Noviembre, 2009. Mtra. Andrea Etchartea Enseñanza de la geología Como todas las ciencias, la geología tiene una rica historia que puede ser llevada al aula cada vez que se presente un fenómeno nuevo a estudiar o la situación lo requiera. Los procesos geológicos tienen una historia que a escala de la vida humana no se puede percibir, por lo que durante muchos siglos, lo que se creía sobre la Tierra y sobre todo las preguntas que en cuanto a ella se formulaban, no tenían en cuenta la posibilidad de que nuestro planeta cambie. Por eso ofrecemos una revisión rápida de las concepciones que tuvieron más relevancia en la historia de las Ciencias de la Tierra y más específicamente de la Geología. Geología: un poco de historia El estudio de la Tierra, su funcionamiento y constitución ha sido tema de estudio desde hace más de 2300 años. Aristóteles creía que las rocas se habían creado por influencia de las estrellas y que los terremotos se producían cuando entraba a la Tierra aire muy fuertemente, adentro se calentaba y salía explosivamente. Catastrofismo A mediados de siglo XVI James Ussher, publicó “Anales del Viejo Testamento, derivados de los primeros orígenes del mundo”, en el que mostró una cronología de la historia humana y de la Tierra, allí data la creación en el año 4004 aC. En los siglos XVII y XVIII el catastrofismo dominó el pensamiento sobre los procesos geológicos. En resumen, se sostenía que a lo largo de la historia de la Tierra ciertas convulsiones repentinas y cambios de gran magnitud en la corteza terrestre formaron el paisaje que hoy conocemos. La Geología Moderna A finales del siglo XVIII James Hutton publicó “Teoría de la Tierra” planteó allí la teoría Uniformista, por lo que es considerado el padre de la geología moderna. Básicamente afirmaba que los procesos que ocurren hoy en la faz de la Tierra, ocurrieron también en el pasado, “el presente es la clave del pasado”. Hutton, fundamentó su teoría en observaciones verificables, algo que no habían hecho sus predecesores. 1 Con el Uniformismo, la edad de la Tierra se pone en cuestión, si los procesos son tan lentos, se necesitan mucho más de 6000 o 7000 años para formar todos los accidentes geográficos de la actualidad o para que el fósil de un pez llegue a la cima de una montaña. La Tectónica de Placas A principios del siglo XX comenzó una revolución en las Ciencias de la Tierra con la propuesta de la Deriva Continental. Fue en 1912 cuando Wegener manifestó estas ideas. Por el modo en que los continentes parecen poder encajar, por la presencia de fauna fósil idéntica en continentes separados, conjeturó que inicialmente existía en la superficie de la Tierra un supercontinente continuo, Pangea, el cual se habría partido posteriormente. Pero pensar que los continentes se movían sobre otra capa de la Tierra fue muy difícil de aceptar para sus contemporáneos. Esta idea fue dejada en suspenso ya que generaba muchas dudas. Durante los años 50 y 60 nuevas pruebas sacaron la abandonada teoría de Wegener nuevamente a la luz. En 1968, se desarrolló una explicación mucho más completa, incorporaba aspectos de la deriva continental y de la expansión del fondo oceánico. A partir del surgimiento de la teoría de la Tectónica de placas la Tierra comenzó a ser vista con otros ojos. Enseñando geología a partir del Programa de Educación Inicial y Primaria 2008 Emilio Pedrinaci afirma: (…) tener un conocimiento básico de geología exige disponer del modelo aportado por la teoría de la Tectónica de Placas.1 Esto nos exige a los maestros un estudio responsable del tema. El maestro debe manejarla para poder ofrecer problemas o situaciones geológicas de estudio que tengan de fondo una concepción de Tierra como sistema. Es decir, mostrar que tanto el suelo, como las rocas, como el relieve, no han sido siempre como los vemos hoy ni como hace 500 años. La lentitud con la que ocurren los procesos geológicos hace parecer que el relieve terrestre es inmutable. A no ser por procesos muy puntuales, como terremotos o erupciones volcánicas, es la inmutabilidad la que se observa. A nuestros alumnos les costará creer que tal vez el lugar donde están pisando, miles de años atrás estaba bajo el mar o que las rocas que ven en la playa no estuvieron allí y con ese aspecto desde siempre. Si el fijismo estuvo presente hasta 50 años después de que Wegener propusiera la idea de la deriva continental, cuánto nos costará a los docentes ayudar a que los niños incorporen la idea de que la Tierra es dinámica. Para conformar esta idea, debemos enseñar algunos de los procesos que producen cambios en el planeta, cómo se producen y qué agentes los motivan. Dentro de esta línea tenemos que estudiar las rocas, sus procesos de transformación y –finalizando el ciclo escolar- también su formación. Tenemos que mostrar que las rocas son 1 PEDRINACI, Emilio. “La enseñanza y el aprendizaje de la geología”, En: : “Enseñar ciencias”, Jiménez Aleixandre, María Pilar (coord) y otros; Editorial GRAÓ, 2007 (2º Edición). 2 archivos, comprender esto nos permitirá acercarnos a la idea de tiempo geológico, otro gran y difícil tema. La Geología es una ciencia, y para ella también vale todo lo que ya sabemos sobre su enseñanza. Especialmente recordar que no debemos enseñar conocimientos acabados, es importante que se trabajen los debates que se dieron a lo largo de su historia y los que se dan en la actualidad. Allí radica la importancia de que el maestro conozca la historia de la geología en general y la del concepto o la interpretación del fenómeno que se va a trabajar, en particular. Muchas de las preguntas que la humanidad se realizó seguramente se las plantean ya los niños. Y tal vez, las interrogantes que la humanidad tardó siglos en formular, no surjan en la clase, probablemente debamos sugerirlas. El Programa uruguayo actual nos exige algunos temas que no pueden ser estudiados, al menos por el docente, lejos de la base teórica de la Tectónica de placas; el cambio, los agentes que lo producen y el factor tiempo no deben ausentarse de la planificación o red que el maestro se arma al preparar su secuencia. Algunos de estos contenidos son: el suelo, el agua, el tiempo atmosférico y el relieve, erosión, meteorización, rocas, minerales (alteraciones que sufren por el agua). Y por supuesto que los que directamente ponen esta teoría en juego: Tiempo geológico, eras geológicas, fósiles, pruebas de la deriva continental, expansión del fondo oceánico. Sin dudas que trabajando en los primeros niveles de enseñanza, no vamos a hablar de la Tectónica de placas o la deriva continental, pero cuando trabajemos el suelo y la interacción con el agua, observaremos cómo el agua interacciona con el suelo, con los seres vivos del medio, cómo puede cambiar el aspecto del suelo de un cantero según haya humedad o sequía, según tenga o no vegetación, etc. El cambio y la interacción son conceptos claves que sí pueden ser abordados en esos niveles. Un factor distintivo que tiene la Geología, con respecto a otras ciencias, es que es muy difícil tanto poder visualizar los procesos de cambio de forma directa, como experimentar, trabajar en el laboratorio (los procesos geológicos se dan en dimensiones temporales muy grandes, temperaturas extremas y valores de presión muy elevados). Pero, los docentes ahora podemos recurrir a muy buenos apoyos, uno de ellos, fundamental en nuestra tarea desde siempre, es la bibliografía. Pero ahora que tenemos acceso a las nuevas tecnologías, podemos apoyarnos en programas informáticos y animaciones que, en la web encontramos, estos muy acertadamente nos ayudan a comprender los complejos y prolongados procesos geológicos. También podremos recurrir a la elaboración de modelos o simulaciones, teniendo siempre presente, que los modelos son solo representaciones y que por lo tanto no estarán presentes todas las variables que se dan en la realidad. Sabemos que la Geología es una ciencia atrapante, que nos permite realizar vinculaciones con otras ciencias como la química, la física, la geografía, la astronomía, la biología (incluyendo los dinosaurios). Son buenas las interacciones entre ellas, permiten el enriquecimiento del proceso de aprendizaje, porque el conocimiento, el saber, es uno solo. Pero tener claro el objetivo de cada una de las ciencias en particular será de vital importancia para no desdibujar a ninguna de las disciplinas. 3 Bibliografía • PEDRINACI, Emilio, “La enseñanza y el aprendizaje de la geología”, En: “Enseñar ciencias”, Jiménez Aleixandre, María Pilar (coord) y otros; Ed. GRAÓ, 2007 (2º Edición). • TARBUCK, E.; LUTGENS, F. Ciencias de la Tierra. Una introducción a la Geología Física. Ed. Pearson, Madrid (2005). • GARCÍA CRUZ, C. M., De los obstáculos a los conceptos estructurantes: una aproximación a la enseñanza aprendizaje de la geología. Revista Enseñanza de las ciencias, Nº 16, 1998. En Material bibliográfico del “Curso de apoyo a la Enseñanza en las Escuelas de Contexto Socio Cultural Crítico. Ciencias Naturales. 2009”, Coord: María Dibarboure. Referencia de las imágenes: Fotografía del un busto de Aristóteles, en mármol, copia romana del original griego en bronce de Lysippos, del 330 AC; la toga de alabastro es una adición moderna. Fotógrafo: Giovanni Dall´Orto, 2005. Retrato de James Ussher. Fuente: https://www.tcd.ie/history/Ussher/life.php (La reproducción de los retratos con la autorización de los Gobernadores y los Guardianes de la Biblioteca Pública de Armagh). Retrato de James Hutton. Autor: Abner Lowe Fotografía de Wegener. Autor: Alfred Wegener. Fuente: Wikipedia / Frontispiece of The Origin of Continents and Oceans. 4