El Padre Nuestro (1) Mateo 6:9-13 Palabras nuevas: 1. sermones (sermons) 2. urgiendo (urging) 3. con respeto, con devoción (reverently) Jesús y Sus discípulos viajan a través de Galilea enseñando a las personas. Jesús efectúa milagros y da sermones. Un día, en una loma, se reúne un grupo a Su alrededor. Están muy callados esperando que Él hable. Jesús empieza urgiendo a las personas a vivir una vida que complacería a Dios. Les habla de orar y les enseña una oración muy especial. Llamamos a esta oración, "El Padre Nuestro". Estamos felices de tener a nuestro Padre en el cielo. Él nos ama y nos cuida. Santificamos Su nombre al orar con respeto y devoción. Nos esforzamos por cumplir con Su voluntad y nos preparamos para entrar al Reino eterno de Dios. Lección 2.9 Jesus nos enseño que solo hubia una manera de hablarle a Dios. Llena completamente cada letra que tiene un J, E, S, o U para saber como hablarle a Dios. J E S U J U S E J E B G V X N D B S S N X O L B T F E U J U S E J S U J D V G B N F D L X S E J S E U S J E U X F D J V N T D J N B L U E B L N E S J E S X J E S Z L B F V D Z B F E J U S E J E S J C I N R A C I A O S X G V E L D Z L U S J E U S J S U F Z X B V Z B F G S E J S U J S E S U B D Z S D C G D J N L B E U V T L Lección 2.9 E J U S J N E S J El Padre Nuestro (2) Mateo 6:9-13 Palabras nuevas: 1. sinceramente (earnestly) 2. espiritual (spiritual) En el sermón en el Monte, Jesús les enseña a la gente como orar. Orar viene siendo una parte tan importante de nuestra fe. Aprendemos a orar sinceramente. Nuestras oraciones están llenas de agradecimiento y amor por nuestro Padre Celestial. El “Padre Nuestro” se ora antes de proclamarse la Absolución y recibir la Santa Cena en el servicio divino. Siempre debemos ponerles muchas atención a las palabras y orar desde el corazón. También oramos por el pan nuestro de todos los días. Este pan nuestro también incluye nuestras necesidades terrenales y espirituales. También pedimos que Dios nos perdone nuestros pecados pero debemos recordar perdonar a otros si queremos que se nos perdone a nosotros. Le pedimos a Dios que nos ayude a vencer los malos hábitos y a mantenernos lejos de las tentaciones. Queremos complacerlo a Él. Anhelamos compartir el glorioso reino eterno de Dios y lo alabamos siempre a Él. Finalizamos el “Padre Nuestro” con la palabra “Amen”. “Amen” significa que estamos de acuerdo o que creemos. Lección 2.10 F U N V F D V A L O B A R A P G K D S N P R E P A R A M O S O C E C F I Z L S U N G V I U D A E T S R B N S A G A L I L E A T P S N N R D H O C E N O I C A R O I A U O E S O S I I agradecimiento amen amor conversación corazón creemos devoción Dios discipulos esforzamos I F P S A H T S R D S I I I N O C P S S O M E E R C I R E C M N E M A U O O T E P S E R P E J I I C N A S L M A S S B J D U S F T C E S C R O A P E R S I S T E N T E E R O I E S Z A R J O L R V A U T P D A R F V P R B M S O N A F R E U H A M G I N S espiritual Galilea huérfano oración Jesus milagros Padre Nuestro parabola persistente peticiónes O D O E C O G X B S B M R E A T O V F H N L N P N Y C T O N G N L N C N S S E O D N E I G R U J A T I A B F E V S A F R V Z D O A O J E M S X L O D E V O C I O N V H N O Z A R O C preparamos perdone respeto santificamos sermones sinceramente urgiendo vengar viuda Lección 2.10 La Parábola De La Viuda Que Oraba Lucas 18:1.8 Palabras nuevas: 1. viuda (widow) 2. huérfano (orphan) 3. discípulos (disciples) 4. parábola (parable) 5. persistente (persistent) 6. vengar (avenge) En Israel en los tiempos de antes, a menudo las viudas recibían un trato injusto. A veces se les quitaban sus casas cuando morían sus esposos. La mayoría eran pobres. A causa de esto, se hizo una ley para ayudar a las viudas y a los huérfanos. Con frecuencia se ignoraba esta ley. Los discípulos de Jesús están sentados a Su alrededor escuchando mientras Él les cuenta una parábola de una viuda persistente. “En una ciudad vive un juez. No es un hombre de Dios. Cuando las personas vienen con él a pedirle ayuda, él les dice; ‘¡Váyanse. No tengo tiempo para ti!´ Él es injusto.” “En la misma cuidad se encuentra una viuda que vive sola. Una persona malévola la está amenazando y ella está preocupada. Va a ver al juez y le suplica su ayuda. Él no le ayuda. Ella regresa a su casa muy molesta. Una y otra vez ella regresa con el juez y le pide su ayuda. Regresa tantas veces a verlo que cuando la ve llegar él piensa; ‘¡Aquí viene otra vez! ¿Cuándo me dejará en paz?´ Finalmente, sólo para que lo deje descansar con sus peticiones tan frecuentes, él le ayuda.” Jesús mira a Sus discípulos y les dice; “¿No vengará Dios a Su propio pueblo que le suplica Su ayuda día y noche? Yo les digo que Él juzgará a su favor y lo hará rápidamente.” Debemos orar con frecuencia y hacerlo desde nuestros corazones. ¡De manera especial debemos pedir que venga Jesús a llevarnos con Él! Lección 2.11 Jesucristo Nos Enseña A Orar Lucas 18: 1-8 Palabras nuevas: 1. peticiones (requests) 2. conversación (conversation) Ana está en su recamara alistándose para dormir. Le platica a su madre acerca de como estuvo su día. “¡Me la pasé de maravilla jugando el día de hoy! Estoy muy agradecida porque por poco me sucede un accidente con mi bicicleta pero pude frenar a tiempo y no pasó a mayores.” Su madre le dice; “Nunca tomamos por hecho que estamos sanos y salvos. Vamos a orar nuestras oraciones nocturnas. ¿Por qué no las dices tú esta noche?” “Sí, pero madre, tú sabes mejor lo que hay que decir.” Dice Ana. Su madre se sienta en la cama a lado de Ana y le dice; “Tú puedes hablar con el Señor Dios así como hablas conmigo y con tu padre. Cuando oras, empieza dándole las gracias a nuestro Padre celestial y luego háblale de cualquier petición o deseo que pudieras tener.” “¡Ya sé una de las cosas que le pediré!” dice Ana. “¡Le pediré que envié a Jesús para llevarnos al cielo!” “Esa es una petición maravillosa,” dice su madre, “¿Por quién pudieras pedir?” “Por ti, por mi padre, por nuestro Pastor y por las personas que se encuentran enfermas,” contesta Ana. El padre de Ana entra a la recamara después de escuchar la conversación. Él agrega: “Recuerda también que debes orar desde tu corazón.” Los tres se arrodillan y Ana ora con un corazón feliz y agradecido. Lección 2.12