DIGEREM. SUBDIRECCIÓN GENERAL DE ORDENACIÓN Y POLÍTICA DE ENSEÑANZA ENSEÑANZA MILITAR 1. SITUACIÓN ACTUAL.La situación actual de la enseñaza en las Fuerzas Armadas es el resultado de una profunda reforma que se inicia con motivo de la entrada en vigor de la Ley 17/1989, reguladora del Régimen del Personal Militar Profesional, en la que se define un sistema de enseñanza militar integrado en el sistema educativo general, y por lo tanto, que viene a adoptar los parámetros que regulan la enseñanza en dicho sistema. Esta integración se traduce en dos grandes líneas. Por un lado, las equivalencias entre los estudios realizados por los cuerpos generales e infantería de marina, bien sea para el acceso a las escalas de oficiales, para la escala superior de oficiales o para el acceso a las escalas de suboficiales. Se establecen las siguientes equivalencias: • ENSEÑANZA EN LA ESCALAS DE SUBOFICIALES. – Equivalente a título de Técnico Superior de formación profesional. • ENSEÑANZA EN LA ESCALAS DE OFICIALES – Equivalente a Diplomado universitario, Arquitecto Técnico o Ingeniero Técnico. • ENSEÑANZA EN LAS ESCALAS DE OFICIALES ESCALA SUPERIOR. – Equivalente a Licenciado, Arquitecto o Ingeniero. Por otro lado, el sistema de enseñanza militar adopta los parámetros fundamentales del sistema educativo general. En el caso de las Escalas Superiores de Oficiales, el crédito de 10 horas lectivas como unidad de medida, las asignaturas troncales y optativas, el trabajo de fin de carrera, la carga global de 330 créditos, etc., todo ello definido en unas Directrices de los correspondientes planes de estudio. 2. NECESIDAD DEL CAMBIO.La Sociedad en cambio, que nos ha tocado vivir, ha supuesto el imperio de la globalización, proceso por el que cada vez más naciones están dependiendo de condiciones integradas de comunicación, financieras y de comercio. 1 DIGEREM. SUBDIRECCIÓN GENERAL DE ORDENACIÓN Y POLÍTICA DE ENSEÑANZA Es gracias a la globalización que se están eliminando las barreras geográficas y de distancia, y el fenómeno migratorio se ve acentuado. Con ayuda de las tecnologías de comunicación e información (TIC), un profesional del sur puede acceder a conocimientos y a oportunidades que tienen los del norte: conferencias, ponencias, artículos y cursos; así como a ofertas laborales, becas, grupos de investigación o colaboración, etc. Estas nuevas tecnologías que, conforman la sociedad de la información y el conocimiento, permiten establecer un contacto entre individuos, cara a cara, de modo que no hay necesidad de pasar por empresas, o mucho menos por el Estado, para acceder a ellas. Por otro lado, el fenómeno de la globalización no se limita al ámbito económico sino que afecta también, de forma decisiva y positiva, a la transmisión de los conocimientos y a la formación superior. Para facilitar la movilidad profesional y geográfica que impone el fenómeno de la globalización, se decidió la implantación en Europa del llamado proceso de Bolonia que lleva a diseños semejantes en la enseñanza superior europea y a unos criterios de transparencia y comparabilidad, de modo que en todo el llamado Espacio Europeo de Educación Superior (EEES) se pueda saber con bastante propiedad las capacidades que cada persona aporta en función de los estudios realizados. Dichos principios generales obligan a rediseñar el sistema educativo español en su nivel universitario, dando lugar a una reforma de gran calado para la Universidad española que se resume en lo siguiente: Adopción de un sistema de titulaciones europeas comparables. Adopción de los ciclos de Grado, Master y Doctorado. Orientación de la enseñanza hacia el aprendizaje del alumno. Flexibilización en las ofertas educativas (Planes de estudio) Establecimiento del sistema de créditos “ECTS” Promoción de la Calidad a nivel europeo (Evaluación). Formación a lo largo de toda la vida (LLL). Importancia de los idiomas. Como consecuencia, dicho proceso conduce, en todo caso, a una reforma de la Enseñanza de Formación de nuestros oficiales para ajustarla a los nuevos parámetros del sistema educativo general, proporcionando una formación con reconocimiento en todo el EEES. Al mismo tiempo, y para corregir la tendencia a la baja del número de aspirantes para ingresar en nuestros centros docentes militares de formación, que ha pasado de los casi 11 por plaza en el año 2000, a los 3 del 2008, se hace necesario un cambio de rumbo para conseguir un modelo que sea más competitivo y más atractivo. 2 DIGEREM. SUBDIRECCIÓN GENERAL DE ORDENACIÓN Y POLÍTICA DE ENSEÑANZA Así mismo, no podemos obviar los modelos que imperan en los países de nuestro entorno para poder facilitar los intercambios de alumnos (Erasmus Militar), a los que ya se ha comprometido nuestro Gobierno en las últimas reuniones de Ministros de Defensa y aprobado por el Consejo de Europa el pasado mes de noviembre. 3. LA FUTURA ENSEÑANZA DE OFICIALES (Cuerpos Generales e Infantería de Marina).Las futuras escalas de oficiales de los diferentes Cuerpos Generales y de Infantería de Marina, serán únicas en cada cuerpo y se accederá a ellas con una titulación universitaria de grado, además de la necesaria formación militar. Las líneas directrices de la reforma se pueden resumir en las siguientes: • • • • Se proporcionan en el mismo tiempo “dos titulaciones” una Militar y una de Grado. Se suprime el sistema de concurso oposición para el acceso. El fracaso escolar y cualquier otro tipo de baja en el proceso formativo es asumido con el incremento de ingreso produciéndose la selección final de forma natural durante los años de formación o mediante mecanismos reguladores que se podrán aplicar a determinados cursos que permitirán seleccionar a los mejores. Se proporciona estudios acreditados (asignaturas) a aquellos que no se seleccionen y no culminen la carrera militar. En todo caso, es importante decir que la formación de los futuros oficiales, en sus aspectos morales y de interiorización de los códigos de valores y forma de ser del militar, está garantizada, ya que los alumnos, desde el primer día que ingresen, serán militares y permanecerán el mismo tiempo, en las mismas academias y con el mismo régimen de vida que en la actualidad. Esto se debe traducir en la adquisición de un conjunto de competencias que conforman el perfil de egreso requerido. Se está en los campos del saber ser y también del saber hacer. El conocimiento de determinadas materias y contenidos (saber) es, por otra parte, imprescindible para poder lograr las competencias necesarias para el ejercicio profesional. La definición de los perfiles de egreso de los futuros oficiales expresado en competencias, es responsabilidad de los respectivos Jefes de los Ejércitos y Armada. Dichos perfiles se deberán obtener gracias a las ya mencionadas competencias que son aportadas por los planes de estudios integrados. 3 DIGEREM. SUBDIRECCIÓN GENERAL DE ORDENACIÓN Y POLÍTICA DE ENSEÑANZA En todo caso, se valorará el esfuerzo que debe realizar el alumno, para que éste no supere la carga de trabajo considerada en el diseño de los planes de estudios integrados en cada curso escolar. La síntesis del modelo se puede expresar de la siguiente forma: • • • • • • • ¿Qué? ¿Dónde? ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Quién? ¿A quién? ¿Para qué? Materias militares y universitarias. En las Academias militares y Centros Universitarios. Integrando planes de estudios. Durante 5 años. Profesores militares y universitarios. Alumnos militares / régimen militar. Capacitación como oficiales y título universitario. Un elemento novedoso y esencial del nuevo modelo definido en el proceso de Bolonia, es que la enseñanza se basa en el aprendizaje. La enseñanza se articula alrededor del alumno y éste recibe información y conocimientos a través de diferentes canales: el profesor en su clase magistral, de la interacción con otros alumnos en los grupos de trabajo, recopilando y organizando información recibida por Internet o trabajada en bibliotecas de nuevo concepto, de las prácticas y talleres, etc. En consecuencia el centro de gravedad de la enseñanza pasa del profesor al alumno, de la emisión de conocimientos a la recepción y trabajo sobre conocimientos, experiencias e información. El alumno es el eje del sistema de enseñanza, y se usa, como medida estándar, su esfuerzo. Dicho esfuerzo se cuantifica mediante el crédito europeo que tiene su fundamento en el sistema de transferencias de créditos europeo (ECTS). En este sentido, el sistema de enseñanza militar en las tres academias, está ya adaptado en gran medida a esta nueva concepción. Adoptar el crédito europeo de 25 horas de trabajo del alumno es fácil y básico para poder medir el esfuerzo general, tanto el aplicado a las materias y actividades específicamente militares, como a aquellas que conforman la titulación de grado a impartir. 4. LA INTEGRACIÓN DE PLANES DE ESTUDIO.Una cuestión clave, es analizar cómo se va a poder impartir una especie de “doble titulación”, con una duración, cada una, de 240 ECTS, previstos para las titulaciones de grado, en cinco años. La solución radica en la integración de los dos planes de estudio, de modo que exista un grupo de materias o asignaturas comunes a ambos planes y no superando la suma del conjunto el tope de los 380 ECTS para los cinco años. Esta última cifra supone que el alumno asume 76 ECTS anuales, 4 DIGEREM. SUBDIRECCIÓN GENERAL DE ORDENACIÓN Y POLÍTICA DE ENSEÑANZA distribuidos en 35 semanas. La carga anual de trabajo para un alumno universitario medio se cifra en 60 ECTS anuales. Los alumnos de las academias podrían afrontar este exceso de 16 créditos en virtud de su régimen de internado, la agrupación en clases pequeñas (de unos 40 alumnos) y la tutorización intensa por parte de los profesores. Estas 35 semanas se enmarcan, además, en un periodo más amplio de actividades académicas y de prácticas de 41 semanas. 5. OBJETIVOS DEL NUEVO MODELO.El nuevo modelo pretende: Reconocimiento y visibilidad, a nivel general, de la enseñanza impartida en las Fuerzas Armadas. Aumentar el abanico de jóvenes interesados en ser militares. Lograr que aquellos que “ingresen” como tanteo, para ver como es la profesión, deseen ser militares en un porcentaje elevado. Conseguir que los jóvenes vocacionales continúen deseando seguir la carrera militar. Para ello se ofrece: Una profesión ilusionante como oficial de las FAS. Una carrera en la que la formación en valores es diferencial. Un puesto fijo en la administración militar. Estudios universitarios gratuitos y cobrando un sueldo desde el primer día. Se suprime el sistema de concurso oposición para el acceso, tal y como se entiende actualmente. Una “doble titulación”. La selección se realiza de forma natural durante los primeros años de formación. Se proporcionan estudios acreditados (expediente universitario) a aquellos que no culminen la carrera militar. 6. ELEMENTOS QUE CONFIGURAN EL MODELO.Los elementos que configuran el sistema son: a) Las titulaciones y el perfil de egreso. Para determinar la titulación de grado a impartir en los centros universitarios de la defensa, conforme a lo establecido en el artículo 12 de la LCM, los Jefes de Estado Mayor de los Ejércitos y de la Armada definieron las capacidades y diseñaron los perfiles necesarios para el 5 DIGEREM. SUBDIRECCIÓN GENERAL DE ORDENACIÓN Y POLÍTICA DE ENSEÑANZA ejercicio profesional a los que debe atender la enseñanza. Partiendo de dichos perfiles se han determinado las titulaciones que mejor se adaptan a las necesidades de los oficiales de cada Ejército, de entre las inscritas en el Registro de Universidades, Centros y Títulos. En principio las titulaciones de grado que se impartirán en cada uno de los centros universitarios de la defensa serán para cada Ejército/Armada las siguientes: Ejército de Tierra: Ingeniería de Organización Industrial. Armada: Ingeniería Industrial, Rama Mecánica. Ejército del Aire: Ingeniería de Organización Industrial. Además, la cláusula primera de los convenios de adscripción firmados con las universidades responsables de proporcionar la titulación de grado, contempla que, en años sucesivos, podrán impartirse otras titulaciones de grado, posgrado y estudios de carácter no oficial que se implantarán de acuerdo con la legislación vigente en cada momento. b) Los alumnos. Pasan de ser sujeto “pasivo” del proceso de enseñanza, a ser el eje del proceso de aprendizaje. Los alumnos de los centros se matricularán en las universidades de adscripción, exigiéndose para su ingreso que cumplan los requisitos legales que prevean las disposiciones vigentes para el acceso a la universidad y los que resulten del desarrollo normativo de los artículos 56 y 57 de la Ley de la carrera militar. c) Los profesores. Los profesores que impartirán las diferentes materias y asignaturas serán tanto militares como civiles. Aquellos que deban impartir materias y asignaturas correspondientes a la titulación de grado, deberán cumplir los requisitos de titulación académica y acreditación que establezca la legislación vigente. Aquellos que no pertenezcan al profesorado universitario deberán contar con la Venia Docendi de la universidad de adscripción, otorgada por su Rector, para la materia o materias y disciplinas a su cargo. Los centros tendrán la plantilla necesaria para asegurar la calidad del título de grado a impartir, de los que el 50 % serán doctores, de acuerdo con lo establecido en el artículo 72.2 de la LOU y al menos un 60% serán a tiempo completo, debiendo cumplir la ratio profesor/alumno que 6 DIGEREM. SUBDIRECCIÓN GENERAL DE ORDENACIÓN Y POLÍTICA DE ENSEÑANZA garantice cumplir los índices de calidad establecidos en la legislación vigente. Conforme se vayan incorporando titulaciones el número de personal docente aumentará para mantener los índices de calidad. En el proceso de implantación progresiva de los centros se prevé la contratación del Director del Centro y de su equipo de dirección (Subdirector, Profesor Secretario y Gerente) en el año 2009. A principios del año 2010 se prevé contratar al menos al 50% del número total de profesores que se estima idóneo para impartir la titulación elegida. Entre estos profesores figurarán los responsables de las Áreas Departamentales en que se organiza la enseñanza en los centros. d) Los centros. La pregunta es, ¿dónde se van a impartir las materias del grado o los grados que se elijan? Se ha optado por el modelo de un sistema de centros que, mediante su adscripción a universidades públicas, estarán en condiciones de impartir docencia y de obtener titulaciones de grado para sus alumnos. La adscripción es una figura que se recoge en la Ley Orgánica de Universidades y sirve para impartir formación universitaria al amparo de la universidad de adscripción y obtener títulos con el mismo valor que los obtenidos en los centros propios de la universidad. La titularidad de los centros corresponde al Ministerio de Defensa a través de la Subsecretaría de Defensa. Cada centro será administrado por un Patronato cuya composición y funciones se establecerán en los respectivos convenios de adscripción. Para facilitar el aprovechamiento del tiempo de que dispone el alumno, que es crítico y es lo que se mide mediante el sistema de créditos europeos, se decidió ubicar dichos centros en las Academias Generales y en la Escuela Naval. Estos centros docentes militares, ya clásicos y de alto prestigio profesional, dependen de los respectivos Ejércitos y Armada. La ubicación de unos centros, con personalidad jurídica propia y con dirección y financiación independiente, en el espacio responsabilidad de las academias, genera diferentes necesidades de coordinación, en especial sobre la gestión de los créditos atribuidos a cada centro y, sobre todo, en la gestión del tiempo en que los alumnos deben recibir la docencia. Los centros universitarios de la defensa se regirán por la Ley Orgánica 6/2001, de 21 de diciembre, de Universidades, modificada por la Ley Orgánica 4/2007, de 12 de abril, por la Ley 39/2007, de 19 de noviembre, de la carrera militar, por la legislación autonómica 7 DIGEREM. SUBDIRECCIÓN GENERAL DE ORDENACIÓN Y POLÍTICA DE ENSEÑANZA correspondiente, por la normativa propia de cada universidad, por los convenios de adscripción y por sus normas internas de organización y funcionamiento. Cuando culmine el proceso de adscripción de los centros, éstos tendrán naturaleza de centro universitario público, adscrito a la universidad correspondiente, con la denominación de centro universitario de la defensa. La adscripción de cada centro comporta, en todo caso: Fijar la titulación o titulaciones universitarias oficiales de grado y postgrado a obtener en el centro, en función de las necesidades de la defensa nacional y las exigencias del ejercicio profesional en las Fuerzas Armadas. Establecer el sistema de gestión económico-administrativa del centro, conforme a la legislación y normativa aplicable a cada universidad. Los centros universitarios de la defensa dispondrán de presupuesto propio financiado con cargo al capítulo 4, Transferencias Corrientes, y al capítulo 7, Transferencias de Capital, del presupuesto del Ministerio de Defensa y, dado su carácter de centro universitario, gozarán de autonomía económica y financiera. Asimismo se financiarán con las subvenciones que, conforme a la legislación vigente, se les puedan otorgar, los remanentes de tesorería y cualesquiera otros ingresos percibidos en el ejercicio de sus actividades. El Director es el órgano de contratación del centro y está facultado para suscribir en su nombre y representación, de acuerdo con la legislación y normativa vigente en la universidad de adscripción, los contratos en que el centro intervenga, sin perjuicio de la autorización del Patronato. De la gestión económico-financiera deberá rendirse cuentas, con carácter anual, al Patronato quien, en todo caso, deberá aprobar las referidas cuentas, pudiendo, si así lo estima conveniente, establecerse un control financiero posterior. 7. EL INGRESO Y PERMANENCIA EN LOS CENTROS DOCENTES. El ingreso en las academias y en los centros universitarios de la defensa se llevará a cabo simultáneamente. Los requisitos para el ingreso serán los generales para el ingreso en la universidad establecidos en el Real Decreto 1892/2008, de 14 de noviembre, por el que se regulan las condiciones de acceso a las enseñanzas universitarias oficiales de grado y los 8 DIGEREM. SUBDIRECCIÓN GENERAL DE ORDENACIÓN Y POLÍTICA DE ENSEÑANZA procedimientos de admisión a las universidades públicas españolas. A estos habrá que añadir aquellas pruebas que se consideren precisas para poder desarrollar con garantías de salud y seguridad los estudios de la carrera militar. Dichas pruebas (todas ellas Si/No) serán básicamente: • • • Un reconocimiento médico, que nos asegure que el alumno está en condiciones de desarrollar las actividades propias de la vida militar. Unas pruebas físicas que aseguren una condición física mínima. Unas pruebas psicotécnicas de personalidad. El ingreso será directo, sin ningún tipo de oposición particular. La adjudicación de plazas se realizará en función de la nota de admisión a las enseñanzas universitarias obtenida por el estudiante conforme a lo dispuesto en el artículo 14 del Real Decreto 1892/2008, de 14 de noviembre, teniendo en cuenta que en cualquier caso, tendrán opción preferente, en caso de empate, los estudiantes cuyo cuarto ejercicio, de la fase general, corresponda a una materia vinculada a la rama de conocimiento de la enseñanza a la que se solicita acceder. NOTA DE ADMISIÓN = 0.6xNMB + 0,4xCFG + axM1 + bxM2+ SM NMB = Nota Media Bachiller. CFG = Calificación Fase General. M1, M2 = Las dos mejores calificaciones de las materias de la Fase Específica. a y b = parámetros de ponderación de las materias de la fase específica. Estos parámetros tendrán un valor de 0,1, el Subsecretario de Defensa podrá elevar su valor hasta 0,2 en aquellas materias que considere más idóneas para seguir con éxito las enseñanzas correspondientes al titulo oficial de grado a impartir en los centros universitarios de la defensa. SM = Valoración años de servicio en las FAS (acceso directo < 0,5) El plan de estudios integrado estará desarrollado a lo largo de cinco (5) cursos escolares. Los alumnos deberán cumplir unas normas de permanencia y progreso para poder ir realizando sus estudios, asumiendo que sólo un determinado porcentaje lograrán cursar dicho plan en el tiempo previsto. Por este motivo, el número de ingresados será mayor que las plazas de la oferta de empleo público para el acceso a las respectivas escalas, en el porcentaje necesario para poder absorber el fracaso escolar estimado de un plan de estudios exigente, los cambios de parecer de los alumnos ante las condiciones de la vida militar y el resto de las bajas por motivos disciplinarios que se puedan producir. Inicialmente se piensa que cuando el 9 DIGEREM. SUBDIRECCIÓN GENERAL DE ORDENACIÓN Y POLÍTICA DE ENSEÑANZA sistema esté estabilizado (a partir del 4º año desde su implantación) el porcentaje de ingresados puede no ser superior a un 150% del número de plazas de egreso. Finalizados los planes de estudio, los futuros oficiales recibirán su despacho de teniente o alférez de navío y el título de grado correspondiente de la universidad de adscripción. Es condición “sine qua non” obtener el título de grado para acceder a la escala de oficiales, así como haber superado la formación militar, general y específica y de especialidad fundamental. 8. ENSEÑANZA DE SUBOFICIALES. Para dar cumplimiento a lo establecido por la Ley, la formación de los suboficiales reportará, junto con la obtención del empleo militar correspondiente y el ingreso en su respectiva escala, haber obtenido un título “Técnico Superior” de formación profesional. Al igual que sucede con los procesos formativos de oficiales, en el caso de los suboficiales deben ser establecidos los currículos de las distintas titulaciones de formación profesional y, especialmente, aquellas que son de interés para las Fuerzas Armadas. En esta línea se está trabajando, integrando igualmente la formación militar general y especifica correspondiente. En este proceso, se ha establecido un periodo formativo que no debe superar, en ninguno de los casos, los tres años, procurando reducirse al máximo, dependiendo de la configuración de los títulos. Esta parte inicial de la formación de suboficiales se desarrollará en los centros que determinen los Ejércitos/Armada, para los cuales se tendrá que solicitar la correspondiente autorización del Ministerio de Educación y Ciencia, así como su adscripción a centros públicos del citado Ministerio. 9. ENSEÑANZA DE TROPA Y MARINERÍA. La tropa y marinería tendrá que superar un proceso, a lo largo de su permanencia en las Fuerzas Armadas, que estará dirigido para posibilitarles la obtención del título de técnico de formación profesional de grado medio. Este objetivo, tal y como establece la Ley, se alcanzará de forma progresiva y como consecuencia de la integración de enseñanzas teóricas y de la experiencia en el servicio. Madrid 9 de julio de 2009 10