WAFFEN SS:NAPOLEON 16/07/13 14:02 Página 5 Jean-Luc Leleu WAFFEN-SS Historia completa de las tropas más temidas de la Segunda Guerra Mundial Traducción del francés Carlo Caranci WAFFEN SS:NAPOLEON 16/07/13 14:02 Página 19 INTRODUCCIÓN Las «Waffen-SS». Por sí solas, estas palabras que designan la organización paramilitar de las SS poseen un innegable poder evocador. En todo caso, no dejan indiferente. La abundante bibliografía que se ha dedicado después de la guerra a este tema en Alemania, en Francia o en los países anglosajones lo demuestra, al igual que el éxito de ventas de ciertos títulos.1 Por otro lado, el tema ha sido tratado suficientemente, lo que ha llevado a algunos a afirmar perentoriamente que «todos conocen a las Waffen-SS».2 Ante una renovación de la problemática, parecería que es mucho más pertinente, en realidad, ir diciendo que «todos piensan que conocen a las Waffen-SS».3 En realidad, ¿qué sabemos realmente sobre esta organización armada? Surgidas de la exigua tropa que se encargaba de la protección próxima del «Führer» en la década de 1920, durante mucho tiempo consistió en unos efectivos sin importancia en el seno del Partido Nacionalsocialista (NSDAP) y de sus numerosas organizaciones: 8 hombres el día de su fundación oficial, el 9 de noviembre de 1925, 280 miembros cuando Himmler se hizo cargo de ella en enero de 1929, para llegar a los 521.174 hombres en el momento de la llegada al poder de Hitler el 30 de enero de 1933.4 Pese a esta rápida inflación, las SS eran entonces numéricamente insignificantes en el seno de las populares SA, dirigidas por Röhm, a las que, por otro lado, estaban subordinadas. La eliminación física de estas últimas y del ala revolucionaria del NSDAP durante la «noche de los cuchillos largos», el 30 de junio de 1934, y, asimismo, el control progresivo por parte de Himmler de los órganos de seguridad y de represión del Reich, en detrimento de Göring, abrieron la vía, con todo, a su independencia y a su desarrollo, permitiéndole adquirir mayor influencia en el seno del aparato nazi, que ya se confundía con el aparato del Estado. A través de las cada WAFFEN SS:NAPOLEON 16/07/13 14:02 Página 20 20 WA F F E N - S S vez más numerosas prerrogativas atribuidas a Himmler, las SS, con toda evidencia, se convertían en un órgano ejecutivo que dependía exclusivamente de Hitler para los asuntos de seguridad. En este marco, la creación en marzo de 1933 de una tropa militarizada y acuartelada había respondido rápidamente a una doble voluntad del régimen: por un lado, disponer de una guardia cercana, de acuerdo con la misión asignada inicialmente a las SS; y por otro, garantizar la existencia de una policía política de Estado susceptible de suplir a la policía o al ejército en caso de disturbios internos. Así pues, ¿cómo comprender que esta fuerza paramilitar destinada al interior y de efectivos escasos en vísperas de la guerra (23.000 hombres en diciembre de 1938) se convirtiera en un componente de importancia en la estrategia de mando alemana mediado el conflicto? ¿Cuáles son los factores que explican este cambio radical de función? ¿Cómo explicar que una organización de ideología profundamente racista y xenófoba se abriera a tantos pueblos diferentes, hasta hacer creer, después de la guerra, que había sido precursora del ejército europeo que algunos dirigentes políticos occidentales deseaban en aquel momento? Y, sobre todo, ¿cómo explicar que la posteridad no haya recordado de los soldados de las Waffen-SS más que su «fanatismo», que los habría conducido a sacrificarse en el combate, pero también a asociar su nombre a los crímenes más sangrientos cometidos tanto en el frente como en los territorios ocupados? Si consideramos estas cuestiones, vemos que numerosos aspectos de la Historia siguen estando en la sombra. Es bastante lógico que las publicaciones partidarias de carácter polémico no hayan hecho avanzar el debate histórico.5 Las monografías de las formaciones SS redactadas por sus exmiembros son, sin duda, fuentes de información que no hay que ignorar, pero también hay que tener en cuenta que el espíritu crítico, lógicamente, está ausente. Por otro lado, siempre es peligroso intelectualmente dejar que sean los propios actores los que escriban la Historia. Por su parte, los que se han ocupado de los crímenes de guerra se han dejado sumergir por la emoción. Al tratar superficialmente a los verdugos para con- WAFFEN SS:NAPOLEON 16/07/13 14:02 Página 21 INTR ODUCCIÓN 21 centrarse mejor en las exacciones cometidas, esta literatura, en efecto, es un testimonio, pero sin que en realidad nos permita comprender. En cuanto a la literatura comercial, esta se ha apoderado con gran alegría de estos asuntos escabrosos, contribuyendo a alimentar y a propagar el mito de unas tropas de élite adiestradas de manera superior, con gran apoyo de fotografías publicadas por la propaganda de la época. Ante esta avalancha de publicaciones, los medios universitarios, sin duda, no han desertado, pero resultan estar muy aislados. A mediados de la década de 1960, el trabajo de George Stein asentó las bases sobre las que durante mucho tiempo se han sustentado la mayor parte de los estudios. Al abordar por primera vez el asunto de manera objetiva y sólidamente documentada, trazó las etapas del desarrollo de las Waffen-SS y de su papel militar a lo largo del conflicto diferenciándolas (pero sin aislarlas) de la nebulosa de otras organizaciones policiales y administrativas SS.Teniendo en cuenta la amplitud de la tarea y la falta de perspectiva con relación al mito, esta obra, con todo, muestra ya sus límites.6 Pero, muy afortunadamente, otros estudios en profundidad sobre la política de desarrollo de las SS o de las Waffen-SS han ido llegando, entre tanto, para completar la perspectiva.7 Otras cuantas se han centrado específicamente en las operaciones de reclutamiento.8 Por su lado, las no muchas monografías universitarias dedicadas a las divisiones SS parecen haber llegado al punto de compensar las visiones eufemísticas de las obras equivalentes redactadas por veteranos de las SS. Por muy pertinentes que sean, el alcance de sus conclusiones queda limitado en el fondo solo a las formaciones que son su objeto de estudio.9 Entre todas, son las diferentes publicaciones de Bernd Wegner las que han marcado los avances más significativos, localizando una problemática realmente innovadora sobre el tema.10 A través de una tesis de doctorado dedicada al cuerpo de oficiales de las Waffen-SS, permite que se capte mejor la singularidad de estos soldados políticos: combatientes cuya incorporación no se limitaba solo, como para el militar de carrera, al tiempo de guerra contra un adversario definido, sino que mostraba todo su sentido en una lucha permanente en nombre de la ideología nacionalsocialista.11 Este trabajo, sobre todo, ha permitido renovar profundamente el género. Dejando a un lado el campo de las actividades militares de las Waffen-SS, WAFFEN SS:NAPOLEON 16/07/13 14:02 Página 22 22 WA F F E N - S S ha mostrado, lo que es incluso mejor, su lugar en la estrategia de expansión política de la Reichsführung-SS, el aparato de dirección de las SS a escala del Reich.12 Con todo, numerosas cuestiones siguen en suspenso, mientras que recientes avances historiográficos suscitan nuevos interrogantes. En el primer caso, es forzoso reconocer que falta todavía un estudio de lo que fueron las Waffen-SS como instrumento militar, tomando en consideración todos los campos de actividad y permitiendo así relativizar los aspectos de la cuestión unos respecto a los otros. Por un lado, valorando la importancia de las Waffen-SS en la estrategia política de la Reichsführung-SS, los trabajos llevados a cabo han privilegiado una visión «desde arriba», ignorando a la tropa como tal.13 Por el otro, la literatura, científica o no, ha mostrado ampliamente la tendencia a interesarse por la «historia de las batallas», relegando las demás cuestiones a un segundo plano. Si bien este género suele despertar el interés de un público apasionado por los hechos de armas, ya desde hace mucho tiempo ha mostrado sus límites a menos que se vea sustentado por una problemática que supere la narración de las operaciones. Entre ambos polos existe, pues, una gran laguna sobre lo que fueron estas tropas, tanto desde el punto de vista sociológico como profesional. ¿Qué hay de sus recursos humanos, de las estructuras de sus unidades, de su aprovisionamiento, de su instrucción, de sus condicionamientos mentales, de su empleo estratégico, de su función social, de su valor militar e, in fine, de su comportamiento? Con mucha frecuencia existe como respuestas a cada uno de estos temas una sólida y tenaz reputación derivada de la propia guerra. Ahora bien, ya se ha demostrado que las principales ideas vehiculadas sobre el adoctrinamiento o sobre el «sobreequipamiento» de las tropas SS merecen ser reconsideradas.14 Por otro lado, junto a los interrogantes relacionados intrínsecamente con las Waffen-SS, los progresos registrados en los dos últimos decenios por la investigación nos llevan igualmente a renovar otro interrogante. Cargar sobre las Waffen-SS todos los crímenes que se cometieron con el fin de oponerlas a la Wehrmacht —es decir, al ejército alemán que englobaba al ejército de tierra (Heer), a la marina (Kriegsmarine) y a la aviación (Luftwaffe)— es un punto de vista que ya está superado. Sin duda, el cur- WAFFEN SS:NAPOLEON 16/07/13 14:02 Página 23 INTR ODUCCIÓN 23 sor se ha quedado bloqueado, invariablemente, sobre los colores más sombríos de la representación colectiva de las SS, de las ideas que encarnaba, y de los crímenes que perpetró —sobre todo, la puesta en práctica del genocidio—. Pero el ejército alemán, por su lado, vio empañar la fama casi virginal con la que le habían adornado sus antiguos generales con el fin de facilitar su reconstitución en el seno de la Alianza Atlántica en la década de 1950. La idea de que llevó a cabo una guerra «limpia» ha muerto. Una vez establecida su participación (al menos parcial) en los crímenes de guerra, en la represión ciega en los territorios ocupados, en el exterminio masivo de prisioneros de guerra soviéticos o en el genocidio, y teniendo en cuenta la profunda penetración de las ideas del régimen en sus filas,15 podemos plantearnos la cuestión legítimamente: ¿dónde estaba la diferencia básica entre las Waffen-SS y la Wehrmacht? Finalmente, los distintos puntos de vista considerados derivan del postulado de que las tropas de las Waffen-SS fueron bien «soldados como los demás» (Konrad Adenauer),16 o bien instrumentos dóciles de su Reichsführung. Ahora bien, a la inversa de estas dos hipótesis, la fuerte personalidad de los comandantes de las formaciones más antiguas y la tardía centralización de las ramas armadas de las SS permiten suponer la existencia de un modo de funcionamiento más o menos autónomo y, por lo tanto, alejado del modelo jerárquico militar tradicional.17 El presente estudio se propone, pues, determinar si (y en qué) las Waffen-SS representaron una entidad específica en el seno de las distintas fuerzas armadas alemanas durante la guerra. Resolver estas cuestiones nos lleva necesariamente a elegir. El hecho de abordar el asunto de manera transversal conduce, en efecto, a la multiplicación de los ángulos de perspectiva, sean políticos, ideológicos, técnicos, profesionales, operativos, estratégicos, sociológicos o psicológicos. Aunque no contemos las unidades de tamaño inferior, existieron unas cuarenta divisiones SS a lo largo del conflicto y, aunque no podamos ser más precisos, parece ser que más de 800.000 hombres sirvieron bajo su estandarte durante la guerra.18 Así, la idea preconcebida ha consistido en considerar de manera privilegiada a los cuerpos de combate principales de las Waffen-SS, es decir, las formaciones motorizadas y acorazadas SS, de WAFFEN SS:NAPOLEON 16/07/13 14:02 Página 24 24 WA F F E N - S S reclutamiento esencialmente alemán. De hecho, son estas las que han dado lugar a la reputación de las Waffen-SS. En comparación, el papel atribuido a las formaciones de reclutamiento extranjero ha resultado ser, por lo general, muy pobre. Para captar el comportamiento de las tropas SS, parece oportuno, por otro lado, multiplicar los zooms sobre unidades, combates o teatros de operaciones concretos. Respecto a todo esto, los territorios que fueron colocados en seguida bajo la tutela del mando alemán en el oeste (Países Bajos, Bélgica y Francia metropolitana —esta en su totalidad tras la ocupación de la zona sur en noviembre de 1942—) se vieron favorecidos por varias razones. Para comenzar, y pese a una presencia muy fluctuante, las tropas de las SS no dejaron nunca de ser desplegadas en este teatro desde mayo de 1940 a mayo de 1945. Alrededor de un tercio de las fuerzas operacionales SS transitaron por aquí antes o después, a lo largo de la guerra (unos 118.000 hombres de 368.000 el 30 de junio de 1944, por ejemplo).19 Dos campañas militares importantes en 1940 y en 1944-1945 se han adaptado posteriormente al marco cronológico, permitiendo observar la evolución profesional de la tropa y su lugar en el orden de batalla alemán. Por otro lado, el control de este conjunto geográfico por un órgano militar alemán único (el comandante en jefe en el oeste, Oberbefehlshaber West, abreviado Ob.West)20 facilita el acceso a las fuentes documentales. La red administrativa civil y militar mucho más estrecha en este teatro de operaciones ha resultado ser una ventaja al facilitar la identificación de las tropas involucradas en función de su comportamiento.21 Esto, por ejemplo, no sería posible en los territorios del este, donde la amplitud de las destrucciones y las investigaciones tardías llevadas a cabo sobre los crímenes perpetrados complican todo intento de este tipo (209 ciudades y 9.200 pueblos incendiados bajo la ocupación alemana solo en Bielorrusia, de ellos, 628 pueblos con sus habitantes).22 Finalmente, los territorios del oeste presentaban dos casos diferentes para las SS y para su ideología racial. En este caso, los Países Bajos y Flandes pertenecían a la esfera «germánica», mientras que Francia y Valonia quedaban excluidas (la última al menos en un principio). Las diferencias de comportamiento que pudieron engendrar estas dos clasificaciones ofrecen, pues, una perspectiva potencialmente interesante. WAFFEN SS:NAPOLEON 16/07/13 14:02 Página 25 INTR ODUCCIÓN 25 Considerando la problemática seleccionada, el tratamiento global del asunto se articulará en torno a cinco grandes temas que, después de todo, se resumen en otras tantas cuestiones muy simples. ¿Quiénes eran los hombres que componían las formaciones SS? ¿Cómo fueron preparados para la batalla? ¿De qué manera se vieron condicionados para combatir? ¿En qué tareas se los empleó? ¿Cuál fue su comportamiento en el marco de sus misiones? Previamente, una primera parte permitirá que nos ocupemos de la política de desarrollo de las SS. De hecho, y al contrario que la Wehrmacht, la creación de cada nueva formación SS, antes y durante el conflicto, deberá comprenderse, de entrada, como un acto político antes de serlo como un acto militar. Asimismo, deberemos centrarnos en la política de expansión de la Orden Negra (como se llamaban a sí mismas las SS) que no era, en sí misma, ineluctable y aún menos lógica.