Desarrollo sustentable: asumir el compromiso Se puede escribir ampliamente sobre las diversas definiciones y expresiones de deseo vinculadas con el “uso de los sistemas ecológicos de una manera que satisfaga las necesidades actuales sin comprometer la satisfacción de las necesidades ni las opciones de las generaciones venideras”. El concepto de desarrollo sostenible sobrepasa la sencilla actitud proteccionista de los recursos y la naturaleza en su conjunto, constituyendo un motor dinámico de organización y gestión mediante el uso moderado y eficaz de los recursos, con la puesta en práctica de aquellos dispositivos que generen nuevos recursos, de tal manera que deben quedar en cantidad y calidad suficiente como para permitir un aprovechamiento similar para generaciones posteriores. En tal sentido, se expresan dos ideas muy claras: el uso racional de los recursos naturales y la protección del ecosistema mundial en las figuras de los ciudadanos, mediante el respeto al medio y cambio de hábitos, a través de la ciencia, incorporando sus conocimientos y soluciones; y, a partir de los poderes públicos, mediante la generación de un marco normativo adecuado y aplicación de la legislación junto con la cooperación a nivel regional. En la CUMBRE DE LA TIERRA DE RÍO, realizada en Río de Janeiro, Brasil, en el año 1992, se aprobaron tres grandes acuerdos que habrían de regir la labor futura: el Programa 21, un plan de acción mundial para promover el Desarrollo Sostenible; la Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, un conjunto de principios en los que se definían los derechos civiles y obligaciones de los Estados; y, una Declaración de principios relativos a los bosques. Se abrieron a la firma además dos instrumentos con fuerza jurídica obligatoria: la Convención Marco sobre el Cambio Climático y el Convenio sobre la Diversidad Biológica, iniciando, también negociaciones con miras a una Convención de lucha contra la desertificación. Diez años más tarde, la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Sostenible en Johannesburgo, Sudáfrica, tuvo el objetivo principal de renovar el compromiso político asumido durante la Cumbre de Río con el futuro del planeta mediante la ejecución de diversos programas que se ajustaban a lo que se conoce como "Desarrollo Sostenible". Ante la pobreza creciente y el aumento de la degradación ambiental, la Cumbre ha tenido éxito en establecer y crear, con urgencia, compromisos y asociaciones dirigidas a la acción, para alcanzar resultados mensurables en el corto plazo. Nos encontramos actualmente en una etapa en la que debemos tomar parte activa de acuerdo a nuestro rol dentro de la sociedad. En este sentido, podemos considerar que se han producido durante las últimas décadas importantes avances en diversas materias. El conocimiento científico y los desarrollos tecnológicos alcanzados han posibilitado la obtención de significativos logros en cuestiones tales como el diagnóstico ambiental, la prevención y detección de la contaminación, la protección de especies y de ecosistemas, el saneamiento de cursos de agua y suelo en sitios contaminados. Estos logros han permitido mejorar las condiciones de vida de muchas personas y, en algún punto, actúan como equilibrio de los deterioros ambientales provocados en otras regiones y ámbitos. Al respecto, un avance en línea con el Desarrollo Sustentable sería entonces lograr que ese conocimiento y sus tecnologías derivadas estén disponibles y al alcance de todos los pueblos y naciones de nuestro planeta. Más allá de los avances señalados es evidente que se deberán resolver cuestiones fundamentales a la hora de buscar soluciones a problemas actuales, como lo son la inequidad existente en el acceso a los recursos naturales, culturales, económicos y tecnológicos, entre otros, cuyo grado de disponibilidad actúa como factor condicionante de la calidad de vida de las personas; así como la ausencia de una adecuada administración de los recursos a escala global. La decisión de cada uno de nosotros, como parte integrante, de asumir definitivamente un compromiso en este sentido permitirá el logro del tan preciado Desarrollo Sustentable tal como su concepción original lo define, con el objetivo de lograr un adecuado nivel de crecimiento, tecnificación, industrialización y urbanización, o aceleración de los ritmos. Desde INPECTORATE de Argentina se ha asumido la responsabilidad mediante la creación de un grupo de trabajo orientado a prestar servicios de Consultoría Ambiental, y la instalación de un laboratorio de Medio Ambiente, con instrumental de última generación necesario para realizar determinaciones en los diversos componentes del medio, aire, agua y suelos, diagnósticos ambientales y el establecimiento de medidas para solucionarlos. Lic. Sebastián José Sgoifo Geólogo / Geoquímica, M&M and Environmental Advisor Inspectorate Bibliografía: Calvelo, J.M. 1998. Aproximaciones a la Definición de Desarrollo Sustentable. www.geocities.com/Athens/Delphi/8644/tres.htm - Urribarri, Guillermo F. Del Informe Bruntland a la Cumbre de Johannesburgo 2002. www.ambiente-ecologico.com/ediciones/2004/088_01.2004/088_Columnistas_GuillermoUrribarri.php3 - Coppa Raúl. Carpeta Técnica, Medio Ambiente Nº 8, Octubre 2007. EEA INTA Esquel.