La gallina de los huevos de oro Esopo He aquí la clásica fábula de Esopo acerca de la continua insatisfacción, lo que sucede cuando “tenerlo todo” constituye el lema de cada día. Un hombre y su esposa gozaban de la buena fortuna de tener una gallina que ponía un huevo de oro por día. Afortunados como eran, pronto dieron en pensar que no tenían suficientes riquezas e, imaginando que el ave debía estar hecha de oro por dentro, decidieron matarla para adueñarse al instante de toda la provisión de metal precioso. Pero cuando abrieron la gallina, descubrieron que era igual a cualquier otra ave de corral. Así que ni enriquecieron de inmediato, tal como esperaban, ni disfrutaron más del aumento cotidiano de su riqueza. La codicia desea más y pierde todo.