La necesidad de la efectiva implantación del Registro de Rebeldes

Actualidad del consejo
Informe de la Comisión de Relaciones Institucionales
del Consejo General de Procuradores
La necesidad de la efectiva
implantación del Registro
de Rebeldes Civiles
La Ley de Enjuiciamiento Civil 1/00
de 7 de enero regula en su artículo 157
la creación de un Registro central de
rebeldes civiles:
Artículo 157. Registro Central de
Rebeldes Civiles.
1. Los tribunales que hayan realizado
infructuosamente las averiguaciones a que se refiere el artículo an­terior, comunicarán el nombre del
demandado y los demás datos de
identidad que les consten al Registro Central de Rebeldes Civiles,
que existirá con sede en el Ministerio de Justicia.
2. Cualquier tribunal que deba averiguar el domicilio de un demandado podrá dirigirse al Registro
Central de Rebeldes Civiles para
comprobar si el demandado consta en dicho registro y si los datos
que en él aparecen son los mismos
de que dispone el tribunal. En tal
caso, mediante providencia, podrá
acordar directamente la comunicación edictal del demandado.
3. El demandado inscrito en el citado
Registro podrá solicitar la cancelación de la inscripción comunicando
el domicilio al que se le pueden dirigir las comunicaciones judiciales.
El Registro remitirá a los tribunales
en que conste que existe proceso
contra dicho demandado, el domicilio indicado por éste a efecto de
comunicaciones, resultando válidas
las practicadas a partir de ese momento en ese domicilio.
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Por su parte, el Real Decreto 231/02
de 1 de marzo establece las normas de
organización y funcionamiento de expresado Registro, que permanecen en
vigor desde el 2 de marzo de 2002.
Tras más de cuatro años de vigencia, no se ha producido de forma generalizada la implantación del sistema
establecido en el Registro de Rebeldes
Civiles ni existen estadísticas oficiales
al respecto, por lo que la Comisión de
Relaciones Institucionales del Consejo
General de Procuradores estima conveniente realizar un estudio para su efectiva implantación en aras a una mayor
agilidad de los procesos en beneficio de
los ciudadanos.
Como subraya el Real Decreto
231/02, el Registro de Rebeldes Civiles
está destinado a evitar que los tribuna­
les reiteren innecesariamente las dili­
gencias para averiguar el domicilio des­
conocido de una persona demandada
en el proceso, ya que la constancia en
el Registro de las pesquisas ­ judiciales
indagatorias sin resultado positivo permite al juez acudir directamente a la
comunicación a través de edictos, con
la economía en tiempo y actividad pro­
cesal que ello representa.
Efectivamente, el Registro serviría
para evitar repetidos actos de comunicación que han sido negativos y que actualmente practican los servicios comunes de
notificaciones y embargos (SCNE), con
la asistencia del procurador en algunos
casos como, por ejemplo, las diligencias
de requerimiento de pago y embargo.
Pero no sólo aquellos, sino que para
el correcto funcionamiento de los mecanismos procesales de comunicación
previstos en la Ley, se necesita de la
existencia de diversos actos procesales
que suponen una gran cantidad de
recursos públicos (Administración de
Justicia) y privados (actos de parte) y
que son una de las principales causas
de retraso en los procedimientos. Una
diligencia negativa supone:
• Un nuevo intento de diligencia por
parte del SCNE o procurador.
• Resolución del tribunal dando traslado a la parte actora de la diligencia
negativa.
• Escrito de la parte actora solicitando oficios de averiguación de domi­
cilio.
• Resolución del tribunal acordando
las medidas de averiguación.
• Libramiento de los oficios por el
tribunal.
• Remisión de los oficios de oficio por
el tribunal o por el procurador a
quien se entreguen para su diligenciamiento.
• Cumplimentación de los oficios
por parte de los organismos a que
se dirijan: ayuntamientos, colegios
profesionales, Instituto Nacional de
Seguridad Social, Dirección General de la Policía, Oficina de Averiguación.
• Resolución del tribunal dando traslado del oficio a la parte actora o
escrito de parte aportando los oficios
cumplimentados al tribunal.
• Escrito de la parte actora designando
nuevo domicilio.
• Resolución del tribunal acordando
la notificación en el nuevo domicilio.
• Acto de comunicación del SCNE o
procurador practicándolo.
• Etcétera.
En resumen, la repetición de un ­acto
de comunicación supone, como mínimo, cuatro resoluciones del tri­bunal,
dos escritos de parte, el libramiento y
cumplimentación de varios oficios, y
dos actos más de comunicación. Es decir, una pérdida de medios materiales y
una acumulación de tiempos muertos
que retrasan el proceso.
Para evitar esta sucesión de actos
judiciales y de parte, que necesariamente ralentizan el proceso, la Ley de
Enjuiciamiento Civil y el Real Decreto
231/02 permiten a los tribunales realizar diversas actuaciones:
• Cuando el juzgado se encuentre con
una diligencia de comunicación negativa, deberá ordenar la consulta al
Registro de Rebeldes Civiles como
primera actuación de averiguación
(art. 157.1 LEC y art. 5.1 R.D.).
• Cuando el juzgado haya realizado
infructuosamente las averiguaciones del art. 156 de la LEC, y ­ haya
acordado que la comunicación al demandado se realice mediante edictos, ordenará la inscripción del demandado en el Registro de Rebeldes
Civiles, acompañando sus datos de
identidad (art. 157.2 LEC y art. 3.2
R.D.).
Ha de hacerse constar que el Registro mantendrá su funcionamiento
y utilidad procesal con las próximas
reformas legislativas. Efectivamente,
en el marco del “Proyecto de Ley Orgánica por la que se adapta la legislación procesal a la L.O. 6/85, de 1 de
julio, del Poder Judicial, se reforma el
recurso de casación y se generaliza la
doble instancia penal” aprobado por el
Consejo de Ministros el 16 de diciembre de 2005, se aborda una reforma
del art. 157 de la LEC, dándole una
nueva redacción en consonancia con
las nuevas competencias de los secretarios judiciales, y otorgando una mayor
garantía a los ciudadanos que hubieran
estado rebeldes y que se encontrasen
posteriormente en un nuevo domicilio
conocido donde practicar los actos de
comunicación:
“Artículo 157. Registro central de
Rebeldes Civiles.
1. Cuando las averiguaciones a las
que se refiere el artículo anterior
hubieren resultado infructuosas,
el secretario judicial ordenará que
se comunique el nombre del demandado y los demás datos de
identidad al Registro Central de
Rebeldes Civiles, que existirá con
sede en el Ministerio de Justicia,
con indicación de la fecha de la
resolución de comunicación edictal del demandado para proceder a
su inscripción.
2. Cualquier secretario judicial que
deba averiguar el domicilio de un
demandado podrá dirigirse al Registro Central de Rebeldes Civiles para comprobar si el demandado consta en dicho registro y si
los datos que en él aparecen son
los mismos de que dispone. En
tal caso, mediante diligencia de
ordenación, podrá acordar directamente la comunicación edictal
del demandado.
3. Cualquier órgano judicial, a instancia del interesado o por iniciativa
propia, que tuviera conocimiento
del domicilio de una persona que
figure inscrita en el Registro Central
de Rebeldes Civiles deberá solicitar
la cancelación de la inscripción comunicando el domicilio al que se
le pueden dirigir las comunicaciones judiciales. El Registro remitirá
a las oficinas judiciales en que conste que existe proceso contra dicho
demandado, el domicilio indicado
por éste a efecto de comunicaciones, resultando válidas las practicadas a partir de ese momento en
ese domicilio.
4. Con independencia de lo anterior,
cualquier tribunal que necesite co-
nocer el domicilio actual del demandado en un procedimiento,
que se encuentre en ignorado paradero con posterioridad a la fase
de personación, podrá dirigirse
al Registro Central de Rebeldes
Civiles para que se practique la
oportuna anotación tendente a que
le sea facilitado el domicilio donde puedan dirigírsele las comunicaciones judiciales si este dato
llegara a conocimiento del citado
Registro”.
Por todo ello, la Comisión de Rela­
ciones Institucionales del Consejo General de Procuradores, en el ámbito de
sus competencias, interesa:
• Elevar comunicaciones a la Subdirección General, y Dirección General,
de Relaciones con la Administración
de Justicia, a las que corresponde
la gestión del Registro de Rebeldes
Civiles, para fomentar en los tribunales la utilización del expresado
Registro.
• Elevar una comunicación al Consejo General del Poder Judicial, y
en especial a la Comisión Nacional
de Estadística Judicial, para que, de
tenerlo por conveniente, se incluyan
en sucesivas consultas estadísticas
la utilización por los tribunales del
Registro de Rebeldes Civiles (ex art.
5.4 R.D. 231/02).
• Elevar una comunicación al Consejo
General del Poder Judicial para que,
de tenerlo por conveniente, promueva en los distintos tribunales el uso
del Registro de Rebeldes Civiles en
las dos formas que determina la ley:
como primera actuación de averiguación del domicilio y ordenando
la inscripción en el Registro en la
misma resolución que acuerda la
publicación de edictos.
• Trasladar a los respectivos colegios
de procuradores los formularios de
escritos de parte, incluidos en el
anexo, para que sean utilizados por
los procuradores para fomentar el
uso del Registro Central de Rebeldes Civiles en aras a una agilización
del proceso.
Febrero 2007 • procuradores / 41