Desde Compromiso Social para el Progreso de Sevilla, queremos manifestar nuestro apoyo a la convocatoria de Huelga del sector de la Educación, que a nivel nacional tendrá lugar el próximo día 22 de mayo, porque entendemos que los recortes que se van a llevar a cabo van en detrimento de la calidad de la enseñanza y suponen una vuelta atrás en las conquistas de una educación igualitaria, a la vez que representan una considerable pérdida de puestos de trabajo en la docencia en momentos extraordinariamente difíciles para el empleo. Desde el convencimiento de que existen razones más que suficientes para la citada convocatoria, queremos exponer algunas que nos parecen fundamentales: 1) El Gobierno del Estado ha enviado a los organismos europeos una reciente actualización del Plan de Estabilidad, en el que aparece el objetivo de reducir la inversión en educación para llegar al 3,9 del PIB en el año 2015, cuando según sus datos fue del 4,9 en 2010. Es decir, que en 5 años perderemos 11.000 millones de euros aproximadamente, o dicho de otra manera, 1 de cada 5 euros que ahora se destinan a educación. Una retirada del 20% de los recursos económicos no es asumible en modo alguno sin poner en serio peligro la calidad de la educación y en la práctica conlleva el desmantelamiento del sistema educativo tal y como lo conocemos en este momento. 2) Entre las medidas que se llevarán a cabo para lograr dicho recorte presupuestario, que no tiene precedentes, se incluyen en el Plan Nacional de Reformas las siguientes: Reducción de las sustituciones, no cubriendo ninguna baja hasta que haya pasado un mínimo de diez días. Ya, en las Comunidades Autónomas que han tomado la delantera en la eliminación de recursos económicos y humanos, ese límite ha sido claramente sobrepasado, llegando incluso a tener que esperar más de un mes hasta la contratación de un interino, un colectivo que se ha declarado “a extinguir”. Aumento del número de alumnos por clase, aunque por el momento esta medida no vaya aplicarse en nuestra Comunidad. Con las modificaciones puestas en marcha por el Ministerio de Educación, las aulas en Educación Infantil y Primaria podrán llegar hasta los 33 alumnos y en Secundaria hasta los 40, sin que ello pueda cuestionarse legalmente. Por otro lado, respecto del Bachillerato, las cifras pueden ser escandalosas, como ya hemos podido comprobar en algunas Comunidades Autónomas, en las que al inicio de curso, entre la falta de docentes y la ausencia de recursos materiales, se han tenido clases de hasta 80 alumnos en aulas multiusos o en salones de actos. Reducción de plantillas, que provocarán la pérdida de muchos recursos en los centros educativos, tales como: equipos de orientación, personal para compensatoria, docentes para desdobles, responsables de bibliotecas, profesorado para apoyar al alumnado con necesidades educativas especiales, recursos humanos para realizar actividades complementarias y extraescolares, etc., algo que ya está ocurriendo en diversas Comunidades Autónomas. 3) El Gobierno del Estado ha trasladado la idea de que ninguna etapa que no sea absolutamente obligatoria será costeada con fondos públicos, al menos no en su totalidad. Con ello, se pretende que los servicios públicos sean pagados directamente por madres y padres, como si ahora no lo fueran con nuestros impuestos. En realidad, lo que se pretende es crear una barrera insalvable para que muchas familias con dificultades económicas no puedan garantizar el acceso de sus hijos e hijas a estudios superiores, recuperando una sociedad clasista donde solo unos pocos, los de siempre, tienen todas las oportunidades. Por todo ello, desde Compromiso Social para el Progreso de Sevilla llamamos a la ciudadanía a oponerse al desmantelamiento de nuestro sistema educativo y a defender el derecho a la educación de nuestros hijos e hijas y el futuro de nuestra sociedad. No podemos caer en el error de reaccionar cuando sea tarde y se haya consumado el suicidio social al que nos están conduciendo. Sevilla, 21 de mayo de 2012