23 LATERCERA Lunes 27 de junio de 2016 Charles Collyns Director ejecutivo del Institute of International Finance “Holanda, Dinamarca o Suecia podrían ahora cuestionar la continuidad de su membresía en la UE” R “El tema para el Reino Unido no fueron la integración comercial ni los aspectos financieros”. Mauricio Rodríguez Kogan Ante una noticia-bomba en Europa, analistas, portfolio managers y gente ligada a las políticas públicas en Wall Street o Washington suelen no dormir, para compensar la diferencia horaria. Y eso fue lo que sucedió la noche del jueves al viernes pasado cuando se dio a conocer el anuncio del Brexit, la renuncia de David Cameron, el desplome de las bolsas en Asia y después las europeas. Uno de los desvelados fue Charles Collyns, funcionario top del Tesoro estadounidense en el primer gobierno de Barack Obama y hoy director ejecutivo del Institute for International Finance, el principal lobby de la banca global. Desde su oficina en Washington, Collyns—quien también es economista jefe de la entidad— explica que a partir del Brexit no solo el crecimiento de la economía global se va a ver mermado, con los mercados financieros sucumbiendo a un período de volatilidad exacerbada. Ade- R “El beneficio más sustancial probablemente será para los países de América Latina”. advierte. más, el voto británico puede sentar un precedente para que otros países le den la espalda a la Unión Europea. ¿Qué es lo que más le preocupa del Brexit? El principal impacto es el cuestionamiento que surge sobre el compromiso que existe en torno a la integración europea. Esto quiere decir que podrían haber otros países, en particular entre los del norte, que cuestionen su compromiso con el proyecto europeo, lo que a la vez podría desestabilizar la agenda europea hacia convertirse en una región más integrada y estable. ¿Cuál es el verdadero riesgo de una desintegración? Países como Holanda, Dinamarca o Suecia podrían cuestionar ahora la continuidad de su membresía en la UE y van a oponerse a las medidas que tiendan a integrar más estrechamente a Europa. Sabemos que hay tensiones entre los países del norte y del sur. A los del norte les preocupa que en ausencia de Reino Unido les falte un socio fuerte, y podrían responder a los intentos de fortalecer la integración avanzando en dirección opuesta, lo que podría ser peligroso. ¿Europa podría desintegrarse? No veo a Europa desintegrándose en el futuro cercano, pero tampoco la veo haciéndose más estable o integrada. El Brexit va a hacer más complicadas las relaciones políticas en Europa. ¿El Brexit puede sentar precedentes para terminar las iniciativas de integración que existen en América Latina si surgen dificultades entre los socios? Espero que no, porque creo que la Alianza del Pacífico es una gran fuerza para el desarrollo y el crecimiento en esos países. El tema para el Reino Unido no fueron la integración comercial ni los aspectos financieros, los cuales en general se perciben como favorables para la economía británica. Los problemas pasan más por la inmigración y una pérdida percibida de soberanía en favor de Bruselas en lugar del Reino Unido. Asimismo, la UE se ha convertido en un conjunto tan grande de países que a estos les es difícil tener algún tipo de influencia entre tantos intereses juntos. La Alianza del Pacífico, por el contrario, es todavía un grupo reducido de países donde creo es posible ver un progreso continuo en vez de un retroceso a partir de esta experiencia. ¿Cómo interpreta el efecto que ha tenido el Brexit en los mercados? Nos preocupa mucho toda la turbulencia que está causando en los mercados, acumulándose sobre la fragilidad de la economía global. La volatilidad de los mercados y la aversión al riesgo están afectando a los activos más riesgosos, mientras que el panorama en las economías maduras ya no luce sólido. ¿Cuáles podrían verse afectadas? Es probable que la economía británica entre en recesión, y que el crecimiento en el resto de Europa, y a nivel global, se resienta. Esto, a la vez, le pondrá presión al precio de los commodities y a los mercados emergentes. El índice de volatilidad bursátil VIX subió casi 40% el viernes, mientras que las bolsas se derrumbaron. ¿Eso fue una sobrerreacción o el albor de otro Lehman Bros., dados los rápidos anuncios de liquidez de los bancos centrales? No creo que las presiones derivadas del Brexit conduzcan a un momento Lehman. Lo que en esa oportunidad ocurrió fue una serie de crisis de financiamiento que condujo a una confusión respecto de qué instituciones sobrevivirían y cuáles no, de modo que se tuvieron que inyectar grandes cantidades de liquidez. Creo que con el Brexit el desempeño económico será peor y algunas instituciones financieras verán sus ingresos caer. Pero eso no da para anticipar su quiebra, al tiempo que los bancos centrales están siendo muy agresivos en asegurarle a los mercados que habrá liquidez disponible. Vamos a tener que ver en las próximas semanas y meses el daño exacto; por ahora nadie sabe cuál será. Esta volatilidad debiera hacer que la Fed postergue su alza de tasas QUIEN ES Charles Collyns Es director gerente y economista jefe del IIF desde 2013. En 2010 fue nombrado secretario auxiliar para finanzas internacionales del Departamento del Tesoro. Antes fue subdirector del Departamento de Investigaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI). En el FMI, Collyns encabezaba el equipo encargado de la preparación del informe “World Economic Outlook” sobre la situación de la economía en el mundo. Es autor de diversas publicaciones sobre macroeconomía, influyendo varias relativas a la economía latinoamericana. prevista, lo que por el lado del financiamiento podría aliviar las preocupaciones de los mercados emergentes, ¿correcto? Sí, eso los ayuda en cierto grado. Es verdad que la Fed no va a subir su tasa antes de las elecciones presidenciales de noviembre. Pienso que diciembre es lo más pronto que podría hacerlo. Eso contribuiría a darle un poco de espacio a los bancos centrales de los países emergentes para no preocuparse mucho sobre subir sus tasas e incluso darles algo de espacio para reducirlas y así compensar de alguna manera una desaceleración. El beneficio más sustancial probablemente será para los países de América Latina, porque en Europa emergente las monedas han tenido que soportar una gran depreciación, debido a las expectativas de mayor debilidad en ese continente.b