Introducción Las enfermedades cardiovasculares se deben a trastornos del corazón y los vasos sanguíneos, entre estas principales enfermedades se encuentran las cardiopatías coronarias, las enfermedades cerebrovasculares, el aumento de la tensión arterial, las vasculopatías periféricas, las cardiopatías reumáticas y la insuficiencia cardiaca. Estas han incrementado en las últimas décadas constituyendo actualmente una de las primeras causas de mortalidad a nivel mundial, en 2005 se les atribuyó 17,1 millones de vidas tanto en mujeres como en hombres (Organización Mundial de la Salud [OMS], 2009). Las cardiopatías reumáticas tienen como factor etiológico la fiebre reumática, ésta es una enfermedad inflamatoria autoinmune que afecta al corazón y las válvulas cardiacas así como al aparato subvalvular, deja secuelas crónicas conocidas como cardiopatía o valvulopatia cardiaca. Las valvulopatias cardiacas tienen una alta frecuencia en los países en desarrollo en los que hay una enorme prevalencia de fiebre reumática, la fiebre reumática afecta principalmente articulaciones, sistema nervioso y corazón produciendo daño al miocardio, deja cicatrices en el tejido específico de conducción lo que provoca alteraciones en el ritmo cardiaco, afecta el miocardio inespecífico lo que produce una dilatación en el corazón e insuficiencia cardiaca al igual que causa daño en las estructuras endocardiacas (Guadalajara, 2008; López, 2001; OMS, 2009; Rodríguez, 2005). Abundes y Santos (2005) afirman, que la insuficiencia aórtica (IAo) crónica se manifiesta hasta la segunda o tercera década de la vida. En IAo el volumen de sangre sobre el ventrículo izquierdo (VI) está aumentado, debido a que durante la diástole la sangre ingresa al VI proveniente de la aurícula izquierda y la aorta. Los mecanismos compensadores hacen que los pacientes con IAo crónica leve o moderada, generalmente estén asintomáticos. A medida que la reserva cardíaca se va reduciendo y la isquemia miocárdica aumenta la sintomatología se va desarrollando, generalmente esto ocurre hacia la cuarta o quinta década de la vida y por lo regular solo después de que exista una considerable cardiomegalia y disfunción miocárdica. Los síntomas de la IAo crónica severa resultan de la elevada presión pulmonar venosa e incluye generalmente disnea con el ejercicio, ortopnea y disnea paroxística nocturna. Estos mismos autores describen la estenosis aórtica (EAo) como el estrechamiento de orificio valvular causado por la incapacidad de las válvulas para abrir normalmente, produciendo pérdida de energía, el flujo sanguíneo se convierte en flujo turbulento menos eficiente, lo que incrementa el trabajo del ventrículo izquierdo, es asintomática por años. Las manifestaciones clínicas de la enfermedad son: disnea, síncope y angina; suelen aparecer entre la cuarta a quinta década de la vida. El síncope se debe a la incapacidad para elevar el gasto cardíaco debido a la estenosis; por lo general se debe a la disminución de la perfusión encefálica como consecuencia de la obstrucción fija, ocurre por el esfuerzo o por vasodilatación, en presencia de adecuado o inadecuado gasto cardíaco. La disnea es de aparición insidiosa y reduce de forma progresiva la capacidad funcional del paciente; se debe al producto del incremento progresivo del ventrículo izquierdo al final de la diástole, produciendo un aumento de la presión pulmonar venosa y edema pulmonar. El diagnóstico clínico se lleva a cabo a través de electrocardiograma, rayos X, ecocardiagrafía y el cateterismo cardiaco. Gorosquieta, Martínez y García (2008), presentaron el caso de una paciente con cardiomiopatía de Takotsubo en este caso aplicaron el proceso de enfermería empleando las taxonomías NANDA, NOC, NIC, describiendo que la aplicación del proceso permite el desarrollo de lenguaje estandarizado y permite organizar metodológicamente el trabajo enfermero, facilitando el registro y normalizando la práctica. Landeros y Viruega (2007), llevaron a cabo el método de trabajo enfermero en una persona con cardiopatía congénita acianógena del tipo estenosis aórtica y cambio valvular aórtico por prótesis biológica, En este caso clínico los autores aplicaron el proceso enfermero y refieren que este fortaleció el desarrollo de habilidades de la paciente en el cuidado y responsabilidad de su propia salud. Pérez, Domínguez, Álvarez, Cantalapiedra (2007), llevaron a cabo un método de trabajo enfermero en una persona con angiosarcoma cardiaco. En este caso clínico las autoras aplicaron el plan de cuidados en enfermería personalizado y adecuado al caso desde una visión bio-psico-social, empleando las taxonomías NANDA, NOC, NIC. Pérez (2004), llevó a cabo un método de trabajo enfermero en una persona con doble lesión de la válvula aórtica secundario a aorta bivalva, en el proceso enfermero empleó las taxonomías NANDA, refiriendo que la esencia de la disciplina de enfermería esta en el cuidado holístico de la salud de las persona. Parra y Heredia (2003), llevaron a cabo el método de trabajo enfermero a una persona con estenosis aórtica critica, las autoras refieren la utilización del proceso de enfermería empleando las taxonomías NANDA, NOC, NIC en este caso clínico, las autoras refieren que es de suma importancia aplicar el proceso de atención de enfermería para mejorar los esquemas de cuidados en este grupo de pacientes y así contribuir con la formación de personal de enfermería para que bride cuidados de excelencia. En la práctica de enfermería la aplicación del cuidado especializado en pacientes de cardiopatía es fundamental para aliviar las respuestas humanas en situaciones específicas de salud que conllevan a una práctica privilegiada. El objetivo del cuidado de enfermería especializado a pacientes con alguna cardiopatía es diverso y variado así como las necesidades y problemas de salud. El cuidado de enfermería especializado ve a la persona desde una perspectiva holística, considera al individuo y su entorno, toma en cuenta las necesidades fisiológicas, psicológicas, sociales, culturales, y espirituales con la finalidad de restablecer la salud (Baily, Lloyd, Claire, Neeson, 2003). El proceso de enfermería es un método científico que permite a las enfermeras brindar cuidados de manera racional, sistemática, homogenizada, el proceso tiene como uno de sus objetivos principales el mejorar la atención directa y de manera completa por que se procura impulsar y orientar la importancia de lograr una vigilancia de la salud en base a los problemas reales o potenciales de salud y las necesidades de la persona, haciendo uso de sus conocimientos, habilidades y actitudes de esta manera se brinda un cuidado con rasgos humanísticos y científicos (Potter, Perry, 2001). El presente trabajo se llevó a cabo con la finalidad de aplicar el proceso de enfermería en una paciente con doble lesión de la válvula Aortica, se realizó en el Hospital de Especialidades del Centro Médico “Manuel Ávila Camacho” del Instituto Mexicano del Seguro Social, se inicio con la valoración de datos objetivos y subjetivos, la cual se realizó a través de los 11 Patrones Funcionales de Salud (PFS) que han sido descritos por la Dra. Marjory Gordon (2007), posteriormente se llevó a cabo la identificación y clasificación de diagnósticos enfermeros en la taxonomía de la North American Nursing Diagnosis Association (NANDA), para sustentar el plan de cuidados de utilizaron los libros de Clasificación de resultados de enfermería (NOC) y por último la clasificación de las intervenciones (NIC). Los PFS, percepción-manejo de salud, nutricional – metabólico, eliminación, actividad – ejercicio, sueño – descanso, cognitivo – perceptual, autopercepción autoconcepto, rol – relaciones, sexualidad – reproducción, adaptación - tolerancia al estrés, valores – creencia, permitió la valoración sistemática de la persona, con una visión completa tanto en características subjetivas, como objetivas (Gordon, 2007). La valoración de los PFS permite identificar cuales están funcionales, potencialmente disfuncionales, o disfuncionales. Los PFS que manifiestan un nivel óptimo de funcionamiento permite a los individuos, familias o comunidades desarrollar su potencial máximo en sus diversas actividades, los patrones potencialmente disfuncionales de salud proyectan factores de riesgo que pueden conducir a un desequilibrio en uno, algunos o todos los patrones, los patrones disfuncionales de salud refieren la existencia de problemas en uno, algunos o todos los patrones, lo que puede darse en la enfermedad o conducir a la misma (Gordon, 2007). Conclusiones La valoración de la paciente con cardiopatía en el proceso de enfermería permite conocer al paciente tanto subjetiva como objetivamente, esto logra que se formulen diagnósticos de enfermería más acertados, y que afectan con mayor prioridad a la persona, así mismo se pudieron establecer objetivos e intervenciones específicas para la situación de salud por la que pasa esta persona. Al llevar a cabo el proceso de enfermería se interactúa con la persona de manera muy directa, con lo que se logra ir evaluando la eficacia de las intervenciones plateadas y como es que están siendo realizadas y con una mayor frecuencia lo que permite adecuar las intervenciones si es necesario. El proceso de enfermería en este caso específico de salud permitió la identificación de las competencias de enfermería y con ello se engrandece el trabajo disciplinar en el área especifica la enfermería cardiovascular. Los avances que se obtuvieron con L. E. son en la identificación y prevención de signos de deterioro de la salud, con la finalidad de mantener un estado de salud óptimo dentro de la experiencia de salud en la que se encuentra, a pesar de las intervenciones llevadas a cabo los cambios no son representativos por la falta de seguimiento a un plazo mayor. Al aplicar el proceso de enfermería empleando las taxonomías NANDA, NOC, NIC, permitió el desarrollo de un lenguaje estandarizado logrando así organizar metodológicamente el trabajo enfermero y a la vez se facilitó el registro de cada una las actividades llevadas a la práctica.