27 Módulo 11 – Fascículo Nº 1 – 2014 Ablación por radiofrecuencia de la –fibrilación auricular. Indicaciones Ablación por radiofrecuencia de la fibrilación auricular. Indicaciones Gastón Albina1, MTSAC Contenidos – Mecanismos fisiopatológicos de la fibrilación auricular – Técnicas de ablación por radiofrecuencia de la fibrilación auricular – Evidencia clínica de la ablación de la fibrilación auricular – Complicaciones de la ablación de la fibrilación auricular – Realidad argentina y competencia técnica – Indicaciones actuales de la ablación de fibrilación auricular – Seguimiento luego de una ablación –Conclusiones –Referencias Se recomienda a los lectores la consulta del capítulo en formato web o en el CD para una visualización conjunta del texto con las imágenes intercaladas en forma secuencial. Abreviaturas ACV: accidente cerebrovascular La fibrilación auricular (FA) es la taquiarritmia sostenida más común. Afecta al 0,4% de la población general. Su prevalencia se incrementa con la edad y llega al 15% en adultos mayores de 70 años. Con el mejoramiento de la técnica, la ablación por catéter de la FA se convirtió en una terapia alternativa para los pacientes con FA sintomática y refractaria. Sin embargo, a diferencia de otros tipos de ablación, merece algunas consideraciones particulares que trataremos a lo largo de este capítulo. Antes de introducirnos en el tema específico de la ablación, creo importante remarcar algunos conceptos clínicos: – La FA es una arritmia recurrente, pero raramente pone en riesgo la vida. FA: fibrilación auricular – El accidente cerebrovascular (ACV) tromboembólico es la complicación más alarmante, y por esto todos los pacientes deben ser estratificados de acuerdo con el riesgo para seleccionar a aquellos que deban recibir tratamiento anticoagulante. – En los pacientes sintomáticos, el objetivo es disminuir la frecuencia y la duración de las recurrencias. – Como en otros aspectos de la medicina, el objetivo primario debe ser la seguridad del paciente. La Sociedad Europea de Cardiología distingue cinco variantes clínicas en la presentación de la FA: FA diagnosticada por primera vez, paroxística, Médico de planta del Servicio de electrofisiología del Instituto Cardiovascular de Buenos Aires Cardiólogo especialista en electrofisiología MTSAC Miembro titular de la Sociedad Argentina de Cardiología 1 28 persistente, persistente de larga evolución y permanente.(1) Cada episodio puede ser autolimitado o requerir intervención médica para revertirlo, puede ser un evento aislado o presentarse de forma recurrente. A su vez, la duración de cada evento y su periodicidad también pueden ser muy variables. Por otra parte, los episodios pueden ser sintomáticos o asintomáticos. Y es más, en un mismo paciente se pueden observar diferentes variantes clínicas de la misma arritmia. Todo esto es importante a la hora de evaluar el éxito de cada intervención en general y de la ablación de la FA en particular. También, la FA puede ocurrir en pacientes sin otra enfermedad (la FA constituye todo el problema) o en el contexto de otra enfermedad cardíaca. Obviamente, los resultados y los objetivos de la terapéutica no son iguales. Es difícil hablar sobre el tratamiento de la FA sin hacer referencia a los estudios que compararon las estrategias de control del ritmo versus el control de la frecuencia y, en especial, al estudio AFFIRM.(2) Como es conocido, en estos estudios no se observó diferencia entre ambas estrategias en lo que hace a mortalidad total, y más aún, la estrategia de control del ritmo se asoció con más hospitalizaciones y mayores efectos adversos con el uso de las drogas antiarrítmicas. Cuando el efecto del ritmo sinusal y del tratamiento se analizaron por separado, se observó que el ritmo sinusal se asoció con mayor supervivencia, a diferencia de las drogas antiarrítmicas que incrementaron la mortalidad. De esta manera, el potencial beneficio en la supervivencia de mantener el ritmo sinusal fue aplacado por la toxicidad de la drogas antiarrítmicas. A pesar de estas observaciones, no puede negarse el gran impacto de estos estudios en la comunidad médica, como se observó en el registro canadiense (CARAF), donde la mayoría de los médicos consultados optó por el control de la frecuencia cardíaca desde la publicación de estos estudios.(3) No obstante, no debemos caer en la simpleza de considerar que debemos olvidar la cardioversión de la FA. En la mayoría de los pacientes la conducta inicial debe ser la de mantener el ritmo sinusal, la cual dependerá de la edad del paciente y de otras circunstancias clínicas. Por otra parte, el paciente típico incluido en el estudio AFFIRM tenía en promedio 69 años y sintomatología mínima, por – Módulo 11 – Fascículo Nº 1 – 2014 lo que sus hallazgos no pueden generalizarse a todos los pacientes con FA. Sin embargo, la estrategia de mantener el ritmo sinusal muchas veces se ve frustrada por la incapacidad de lograr el objetivo, como quedó plasmado en el estudio AFFIRM, donde a los 4 años solo el 62% de la rama control del ritmo estaba en ritmo sinusal, y esto es lo que vemos en nuestra práctica clínica cotidiana. Las drogas antiarrítmicas frecuentemente son inefectivas para prevenir las recurrencias y no están libres de efectos adversos. En varios estudios aleatorizados se observó que, a excepción de la amiodarona, las posibilidades de mantener el ritmo sinusal al año no son mayores del 50%.(4) Es en este contexto donde la ablación por catéter de la FA aparece como una alternativa para mantener el ritmo sinusal en ciertos pacientes con FA recurrente. La utilización de la ablación de la FA se incrementó rápidamente en los últimos años, con técnicas más refinadas, que se ven reflejadas en el éxito y la seguridad del procedimiento, con la posibilidad de ser ofrecida a un número creciente de pacientes. La ablación por catéter de la FA actualmente es reconocida como una opción para pacientes con FA paroxística o persistente, recurrente y sintomática, en aquellos pacientes que no puedan o no quieran recibir tratamiento antiarrítmico, o en quienes estas drogas han fallado previamente. Mecanismos fisiopatológicos de la fibrilación auricular _____________ Los mecanismos electrofisiológicos que dan origen a la FA han estado en continuo debate a lo largo de los años. El mecanismo de reentrada fue propuesto en 1914 por Garrey, quien afirmaba que la FA se producía por diferencias en la excitabilidad y la conductividad que producían movimientos circulares macrorreentrantes que daban origen a la FA. Posteriormente, en 1964, Moe definió la FA como un proceso autosostenido de múltiples frentes de ondas simultáneas y cambiantes que se bloquean y fragmentan para formar nuevos frentes de ondas. Si este mecanismo se perpetúa, dará origen a una FA persistente. Estos hallazgos fueron demostrados posteriormente, en 1985, por Allessie y cols. en trabajos en corazones de perros.(5)