Mobile 1847 - Hermanos del Sagrado Corazón

Los Hermanos del Sagrado Corazón en los Estados Unidos de América
La fundación en Estados Unidos se realizó en el año 1847. Monseñor Poitier, obispo de
Mobile, al sur de la nación, en la antigua Luisiana francesa, envió a su vicario general
a Francia con la finalidad de conseguir un
Instituto religioso que regentase una escuela
orfanato en Mobile. Cuando el Hermano
Policarpo recibió la petición, se llenó de alegría.
Su afán era extender el Instituto por todo el
mundo. Aceptó emocionado la propuesta, y en la
fiesta del Sagrado Corazón se lo comunicó a los
Hermanos y solicitó voluntarios para tan pionera
y maravillosa misión.
Entre las almas generosas que se ofrecieron, el Consejo General eligió al Hermano
Alfonso, que era Asistente General y director del colegio internado del Sagrado
Corazón de Lyón. Tenía treinta y tres años de edad y llevaba dieciocho de vida
religiosa. Le acompañarían los Hermanos Atanasio, David, Plácido y Juan Bautista.
El día 26 de septiembre de 1846, es decir a los veinticinco años justos del comienzo de
los santos ejercicios para la fundación del Instituto, los cinco Hermanos misioneros
salían de Paradis hacia el Nuevo Mundo, el nuevo campo de apostolado para la joven
Congregación.
Viajes y fundaciones
Realizaron el viaje por Francia en diligencia y también en el recién estrenado ferrocarril
con locomotora de vapor. Embarcaron en el puerto de Havre, en el barco velero “Anna”,
que por fin elevaba anclas el 27 de octubre de 1846 y que les dejaría sin novedad en la
bahía de Mobile. Desde allí, los Hermanos navegaron río arriba y llegaron finalmente a
su destino el día 11 de enero de 1847.
Mobile era una ciudad que contaba entonces con unos 32.000 habitantes, descendientes
en su mayoría de franceses, españoles e irlandeses. La ciudad había tomado ya carácter
americano y su lengua predominante era el inglés. Por este motivo, la principal tarea de
los Hermanos fue ponerse al corriente de dicha lengua.
Los Hermanos tomaron posesión del orfelinato en la
parroquia de san Vicente y pronto fundaron una
nueva escuela y un noviciado en la misma ciudad de
Mobile. Antes de morir el Hermano Policarpo, nuevos
Hermanos procedentes de Francia fundaron un
colegio y un noviciado nuevos, a petición del obispo
misionero de Dubuque, en el estado de Iowa, a más
de 1.500 kilómetros de Mobile.
En 1854 los Hermanos abrieron en la bahía de San Luis una modesta escuela, que
andando el tiempo se convertiría en el célebre colegio internado de la Baie-St-Louis,
azotado hace unos años por el huracán Katrina.
Procedencia
Cien años educando desde el corazón (1903-2003)
pp. 88-91)