COLOR 17 (Bikini 6/7/06 08:22 Página 1 El bikini cumple 60 años Sensual, juvenil, funcional, revolucionario... Una de las prendas más controvertidas y polémicas de la historia de la moda. Mujer luciendo un vestido de baño en dos piezas, en un mosaico romano del siglo IV. Piazza Armerina (Sicilia). Michele Bernadini fue la primera mujer en posar con un bikini. COLOR 17 (Bikini 6/7/06 08:22 Página 2 Cronología del bañador Texto: Max Bernáldez ocas veces se celebra el aniversario de una prenda, pero la del minúsculo bañador sí porque desde el principio marcó la diferencia, olió a cuerpos más libres y se convirtió en estandarte de la revolución femenina pendiente históricamente. Merece la pena que recordemos su historia. En 1946, el año que se prohibían los burdeles en París, Louis Réard, un ingeniero francés especialista en la mecánica del automóvil que regentaba una mercería familiar, conmovió al mundillo social parisino acortando el traje de baño y convirtiéndolo en un dos piezas que fue escandaloso para la época. Lo llamó bikini porque la modelo que realizaba las primeras pruebas señaló: “Señor Réard, su bañador va a ser más explosivo que la bomba de Bikini”, atolón de las islas Marshall, en el Pacífico, donde Estados Unidos celebraba al mismo tiempo diversas pruebas nucleares. De hecho, ninguna modelo quiso lucirlo en su debut y, finalmente, se recurrió a una vedette del casino de París, Michele Bernadini, que posó con esta prenda en la piscina Molitor de la capital francesa. Cabía en una mano y pasaba por un anillo. Para darlo a conocer, Réard contrató un avión que arrastró por los cielos de Cannes un cartel que decía: “Bikini... el traje de baño más pequeño del mundo”. Esta es la sucinta historia y casi todo los demás, leyendas que han ido convirtiendo el bikini en una prenda universal y de uso generalizado. Pero no todo el mundo está de acuerdo en que fuera realmente una invención, y es que algunos lo califican como reinvención, debido a que arqueólogos italianos descubrieron en Piazza Armerina (Sicilia) unos mosaicos con figuras de mujeres que lucen vestidos de baño en dos piezas, unas obras de arte que datan del siglo IV. C. Pero aquello quedó enterrado por la historia, y lo cierto es que hace 60 años Louis Réard revolucionó la moda con la presentación del primer bikini. P Los cuerpos semidesnudos de hombres y mujeres que pueblan las playas de todo el mundo gracias a la escasez de tela que constituyen sus bañadores son algo muy reciente. La historia de esta prenda se remonta a finales del siglo XIX, cuando nos encontraríamos con el primer bañador, cuya extensión de tela nos dejaría elaborar cientos de tangas de nuestros días. Finales del siglo XVIII : nace oficialmente la costumbre de bañarse; fue el rey Jorge III de Inglaterra (1738-1820) quien más favoreció estos comienzos sociales al frecuentar la playa de Weymouth. 1822: el primer baño oficial de una mujer fue el que realizó la francesa duquesa de Berry, nuera de Carlos X, quien se sumergió totalmente vestida en la playa de Dieppe (Francia). 1890: nace el primer bañador; se componía de una camisa-pantalón y calcetines, tanto para el hombre como para la mujer. 1915: desaparecen los calcetines de la vestimenta de playa, pero las mujeres todavía se ponen camisones, camisas largas y faldas para bañarse. Sin embargo, los hombres pueden lucir pantalones cortos. 1930: es el año en el que aparece el primer bañador femenino propiamente dicho. Elaborado con lana, tiene el escote como las camisetas y los pantalones deben cubrir los muslos. Esta prenda, mojada, pesa más de 3 kilos. Ese mismo año Coco Chanel pone de moda el bronceador del rostro. 1946: el ingeniero Louis Réard inventa el bañador de dos piezas. Pero su uso habitual no llegará hasta los años sesenta. 1960: invención de la licra, una fibra textil que puede ser tensada y estirada hasta seis veces su longitud natural. Gracias a este material llegan los primeros bañadores elásticos. 1964: el estilista californiano Rudi Genreich inventa el topless o monokini. En un principio era un bañador negro sostenido por dos tirantes que deja al descubierto el pecho de la mujer. 1974: nace en Brasil el tanga, inventado por el genovés Carlo Ficcardi. COLOR 17 (Bikini 6/7/06 08:22 Página 3 La influencia del cine y la reacción social El triunfo de esta prenda llevó algún tiempo y fue necesario que quienes marcaban tendencia en aquel entonces se atrevieran a lucirlo. Los franceses, tan vanguardistas como siempre, aceptaron la nueva prenda sin problema. Roger Vadim, que en 1957 estrenó la película Y Dios creó a la mujer, mostró a Brigitte Bardot tentadora y hermosísima en un espectacular bikini de entonces. Pero muchas mujeres no se atrevían a lucirlo por considerarlo escandaloso e inmoral. En 1951 fueron prohibidos en los concursos de belleza en Estados Unidos; los organizadores alegaban que el bikini era una prenda de mal gusto. España e Italia, guardianas de la moral católica de entonces, prohibieron en sus playas la descocada prenda que no dudaElizabeth Taylor. ban en lucir templos de la concupiscencia como Jean Mansfield o Marilyn Monroe. Como ilustración de la oposición que el bikini suscitó en su momento, podemos contar la anécdota de Esther Williams. “Un traje de baño —decía la célebre nadadora e intérprete de Escuela de sirenas (1944)— es la menor cantidad de ropa que puedes llevar en público, así que debes pensarlo. Pero un bikini es un impulso que ni siquiera se piensa.” Y se opuso al uso de la polémica prenda, siguiendo la reacción social de los años cincuenta en Estados Unidos y Europa. Pero hubieron de pasar varias décadas antes de que el bikini alcanzara popularidad y dejara de ser considerado un atuendo indecente. El cine fue el llamado a convertir una prenda rechazada y criticada en un objeto de deseo y en un must de la moda. Por ejemplo, ¿quién no recuerda a Ursula Andrews junto a Sean Connery en Doctor No? La rubia escultural en un bikini blanco saliendo del mar mientras hace sonar una concha marina cautivó a millones de espectadores en todo el mundo y muchas mujeres la envidiaron. El impacto de esa escena no habría sido el mismo si Ursula Andrews, en lugar de un traje de dos piezas, hubiera llevado un traje de una sola pieza. Andrews, se puede decir así, inmortalizó el traje de dos piezas. También tuvo un gran impacto la imagen de Raquel Welch en una fotografía con un insinuante bikini para la revista Life en 1965. Después vino la película Beach party, en la que las jovencitas bailando en bikini eran la escena recurrente. La prenda de baño quedó así asociada a la diversión, la juventud y a un alegre estilo de vida. Y para terminar de consagrarlo fue igualmente decisivo que se convirtiera en una de las prendas preferidas de las míticas pin-ups, mujeres de calendario y protagonistas de portadas y reportajes fotográficos de destacadas revistas. Y, para cerrar el círculo, la música también puso su granito de arena: una canción puso al bikini en boca de todos en 1960. “Itsy bitsy teenie weenie yellow polka dot bikini”, traducida al español como “El bikini amarillo de pepitas diminutas”, enloqueció a las jovencitas del mundo occidental. Podemos concluir que hasta Mayo del 68, cuando las feministas quemaban los sujetadores, el bikini no se impuso en las playas para obsesión de hombres y mujeres, aunque por motivos distintos. Unos por la libido, las otras por la línea. 64 14 JULIO-7 SEPTIEMBRE 2006. N.º 1.617 . Gina Lollobrigida. Raquel Welch. Brigitte Bardot. Jean Mansfield. Esther Williams. www.doyma.es/jano COLOR 17 (Bikini 6/7/06 08:22 Página 4 Marilyn Monroe. Anna Kournikova. Ursula Andrews. Para celebrar los 60 años del bikini, algunas firmas han elaborado colecciones retro. Aquí les mostramos algunos modelos. La evolución: mejores fibras y menos centímetros Con los años, el bikini experimentó numerosas variaciones, no sólo en cuanto a cortes, sino también por lo que atañe a materiales y procesos de elaboración. Pero si hubo algún hito destacado, fue sin duda la invención de la licra. En 1960 Du Pont empieza a usar esta fibra textil que puede ser tensada hasta seis veces su longitud natural permitiendo ceñir el bañador a la piel de manera sencilla y realzando la silueta femenina. Con ello el diseño se abre a nuevas posibilidades. El baño se inunda de moda y, desde entonces, no ha detenido su evolución que, al margen de materiales, siempre se ha caracterizado por ir perdiendo centímetros de tela y cuyos representantes más conocidos son el tanga y el monokini. Y la ley del péndulo consigue cambiar los usos, reiniciar el ciclo, renacer... “Los vigilantes de la playa” exhiben a una Pamela Anderson exultante en bañador rojo de una pieza. Por un tiempo el bikini pierde enteros, pero el punto de inflexión para un nuevo mandato del bikini, en el que ahora estamos, fue el que le dio la reina del balonvolea, Gabrielle Reece, consagrando en 1993 el furor por el bikini de diseño deportivo.J JANO 14 JULIO-7 SEPTIEMBRE 2006. N.º 1.617 . www.doyma.es/jano 65