Modalidad de la frase y modos verbales Se denomina modalidad de la frase a la actitud mental que el hablante denota en sus palabras al describir, preguntar, desear o llamar la atención sobre lo que habla. La diversidad de estas actitudes subjetivas del hablante está clasificada en las tres funciones básicas del lenguaje determinadas por Karl Bühler (Teoría del lenguaje, 1918), a saber: representación, apelación y expresión. Mediante la función representativa el hablante transmite un contenido (comunicación), con la apelativa actúa sobre el oyente (actuación), por la expresiva manifiesta su actitud personal (síntoma). Estas tres funciones están patentes en los tres casos nominales de la declinación latina (nom., voc., acc.): el nominativo señala el elemento predicable del contenido de la comunicación; con el vocativo se actúa sobre el receptor del mensaje; y mediante el acusativo puede expresarse una exclamación acerca de cualquier elemento del mensaje. Respecto al empleo de los modos verbales con relación a la modalidad de la frase, toda oración puede ser comprendida dentro de una modalidad lógica, sea aseverativa o interrogativa, y en la modalidad impresivo-expresiva [véase ISEL, p. 246, NGL §§ 311-323]. Hay un modo verbal que coincide con una sola de las funciones: el imperativo, con su exclusiva función de apelación. Los otros dos modos, indicativo y subjuntivo, pueden emplearse para cualquiera de las funciones, siempre que constituyan el núcleo del predicado verbal de oraciones principales o independientes [GLC § 33.1]. La diferencia de significado entre las formas del indicativo y las del subjuntivo estriba en el modo en que el hablante entiende o percibe aquello de lo que habla comunicando al oyente la percepción de esa experiencia como un hecho real (indicativo) o como una situación no real (subjuntivo), y dentro de los tiempos del subjuntivo, como un evento posible (presente y perfecto) o como un supuesto irreal (imperfecto y pluscuamperfecto). Estos tres significados, real, potencial e irreal, de los dos modos verbales indicativo y subjuntivo, no deben confundirse con las modalidades de la frase, aseverativa, interrogativa e impresivo-expresiva, puesto que lo que se produce en el habla es una combinación de estos dos planos lingüísticos [NGL, § 314]. A la luz de este esquema de las formas modales como real o indicativo, potencial e irreal, repárese en el significado de las siguientes frases: REAL (indicativo): nostri vicerunt los nuestros vencieron. nostri vicerant los nuestros habían vencido. nostri vincent los nuestros vencerán. POTENCIAL (subjuntivo presente, perfecto): utinam nostri vincant ojalá venzan los nuestros. utinam nostri vicerint ojalá los nuestros hayan vencido. IRREAL (subjuntivo imperfecto, pluscuamperfecto): utinam nostri vincerent ojalá los nuestros vencieran. utinam nostri vicissent ojalá los nuestros hubiesen vencido. No debe ser obstáculo para captar el significado de los modos el hecho de que estas frases en subjuntivo se formulen en la modalidad expresiva, mediante el adverbio desiderativo utĭnam; lo que se pretende destacar aquí es el grado de realización de la acción que enuncian. En las ORACIONES SUBORDINADAS no opera la modalidad de la frase. Las subordinadas introducidas por los relativos o por conjunciones han de llevar su verbo en indicativo o en subjuntivo. Hay oraciones subordinadas que llevan el verbo siempre en subjuntivo: - Sustantivas con las conjunciones ut, ne, quin, quominus. - Sustantivas interrogativas indirectas [NGL § 504-16]. 1 - Adverbiales consecutivas (ut, ut non [GLC § 23.3). - Adverbiales finales (ut, ne, quo [NGL § 480]. - En el estilo indirecto, todas las subordinadas introducidas por los relativos o por conjunciones, además de las principales de modalidad impresiva [NGL § 554]. En las otras proposiciones subordinadas que pueden llevar su verbo en ambos modos, el uso del subjuntivo puede explicarse ya por el empleo de conjunciones específicas, ya por el significado potencial o irreal del propio subjuntivo, que, en tales usos, añade otro matiz de subordinación al que inicialmente posee la conjunción o el relativo [GLC § 33.2]. Estas subordinadas acrecentadas por el subjuntivo son: - causales, con subjuntivo si la causa es hipotética [GLC § 23.4]. - comparativas hipotéticas con quasi y tamquam como si. - concesivas con quamvis, licet y cum aunque. - condicionales potenciales e irreales, con si, nisi. - temporales con idea de finalidad o intención, priusquam, antequam antes que, dum hasta que [GLC § 22.5, NGL §§ 500-1]. - temporal-causal con el llamado cum histórico (imperf. o plusc. de subj.). - relativas de valor final, consecutivo, causal, condicional o concesivo [NGL §§ 378-87]. - relativas de matiz de de indeterminación [SL II § 238.d] Los modos en el estilo indirecto Mediante el llamado estilo indirecto latino se subordina un discurso más o menos extenso a un término declarativo precedente, que puede estar formulado por verbo de lengua o pensamiento, o bien por algún sustantivo afín. Las marcas que distinguen esta figura sintáctica (oratio oblicua) son: 1) las completivas de infinitivo con S en acc. como oraciones principales que dependen de ese término declarativo implícito o expreso; 2) la ausencia de los modos imperativo e indicativo en todo el párrafo de estilo indirecto. Clases de oraciones Oratio recta I. Independiente o principal: 1. Aseverativas: Indicativo o Subj. (Pot. Irr.) 2. Interrogativas: Ind. o Subj. (Pot. Irr.) 3. Expresivo-impresivas: Imperativo o Subj. (Pot. Irr.) II. Subordinadas: 1. Con elementos subordinantes (relativo, conjunción). Ind. o Subj. 2. Con formas no personales Infinitivo (otras formas nominales) Estilo indirecto Infinitivo Inf. o Subj.(*) Subjuntivo Subjuntivo Infinitivo (= ) (*) En las oraciones principales de modalidad interrogativa hay tendencia a emplear el infinitivo en las preguntas retóricas, cuyas respuestas se dan por sabidas, y por tanto equivaldrían por su significado a la modalidad aseverativa, y subjuntivo, cuando la pregunta es real. Sobre las transposiciones temporales, pronominales, adjetivales y adverbiales entre el discurso literal y el indirecto, cf. ISEL, p. 266. jsolis@us.es 2