Colegio Eskibel Geografía 2º Bachillerato Ejercicios para practicar y soluciones Ejercicio nº 2.Localiza en el mapa los rebordes montañosos de la Meseta. Ejercicio nº 3.Desarrolla el tema: las grandes etapas de la evolución del relieve peninsular. Esquema: 1. La era arcaica o Precámbrico 2. La era primaria o Paleozoico 3. La era secundaria o Mesozoico 4. La era terciaria 5. La era cuaternaria Ejercicio nº 4.A partir del mapa del roquedo peninsular que se reproduce a continuación, responde a las siguientes cuestiones: Colegio Eskibel Geografía 2º Bachillerato Ejercicios para practicar y soluciones a) Describe los ámbitos geográficos, con expresión del nombre de las regiones que ocupan cada uno de los terrenos reflejados en el mapa. b) Explica las relaciones básicas que existen entre este mapa y el relieve de la Península Ibérica. c) Indica sobre qué tipo de terreno se asientan las siguientes ciudades españolas: Lugo, Zaragoza, Ciudad Real, Valladolid y Salamanca. Colegio Eskibel Geografía 2º Bachillerato Ejercicios para practicar y soluciones Solución nº 2.- Solución nº 3.Desarrollo del tema: El relieve actual de la Península es el resultado de una historia geológica de millones de años en la que han alternado fases orogénicas con otras de calma, en las que ha predominado la erosión y la sedimentación. 1. Era arcaica o Precámbrico Durante la era arcaica o Precámbrico (4 000-600 millones de años) emergió del mar una banda arqueada de noroeste a sureste, formada por pizarras y neis, que comprendía casi toda la actual Galicia. También surgieron elevaciones en algunos puntos aislados del Sistema Central y de los Montes de Toledo. Este macizo precámbrico fue arrasado posteriormente por la erosión y cubierto casi en su totalidad por los mares paleozoicos. 2. Era primaria o Paleozoico En la era primaria o Paleozoico (600-225 millones de años) tuvo lugar la orogénesis Colegio Eskibel Geografía 2º Bachillerato Ejercicios para practicar y soluciones herciniana. De los mares que cubrían la mayor parte de la Península surgieron las cordilleras hercinianas, formadas por materiales como granito, pizarra y cuarcita. Al oeste se elevó el Macizo Hespérico, arrasado por la erosión durante la misma era primaria y convertido en meseta inclinada hacia el Mediterráneo. Al noreste aparecieron los macizos de Aquitania, Catalano-Balear y del Ebro, este último separado del Macizo Hespérico por un surco marino. Por último, al sureste, surgió el Macizo Bético-Rifeño. 3. Era secundaria o Mesozoico La era secundaria o Mesozoico (225-68 millones de años) fue un período de calma en el que predominaron la erosión y la sedimentación y se desarrollaron los siguientes fenómenos: Continuó el arrasamiento de las cordilleras hercinianas. La inclinación de la Meseta hacia el Mediterráneo permitió, en los períodos de transgresión marina, una profunda penetración del mar, que depositó en su borde este una cobertera no muy potente de materiales sedimentarios plásticos (caliza, arenisca, marga). También se depositaron enormes espesores de sedimentos en fosas marinas situadas en las actuales zonas pirenaica y bética. 4. Era terciaria Durante la era terciaria (68-1,7 millones de años) se produjo la orogénesis alpina. Sus resultados fueron los siguientes: a) Se levantaron las cordilleras alpinas, al plegarse los materiales depositados en las fosas pirenaica y bética entre los macizos antiguos, que actuaron como topes. Los Pirineos surgieron entre los macizos de Aquitania, Hespérico y del Ebro (que acabó hundiéndose), y las cordilleras Béticas, entre el macizo Bético-Rifeño y el Hespérico. b) Se formaron las depresiones prealpinas paralelamente a las nuevas cordilleras, y entre estas y el macizo antiguo: la depresión del Ebro, paralela a los Pirineos, y la del Guadalquivir, paralela a las Béticas. c) La Meseta también se vio afectada por la orogénesis alpina: Pasó a inclinarse hacia el Atlántico, determinando la orientación hacia este océano de buena parte de los ríos peninsulares. Se formaron los rebordes montañosos de la Meseta. En su borde oriental se plegaron los materiales plásticos depositados por el mar en la era secundaria, originando la parte oriental de la cordillera Cantábrica y el Sistema Ibérico. En el borde sur de la Meseta, el empuje de las cordilleras Béticas levantó Sierra Morena. Por último, el zócalo de la Meseta, formado por materiales paleozoicos rígidos, experimentó fracturas y fallas. Estas últimas dieron lugar a la llamada estructura germánica, constituida por bloques levantados o rejuvenecidos (horst) y bloques hundidos (fosas tectónicas o graben). Los bloques levantados formaron el Macizo Galaico y las sierras interiores de la Meseta (Sistema Central y Montes de Toledo), y los hundidos crearon las depresiones interiores o cuencas sedimentarias de la Meseta (las de las submesetas norte y sur). Las fallas también dieron lugar a actividad volcánica en zonas como el Campo de Calatrava, Olot-Ampurdán y el cabo de Gata. A partir de la orogénesis alpina se estableció la red fluvial. Los ríos erosionaron fuertemente las cordilleras, crearon rañas (acumulaciones de cantos a los pies de las montañas) y Colegio Eskibel Geografía 2º Bachillerato Ejercicios para practicar y soluciones colmataron las depresiones interiores y exteriores de la Meseta, que actualmente son zonas prácticamente llanas. 5. Era cuaternaria Durante la era cuaternaria (1,7 millones hasta la actualidad) los fenómenos más destacados fueron el glaciarismo y la formación de terrazas fluviales. a) El glaciarismo afectó a las cordilleras más altas (Pirineos, cordillera Cantábrica, Sistema Central, Sistema Ibérico y Sierra Nevada), dando lugar a glaciares de circo y de valle. Los glaciares de circo se reducen a la cabecera del valle (circo). El hielo y deshielo rompen las rocas de las paredes del circo, de modo que este se hace cada vez mayor y sus formas se escarpan. En la Península, por su latitud, la mayor parte de los glaciares fueron de circo y cuando se fundieron los hielos dieron lugar a pequeños lagos. En la cordillera Cantábrica las lenguas glaciares son cortas. En los sistemas Central e Ibérico, por su menor altura, y en las cordilleras Béticas, por su situación meridional, solo hubo glaciares de circo en las cimas más elevadas. Los glaciares de valle se forman cuando el espesor de hielo acumulado en el circo es grande. Entonces el hielo de las capas inferiores se desplaza fuera del circo y se desparrama valle abajo. El hielo contiene fragmentos rocosos que excavan el valle, dándole la típica forma de "U". También sobreexcavan pequeñas cubetas que, al fundirse el hielo, se convierten en lagos. En la Península solo los Pirineos se vieron cubiertos por una potente capa de hielo, de la que partían hacia el sur diez grandes glaciares, que crearon valles en "U" y lagos. b) La época posglaciar se caracterizó por la formación de terrazas fluviales, antiguos llanos de inundación abandonados por el posterior encajamiento fluvial. Las terrazas son fruto de las alternancias climáticas durante el Cuaternario: en los períodos glaciales, al encontrarse el agua helada en las montañas, los ríos perdieron fuerza erosiva y depositaron aluviones en su cauce. En los períodos posglaciales, al aumentar la temperatura y fundirse el hielo, crecieron el caudal y la fuerza erosiva de los ríos, de modo que ahondaron su cauce y dejaron suspendidos a los lados los aluviones acumulados anteriormente, constituyéndose así las terrazas. Los sucesivos ciclos glaciales y posglaciales del Cuaternario dieron lugar a terrazas escalonadas. En la Península las más características son las formadas por el Duero, el Tajo, el Guadiana, el Guadalquivir y el Ebro. Solución nº 4.a) Los terrenos silíceos ocupan mayoritariamente el oeste peninsular (Galicia, la parte occidental de las provincias castellano leonesas de León, Zamora y Salamanca, la mayor parte de Extremadura y la provincia andaluza de Huelva), la parte occidental de la cordillera Cantábrica (Asturias), el Sistema Central (provincicas castellano leonesas de Ávila y Segovia y norte de la Comunidad de Madrid), Montes de Toledo (mayoritariamente en esta provincia de Castilla La-Mancha), Sierra Morena (provincias andaluzas de Sevilla y Córdoba), sectores de la Penibética (que afectan a todas las provincias del litroral mediterráneo andaluz), sectores del norte de la cordillera Costero-Catalana (provincias catalanas de Girona y Barcelona), el Pirineo axial (en el norte de Navarra, Aragón y Cataluña) y en el norte y centro del Sistema Ibérico (en la provincia castellano leonesa de Colegio Eskibel Geografía 2º Bachillerato Ejercicios para practicar y soluciones Soria y en el centro de Aragón). Los terrenos calizos forman una "Z" invertida que se extiende por los prepirineos catalanes, aragoneses y navarros; los Montes Vascos; el sector oriental de la cordillera Cantábrica (Cantabria); el Sistema Ibérico (que comprende porciones de las comunidades de Castilla y León -Soria-, de Aragón, Castilla La-Mancha -Cuenca, Guadalajara, Albacete- y Comunidad Valenciana -Castellón-), gran parte de la cordillera CosteroCatalana; la cordillera Subbética (Andalucía prelitoral y Murcia) y las sierras Tramuntana y de Levante de Mallorca, en las Islas Baleares. Los terrenos arcillosos ocupan la submeseta norte (parte de Castilla y León), la submeseta sur (parte de Madrid y de Castilla La-Mancha), la depresión del Ebro (parte de La Rioja, Aragón y Cataluña a ambos lados del Ebro) y la depresión del Guadalquivir, en Andalucía. b) El roquedo peninsular guarda una estrecha relación con el relieve, pues en cada tipo de roca, según sus propiedades, se modelan distintos tipos de relieve. En los terrenos silíceos, predomina el granito, que da lugar a arenas pardoamarillentas cuando es alterado por el agua, y en otros casos, a diversas formas creadas a partir de la red de diaclasas: canchales o acumulaciones de rocas rotas por la acción del hielo al pie de las montañas más elevadas; formas suavemente onduladas cuando su alteración se produce a partir de diaclasas paralelas a la superficie; y bolas, tores y caos graníticos, cuando se produce a partir de diaclasas perpendiculares. En los terrenos calizos, la disolución de la caliza por el agua da lugar al relieve cárstico, con lapiaces, dolinas, gargantas, poljés, cuevas y simas. En los terrenos arcillosos, se forma un relieve horizontal, que evoluciona pronto hacia colinas suavemente onduladas o hacia cárcavas y badllands en las zonas en las que alternan largos períodos secos y calurosos con otros de lluvias torrenciales, cortas e intensas, como el sureste peninsular. c) Lugo se asienta sobre terreno silíceo; Zaragoza, Ciudad Real y Valladolid sobre terreno arcilloso, y Salamanca, sobre terreno silíceo.