores para el 20:5 fueron de 18.6% para la Artemia presentada en el trabajo de comapración, y la diatomea exhibió un valor muy bajo de O.O2%, similar para la Artemia que no rebasó 0.07%. Por último, el trabajo de referencia no tiene valor para el ácido 20:4. En el presente ensayo, sin embargo, los 50 valores fueron de 0.17% para la diatomea y para Artemia fluctuaron entre 0.22 y 0.94%. Como se puede observar, los valores fluctuaron demasiado, incluso entre los valores que presenta Sorgeloos et al. (1986) hay gran dispersión de valores. Para comparar con otros trabajos relacionados con la dispersión de datos se presenta el de Bengston et al. (1991), el cual muestra una tabla donde sólo se observa el contenido del ácido graso 20:5. Los valores fluctúan desde 0.3 hasta 15.4% como porciento del total de ácidos grasos. El porcentaje de la Artemia del Gran Lago Salado brazo norte sólo contenía de 0.3 a 0.4% de este ácido, la Artemia del brazo sur sin embargo fluctuó entre 2.7 y 3.6%. En otro trabajo del mismo grupo (Leger et al., 1986) se presentan los valores para algunos ácidos grasos importantes. El 18:2 encontrado en nauplios dé Artemia fue de 5.3% del total de ácidos grasos encontrados. El 18:3 (ácido linoleico) que es importante para especies de agua dulce (Ortiz de Ora et al., 1991) se encontró en el trabajo de Leger et al., (1986) en un 22.6%, dos a tres veces superior al del presente trabajo. El 20:5 (ácido eicosapentaenoico) según Amat (1985) es esencial para especies marinas; éste se encontró en 4.2% en el trabajo de Leger et al. (1986). En el presente estudio estuvo por debajo del O.l%, bastante inferior de lo requerido, lo que significa que no es buen alimento para especies marinas. Por otro lado se observa en los datos del presente trabajo, que la Artemia concentra el ácido 18:3 varias veces conforme se alimenta de Chaetoceros y se desarrolla hasta adulto. Los grupos de ácidos grasos muestran, sin embargo, una distribución homogénea en los diferentes lotes de Artemia. Los autores de trabajos relacionados con Artemia citados anteriormente, por ejemplo, no proporcionan datos de aquellos ácidos grasos que tienen número non de carbonos y que en el presente trabajo el valor mínimo contabilizado para este grupo fue de 14.6%. También los intermediarios en el metabolismo (C:4 a C:12) no se reflejan en los trabajos citados. Por otro lado., los saturados forman un gran grupo siendo dos veces más numeroso que los ácidos grasos mono-insaturados, los di-insaturados y tres a cuatro veces superior a los poli-insaturados. 51 VII. CONCLUSIONES l La producción de quistes de Artemia franciscana a partir de adultos alimentados con Chaetoceros calcitrans se acercó a la mayor producción registrada, cuando la salinidad fue de 130 g/L y a 22°C o cuando la salinidad fue de 140 g/L y a 20°C. Bajo estas condiciones se contabilizaron mayor número de quistes y menor número de nauplios eclosionados. Sin embargo también a 150 g/L de salinidad y temperatura entre 20 y 24°C se obtuvo una gran cantidad de quistes, comparado con la cantidad de nauplios vivos. La eclosión de quistes almacenados fue mejor a las 48 horas que a las 24 horas de l iniciar la hidratación. A cuatro semanas de almacenar los quistes, eclosionaron mejor aquellos almacenados a 24°C, seguidos de aquellos almacenados a 14 ó a 4°C. El vacío parcial no afectó la cantidad de quistes eclosionados comparado con aquellos a los que no se les aplicó vacío. l El almacenamiento de quistes afectó el tamaño de Artemia franciscana adulta, a 24°C los adultos fueron de menor talla y con poco desarrollo de saco con quistes, a 4°C el crecimiento de adulto fue mayor y el desarrollo de saco fue completo. El vacío parcial aplicado a los quistes no afectó al tamaíío de adultos y al desarrollo del saco. l La producción de quistes fue buena a 20°C obteniéndose los quistes más grandes a 160 g/L de salinidad. A menor salinidad el diámetro de los quistes hidratados fue alrededor de 230 µm con ligera tendencia a incrementarse con el aumento de la salinidad. A mayor temperatura y a mayor salinidad el diámetro de los quistes disminuyó; a temperatura ≥ 28°C no se produjeron quistes. 0 La Artemia adulta almacena menor cantidad de ácidos grasos saturados y monoinsaturados que la fuente que sirvió de alimento, la diatomea Chaetoceros calcitrans. 52 l Los ácidos grasos di-insaturados y los poli-insaturados los almacena la Artemia adulta de tres a cinco veces más, que los presentes en la diatomea. l Esta cepa de Artemia franciscana almacena algunos ácidos grasos importantes que sirven como alimento para organismos dulceacuícolas, mas casi no para marinos. 53 VIII. BIBLIOGRAFiA CITADA Alvarez, Z. y Sánchez, R. 1994. Evaluación de la cantidad de ka cepa de Artemia. Las Cumaraguas, Paraguaná, Venezuela. Ciencias Marinas, 20 (3) : 287-299. Amat, F. 1985. Utilización de la Artemia en Acuicultura. Inf. Teon Inv. Pesq. 128129. Amat, F. D.; Hontoria, F. y Navarro, J. C. 1992. 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