10 de diciembre de 2012 • Publicación No. 61 Así reza un viejo refrán, el cual se refiere como un consejo para quienes pretenden juzgar o meterse en asuntos ajenos. Por muchos años el oficio de zapatero estaba únicamente asociado a los hombres, pero en nuestros días el sector femenino poco a poco va ingresando a formar parte de este oficio. Es por ello que el Instituto Salvadoreño de Formación Profesional (INSAFORP), en el marco del Programa de Apoyo Temporal al Ingreso (PATI) Banco Mundial, en su tercera convocatoria, 1 desarrolló el curso sobre Elaboración Artesanal de Calzado, en el cual participaron 19 personas residentes del municipio de Panchimalco, del departamento de San Salvador. El curso fue ejecutado a través del Centro de Formación Consultoría y Capacitación Empresarial (APRENDA S.A.), en el que participaron 19 personas (13 mujeres y seis hombres). “Tal vez a ellas les ha gustado y se han decidido o la persona que les ha indicado les ha dicho que la zapatería también es buena, para mí que ellas van adelantadas, ha sido bueno el desempeño de ellas”, nos comentó el Instructor del Curso de Elaboración Artesanal de Calzado, Manuel Orellana. “Para poder elaborar el zapato primero tiene que elaborarse la plantilla, después se corta el material es el alistado, plantilla y cortado de material es el alistado, ya montado el material es forrar la horma que decimos, poner la camisa, ese es el proyecto aquí, alistado y enzuelado”, explicó el Instructor. Carmen Elena Hidalgo, de 35 años de edad es una de las participantes del curso, ella es madre soltera de dos niñas (cinco y 12 años), vive con sus hermanas y se ha ganado la vida haciendo oficios domésticos sus vecinos, como elaborar tortillas, lavar, planchar, entre otros. Carmen Elena considera que con los conocimientos recibidos en el curso, ella está lista para poder obtener un empleo, “al principio si nos costó pero hoy ya le agarramos el hilo… vamos a ver donde nos colocan de zapateras por allá, vamos ir a buscar trabajo en alguna empresa de zapatos”, nos comentó. Pero otros participantes ven en el curso de Elaboración Artesanal de Calzado, una oportunidad para emprender un negocio, ya que consideran que pueden elaborar calzado y luego venderlos con sus vecinos o en cantones aledaños. “Si yo pienso seguir, porque está otro compañero que vivimos cerca y le digo yo que compremos las cositas, así como él (instructor) nos explica que con poquito podemos empezar y poder poner una zapatería… yo vivo en el Cerro El Chulo, yo creo que si vendo los zapatos, a mi se me ha puesto que si los vendo porque me estaban diciendo ahora, mira si te dan zapatos véndelos a nosotros”, nos comentó Doña Marta Yolanda Pérez, otra participante del curso. 2 Doña Marta tiene 53 años de edad, ella no sabe leer ni escribir, es ama de casas y vive con sus tres hijos quienes se dedican a labores agrícolas en la zona, para ella el saber elaborar calzado le permitirá poner su propio negocio, ya que considera que la zapatería es un oficio rentable. “Yo les he aclarado que el zapato así como esta sandalita, por docena lo más que lo pueden dar es a $3.00, por docena pero en el campo donde van ellos a vender porque allá lo dan ellos a otro precio, pero ahí ellos al darlo a $3.00 ó $3.50, ellos tiene un margen de ganancia como de $1.50 a $2.00, porque como les explico yo, se compra en cantidades”, nos explicó el Instructor, Manuel Orellana. Pero el entusiasmo de los participantes del curso es general, la mayoría de ellos han pensado en asociarse, “con otros compañeros pensamos asociarnos para una cooperativa y seguir adelante con este proyecto ya que se nos dio la oportunidad… somos 12 compañeros del mismo curso, la idea es algunos enzuelar, otros alistar y otros que se van a dedicar a la venta del calzado… estamos concientes que al principio no vamos a sacar lo esperado pero al final si nos va a quedar la ganancia por la elaboración, por nuestra mano de obra verdad, porque igual todos podemos hacer las tres fases de zapato que es alistar, enzuelar y cocer”, nos comentó Gustavo Flores, de 22 años de edad y participante del curso. El curso tuvo una duración de 80 horas, se ejecutó de 7:00 a.m. a 1:00 p.m. del 13 al 30 de noviembre de 2012, en el participaron residentes de los cantones San Antonio, Amatitan, Cerro El Chulo, Caserío El Barrial, todos de Panchimalco. 3