La Comisión desea recabar opiniones sobre cómo garantizar que las ANC: 1. puedan actuar de manera independiente a la hora de hacer cumplir las normas de competencia de la UE y dispongan de los recursos y el personal necesarios para llevar a cabo sus tareas. 1 Hay que dotar de mayor autonomía e independencia a las Autoridades Nacionales de la Competencia (ANC), frente a los gobiernos y frente a las corporaciones. 1.1 Mecanismos claros, transparentes y objetivos de acceso a los órganos directores de las Autoridades Nacionales de la Competencia a través de concurso público, donde sea una comisión técnica designada por el Parlamento que en audiencia pública valore los méritos de los candidatos y posteriormente decida su contratación. Los componentes de los órganos directores de la ANC adquirirán la condición de funcionarios contratados mediante oferta de empleo público, garantizando un salario ajustado a su elevada responsabilidad en línea con el de los más altos cargos del sector público (Presidente Banco de España). Aunque dejen de pertenecer a los órganos de dirección de la ANC no perderán la condición de funcionarios (nivel 30) y seguirán trabajando para la Administración Pública en otro destino. 1.2 En contrapartida, imposibilidad de “puertas giratorias”: no será posible para un componente de los órganos de dirección de la ANC desempeñar labor alguna remunerada (ni mercantil ni laboral) con ninguna empresa o sector con el que haya podido tener relación durante su pertenencia a la ANC. 1.3 Las personas que integran los órganos de dirección de las ANC (y el resto de trabajadores que las componen) cobrarán un plus de productividad vinculado a la cuantía de sanciones económicas que impongan derivado de comportamientos contrarios a la competencia (en la línea del plus salarial que perciben los inspectores de Hacienda en relación al fraude fiscal que descubren) 1.4 Hay que garantizar la máxima confidencialidad del trabajo de la ANC durante la etapa de investigación de prácticas contrarias a la competencia, pero hay que aumentar la transparencia e información al conjunto de la sociedad durante la posterior etapa de resolución y sanción de dichas prácticas. 2. cuenten con las herramientas adecuadas para detectar y combatir las infracciones. 2 Las Autoridades Nacionales de la Competencia (ANC) deben de disponer de medios y recursos suficientes para desempeñar su labor con eficacia y eficiencia, bajo la premisa de que los recursos destinados a la defensa de la competencia no representan un gasto sino una inversión con claras ventajas y retornos para el conjunto de la sociedad. 2.1 Las ANC podrán contar con diversas fuentes de financiación que garanticen su suficiencia de recursos siempre dentro de un marco que no ponga en cuestión su independencia. Podrán recibir financiación anual vía Presupuestos Generales del Estado. Así mismo, en aquellos sectores económicos con un elevado índice de concentración empresarial las empresas con posición dominante en dichos sectores (telecomunicaciones, electricidad, hidrocarburos, transporte,…) aportarán una cuota anual al sostenimiento de las actividades y funcionamiento de la ANC. Finalmente, un porcentaje de las sanciones impuestas por la ANC se destinarán a mejorar igualmente los medios y recursos disponibles por la ANC para desempeñar su labor. 2.2 Reforzar con los recursos destinados en las ANC para la defensa de la competencia para la búsqueda y obtención de información relevante que pueda estar almacenada en soportes digitales e informáticos de las empresas, y que habitualmente resultan de muy difícil acceso para las ANC al hallarse ocultos, encriptados,… 2.3 Facilitar a las ANC, mediante los protocolos adecuados, el acceso a los datos fiscales disponibles por la Agencia Tributaria, así como los datos financieros en manos del Banco de España o de la Comisión Nacional del Mercado de Valores. 2.4 Vinculación a la ANC de un juzgado específico (y asignación de policía judicial) para agilizar los trámites judiciales necesarios en materia de defensa de la competencia, especialmente en aquellas actuaciones (registros,…) que precisen de previa autorización judicial. 2.5 Homologar al alza a nivel europeo de las competencias (investigación, control, regulación, sanción) de las respectivas Autoridades Nacionales de la Competencia, mediante el desarrollo de la directiva comunitaria correspondiente. 2.6 Prolongar hasta los 10 años la no prescripción de las prácticas contrarias a la competencia 3. estén en condiciones de imponer sanciones eficaces a las empresas que incumplen las normas. 3. Hay que potenciar el papel de la ANC para actuar de oficio, sin que medie denuncia previa ante ella, contra aquellas actividades que detecte contrarias a la competencia. Debe prestarse especial atención a las prácticas habituales de muchas empresas en materia de publicidad engañosa o posición de abuso de dominio frente al cliente o consumidor final en sectores como energía, telecomunicaciones,… 4. apliquen programas de clemencia que funcionen eficazmente en toda Europa y cuyo fin sea animar a las empresas a presentar pruebas de la existencia de carteles ilegales. 4.1 Aumentar el incentivo para que una empresa denuncie la existencia de un cártel, recibiendo como premio un porcentaje del importe de la multa que se impone al conjunto del cartel. 4.2 Recompensar económicamente a los informadores que filtren y/o aporten evidencias de la existencia de comportamientos contrarios a la competencia, reservando a tal fin un porcentaje de la sanción impuesta. OTRAS: La lucha contra las empresas vinculadas a casos de corrupción debe tener igualmente su derivada en materia de competencia, en tanto que supone una manipulación de la competencia en la asignación eficiente de los recursos públicos y además del perjuicio que supone para el sector público y el conjunto de la sociedad, tiene consecuencias negativas sobre aquellas empresas que se ajustan a la ley sin incurrir en prácticas de corrupción y sufren esta forma de competencia desleal o dumping (ganando contratos públicos mediante la corrupción a pesar de que su oferta no sea la más eficiente, competitiva o justa). Más allá de la correspondiente sanción penal y judicial impuesta por los juzgados pertinentes y una vez que se demuestre la existencia de esa práctica corrupta en la asignación de recursos públicos (contrataciones, concesiones, obras, sobrecostes no justificados, privatizaciones,…) debe sancionarse económicamente a la empresa por la distorsión y el perjuicio generado a la sociedad en términos de falseamiento de la competencia.