La facilitación del comercio aporta beneficios de desarrollo significativos Hakim Ben Hammouda, Asesor especial del Presidente, Banco Africano de Desarrollo Forum de Comercio Internacional No. 4/2013, diciembre 2013 A lo largo de los últimos años, la Ronda de Doha, lanzada en 2001, se ha ido haciendo menos ambiciosa. Para consternación de los PED, particularmente de los más desfavorecidos y en especial de los africanos, las importantes negociaciones sobre agricultura, comercio industrial, servicios y muchos otros temas esenciales de las negociaciones internacionales no pudieron ser finalizadas. Estos países esperaban que la conclusión de esta Ronda trajera consigo progresos significativos con respecto a los beneficios que podrían obtener y los cuales hicieron de ella una verdadera Ronda para el Desarrollo. Sin embargo, durante los últimos años, los países Miembros de la OMC han sido incapaces de superar todas las barreras y los obstáculos para llegar a la conclusión de la Ronda. Ahora, en vísperas de la Conferencia Ministerial de la OMC en Bali, estos países parecen estar listos para cambiar la situación en lo que se refiere a un asunto específico y crucial: la facilitación del comercio. Muchos han sido los que recientemente han alentado a los países Miembros a seguir avanzando y finalizar este acuerdo. Entre ellos, se encuentran presidentes de distintos bancos multilaterales para el desarrollo, quienes anunciaron esta misma petición durante su última reunión en Washington, D.C. Las razones que se esconden tras la movilización y defensa en pro de la conclusión de este acuerdo sobre facilitación del comercio en la próxima Conferencia Ministerial son numerosas y variadas. La simplificación y armonización de la normativa y los procedimientos relativos al comercio internacional, definición de la OMC para la facilitación del comercio, son esenciales por al menos dos razones. En primer lugar, una facilitación del comercio optimizada tiene efectos significativos sobre el comercio y el crecimiento mundial. De hecho, distintos estudios estiman que las pérdidas debidas a las ineficiencias de los procedimientos aduaneros corresponden al 5% del PIB. Asimismo, una reducción del 1% en los costes comerciales a nivel mundial podría aumentar los ingresos mundiales en $EE.UU. 40.000 millones. África en su conjunto y el comercio entre sus países también podrían beneficiarse de las mejoras relativas a la facilitación del comercio. En efecto, se cree que si se redujeran los tiempos de espera en la frontera en un 5%, el comercio intrarregional podría aumentar en un 10%. Además de este rápido crecimiento en materia de ingresos y comercio, la facilitación del comercio tiene importantes efectos sobre los PED a largo plazo. Actualmente, se considera que muchos de ellos deben dejar de centrarse en los productos básicos y alejarse del modelo de Estado rentista (donde el Estado obtiene todos, o prácticamente todos, sus ingresos de alquilar los recursos locales a clientes extranjeros) a través de una amplia transformación económica. Este asunto es uno de los puntos principales de las estrategias y los planes de desarrollo de numerosos países e instituciones multilaterales. El Banco Africano de Desarrollo (BAD) ha establecido la transformación estructural de las economías africanas y la transición hacia nuevos niveles de productividad como sus principales objetivos estratégicos para los próximos años. Se están debatiendo distintos caminos para lograr dicha transformación; en especial, la integración en las cadenas de valor mundiales. No obstante, el éxito de esta conexión dependerá de la rapidez de las mejoras en materia de facilitación del comercio que, a su vez, asegurarán que los PED sean capaces de entregar sus bienes y prestar servicios en el momento oportuno; ello favorecerá un funcionamiento fluido e ininterrumpido de las cadenas de valor mundiales. Estos elementos explican la importancia que el BAD ha otorgado a la expansión de las actividades de facilitación del comercio durante los últimos años. Entre estas actividades, se incluye el desarrollo de infraestructuras regionales en las que se han invertido $EE.UU. 12.000 millones en los últimos cinco años. Además, el BAD ha trabajado mucho para apoyar los esfuerzos de capacitación que los países africanos han estado realizando en pro de la facilitación del comercio. En pocas palabras, la facilitación del comercio es esencial para el desarrollo del comercio y el aumento de los ingresos en muchos países. Llegar a un acuerdo sobre esta cuestión podría impulsar el comercio y la cooperación internacional de forma significativa. Confiemos en que los países Miembros de la OMC escuchen estos diferentes llamamientos y alcancen un acuerdo sobre la facilitación del comercio durante la Conferencia Ministerial en Bali.