La Dimensión Simbólica del Ser Humano Carlos Muñoz Gutiérrez La Dimensión Simbólica del Ser Humano __________________________________ 1 1.- La Semántica___________________________________________________________ 2 2. ¿Qué es la Verdad? ______________________________________________________ 6 3.- Teorías de la Verdad ____________________________________________________ 8 3.1. El Realismo: La Verdad como Correspondencia ____________________________________8 3.2. La Certeza _________________________________________________________________13 3.3. La Teoría Pragmática de la Verdad______________________________________________16 3.4. El Idealismo: La Verdad como Coherencia _______________________________________18 3.5. La Verdad Matemática: La definición de Verdad de A. Tarski ________________________19 3.5.1. Condiciones para definir 'ser verdadero en un lenguaje' __________________________21 3.5.2 La Definición de Verdad __________________________________________________23 4. El Significado __________________________________________________________ 24 4.1. El Concepto________________________________________________________________26 4.1.1. Percepción y Concepto ___________________________________________________27 4.1.2. Los Modelos Cognitivos __________________________________________________28 4.1.2.1. Esquemas de Imágenes _______________________________________________30 4.1.2.2. Estructuras Proposicionales____________________________________________33 4.1.2.3. Proyecciones metafóricas _____________________________________________34 4.1.2.4. Proyecciones Metonímicas ____________________________________________36 4.1.3. Categorías _____________________________________________________________39 4.1.4. Resumen ______________________________________________________________42 1 1.- La Semántica Nuestro recorrido evolutivo hasta el ser humano ha destacado la propiedad tal vez más notable y diferencial del hombre respecto del resto de los seres naturales: el lenguaje. Pero el lenguaje no es sólo un medio de comunicación entre los individuos del grupo. Es sobre todo la posibilidad de representarnos simbólicamente el mundo, esto es, de poder pensar, imaginar, proyectar, planificar y recordar los hechos y las cosas independientemente de su ocurrencia, de su tiempo en el que suceden o están. Es la capacidad de pensar conceptualmente, es decir, de poder categorizar los elementos del mundo en clases y estas clases nos permiten generalizar nuestros pensamientos e ideas a todos los elementos de la clase. Esto nos permite acumular y disponer de un conocimiento sobre la realidad que podemos transmitir de generación en generación creando lo que hemos denominado cultura. La mejor herramienta para que cada individuo humano que nace en la tierra no tenga que empezar a conocer el mundo de nuevo. La herencia cultural nos ahorra camino. Porque, ¿quién de vosotros podría imaginar y diseñar un coche o un tren o un ordenador por sí solo? Esta capacidad de utilizar símbolos o signos para referirnos a lo real sin que lo tengamos delante se denomina semántica y no es únicamente una propiedad del lenguaje, sino que, más extensamente, lo es de nuestra mente. Nuestro cerebro consciente es semántico. Pero centrándonos en el lenguaje: La semántica es la dimensión del lenguaje que relaciona los elementos lingüísticos, nombres, predicados, oraciones, con los objetos, las acciones y propiedades y los hechos del mundo. La semántica tiene que ver con nuestra capacidad de representarnos el mundo mediante símbolos. Recordemos brevemente lo que es un símbolo y cuales son sus componentes: Un símbolo o signo tiene una estructura triangular: a) El Significante: Es el objeto lingüístico arbitrario. Una secuencia de grafías o fonemas que tiene un existencia física. Por ejemplo: la palabra 'mesa'. b) El Significado: Es la intensión del significante y es un concepto o categoría que expresa las propiedades generales y significativas de un objeto de la realidad que denotamos con el significante. Por ejemplo, la palabra 'mesa' significa 2 un tablero con cuatro patas capaz de soportar un peso o una fuerza. El significado nos permite localizar la referencia, el objeto del que habla el significante. c) La referencia o extensión es el objeto real del mundo representado por el significante. Las referencias de los posibles tipos de significantes del lenguaje serían las siguientes: • El nombre refiere a un objeto del mundo. • El predicado refiere a una propiedad del mundo • La oración refiere a un valor de verdad. Símbolo o Signo Significante 'mesa' Representa Verdad Significa Significado Significado: 'tablero con patas capaz de soportar objetos o fuerzas sobre él...' Referencia Localiza Fijémonos en la última afirmación. Efectivamente toda oración remite a un hecho si el hecho ocurre, en cuyo caso decimos que esa oración es verdadera; si no ocurre, decimos de ella que es falsa. La verdad entonces es una propiedad de las oraciones que refieren, remiten o representan hechos en el mundo. Naturalmente cada oración tiene o puede tener un significado distinto, pero las referencias posibles de las oraciones son sólo dos: lo verdadero o lo falso (al menos en una semántica bivalente). La verdad es, en consecuencia, una noción semántica por medio de la cual valoramos o juzgamos la relación que se establece entre las oraciones que expresan hechos del mundo y estos mismos hechos. Esta consideración del signo permitió a las ciencias que tratan con el lenguaje abordar el estudio de éste mediante una metodología atomista y una ontología realista 3 que consideraba al lenguaje como una estructura articulable, generativa, veritativafuncional que era independiente de quien lo usara, del contexto en que se usaba e incluso de los procesos de comprensión o creación de las formas lingüísticas. Esta estructura del lenguaje representaba fielmente la estructura del mundo. El mundo se compone de cosas y de relaciones y disposiciones de las cosas, los hechos. Así el mundo, los hechos del mundo, lo que sucede podía verificar o falsear lo que se dice sobre él. Mundo y lenguaje mantenían una relación isomórfica. Es decir, lo que pasa en el mundo se expresa exactamente con el lenguaje y lo que dice el lenguaje se corresponde o no con lo que pasa en el mundo. Sin embargo, como podíais imaginar, las cosas no son tan sencillas. Leamos el siguiente texto de Nietzsche: "¿Qué es entonces la verdad? Un ejército en movimiento de metáforas, metonimias, antropomorfismos, en resumidas cuentas, una suma de relaciones humanas que han sido realzadas, extrapoladas y adornadas poética y retóricamente y que, después de un prolongado uso, un pueblo considera firmes, canónicas y vinculantes; las verdades son ilusiones de las que se han olvidado que lo son; metáforas que se han vuelto gastadas y sin fuerza sensible, monedas que han perdido su troquelado y no son ahora ya consideradas como monedas, sino como metal".( F. Nietzsche. Verdad y Mentira en sentido extramoral.) ¿Qué quiere decir Nietzsche aquí? ¿Por qué define la verdad como un ejército en movimiento de metáforas, metonimias y antropomorfismos? Nietzsche comprende bien el problema que dejábamos planteado. El problema que aparece a la hora de intentar comprender el lenguaje y de definir la verdad y que nos exige a la vez pensar qué es el mundo o cómo lo conocemos. Pongamos un ejemplo, ¿en qué medida podemos decir que son verdad oraciones como las siguientes? (1) Jaime anda siempre por la nubes. (2) La boca del túnel estaba oscura. (3) Leonor es un témpano de hielo. 4 A primera vista estas oraciones son claramente falsas. No es creíble que alguien ande por las nubes, que los túneles tengan boca o que las persona sean témpanos de hielo. ¿Pero no son en algún sentido estas oraciones verdaderas? Lo que Nietzsche quiere expresar en el texto es que muchas de las realidades o hechos del mundo se comprenden y, en consecuencia, se conocen en el proceso que hacemos de conceptuarlos y de categorizarlos. De esta manera, si nuestro acercamiento a esas realidades se realiza metafóricamente, su verdad no será más que una mera metáfora que con el paso del tiempo arraiga y se consolida en nuestro lenguaje, llevándonos a creer que los túneles tienen boca, las botellas cuello, que se puede andar por la nubes o que las personas son témpanos de hielo o brasas ardiendo. No todas las entidades del mundo están ahí afuera y tienen una determinada forma de ser independiente del ser humano que las contempla, muchas de las realidades que pueblan el mundo de los seres humanos se conforman en la relación que mantienen entre sí, en el esfuerzo que hacemos por comprender lo que nos rodea. No son pocas estas realidades: abarcan desde la mayor parte de los conceptos científicos teóricos hasta nuestros sentimientos y emociones. Visto de esta manera el lenguaje se presenta ahora con una función más general que la de la comunicación entre las personas o la representación del mundo. El lenguaje es sobre todo la herramienta que tenemos para crear sentido a nuestro alrededor, para comprender lo que nos pasa y lo que sucede. Y la comprensión, aunque contiene inevitablemente esta dimensión semántica, sin embargo, no depende de la verdad o de la falsedad. Es más, a menudo, la verdad y la falsedad dependen de nuestras formas de comprensión, de nuestros modos de crear sentido. En conclusión, de la estructura del símbolo o del signo obtenemos dos valores semánticos fundamentales: La verdad y el significado. La verdad resulta un valor fundamental para la vida humana y por eso, en aquellos ámbitos de experiencia humana en los que resulta indispensable determinar “la verdad de los hechos”, como por ejemplo la ciencia o la impartición de justicia, los seres humanos han tipificado ‘lo verdadero’ en códigos escritos –el método científico o los códigos legales- para poder vivir en comunidad. Sin embargo, el significado es algo mucho más complicado y difícil de unificar. Con el significado van asociadas numerosas posibilidades semánticas que se han mostrado rebeldes a su estudio y a su comprensión. Aun cuando nos permiten precisamente comprender lo que sucede, resultan paradójicamente incomprensibles. Estas posibilidades o características semánticas de los símbolos son las metáforas y metonimias y todos 5 los tropos que el lenguaje –no sólo el poético- nos brinda, la sinonimia, la polisemia, etc. Verdad y Significado son las dos caras del signo que no siempre se corresponden y que mantienen una relación confusa y extraña que tendremos que analizar en algún detalle. Vayamos por partes. 2. ¿Qué es la Verdad? ¿Qué es la Verdad? Sin duda ésta es una de las grandes preguntas filosóficas. Tiene claramente el aire de un problema difícil de resolver. ¿Quién se atreve a dar una respuesta? Cualquier respuesta dejará una grieta por donde podamos cuestionarla. Tal vez, antes de arriesgarnos a dar una respuesta, debamos realizar algún análisis. ¿Qué es lo verdadero? ¿De qué tipo de cosas se puede decir que 'es verdadero o falso'? Porque lo primero que debemos advertir es que la verdad es un valor, hablamos de valores de verdad. Un valor no es algo que pertenezca al mundo. En el mundo hay cosas u objetos en general, y las disposiciones o relaciones entre estas cosas se denominan hechos. Por ejemplo, en el mundo hay sillas y ventanas, y puede ser un hecho que 'la silla esté al lado de la ventana'. ¿Tiene sentido preguntarse sobre si este hecho tiene un valor de verdad? No, que 'la silla esté al lado de la ventana' es un hecho que no tiene valor como tal. Pero sí tendría valor, si hubiera alguien que considerara este hecho en función de una intención, un sentimiento o una creencia o disposición. Por ejemplo, imaginemos la situación en la que estamos decorando una casa y hemos puesto la silla al lado de la ventana. Tras observar el resultado pensamos o decimos o sentimos que: a) No nos gusta como queda, No es bello o no es agradable. b) No resulta funcional porque la silla queda separada de la mesa. No es útil. c) La orientación oeste de la ventana supone que la luz del sol incidirá de una determinada manera que no es cómoda para estar sentados en la silla. La belleza, la utilidad o la comodidad son valores que los seres humanos deseamos que tengan la cosas en determinadas circunstancias, o por medio de los cuales juzgamos los hechos que nos rodean. Si la verdad es un valor, ¿qué tipo de valor es? Imaginemos ahora, que después de dar por finalizada la decoración decimos a un amigo que pusimos la silla al lado de la ventana. Nuestro amigo puede juzgar nuestra 6 afirmación como verdadera o como falsa. ¿En función de qué? Si efectivamente la silla quedó al lado de la ventana nuestro enunciado será verdadero, pero si no fue así, nuestra afirmación será falsa. El problema para nuestro amigo que juzga la verdad o la falsedad de nuestra afirmación es cómo puede verificar si digo la verdad o no. De todo esto obtenemos una conclusión importante, pero con ella se nos abre un nuevo problema. a) La conclusión: lo que es susceptible de ser juzgado o considerado verdadero o falso son nuestros pensamientos o la expresión lingüística de ellos. Son las oraciones aseverativas√ del lenguaje o los pensamientos sobre la realidad los que poseen valores de verdad. Es cierto, que a veces hablamos de oro verdadero, o decimos de algo que es de verdad. Por ejemplo, al contemplar una buena reproducción en cera de una persona podemos preguntarnos si esa persona es de verdad. Aquí queremos decir si es real, pero también es real la figura de cera, al igual que el oro falso también es real. En este caso, en realidad, lo que hacemos es comparar una realidad con su nombre. Es decir, también establecemos una correspondencia entre el objeto y su nombre o entre el hecho y la oración que lo expresa, y queremos saber si esta correspondencia es adecuada. b) El problema: necesitamos un criterio para poder verificar si nuestras aseveraciones sobre los hechos del mundo son verdaderas o falsas. Es decir, necesitamos una manera de ir a mirar al mundo para ver si lo que decimos de él se corresponde, se adecúa, se ajusta o representa fielmente al hecho del mundo. La verdad es, en consecuencia, una noción semántica por medio de la cual valoramos o juzgamos la relación que se establece entre las oraciones que expresan hechos del mundo y estos mismos hechos. A partir de esta aclaración podemos ahora intentar dar una definición de verdad teniendo en cuenta que para producirla tenemos que relacionar lenguaje (o conocimiento) y mundo. La verdad no sólo depende de cómo produzcamos conocimiento o de cómo lo √ Hay distintas formas de denominar a las oraciones que expresan o representan un hecho del mundo. Oraciones afirmativas (aunque éstas puedan expresar hechos negativos, como 'Hoy no he ido a clase'), enunciados, aserciones, proposiciones. En general, independientemente del nombre que usemos, lo que puede tener valor de verdad son la oraciones que expresan hechos del mundo. Las oraciones interrogativas y exhortativas no tienen valor de verdad. Por ejemplo una pregunta no tendría un valor de verdad, tampoco lo tendría la expresión de un deseo, como 'Ojala llueva'. 7 expresemos, sino también y muy fundamentalmente, de cómo creamos que es el mundo. Pero, ¿es que el mundo puede ser de distintas maneras? 3.- Teorías de la Verdad 3.1. El Realismo: La Verdad como Correspondencia El punto de partida del sentido común ante el problema de la realidad es pensar que el mundo es algo que está ahí fuera, independiente del sujeto. Hay árboles, plantas, edificios, etc. que estaban antes de que alguien vaya a contemplarlos y que continuarán cuando nadie los contemple. Suponemos que permanecen, en su esencia, iguales de día o de noche, mientras alguien los considera o no. ¿Pero, quién nos asegura que las cosas seguirán ahí y en las mismas condiciones cuando dejemos de tener de ellas una percepción directa? Concedemos existencia continua y constante a los objetos, al menos mientras existen, objetos de los que es muy fácil advertir que cambian a lo largo de su vida. ¿Hasta qué punto aceptamos que cambien? Si nos teñimos el pelo de rubio, aceptaremos ser los mismos; si nos lo cortamos, también; si perdemos un brazo o una pierna, quizá también. Pero si un día amanecemos con el sexo cambiado, con treinta años más o menos... Recordemos la Metamorfosis de Kafka. Una mañana G. Samsa amanece convertido en un ser monstruoso. Él siente que es el mismo que era, pero los otros no pueden reconocerle. Por Realismo Metafísico entendemos la postura ontológica que afirma: (1) El mundo consiste en una totalidad fijada de objetos independientes de la mente o sujeto. (2) Hay exactamente una descripción verdadera y completa del ser, de la esencia, del mundo. (3) La verdad es la correspondencia o adecuación entre pensamiento y realidad Naturalmente, con toda postura ontológica va asociada otra epistemológica que nos dice qué podemos conocer. El realismo suele aceptar una concepción de la verdad como correspondencia. Si el mundo es de una determinada manera, independiente8 mente del sujeto que lo contemple, nuestras afirmaciones sobre el mundo serán verdaderas si se corresponden con la realidad, es decir, si existe una adecuación entre las cosas y nuestro pensamiento sobre ellas. Aristóteles, que fue el primer realista que diseñó una teoría científica realista, definía la verdad de la siguiente manera: Decir de lo que es que no es o de lo que no es que es, es falso; mientras que decir de lo que es que es y de lo que no es que no es, es verdadero. (Aristóteles, Metafísica, IV, 7) La teoría de la verdad como correspondencia se encuentra con el problema de clarificar en qué consiste que mundo y pensamiento o lenguaje se correspondan. ¿En qué consiste que el pensamiento se adecue a la realidad? Los defensores de esta teoría necesitan elaborar en primer lugar una estructura del mundo que por un lado permita un conocimiento científico, es decir, general y necesario, pero que a la vez pueda explicar el cambio y el movimiento que percibimos en las cosas. Una vez logrado este objetivo deben proyectar esta estructura del mundo al conocimiento para que sea posible correlacionar conocimiento y realidad. Aristóteles, el primer realista de la historia, solucionó este problema utilizando dos conceptos (metafísicos): esencia y accidente. Por esencia entendemos aquello que hace a una cosa ser lo que es. El conjunto de propiedades necesarias y suficientes que algo debe tener para pertenecer a una clase de cosas determinada. Por accidente, sin embargo, aquello que puede sufrir modificación sin alterar el ser de la cosa. Es accidental tener el pelo rubio, moreno o estar calvo. Es accidental incluso tener dos piernas o perder una. Pero, ¿es accidental ser hombre o mujer? ¿Ser hombre o monstruo? Sobre estos conceptos Aristóteles diseñó una teoría metafísica que establecía pares de estructuras. Por ejemplo, lo existente era la sustancia, que era siempre algo individual y concreto, pero en ella distinguía una materia y una forma. La forma constituía lo esencial de la sustancia. Aquello que la hacía ser de un tipo y no de otro, lo que permitía una definición. Esta forma, aunque algo confusa en Aristóteles, era común a todas las cosas de un mismo tipo. Por ejemplo, todos los árboles tenían la misma forma, y era la materia la que servía como principio de individualización. La materia, que era en ori9 gen común e indiferenciada, podía singularizarse y cambiarse para ser materia de una forma en concreto. El movimiento, el primer gran problema para las teorías realistas, lo explicó mediante otro par de conceptos: La potencia y el acto. Las sustancias naturales estaban en acto en función de su forma, pero podían estar en potencia de otra cosa, cuando esa potencia se actualizaba había también una modificación de la forma. Por ejemplo, una semilla es una semilla en acto, pero en potencia puede ser un árbol. Si se actualiza esa potencialidad, la semilla llega a ser un árbol. En este caso, hay un cambio esencial pues se ha cambiado la forma, pero dentro de un proceso natural. El otro problema importante al que se enfrentan los realistas es el problema de la ciencia. Las leyes científicas pretende ser universales y necesarias, es decir, que se cumplan para todo caso y en todo momento. Pero entonces ¿cuáles son los objetos de la ciencia? ¿Cada uno de los objetos particulares? Si el objeto de la ciencia es lo particular tendremos que hacer una teoría para cada cosa particular y nunca obtendremos teorías generales que valgan para todos los objetos de una misma clase. O debe aceptarse la existencia de los conceptos, de los términos abstractos que generalizan lo particular. Si concedemos existencia a este tipo de objetos que los medievales denominaron Universales, entonces empezamos a hablar de Realismo Científico. El Realismo Científico: afirma la existencia de ciertas cosas que se relacionan entre sí de alguna manera, pero también afirma la existencia real de las propiedades y relaciones (universales) de los individuos. Los universales pueden estar en muchos lugares diferentes al mismo tiempo y constituyen los objetos del conocimiento. La verdad, entonces, no es la adecuada relación entre cosas individuales y pensamientos individuales, sino entre teorías universales y la esencia o forma permanente de las cosas. 10 Teoría Hilemórfica de Aristóteles Sustancia1 (semilla1) materia Sustancia2 (semilla2) forma Acto materia potencia Movimiento sustancial actualización forma Sustancia3 arbol1 Otros autores han explicado la correspondencia mediante otras teoría acerca del mundo y del pensamiento. Russell y el primer Wittgenstein, por ejemplo, concebían la correspondencia entre el pensamiento y la realidad como un isomorfismo estructural, esto es, como una relación que asignaba a cada componente de la realidad un componente en el pensamiento y a la estructura relacional de los hechos la de las ideas. Wittgenstein incluso proyectó esta relación al lenguaje, de tal forma que la oración es una proyección de la idea. Y así, a cada elemento del hecho le correspondía uno en la oración. La oración debía reflejar (al menos en un lenguaje ideal) la estructura del pensamiento y, por tanto, la de la realidad. Esta teoría se denominó atomismo lógico, por cuanto el mundo, pensamiento y lenguaje se descomponía en elementos hasta llegar al El Atomismo Lógico de Russell y Wittgenstein Forma Lógica Oración Sentido Figura Relación Figurativa Realidad Hecho elemento simple y sobre él se establecía este isomorfismo. Pensar que el mundo puede descomponerse en elementos simples o en propiedades esenciales puede valer para cierto tipo de elementos, pero para la mayor parte de lo que constituye el mundo de los seres humanos, que como hemos visto se crea en el es11 fuerzo por comprender lo que nos rodea, no parece existir una base sólida desde la que realizar esta afirmación. De hecho tanto el realismo ingenuo, como el atomismo lógico son en la actualidad teorías rechazadas. Del mismo modo, la posición del realista científico que cree en la existencia de entidades abstractas independientes de los procesos de conceptualización y categorización de los seres humanos ha sido cuestionada por lo que se conoce como nominalismo. El nominalista afirma que la realidad consiste exclusivamente de objetos particulares, individuos que requieren un único espacio y tiempo. El nominalismo aparece con fuerza en el siglo XIV, como una postura ante el fuerte debate sobre los universales que existió durante la Edad Media, de la mano principalmente de Guillermo de Ockham, un franciscano que tendrá gran influencia en el pensamiento moderno y en el desarrollo de la ciencia empírica posterior. Ockham fue famoso por su "navaja"√ que enunciaba la idea de "no multiplicar los entes sin necesidad". Las posturas nominalistas impulsaron el estudio de la teoría de los signos y la interpretación significativa-lingüística del universal. Leamos un pasaje de su obra: Hay que conceder simplemente que ningún universal es una sustancia de cualquier manera que sea considerado, sino que cualquier universal es una intención del alma, que según una opinión probable, no se distingue del acto de entender. Por donde dicen que la intención por medio de la cual entiendo los hombres, es un signo natural significando al hombre, y de tal manera natural como el gemido es signo de enfermedad o dolor; y es un signo tal que puede estar puesto, en vez de los hombres, en las proposiciones mentales, como la voz puede estar puesta en vez de las cosas en las proposiciones vocales. (Guillermo de Ockham. Summa Logicae, cap. XV) √ La Navaja de Ockham es una expresión metafórica que da a entender el intento de Ockham de podar las entidades metafísicas. La navaja tiene un doble filo: empirista, solo es evidente lo que procede de la experiencia, y lógico, probar una proposición es mostrar que se deduce necesariamente de una proposición inmediatamente evidente, de acuerdo con unas reglas de inferencia. Junto con el principio de economía, "no multiplicar los entes sin necesidad, Ockham procede a suprimir "realidades" de la Metafísica escolástica. 12 Para el nominalista la verdad es principalmente un proceso de inducción y de categorización correcta. La manera en que podemos obtener proposiciones verdaderas sobre el mundo tiene un proceso que se compone de dos partes: 1. La Categorización correcta: Lo primero que hay que hacer es determinar de qué categoría o clase es cada elemento del mundo. Evidentemente las categorías son elementos mentales y no son reales. Sólo existen en la mente de los seres humanos. Para poder agrupar las cosas del mundo en clases solo cabe un método válido: 2. La Inducción: La inducción consiste en generalizar a partir del estudio de casos individuales concretos. Por ejemplo, me encuentro un pájaro negro y digo que es un cuervo, después analizo otros casos y tras el análisis de muchos determino una oración verdadera que afirma que "Todos los cuervos son negros (hasta el momento)". Con todo, la inducción conlleva problemas, pues nunca aportará generalidad universal. Podemos admitir, por ejemplo, el hecho de que todos los cuervos son negros, pero, ¿qué pasará si nos encontramos con un cuervo blanco. Desde luego cabe hacer dos cosas, o bien rechazar la generalización de que todos los cuervos son negros, o bien crear una nueva categoría que contenga a todos aquellos pájaros que son como los cuervos excepto en que poseen el color blanco. Bien mirado el proceso de crear nuevas categorías es muy habitual a la hora de comprender las cosas que nos rodean. 3.2. La Certeza El realista parte de una metáfora visual para comprender el conocimiento. Conocer es ver con el ojo interior de la mente el reflejo de las cosas que se produce internamente en la mente. El realista no tiene en cuenta un sujeto activo, un sujeto que tiene que analizar la realidad, agruparla, crear conceptos y determinar leyes, sino un sujeto pasivo cuya actividad cognoscitiva consiste en ver lo que la realidad le ofrece. Pero cuando se detecta que la relación entre realidad y conocimiento pasa necesariamente por un estado mental, entonces se percibe la gran diferencia que hay entre nuestros contenidos mentales y los objetos que los producen o a los que se refieren. 13 ¿Por qué la relación va a ser adecuada y correcta? ¿Y si el espejo interior distorsiona la imagen? ¿Cuál es el fundamento de la corrección de nuestro conocimiento? A pesar de estas dudas, hay un ámbito indubitable o incorregible, sea como sea, lo que veo, pienso, imagino y siento, se me presenta con una absoluta certeza, salvo en situaciones especiales como en las alucinaciones o los sueños. A partir del siglo XVII, especialmente con la obra de Descartes, La idea de conocimiento va a cambiar respecto a la que se tenía en el mundo antiguo. Ahora conocer es conocer ideas y una idea es una representación mental que nuestra mente construye a partir de la realidad. Así, el mundo queda dividido en dos (Dualismo): El mundo físico y el mundo mental, el cuerpo y el alama. Mi conocimiento cierto, indubitable e incorregible lo es de esa representación mental, fenoménica. De lo real no puedo decir primariamente nada. Cuando nos damos cuenta de que nuestro acceso al mundo es a través de nuestra mente, de nuestros procesos de conocimiento y de representación, llegamos a una nueva posición respecto del conocimiento: El Fenomenalismo o Fenomenismo. El fenomenalismo afirma que nuestro acceso a la realidad se limita al mero aparecer, al fenómeno, a lo inmediatamente presente a la mente. La verdadera realidad queda desconocida o es irrelevante para nuestro comportamiento en el mundo. Para el fenomenista la verdad ya no es un concepto interesante. Porque si la verdad era una relación adecuada entre el mundo y el pensamiento, ahora hemos perdido el mundo y no podemos establecer ninguna relación. Para el fenomenalista será la certeza el valor epistemológico a tener en cuenta. A la hora de evaluar si nuestros pensamientos pueden representar el mundo correctamente, el fenomenalista analiza cómo se presenta su pensamiento a su conciencia. Sólo se necesita un criterio de certeza que nos asegure que no estamos soñando o no estamos teniendo una alucinación. Descartes, por ejemplo, en su búsqueda de un pensamiento cierto encontró que no podía dudar del hecho de que su propia actividad de pensar le aseguraba su existencia. Aunque se equivocara en lo que estuviera pensando, el hecho de ser consciente de ello probaba que debía existir para pensar. De ahí su famosa afirmación "pienso, luego existo". Al analizar esta verdad, concluyó que todo aquello que se presentara a su mente con claridad y distinción podía admitirlo como cierto Dentro del fenomenalismo, se origina en el empirimo inglés y sobre todo en la obra de David Hume una crítica radical a los conceptos metafísicos que apelaban a algo 14 sustantivo causante del aparecer de las cosas. Hume criticó los conceptos de causalidad, de sustancia e incluso la idea del yo personal. No es entonces sorprendente que su filosofía termine cayendo en el escepticismo. El escepticismo consiste en negar la posibilidad del conocimiento verdadero de las cosas. Sin duda el fenomenalismo tiene este peligro, pues encerrados en nuestra mente, no podemos llegar a la realidad en sí del mundo, no podemos encontrar ningún fundamento al conocimiento. Tampoco, siquiera, podemos saber qué es nuestra mente. Para Hume, la mente era un puro mosaico de sensaciones que no podía asegurar en ningún caso una existencia como un individuo poseedor de las sensaciones. Según Hume es la memoria la que nos permite crear un mundo y una identidad de nosotros mismos estable y constante. Al fin y al cabo, un amnésico tiene muchos problemas para construirse a sí mismo y para mantener un mundo estable. El escepticismo puede derivar en Relativismo. Si no puedo asegurar un conocimiento cierto, lo que yo crea de las cosas es tan válido como lo que crea cualquier otro. La verdad es así mi verdad, y los valores son relativos a cada cual que lo considere. La idea de que todo vale, de que la verdad es lo que uno cree o de que hay muchas verdades distintas supone en el mundo contemporáneo un peligro difícil de paliar. Estas posturas han producido una crisis en el concepto de la racionalidad tradicional. Ahora las teorías son descripciones de las cosas que mantienen un mismo nivel de validez, sólo que cada teoría, narración o mito tiene un ámbito distinto de aplicación y de uso. La noción de objetividad desaparece y solamente puede recuperarse como intersubjetividad, es decir, lo que un grupo significativo de personas aceptan como válido o correcto. Dentro de la filosofía de la ciencia, en donde el relativismo no puede prosperar pues parece impensable que coexistan distintas y hasta contradictorias teorías sobre lo real, una versión más aséptica viene a evitar el conflicto ontológico de determinar cómo es la realidad o de si las teorías científicas son explicaciones verdaderas. El Instrumentalismo afirma que ninguna cosa de un cierto tipo existe o, al menos, que no tenemos fundamentos adecuados para creer que ellas existen. El instrumentalista cambia el punto de vista de las cosas a las teorías. Para el instrumentalista las teorías realistas pueden ser instrumentos útiles para conseguir ciertos resultados prácticos. Pero su utilidad no debe tomarse como fundamento para creer que existen realmente las cosas que el realista afirma. Wittgenstein, aunque no se le pueda encuadrar dentro del instrumentalismo, expresaba muy bien esto con una metáfora. Comparaba las teorías científicas con una es15 calera que hay que tirar una vez alcanzado gracias a ella el lugar deseado. Para el instrumentalista una teoría es verdadera si nos es útil, si nos permite alcanzar los objetivos para los que diseñamos nuestras teorías. 3.3. La Teoría Pragmática de la Verdad Una versión cercana al instrumentalismo respecto al concepto de verdad, pero también distante en muchos aspectos es la posición pragmatista, que tiene su origen en Estados Unidos de la mano de pensadores como Pierce, W. James o J. Dewey y en autores contemporáneos como R. Rorty. La máxima pragmática podría ser la siguiente: el significado de un concepto viene dado por las consecuencias prácticas o experimentales de su aplicación. Como lo expresaba James, "no puede haber diferencia que no introduzca diferencia". Así, el enfoque pragmatista en el estudio de este valor sería preguntar por la diferencia que introduce el que una creencia sea verdadera. Comenzando con el iniciador de la escuela, Pierce, la verdad es el final de la investigación y sería la opinión en la que coinciden o concuerdan quienes usan el método científico. Pierce, que es básicamente realista, piensa que el método científico es el único método aceptable para estudiar una realidad que es independiente de lo que uno crea, pues permite un sólido consenso. James, elaborando nominalistamente las ideas de Pierce, considera que la ventaja de poseer creencias verdaderas es defenderse contra la experiencia recalcitrante. Es decir, para James la verdad es hecha, crece y lo hace ajustando el sistema de creencias a las nuevas verdades aceptadas. Aunque normalmente intentamos mantener el mayor número de creencias, la noción de verdad permite modificar este sistema mejorándolo y ampliándolo constante y coherentemente. En términos parecidos pero alejándose de la disputas epistemológicas, R. Rorty piensa que debemos sustituir la noción de verdad por la de la esperanza. Veamos y analicemos algún texto de este autor: 16 ...Quisiera mostrar cómo la teoría pragmatista de la verdad se encuadra en un programa más general que pretende sustituir los dualismos griegos y kantianos√ que diferencian entre contenido transitorio y estructura permanente por una nueva distinción entre el pasado y el futuro. Me esforzaré por dejar claro que lo que Dewey y James dijeron sobre la verdad es una manera de poner en lugar de la justificación de la costumbre pasada y de la tradición (una justificación que se realiza acudiendo a la idea de una estructura no cambiante) la tarea de reemplazar un presente insatisfactorio por un futuro satisfactorio; la esperanza ocuparía, así, el lugar de la certeza. ...Decir que hemos de sustituir el conocimiento por la esperanza es decir algo similar: que hemos de dejar de obsesionarnos sobre si está bien fundamentado aquello que creemos y empezar a preocuparnos por si hemos sido lo suficientemente imaginativos como para hallar alternativas interesantes a nuestras creencias presentes. ...Dado que nadie conoce el futuro, nadie puede saber tampoco qué creencias acabarán por ser justificadas y cuáles no, por lo que nada puede decirse ahistóricamente sobre el conocimiento o la verdad. Hay que sustituir el intento platónico de huir del tiempo por la esperanza de que podemos producir un futuro mejor. (Richard Rorty. Norteamericanismo y Pragmatismo. Isegoria nº 8, Octubre 1993) Según Rorty, la verdad no es un valor interesante si ésta no produce una mejora en la humanidad. A decir verdad, en nombre de la verdad se han realizado numerosas atrocidades a lo largo de la historia. Para Rorty, la búsqueda de la verdad no es más que la esperanza de mejorar nuestras vidas y en consecuencia estamos obligados constantemente a plantearnos alternativas imaginativas a nuestras vidas presentes. Estas ideas de Rorty coinciden de alguna manera con la visión creadora que veíamos en el punto anterior de Nietzsche. Para Nietzsche la verdad queda convertida en una voluntad de creación. Si el lenguaje es básicamente lo que nos permite crear y manejar al mundo y a nosotros mismos, la búsqueda de la verdad consiste en crear un nuevo lenguaje, idear nuevas metáforas que nos construyan en nuestros propios términos. En este sentido podemos interpretar el siguiente texto: √ Los dualismos a los que se refiere aquí Rorty serían los que ya hemos visto en Aristóteles entre esencia y accidente o los resultantes de la filosofía de Platón que distingue entre un mundo de las ideas, verdadera realidad, y un mundo sensible y aparente del que hay que escapar. Respecto a los kantianos diremos lo siguiente: Kant no pudiendo negar el fenomenismo que se proyecta al pensamiento occidental desde Descartes, pero intentando hacer una síntesis entre Descartes y Hume, piensa que, puesto que a la hora de conocer el sujeto pone algo de su parte, no podemos conocer la cosa en sí, el noúmeno como lo denomina el propio Kant, sólo tenemos acceso al fenómeno. Será a través de la Razón práctica, de la ética, por donde podamos deducir la existencia de ciertas cosas en sí, que sirven como ideales de la Razón. 17 Nosotros queremos llegar a ser lo que somos, hombre únicos, incomparables, que se dictan sus propias leyes, que se crean a sí mismos. Para esto es menester que seamos de los que mejor descubran y aprendan cuanto es ley y necesidad en el mundo; es menester que seamos físicos, para poder ser, en este sentido creadores" (F. Nietzsche, La Gaya Ciencia § 335) También estas ideas de Rorty nos recuerdan la postura de Popper, un realista convencido que se describe a sí mismo como un falibilista absolutista. Falibilista porque niega que dispongamos de método alguno garantizado de adquirir conocimiento; absolutista porque insiste en que hay una cosa tal como la verdad objetiva a la que aspira la investigación científica. Para Popper la obligación de la ciencia consiste en idear y contrastar conjeturas, cuanto más imaginativas mejor. Los científicos nunca podrán saber con seguridad si sus teorías son verdaderas, por eso su obligación es construir las teorías de modo tal que quede perfectamente explícito el experimento o la prueba que las ha de convertir en falsas. Conjeturas y Refutaciones es un ciclo constante que la ciencia no debe abandonar. La verdad es entonces un ideal regulador que debe dirigir la investigación. Así, una teoría se aceptará como verdadera hasta que podamos demostrar que no lo es. 3.4. El Idealismo: La Verdad como Coherencia Con la modernidad, de la mano de Descartes, como ya vimos, aparece la noción de sujeto como cosa pensante, res cogitans, quedando desde ese momento la realidad dividida en dos ámbitos enfrentados. El sujeto es lo enfrentado al objeto. El sujeto y su actividad pensante es lo único cierto y, por tanto, una forma de librarse de los problemas del fenomenalismo es asumir que es la actividad mental del sujeto la que crea el mundo Desde este punto de vista, desde el sujeto, existen diversas posiciones ontológicas: El Idealismo: Considera que las cosas sólo son tales, tienen realidad, existen, si hay una conciencia, un sujeto que las piense. De tal manera, sólo conocemos lo que está presente a nuestra conciencia. La escalera sólo existe cuando bajamos por ella o pensamos en ella. La conciencia tiene un dinamismo propio que le hace aportar los elementos necesarios para constituir un objeto. La realidad, el objeto es siempre objeto conocido. Así entendemos las afirmaciones del mejor representante del idealismo, el filósofo ro18 mántico alemán Hegel: "Todo lo real es racional" o "La verdad es el todo". Dicho así, puede parecer una postura radical y alejada de cualquier intención sensata del ser humano. ¿Cómo podemos negar la existencia de las cosas? ¿Y si no hubiera nadie para pensarlas, no habría cosas? Desde luego esta posición puede matizarse en diversas versiones, irrealistas, antirepresentacionalistas, constructivistas, etc. Pero, poco a poco comienza a aceptarse, incluso en el ámbito de la ciencia física, que el sujeto interviene de una manera decisiva en la realidad que contempla. La mecánica cuántica por ejemplo contiene como un principio teórico básico lo que conocemos como principio de indeterminación de Heisenberg, que establece la imposibilidad de determinar con exactitud la posición y el momento de una partícula, y ello fundamentalmente porque la intervención de un sujeto en la observación modifica lo observado. La mecánica cuántica tiene que recurrir a leyes probabilísticas sobre los posibles valores de medida de las propiedades de las partículas. La verdad para las posiciones idealistas sólo puede entenderse como coherencia entre los enunciados que componen el sistema de creencias o las teorías sobre el mundo. Si el mundo es una creación del conocimiento humano no podemos acudir a él para verificar nuestras teorías. Solo en la teoría misma debemos buscar el criterio de certeza y eso es la coherencia. La verdad o falsedad de un enunciado depende de la relación que ese enunciado mantiene con otros enunciados, perteneciendo todos a una misma teoría. Así un enunciado es verdadero si se encuentra en la adecuada relación de implicación con otros enunciados. Evidentemente lo que acaba de enunciarse es sólo un criterio para determinar si un enunciado es verdadero, pues la verdad en la teoría de la coherencia se convierte en una relación entre oraciones, el mundo o los hechos se han perdido o son el resultado de las afirmaciones realizadas en el conjunto de un sistema de creencias. 3.5. La Verdad Matemática: La definición de Verdad de A. Tarski Epiménides, el cretense, se hizo famoso en la antigüedad por pasearse por la calles de Atenas afirmando que "Todos los cretenses mienten". El episodio no parece lo suficientemente significativo a no ser que deparemos un poco más en la afirmación de Epiménides: 19 Si es verdad lo que afirmaba Epiménides, que todos los cretenses mienten, entonces su afirmación es falsa. Pues al menos Epiménides, que era cretense, decía la verdad. Y si es falso, entonces es verdad que todos los cretenses, incluso Epiménides, mienten. Como vemos, esta oración es paradójica. Una paradoja es una oración cuya verdad es indecidible. Incumple una de las leyes básicas de la lógica, el principio de no contradicción. Parece evidente, y seguramente todos estaríamos de acuerdo, que nada puede ser verdadero y falso al mismo tiempo. No puede ser que algo sea y no sea a la vez. Sin embargo, la afirmación de Epiménides o versiones de su paradoja, como por ejemplo, "Esta oración es falsa", si es verdadera es falsa y si es falsa es verdadera. ¿Cómo es esto posible? Hemos venido insistiendo que la verdad es una relación semántica entre un mundo y un lenguaje que habla de él. Si las oraciones del lenguaje expresan los hechos del mundo decimos que esas oraciones son verdaderas. Hemos visto también que a menudo el mundo o ciertos hechos del mundo son el resultado del proceso de conceptuarlos mediante los recursos del lenguaje. Pero además, ahora nos encontramos con que el lenguaje puede hablar de sí mismo, simbolizarse a sí mismo y referirse, en consecuencia, a sí mismo. En estos casos, cuando nos preguntamos por la verdad o la falsedad de enunciados que hablan de sí mismos, nos encontramos con paradojas semánticas difícil de resolver. Para evitar estas paradojas en los lenguajes formales, donde las paradojas cobran una importancia decisiva porque pueden invalidar la coherencia de la teoría, tenemos que ser muy estrictos y acudir a otro lenguaje, un metalenguaje, para hablar del lenguaje, el lenguaje-objeto. Vamos a desarrollar a continuación, el mecanismo de definición del predicado 'es verdadero' en el ámbito de las ciencias formales, la matemática o la lógica, lo que se conoce como semántica veritativo-funcional o más generalmente teoría de modelos. La semántica formal o teoría de modelos surge en los años cincuenta de la mano de un lógico de origen polaco llamado Alfred Tarski. Los cálculos lógicos o matemáticos son estructuras sintácticas que no hablan de nada hasta que no se les aporta una semántica, una interpretación. El proceso es el inverso al juicio normal que hacemos para determinar si algo es verdadero o falso. Cuando hago una afirmación sobre el mundo, el mundo ya existe, los recursos lingüísticos que empleo para hablar de él refieren ya a los elementos del mundo y, en consecuencia, es al mundo donde debo acudir para verificar mis afirmaciones sobre él. Sin embargo, los lenguajes formales no hablan de nada y las teorías formales no describen ninguna realidad. La semántica formal lo que hace es 20 crear mundos, igualmente formales, que hagan verdadera a la teoría resultante de un cálculo. A estos mundos formales se denominan modelos. La noción de modelo es fundamental en el campo de la ciencia, pues fundamentalmente la ciencia construye modelos que se pueden aplicar al mundo real precisamente mediante procesos de interpretación semánticos 3.5.1. CONDICIONES PARA DEFINIR 'SER VERDADERO EN UN LENGUAJE' Tarski, retomando las ideas realistas de Aristóteles, investigó la noción de verdad para ofrecer una posible definición de este valor relativo a un lenguaje que escapara a toda paradoja, como, por ejemplo, la de Epiménides. Estos fueron sus resultados. Tarski determinó que para que una teoría de la verdad pudiera determinarse para un lenguaje que fuera consistente y no contuviera paradojas debería cumplir dos condiciones, sin las cuales la definición no sería posible. Una vez planteadas estas condiciones, procede a definir el concepto de verdad. Dos son la condiciones que impone Tarski a una teoría sobre la verdad: 1. Adecuación Material El requisito fundamental que cualquier teoría sobre la verdad debe satisfacer es que de ella se puedan seguir enunciados de lo que él denomina Convención (T): (T) O es verdadera si y sólo si p (i) Donde O se ha de sustituir por el nombre de una oración del lenguaje para el que se define el predicado 'es verdadero'. Obsérvese que O debe ser un nombre para la oración del lenguaje, es decir un elemento de otro lenguaje o de un metalenguaje. (ii) Donde p se ha de sustituir por una oración del lenguaje en el que se está definiendo el predicado 'es verdadero'. Esta oración ha de representar las condiciones de verdad de la oración que ocupe el lugar de O. 21 Pongamos un ejemplo: "La Nieve es blanca" es verdadera si y sólo si la nieve es blanca. Esta oración cumpliría la convención (T). Esto naturalmente no es la definición, solamente es una condición que ha de cumplir la definición de verdad para un lenguaje. La definición ha de rellenar ese esquema con las oraciones de ese lenguaje y sus condiciones de verdad respectivas. 2. Corrección Formal Este requisito formal concierne a la estructura del lenguaje sobre el que se da la definición de verdad y a los predicados y conceptos que se utilizan en la teoría. Las condiciones formales deben ser las siguientes: (1) La definición de verdad tendrá que ser relativa a un lenguaje, pues una y la misma oración puede ser verdadera en un lenguaje y falsa en otro. (2) Cualquier teoría sobre la verdad para un lenguaje L, se formulará en un metalenguaje de L, ML. Donde ML ha de contener: (3) (a) Nombres para cada uno de los elementos de L (b) Oraciones de ML que sean una traducción adecuada de las de L El lenguaje para el que se define el predicado 'es verdadero' y el metalenguaje con el que se define tienen que ser especificables o determinables. Esto es, ha de existir un método que permita determinar si algo es una oración del lenguaje o si no lo es. Tarski piensa que estas condiciones no las cumple ningún lenguaje natural, pues en ellos no se distingue el lenguaje del metalenguaje y además no son determinables. A pesar de esta idea, Davidson, un filósofo norteamericano, intentó aplicar la definición de verdad de Tarski a los lenguajes naturales para crear una teoría del significado. 22 3.5.2 LA DEFINICIÓN DE VERDAD Una vez establecidas estas severas condiciones, Tarski procede a definir el concepto de verdad, apoyándose en un concepto semántico más sencillo que es el concepto de satisfacción. Tarski busca un Universo de discurso, es decir un mundo que contenga elementos agrupados en clases. Este mundo o modelo va a servir de referencia al lenguaje. Para cada tipo de oración del lenguaje expresa las condiciones que deben Velázquez pasar en ese mundo para que una oración sea satisfecha por las Goya entidades del mundo. Murillo Por ejemplo si el modelo elegido se compone del conjunto de Pintores cuyas obras se encuentran en el Museo del Prado. Una oración como 'x es pintor' es satisfecha por el objeto Velázquez que pertenece al modelo elegido. También le satisface el objeto Goya, que también pertenece al dominio de discurso Una oración como 'Todos los x son pintores' sería verdadera si es satisfecha por cualquier secuencia de objetos del modelo que tomáramos. En general, una oración es verdadera si y sólo si es satisfecha por todas las secuencias de objetos de nuestro Universo de discurso. Resumiendo, Tarski se propone definir el concepto de verdad para teorías formales y lo hace en primer lugar imponiendo unas fuertes condiciones que eviten que el lenguaje pueda referirse a sí mismo y que contenga ambigüedades, después utiliza un termino más sencillo como es el de satisfacción para definir la noción de verdad. Como hemos dicho, Tarski era pesimista sobre la posibilidad de una definición rigurosa de la verdad en los lenguajes naturales. Al comparar la noción de verdad en lenguajes formales y naturales, comprendemos mejor que el problema de la verdad resulta sumamente complejo pues ni el lenguaje ni el mundo están dados de una vez por completo y permanecen sin cambio. Al contrario tanto el mundo como el lenguaje evolucionan según las necesidades y los esfuerzos del ser humano por comprender su medio y lo que le ocurre. El estudio de la verdad formal destaca que, si entendemos la verdad como lo hizo Aristóteles, tanto el lenguaje como el mundo deberían estar dados de una vez, perfectamente delimitados y 23 sin experimentar cambios. Ni la realidad humana ni el lenguaje que usamos para comprenderla es así, por lo que la verdad seguirá siendo un concepto problemático. Tal vez sólo sea un ideal a alcanzar, o un estímulo para saber más y mejor. Y con esto llegamos ahora al elemento constructivo del lenguaje, el significado, que como veremos no sólo nos permite comprender lo que pasa y lo que nos pasa, sino que gracias a la dimensión semántica del lenguaje el mundo de los seres humanos puede ampliarse y enriquecerse. Veremos que en los procesos de significación que el hombre emprende el mundo se construye para que los túneles tengan boca, las botellas cuello y para que las personas puedan estar en la nubes o consumirse como brasas. Aparecen los virus y también los virus informáticos y una vez que se les nombre y se les comprende podemos combatirlos con vacunas y curar nuestras enfermedades. 4. El Significado Efectivamente, ¿qué es un mundo? ¿Podemos cuestionarnos la tesis realista de que hay un mundo ahí afuera independiente del sistema que lo conceptualiza o lo categoriza? Y sobre todo, si lo cuestionamos, ¿no pareceremos locos o irresponsables? Pero si miramos atentamente al esfuerzo que hacemos para comprender, para conocer, incluso para nombrar, a menudo encontramos que hay algo que aparece que no estaba ya en la realidad. Efectivamente, el mundo es a la vez fabricado y no fabricado, hay siempre algo más en nuestro acto de nombrar o de conocer que lo que fue puesto. ¿Quién ha visto al tiempo o al espacio, a la fuerza o a la energía? Y aunque hayamos sentido la ira o el amor, ¿quién establece lo que es? ¿Acaso es una entidad del mundo separada del sujeto que experimenta estas emociones? Y así podemos seguir en innumerables ámbitos: ¿Qué es España? ¿Es algo físico o es algo político? ¿Por qué Gibraltar ya no es España y por qué la frontera española aparece en donde aparece? Desde luego esto es un asunto político, pero sobre todo conceptual. ¿Qué significa España? En el proceso de comprensión de la realidad, en la obligatoriedad de conceder sentido a lo que pasa y a lo que nos pasa, en cada acto de denominación, en cada teoría, en cada experimento que la prueba, tanto la realidad como los sujetos cambian. Ganan en sus definiciones, se articulan de otro modo y con el resto del conocimiento que ya dispusiéramos, con los otros fragmentos de lenguaje que se interconectan con este nuevo en una red de caminos. No hay nada nuevo, pero algo ha cambiado tanto en el objeto 24 como en el sujeto. El mundo no está ahí fuera en espera de que descubramos sus verdades. El mundo se tiene y se tiene gradualmente y se modifica de acuerdo con lo que le solicitamos. Y nosotros también cambiamos con lo que del mundo obtenemos. En fin, para no irnos muy lejos concretemos el papel del significado en los procesos de comprensión de la mente humana. Fundamentalmente, el significado se establece por la capacidad del cerebro humano de crear conceptos y mediante estos conceptos organizamos el mundo según nuestros intereses y necesidades. Así el mundo es cambiante y está poblado de muchas entidades que aunque no sean materiales configuran el mundo humano, por ejemplo España, no es una entidad material, física, sino que es sobre todo un concepto que contiene numerosos significados pues es más que probable que para cada uno de los españoles y aun para cada individuo existente en la tierra España signifique cosas muy distintas. Así pues: - Los conceptos no son meramente "representaciones internas de la realidad externa". Los conceptos reflejan la naturaleza corporal de la gente que los elabora, ya que dependen de la percepción y de los movimientos motores y, en gran medida, son el resultado de un proceso de la imaginación humana que depende de nuestra capacidad de formar imágenes mentales, de organizar nuestro conocimiento en categorías y de comunicarnos. - El significado no es una cosa, un algo, sino un resultado para nosotros. Nada tiene significado en sí mismo, sino que el significado se deriva de la experiencia del funcionamiento de un determinado ser en un medio determinado. Nuestros conceptos son significativos porque son caracterizados en función de nuestro modo de percibir las cosas que nos rodean en términos de ciertos esquemas de imágenes y de cómo los objetos se relacionan e interactúan con nuestros cuerpos. - El significado funda la comprensión. Una oración se comprende si los conceptos asociados con ella son directamente significativos. Por ejemplo, comprendo el papel que representa en mi experiencia el ordenador en el que escribo, pero para ello no necesito llegar hasta sus entresijos electrónicos, no los necesito para comprender el hecho de escribir este tema, aunque pueda necesitar comprenderlos en otra situación. Lo que parece claro es que la capacidad significativa, simbólica del lenguaje no es tanto porque refiere o representa a la realidad, sino porque significa esta realidad a través de conceptos que elaboramos de muy diversas formas. Luego nuestra pregunta por el significado nos traslada a una pregunta por el concepto 25 4.1. El Concepto ¿Qué es un concepto? ¿Cómo los producimos? Estas son las preguntas que vamos a abordar en esta sección. Lo primero que podemos advertir es que no todos los conceptos son del mismo tipo y, en consecuencia, cabe pensar que no se crean de la misma manera. Pensemos por ejemplo en el café y en el tiempo. ¿Qué es el café? ¿Qué es el tiempo? Café Bebida: infusión caliente Tiempo Color: Oscuro La secuencia de Acontecimientos Sabor: Amargo El tiempo es oro Temperatura: Caliente El tirano de la vida Olor: aromático Lo que marca el reloj Combina con: Leche, azúcar Duración y sucesión. Consumo: desayuno, después de las comidas. Al definir café seguramente hayamos establecido una estructura de pares atributo-valor. Pero al intentar definir tiempo hayamos necesitado recurrir a otros conceptos mejor comprendidos para definirlo. Por ejemplo: con el ‘tiempo’ no encontramos una estructura semejante a la que hemos encontrado con el ‘café’. Con esa misma estructura podemos definir cualquier tipo de bebida, por ejemplo: Agua Maxi-Cola Ginebra Bebida Esencial Refrescante Alcohólica Color Incolora Oscura Incolora Sabor Insípida Bubujeante/dulce Fuerte Temperatura Fría Muy Fría Con hielo Olor Inodora dulce alcohol Combina con Sola Bebidas alcohólicas Bebidas refrescantes Consumo En todo momento Refresco Tarde/noche 26 Por el contrario el tiempo y otros muchos conceptos que tienen un papel muy importante en nuestras vidas sólo podemos conceptualizarlos a través de metáforas y analogías. Pensemos en el odio, el amor, los celos, la energía, el deseo, el espacio, etc. Si volvemos a la estructura que hemos creado para las bebidas nos damos cuenta que esta estructura, quizá más perfeccionada, nos permite establecer una categoría, es decir un sistema que clasifica y jerarquiza una colección de cosas de un mismo ámbito. Bebidas Calientes Infusiones ¾ ¾ ¾ ¾ Alimenticias Café Té Poleo Tila ¾ ¾ ¾ Consomé Caldos Purés Refrescantes Con Gas Refrescos ¾ ¾ Alcohólicas De baja Graduación Sin Gas Zumos De Cola De frutas ¾ ¾ ¾ ¾ De Frutas De Verduras Vino Cerveza De alta Graduación ¾ ¾ ¾ ¾ ¾ Ron Ginebra Güisqui Vodka Tequila Podemos representar las categorías, al menos las que recogen objetos existentes físicos o naturales, y que aquí llamaremos clásicas en contraposición de otras formas de categorías que veremos más adelante, mediante árboles: ¿Qué es una categoría? ¿Qué es un sistema categorial? ¿Para qué sirven las categorías? Son también preguntas que intentaremos responder. 4.1.1. PERCEPCIÓN Y CONCEPTO Para reconocer lo que se presenta a nuestro campo visual, necesitamos de conceptos, sin embargo parece lógico pensar que sólo construimos conceptos a partir de nuestra experiencia con el mundo, que se inicia siempre en la percepción. Puesto que el concepto, como hemos comprobado en el ejercicio anterior, es una generalización de rasgos comunes de objetos semejantes, debemos afrontar su estudio teniendo en cuenta tres puntos de vista. En primer lugar, cómo se progresa de las categorías perceptivas al pensamiento conceptual. En segundo lugar, qué función realizan los conceptos, en qué nos facilita la vida, es decir, cómo vienen a colaborar en nuestra adaptación al medio. 27 Finalmente, los conceptos son los elementos claves en el pensamiento y en el razonamiento. Tendremos, pues, que investigar cómo conforman nuestros juicios y razonamientos. Desde luego estos tres puntos de vista exigen que los integremos en una explicación más amplia, una que exponga cómo construimos conceptualmente el mundo y cómo nos movemos en él, es decir, cómo tenemos un mundo. Hipótesis: La hipótesis que se propone, siguiendo a diversos autores que integran lo que se ha denominado semántica cognitiva, G. Lakoff, M. Johnson, G. Fauconnier, etc., es que nos representamos, construimos o tenemos un mundo mediante modelos cognitivos El Modelo cognitivo es la estructura teórica más amplia que nos permitirá relacionar imagen y concepto, por un lado, comprender los conceptos y las categorías, por otro, y también integrar conceptos y categorías en el razonamiento. 4.1.2. LOS MODELOS COGNITIVOS Componentes de un Concepto. Los conceptos se almacenan en el cerebro como grabaciones dormidas. Cuando estas grabaciones se reactivan, pueden recrear la variedad de sensaciones y acciones asociadas con una entidad particular o una categoría de entidades. Una Taza de café, por ejemplo, puede evocar representaciones visuales y táctiles de su forma, textura, temperatura, junto con el olor y el sabor del café o la trayectoria que el brazo y la mano toman cuando conducen la taza a los labios. Todas estas representaciones son recreadas en distintas y separadas regiones del cerebro, pero su reconstrucción ocurre simultáneamente Observemos la figura anterior. Efectivamente un concepto es algo mucho más rico que la palabra que lo nombra, pero más pobre que la imagen que puede generar. Sin duda resulta confuso, un concepto no es la palabra, tampoco la imagen que frecuentemente provoca y que extrañamente es previa. Como vemos un concepto o un esquema 28 cognitivo reúne una gran cantidad de elementos dispersos. En el caso de la taza de café desde su aroma, sabor o color, hasta los movimientos que realizamos con ella o las sensaciones que hemos asociado con tomar una taza de café. Además hay diversos tipos de conceptos y se producen también diversas formas de agruparlos. Dada toda esta variedad y confusión hemos decidido englobar todas estas peculiaridades e intentar comprenderlas conjuntamente bajo otro concepto, el modelo cognitivo. Definición: Un modelo cognitivo es un patrón recurrente, una forma y una regularidad en o de las actividades de ordenamiento de las experiencias. Estos patrones surgen como estructuras significativas principalmente a partir de nuestros movimientos corporales en el espacio, nuestras manipulaciones de objetos y nuestras interacciones. Todo nuestro conocimiento lo organizamos por medio de estas estructuras. Tienen también las siguientes características: • Son todos significativos (Gestalt) • Son medios para la conceptualización y el pensamiento • Incorporan numerosos ejemplos en diversos contextos. • Se unen en unidades narrativas. • Usan cuatro tipos de principios estructurantes: (1) Estructura Imagen-esquemática: especifican imágenes esquemáticas, tales como trayectorias, escalas, contenedores, etc. (2) Estructuras proposicionales: especifican elementos, sus propiedades y las relaciones que sostienen entre ellos. (3) Proyecciones metafóricas: son proyecciones de un modelo proposicional o esquemático en un dominio del espacio físico a una estructura del “espacio conceptual”. (4) Proyecciones metonímicas: son modelos de uno o más de los tipos anteriores junto con una función de un elemento del modelo a otro. Explicar estas estructuras nos permitirá comprender como creamos los conceptos a partir de las categorías perceptivas, ese proceso que denominamos abstracción, pero que difícilmente podemos conectar con el resto de nuestro desarrollo cognitivo. Al hilo de la explicación de estos cuatro principios estructurantes de los modelos cognitivos nos encontraremos con la gran variedad de formas por las que conceptualizamos el mundo, efectos prototípicos, categorías radiales, proyecciones metafóricas y metonímicas, etc. 29 Finalmente, veremos también cómo determina nuestra forma de categorizar el mundo nuestro razonamiento sobre él. 4.1.2.1. ESQUEMAS DE IMÁGENES Los esquemas de imágenes son estructuras relativamente simples que constantemente aparecen en nuestra experiencia corporal cotidiana. Son las estructuras que empleamos para construir los modelos cognitivos que conceptualizan fragmentos específicos de la realidad, bien directamente, porque ciertos objetos se ajustan a su estructura, bien a través de proyecciones metafóricas. Los esquemas de imágenes, en general son todos significativos –gestalts-. Entre las más importantes encontramos las siguientes, que explicamos mediante cuatro atributos: • Experiencia Corporal: que expresa la relación directa con el esquema y nuestra actividad corporal. • Elementos estructurales: que describe el esquema en función de sus partes estructurantes. • Lógica básica: el tipo de inferencia, que provoca y que determinará nuestra manera de razonar. • Modelo metafórico: Ámbitos posibles en los que vamos a proyectar el esquema de la imagen. Veamos algunos de los esquemas más importantes: CONTENEDOR ∗ Experiencia Corporal: Experimentamos nuestros cuerpos como contenedores y como contenidos, también nuestro entorno (habitaciones, espacios...) ∗ Elementos estructurales: Interior, Límites y Exterior. ∗ Lógica Básica: Todo está o dentro de un contenedor o fuera de él ( p ∧ ¬p). Si el contenedor A está en el contenedor B y X está en A, entonces X está en B (Modus Ponens). , Inferencia: Sinónimo de razonamiento deductivo, es decir, relación entre un punto de partida, que denominamos premisas, y un punto de llegada, a lo que denominamos conclusión. 30 Si todos los A's son B's y X está en A, entonces X está en B. (Base de la lógica de clases booleana). ∗ Modelo Metafórico: El campo visual se comprende como un contenedor ⇒ Pensar o Comprender se entiende como ver. Algunas relaciones personales se comprenden en términos de contenedores: 'atrapado en el matrimonio', 'librarse de alguien'. PARTE-TODO ∗ Experiencia corporal: Somos seres completos con partes que podemos manipular. Experimentamos nuestros cuerpos como TODOS con PARTES. Nuestro nivel básico de percepción distingue la estructura fundamental de partetodo que necesitamos para funcionar en nuestro medio físico. ∗ Elementos Estructurales: Un Todo, Partes y una Configuración. ∗ Lógica Básica: El esquema es asimétrico: Si A es parte de B, entonces B no es una parte de A Es Irreflexivo: A no es parte de A. No puede ocurrir que existe el todo sin partes; pueden existir las partes y no haya todo. Sólo si las partes están en una CONFIGURACIÓN existe el Todo. ∗ Modelo Metafórico: Familias y otras organizaciones sociales se comprenden como todos y partes. El concepto general mismo de estructura es una proyección metafórica de la CONFIGURACIÓN como aspecto de la estructura PARTE-TODO. ENLACE ∗ Experiencia Corporal: Nuestro primer enlace es el cordón umbilical y sentimos enlaces o los buscamos para protección o seguridad. ∗ Elementos Estructurales: Dos entidades, A y B, y un enlace que los conecta. ∗ Lógica Básica: Si A está enlazado con B, entonces A está restringido y depende de B. Simetría: Si A está enlazado con B, B está enlazado con A. ∗ Metáforas: Relaciones sociales e interpersonales a menudo se comprenden en términos de enlaces. 31 CENTRO-PERIFERIA ∗ Experiencia Corporal: experimentamos nuestros cuerpos como teniendo centro (el tronco, órganos internos) y periferias (dedos, pelo, uñas). También plantas y árboles. El centro es visto como más importante que la periferia. La periferia se concibe dependiendo del centro, pero no a la inversa. ∗ Elementos estructurales: Una entidad, un centro y una periferia. ∗ Lógica Básica: La periferia depende del centro, pero no viceversa. ∗ Modelo Metafórico: Las teorías tienen principios centrales y periféricos. Lo importante se comprende como central. ORIGEN-CAMINO-META ∗ Experiencia Corporal: Cada movimiento supone un lugar de partida, uno de llegada, una secuencia continua de localizaciones que conectan los puntos de partida y llegada y una dirección. ∗ Elementos estructurales: un Origen, un Destino, un Camino, una Dirección. ∗ Lógica Básica: Si vas de un origen a un destino a lo largo de un camino, debes pasar a través de cada punto intermedio del camino. (Paradojas de Zenón) ∗ Metáforas: Propósitos se comprenden en términos de destinos. Llevar a cabo un propósito se comprende como recorrer un camino hasta una meta. Eventos complejos se comprenden en términos de este esquema. ESCALAS ∗ Experiencia Corporal: Cuando añadimos más sustancia a una pila o receptáculo el nivel asciende. Experimentamos el mundo como poblado de objetos distintos que podemos agrupar de diversas maneras y por sustancias cuya cantidad podemos aumentar o disminuir. También cualitativamente, experimentamos que objetos y acontecimientos poseen determinados grados de intensidad. En general más es arriba y menos es abajo. ∗ Elementos estructurales: Presenta una direccionalidad más o menos clara. Presenta un carácter acumulativo. Las escalas tienen carácter normativo y pueden ser cerradas o abiertas. ∗ Metáforas (Desarrollo): Más es arriba, menos es abajo 32 Feliz es arriba; triste es abajo. Eso me levantó el ánimo. Se me levantó la moral Estoy saltando de alegría Estoy hundido Caí en depresión Mi moral está por los suelos. Lo Consciente es arriba; lo inconsciente es abajo Levanta. Despierta Ya estoy levantado Cayó dormido Se hundió en un profundo sueño Está bajo hipnosis Salud y Vida son arriba; enfermedad y muerte son abajo Estoy en la cima de la vida Se levantó entre los muertos Cayó enfermo Cayó muerto Esto es una recaída en su enfermedad. Tener control o fuerza es arriba; estar controlado o bajo fuerza es abajo. Tengo control sobre él. Estoy por encima del bien y del mal Reunión en la Cumbre Es superior a sus fuerzas Más grande será la caída. Más es arriba; menos es abajo El número de ediciones anuales sigue aumentando Tiene unos ingresos muy elevados El número de errores es muy bajo Sus ingresos disminuyeron cada año Es menor de edad. Lo bueno es arriba; lo malo es abajo El año pasado alcanzamos un pico, pero hemos ido cuesta abajo desde entonces. Alto standing Alta fidelidad. 4.1.2.2. ESTRUCTURAS PROPOSICIONALES Las estructuras proposicionales no utilizan elementos imaginativos, es decir, metáforas, metonimias, imaginería mental. Cada modelo proposicional tiene una ontología y una estructura. La ontología es el conjunto de elementos usados en el modelo. La estructura consiste en las propiedades de los elementos y relaciones que se establecen entre los elementos. Los elementos de la ontología pueden ser o conceptos de nivel básico –entidades, acciones, estados, propiedades- o pueden ser esquemas de imágenes. En general suele existir un esquema de la imagen como punto de partida. Este tipo de modelos es lo que tradicionalmente se ha denominado concepto, por ejemplo es de este 33 tipo (conjunto de rasgos) nuestra caracterización del ‘café’ y la taxonomía que hemos hecho de las bebidas. Hay cuatro tipos: • La proposición simple: Elementos de la ontología: argumentos y un predicado básico que relaciona a aquéllos argumentos Esquema: Parte-todo. Entre los argumentos pueden establecerse ciertas relaciones semánticas: agente, paciente, un instrumento, una localización, etc. Las relaciones semánticas son representadas estructuralmente por esquemas de enlace. • El Escenario o Script: Ontología: Un estado inicial, una secuencia de eventos y un estado final Esquema: origen-camino-meta. El escenario es un todo y cada uno de los elementos es una parte. Ejemplo: Ir a comer a un restaurante. Muchos conceptos son caracterizados en términos del escenario. Camarero es relativo a un escenario Restaurante. • El Conjunto de Rasgos: Ontología: Una colección de Propiedades. Esquema: Contenedor, donde las propiedades están dentro del contenedor. Ejemplo: categorías clásicas, como nuestra conceptualización de ‘café’. • Taxonomías: Una estructura jeraquizada de categorías clásicas. Ontología: Categorías. Esquema: Cada categoría por un esquema Contenedor, la jerarquía por esquemas Parte-Todo y Arriba-Abajo. Cada categoría de orden superior es un todo con las categorías inmediatamente inferiores como sus partes. 4.1.2.3. PROYECCIONES METAFÓRICAS Las proyecciones metafóricas son proyecciones de un modelo proposicional o esquemático en un dominio a una estructura correspondiente en otro dominio. Son estas proyecciones lo que nos permite ampliar nuestro conocimiento del mundo a partir de lo ya conocido. A parte de la idea tradicional de la metáfora como recurso literario o retó34 rico, debemos pensarla ahora como una herramienta cognitiva sumamente importante, que nos facilita la tarea de comprender aspectos difíciles de la realidad en función de otros más básicos y mejor conocidos. Nuestro lenguaje está repleto de metáforas que han pasado ya a formar parte de nuestra manera de concebir el mundo. Por ejemplo, no podríamos decir literalmente que los túneles tienen boca o las botellas cuello, sin embargo estas expresiones formar parte de nuestro vocabulario cotidiano. Para que sea más fácil de comprender el mecanismo de las proyecciones metafóricas hemos desarrollado un ejemplo, que volveremos a revisar y comentar más adelante: EJEMPLO DE PROYECCIÓN METAFÓRICA EL AMOR ◊ COMO FUERZA FÍSICA: “Puedo sentir la electricidad que hay entre nosotros” “Fui atraído hacia ella magnéticamente” “Hay una energía increíble en su relación” ◊ COMO PACIENTE: “Es una relación enferma” “El suyo es un matrimonio fuerte y sano” “Su relación esta mejorando” ◊ COMO LOCURA: “Estoy loco por ella.” “Me hace perder el juicio.” “Estoy chiflado por él.” ◊ COMO MAGIA: “Me hechizó.” “Me tenía hipnotizado.” “La magia se ha ido.” ◊ COMO GUERRA: “Le conquistó.” “La asediaron los pretendientes.” “Me tiró los tejos.” 35 4.1.2.4. PROYECCIONES METONÍMICAS Son modelos de uno o más de los tipos anteriores, junto con una función de un elemento del modelo a otro. Más sencillamente un modelo metonímico es un modelo de cómo dos conceptos, A y B, están relacionados en una estructura conceptual, teniendo en cuenta que uno de los conceptos, B, es más sencillo de comprender, de reconocer, de recordar o más útil inmediatamente que A. Sin embargo B es parte de A. Pero en la proyección metonímica entendemos A en función de B. Hay varios tipos: • Estereotipos Sociales: los estereotipos sociales pueden usarse en vez de la categoría como un todo. Son usualmente conscientes y a menudo están sujetos a discusión pública. Definen expectativas culturales, son usados en el razonamiento y especialmente en la obtención de conclusiones. No obstante se reconocen como inadecuados, por lo que su uso en el razonamiento es puesto en cuestión. Ejemplos: ⇒ Los catalanes son interesados y tacaños. ⇒ Los negros son sucios y menos inteligentes que los blancos. ⇒ Los gitanos son ladrones y mentirosos. • Ejemplo típicos: Normalmente son inconscientes y automáticos, no se someten a discusión pública y no parecen cambiar significativamente a lo largo del tiempo. Nuestro conocimiento sobre casos típicos conduce a efectos prototípicos. Por ejemplo, piensa en un pájaro. ¿Has pensado en un pingüino? Un pingüino no parece un buen ejemplar de pájaro. Un mejor prototipo sería un gorrión, una paloma, etc. Los efectos prototípicos producen una taxonomía radial donde en el centro está el ejemplo típico y conforme se distancian de este ejemplo se sitúan más en la periferia otros elementos pertenecientes a la categoría. • Ideales: Muchas categorías son comprendidas en términos de casos abstractos ideales, que no tienen porqué ser típicos o estereotípicos. Nuestro conocimiento cultural se organiza mediante ideales (casa ideal, trabajo ideal, ideal de pareja). • Ejemplo Comparativos: Comprendemos las categorías en términos de miembros individuales que representan o un ideal o un opuesto. Por ejemplo Indurain es un ideal de deportista y tendemos a comparar al resto con él. 36 También basamos inferencias sobre una teoría popular, según la cual las personas ejemplares en algún dominio son ejemplares como personas. • Generadores: Algunos miembros de las categorías pueden definirse o generarse por los miembros centrales más algunas reglas generales. Por ejemplo, los números naturales se generan de esta forma. De esta manera la categoría se comprende a partir de un pequeña subcategoría. • Submodelos: Tienen un lugar especial en el razonamiento, especialmente al hacer aproximaciones y estimar tallas. Un buen ejemplo de submodelo son las potencias de diez para comprender y utilizar los números. Por ejemplo, 98% es aproximadamente 100%, es verdadero. Pero 100% es aproximadamente 98%, parece falso. (Razón por la cual en tiempos de rebajas se marcan los precios como 995 pts. Mejor que 1000 pts.) Algunos submodelos tienen bases biológicas: colores primarios, emociones básicas, etc. Otros son estipulados culturalmente. • Categorías Radiales: Algunas categorías se estructuran radialmente respecto a un número de sus subcategorías. No hay reglas generadoras de la categoría, sino que más bien es el resultado de una convención y deben aprenderse una a una, aunque las extensiones no son arbitrarias, el modelo central determina las posibilidades de extensión. Mejor diremos que las extensiones de un modelo central son motivadas por el modelo central más ciertos principios generales de extensión. Ontología: Una categoría y sus subcategorías Esquema: la Categoría se representa como un contenedor y sus subcategorías son contenedores dentro de ella. Se estructura por medio del esquema Centro-Periferia. Ejemplo: Madre. Ver el desarrollo en el cuadro siguiente. Madre Adoptiva Madre Soltera Madre Natural Madre Madrastra Madre Genética Madre de Alquiler 37 Ejemplo de Estructura Radial Caso central: Madre, mujer siempre, que ha dado a luz al hijo, ha aportado al niño la mitad de los genes, ha criado al hijo, está casada con el padre, es de una generación mayor que el hijo y es la responsable legal del niño. Madrastra: No ha dado a luz al hijo ni le ha aportado genes, pero es la actual esposa del padre. Madre Adoptiva: Ni ha dado a luz al niño, ni le ha aportado genes, pero es la responsable legal y tiene la obligación de criarle. Madre de Nacimiento: Da a luz al hijo, pero lo da para su adopción. Madre Natural: Da a luz al hijo. Madre biológica: Da a luz al hijo, pero no es madre en ningún otro sentido. Madre de alquiler: Contratada para dar a luz al hijo, que puede que no sea ni suyo. Madre soltera. Madre Genética: Aquella que aporta un óvulo que se implanta en un útero distinto y que no tiene nada más que ver con el niño. Estas subcategorías se comprenden como desviaciones del caso central. Pero no existen como subcategorías todas las posibles combinaciones, por ejemplo no existe una madre que sea responsable legal y que no cuide al niño. Efectivamente estas categorías son definidas culturalmente y tienen que aprenderse. 38 4.1.3. CATEGORÍAS Ya hemos visto cómo construimos categorías, no hay un único modo. A veces, la categoría responde a lo que hemos denominado categoría clásica, que pretende atrapar una realidad externa e independiente del individuo. Un buen ejemplo, aunque no por ello indiscutible, son las categorías de especies y géneros naturales. Pero, para la mayor parte de las situaciones, tal realidad externa e independiente de nosotros no existe como tal y nuestra manera de categorizar el mundo supone a menudo crearlo para nosotros. Hemos visto que hay muchas maneras de organizar la realidad que intervienen en nuestras actitudes sociales e individuales, en nuestros razonamientos y en nuestra generación de conclusiones. Es en este punto sobre lo que queremos insistir. Vamos a analizar cómo nuestra manera de categorizar la realidad crea al mundo y a nosotros dentro de él. Para ello vamos a hacer un ejercicio antropológico de lengua comparada. Pero antes detengámonos en el siguiente texto de Borges: Borges asegura haber encontrado en una antigua enciclopedia china, titulada "El emporio celestial del Conocimiento Benevolente", la siguiente clasificación del reino animal: "En sus remotas páginas está escrito que los animales se dividen en: a) Pertenecientes al emperador b) Embalsamados c) Amaestrados d) Lechones e) Sirenas f) Fabulosos g) Perros sueltos h) Incluidos en esta clasificación i) Que se agitan como lobos j) innumerables k) dibujados con un pincel finísimo de pelo de camello l) etcétera m) que acaban de romper el jarrón n) que de lejos parecen moscas J.L. Borges. Otras Inquisiciones, 1966. ¿Qué impresión te produce esta clasificación de los animales? ¿Puedes encontrar algún criterio de clasificación? 39 Parece que es una arbitrariedad, que alguien en un sueño surrealista ha puesto juntos cosas que desde nuestro punto de vista es imposible unir. Parece justo lo contrario a una clasificación. Apelemos a la imaginación de Borges para disculpar tal creación. ¿Pero, qué opinas de este otro ejemplo obtenido de la realidad cultural de un pueblo aborigen australiano? Sistema de clasificación en el lenguaje Dyirbal (Australia) Un hablante Dyirbal siempre que usa un nombre en una oración debe anteponer una variante de entre cuatro palabras. Estas palabras clasifican todos los objetos en el universo Dyirbal, y para hablar correctamente uno debe usar el correcto clasificador antes de cada nombre. Estas palabras son: I. Bayi: hombres, canguros, zarigüeyas, murciélagos, la mayoría de las serpientes, la mayoría de los peces, algunos pájaros, la mayoría los insectos, la luna, tormentas, el arco iris, boomerangs, algunas lanzas, etc. II. Balan: mujeres, perros, ornitorrincos, algunas serpientes, algunos peces, la mayoría de los pájaros, luciérnagas, escorpiones, grillos, orugas, todo lo relacionado con el agua o el fuego, el sol y las estrellas, escudos, algunas lanzas, algunos árboles, etc. III. Balam: Todas las frutas comestibles y sus plantas productoras, tubérculos, helechos, miel, cigarrillos, vino y pasteles. IV. Bala: Partes del cuerpo, carne, abejas, el viento, tallos de batata, algunas lanzas, la mayoría de los árboles, la hierba, el barro, las piedras, ruidos y el lenguaje, etc. R.M.W. Dixon (1982). Where have all the adjectives gone? Berlín, Walter de Gruyter. ¿Qué tienen que ver las mujeres con lo relacionado con el fuego o el agua? ¿Por qué la mayoría de los peces están en el primer grupo y algunos están en el segundo? ¿Por qué hay algunos árboles en Bayi y la mayoría están en Bala? ¿Tiene alguna lógica esta categorización o resulta semejante a la ficción de Borges? ¿Qué tipo de Mundo tiene el pueblo Dyirbal? ¿Será muy diferente del nuestro? 40 Dixon, el antropólogo autor de este estudio, después de la perplejidad natural que le produjo el conocimiento del sistema de categorización de los Dyirbal, intentó comprender la lógica del sistema. Obtuvo un esquema general de clasificación que sería el siguiente: I. Bayi: Humanos masculinos y animales. II. Balan: Humanos femeninos, agua, fuego y el luchar. III. Balam: Comidas no cárnicas. IV. Bala: Todo lo que no está en otras clases. Aparte de este esquema general de clasificación, Dixon encontró un conjunto de reglas que explican lo que, desde nuestro punto de vista nos llama tanto la atención. Por ejemplo: Reglas: • Si hay un dominio básico de experiencia asociado con A, entonces es natural para las cosas de ese dominio estar en la categoría de A. Ejemplos: Los peces están en I, luego los aparejos de pesca estarán en I. Si nos referimos a un árbol frutal, pero para hablar de su madera, a un uso para hacer muebles entonces se usa Bala (IV) y no Balam (III). • Si algún nombre tiene la característica X, pero está, por la creencia o el mito, conectado con la característica Y, entonces generalmente pertenece a la clase de Y y no a la de X. Ejemplos: Los pájaros, que son animales, deberían estar en I, pero como se cree de ellos que son espíritus de mujeres muertas, están en la clase II (sólo hay una palabra para referirse a espíritus femeninos y pájaros balan muguyngan). Hay excepciones, de algunos pájaros se cree que son hombres míticos, de ahí la presencia de algunos pájaros en I. Por el mito se cree que la luna y el sol son marido y mujer, así la luna –el marido- está en I y el sol en II. De los grillos se cree que son viejas mujeres y entonces están en II. • Si un subconjunto de nombres tiene una importante propiedad particular que el resto del conjunto no tiene, entonces los miembros del subconjunto pueden asignarse a una clase distinta a la del resto del conjunto. Normalmente la propiedad es ‘lo peligroso’. Ejemplo: Los peces están la mayoría en la clase I, pero el pez piedra y el gar fish son peligrosos por lo están en la clase II. 41 Como vemos, efectivamente el mundo de los Dyirbal es bastante diferente al nuestro, y no lo hace diferente la realidad física sino especialmente las creencias que se tengan sobre ella. Son estas creencias las que intervienen a la hora de categorizar el mundo, y puesto que las categorías van a determinar la estructura del lenguaje y del pensamiento, el pensamiento que tiene el pueblo Dyirbal sobre la realidad difiere en gran medida del que tengamos nosotros. Como vemos el mundo de los seres humanos es el resultado de un complejo proceso de percepción, conceptualización y categorización de la realidad. En ese proceso intervienen numerosos factores, biológicos, sociales, culturales. Además la propia facultad cognitiva del ser humano de tener un mundo está propiciada y determinada por una realidad que nos exige nuestra adaptación. Es esta necesidad la que finalmente reconstruye la realidad según nuestro interés y es a eso a lo que mejor podemos denominar inteligencia. Antes de continuar y ver cómo iniciamos los procesos de razonamiento, será útil resumir el conjunto de ideas importantes que hemos obtenido por ahora. 4.1.4. RESUMEN (1) La estructura del pensamiento se basa en modelos cognitivos. (2) Las categorías y conceptos se corresponden con elementos de esos modelos. (3) Algunos modelos cognitivos son clásicos, esto es, tienen límites rígidos y se definen por condiciones necesarias y suficientes. (4) Algunos modelos cognitivos son escalares. Producen categorías con diversos grados de pertenencia. Este es el origen de algunos de los efectos prototípicos. (5) Algunos modelos cognitivos son metonímicos, en los cuales una parte de la categoría está por la categoría como un todo para algunos propósitos, usualmente para el razonamiento. También son origen de efectos prototípicos. (6) El efecto prototípico más radical es la categoría radial, que tienen una estructura compleja donde vienen a unirse diversos modelos de distintas clases alrededor de un centro. Los modelos no centrales no son predecibles del modelo central, pero aquéllos están motivados por éste. (7) En el sistema conceptual hay cuatro tipos de modelos cognitivos: esquemas de imágenes, proposicional, metafóricos y metonímicos. Los modelos proposicional y de esquemas de imágenes caracterizan la estructura, los metafóricos y metonímicos las proyecciones que parten de los modelos estructurales. 42 (8) Los modelos cognitivos están encarnados, directa o indirectamente por medio de enlaces sistemáticos a conceptos encarnados. Un concepto está encarnado cuando su contenido u otras propiedades están motivados por experiencias corporales o sociales. Esta encarnación provee un enlace no arbitrario entre cognición y experiencia. , Encarnado: queremos destacar el sentido literal de estar en el cuerpo o desde el cuerpo, en la carne del cuerpo. 43