VULVOVAGINITIS POR HONGOS LEVADURIFORMES EN POBLACIÓN DE MUJERES ADULTAS DE POSADAS-MISIONES Leticia Wimer; Miriam Chade; Beda Elizabeth Mereles; Viviana Villalba * Martha Medvedeff ; Celina Vedoya; Cecilia Villalva. Universidad Nacional de Misiones-Facultad de Ciencias Exactas, Químicas y Naturales Av. Mariano Moreno 1375 – Posadas, Misiones-e-mail: micologia @fceqyn.unam.edu.ar. *Laboratorio de Bateriología del Hospital Ramón Madariaga de la Ciudad de Posadas, Misiones. De los procesos infecciosos que ocurren en el tracto genital femenino, la vulvovaginitis es el más común, caracterizada por dolor vulvovaginal, prurito y ardor, una tríada de síntomas por los cuales las mujeres frecuentemente buscan ayuda médica. Estas manifestaciones a menudo se acompañan de flujo y disuria. Entre los procesos infecciosos se destacan los causados por Trichomonas vaginalis (vaginitis por parásitos), por hongos levaduriformes (vulvovaginitis candidiásica) y por bacterias (vaginosis bacteriana). La candidosis vulvovaginal es la segunda causa en orden de frecuencia de vulvovaginitis en la mujer adulta en edad fértil. La C. albicans, C. glabrata y otras especies forman parte de la flora del tracto genital femenino. Las estadísticas señalan que aproximadamente el 75% de las mujeres sufre al menos un episodio de candidiasis vulvovaginal durante el lapso que media entre la menarca y la menopausia. Se considera que la principal fuente de infección es endógena por colonización rectal y de la piel perineal. Es una infección estrógenodependiente, cuya frecuencia de presentación depende de múltiples factores: diabetes, tratamiento inmunosupresor, tratamiento antibiótico, estado inmunitario, hábitos de higiene, anticonceptivos orales, uso de ropa interior de fibras sintéticas, etc. El propósito de esta investigación fue identificar las especies de hongos levaduriformes asiladas en exudados vaginales, registrar los síntomas clínicos e identificar los factores predisponentes asociados a la infección. Durante un período de seis meses se atendieron a 360 mujeres adultas, sexualmente activas que asistieron al Laboratorio de Bateriología del Hospital Ramón Madariaga de la Ciudad de Posadas, Misiones. Los hongos levaduriformes aislados fueron derivados para su identificación al Laboratorio de Micología (FCEQYN). Los mismos fueron identificados presuntivamente mediante las pruebas de filamentación en suero, producción de clamidoconidias, micromorfología en medios líquidos (extracto de malta) y medio sólido (agar harina de maíz + tween 80 al 2%), test de trehalosa, y cultivos en Chrom agar Candida. Se encontró que del total de muestras procesadas en 89 pacientes (25%) desarrollaron hongos levaduriformes, el 35% correspondió a otras vulvovaginitis microbianas y el resto presentó biota microbiana normal. Las especies levaduriformes identificadas fueron: C. albicans (77%), C glabrata (12%), C. guillermondi y C. tropicalis (2.2%) y Sacharomices cereviciae (7%). Las manifestaciones clínicas resultaron ser diversas e inespecíficas, el prurito (39%) mostró ser el síntoma más característico; el embarazo (41%), y la actividad sexual frecuente (25%) resultaron los factores predisponentes mas hallados en dicho estudio. La vulvovaginitis producida por hongos levaduriformes es la segunda causa en frecuencia en la población estudiada. C. albicans es el principal agente involucrado, pero debido al porcentaje significativo hallado de otras especies, tales como C. glabrata, es menester realizar la identificación de especies puesto que éstas presentan resistencia a los antifúngicos azólicos comúnmente utilizados. Dada la inespecificidad de manifestaciones clínicas de esta infección, es necesario realizar el diagnóstico etiológico, como así también conocer los factores predisponentes, para establecer pautas terapéuticas y preventivas a seguir.