Orquideando El método cubo de hielo ¿es realmente tan efectivo como parece? En este pequeño artículo quería hablaros sobre una práctica que se utiliza para hidratar a las orquídeas de una forma fácil y cómoda. El método cubo de hielo consiste en depositar tres o cuatro cubitos de hielo encima del sustrato y esperar a que se derritan, de esta manera se pretende hidratar a la orquídea con la cantidad justa de agua. Esta práctica está muy extendida entre aquellos que empiezan a adentrase en el fabuloso mundo de las orquídeas, pero que en mi opinión, puede resultar ser extremadamente perjudicial para ellas. Veamos el por qué: En primer lugar, las orquídeas Phalaenopsis son originarias de climas cálidos, por lo que el agua derretida del hielo podría provocar que la planta llegara a estresarse por la baja temperatura del agua o bien, que el hielo en contacto con las raíces que sobresalen de la maceta (también conocidas como raíces aéreas) sufrieran daños irreparables y en algunos casos, hasta enfermedades. En segundo lugar, si exponemos a nuestra orquídea a temperaturas ambientales más frías se induce la floración. El hielo puede confundir a la planta y causar repetidas floraciones forzadas, lo que también contribuiría a estresarla aún más y a ralentizar su correcto desarrollo dado que su energía se invierte en dar las flores. Finalmente, les invito a que comprueben qué cantidad de agua son tres o cuatro cubitos de hielo (los que caben encima del sustrato) depositándolos en un recipiente y esperando a que se derritan. Apliquen el sentido común, ¿creen que la cantidad de agua que proporcionan tres o cuatro cubitos de hielo a la semana es suficiente para hidratar a una orquídea de tamaño medio? Personalmente creo que no, aunque también dependerá de la luz, temperatura y humedad a la que esté sometida la orquídea. Hay que añadir que en el caso de que la cantidad de agua sea insuficiente, la orquídea no se desarrollará correctamente y acabarán apareciendo pequeñas arrugas en las hojas y estas perderán su rigidez. Además, la planta no tendrá la oportunidad de eliminar completamente los depósitos de sales y toxinas acumuladas en el interior de la maceta, así como los restos de fertilizante mediante el drenaje de la maceta dado que el agua que le proporcionamos es insuficiente, lo que provocará que las raíces de la orquídea se estropeen y puedan llegar a pudrirse. En conclusión, no soy partidaria de hidratar a nuestra orquídea mediante el método cubo de hielo ya que creo firmemente que no es una buena práctica para preservar la salud de nuestra pequeña gran amiga.