CONQUISTARLO - 3 Puedo Conquistar mi Samaria pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra. Hechos 1:8 Vivimos en un mundo que no reconoce a Dios como el Señor, ni a Jesús como el Salvador. En su esencia, el mundo está continuamente cambiando. No es el mismo en el cual nosotros crecimos. Todos podemos hablar de que tan diferente es el mundo de cuando nosotros éramos niños. El reto para los que caminan con Cristo es poder estar firmes en un mundo que está cambiando. Hay 3 cosas que retan en nuestra sociedad: Todo se mueve mas rápido Todas las decisiones son mas complicadas Todos los valores están siendo continuamente retados Aún con todos los avances y cambios que hay en la sociedad, vemos que continúa habiendo una necesidad muy grande. Una necesidad de amor, de paz, de esperanza. A pesar que vemos tantos adelantos técnicos y un incremento increíble de información estas necesidades no se están supliendo. ¿Por qué? Porque sin Dios no hay ni amor, ni paz, ni esperanza. La paz les dejo, mi paz les doy; yo no la doy como el mundo la da. No dejen que su corazón se turbe y tenga miedo. Juan 14:27 CONQUISTARLO - 3 nosotros, los que somos del día, debemos ser sobrios, ya que nos hemos revestido de la coraza de la fe y del amor, y tenemos como casco la esperanza de la salvación. 1 Tesalonicenses 5:8 Al considerar esto, vemos que la Biblia establece que hay 3 cosas que nunca van a cambiar: El Amor de Dios ... yo soy el Señor, y no cambio ... Malaquías 3:6 Hace ya mucho tiempo, el Señor se hizo presente y me dijo: “Yo te amo con amor eterno ...” Jeremías 31:3 Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni los ángeles, ni los principados, ni las potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor que Dios nos ha mostrado en Cristo Jesús nuestro Señor. Romanos 8:38-39 La Palabra de Dios La hierba se seca y las flores se marchitan, pero la palabra de nuestro Dios permanece para siempre Isaías 40:8 El cielo y la tierra dejarán de existir, pero mis palabras permanecerán para siempre. Marcos 13:31 CONQUISTARLO - 3 Puedo Conquistar mi Samaria ... la palabra del Señor permanece para siempre. 1 Pedro 1:25 El Propósito de Dios Dios cumple sus propios planes, y realiza sus propósitos. Salmo 33:11 Puedes hacer todos los planes que quieras, pero el propósito del Señor prevalecerá. Proverbios 19:21 (NTV) sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman, los que han sido llamados de acuerdo con su propósito. Romanos 8:28 (NBD) Tomando esto en cuenta, podemos tomar pasos para que la conquista espiritual pueda extenderse a una sociedad y un mundo que, al final de cuenta, no tiene ni amor, ni paz, ni esperanza. Para poder llevar la conquista del Reino de Dios a nuestro alrededor necesitamos: Poner nuestra confianza en Dios Dios es nuestro refugio y nuestra fuerza; siempre está dispuesto a ayudar en tiempos de dificultad. Por lo tanto, no temeremos cuando vengan terremotos y las montañas se derrumben en el mar. Salmo 46:1-2 (NTV) Confío en Dios y no siento miedo. ¿Qué puede hacerme el ser humano? Salmo 56:11 CONQUISTARLO - 3 Poner en practica la Palabra de Dios Todo el que escucha mi enseñanza y la sigue es sabio, como la persona que construye su casa sobre una roca sólida. Mateo 7:24 (NTV) Jesús (dijo): “Escrito está: No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.” Mateo 4:4 (RVC) El que ama de verdad también obedece los mandamientos de Dios. 2 Juan 1:6 (TLA) Entender la Palabra de Dios Ayúdame a comprender el significado de tus mandamientos, y meditaré en tus maravillosas obras. Salmo 119:27 (NTV) Estudia constantemente este libro de instrucción. Medita en él de día y de noche para asegurarte de obedecer todo lo que allí está escrito. Solamente entonces prosperarás y te irá bien en todo lo que hagas. Josué 1:8 (NTV) sabemos que el Hijo de Dios ha venido y nos ha dado el entendimiento para conocer al único Dios verdadero. Nosotros lo conocemos, pues estamos en su Hijo Jesucristo. Él es el verdadero Dios y la vida eterna 1 Juan 5:20 (PDT)